—¿Ryo hará una fiesta?— Fue la pregunta a coro que hicieron Takeru, Hikari y Takato ante lo que había dicho Tomoki hace unos momentos.

—Si.— Contestó el chico de ojos verdes quién sostenía la mano de su novia.

En estos minutos tanto Takato, Takeru, Hikari como Tomoki y Suzie se encocntraban en el departamento que compartían los tres chicos.

—Eso es lo que se rumorea por los pasillos.— Respondió Suzie.

—Ahora tiene sentido porque Rika no aparece.— Comentó Takeru.

—¿Crees que irá a la fiesta?— Takato le preguntó al rubio.

—Es lo más probable.— Respondió Takeru.

Takato se mordió el labio inferior, ya que, el hermano de Yamato tenía razón,que Rika fuera era lo más probable. Suspiró.

Pero, él estaría para evitarlo.


—¡A!— Gimió Mimi mientras los labios del rubio pasaban sobre sus pechos, como sus manos acariciaban su espalda y como su miembro estaba en ella.

Era suya.

Suya.

Totalmente suya.

Sus piernas rodearon las caderas del rubio y sus manos pasaron por su musculosa espalda.

—¡A!— Gimió y los labios del rubio pasaron por su cuello.

El rubio se levantó levemente y su miembro se retiró de la chica provocando que esta lanzara un grito seco ante esto.

Ambos se miraron frente a frente con las respiraciones agitadas y Yamato se recostó su cabeza en el pecho de la castaña Tachikawa, quién comenzó a masajear su cabello rubio.

Ambos estaban con las respiraciones agitadas, ambos sudaban y sus corazones latian a mil por segundo.

Mimi sonrió— No sabes cuanto esperé esto.— Comentó.

Yamato sonrió también y posó su mano en el abdomen de la castaña— ¿Me extrañaste en estos años?

—Obvio que si.— Contestó la chica— No estuve con ningún otro chico.

—¿A no?— Preguntó el rubio sorprendido.

—No.— Respondió la Tachikawa.

Yamato alzó la mirada— Entonces, debo sentirme afortunado por ser el único hasta el momento.

—Se podría decir que si.— Respondió la castaña— ¿Y tú? ¿Me extrañaste?

Yamato se mordió el labio inferior— Claro que sí.— Contestó— Me dejaste totalmente atraído hacia ti, enamorado, y que te hayas ido para mi fue un suplicio. Exxtrañaba todo de ti.— Acarició su mejilla— Sobre todo estos momentos.— Depositó un beso en sus labios que la chica correspondió de una forma suave y delicada.

La chica posó sus brazos tras el cuello del chico y este la abrazó provocando que sus pechos desnudos se rosaran.

Ambos se separaron cuando el aire les faltó y la castaña recostó su cabeza sobre el pecho del chico.

El silencio se hizo presente, pero, no fue un silencio incómodo, sino agradable.

—Yamato...—La castaña llamó al chico.

—¿Si?— Preguntó el rubio.

Mimi se mordió el labio inferior y suspiró— Mira, sé que dijimos que iríamos lento, que seríamos amigos, pero, bueno, ocurrió esto y...

—¿Y?— Preguntó el chico.

—Yo me preguntaba ¿en que fase estamos?— Preguntó el chico— ¿Qué significa esto para ti? o si quizás...

—¿Fue sexo pasajero?— Preguntó el rubio finalizando la pregunta de la castaña.

Mimi asintió.

Yamato sonrió de lado, últimamente estaban muy unidos, sus relaciones eran más intensas, y pues, luego de las palabras que le había dicho Ryo ese día, a pesar de ser molestas, lo habían dejado pensando.

Él se había enamorado de la Tachikawa, como nunca se había enamorado de otra, si ida lo había dejado desecho, triste, y por mucho tiempo la había culpado a ella por ni siquiera decirle la razón por la cual se había ido. Pero, ella ahora había vuelto y pues, le había intentado explicar las cosas, tanto así, que habían comenzado a ser amigos, porque, él tenía miedo.

¿Miedo a qué?

A sufrir.

A sufrir por enamorarse nuevamente, pero, había sido imposible mantenerse alejado de la chica. Se habían acercado de una forma muy diferente a la de tres años, habían tres años ambos se habían acercado de una forma dulce y tímida. Pero, ahora se habían acercado de otra forma, con deseo, con pasión, algo mucho más intenso, que le había agradado, ya que, a diferencia de las otras chicas que había estado en un pasado, sabía que esta cercanía con la Tachikawa se debía a la relación inconclusa, pero, seria que habían tenido hace un tiempo y que no había sido un juego.

—Bueno, pues, quedamos en ser amigos.— Habló Yamato— Pero, no creas que esto es pasajero.— Suspiró— Mimi, yo quiero que sepas que yo todo lo que hago y se relaciona contigo es enserio, no pasajero, no un juego ¿si?

Mimi sonrió, esas palabras la dejaban tranquila, saber que esto no era solo pasajero y que tenía cierta seriedad, casi moría por el deseo de estar en los brazos de Yamato, pero, en verdad no quería que fuera pasajero, sino que le diera seguridad de que él aún quería estar con ella.


Takeru e Hikari ingresaron al departamento de la Yagami y sus compañeras.

—Rika, Damar.— Hikari llamó a sus amigas al ingresar al departamento, pero, no recibió respuesta.

Takeru recorrió el lugar con la vista, las puertas de las habitaciones estaban abiertas y ninguna estaba ahí— Al parecer no están.

Hikari asintió— Lo más probable es que Rika haya ido a...bueno, tu sabes a que.

Takeru hizo una mueca y asintió— ¿Y Damar donde está?

—Probablemente está durmiendo.— Señaló la puerta de su habitación que estaba cerrada.

Hikari se sentó sobre el sofá— Eso significa que podemos regalonear unos minutos.

Takeru sonrió de lado nervioso, ya que, a su mente vino el recuerdo de lo que había ocurrido el día Sábado y la verdad es que no pudo evitar sentirse incómodo.

Suspiró.

Debía encontrar la forma de reparar lo ocurrido esa vez ¿no?

Se acercó al sofá y tomó asiento junto a su novia— ¿Regalonear?— Preguntó divertido— ¿Solo con abrazos y caricias o con besos también?

Hikari sonrió de lado— Dime tú ¿qué quieres? ¿Abrazos y caricias o besos?

—Los tres.— Respondió el rubio, se acercó a la castaña— Abrazos, caricias y muchos besos.— Y sin decir más, juntó sus labios con los de la chica Yagami en un beso suave que la chica no dudo en corresponder, las manos del chico pasaron por su cintura y la chica abrazó su cuello.

El beso en un principio fue suave, delicado y duraron así unos segundos, tranquilos disfrutando del contacto. Pero, llegó un minuto en el cual este beso se hizo más intenso, sus labios se abrieron y sus lenguas comenzaron a bailar coordinadamente y según pasaban los segundos el beso casi desesperado..

Takeru se separó levemente de sus labios y comenzó a besar el rostro de la chica con besos suaves y delicados, bajando desde la frente hasta el mentón y en un momento dado el chico comenzó a besar su cuello.

Hikari simplemente acarició su cabello.

Las manos de Takeru recorrieron su cintura mientras Hikari abrazaba su cuello, el beso de ser dulce y suave al principio pasó a ser uno muy apasionado y casi desesperado, cada uno intentaba succionar la lengua del otro y sus labios se movían a un compás muy sincronizado.

Sus labios se tuvieron que separar cuando se quedaron sin aire, pero, Takeru no había demorado en comenzar a besar su cuello. Hikari simplemente cerró sus ojos y acarició el cabello de Takeru.

Los labios del rubio nuevamente volvieron a los de Hikari y fue correspondido, fue un beso apasionado y desesperado, como si ambos quisieramos succionar al otro. Por mientras las manos de Hikari habían bajado del cabello de Takeru y habían acariciado suavemente su cuello, las manos de Taker recorrían la cintura de la castaña.

En un minuto dado, la castaña cayó suavemente de espaldas sobre el sofá mientras Takeru la besaba. Estaban los dos recostados sobre el sofá besandose con toda la pasión del mundo, como si de eso dependiera su vida.

Ambos se separaron unos centímetros y esta vez fueron los labios de Hikari que bajaron por el cuello del chico, sus respiraciones estaban agitadas. Las piernas de ambos se entrelazaron y la castaña pudo sentir como una mano del rubio bajaba a acariciar su pierna sobre su pantalón.

Takeru alzó la mirada y observó a la chica— ¿E? Hikari...

—¿Si?

—D-disculpame por lo que ocurrió el otro día ¿si?— Habló el rubio— Estaba muy nervioso y...

—Shhh...— La chica llevó sus manos hacia su boca para hacerlo callar— No hablemos de eso ¿si?— Acercó sus labios a los del rubio— Aprovechemos de este momento que es ahora y olvidemos ese pqueño incoveniente.

Takeru sonrió— Está bien.— Y nuevamente unió sus labios con los de la chica.


Takato caminó a través del campus, hacia bastante frío, pero, se había propuesto en ir por Rika y lo haría. Se acercó al lugar donde supuestamente sería la fiesta, habían muchos chicos y chicas en ese lugar, la música sonaba super fuerte. El castaño hizo una mueca ante esto.

¿Cómo rayos ningún inspector se daba cuenta de esa fiesta?

Si la música estaba al 100%

Suspiró.

Recorrió su lugar con la vista, rogando al cielo que Rika estuviera ahí y que no tuviera entrar a aquel lugar a buscarla.

¡Bingo!

Pensó al ver que Rika se encontraba en la entrada del lugar.

Tomó aire y se acercó, habían persona alrededor, pero, él solo venía por ella.

La pelirroja simplemente se encontraba en la entrada fumando, mirando prácticamente a la nada, se sentía extraña, muy extraña, diferente a otras veces que había asistido a fiestas, por más que se sentía mal por las noticias con respecto a la investigación de su padre, había algo que la dejaba intranquila. Cuando Ryo le había propuesto la idea de su fiesta había tenido ciertas dudas en ir o no ¿y por qué? Por la conversación que había tenido con Takato el Sábado, verdaderamente no entendía como era posible que estuviera pensando en él y en todo lo que él le decía. El último tiempo ese chico había puesto mucha energía de su parte para impedir que ella fuera a fiestas y se drogara, pero, a pesar de todos sus esfuerzos ella aún seguía teniendo tendencia a esas cosas.

Suspiró.

¿Cómo era posible que estuviera pensando en eso?

Quizás, porque, a diferencia de otras veces, el chico no se había aparecido en su camino para evitar que ella fuera a la fiesta y...

—¡Hey! Rika...— Una voz familiar la llamó.

Rika volteo hacia el lugar donde prevenía esa voz—¿Takato?— La pelirroja preguntó sorprendida— ¿Qué haces aquí?

—Vine a buscarte.— Respondió el castaño— ¿Creiste que te librarías de mi está vez?

—¿Qué?— Preguntó sorprendida y no pudo evitar pensar que con su mente lo había invocado. Se mordió el labio inferior, esto no le gustaba, pero ¿cómo se había atrevido en ir ahí mismo solo para buscarla?— Takato, por favor, no me molestes otra vez con respecto a esto, yo ya te dije que no tengo solución.

—Eso es lo que tú dijiste, pero, yo te dije que no te dejaría sola y te demostraría que puedes hacer algo más que esto.— Respondió el castaño antes de tomarla del brazo— Ven, nos iremos de aquí.

Rika hizo una mueca— Takato, vete solo ¿si? Este lugar no es para ti.

—Y tampoco para ti.— Respondió el castaño— Así que, te vendrás conmigo.

—Takato, no.— Insistió la pelirroja, verdaderamente no estaba ánimos de regresar al Internado, necesitaba despejar la mente, necesitaba centrarse en otras cosas— Dejame ¿si? Por más veces que tengamos esta conversación no lograrás algo.

—Claro que lo lograré.— Respondió el castaño— Te dije que te ayudaría a salir de esto y lo haré, así que, vendrás conmigo...— La observó seriamente— Te guste o no.

Rika hizo una mueca, tristemente ese chico era tan insistente que por alguna razón, siempre terminaba ganando y eso le sorprendía, ya que, ni sus primos o amigos de toda la vida lograban hacer lo que él hacia. Aunque, bueno, últimamente las actitudes del chico no le estaban desagradando del todo y eso le preocupaba— ¿No me harás hacer ejercicio? ¿no?

Takato sonrió de lado— Si nos vamos ahora mismo de aquí haremos otra cosa y no ejercicio.


Mientras tanto a unos metros de ellos.

—¡Vaya! Así que, Rika está nuevamente con su amigo.— Comentó Kiriha.

Ryouma volteo hacia Ryo— Al parecer ese chico verdaderamente está avanzando mas que tu, todos estos años con Rika.

Ryo frunció el ceño— ¡Callense!— Exclamó molesto— Idiotas.

—¡Hey! Solo decimos la verdad.— Respondió Kiriha— Al parecer ese chico nuevo verdaderamente está siendo del agrado de Rika.— Sonrió— ¡Mira! Hasta se la está llevando de la fiesta.

Ryo se mordió el labio inferior, apretó la lata de su cerveza totalmente molesto y se dispuso en ir hacia ellos, pero, Kiriha lo agarró del hombro.

—¡Hey! No pierdas tu tiempo en ella.—Habló Kiriha.

Ryo apretó su puño.

—Mira, hay miles de chicas mejores que ella.— Habló Ryouma señalando a ciertas chicas que se encontraban en el lugar.

Ryo suspiró, habían miles de chicas, pero, a él solo le importaba esa mujer, esa chica de cabello rojo y ojos lilas.

—¿Sabes? Ryo, aún no entiendo ¿qué le ves a esa chica?— Habló Ryouma— Si hay muchas mejores. Ella es aburrida, quizás, toma e ingiere sustancias, pero, no creo que sea divertido pasar alguna noche con ella, aunque, bueno, es evidentemente es virgen...

Ryo hizo una mueca, Ryouma, Kiriha o cualquier otro de sus amigos nunca entendería porque tanto interés en ella, aparte de ser una chica hermosa, que provocaba cierta curiosidad en él, era una de las pocas que se resistía a caer en sus encantos y pues, a él le encantaban las chicas dificiles y ella era una de esas, que no cayera en la primara conquista, en el primer comentario, en el primer piropo, hacia que le gustara más. Quizás, era evidente que era virgen, pero, hacia con muchas ansias que quisiera ser el primero.


¡Toc, toc!

La puerta del departamento de Izumi, Sora y Mimi sonó.

La pelirroja alzó la mirada, Izumi ya dormía y Mimi aún no volvía, así que, tendría que ir a abrir. Se levantó de su cama, salió de su habitación y luego abrió la puerta de la sala principal.

Hizo una mueca al ver que no había alguien, que estaba vacio.

Alzó una ceja.

¿Trataba de una broma o algo así?

¿Por qué había sonado la puerta y nadie estaba?

Estiró su pierna derecha con intención de salir del lugar, pero, al hacer esto puso sentir que algo había bajo sus pies.

Bajó la mirada desconcertada y al hacer esto frente a sus ojos encontró un hermoso...

Ramo de flores.

Abrió la boca sorprendida.

¿De donde rayos había salido?

Las tomó en sus manos y las observó, eran una flores lindas, pero ¿de quién eran? Su mirada se posó en una tarjeta que había en ellas. La tomó en sus manos y la revisó.

Sé que dijiste que cometí errores, y sé
qué estás molesta conmigo.
Pero, no te dejaré ir. Sé que actue
como un idiota, soy un idiota. Pero, soy un idiota
que está enamorado de ti.
Y te juro que encomendaré mi error y volverás
a enamorarte de mi.

De: Taichi.

Para: Sora (El amor de mi vida)


Capítulo ni tan largo, ni tan corto, el próximo se viene bueno.

AmiKarina: Jsjsj que bueno que te gustara el momento Mimato jsjsj Takuya es un celoso de primera. Que bueno que te agraden los hermanos Tachikawa jsjsj Ojalá sigas leyendo, comentando y te mando un gran abrazo a la distancia.

mariacredenza02: jsjsjsj soy muy cruel jsjsj Esos datos los sabrán pronto jiji Ya veremos que hará Damar con la información que descubrió puede hacer muchas cosas jsjsj pero, por el momento simplemente se mantendrá en silencio jsjsj Damar y Kouji se vieron y con esas miradas quizás, hayan tenido una tensión de algún tipo jsjsj Si, Miyako supo todo, aunque, debo decir que ella sabe mucho más de lo que aparenta pronto sabrán que jsjsj Que bueno que te haya gustado el momento entre Mimi y Yamato jsjsj la sala de ensayo como el armario de limpieza y como otros lugares jsjsj son multiuso. Ya veremos como avanzará su relación, ahora vienen las escenas más armorosas tiernas para varias parejas TaichixSora, TakatoxRika, MimixYamato, TakuyaxZoe y bueno, algo de Koichi con Juri. Damar quiso ir a la fiesta, porque, bueno le gustan esas cosas, a pesar de que odia a Ryo, quería hacer algo diferente a estar encerrada en el Internado, en lo que respecta a la fiesta no es tan importante, importante creo que será la escena que viene post-fiesta, ya que, alguien encontrará a Damar en un estado que le sorprenderá. Ojalá sigas leyendo, comentando y te mando un gran abrazo a la distancia.