El inicio de una nueva historia
Tenía todo lo que necesitaba, el poder y el conocimiento para hacer lo que pensaba sería lo correcto, era tiempo de cambiar la historia para hacerla como era debido, tal vez no sería su yo de ahora quien disfrutara de esta nueva línea temporal, pero al menos sabía habría una versión suya disfrutando de lo que merecía. Itachi suspiró cerrando sus ojos grises robados, concentró todo su pensamiento en la oportunidad que tenía y convenciéndose de nueva cuenta en que era lo correcto, levantó las manos y comenzó con los jutsus, abrió los ojos y un brillo púrpura los rodeó, el poder contenido en esas orbes grises además de su propia fuerza, le daría toda la energía que necesitaba, pronunció las palabras aprendidas de la anciana y ante su presencia comenzó a formarse una diminuta esfera de luz, poco a poco el portal comenzó a hacerse más grande hasta que tomó el tamaño perfecto para dejarle pasar.
Itachi no lo pensó dos veces, se envolvió en una vieja capa negra y colocó sobre su rostro una máscara que lo cubría por completo, tomó la pequeña bolsa a sus pies esperando su contenido le fuera útil una vez llegara a la época que buscaba, ingreso por aquella puerta y entonces una luz blanca le rodeó, en segundos y al dispersase dicha luz, el joven había desaparecido.
Años atrás línea O
Itachi debía cumplir la orden que se le había dado, no había sido entregada por el Hokage si no por Danzo, sin embargo entendía su líder estaba de acuerdo con ella, pese al dolor que le provocaba decidió hacerlo, sabía que era por el bien de toda la aldea, su clan planeaba traicionarlos y crear guerra e Itachi como el capitán ANBU no podía dejarles sin castigo aún si le doliera.
Decidido se encaminaba hacia su distrito más a lo lejos noto una figura que le detendría, aquel sujeto portaba una capa vieja de color negro y una máscara extraña de rostro completo. Sin saber si era amigo o enemigo y sin perder tiempo averiguándolo le atacó pero aquel hombre era más ágil y le habría derribado en poco tiempo dejándole inconsciente. Cuando esa figura se aseguró su contrincante estaba derrotado, desprendió de su cara la máscara que le cubría revelando una perfecta copia, aunque más adulta, del hijo mayor de Uchiha Fugaku.
-Tal vez nunca me lo agradezcas – decía Itachi al Itachi de esa línea temporal ahora dormía sobre el pasto – pero esto es por el bien de alguno de los dos- terminó el hombre colocándose de nueva cuenta la máscara partiendo de inmediato, había otra persona a la que debía de eliminar si quería limpiar esta línea temporal.
Eran altas horas de la madrugada cuando el par de guardias de la familia de la cresta roja y blanca solicitó permiso de ver a su señor, debían informarle lo que había pasado a toda costa, Uchiha Fugaku abrió la puerta de su alcoba que daba al jardín principal aún en ropa de cama con su adorable esposa detrás de él, los guardias se inclinaron ante el hombre y esperaron su permiso para hablar y entregar el mensaje
-¿Que sucede? – pregunto el señor del clan molesto por la interrupción de sus horas de sueño
-Mi señor, debo infórmale que una gran tragedia acaba de suceder
-Habla ya – decía el patriarca en voz seria notando como una de las puertas contiguas a la suya se abría dejando ver al menor de sus hijos, el pequeño Sasuke de siete años se había despertado debido al escándalo y se negaba a regresar a su habitación hasta saber lo que pasaba, su padre lo noto pero no le dio impotencia alguna
-Mi señor – volvió a hablar el guardia – el distrito de Clan Hyuga se ha pintado de rojo sangre
-¿Que dices?
-Al parecer fueron atacados durante las primeras horas de esta noche, fue un ataque despreciable del que nadie pudo defenderse, casi todos los miembros del clan Hyuga han muerto…
-¿Que… ?- decía Sasuke acercándose a los hombres, pero su camino se vio interrumpido por su madre al colocar una mano en su hombro
-… no sobrevivió nadie, salvo dos infantes, la hija mayor de Hyuga Hiashi y el único hijo de Hyuga Hazashi
-Hinata esta viva… - susurraba el pequeño de ojos negros llenó de felicidad interior al saber que la niña del estanque seguía con vida
-¿Quienes saben de esto? - pregunto Fugaku molesto
-La noticia ha llegado a oídos del Hokage y ha solicitado investigar de inmediato lo sucedido… pero mi señor… si me permite debo informarle que se ha requerido la presencia del capitán ANBU también, sin embargo Itachi-sama fue encontrado herido e inconsciente en las afueras de la aldea, ahora mismo todos ellos se encuentran en el hospital
-¿Que demonios dices? maldita sea, iré de inmediato que se prepare mi guardia, debo saber qué pasó con Itachi
-Padre quiero ir también - dijo Sasuke finalmente corriendo a su lado
-No hijo
-Quiero ir también – casi lo ordeno el pequeño, estaba decidido a ir a ver a su amiga del estanque para saber que se encontraba bien
-De acuerdo…. - dejó salir el hombre sabiendo que la terquedad de su hijo menor sería difícil de vencer, además tal vez era mejor que el niño viera con sus propios ojos lo que sucedía- vístete iremos al hospital
Padre e hijo llegaron hasta el recinto, Fugaku de inmediato solicitó ver a Itachi quien al parecer había despertado, Sasuke se alegró de ver a su hermano a salvo sin embargo su prioridad era otra persona, mientras su padre hablaba con su hermano, escapó de la habitación y se encaminó hasta la que había escuchado era de la niña Hyuga, entró en el cuarto encontrando la cama vacía, en un principio pensó no se encontraba ahí sin embargo escuchó un débil sollozo detrás de la cortina de la ventana, una personita estaba escondida entre la tela y la pared que formaban la esquina, se acercó despacio hasta ella y la destapó notando que se abrazaba así misma aún derramando lágrimas que humedecían constantemente sus mejillas
-Hola… - dijo Sasuke esperando que la ojiperla levantara sus rostro y le mirara, pero la niña seguía escondida entre sus manos
-Ya no llores más - decía el niño colocando su mano en su hombro del mismo modo en que su madre lo hacía con él para calmarle, la pequeña siguió sin mirarlo sin embargo dejó salir de sus labios un lamento, su tristeza al entender que su familia entera ya no estaba
-Mi hermanita… lastimaron a mi hermanita… solo era un bebé... y mi papá ... se ha ido... - lloraba la niña
-Lo lamento… se que estás asustada pero…- dijo el pelinegro atreviéndose a tomar de su mano para jalarle levemente- yo voy a protegerte… princesa, nadie volverá a hacerte daño – terminó el pequeño finalmente ganando la mirada color luna de la última Hyuga, la niña le observo con asombro y luego con realización, creía en sus palabras y por el momento lo que deseaba era ya no tener miedo y dolor, sin pensarlo mucho se dejó caer en el pecho del niño que le recibió cerrando un afectuoso y protector abrazo alrededor de su figura, era su juramento el que le entregaba a Hinata ahora, él iba a protegerla.
