Disclaimer: los personajes de Twilight son de Stephenie Meyer. La autora de esta historia es CaraNo. Yo solo traduzco con su permiso.
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Capítulo 26
EPOV
—Es tranquilo aquí afuera —comento, sin contar las risitas de Emilia mientras Cullen comienza otra pelea de hojas con ella. Ya sabes, ¿una pelea donde lanzas hojas al otro? Sí.
Por divertido que Emilia pensó que sería tener a todas las enfermeras del hogar de ancianos comentar lo adorable que ella es —confía en mí, a ella le encantó eso; diablos, a mí también, el papi orgulloso— ella prefiere el parque. Aquí, ella puede correr.
—Pacífico. —Bella asiente, y nos sentamos en un banco cerca de los juegos.
Esa amiga de Bella... olvidé su nombre... mira con ojos soñadores a Cullen a unos metros de distancia. Mi esposa está orgullosa—otra unión para el libro de récords.
El parque es todo rojo, dorado, y naranja. Es ese momento del otoño donde encuentras tantas hojas en los árboles como en el suelo.
—Te gusta trabajar aquí —comento, sonriendo, y envuelvo un brazo alrededor de sus hombros. Ciertamente es un buen ambiente para ella. Siempre quiso ser una enfermera, pero después de su primera recaída, ese sueño murió por un tiempo. Ella dijo que la había tentado demasiado, y que el estrés de trabajar en un hospital solo lo agravaría.
Ella comenzó a investigar fundamentos que respalden ese miedo. Aparentemente, la adicción es común en enfermeras. El estrés, la accesibilidad a las drogas... Pero la detuve y sugerí un ambiente más tranquilo. Aún así, le llevó mucho tiempo incluso considerarlo. Aunque, una vez que ella comenzó, recuerdo haber visto un lado nuevo de ella. Pasión. Y aunque la accesibilidad sigue allí —todos los medicamentos con receta— no hay estrés. Además, cuando ella comenzó a trabajar en su primer hogar de ancianos, ella había estado limpia por casi dos años. Para ese momento, aún había temor de regresar a sus viejos hábitos, pero ella fue lo suficientemente fuerte para seguir luchando y, además, seguir adelante al mismo tiempo. Ella asistía a sus encuentros y veía a su sponsor a menudo, pero ella se levantó como una mujer con una misión, lo cual era así.
Y mañana se cumplirán ocho años desde que la llevé a rehabilitación una segunda y última vez.
—Me encanta este lugar. —Ella concuerda suavemente.
Esbozo una sonrisa, observándola. Mi esposa es un pequeño misterio. Ella ansía paz, pero se enfrenta a las rabietas y la personalidad salvaje de Emilia como si hubiera nacido para ello; incluso lo hace con entusiasmo. A ella le encanta una noche tranquila en casa, pero raramente puede quedarse quieta. Como ahora mismo: ella es una imagen de serenidad, pero sus rodillas rebotan un poco y está jugando con mi encendedor. Ella se retuerce—ella siempre debe mantener sus manos ocupadas.
Sé que esto es algo que adquirió al desintoxicarse. Cullen comparte ese hábito.
Bueno, Edward fue a visitar y Bella está un poco nerviosa jajaja