Disclaimer: Twilight le pertenece a Stephenie Meyer, la historia es de RMacaroni, yo solo traduzco con su debido permiso.

Disclaimer: Twilight is property of Stephenie Meyer, this story is from RMacaroni, I'm just translating with her permission.

Capítulo beteado por Yanina Barboza

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El lunes por la noche, Emmett y yo nos turnamos en las pesas de banca. Él está en el banco, y yo estoy detrás de él, cuando veo a Bella en la caminadora. Su cabello está recogido en una cola de caballo que se balancea de un lado a otro mientras trota. Mis ojos recorren su espalda y noto que lleva unos pantalones cortos negros muy pequeños.

Oh, Dios…

Trago saliva.

Los pantalones cortos abrazan su trasero de una manera deliciosa, se abollan en el medio y puedo trazar el contorno de sus nalgas redondas y apretadas.

Apenas detecto que Emmett me está gritando.

—¡Amigo! Sostén la barra de las pesas, ¿quieres?

Una vez que lo ayudo con las pesas, Emmett se sienta y se limpia la cara y el cuello con la toalla.

Intento, me esfuerzo mucho, en no dejarle saber lo que está pasando, pero mis ojos están pegados al trasero de Bella, y él lo nota… por supuesto que lo nota.

—¿Qué es? —Me mira, sonriendo, ya sabe lo que es, y luego sus ojos vuelven a Bella.

Mierda...

—Nada —digo, pero mi voz se quiebra. Me aclaro la garganta y me rindo. Soy un mentiroso terrible. No hay forma de que me salga con la mía—. Ella es... um... ella es mi estudiante.

—¿Ella es tu estudiante? —vocifera Emmett.

—Cállate —siseo.

¿Por qué siempre tiene que ser tan escandaloso?

—¿Ella es tu estudiante? —pregunta en un tono mucho más bajo.

—Sí. No sé por qué está aquí. Esta es la primera vez que la veo aquí. —Aparto los ojos de Bella y paso una mano por mi cabello, tratando de recomponerme.

—¿Estás bromeando, verdad? —Emmett se gira para mirarme con una expresión de incredulidad en su rostro.

—¿Qué?

—¡Está aquí todo el tiempo! Te la señalé. Ella siempre te está mirando. —Emmett se levanta del banco y lo rodea para pararse a mi lado.

—¿Qué-é? —Mi voz se quiebra de nuevo con incredulidad mientras miro a Emmett y él niega con la cabeza.

—Te lo digo, hombre. Es como si estuvieras ciego. —Me da una palmada en la espalda y hace un gesto que me toca a mí en el banco.

Mis ojos vuelan hacia Bella de nuevo. Ella todavía está corriendo en la cinta, su trasero rebotando hacia arriba y hacia abajo.

¿Emmett podría tener razón? ¿Ha estado aquí antes?

Miro al resto de la gente en el gimnasio. No reconozco a nadie. Ninguno de ellos me resulta familiar. Estoy aquí prácticamente todos los malditos días, seguramente podría recordar a alguien, ¿verdad? Bueno, no.

Debo estar ciego después de todo.


No puedo con este Edward ja, ja, ja, ni siquiera notó que Bella iba al mismo gimnasio hasta ahora.

Estaré esperando sus comentarios para que me cuenten qué les pareció.

Y para responder algunas preguntas, sí, toda la historia es contada por Edward. La razón por la que está amargado es porque olvidó qué es lo que amaba de su carrera y pasó los últimos 4 años trabajando en el laboratorio, sin vida social, y sin sentir que avanza.

Sarai