DISCLAIMER:

El universo de Harry Potter no es de mi total autoría, los derechos le pertenecen a J.K. Rowling. La historia que escribo en este fic, es para fines de entretenimiento y no forma parte del canon de Harry Potter.

NOTA DEL AUTOR:

Muy buenos días, noches, a la hora que estén leyendo este fic. Increíble como esta porquería de pandemia ha arruinado muchas cosas y que a día de hoy siga sin embargo parece que la situación con las vacunas en mi país ya comienza a ser un hecho, afortunadamente, algunos de mis familiares ya han sido vacunados, yo al ser joven, me tengo que esperar por un tiempo más. Me tengo que cuidar más porque el otro día me dio un dolor horrible en el estómago y pecho, tengo que comenzar con una nueva rutina de ejercicios para recuperar mi condición física y que mi cuerpo no truene feo, esto es importante no solo para mí, por lo cual tengo que saber que tipo de dieta o ejercicio rutinario podría comenzar para adquirir condición física.

Qué me enrollo con mi vida privada jaja. Bueno, enfoquémonos en el fic, en este capítulo se trata de la prueba que pasarán Gabrielle y Cho Chang y cómo lo enfrentarán, tardé un mes entero en saber como escribirlo y que no sea tan pesado, fue difícil porque hay muchos detalles y como siempre, tuve que andar descartando diferentes escenarios pero al final, pude darle forma o al menos eso quisiera pensar, este arco de Gabrielle y Cho Chang, tendrá una o dos partes más dependiendo de cómo escriba el siguiente capítulo, después de este arco, pasaremos a otro personaje en la cual me estoy debatiendo entre Pansy Parkinson y su pareja Astrid Undomiel o darle un capítulo entero a Ronald Weasley, ya veremos como quedará.

RESPUESTAS A REVIEW'S:

Victor Black: De nuevo, muchísimas gracias por tu comentario, es verdad, ya no tenía caso volver a escribir lo que ha pasado en la historia por lo que me tuve que concentrar en la trama. Sobre lo de Dumbledore, el trasfondo de su personaje es el del ser un protector con todos, esto creo que todos sabemos que es en parte por su pasado por Ariana Dumbledore y aquél incidente de duelo de magia que tuvo contra su hermano y Grindewald, es evidente que le afectó y por ello toma una postura bastante acertada en cuanto a proteger a infantes que sufren de maltrato psicológico, también es verdad que la historia de las guerras mágicas, flaquea bastante en la historia original, no hay realmente un trasfondo profundo, J.K. Rowling no da muchas explicaciones al respecto y solo sube extractos de varias partes sin dar mucha referencia, eso sí, con Animales fantásticos y dónde encontrarlos, podemos observar un poco de ese trasfondo aunque sea contra uno de los magos más tenebrosos; Grindewald, ya veremos. Espero que disfrutes este capítulo y que me sepas perdonar por tardarme tanto en subir los capítulos, así mismo estoy tratando de continuar con mis otros fic's pero simplemente no le hallo como continuar desgraciadamente.

En fin que me enrollo demasiado, espero que disfruten de este capítulo y nos vemos en la próxima actualización, que prometo no demorarme demasiado.

Capítulo 30: Un mundo de tristeza y desesperación.

Gran sala de las veelas (POV Fleur)

Caminaba de un lado a otro, nunca esperé conocer a la reina de las veelas ni siquiera sabía su nombre; Alizee De La Fontaine, su aura veela, su magia, supera a unos niveles que no me quiero ni imaginar pero me preocupaba mi hermanita, ella que está junto a su elección, no tengo idea de qué es lo que están haciendo, quiero saber y no puedo ir a verla, tendría que haber traído a Bill conmigo, de hecho se lo propuse pero él tenía que irse al bosque de las veelas en Norwich, a ver cómo estaba su hermano y por ese lado le entiendo, se trata de un familiar. Mi madre no paraba de mirarme, tanto que también le pongo nerviosa.

.- Por Dios Fleur – Me dice mirándome con incredulidad – No ganas nada caminando de un lado a otro ¿Quieres calmarte de una vez?

.- No puedo madre – Dije con cierta desesperación – Mi hermana está con la reina azul y con Chang, no sé qué es lo que van a hacer, ya se han demorado.

.- Por todos los dioses Fleur – Dijo mi madre parándose y me abraza para mantener la calma – No ha pasado ni veinte minutos, es obvio que esto va a llevar tiempo.

Solo me queda confiar en mi hermana y en Chang, no sé qué clase de prueba les hará pasar la reina azul, ni siquiera lo quiero imaginar, debe de ser algo duro y francamente no esperé conocer a alguien tan poderosa, una veela pura que ha dominado por completo sus poderes, me intriga saber cuál es su historia, cómo fueron sus inicios entre otros aspectos que seguramente muchas de las veelas desconocen o uno más sencillo; ¿Cómo llegó al trono de las veelas?, imagino que hay requisitos para poder ostentar dicho honor pero en estos momentos, mi hermana estará pasando por una dura prueba. Mi padre estaba estupefacto, observaba al piso, sentado sin siquiera mediar una palabra pero parecía querer hablar de algo, estaban pasando los minutos y la angustia era demasiado, tanto que mi padre me observa y me empieza a hablar.

.- Tú sabías de esto Fleur – Dijo mi padre, yo solo le escucho - ¿Por qué no lo dijiste?

.- Sabes de sobra las razones de porqué tuve que ocultar esto – Dije hablando en francés, no estaba enojada con él ni nada parecido pero si me llegaba a desesperar más de lo que ya estaba – Ella sabía que tú no te tomarías bien la noticia, muchas opciones no tenía, así que, me la tuve que llevar a mi casa, le enseñé muchos de los poderes de las veelas, a manejar mejor su aura, a esconderla pero no necesitó de muchas clases, me sorprendió lo rápido que aprendía incluso sus poderes podrían superar a los míos, su magia no es normal padre.

.- No esperaba que fuera una muchacha – Dijo mi padre todavía asombrado – No es que tenga algo en contra, desde luego que es una gran sorpresa pero ¿A tan corta edad?

.- Podemos hablar de eso todo el día, no va a cambiar ese hecho – Dijo mi madre que se metía a la conversación – Ya no queda más que aceptarlo, entiendo que esto no te guste y quieres que Gabrielle se busque a una pareja masculino pero eso no va a pasar, yo misma la evalué y no hay duda en su corazón, sabes de sobra la historia de las veelas y sus costumbres, no necesito explicártelo de nuevo querido.

Mi hermana Gabrielle a pesar de que es joven, no es como las demás que siempre andan presumiendo o algo por el estilo, de hecho cuando todavía estaba yo en Beauxbatons, sobre todo el último año ya tenían en la mira a mi hermana, varias no estaban tan encantadas con ella, su rápido aprendizaje, su magia y sobre todo, el hecho de ser una semi veela hizo que la alejaran de tratar de socializar o por lo menos buscar a personas de confianza, buscar un círculo de amigas es típico a esa edad pero no fue el caso de ella. Es por eso que en ocasiones estaba yo sumamente enojada con Chang pero tampoco podía culparla, ya que ella no estaba al tanto de la situación de Gabrielle refiriéndome claro a su linaje, quizá sí que lo estaba pero la información que pudiera haber tenido en ese momento podía ser superficial dado que Gabrielle le ocultó su edad en aquella ocasión que se fueron conociendo un poco más.

Recuerdo que una de mis compañeras me había dicho que el círculo de compañeras de Gaby la menospreciaban, tanto es así que mis compañeras tuvieron que ser parte de sus amistades, Gabrielle no tuvo problemas para adaptarse con las mayores, los que eran de un grado superior le respetaban y hasta encontró buenas compañeras que le ayudaron a no alejarse de la sociedad, le enseñaban buenas cosas. Por otro lado, yo temía que en algún momento Gaby sería seleccionada como una de las guardianas de los tótems que hay en Beauxbatons, los pilares que anuncian oficialmente a las Damas de Hogwarts, yo no fui guardiana pero si fui hermana menor de una de ellas por lo que sabía de la historia de las guardianas de Hogwarts, no es un camino fácil y estoy segura de que, si Gabrielle sale con Chang de esa prueba con la reina azul, ella será seleccionada como una de las guardianas y deberá de buscarse a una hermana menor.

.- Seguro que se pondrán histéricos al enterarse de que se lleva con una de las centinelas de las Damas de Hogwarts y no cualquiera, es la mano derecha de una de ellas – Pensé al recordar a Beauxbatons, todavía observaba a mis padres hablar sobre la situación de mi hermana – Sus compañeras no la van a tener en alta estima, los celos, la envidia, siempre detesté eso de Beauxbatons, en ocasiones es molesto tener que aguantar tanta idiotez pero es normal dado que la escuela de magia francesa siempre se han jactado de tener a los mejores medimagos.

Por ahora solo puedo confiar en que las cosas saldrán bien, no me queda de otra que esperar ante tal angustia, mi padre por otro lado parecía no tener problema o encontrar alguna contradicción, ya era prácticamente un hecho que mi hermana había hecho su elección; Cho Chang. A decir verdad no la conozco del todo bien, no sé bien su historia, no ha contado mucho sobre su familia y debe de tener buenos motivos para no hablar de ello pero no me cabe duda de que mi madre si la conoce, ya que habló con ella antes de venir aquí y más que seguro que Gaby conoce parte de ello, por lo regular, los padres no suelen tomar bien la noticia de que un hijo o hija salga con alguien de su mismo sexo, en el mundo de la magia es común esa clase de parejas pero en el mundo muggle aún es visto como tema tabú, difícil de manejar, por lo que me da a pensar que probablemente Chang no tenga una buena relación con sus padres, ya que ni siquiera se molestó en contar algo cuando fui a curar a Luna, por lo regular solo hablamos de otras cosas pero era más la situación que estaba pasando Luna, no teníamos otra preocupación que no fuera eso.

Era obvio que mi hermana me agarró con la guardia baja, ya que cometí el error de decirle que Chang estaba conmigo cuidando a Luna Lovegood, estaba tan concentrada en ello que olvidé que Gabrielle tenía ya a su elección y comenzó a preguntarme de cosas en relación a Chang pese a que se llevan tiempo escribiéndose, no le podía negar el hecho de que viese a su amiga, era eso o mandarla a la boca del lobo; Nuestros padres pero al final las cosas resultaron bien, ahora solo me preocupa lo que está pasando en la sala del trono. Tuve que salir un momento a la villa del clan, esperar en esa sala con mis padres no me ayudaba en nada, ya que seguían hablando del mismo tema sin parar, sin llegar a nada concreto.

Al llegar noto que las veelas están en varios círculos, algunas de ellas platicaban, otras estaban demasiada serias mirando en dirección a la sala del trono, la verdad es que era la primera vez que presenciaba algo como esto, solo vine una vez aquí y fue durante la ocasión en que presenté a Bill como mi pareja e elección pero no fue la reina veela quien estuvo ahí sino, fue la matriarca de las veelas quien aprobó todo, lo único que pensaba era en largarme, noto que una de las veelas se acercaba a donde yo estaba, era la que presentó a la reina azul, parecía sonreírme, solo espero a su llegada, quiere hablar conmigo.

.- Hola Fleur Delacour – Me dice saludándome la muchacha, que parecía ser más joven que yo aunque no tenía mi estatura, su belleza era innegable – Me llamo Hèléne Blanchet, segunda de la reina azul, un honor conocerla.

.- El gusto es mío – Le dije devolviéndole el saludo y noto que su nombre es curioso – Elena es tu nombre, traducido a la lengua común.

.- Y pura como la nieve blanca – Dijo Elena que rebosaba de orgullo – Vengo de una familia distinguida sin embargo, cuando la reina me seleccionó como su segunda, tuve que abandonar a mi familia, soy una veela pura y aun no tengo una elección.

.- ¿No te dejan salir mucho? – Le pregunto con curiosidad, ya que me sorprendía que alguien tan hermosa como ella no tuviese todavía una pareja, a pesar de que las veelas solo tienen una elección, no les priva de tener una relación meramente casual pero no sucede muy a menudo.

.- Tengo deberes con la reina azul – Me responde Elena viendo en dirección al trono – No puedo abandonarla, ostento un cargo muy importante y es mi deber protegerla a toda costa, así que, no salgo demasiado, en mis tiempos libres solo me dedico a leer, estudiar y mantenerme alerta ante todo.

.- ¿No te sientes sola? – Le pregunto mirando a la sala del trono, ella me observa – Digo, no ha de ser fácil ser la protectora de la reina azul.

.- Puede ser – Dijo volviendo a mirar al frente pero noté que alzó su mano, ella veía su anillo plateado que estaba en su dedo anular y eso significaba que debía de estar casada con alguien, trato de sentir de sentir su aura pero no puedo, lo esconde perfectamente ante mi presencia, es poderosa, puedo entender que no hable de su vida privada – No voy a negar que en ciertos momentos me he sentido sola pero tampoco me puedo quejar de gran cosa, es un honor protegerla, no tengo otro interés, ella me ha enseñado bastante, cosas que no puedes aprender en otros lugares.

.- Había escuchado leyendas acerca de la reina azul – Dije mirándola esta vez – Qué ella sabe de cosas que ningún otro ser mágico conoce, que tiene bastantes secretos pero al verla, puedo notar que es una veela poderosa, seguro que te ha enseñado a ocultar mejor tu poder veela, a ocultar tus estados emocionales.

.- Ella mantiene secretos que ni las propias veelas conocen – Dijo Blanchet que seguía observando el camino al trono – Muy pocas se acercan a ella para poder aprender, de momento solo estoy yo, soy una guardiana y mi deber es protegerla a toda costa.

.- Ya veo – Dije al mirar al trono de nuevo – De casualidad ¿No sabrás que es lo que hacen ahora?

.- No tengo permitido hablar de eso – Dijo Elena con seriedad, se notaba que hacía su trabajo, era de esperar que no dijera demasiado al respecto – Eso es cosa entre la reina y ellas, lo único que puedo decirte es que confíes en ellas.

.- Entiendo – Dije al cerrar mis ojos y pensando en mi hermana – Espero que todo salga bien.

Ella ya no dijo nada más pero no se apartó de donde estaba. Francamente no sé qué esperar, lo único que podía hacer era esperar, no había otra cosa que pudiera hacer y tal como dijo mi madre, se tomarán su tiempo, no era cualquier cosa al fin y al cabo, se trataba de un asunto importante de las veelas, solo la reina puede llevar a cabo esos asuntos serios por encima de la matriarca de las veelas. Según leí antes de venir aquí, que la reina de las veelas solo se puede convocar si la situación lo amerita, todavía no logro entender como mi madre pudo tener la influencia suficiente para poder convocar una reunión con la reina veela, lo que me parece la oportunidad perfecta para preguntarle a Elena, volteo a verla y le llamo su atención, esta me observa.

.- ¿Podrías decirme como mi madre pudo lograr obtener una audiencia con la reina veela? – Le pregunto con toda seriedad, ella se queda como meditando la pregunta – Es algo que me vengo preguntando desde hace un par de días.

.- Su petición se resume en dos aspectos – Dijo Elena que volvía mirar en dirección al trono – Lo primero, es que se tiene que tener una situación que no esté en manos de la matriarca de las veelas, algo extraordinario como es el caso de Gabrielle Delacour y su elección; Cho Chang, presentar el caso a la matriarca de las veelas, sobra decir que se sorprendieron demasiado.

.- ¿Y lo segundo? – Dije sin más.

.- Lo segundo es la parte complicada – Dijo Elena que volvía a mirarme – Convocar a la reina de las veelas es difícil por no decir que hay reglas estrictas que se tienen que llevar a cabo, una de ellas es realizar una votación y se nota que tu madre conoce muy bien los protocolos o reglas que se tienen que hacer para convocar a las reinas de las veelas, lo primero es presentar el caso ante una cámara, cuyas veelas son las guardianas de la matriarca y el consejo principal de las veelas, Apolline logró convencer a la cámara al presentar pruebas por medio de un hechizo que permite explorar el aura de una veela pura y sus conexiones familiares, el resto no necesita explicación.

.- De modo que es así como logró tener una audiencia – Dije mirando nuevamente el trono.

.- Al final tienen que informarme a mí – Dijo Elena seria – A su vez, informo a la reina, ella desde el principio ya sabía lo que iba a pasar, de hecho, podría haberse presentado sin más pero hay que respetar los protocolos, punto por punto sino, se armaría un escándalo y no nos podemos permitir eso.

.- Entiendo, gracias – Le respondo agradeciendo el gesto, lo único que me queda por hacer es solo esperar, que las cosas salgan bien y que mi hermana salga bien librada junto a Cho Chang, tan solo puedo confiar en ellas dos, no sé qué tipo de prueba estarán pasando pero espero en verdad que no sea tan complicado – Solo queda confiar en ellas.

.- Si – Dijo Elena que cerraba sus ojos y luego los abría – Te podría contar si estuviera permitido pero estoy atada a las leyes de las veelas, espero que me sepa perdonar por ahorrarme detalles.

.- Ya, no te preocupes por eso, lo entiendo – Dije con una sonrisa tímida pero por dentro detestaba esas reglas, quisiera saber pero tampoco podía hacer presión incluso mis padres estarán nerviosos pero tampoco rechistan, no queda más que esperar.

Sala de la pureza (POV Cho Chang)

Este es un sitio extraño, todo de color blanco, sigo caminando aparentemente sin rumbo, no hay nada a mí alrededor, como si todo se hubiese borrado, dejando atrás el maravilloso mundo de las veelas que estaba momentos atrás. No entendía nada salvo que tenía que llegar de algún modo a Gabrielle, no me servía de nada correr porque no captaba nada de lejos, no había siquiera alguien en el lugar y solo había un vacío enorme, armada con mi varita porque según la reina de las veelas, el lugar no sería como cualquier otro, es especial y me pondría a prueba.

Se supone que tendría que tener presión pero lo único que siento en mi corazón es desesperación, un lugar demasiado silencioso, un lugar en el que me siento asfixiada, sin alguien quien pueda guiarme.

.- Claro, no hay atajos ni guías – Dije suspirando con lamento.

Era obvio que esto tenía que pasar así, es mi prueba de fuego y realmente no me podía quejar sin embargo ¿Qué peligros me deparaban en este sitio tan desolador?, es lo que intento comprender y no logro concretar una respuesta, lo único que podía hacer era caminar sin cesar, sin siquiera hacerme ideas de que podría llegar a un sitio en concreto, tan solo caminar sin parar.

De repente todo el lugar cambia radicalmente haciendo que pare de caminar, lo único que podía visualizar era como el lugar se estaba transformando de manera brusca a un sitio o lugar como si pasar de una fotografía a otra se tratara, solo que de manera rápida y sin cesar. Tuvieron que pasar varios minutos hasta que paró concretamente a un sitio muy conocido, era Hogwarts pero notaba algo extraño, me sentía fuera de lugar como si no estuviera en mi propia época, de hecho por la decoración del lugar es que pude reconocer en dónde estaba parada, estaba sorprendida.

.- Qué me parta un rayo – Dije al ver las decoraciones del baile de los campeones que se celebraron en ese año, los pasillos decorados con las banderas de las escuelas de magia; Durmstrang, Beauxbatons y por supuesto Hogwarts – El torneo de los tres magos, todo, exactamente en su sitio pero algo anda mal, no pude haber retrocedido tanto ¿Por qué la gente que veo no me mira?

En efecto, podía ver que había gente pero nadie me observaba, de hecho podía pasar como si nada, eso me indicaba que no había retrocedido en el tiempo como si de un gira tiempo se tratase, solo podía significar una sola cosa, algo que es bastante conocido para mí, esa sensación familiar.

.- Recuerdos – Dije al ver nuevamente el lugar y podía reconocer el pasillo – Mi consciencia, mis recuerdos, este es el pasillo dónde me reuní con Cedric después del baile.

Volteo a ver atrás y en efecto, ahí estaba yo con Cedric caminando hacia uno de los jardines de Hogwarts, hasta llegar a un banco, recuerdo perfectamente ese día, hablamos de nuestro futuro propio, de un futuro distante sin embargo, yo ese día no me sentía del todo bien ni siquiera podía sentirme segura al respecto de lo que me comentaba Cedric, es más, jamás le comenté acerca de mis padres, de mi pasado y de cómo ellos querían usarme como herramienta y trampolín para sus propios beneficios. Es extraño seguirme a mí misma pero por alguna extraña razón lo hago, la escena es tal como lo recuerdo, platicando acerca del futuro y de lo emocionado que está Cedric, me estaba doliendo ver esta escena porque yo, en el fondo le estaba dando falsas esperanzas, un futuro dónde él no sería feliz. De repente noto que todo se para, Cedric por alguna extraña razón se para y se dirige a mí, estático, serio, como en cierto modo enojado.

.- ¿Por qué me mentiste Cho? – Dijo Cedric, me quedé helada, el simple hecho de que me hablara en mis propios recuerdos me pegó como balde de agua fría y peor aún, haciéndome esa pregunta – Tú sabías en el fondo que no me amabas del todo, por qué seguir una mentira, creía que yo podía hacerte feliz, no lo entiendo Cho, ¿Acaso no me amabas de verdad?

.- No quería hacerte daño – Dije tratando de sonar segura pero sentía que me quebraba, el solo verlo me hacía daño, el solo ver cómo me está hablando vivo y real, estaba teniendo sentimientos encontrados – Cedric tienes que entenderme, había situaciones que no podías saber, que quizá no lo entenderías, yo solo intentaba protegerte de mí…

.- Mentiras – Dijo gritando Cedric mirándome furiosamente – Me engañaste, me ilusionaste, yo hice lo que tenía a mi alcance ¿No fue eso suficiente para ti Cho? ¿No te parecí buen partido? ¿Solo fui una mera herramienta para llenar tu vacío? Lo que hice después de esto, te pareció una mera esperanza, una banalidad incluso.

El lugar se transforma en otro sitio, concretamente en las afueras del castillo, cerca del lago, en ese momento, Cedric me había propuesto conocernos mucho más de lo que ya nos conocíamos, me contaría cosas más personales de su vida a cambio de que yo pudiera contarle la mía sin embargo que me daría el tiempo de hacerlo, no me sentiría presionada, de hecho, me ofreció mi tiempo, para pensar en la relación que teníamos en ese entonces, nunca esperé de él pero sentía que me daba la liberación, de tomar una decisión importante en mi vida, eso me hizo emocionar porque podría haberle contado finalmente cosas personales de mi vida y que me entendería más, que podía haberme liberado de mis propias ataduras y llegar a amarle de verdad sin embargo, cuando ocurrió su muerte, esas esperanzas fueron vanas, todo mi camino se derrumbó, creía que era el comienzo de una nueva era de mi vida y finalmente nunca se dio ese cambio, claro está que mejoró significativamente mi relación con él después de esa reunión pero muy poco lamentablemente.

.- Sabes que eso no es así – Dije casi gritando, sujetando mi varita fuertemente aún sin apuntarle – Me has dado felicidad, eso no lo voy a negar pero si tan solo te hubiese contado, las cosas serían diferentes…

.- Entonces qué pasó Cho – Dijo Cedric alzando su mano como si quisiera que la tomase pero luego forma un puño, con furia me sigue hablando - ¿Fue esa perra francesa la que te hizo cambiar de opinión a pesar que te propuse mejorar nuestra relación para entendernos del uno del otro? ¿Esa maldita te confundió?

Al escuchar eso me sorprendí demasiado, no lo esperaba de él, es entonces cuando me doy cuenta de la situación y le miro ahora con cara seria. Cedric jamás diría algo malsonante, nunca fue de los que hablaban majaderías o dijera groserías mucho menos faltarle el respeto a una persona de esa manera, me dejé llevar por mis emociones y miré furiosamente a Cedric, alguien falso que adoptó la figura de mi ex novio, no sabía que la sala pondría a prueba las emociones de una persona e incluso usando los recuerdos para afectar, es una sala horrible.

.- Cedric jamás diría eso de una persona que ni siquiera llegó a conocer, nunca le llegué a platicar de Gabrielle Delacour, ni siquiera tuvo la oportunidad, siempre le oculté esa parte debido a que no lo quería distraer de sus deberes como campeón de Hogwarts – Dije apuntando mi varita contra él, el falso Cedric sonríe como un psicótico – Eres un falso recuerdo de él, te podrás parecer pero no eres él al cien por ciento, yo conozco a Cedric y no adoptaría una posición egoísta, no diría esos insultos a la ligera.

.- Oh, deberías haberlo hecho, quizá te habría entendido más, el pobre chico murió ilusionado – Dijo Cedric que se transformaba en un ente negro pero al cabo de unos minutos se transformaba en mí misma, mirándome con una sonrisa torcida y comenzaba a caminar en círculos – La gran bruja y maga talentosa Cho Chang, proveniente de Japón pero de origen chino de parte del padre, nacida en Inglaterra, que ha estado ocultando su verdadera naturaleza, la que utiliza a sus amigos como escudos para ocultar sus verdaderos emociones, pensamientos pero da igual, sientes que nadie te comprende, sientes que todos te utilizarán en tu contra, como aquella ocasión en que hiciste magia por obligación de tu padre, en contra de un muggle, para ser precisos, contra un niño, vaya que asustaste a ese grupo de niños.

.- Cállate – Dije furiosa, el lugar se transformó nuevamente, esta vez en una calle muggle, Inglaterra, mi padre caminando junto a mí, hablándome al oído, diciendo que debería de activar mi magia como él lo llamaba, me provocaba y lo único que hacía era mirar a un grupo de niños que estaban cerca de un lago, mi padre solo murmuraba que debía de alterar el agua, espantar a los muggles sucios como le gustaba llamarlos, me sentía humillada, asqueada y al final, hice lo que hice, solo por el hecho de que me dejara en paz pero esa situación casi que fue fatal porque uno de los niños se cayó al agua debido a mi magia que se desató, afortunadamente un señor logró salvar al niño, mi padre solo podía jactarse con orgullo y nos íbamos de ese lugar rápidamente para no levantar sospechas – Mi padre es un maldito loco y lo sigue siendo hasta hoy en día, me presionaba y por poco me cargo a un niño inocente, menos mal que lo pudieron salvar a tiempo.

.- Claro, claro – Dijo la falsa Cho que me miraba con esa sonrisa de loca – Pero anhelabas atención ¿A qué si?, qué tal tu madre, ni te prestaba atención, te mandaba con la mucama mientras que ella trataba de regresar al gremio de los alquimistas para recuperar su reputación y tu padre, queriéndose follar a esa zorra del ministerio para ganarse un lugar, sorprende porque tu madre sabía muy bien las intenciones de tu padre e incluso le daba consejos acerca de cómo llevársela a la cama para ganarse rápidamente el favor que buscaban y es que dinero no necesitaban sino un puesto poderoso para un objetivo más concreto, tú misma escuchaste a tu padre que quería amnistía para él mismo, recuperar su honor, él estaba dispuesto lograrlo a cualquier precio incluso si eso significaba vender a su propia hija, obviamente no en el aspecto sexual, tu padre al menos no era tan idiota en ese aspecto pero tenías algo más que eso, eso lo sabes muy bien Chang.

.- No eres más que un recuerdo falso – Dije sin más apuntándola con mi varita – Eso ya es pasado, me he podido alejar de mis padres.

.- Pero te afectó demasiado y lo sabes – Dijo sin tapujos la otra – Cuando llegó Dumbledore a salvarte, sentiste alivio, como si te quitaran unas cadenas sin embargo, ahí no acababa la cosa, bien sabes que tu padre intentó por todos los medios controlar tu educación en Hogwarts, queriendo apartarte de los demás e exigiendo que te dieran clases por separado, cuando se enteró que eras la buscadora del equipo de Quidditch de Ravenclaw, se puso histérico ya que no le gustaba ese deporte pero volviendo al punto, pedía a Dumbledore que pusiera maestros que él consideraría apropiados para tu talento, ese talento que ocultas, una magia de esa naturaleza solo es entendible por una de las Damas de Hogwarts, es por eso que Luna te escogió como mano derecha, es quien te entiende mejor y cómo no, es hija de Pandora Lovegood, la maga blanca elemental, me pregunto si tus padres sabrán la verdadera naturaleza de tu magia, imagino que tu padre tendrá alguna idea, al fin y al cabo él quería controlarte e usar ese poder para su propio beneficio.

.- A Luna no la metas en esto – Dije aún furiosa por escuchar esas palabras – Eso ya quedó zanjado, a mis padres no les debo nada, nunca me dieron nada bueno de mi infancia, nunca han velado por mi seguridad y jamás dieron la cara por mí, solo fueron unos desgraciados egoístas.

.- ¿Tú crees? Mira quien habla de egoísmo Chang – Me dice riéndose descaradamente la falsa Cho, que me seguía mirando con esa sonrisa, una maldita retorcida – Tus padres a día de hoy siguen buscando utilizarte, lo que no saben es que tienes dominio de la magia elemental, Luna y tú han estado practicando junto a las otras damas, sabes lo que los une ¿no?, la desgracia, tragedia, la tristeza, el sentimiento de estar sola, estar rodeadas de una ola de gente falsa e hipócrita que buscan estar junto a ustedes solo por el mero hecho de ser populares, tienes ganas de destrozarlos a todos, de enseñarles que nada es como se aparenta, me pregunto si Gabrielle sabe de tu verdadera naturaleza, esa que no muestras a la gente que te admira.

.- ¿Qué le has hecho a Gabrielle maldita loca? – Dije apuntándole con mi varita todavía furiosa por el hecho de atreverse a nombrar a alguien importante para mí – No voy a seguir escuchando tus idioteces pero si haré que me digas dónde está ella, si le has hecho algo…

.- Por favor – Dijo alzando ambos brazos y dándose la vuelta – Gabrielle Delacour también tiene una naturaleza oculta; Su veela, ellas tampoco son como aparentan, son posesivas por naturaleza, la magia que desbordan, cuando se descontrolan tienden a hacer cosas que uno no haría, al igual que tú, esa chica francesa tiene un talento oculto, ¿Por qué no le echas un vistazo a esto? Te aseguro que te va a interesar bastante.

El lugar nuevamente cambió de escenario, esta vez paró en un lugar que era desconocido para mí sin embargo observo la insignia del lugar; Beauxbatons, una gran letra "B" en el centro, un escudo acompañado de alas de Pegaso y dos varitas decorando arriba, esto no era parte de mis recuerdos, eran los de Gabrielle pero tampoco podía confiarme demasiado, puede ser una jugarreta de ella, observaba el lugar y había más muchachas de lo que podría esperar, estaban reunidas en un lugar en lo que parece ser unos tótems al centro, había un barullo pero entre todas pude reconocer a Gaby, que parecía estar rodeada de un grupo selecto que parecían recriminarle algo, me acerco a ver qué sucede y lo que escuché no fue agradable.

.- Vaya, vaya – Dijo una de las muchachas de dicho círculo que parecía tener la misma edad que Gaby, con cabello más corto y arrogante mientras que Gabrielle la miraba con mala hostia – Gabrielle Delacour, fuiste invitada de honor al torneo de los tres magos luego del examen, me pregunto si fue por influencia de tu querida hermana mayor, ya que antes de ti, estábamos nosotras, nominadas y no fuimos seleccionadas al final.

.- No tengo porqué escucharte o responder por eso – Dijo Gaby secamente, no parecía estar nerviosa, de hecho estaba en una posición desafiante - ¿Por qué no vas a molestar a otra para variar Colette? Siempre es la misma historia con ustedes, no aprenden.

.- Nosotras merecíamos más estar en esa posición Gabrielle – Dijo con furia una de las matonas de Colette – Merecíamos estar ahí e incluso había más plazas sin embargo solo quedó en una plaza más, podíamos haber conocido a una de las Damas y ser seleccionadas por uno de los tótems si era el caso de conocer a una de ellas y hasta probable podríamos haber sido algo más.

.- Así es – Dijeron al unísono varias de las chicas quienes miraban con rabia a Gabrielle, esta última simplemente hacía caso omiso y solo se fijaba en Colette.

.- Verás Gabrielle – Dijo Colette que se acercaba a Gaby con arrogancia, podía notar su enojo, se las traía contra Gaby – Ni siquiera tuviste que pasar las evaluaciones por lo que escuché, eras una invitada de honor, la única explicación posible es que tu hermana pidió exclusivamente que te eligieran, saltando las normas como siempre, esto es inaudito, inaceptable para una escuela de magia como lo es Beauxbatons.

.- Bah, no tengo la culpa de que ustedes no tengan la suficiente inteligencia para poder pasar esas pruebas y me parece que les dijeron mal el chisme, si presenté las pruebas pero prefieren hacerse las locas y decir cualquier idiotez, cualquier excusa es buena para molestar a la gente supongo – Dijo Gaby con una sonrisa descarada, maliciosa que desborda presencia, el círculo de esas muchachas se estaban enojando – Vergüenza les debería de dar de ser estudiantes, esto es Beauxbatons y ustedes no representan del todo como debería de ser, es más creo que ni siquiera se podrían apuntar a Hogwarts, hogar de las Damas, ellas no eligen a cualquier maga o bruja trucha como su mano derecha, ni siquiera ustedes pueden ser centinelas o guardianas, oh se me olvidaba, los tótems no se prendieron ante ustedes cuando pasaron la primera vez, por algo será ¿no?, no han demostrado ser dignas, es muy evidente y por eso, no han recibido la invitación, me apostaría a lo que fuera que jamás llegarán a conocer a una de las damas de Hogwarts.

Me asombraba el hecho de que Gabrielle se pudiese defender de esa manera pero se estaba ganando enemigas de por medio que parecían estar dispuesta a echarle bronca porque observaba que sacaban sus varitas, Gabrielle sacó la suya y no se echaba atrás, notaba que sus ojos ya salían a relucir la personalidad veela de la francesa, este recuerdo de ella debió de ser después del torneo de los tres magos a juzgar por las palabras que se dijeron. Ya estaban dispuestas a tener su duelo de magia, eran seis contra una, una manera sucia y cobarde, no me extraña que esas chicas no pudieran obtener un alto cargo o honor para ir a Hogwarts, Gabrielle iba a dar el primer paso cuando de repente alguien dijo un sonoro basta a las espaldas de las chicas, ellas voltearon a ver y era nada menos que Fleur Delacour que observaba con enojo evidente al círculo de las chicas pero noto algo raro en sus ojos, azules bien intensos, mucho más que las de Gabrielle, salía a relucir la veela, detrás de ella estaban sus compañeras que se ponían a lado de Gabrielle, que a diferencia de las otras, estas la respetaban e incluso parecían ser más cercanas, el círculo de chicas se intimidaban ante la presencia de Fleur.

.- ¿Otra vez molestando a mi hermana chicas? – Dijo con frialdad Fleur, las otras solo guardaban su varita y agachaban la cabeza con miedo, era evidente que le tenían alto respeto, temor y no querían armar bronca con ella – Qué sepan que yo no pedí que la invitaran, mi hermana Gabrielle pasó con éxito sus pruebas por encima de ustedes, una gran diferencia dado que los resultados de sus evaluaciones dejaron mucho que desear y prefirieron reducirlo solo a una invitada, creo que no hay nada más que decir.

Las chicas se largaron como si de sus vidas dependiera de ello, Fleur se calma y les pide a sus compañeras que la dejen sola con su hermana, Gaby por otro lado miraba con enojo a su querida hermana, estaba claro que aquello no le gustaba para nada, que llegara a ayudarla cuando era obvio que no necesitaba ayuda.

.- No era necesario que aparecieras y me defendieras como si fuera una damisela en apuros – Dijo con cierto enojo Gabrielle – Ya te lo dije, me puedo defender solita, gracias, ya te puedes ir.

.- Gaby, ellas no tenían buenas intenciones contigo – Dijo Fleur impasible ante las palabras de su hermana – Sé perfectamente que te puedes defender sola pero prefiero que no armes un jaleo con tu magia, desde que conociste a esa chica, te has vuelto mucho más inteligente y mordaz, sarcástica incluso pero también eres imprudente mucho más de lo normal, tu magia se desborda, tu veela y tú se están uniendo cada vez más, jamás vi algo así en lo que llevo de vida, ni siquiera yo que llevo tiempo entendiendo a mi veela y mi magia, he podido llegar tan lejos como lo has hecho tú, podrías haberlas lastimado, solo lo hice para que ellas no salieran heridas, Madame Maxime no permitiría esto y te verías en serios problemas.

.- ¿Y qué? – Dijo Gaby sin más guardando su varita, eso me sorprende, parecía querer hacer daño a las demás aunque fuera por defensa propia, tenía pensamientos negativos – Se lo merecen por tratar de joderme la existencia, en todo caso me he ganado enemigas, está claro que no le caigo bien a nadie Fleur, al fin y al cabo esto es Beauxbatons, la gran escuela de magia, cuna de medimagos más poderosos que hay, claro con tamaña bola de tontas que has visto podemos ponerlo en duda ¿no crees?

.- Gaby – Dijo Fleur aun sin inmutarse a las palabras de Gabrielle, sobre todo lo último que dijo de manera sarcástica – Tu magia no es normal, tienes que entender eso, los maestros están muy encantados y ni hablemos de tu crecimiento e inteligencia que también tienes una naturaleza volátil, eres alguien adelantada a tu tiempo de eso no hay duda, la directora cree que en cualquier momento, uno de los tótems se prenderá ante ti, podrías ser una de las próximas guardianas, sabes lo que eso significa.

.- Tonterías – Dijo Gabrielle agachando la cabeza pero aun hablando furiosamente - ¿A quién le importa eso ya?, además ya tiene rato que no se han prendido los dos restantes tótems, faltan dos y ni siquiera parece haber indicios de que lo hagan pronto.

.- Has cambiado bastante desde que regresamos Gaby – Dijo Fleur suspirando y entrecruzando sus brazos – No estás siendo la misma e incluso eres sádica, no es la primera vez que te peleas con ese grupillo de chicas, quieres hacerles daño sin embargo, ¿Sigues pensando en ella desde que nos fuimos de Hogwarts?

.- No lo sé Fleur, no puedo saber con seguridad por el momento, me agrada mucho Cho Chang – Dijo Gaby soltando un suspiro también – Pero no te preocupes tanto por eso, por ahora no es un asunto que resolvamos de un momento a otro.

El recuerdo acababa en ese momento y pasábamos a otro lugar, esta vez en medio de la nada, el mismo lugar blanco, no entendía a qué venía ese recuerdo de Gabrielle, no sé si era parte de la jugarreta de esa falsa Cho pero tampoco podía negar que esos eran los recuerdos vívidos de Gaby, incluso pude notar que sus ojos eran azules muy intensos como los de su hermana, lo que me daba indicar que Gabrielle iba muy en serio en lastimar a aquellas que la molestaban, hacerles daño de verdad, la magia que yo sentí en ese momento era un desborde, casi colapsaba si no fuera por la repentina aparición de su hermana mayor, las cosas habrían sido peor. Yo todavía observaba a la falsa Cho que me miraba con una sonrisa descarada, como si todavía no terminara con aquello.

.- Gabrielle Delacour oculta su naturaleza veela desbordada – Dijo la falsa Cho que seguía dando círculos a mi alrededor – Cada veela es diferente, eso lo sabes muy bien dado que has leído libros sobre el clan de las veelas y sabes que ninguna es igual, Gabrielle en su interior es violenta, volátil o imprudente, cruel con sus acciones en ocasiones, es sádica a diferencia de su hermana, tú misma la has visto, esos ojos tan intensos, ella y su veela estaban dispuestos a lastimar a ese grupo de chicas incluso…

.- Ella no sería capaz de matarlas en el acto, no es una persona que se caracterice por usar ese tipo de opciones – Dije antes de que completara esa palabra y seguía apuntándole con mi varita – Esto no significa nada, no creo que la conozcas tan bien como yo maldita ente, falsa y repulsiva.

.- Es una veela – Dijo la falsa Cho – Es amable contigo e incluso con las personas a quienes estima pero por dentro es alguien que no dudaría en matar por aquellos a quienes ama, sobre todo por su elección que eres tú, ella y su veela te han escogido, ella hará lo necesario para protegerte.

.- Ella puede controlar a su veela – Dije ya enojada, no iba aguantar esa mierda que decía la falsa Cho que solo buscaba desestabilizarme – Tú no puedes entender eso.

.- Por favor – Dijo la otra sin más – Ella ahora mismo puede estar viendo tus recuerdos y se enfrentará a sí misma solo que ella, perderá y entrará en un letargo, si no llegas, ella morirá y a la vez tú también morirás, no saldrás de este lugar, ninguna de las dos podrá lograr salir de esta sala, es un lugar laberíntico, se enfrentan a lo desconocido.

No iba a seguir escuchando y preferí comenzar un duelo, le tiré el hechizo expeliarmus pero no le hizo nada, unas risas sonoras aparecieron y el lugar se estaba transformando en varios sitios rápidamente, sitios que conocía perfectamente, algunos formaban parte de mi infancia y otros eran de tiempos después de que entrara a Hogwarts, varias figuras aparecieron de repente a mi alrededor, la falsa Cho simplemente desapareció, tenía que estar atenta a cualquier cosa que se presentara, el lugar parece funcionar de una manera muy extraña, agarra los recuerdos como si fueran dulces y lo tergiversa o lo modifica al antojo para crear confusión en la persona sin embargo, algo me inquietaba y no podía dejar de pensar en lo primero que pasó cuando vi mi recuerdo con Cedric, es evidente que eso todavía me sigue afectando y a Gabrielle le sigue afectando ser alguien que cumpla las expectativas de los demás debido a su manera de ser y su inteligencia.

Las figuras que estaban a mi alrededor no mostraban sus caras, de hecho parecían estar borrosos hasta que dos pasaron directamente a mirarme y tomaron la forma de mis padres, ambos no tenían una sonrisa, todo lo contrario, era de enojo, decepción, no iba a dejar que eso me afectara sin embargo, sigo sin tener idea de cómo seguir un rumbo dado que solo estoy viendo recuerdos que son convocados gracias a mi consciencia. Mis padres empezaron a hablar sobre lo mal que he estado yendo, sobre el camino que tomé y que era incorrecto, mi madre vociferaba cosas acerca de mi relación fallida con Cedric, que jamás lo iba aceptar ni siquiera cualquier otro pretendiente, que solo esperaba que yo aceptase los pretendientes que ella me presentaría, que soy una mala hija, esas mierdas de la antigua usanza en familias que buscan concertar un matrimonio sin siquiera pensar en los sentimientos de sus hijos.

A pesar de que no es real, lo que más me dolió es que hablaran sobre Gabrielle Delacour, ni siquiera ellos la conocen pero en un momento dado parecen conocer perfectamente el contexto en la que conocí a Gaby, aunque sintiera dolor por parte de ellos no dejo que me intimiden, trato de seguir adelante y con el hechizo expeliarmus mando a volar a las figuras convocadas de un mal recuerdo, el lugar pronto cambió de sitio, esta vez en uno desconocido para mí y solo se mostraba un camino.

.- ¿Qué es realmente este lugar? – Dije al observar el camino.

Una buena pregunta, comencé a recorrer el camino, de algún modo tenía que llegar a dónde estaba Gabrielle, ella podría estar en peligro pero esos recuerdos de ella, esos ojos, ese sentimiento que pude sentir de ella, en verdad quería lastimar a aquellas muchachas que la molestaban, no era que provocase dudas pero me daba cierto temor por el hecho de que Gaby podría descontrolarse y no poder parar a tiempo, sé que las veelas son posesivas por naturaleza pero en otras ocasiones han podido dominar por completo a su veela pero no esperaba ver uno de los recuerdos de Gaby sin embargo, me ha ayudado a entender un poco más acerca de su vida y lo complicado que es tratar de llevar una vida teniendo en cuenta su linaje, de hecho cuando me enteré que yo soy su elección, tuve un vendaval de emociones fuertes dentro de mí misma que no supe describir pero estaba contenta y a la vez tenía ciertos miedos de no poder corresponder bien con esos sentimientos sin embargo, tampoco me puedo engañarme, sé lo que siento y tengo ataduras de mi pasado, mismas que debo de eliminar, debo dejar de lado todo.

Recuerdo las palabras de Apolline, la madre de Gabrielle que me dijo que tenía ataduras o grilletes que me puse por el hecho de ocultar mis verdaderos pesares, es decir, lo de Cedric es solo la punta del iceberg, todo lo demás se relaciona con mi familia. El camino parecía no tener fin por lo que tuve que correr para ver si en algún momento habría un cambio en el panorama pero nada, solo un mundo vacío y sin un alma a la vista, sentía desesperación porque Gabrielle podría estar peleando contra algún ente o peor aún estar en un largo letargo, una donde no podría despertar, tengo que darme prisa.

En otra parte (POV Gabrielle)

Estoy cayendo y no precisamente a un precipicio, no tengo idea de qué es lo que ha pasado, estuve enfrascada en un duelo contra mí misma, viendo recuerdos de Cho Chang, precisamente sobre sus padres, lo mal que la han tratado, como la han apartado de su vida, eliminando el hecho de no tener infancia, no tener amigos, no tener ningún contacto con nadie ni siquiera con algún familiar salvo a los pocos que pudo conocer y no fue de pura casualidad, los padres de Cho son personas horribles, puedo entender que no hable mucho de ellos. El extraño ente empezó a hablar de cosas como el hecho de que Chang oculta su verdadera naturaleza, ese sentimiento de mandar a la mierda todo, lo puedo entender también y por ello, es que no es de extrañar que pertenezca a la comitiva de las Damas de Hogwarts, siendo la mano derecha de Luna Lovegood, también vi ese recuerdo, de modo que así es como se conoce a una Dama, jamás pensé que las uniría la tragedia o desgracia, ese es el factor común, un camino lleno de soledad y tristeza.

Este lugar es sumamente extraño, durante el duelo no pude siquiera acertar un golpe a la otra y la extraña ente sí que era certera con sus disparos de magia, tal vez ni debería de sorprenderme puesto que la única persona que me conoce al cien por ciento, soy yo misma, sé cómo voy actuar, sé mis razonamientos, sé que le he ocultado parte de mi naturaleza a Cho Chang, que no soy tan amable o cariñosa, en Beauxbatons no soy precisamente una persona querida, es todo lo contrario, doy temor, desde esa vez que regresé de Hogwarts, cuando mostré mis habilidades, mi inteligencia en las evaluaciones, trabajos, el gran manejo de mi magia pero hubo un día en específico que no solo espanté a mis compañeros, los maestros, lejos de sentir miedo, me elogiaron y dijeron algo que no debían de decir; Soy especial.

Inicio Flashback, patio de pruebas Beauxbatons.

La había liado demasiado, metí la pata en grande y no precisamente porque haya salido mal la magia no, lo hice sin pensar en las consecuencias, todo esto porque me provocó esa maldita desgraciada de Colette, lo único que quería era que se callara, está claro que lo logré pero tuve que pagar un alto precio por eso, algo de lo que podría arrepentirme después, de eso estaba segura. Justo antes de que invocara mi magia, esa loca de Colette, había demostrado una magia excepcional de su parte, claro que su grupito de tontas les aplaudían como focas que se emociona ante algo simplón, tengo que reconocer que la magia de Colette tampoco es que fuese menos, de hecho, es una buena maga y bruja que promete ser una de las mejores medimagas, una joven promesa pero con poco cerebro lamentablemente y no lo digo porque no ella no sepa de cosas, tiene una buena inteligencia pero sus maneras de hacer las cosas y su envidia terminan por corromperla, siempre se la traía conmigo, esta vez soltó una magia de agua formando un dragón, usando su varita elegantemente.

Como no, dirigió su mirada hacía mí con aires de superioridad, estaba claro que mis compañeras no me tenían en alta estima, ni siquiera tenía una amiga verdadera en todo esa bola de idiotas que solo pensaban en el populismo o simplemente buscar la fama cuando habían cosas más importantes. Colette al pasar de mi lado, me dijo que no haría nada mejor, que su magia que acababa de mostrar, era insuperable y que yo, era una plebeya de mi clan y que estaba segura de que no me querían, se atrevió a insultar a mis padres, era algo que no toleraría, así que di un paso al frente, el maestro me indicaba instrucciones de cómo manejar la varita para poder invocar el agua y controlarla pero no hacía caso, estaba cabreada y quería callar a esa malnacida, no sé en qué momento me descontrolé y dejé que mi veela saliera a flote, mis ojos se volvieron tan intensos de color azul que observaba el agua y volteo a ver a la desgraciada dispuesta a demostrarle que no debe meterse conmigo, pude notar el miedo porque cuando me vieron se echaron atrás porque habían notado mis ojos, no le tomé importancia y manejo mi varita invocando el agua que veía frente a mí, era un estanque de práctica pero no razonaba, solo actuaba según mis instintos.

Al alzar el agua con mi varita hice la figura de un dragón aún más grande pero sabía que no era suficiente, no tengo idea de cómo lo hice pero el dragón se convirtió en hielo y escuché una voz en mi cabeza.

.- Del hielo al fuego – Dijo la voz, tenía que ser mi veela interior que me hablaba, eso me sorprendió, no lo hizo en Hogwarts, dio señales pero no habló hasta hoy – Recuerda, el hechizo del hielo y fuego, el encantamiento elemental, maneja al dragón con tu varita y con tu mano libre maneja la magia elemental, recuerda las prácticas con Cho Chang, lo básico de la magia elemental, lo estudiaste con ella.

No podía controlarme, sé que debía de detener a mi veela que ya se estaba desbordando demasiado y a estas alturas, mi hermana estará desesperada, ella lo sentiría pero tampoco podía detenerme, recuerdo los principios básicos de la magia elemental y que practiqué un poco con Chang, ella tampoco lo dominaba bien, eso es lo que decía porque en ese momento, lo que me mostró me dejó impresionada y me dijo que era peligroso usar este tipo de magia sin la práctica adecuada. Con mi mano libre apunté al dragón de hielo y pronuncié lo que me dijo mi veela.

.- Del hielo al fuego – Dije en francés con viva voz – Conviértete en fuego, muestra tu furia para luego volver al inicio, en agua.

Un hechizo de menor nivel de magia elemental, es lo que leí en ese libro junto a Cho y tal como lo dije, así pasó, el dragón de hielo pasaba a ser de fuego y con mi mano dirigía sus movimientos, por momentos pensé en dirigir ese dragón hacia Colette, quería dañarla, quería hacerla sufrir y podía haberlo hecho pero mi veela quien está conectada conmigo me responde.

.- No – Dijo mi veela de forma tajante – Para, es suficiente, sé que quieres lastimarla pero no armemos un alboroto, yo también deseo herirla pero ya has demostrado suficiente, termina el hechizo; Evapórate y vuelve a tu estado original.

.- Evapórate y vuelve a tu estado original – Dije sin chistar, cerrando mi mano en un puño, el dragón de fuego vuelve al estanque, estampándose estrepitosamente y como es de esperar, se evaporó por completo, guardé mi varita y me volteo a ver el grupo, mi maestro estaba estupefacto, las chicas, con evidente miedo pero el maestro solo tenía palabras de elogio y estaba demasiado sorprendido, cuando pasaron unos minutos, este habló.

.- Magia elemental – Dijo el maestro viendo el estanque de agua ahora evaporado por completo, él profesor estaba que no lo creía y no dejaba de mirar el estanque como si esperara que el agua se recuperara - ¿Cuándo has aprendido usar dicha magia Gabrielle Delacour? No es una magia común y corriente, mucho menos controlando algo así con tu mano libre que manejabas el elemento mientras con la varita controlabas al dragón de agua, controlar dos elementos que de hecho ni un mago veterano y experimentado puede lograrlo de forma tan fluida, tú lo hiciste parecer muy fácil y sin pestañear siquiera.

.- Discúlpeme – Dije sin saber que más decir, quería largarme de ahí, no sabía que mierda estaba pasando, lo único que podía estar segura es que, al pensar en Cho, mi magia se incrementó demasiado, a un nivel que no sé ni describir pero tampoco era que dudara del todo, de hecho lo tenía muy claro; Cho Chang es mi elección, me lo confirmó mi veela, me lo confirma mi corazón, no me puedo engañarme a mí misma, puede tratarse de algo pasajero pero lo dudo mucho a estas alturas, observo a Colette y al resto de mis compañeras muertas del miedo, habiendo superado su triste dragón pero no me dan ganas ni de restregar en su cara que hice mejor magia que ella, lo que ha pasado fue una imprudencia de mi parte y una suerte que todos salieran ilesos – Si no le molesta, me voy a retirar de su clase por el día de hoy, estoy muy consternada por esto.

.- Esta bien – Dijo mi maestro asombrado de mi petición, parecía querer decirme que me quedara pero prefirió respetar mi decisión, volteó a ver el grupo de chicas – Por hoy terminamos dado que el estanque se evaporó por completo, tardaremos un par de días en volver a llenar el estanque, felicidades a todas, han hecho un buen trabajo, sobre todo usted señorita Delacour, tengo que informarle a Madame Maxime sobre esto.

.- Preferiría que no dijera nada a Madame Maxime – Dije alzando las manos, no quería armar un alboroto – Lo que pasó, fue de pura suerte, le digo que sigo consternada, el hechizo pudo haber salido mal, por lo cual podía haber lastimado a todos.

.- De eso nada – Dijo el maestro que seguía elogiándome – Nunca vi nada excepcional, si en los estudios teóricos ya eres sobresaliente, en la práctica con magia, estás a otro nivel, brillante, tengo que ir a informarle a Madame Maxime, es lo que manda el protocolo para estos casos.

Salió corriendo como alma que lleva el diablo, a toda prisa sin dejarme opciones de callarle, menudo imbécil que va a armar un tremendo escándalo y mi hermana me echará la bronca por descontrolarme, fui demasiada imprudente, pude haber lastimado a mis compañeras y lo bueno que no fue a más, estaba por irme cuando Colette me llama, con un suspiro volteo a verla con cansancio.

.- ¿Qué quieres ahora? – Le pregunto sin más, sin siquiera inmutarme a su estado tan evidente de temor, estaba temblando esa chica, podía sentir su estado emocional, me veía con miedo – Di lo que tengas que decir, no me hagas perder mi tiempo ni quiero hacer perder el tuyo, así que, al grano de una vez.

.- T-tú – Dijo Colette con bastante miedo en sus ojos - ¿C-cómo puedes manejar esa clase de magia? Ni mis padres que son expertos en magia avanzada, apenas pueden lograr eso con esfuerzo ¿Qué eres? No eres normal, eres una rara, demonio o lo que sea que seas.

.- ¿Es todo lo que se te ocurre? ¿En serio? – Dije pero por dentro, que me dijera que soy rara o un demonio del averno, dolía pero seguía impasible y podía devolver el insulto, mi veela me susurra; Díselo, así que procuro a responderle – Qué te entre esto en tu cabeza de una buena vez; Soy una…

Antes de que dijera nada, una voz detrás de mí dijo que me detuviera, volteo a verla y era mi hermana, que veía con horror el estanque evaporado, llegó rápido al lugar de los hechos, por eso quería largarme e encontrarme con ella en el camino pero esto no deja de ser un tropiezo tras tropiezo, mi hermana ve furiosamente a las chicas, claramente estaba cabreadísima, normal que se la tomara contra las chicas.

.- Fuera – Dijo a viva voz, las chicas se estremecieron al ver que mi hermana con una indicación les decía la salida, dando a entender que quería estar a solas conmigo pero las chicas no se movían de donde estaban y mi hermana se cabrea aún más – Qué es para hoy joder, largo, si no tienen nada más que decirle a mi hermana, ahí está la puta salida.

Eso fue suficiente para ahuyentarlas, salieron corriendo despavoridas, conociéndolas, van a decir cosas o rumores de mi magia y lo veo venir, gente mirándome como un bicho raro y que no entenderán como soy, normal que la gente se espante ante este hecho pero por ahora no era lo que me preocupaba sino mi hermana que me seguía observando con evidente enojo, tuve que esperar unos minutos porque ella parecía meditar sus palabras como es usual, hasta que habló.

.- Santos dioses Gabrielle – Dijo al fin soltando sus palabras, no estaba contenta – Todo mundo vio ese dragón de hielo convertirse en uno de fuego, magia elemental, en nuestra escuela, cierto es que vemos eso a lo largo de nuestros estudios pero visto en la práctica es escandaloso, por un momento creí que se trataba de una alumna con talento natural, prodigiosa hasta que sentí a tu veela, a pesar de que estaba lejos, estaba segura que, quien invocó la magia fuiste tú, tu veela desbordándose, tú volviéndote imprudente, que sentí tus emociones joder, querías lastimar a tu compañera, no me lo esperaba de ti Gabrielle.

.- Pero no lo hice – Le digo alzando las manos de nuevo, tratando de restar importancia a lo que pasó – No voy a negar que quería hacerle algo pero ella insultó a nuestros padres, insultó a mi familia y eso no lo iba a permitir, si mi veela no me hubiese detenido probablemente estaría en grandes aprietos.

.- ¿Qué acabas de decir? – Dijo Fleur incrédula, estaba asombrada ante mis palabras y se acerca a dónde estoy - ¿Cuándo has empezado a hablar con tu veela interior? ¿En Hogwarts pasó eso?

.- ¿Eh? ¿Hoy? – Le digo confusa, ella se asombra - ¿Qué pasa con eso?

.- Gaby – Dijo llevando una mano a su frente – Cierto es que las veelas interiores dan señales de una elección y tratan de salir a flote la personalidad que tienes guardada de ti misma, las veelas por naturaleza somos posesivas pero tampoco son seres irracionales, cuando empiezan a hablarte, es que ya está muy definido la elección Gaby, tu veela ya ha seleccionado a Cho Chang y tú corazón también, ya no hay dudas al respecto.

.- Ya me temía que dijeras eso – Dije soltando un suspiro de lamento, sentándome cerca del estanque – Esto no hace sino confirmar lo evidente, admito que me descontrolé y que mi magia no es normal, seguramente afuera armarán tremendo jaleo por esto.

.- Gaby – Dijo Fleur calmándose esta vez, se acerca y se sienta a mi lado, yo la observo casi con ojos llorosos, ella me abraza – A estas alturas, no puedo hacer nada, es cosa entre tu veela y tú, decisión importante y además, está la situación con el clan de las veelas, nuestra madre…

.- No diremos nada de momento – Dije tajante, ella se sorprende y antes de que dijera nada, sigo hablando – Sé lo que me vas a decir pero preferiría no decir nada al respecto, solo va a empeorar la situación, estoy consternada por el hecho de haber invocado una magia que no es normal, hasta que esté lista para afrontar esto, mantendremos esto en secreto, no quiero que nadie de nuestra familia se entere ni el clan veela.

.- Está bien – Dijo Fleur que miraba el estanque vacío pero luego me vuelve a mirar seria – Tuviste suerte de que no pasara a más la situación sin embargo, puedo entrenarte a ocultar tu aura veela, enseñarte todo sobre las veelas y parte de sus secretos, haremos un entrenamiento especial, la prioridad es que sepas ocultar tu estado veela a tu antojo aunque no sé si será suficiente, nuestra madre es una veela pura e ocultar el aura frente a ella es todo un reto, parece que pasaremos un par de temporadas fuera de casa Gaby, no puedo permitir que nuestra madre vea tu aura veela.

.- Ya lo veremos en su momento – Dije sonriéndole – Por ahora, hagamos lo que esté en nuestras manos ¿vale?

No nos dijimos nada más, tan solo pensamos en lo que podría pasar después, el entrenamiento de una veela no debe de ser fácil por lo que me tenía que preparar, era evidente que no haría amigas por lo que resta de mi carrera estudiantil en Beauxbatons luego de tal exhibición de magia, los cuchicheos o rumores absurdos que vendrían después, no me iba a importar mucho. Tan solo deseo seguir adelante como me sea posible, también deberé de tener cuidado a partir de ahora, no me es posible ver a Chang pero en algún momento la veré de nuevo, no sé cuándo pero es un hecho que la veré, no tengo idea en qué condiciones pero no tendré dudas o miedo y seré sincera con ella, estaré lista para ese momento.

Fin flashback.

Eso pensaba en ese momento, luego de ese incidente toda la escuela se había enterado y me tenían respeto pero más que eso, era temor, miedo incluso los de menor grado trataban de evitarme, era claro que Colette difundió los rumores de forma absurda, a decir verdad poco me importaba lo que hiciera esa chica puesto que cada vez que nos enfrentábamos a alguna prueba siempre la superaba e incluso yo siempre le respondía de forma sarcástica o con ironía, es decir, con palabras a modo de acertijo, enredar como Cho me había enseñado, quizá para algunos sería insultar con estilo pero jamás necesité de usar majaderías, simplemente no valía la pena discutir con ella, ya que se daba cuenta y no hacía más que hacer rabietas de niños de preescolares.

Recuerdo que Madame Maxime estuvo impresionada con mis avances con la magia, era obvio que mis maestros solo tenían palabras de elogio, estaban encantados pero el temor de Maxime era que uno de los tótems se prendiera ante mi presencia y hasta ahora no lo ha hecho por alguna extraña razón pero si salgo viva de este recinto, de la sala de la pureza junto a Cho, no habrá dudas, el tótem se prenderá a mi regreso, la gran pregunta es; ¿Cómo será la ceremonia?

Obviamente estaré sujeta a las leyes de las Damas de Hogwarts y el ser guardiana de una de los tótems significaría que yo tendría que tomar el rol de hermana mayor en Beauxbatons y dicho sea de paso, buscar a una hermana pequeña como se estipula la tradición, buscar a quien pudiera guiar en el buen camino, enderezarla y hacerle ver que no todo es como se aparenta, con esas características tenía claro quién iba a ser mi hermana pequeña entre comillas, lo cual sería irónico sin embargo, no debería de estar pensando en esto porque me estoy jugando la vida, yo caí pero Chang tiene todavía pruebas por delante, tiene que llegar a mí, a dónde estoy para evitar la muerte de las dos, eso claro si no cae primero.

El salón de la pureza, ahora me doy cuenta de que no es un sitio cualquiera, yo tengo una naturaleza volátil y por eso perdí ante mi misma clon, reconozco que tengo una personalidad sádica dado que en muchas ocasiones he querido hacer daño de muchas maneras, soy cruel en distintas formas, no suelo mostrar amabilidad o piedad incluso en los duelos de magia de practica no me gustaba perder tiempo y siempre al primer disparo con mi varita bastaba para mandar a volar a una, recuerdo las caras de miedo de mis compañeras, ninguna se atrevía a desafiarme, eso me va consumiendo y Cho Chang deberá hacer frente a eso, ni siquiera con mi poder veela y la mía pude hacer frente a este ente.

.- Más te vale darte prisa Cho – Dije al cerrar poco a poco los ojos, podía sentir como algo me sujetaba ligeramente como si me estuviera postrando a una cama – Si fallas, ambas moriremos y no habrá forma de revertir eso, espero que lo entiendas pero tampoco te culparé si no lo logras, después de todo tienes tus propios demonios y en un momento dado podrías sucumbir a ellas y ambas caeremos hacia un precipicio sin fondo, inevitablemente moriremos. La reina de las veelas terminará el trabajo por nosotras, puedo hacerme una idea, es poderosa y no le costará nada detener el caos que podríamos desatar con nuestra muerte.

Solo había silencio, cerré mis ojos y parecía que entraba a un letargo, solo me quedaba esperar a Cho Chang, con la esperanza de que ambas pudiéramos salir de este lugar, solo puedo confiar en mi elección, en ella, nada más ni nada menos, la suerte está echada.

Afuera de la sala de la pureza (POV Alizee De La Fontaine)

Puedo sentirla, Gabrielle Delacour perdió ante sí misma. Es lo esperado pero tampoco significa que todo esté perdido, solo ha entrado en un estado de letargo que impide que todo rastro de mal se acerque a su cuerpo, ahora todo recae en Chang, quien es su elección, si no logra llegar a tiempo a ella, la oscuridad se apoderarán de ambas y yo tendré que liquidarlas, sellarlas y dar las malas noticias, tengo que estar aquí vigilando la puerta principal en caso de que se desate y se rompa el equilibrio.

Este sin lugar a dudas, es la prueba más grande que puede enfrentar la reina de las veelas. Nunca esperé que pasara esto o que llegara un día así, es decir ninguna de las reinas anteriores ha podido presenciar algo similar, lo más remotamente parecido fue un caso de una veela que ha hecho su elección a la edad de los veinte años, el antecedente más joven del que se tiene conocimiento sin embargo, ese fue un caso como cualquier otro, dado que es normal que la veela tenga su elección a partir de los veinte, se tiene esa constancia porque la joven apenas había cumplido esa edad y se dio cuenta de ello, solo que la matriarca de las veelas se encargó de esa situación, todo salió bien en esa ocasión, fue un caso que no pasó a mayores y que no hubo necesidad de que la reina interviniera en el asunto.

Ahora la situación es diferente, con una diferencia de edad tan evidente, Gabrielle Delacour con quince años que ha hecho su elección a los once años y estuvo ocultando esa información por un tiempo, puedo entender su miedo pero al final decidió ser valiente. Por el otro lado, Cho Chang de dieciocho años, una muchacha de origen asiático, siendo la mano derecha de una de las Damas de Hogwarts, por lo que sé, es normal que haya parejas del mismo sexo pero esta situación, no es como las anteriores.

.- Es algo más – Dije al mirar la puerta, estaba arrodillada con las manos juntas, había invocado un hechizo escudo para que nadie entrara – Si salen, serán poderosas con el tiempo, estarán en los anaqueles de la historia, será la primera vez que una Dama de Hogwarts tenga como guardiana y centinela a una muchacha de Beauxbatons, Cho Chang es la mano derecha, con ese conjunto, ¿Quién se atrevería a decirles algo?

Gabrielle Delacour no será una veela pura, de hecho es una semi veela pero con posibilidad de alcanzar su máximo poder, convertirse en una veela pura no es nada fácil sobre todo si no tiene pareja o elección pero tiene abierta esa puerta, al final ella decidirá si tomar ese camino, solo queda confiar en esas dos, que salgan bien libradas de la sala de la pureza y no va a ser fácil para Cho Chang, es su prueba más dura que enfrentará, puedo sentir su aura que está luchando sin parar, tiene que seguir así, pronto va a terminar enfrentándose a su peor temor, un enemigo poderoso que la pondrá en aprietos. Escucho ruidos provenientes de fuera, como de desesperación, había dicho que no quería interrupciones pero tampoco puedo dejar esto como si nada, si el escudo se debilita, los entes de ambas chicas podrían notar que se quiebra la defensa y aprovecharían ese golpe para salir más rápido.

.- Mierda – Dije rechinando los dientes, molesta porque no habían acatado mis órdenes, cierro por un momento mis ojos tratando de percibir quien molesta, al cabo de unos segundos puedo identificar quienes son; El padre de Gabrielle y su esposa que está intentando detenerle - ¿Por qué justo ahora?

Hacían demasiado ruido y necesito silencio pero como reina de las veelas, tengo una guardiana y me puedo comunicar telepáticamente con ella, procuro mandarle un mensaje rápido para que vaya a resolver la situación.

.- Hèléne – Dije telepáticamente, encontrándola rápidamente, está al lado de Fleur observando el gran trono, menos mal que anda cerca, ella lo capta - ¿Me puedes escuchar?

.- Dígame mi emperatriz – Dijo con esa voz suave característica de ella, siempre me ha sido leal desde el momento en que la escogí - ¿Qué desea? Mi reina.

.- Hay alboroto en la gran sala del trono – Dije sin perder más tiempo – Necesito que los saques, no puede haber ruido y no puedo abandonar el recinto, si lo hago, todo se irá a la mierda, necesito proteger el lugar, la magia de las dos chicas que están en la prueba es muy inestable y solo una reina puede contenerlas pero si hay ruido o algo perturba la prueba, las cosas saldrán mal.

.- Entendido mi reina – Dijo Elena, antes de irse me vuelve a hablar – Mi emperatriz, Fleur me pregunta que es lo que está haciendo, está demasiada preocupada por su hermana.

.- Sabes nuestras leyes – Le respondo pero lo medito un poco más, es Fleur Delacour, no solo es su hermana, también es su mentora, quien le ha enseñado a manejar el poder veela a Gabrielle, tal vez merece saber lo que podría pasar, al cabo de un par de minutos le vuelvo a responder a Elena – Solo por esta vez, dile lo que podría pasar, nada más ni nada menos, no cuentes de más Elena, solo lo esencial, Fleur ya debe intuir que esas dos son especiales, merece saber pero como te digo, no cuentes de más, solo lo que sucede y lo que podría pasar.

.- Cómo diga mi emperatriz – Dijo sin más – Me voy yendo.

La comunicación se cortó y yo vuelvo a mi tarea principal que es contener la magia de Gabrielle y Cho Chang, tengo que evitar que ocurra un desastre.

Sala del trono (POV Fleur)

De repente Elena me dice que la acompañe rápidamente a la sala del trono porque su reina le había dicho que arreglara un escándalo en dicho lugar, no entendía bien que es lo que estaba pasando pero pasábamos a toda prisa por llegar. Al llegar pude saber el motivo de tanta prisa; Mis padres estaban en el lugar, mi madre intentaba hacer entrar en razón a mi padre quien, presa de la desesperación por no saber nada de Gabrielle quería entrar a toda costa, por un lado puedo entenderlo dado que mi hermana está ahí dentro pero tampoco podíamos hacer mucho al respecto.

Cuando llegamos ante ellos dos, Elena los miraba con seriedad, mi madre y yo pudimos sentir su aura veela que está a un nivel que no puedo imaginar, mi padre estaba estupefacto, al juzgar por lo que veo de su cara, Elena ya debe de mostrar los ojos azules tan intensos característicos de una veela pura, esta comenzó a hablar con suavidad pero no quitaba la severidad.

.- La reina ha dejado claro que nadie tiene que estar aquí – Dijo suavemente Elena pero dejando entrever que está disgustada – Les voy a pedir amablemente que abandonen el recinto y que esperen en la villa como manda la ley de las veelas para estas situaciones especiales.

.- Necesito saber – Dijo mi padre casi aterrado y desesperado pero no se echa atrás - ¿Qué es lo que pasa con Gabrielle y su elección? ¿Por qué se demoran tanto?

.- No se los puedo decir – Dijo tajante Elena indicándole la salida, mirándole seriamente – Por favor, les pido amablemente que salgan de la sala del trono, no se nos está permitido estar aquí por el momento, no me hagan repetirlo.

Mi madre hizo una reverencia por respeto y se llevó a mi padre pese a que quería saber lo que sucedía, alguna explicación que pudiéramos entender la situación, Elena se voltea a verme con una sonrisa, ya había desaparecido su aura veela, parece que solo a relucir cuando la situación lo requiere, me hace ademán que la siga a algún lugar, no me dice nada pero tampoco podía perder la oportunidad, no tengo idea de a dónde quiere llevarme. Al recorrer el camino, me doy cuenta de que nos dirigimos a uno de los aposentos de la sala del trono, concretamente del lugar privado de Elena, parecía un gran cuarto decorado en azul junto a unos muebles perfectamente acomodados en su sitio y de color platino, la mano derecha de la reina me insta a sentarme a una de las sillas, yo solo hago lo que me dice y después me sirve un poco de agua poniendo sobre la mesa dos vasos, estuvimos así unos minutos hasta que ella habló.

.- Mi reina me ha dado permiso de que te hable de este asunto importante – Me dice, yo la miro sorprendida y antes de que le pudiera responder, me alza una mano indicando que debo de escucharla – Cierto es que nuestras leyes no nos permiten revelar lo que sucede en la sala de la pureza pero en este caso, tú que eres la hermana de Gabrielle Delacour y con la que tiene un lazo familiar mucho más estrecha que con sus padres por no decir que te tiene en gran confianza e estima, no veo razones para ocultarte cosas importantes, no obstante no puedo revelar demasiado así que me limitaré a contar la versión corta ¿Estás de acuerdo con eso?

.- Lo que me puedas contar está bien – Dije respondiéndole suavemente – No revelaré lo que me vayas a decir.

.- Bien, me alegro de que nos entendamos – Dijo Elena al tomar un sorbo de agua de su vaso y me mira con total seriedad – Primero, la sala de la pureza es especial, sirve como un nexo para eliminar cualquier maldad que radica en el corazón de una persona, hay distintas salas especiales, en cada villa de nuestro clan se especializa en uno, nosotras aquí, tratamos la maldad pura y la tristeza.

.- De acuerdo – Dije sin más, solo escuchaba.

.- Lo segundo – Continuaba diciendo Elena – Este no es un caso cualquiera, se ha repetido hasta el hartazgo, ya que se trata de dos personas, de una semi veela y su elección, ambas tienen mucho caos en sus corazones por lo que da lugar a una magia inestable que se debe controlar y solo ellas dos pueden aprender a dominarlo en dicha sala sin embargo, el deber de mi reina es contener esa magia mientras ellas están dentro, hacerlas pasar por una prueba en el que las dos deberán de hacer frente a cosas más allá de su lógica no es nada fácil, sin embargo existe un riesgo muy alto, uno muy peligroso en dado caso de que si fracasan, no volverán a este lugar.

.- ¿Qué? – Dije con temor, como si no entendiera eso último que acababa de decir – Qué quieres decir con qué no volverán, quedarán atrapadas o algo similar, entrarán en coma ¿Físicamente no volverán? ¿A eso te refieres?

.- No Fleur – Dijo aún más seria y sin chistar siquiera me confirma lo peor – Morirán.

.- Yo… - Dije temblando por escuchar aquella verdad que me cayó como balde de agua fría, en estos momentos toda mi frustración se iba hacia mi madre quien tuvo la idea de apelar a la reina azul pero tampoco podía culparla, se iba a hacer tarde o temprano pero estaba en negación, estaba en shock y volví a mirar a Elena – Es mentira ¿verdad? Dime que es una mentira.

.- No – Me responde sin más, sin siquiera pestañear – Evidentemente mi reina tiene un rol importante, más no te puedo revelar mucho salvo lo que te he dicho.

.- ¿Me estás diciendo que debo de esperar aquí y confiar en que ellas dos saldrán victoriosas de su prueba? – Dije mirándola con incredulidad, ella solo asentía a mi pregunta – Son jóvenes, Gabrielle y Cho, no puedo quedarme de brazos cruzados, sentada aquí como si nada, necesitan mi ayuda…

.- No puedes hacer nada, lo sabes muy bien – Dijo Elena mirándome a los ojos, con esos ojos azules, su veela salía a relucir nuevamente – En el fondo lo sabes, tu veela lo siente y tú misma, solo podemos confiar y esperar.

.- ¿Cómo puedes…? – Dije casi con la voz quebrada, ahora entendía todo, las leyes de las veelas, las elecciones y sus consecuencias de elegir a una pareja con posible conexión mágica poderosa, cuando elegí a Bill, de inmediato congeniamos, no tuvimos que pasar por gran cosa dado que nos entendíamos del uno del otro y congenió perfectamente con mi veela, lo que daba lugar a que mi magia se incrementó a unos niveles increíbles al igual que Bill pero la magia de Gabrielle y Cho es diferente respecto a la mía y la de mi pareja.

.- Fleur – Dijo Elena suspirando y mirándome con nostalgia – Es entendible que estés pasando por una situación así pero tienes que entender que esto tenía que hacerse, de otra forma, las cosas podrían haber ido a peor.

.- ¿No me puedes contar más? – Le pregunto con cierta desesperación – Por favor Elena, necesito saber los detalles.

.- Lo siento, no tengo permitido revelar de más – Dijo Elena que dejaba su vaso en la mesa, yo la miraba con impotencia – No está en mis manos, solo te he contado lo que puede pasar.

No quería creer sus palabras pero no sentía que mintiese sobre algo tan importante. La prueba de las veelas en dicha sala me costaba creerlo, desafortunadamente es real, todas las leyendas que escuché acerca del clan, las historias que me contaba mi abuela cuando era niña, sobre todo hablaba de una veela que salvaba a su ser querido dentro de un mundo lleno de peligros y de cómo se salvaban sin embargo, dicho cuento está plagado de fantasía absurda, seguramente modificaron el contenido original e eliminaron ciertas partes para no revelar de más lo que sucedió realmente, mi linaje claramente oculta muchos secretos, incluso me planteaba no saber más pero tengo que saberlo tarde o temprano, soy una semi veela y muy probablemente mis futuros hijos nazcan con ese gen, prevalecen más de parte de la madre que del padre pero ya llegará el momento de pensar en ello, por ahora solo me preocupa mi hermana que está metida en una sala junto a su elección, se están jugando el cuello literalmente, si no lo logran, no sé qué haré.

.- Solo confírmame una cosa Elena – Dije finalmente después de varios minutos de silencio, ella se voltea a verme – Si ellas fracasan y mueren, ¿Al menos podremos darle un entierro digno? ¿Podremos recuperar sus cuerpos e enterrarlas juntas?

.- Se les hará una ceremonia como es nuestra tradición y serían enterradas en el cementerio sagrado de las veelas, uno muy especial – Dijo Elena que me miraba con melancolía – El cementerio se encuentra a unas millas de aquí, solo se admiten a personas especiales que tuvieran una relación fuerte y estrecha, es decir, las enterramos junto a sus parejas, solo familiares con relación estrecha pueden pasar.

.- Eso es todo lo que quería saber – Dije tomando un poco de agua, al menos podía hacer eso pero tampoco quiero perder las esperanzas, mi hermana no es ninguna bruja debilucha ni tampoco Cho Chang a pesar de que no he entablado mucha conversación con ella sin embargo, a ambas he podido sentir su conexión y su magia, no son para nada débiles, sé que lo lograran pero tengo que asumir desde ya un posible fracaso, me tendría que preparar para darle la noticia a mis padres, que seguramente no se lo tomarán bien – Supongo que es todo lo que puedes decirme.

.- Si, es todo – Dijo Elena que se sentaba y miraba a la puerta, parecía estar vigilando la sala del trono – He tenido que poner una magia del tipo sensor, podré saber si alguien irrumpe en la sala del trono, por ahora solo podemos esperar.

No le dije nada más, solo me limité en encerrarme en mis propios pensamientos, en los momentos que pasé junto a mi hermana y sus temores acerca de su elección, nunca pensé que llegaríamos a esto sin embargo, iba a pasar tarde o temprano, sé que corren con el riesgo de morir pero en el fondo, aún conservo la esperanza, de que las volveré a ver y cuando terminen con esa prueba, volverán más fuertes que nunca, solo me queda esperarlas a su regreso.

.- Por lo que más quieran – Pensé mientras tomaba un trago de agua fría – Regresen con vida, sé que pueden lograrlo, lo que sea que esté ahí dentro, podrán hacerle frente.

Sala de la pureza (POV Cho Chang)

Hay mucha maldad en este sitio, a cada paso que voy es un obstáculo diferente y no solo me he topado con falsos entes que adoptan la apariencia de Cedric que ya es mucho para mí y a pesar de eso, con el dolor en mi corazón he tenido que tirar a diestra y siniestra hechizos a cada uno de ellos sin embargo, todavía no hallaba a Gabrielle en algún lado o por lo menos pistas de donde podría estar, no he encontrado nada salvo obstáculos como el hecho de cambiar sitios de forma brusca, formando un recuerdo, cuando aparece esto, no sabía si sería un recuerdo mío o de Gabrielle.

.- Esto no marcha – Pensé al ver el sitio nuevo que se estaba formando era Hogmeade y podía reconocer exactamente qué día era, fue la ocasión cuando fui con Harry en una cita y fue nada menos en Madame Tudipié, maldigo el día en que conocí esa tienda de té y que me pareció en su momento un sitio agradable para tener citas amorosas – De todos los recuerdos, se tenían que agarrar uno de los peores días que he tenido que vivir; la cita con Harry.

Admito que ese día estaba demasiada dolida aun por la muerte de Cedric y lo que buscaba era en cierta forma un alivio, un modo de cerrar el capítulo por la fuerza, tuve que recurrir a Harry porque pensé en ese momento que establecer una relación con el chico que sobrevivió en esa última prueba del dichoso torneo podría alejarme del recuerdo de Cedric y dicho sea de paso, liberarle a él de alguna manera, ya que quedó afectado y ese año no fue precisamente un buen año para él. Yo sabía que le gustaba incluso desde antes de ese año, podía notar que no apartaba su mirada al verme, lo encontraba adorable pero por obvias razones no podía aceptarle la invitación como su pareja invitada al baile de los campeones, como él era uno de los campeones de Hogwarts.

.- ¿Qué hubiese pasado si le aceptaba dicha invitación? – Me lo pregunto ahora que observaba el lugar – Tal vez ¿habría cambiado algo?

La verdad es que no, seguiría su curso natural y probablemente Cedric no me lo habría perdonado, de hecho cuando dijeron que podíamos invitar a parejas para el baile, mi ex novio fallecido lo tenía muy claro y yo no dudaría en aceptarle la invitación pero aun así, en el fondo sabía que no me iba a sentir cómoda, sabiendo eso, yo proseguí y quité todo rastro de dudas, no era un fingimiento pero si era una forma de alargar lo inevitable; tronar con Cedric en algún momento, era ya una decisión que tenía tomada, solo quería alargar la relación por si yo cambiaba de opinión y lograra enamorarme de él por completo en algún punto de la relación, tengo que admitir que tenía esa esperanza pero al final, fue en vano.

Sin embargo, yo lo tenía claro después de aquella conversación que tuvimos en el día de la celebración del baile, cuando me habló de establecer un futuro como pareja, más allá de un noviazgo, una decisión de ese tipo no se toma a la ligera y era evidente que Cedric pensó a largo plazo, como él ya iba de salida al año siguiente, no quería perder contacto conmigo. Claro que cuando le dije que sí, estaba muerta del cansancio pero muy consciente de que esa idea que tenía Cedric lo decía muy en serio y lo primero que pensé fue que era la oportunidad perfecta para salir de la mierda en la que estaba, que era precisamente estar en un mundo de plástico, que me podría alejar del populismo pero después de incontables veces que me pasé hablando con Gabrielle en aquellos días, me hizo darme cuenta de que estaba yendo por un camino que era como jugarle al destino, es decir, un camino jodido, todo felicidad de primeras y después pesadillas, prácticamente era jugar con fuego, tengo que admitirlo, me la jugué sin pensar lo que vendría después, no tomé en cuenta los sentimientos de Cedric que fue un error muy grande de mi parte, un costoso error, le di ilusiones de una vida en la cual yo no sería feliz, fingiría toda mi vida con él.

No era un destino que querría escoger y de alguna forma tenía que revertir la situación sin embargo, no sabía cómo. Cedric probablemente me hubiera entendido si hubiese sido honesta en aquella ocasión que hablamos pero yo era egoísta y no consideré realmente los verdaderos sentimientos de mi ex novio y viendo ahora la escena que está frente a mis ojos, tenía más que claro lo que iba a pasar, en cualquier rato aparecería yo con Harry, empezaríamos a hablar dentro de ese endemoniado sitio empalagoso y discutiríamos lo que pasó en la última fase del torneo de los tres magos, no fue una experiencia agradable que pueda recordar, solo pensé en mí misma de nuevo, cometiendo el mismo error de excluir los sentimientos de Harry como hice con mi ex novio, lo que me hace preguntarme si podía haber cambiado algo pero de nada me sirve ahora porque mi pensamiento está en Gabrielle Delacour sin embargo eso no evita que pueda tener un pesar de esta situación.

Tuve que esperar por unos minutos hasta que aparecí yo con Harry, comencé a seguirlos e entrar en esa tienda de té y como no en el mismo sitio de siempre donde me sentaba yo con Cedric, Harry no sabía que ese era mi lugar favorito, menos mal porque seguramente habría pensado que trataba de reemplazar a mi ex novio con él. Al verlos sentarse me acerqué para escuchar nuevamente la conversación, me sabía de memoria lo que habíamos hablado ese día e ocurría tal cual lo recordaba, íbamos aumentando el tono de voz aunque no a un nivel escandaloso pero podía notar las miradas de tensión de la gente que nos observaban con cara de asombro, no les culpaba, en el fondo pensaron que no estábamos del todo bien. El motivo de la discusión era que yo quería saber lo que pasó en la última prueba, quería saber las últimas palabras de Cedric y así de alguna forma librarme de las ataduras que me unen a mi fallecido ex novio sin embargo, la cosa no salió tan bien, tuvimos que cambiar de conversación y tratar de tener un dialogo más acorde a la situación, no era la mejor forma de iniciar una relación de amistad, de hecho, no era lo que se tenía pensado, solo iniciar una relación sin siquiera empezar por lo básico que es conocerse del uno del otro, uno de los errores que cometí con él porque después de esa discusión ambos pensábamos que iniciar una relación era lo mejor.

Harry empezó a hablar de poder salir juntos sin tener que recurrir a las memorias del pasado, un nuevo comienzo, en mi ingenuidad pensé que será como comenzar de nuevo y le había dicho que sí, sin embargo, los días que siguieron no fueron realmente del agrado de los dos, teníamos tensión salvo que algunos días pudimos pasarlo medianamente bien entre comillas, no nos íbamos de la mano o algo parecido pero si alguno que otro beso nos dábamos y platicábamos pero la mayoría de las veces eran charlas insípidas que no llevaban a ninguna parte, conversaciones banales, de temas muy secos y ninguno de los dos se molestaba en preguntar cosas personales, otro error que no debí de haber cometido, no estaba orgullosa pero también recuerdo que incluso en ese año tratamos de intimar un poco entre comillas, surgió la idea de hacer algo más allá de un simple beso.

.- En realidad fue idea mía el hecho de intimar, se me estaban acabando las opciones y no quería tronar con él tan pronto, si o si quería tener una relación que significase superación y que podía ser feliz fuera el método que fuera – Dije al ver que el sitio se trasladaba a otro recuerdo, la torre de astronomía, recuerdo que los fines de semana nadie ocupaba dicho lugar – Si, no fue la mejor de las decisiones que he tomado pero al menos sirvió para mantenernos un tiempo más juntos en la relación y tenía más opciones de cómo mejorar sin tener que cagarla a lo grande, claro, la cosa ya pintaba jodido con el solo hecho de proponer un poco de intimidad entre los dos, no fue una buena idea ahora que lo pienso, fue una mala decisión que sin embargo, sirvió para algo, tuvo su propósito pero no evitó que tronásemos después desgraciadamente, eso evidentemente iba a pasar tarde o temprano, ambos sabíamos que la relación no estaba funcionando y que el camino que estábamos tomando iba a caer a un precipicio sin posibilidad de arreglar algo o mejorar, lo que sí pasó después de ese rompimiento fue que quedamos en buenos términos, sin ningún tipo de rencor, ambos sabíamos que nuestro noviazgo estaba para la basura y que no nacería un amor genuino, no ganábamos nada engañándonos a nosotros mismos como pareja.

El recuerdo se formaba, yo me veía a mí misma con Harry, los dos estábamos nerviosos ya que ni siquiera yo me atrevía a hacer esas cosas con Cedric pese a que hablamos de intimar en ocasiones o que lo hiciéramos de manera esporádica, es decir sin sexo solo lo que se conoce como tocamiento suave o fajes como es conocido coloquialmente, es decir masturbarse del uno del otro pero jamás llegamos a hacer eso porque yo me sentía nerviosa y presionada con ese hecho, Cedric fue demasiado considerado y nunca me propuso que lo hiciéramos de hecho, la opción estaba sobre la mesa, decidía cómo podíamos intimar, es decir que yo tenía la palabra final, así que nunca le dije que intimáramos de esa forma y la idea de hacerlo se descartó por completo, nunca volvimos a hablar de eso salvo por esa noche del baile de los campeones, no explícitamente pero quedaba implícito que Cedric quería intimar en un futuro cercano, cuando yo cumpliese la mayoría de edad o cuando me sintiera en verdad lista, le tenía que dar mérito por eso, él pensaba por los dos y construía el futuro que buscaba pero no lo haría si no estuviera yo segura, lo dejaba en claro más de una ocasión, incluso dijo que yo también debería de haberle dicho lo que pensaba y como quería mi propio futuro, mi propio camino de manera independiente y que juntos es una forma de felicidad más pero en ese momento no lo entendía, no lo tenía claro, lo único que quería era escapar de toda esa mierda, me quería sentir libre.

Volviendo al recuerdo que estaba frente a mis ojos, le había dicho a Harry en esa ocasión, la idea tan tonta que le propuse, era un intento desesperado por recuperar una relación estable e olvidar rápidamente a Cedric, es decir construir lo que mi ex novio quiso conmigo y yo intenté hacer lo mismo con Harry, creo que el intuyó lo que pasaba pero no quiso decir nada al respecto hasta ese momento cuando estábamos a punto de intimar, obviamente no iba a pasar a más que eso lo teníamos muy claro, quería que sintiera cómodo y la mínima incomodidad pararíamos. La escena que estaba frente a mis ojos ocurría de esta forma; estaba yo quitándome la blusa, quedándome solo con mis sujetadores, la falda todavía la traía puesta y Harry me observaba con una sonrisa casi tímida, nos acercábamos a darnos unos besos que no eran malos, a mi modo de ver tiraba de regular a decente poco más, vale decir que en su defensa Harry hasta ese momento no había tenido alguna relación, mucho menos con esta clase de experiencias por lo que es entendible su reacción tímida pero para mí también era mi primera vez realizando este tipo de cosas, la diferencia es que yo estaba más consciente acerca de dichos temas y de hecho yo fui su primera novia, lo que me halagaba ese hecho pero las manos del muchacho azabache solo quedaban en mis caderas y en ese momento moví una de sus manos a mi seno derecho instándole a que me tocase mientras que mi mano se escabullía a su entrepierna, tocándole por encima de su pantalón, ya que yo buscaba un contacto más directo, él se sorprendió como es de esperar pero no se echó atrás y no se atrevió a nada más, se dejó querer y no parecía incomodarle, al contrario parecía encantado, solo hicimos eso por un largo rato, tocándonos del uno del otro mientras nos besábamos hasta que paramos, el chico se alejó un poco y se dio la vuelta para no verme en sujetadores, dándome la oportunidad de volverme a poner la blusa, comprendí en ese momento que fue una pésima idea pero estaba claro que había cierta química sexual, muy poca pero al fin y al cabo había química, no había que negarlo sin embargo, éramos unos adolescentes jóvenes, estaba muy claro que no era el momento ni el lugar para hacer ese tipo de cosas, obvio que la experiencia nos agradó a los dos, a secas desgraciadamente pero al fin y al cabo fue una experiencia que sirvió para poder mantener una relación por más tiempo, nunca más volvimos a intimar de esa forma dado que le había dicho que si quería volver a repetir, qué fuera el que diera el primer paso, yo estaba dispuesta pero necesitaba que Harry estuviera listo y que quedara fuera su timidez porque esta experiencia fue así, tímido de su parte, que no es malo y de hecho me agradó que fuera así, no fue brusco, al contrario fue suave pero no me sentía bien obligándole a hacer esas cosas pese a que él dio su consentimiento, el muchacho se lo tomó bien e hizo un cumplido diciendo que soy hermosa sin importar lo demás, algo que me alegró en ese momento. De repente escucho una voz a mis espaldas, la reconocí y era la falsa Cho, yo la miré con mala hostia.

.- Cho Chang – Dijo la ente falsa observando la escena y de repente se pausaba en el momento en que íbamos a salir de la torre – Estabas demasiada desesperada por alejar tus pensamientos de Cedric e usaste a Potter para tu propósito, debería darte vergüenza, tendrán la misma edad en esa ocasión que intimaron pero no quita que Harry en ese momento todavía conservaba cierta inocencia a cuanto temas sexuales por increíble que parezca pero tú, no eras tan inocente querida, sabías muy bien lo que estabas haciendo; Tratar de conseguir lo mismo que Cedric, una relación estable, donde pudieras esconder tus sentimientos, tu manera de ser y que el circulo populacho no sospechara nada, volver a lo que eras antes, como siempre pensando en ti misma antes de considerar los sentimientos o pensamientos de los demás, siempre fuiste una maldita perra egoísta, lo tienes que admitir Chang.

.- Fue de acuerdo mutuo déjame decirte maldita desgraciada – Dije levantando la varita esta vez, mirándola con odio – Le di la oportunidad a Harry de rechazar la propuesta, no quería hacerlo sin su consentimiento, el hacerlo me habría convertido en algo terrible y no me lo habría perdonado, Harry no tuvo inconvenientes en querer participar en una experiencia nueva, luego de toda la mierda que Umbridge hacía en ese año, ella estaba siendo una maldita perra metiendo manos por todas partes, costó encontrar un sitio donde no hubiese tanta gente y no se podía confiar en nadie e incluso antes de proseguir se lo volví a preguntar cientos de veces mientras íbamos camino a la torre de astronomía, quería estar segura de su decisión, si él dudaba aunque fuera un poquito, no lo habría hecho.

.- Por favor esas son excusas baratas – Dijo la ente echándose a reír, me mira con una sonrisa descarada – Es claramente una mentira descarada y lo sabes en el fondo, sabías que ese muchacho no rechazaría la oportunidad de estar contigo pero él no sabía que iban a hacer exactamente o al menos no tenía la idea muy clara, le dijiste que harían algo muy diferente, algo íntimo.

.- Claro que Harry sabía exactamente lo que íbamos a hacer – Dije furiosa, me estaba cabreando ver a la falsa Cho tergiversar mis recuerdos – Le expliqué que, lo que íbamos a hacer era algo íntimo y que necesitábamos un lugar privado, él estaba en todo su derecho de rechazar la idea, se lo dije no una, más de dos veces le dije que si estaba seguro de querer tener esa clase de experiencia porque precisamente era una nueva experiencia para él, yo fui su primera novia, no me siento orgullosa de algunas decisiones que tomé en mi relación con él pero me alegro de haber sido su primera novia, su primer acercamiento a esa clase de experiencia de índole sexual, gracias a mí, él se enteró de más cosas que pudo investigar por su cuenta.

.- Es hombre querida, no se te olvide ese factor importante, cierto que fuiste su primera novia y cómo tal, no debías de ofrecerle eso en una primera instancia, no te hace quedar en una buena posición, no consideraste lo que él pensaba realmente en ese momento – Dijo la ente que se sentaba en una mesa cercana viendo la escena que estaba pausada en donde Harry y yo nos quedábamos mirando a la salida de la torre, en verdad no sabía cómo era el funcionamiento de la sala de la pureza, es un martirio estar aquí – Harry no podía dejar pasar la oportunidad de fraternizar contigo, de entablar una relación más allá de una amistad, él quería comprenderte e ayudarte a superar a Cedric fuera el método que fuera y tu pequeña propuesta era la oportunidad perfecta para dejar atrás todo e olvidar la mierda por lo que estaban pasando, por lo tanto, simplemente te dijo que sí a todo como si de un contrato se tratase ya sabes, de esos que firmas sin leer las letras chiquitas pese a que no se veía tan seguro, tú misma le podías haberle dicho al muchacho que si estaba listo, que te lo dijera sin dudar, tal como hizo Cedric contigo pero tú, lo presionaste de alguna forma, los hombres suelen ser tontos y ciegos en ese aspecto, hacen lo que sea para poder mantener una relación sin importar si es de índole sexual o no, tratan por todos los medios satisfacer a su pareja, Harry como dije, él buscaba comprenderte solo que, no esperaba que tú fueras tan aventada, tú ya sabías de esos temas gracias a la familia que tuviste quienes tuvieron el honor de hablarte de la sexualidad a edad temprana, cachaste a tu tía teniendo relaciones con un hombre y te fuiste sin más, ella se dio cuenta, ya habías perdido tu inocencia Cho Chang y Harry aún conservaba la suya, él vivía el mundo de la magia todavía, cierto que habían clases de sexualidad y biología sin embargo, era solo lo básico, clases que cualquier humano en el mundo toma.

.- No vamos a hablar de quien era más mojigato o mojigata respecto a esos temas, hija de perra – Dije furiosa apuntando con mi varita a la ente falsa – No vas a tergiversar mis recuerdos, admito que no tuve la mejor de las ideas debido a mi estado vulnerable y que buscaba alejarme del hoyo en el que estaba sin embargo, fue de acuerdo mutuo y ambos coincidimos que no era lo mejor ya que al final de ese año tronamos porque la relación no iba para más pero que jamás se arrepintió de esa experiencia, era lo único que me preocupaba, fue un alivio escuchar eso de él, ahora, si te vas a pasar todo el tiempo jodiendo con mis recuerdos, podrías esforzarte un poco más, esto no me afecta en lo absoluto maldita loca que gusta de usar este tipo de recursos baratos para torturar.

.- Eres terca para no darte cuenta de que eres tú misma quien tergiversa su propia realidad – Dijo la ente que se levantaba dispuesta a darme pelea – Recuerda que estás en un mundo que te pone a prueba y si fallas, morirás junto a Gabrielle, yo soy tu demonio que está en tu interior, la única a quien no podrás engañar jamás, yo soy tú, Cho Chang, a la que evitas siempre y que de alguna forma tengo tu magia sellada pregúntate por qué tus hechizos no son tan poderosos pese a que tienes grandes conocimientos Chang, porque te carcome el alma estas clases de decisiones, sabías muy bien lo que hacías Cho, usaste a aquellas personas solo para tu propia conveniencia, dicho sea de paso, hiciste daño a personas inocentes en el pasado con tu magia inestable, solo cuando entraste a Hogwarts lo pudiste controlar.

.- Suficiente – Dije apuntando mi varita hacia ella pero lo que me dijo me deja pensando ¿será verdad lo que dice? – No voy a escucharte, venga maldita perra, vamos a batirnos en duelo aquí y ahora, terminaremos esto.

La ente solo se reía y me observaba, ella no sacaba una varita sino que usaba su mano para tirarme rayos de hechizos de color rojo fuerte, yo los esquivaba por los pelos y le regresaba los ataques pero mi magia no surtía efecto, ella era más rápida que yo, como si adivinara para donde iba a tirar o qué tipo de hechizo usaría contra ella, no entendía que es lo que estaba pasando y el escenario nuevamente cambiaba como si estuvieran pasando página rápidamente, no podía ver qué recuerdos eran, todo estaba muy borroso y seguía batiéndome en duelo con la maldita ente.

.- ¿Por qué no le puedo dar? – Pensé al esquivar uno de sus hechizos que casi me roza la mejilla derecha - ¿Será verdad que ella es como dice? ¿Qué ella forma parte de mí?

Tendría sentido lo que dijo antes de que nos lanzáramos hechizos de la una de la otra, todos los recuerdos, la manera en que los invoca a conveniencia, los recuerdos de mis padres, los recuerdos de Cedric y su posible reacción, podría tener alguna conexión, probablemente se refiera al miedo pero yo, lo que quería era alejarme, no enfrentarlo, no tenía miedo pero tampoco quería enfrentar ese tipo de situaciones incómodas. De repente uno de sus hechizos me da de lleno en el pecho, haciendo que me mande a volar e estrellarme a una pared que de repente apareció, me dolió horrible y el recuerdo que se formó ahora era de cuando estaba llorando por la muerte de Cedric, en la sala común, sin que nadie me consolara, me dejaban sola y el recuerdo cambia bruscamente ahora a mi infancia recibiendo castigo de mis padres por querer jugar afuera con una niña con la que yo quería entablar una amistad y debido a eso, nos mudamos de casa, querían aislarme, luego otro recuerdo más, uno donde discutía con mi ex mejor amiga; Marietta Edgecombe que me decía que no debía de haberla obligado a asistir a las reuniones del ED, como me arrepiento de haberlo hecho, ella que traicionó miserablemente al grupo, dominada por el miedo, le reclamé y ella simplemente se fue dolida, quería que la apoyara, quería que la defendiera ante Hermione, no lo iba a hacer, yo no soporto a traidores.

Otro hechizo me da de lleno, no puedo defenderme y cada recuerdo es más duro que la anterior, mi madre ignorándome, Fleur diciendo que no soy digna de Gabrielle, mi padre obligándome a cosas que no quería hacer, estos recuerdos no forman parte de mí, sino de mis miedos personales, los miedos que he estado ocultando pero aun así sigo recibiendo los hechizos de la ente que cada vez son más fuertes y dejo caer mi varita luego de recibir otra y caer al suelo, quebrada, cansada, demasiada dolida mientras que escucho reír a la ente, mi cuerpo estaba siendo destrozado.

.- ¿Lo ves querida? – Dijo echándose a reír y me miraba con descaro – No puedes siquiera enfrentarme, tu querida Gabrielle se enfrentó a su misma ente, entre las dos, la más sádica es ella, espera, se me acaba de ocurrir una idea…

.- N-no – Dije apenas audible, sabiendo que es lo que iba a hacer ella – No te atrevas maldita.

.- Vamos, será divertido – Dijo dándose la vuelta e usando su mano se convertía en Gabrielle Delacour, yo la miraba con furia - ¿Qué te parece? Adopto la forma de tu querida y futura pareja aunque me parece que dicho futuro ya no se dará.

.- Eres una rata miserable – Dije tratando de levantarme, la seguía mirando con rabia – Tú no eres ella.

.- Qué poco conoces la personalidad verdadera de Gabrielle Delacour – Dijo acercándose a donde estaba, me jalaba el cabello haciendo que la mirase directamente a sus ojos, apenas podía moverme, escupía sangre por mi boca – De hecho, se parecen en un aspecto, pueden sacar a relucir su personalidad sádica pero entre las dos, ella es peor, con su poder veela y tú que eres su elección, la vuelves más poderosa, si tú mueres, ella también lo hará, lo sabes muy bien Cho Chang, están unidas.

.- C-cállate – Dije tratando de zafarme de su agarre, me agarraba de mi cabello y no podía agarrar mi varita pero ella me lanza contra la pared de nuevo, haciendo que sangrara aún más por la boca, estaba sufriendo demasiado, creo que me rompí varias costillas – Maldición.

.- Patética – Dijo moviéndose hacía mí, contoneando sus caderas, riéndose por lo bajo – Esperaba más de ti Cho Chang, al fin y al cabo, somos la misma entidad pero yo tengo más dominio, sé controlar mejor la magia que tú, no te preocupes, todo acabará pronto, te reunirás con tu pequeña Gabrielle en el más allá.

Ella apuntaba con su mano y parecía brillar de color verde, podía reconocer el hechizo que lanzaría, estaba consciente de que eso podría acabar con mi vida, estaba malherida, apenas podía moverme y en lo único que podía pensar era en Gabrielle, incluso después de no vernos por un tiempo, cuando la volví a ver quedé sorprendida por su aspecto, su manera de hablar, su inteligencia pero también sabía que ocultaba su personalidad o parte de ella, creo que ambas sabíamos que las dos ocultábamos una personalidad que no queríamos mostrar por temor o por orgullo. Realmente estaba a punto de morir, estaba impotente porque no podía seguir levantándome, consciente de que el fracaso significaría la muerte de ambas, empiezo a recordar algo, una conversación con Luna Lovegood, antes de irme con Gabrielle al bosque de las veelas, hablé con ella.

Flashback, La Madriguera, antes de que Cho se fuera con Gabrielle.

Me estaba preparando mis maletas luego de que Gaby me dijo que ya era oficial la visita al bosque, primero tendría que pasar por su casa para conocer a su madre, algo que realmente no esperé pero iba a pasar tarde o temprano, tenía todavía mis dudas sin embargo, ya está todo hecho, no había manera de suspender o echarse atrás. Escucho que alguien abre la puerta y es Luna Lovegood que me venía a visitar, yo la observo con una sonrisa, ella hace el mismo gesto pero luego se pone seria.

.- Supe que te irás con Gabrielle a Francia – Dijo Luna que se sentaba en la cama, observándome con esa cara seria - ¿Cómo te sientes respecto a eso?

.- No te puedo mentir, estoy nerviosa – Dije sin más, acomodando mis cosas en la maleta – En un principio, no sabía de la edad verdadera de Gabrielle, eso me sorprendió mucho, tú lo sabías ¿no?

.- Cho – Dijo Luna que se acercaba a mí, mirándome fijamente a los ojos, yo me asombro ante eso, solo espero lo que me va a decir – La edad ya no importa mucho a estas alturas, Gabrielle y tú, tienen una conexión, como dama de Hogwarts, mi deber es decirte las cosas, tú tienes un lado oscuro y ella también posee uno, lo sabes ¿no?

.- Has sido mi mejor amiga – Dije mirándola sin un ápice de duda – Sabes todo de mí, me has tomado como tu mano derecha…

.- Cho – Dijo seria, yo comprendí, no podía irme de rodeos – Al punto, entre los Ravenclaw's conocemos nuestras propias tácticas, no hay efecto alguno cuando tratas de enredar a un Ravenclaw.

.- Si, sé que ella me oculta su verdadera personalidad – Dije sin rodeos – Pero no le agobio con eso, dejaré que ella me lo diga.

.- Ella sabe que tú también ocultas tu verdadera naturaleza Cho – Dijo Luna llevando una mano a mi mejilla derecha – Te he visto, te he estudiado, he visto cómo has usado a Cedric incluso a Harry, te has ocultado en el círculo popular, incluso…

.- Si, incluso he lastimado a gente – Dije completando aquella frase – No estoy orgullosa de eso, me arrepiento de mis actos y si pudiera cambiar algo…

.- No es eso de lo que te debes de preocupar Cho, lo que ya pasó, ya ha pasado, no lo puedes cambiar, eso lo sabes de sobra – Dijo Luna con una sonrisa pero luego se pone seria – Te conozco desde que entré a Hogwarts, cuando conociste a Cedric fue un día feliz para ti, tus acciones peligrosas disminuyeron, no tuviste necesidad, con Diggory que mantenía tu sonrisa sin embargo no le amabas con total sinceridad, querías escapar y te entiendo Cho pero también debes de saber que no puedes seguir escapando de tu realidad, si tú estás dispuesta a tener a Gabrielle de tu lado y puedo notar que tu amor por ella crece mucho más pero algo te impide concretar ese amor, es joven, es tres años menor que tú, es verdad pero no por eso no puedes amarla, tanto como tú como ella, deben de ser sinceras.

.- ¿Qué puedo hacer? – Le pregunto seria, mirándola, no como una amiga, sino como la dama de Hogwarts que es, yo soy su mano derecha, su guardiana.

.- Ser sincera contigo misma Cho – Dijo Luna con una sonrisa melancólica, yo me asombro ante lo que me dice – Sabes a lo que me refiero, no creas que no me he enterado, sé muchas cosas de ti, sé de tu relación fallida con Harry y lo que has hecho pero Cho, eso ya es pasado, ya no es algo por lo que deberías de concentrarte, céntrate en ti misma, tú corazón ha escogido a una persona muy bella, yo puedo ver amor genuino, amor verdadero y Gabrielle te ha elegido, están unidas, yo puedo sentir esa magia poderosa pero les impide algo, una maldad que no duerme, una maldad que crece en sus corazones, yo como Dama de Hogwarts, mi deber es proteger a los demás, velo también la seguridad de mis guardianas y centinelas, tú y Draco, ahora forman parte de mí, queda en tus manos Cho, este es tu camino, estaré esperando tu regreso.

.- No entiendo Luna – Dije confusa pero ella pone sus dos manos en mis mejillas y junta su frente con la mía.

.- Querida Cho Chang – Dijo con una sonrisa – Eres mi guardiana y las guardianas también tienen su feo camino a seguir, están sujetas a eso, lo entenderás cuando llegue el momento y estarás por tu cuenta, buena suerte Cho.

Ella me abraza y yo le devuelvo el gesto, no entendía a qué se refería pero sus palabras tienen un gran peso, palabras que ocultaban sabiduría y que probablemente tienen un gran significado, no podía esperar a ver qué pasaba, tengo que enfrentar la situación.

Fin Flashback.

Ahora lo entiendo, este es mi camino, las palabras de la ente, todo este mundo de mierda, el mundo de Gaby, ambas ocultamos una naturaleza destructiva, yo suelo operar desde las sombras, con paciencia y Gabrielle es más directa, ahora lo entendía todo, esta sala, la magia que emana viene de nosotras dos juntas, cada recuerdo que se junta, cada recuerdo que tergiversamos, cada enfrentamiento, cada obstáculo o dolor de familiares que no nos aceptaban como Cedric enojado porque le abandoné o porque no fui sincera con él, fue un reflejo de lo que podría haber pasado, todo esto este sufrimiento se debía a que yo escapaba de mi responsabilidad, del miedo de enfrentar cosas grandes, debía de dejar atrás todo de alguna forma.

Observaba a la ente maligna que tenía la apariencia de Gabrielle aun con su mano brillando verde, yo solo podía sonreír, a duras penas pude pararme pero la miré con descaro, ella se sorprende.

.- ¿A qué viene esa sonrisa estúpida? – Escupió mirándome con rabia – ¿Es que el golpe te ha hecho perder la cordura?

.- Solo he recordado algo muy importante – Dije parándome, con una mano trato de sobarme el hombro izquierdo causado por el dolor provocado por la ente que me levantaba como muñeca de trapo, ella simplemente se queda confusa esperando mi respuesta – Ahora puedo entender el rompecabezas de este sitio tan oscuro, no es una gran sala, es un mundo formado por mis recuerdos y con los de Gaby, ambas que estamos unidas, si yo muero, ella también, si ella muere yo seré un cisne de por vida, moriré de tristeza.

.- Bah, idioteces sin sentido lo que dices – Dijo la falsa Gabrielle riéndose – Estás a punto de morir ¿Últimas palabras?

.- No moriré – Dije mirándola fijamente – Hoy no ni mañana, tengo que enfrentarte, Gabrielle seguramente ha caído y su poder ha pasado a ti, has tomado mi poder, quieres salir de esta sala y hacer un completo caos pero te espera alguien peor que nosotras, una reina que no dudará en despedazarte, eso sí me vences ente de mierda.

.- Ya me ocuparé de esa reina, no me preocupa demasiado – Dijo sonriendo aún más con descaro – Con tu poder y el de Gabrielle, será suficiente, nunca he sentido este poder tan grande, ahora, vas a morir.

.- Inténtalo perra – La reté, ella se sorprende – No podrás dañarme con ese hechizo, finalmente puedo dejar atrás todo lo que he tenido que pasar.

Detrás de ella podía observar a Cedric, mirándome con una sonrisa, la misma sonrisa con el cual me conoció en su momento, cuando se acercó para platicar, ahora él podía descansar en paz, me instaba a continuar adelante, a buscar a Gabrielle Delacour, el cierra sus ojos y se da la vuelta, le estoy dejando ir, mi corazón siente alivio, ya no necesito de esas ataduras pero aún quedan remanentes; mis padres, eso será cuando los confronte fuera de este lugar, ya no me dejaré majadear por ellos, es tiempo de que deje en claro las cosas pero antes, quiero recuperar a mi amada, no voy a permitir que esa desgraciada absorba por completo a Gabrielle Delacour.

.- ¿A qué estás esperando maldita desgraciada? – Dije aún más con descaro – Mátame con tu hechizo pero te aseguro que no podrás dañarme, ya no más.

.- Tú lo pediste – Dijo apuntándome con su mano derecha, el halo de luz verde ya se hacía notar más pero también noté que el color iba disminuyendo, ella dijo el nombre del hechizo y yo la recibí en el pecho estrellándome estrepitosamente contra la pared, ella se reía descaradamente – Por fin libre, con tu poder y el de Gabrielle, ahora me encargaré de cierta reina para luego ir…

Ella se queda pasmada, ya que yo, me levantaba como podía, al hacerlo, la miraba con una sonrisa, ella se sorprendió demasiado e intentaba convocar el hechizo nuevamente, dándome de lleno de nuevo pero el hechizo se iba volviendo cada vez más débil, la falsa Gabrielle estaba demasiada cabreada que no entendía bien lo que pasaba frente a sus ojos.

.- ¿Por qué no te has muerto maldita? – Dijo con rabia, mirándome con impotencia, que no entendía el porqué de sus hechizos no funcionaban - ¿Qué pasa?

.- Veo que no lo entiendes, permíteme explicártelo ente de mierda – Dije mirándola, apenas podía quedar de pie pero no sentía dolor por extraño que parezca – Tus hechizos no surten efecto porque he asumido mi responsabilidad, me he podido perdonarme a mí misma, he aceptado como soy y he aceptado a Gaby con todo mi corazón, he dejado ir a Cedric por tanto ya no tengo esa atadura, no lo amé pero reconozco que le he querido, no como pareja pero reconozco lo que ha hecho por mí, él me hizo sentir viva sin embargo, Gabrielle ha hecho que me levante y que no me rinda, ella me hace sentir aún más viva, no solo ella, también mi dama, la "sabia oscura", mi mejor amiga, quien me ha aceptado como soy, estoy viva, es lo que importa, no me iré de aquí sola, me iré con Gabrielle, la quiero, la amo con mi corazón, tus hechizos no surtirán efecto conmigo por más que lo lances contra mí.

.- Cállate y muérete de una vez – Me espetó con total furia lanzándome su hechizo que poco a poco iba perdiendo efecto, ya no me dolía demasiado incluso ya ni siquiera me podía aventar tan solo lo recibía como si fuera un almohadazo, algo mínimo – Esto no puede estar pasando, se supone que tus recuerdos, que tus acciones egoístas te tendrían que haberte consumido por completo.

.- La verdad es que estabas a punto de hacerlo con tantos recuerdos que metías desgraciada, estuve a nada de ser consumida por mis propios recuerdos – Dije mirándola también con furia pero a la vez con tristeza – Es verdad que he sido una maldita egoísta, no lo voy a negar y no tengo excusa para ello sin embargo, al aceptar mis errores, ya no me afecta tanto, tengo que aprender a vivir con eso, lo pasado es lo pasado, lo que importa es el presente, el ahora.

.- No – Dijo la falsa Gabrielle que se arrodillaba, ella todavía intentaba lanzarme hechizos pero ya nada le funcionaba – No habrías llegado lejos sin mí, si te deshaces de mí, no tendrás a Gabrielle, ya no podrás ocultarte, me necesitas.

.- Eso es un triste intento por retenerme – Dije soltando unas risillas pero luego le sonrío – No te preocupes, ya lo has dicho, tú eres yo, eras la maldad que atormentaba mi corazón, ya eres libre al igual que yo, ya no te necesito, tus poderes han regresado a mí, donde pertenecen, ve en paz, no te voy a negar puesto que me has dejado marcada, sin querer me apoyé en ti para seguir adelante pero ya no más, no necesito usar más de esas triquiñuelas que solía usar para ocultar mi naturaleza.

Ella se iba haciendo polvo poco a poco, derramaba lágrimas al verme, yo estaba toda malherida, maltrecha como nunca antes había estado, tan solo me pude despedirme de ella levantando una mano en señal de despedida, no había necesidad de mediar más palabras. Me arrodillo porque mi cuerpo ya no daba para más, estaba demasiada débil como para poder caminar siquiera un poco, el lugar se estaba transformando de nuevo pero esta vez no sería un recuerdo sino un lugar parecido a un templo, el color del lugar era zafiro fuerte, los pilares estaban decorados con insignias cuya imagen eran de dos cisnes uniéndose, fuego zafiro en las antorchas pero sobre todo al centro estaba unas escaleras que daban a un especie de cama o tumba por decirlo de alguna forma. Como pude me levanté y caminé pero me dolía horrible el cuerpo, al llegar a las escaleras, noté que era un camino un poquito largo pero no dejé que eso me entorpeciera, proseguí despacio, subiendo poco a poco hasta llegar al lugar en ella vi a alguien acostada y al frente estaba su varita que decoraba la tumba, la reconocí a instante, me acerqué como pude.

.- Gabrielle – Dije al verla acostada, ella estaba vestida con un vestido largo, su cabello estaba suelto y sus manos estaban entrelazadas entre sí, durmiendo, no veía signos de lucha o de daño, la reina me había dicho que ella caería hiciera lo que hiciera, me acerco un poco más, con mi mano le toco su frente, notando que su temperatura estaba baja – Está fría, Gabrielle.

No sabía qué hacer, había llegado a ella, a un sitio hermoso pero también solitario, no podía pensar con claridad, estaba demasiada cansada y malherida, la falsa Gabrielle me dio una fea paliza que es casi un milagro que esté viva, de no ser por el recuerdo de Luna y porque tenía en mi mente y corazón a Gaby, no lo habría logrado, habría muerto en ese momento pero ahora estoy aquí frente a ella.

.- Tal vez – Dije mirando su hermoso rostro que reposaba, aun no despertaba pero se me había ocurrido una idea – Solo lo haré una vez pero necesito que despiertes Gaby, necesito que salgamos las dos juntas de este lugar, sino estaremos aquí por el resto de nuestras vidas.

La verdad es que no me gustan los clichés de los cuentos de siempre, de esas que decían que si despertabas a tu damisela en apuros con un beso, se arreglaba todo pero no me quedaba otra opción, tuve que hacerlo. Me acerco a sus labios, me detengo por unos instantes para observar su rostro tan serena, inmóvil, no tengo idea de qué habrá visto, si un recuerdo mío o los de ella, hay cosas que no sé de su vida, sus relaciones con sus otros familiares o como lleva realmente su vida en Beauxbatons, sin más demoras, le doy un beso suave en sus labios por unos segundos de más y me alejo, veo que no ha pasado nada, tal vez debía de darle tiempo.

.- Bueno, tenía que intentarlo – Dije al mirarla una vez más – Tal vez llegué tarde.

Observo el sitio, este debe de ser un lugar alejado de la sala de la pureza o seguía estando en el mismo sitio, en verdad es una sala especial, no podía imaginar cuantas tuvieron que pasar por esto, cuantas murieron o quienes sobrevivieron a esta prueba dura, estaba muy cansada como para poder irme pero me tenía que levantar y buscar la salida, me llevaría el cuerpo de Gaby. Luego de unos minutos me levanté, tenía un dolor horrible en todo mi cuerpo, quería voltear a ver a Gabrielle cuando de repente noto que algo agarra mi mano, volteo a ver y era Gabrielle quien me observaba.

.- Te ves muy jodida Cho – Dijo Gabrielle con suavidad, observándome con esos ojos casi llorosos, viéndome en el estado tan lamentable en el que estaba – Imagino que te has enfrentado a tu demonio y a la mía, yo caí en el duelo.

.- Gaby – Dije volviéndome a sentar, mi cuerpo se quejaba pero no me importaba, llevaba mis dos manos a sus mejillas – Estás bien, es lo bueno y no importa, la he vencido, me ha costado pero pude vencerla.

.- Pero casi te mata – Dijo Gabrielle de forma seria – Mírate, estás muy malherida, apenas puedes mantenerte de pie.

.- Pero lo logré Gaby – Dije juntando mi frente con la suya, no podía evitar lagrimear un poco – Lo logré, no fue fácil.

.- Lo sé – Dijo Gabrielle que llevaba sus manos a mis mejillas pero se pone seria – Observé todo, vi mis recuerdos y los tuyos ¿En verdad usaste a Cedric y a Harry?

.- No me siento orgullosa de eso – Dije mirándola directamente a sus ojos – Admito que no fue lo mejor y que fueron decisiones en las que no pensé en las consecuencias de mis actos, fui demasiada egoísta con ellos, yo solo quería…

.- Lo sé – Dijo Gaby con una sonrisa – No necesitas explicar o justificar nada, yo tampoco he sido muy santa, ya has visto lo que ha pasado conmigo, no soy tan normal, yo pude haber lastimado a toda esa gente que estaban viendo mi prueba y no es la primera vez que pasaba.

.- Ya no importa – Dije aun tocándole sus mejillas – Eso ha quedado atrás, habrá un nuevo comienzo cuando salgamos de este sitio.

.- Me besaste – Dijo Gabrielle que seguía mirándome con esos ojos azules intensos pero ella ya controlaba a su veela - ¿Pensaste en el viejo cliché de besar a la princesa que estaba bajo una maldición?

.- ¿Fue así? – Dije sin apartar mi mirada de ella.

.- No, sería tonto pensar eso en un principio cuando caí, me quitaron todo – Dijo con una sonrisa y continuaba explicando – Tan solo tenías que venir y estar a mi lado, bastaba con que me tocaras la frente o la mejilla y la conexión veela se reestablecería, me has devuelto mi magia, mi estado, esa ente se llevó todo de mí, hasta mi veela, yo estaba aquí como una carcasa vacía, habría hecho lo mismo contigo si hubieses fracasado Cho, ambas estaríamos aquí, con cuerpos vacíos, mira, hasta hay un lugar para ti y dicho demonio buscaría la forma de salir de aquí pero tampoco lo tendría fácil afuera, eso lo sabes de sobra.

.- ¿Sentiste…? – Le pregunto mirando el lugar que señalaba, habría terminado en ese lugar de haber fracasado.

.- ¿Tu beso? – Dijo con una sonrisa y ella se levantaba pero se notaba que le costaba un poco, como si despertase de un largo letargo, no tenía idea de cuánto tiempo había pasado realmente pero ella se acerca y me besa sin dudar, por unos minutos, ella se separa – Sí, lo sentí, tú corazón, tu alma, estás conectada a mí, me quieres de verdad, me has correspondido al dejar fuera todo rastro de duda.

.- Gaby – Dije abrazándola como podía, aun me dolía terrible hacer acciones físicas pero no me importaba – Claro que te quiero tonta, mucho más de lo que crees pero aun sigues teniendo quince años, no esperes más besos o algo parecido, estas serán las únicas hasta que cumplas la mayoría de edad.

.- No me importa esperar un poco más – Dijo Gaby que correspondía mi abrazo – Son dos años más, a mi hermana no le hará gracia que me hayas robado un beso.

.- Ella lo tiene que aceptar – Dije mirándola esta vez – Eres mi pareja.

.- Eres mi elección Cho – Dijo Gabrielle que me tocaba mi mejilla – Solo importa eso ahora.

.- Lo sé – Dije devolviéndole el gesto y observo el lugar - ¿Cómo salimos de aquí?

Esa era una muy buena pregunta, Gabrielle se levantó un poco más, estaba en mejores condiciones que yo por lo que tuve que apoyarme en ella para caminar, bajamos las escaleras, no sin antes de que ella tomara su varita, cuando llegamos al final de las escaleras, observamos que al frente se abría como una gran puerta con luz blanca que casi nos ciega, ambas nos miramos, sabíamos que habíamos llegado al final del camino y detrás de nosotras se abría otra puerta pero en ella se emana una luz ámbar, nos volvimos a mirar.

.- Dos puertas – Dijo Gabrielle que me sujetaba – Imagino que la puerta que está detrás de nosotras es un camino más.

.- Es una elección – Dije observando la puerta blanca - ¿Recuerdas que cuando entramos al inicio, la luz blanca aparecía frente a nuestros ojos?

.- Si y yo caí en un precipicio, viendo un montón de recuerdos que no quería ver – Dijo Gaby con cierto desprecio pero luego sonríe volviendo a mirar la puerta de atrás - ¿Estás pensando lo mismo que yo?

.- Si – Dije con una sonrisa, mirándola frente a sus ojos, le vuelvo a dar otro beso, ella se sorprende – No te acostumbres, solo por esta vez, la elección es simple, no es ninguna de las dos puertas, es un acertijo, una trampa.

.- Exacto – Dijo Gabrielle que miraba hacia arriba y en efecto había como un vórtice que parecía un cielo pintado de estrellas – Tú entraste y te encontraste con un camino pero yo caí a un precipicio, tú viniste por mí y por ti misma, la salida correcta es arriba.

.- La pregunta es – Dije mirando arriba – ¿Cómo llegamos allá?

La respuesta al acertijo era bastante simple, dos personas entran de diferente modo, yo tenía que recorrer un camino que llegaba hasta abajo donde estaba Gabrielle y para ello tenía que enfrentar distintos recuerdos tergiversados por mi propia realidad al igual que Gabrielle tenía que enfrentar sus propios recuerdos. No necesitábamos responder nada porque el vórtice extrañamente venía hacia nosotras y las dos puertas se estaban cerrando, todo el lugar se estaba apagando, solo el vórtice parecía estar activo, tan solo nos miramos las dos, nos dimos otro beso más antes de que el vórtice llegase y nos tragara hacia la salida sabiendo que del otro lado nos esperaba la reina de las veelas.

Afuera de la sala de la pureza (POV Alizee, reina veela)

Podía sentir perfectamente que dos almas se reunían de nuevo, la maldad de sus corazones se ha desvanecido por completo, su magia se ha estabilizado, los cuales significaban buen augurio pero notaba que una de ellas estaba muy malherida, su duelo de magia debió ser terrible, apenas y puede andar pero logró llegar hasta Gabrielle y sacarla de ese trance peligroso, devolverle lo que es suyo por derecho, Gabrielle Delacour es una maga talentosa pero no pudo hacer frente a su propio demonio que le jugó en contra, era de esperar que pasara de esa forma, al fin y al cabo, el mayor demonio era la maldad de Cho Chang, en su corazón reinaba el caos, la confusión, la inquietud, toda una vida llena de mentiras mientras que su futura pareja, enfrentaba a realidades que contenían racismo y xenofobia, por ser diferente pero jamás se dejó majadear sin embargo, la hizo convertirse en alguien sádica, ha lastimado a gente inocente, las dos pero el tiempo es el tiempo, lo pasado ya está hecho, ahora ellas dos, entrarán a una nueva etapa de sus vidas.

Mando un mensaje a mi guardiana indicándole que debían de reunir a todos en el trono, que la prueba ya había terminado, solo quedaba recibirlas a ellas, ella de inmediato acató la orden. Ahora solo quedaba a la espera de que la puerta se abriera, quito el escudo, no había peligro alguno ahora que ellas dos habían eliminado la maldad que habitaba en sus corazones, estaban más unidas que antes, la conexión veela que hay en ellas es mucho más fuerte de lo que pensaba, por momentos habían caído y estaban a nada de ser liquidadas pero supieron salir adelante, claro que Gabrielle había caído primero pero no sin antes dar pelea.

.- Sin duda esto marcará un antes y un después en la historia de nuestro clan – Pensé al ver la puerta, ya se estaba abriendo poco a poco, podía sentir el aura veela de Gabrielle y la magia que emanaba Cho Chang – Aquí vienen.

Al abrirse por completo, quedo sorprendida ante la escena que estaba observando; Cho Chang estaba muy malherida, apenas podía caminar y Gabrielle tenía otro traje, muy diferente, era un vestido de color zafiro plateado y el cabello más largo de lo usual, uno de sus mechones rubios se había vuelto plateado, las dos pasaron por mucho, me acerco rápidamente para evaluar el estado de la muchacha asiática.

.- Por mi madre, estás muy mal Cho Chang – Dije al verla, con una mano le indicaba a Gabrielle que me dejara examinarla, la acosté en el piso – Hombro izquierdo; roto, costillas derechas; rotos, brazo derecho; maltrecho casi zafado, piernas; con moretones, el resto de tu cuerpo tiene daños menores pero no por eso menos preocupante, tu salud peligra, apenas puedes moverte, es casi un milagro que estés viva.

.- Lo siento – Me dice la muchacha que estaba acostada – Pero al demonio que me enfrenté era demasiada poderosa, ya que tenía el poder de Gaby y la mía, juntas sin embargo, descubrí todo al final y soporté el castigo porque…

.- Tenías a Gabrielle en mente y corazón, has aceptado dejar todo atrás – Dije completando aquella frase – Eso hizo que se invocara un escudo, lo suficientemente poderoso para soportar tales castigos y aun así, sufriste daños muy graves.

.- ¿La puedes curar? – Me pregunta con seriedad Gabrielle Delacour – Está grave, su vida aun peligra.

.- Gaby, no es nada – Dijo la muchacha que observaba a su compañera – Voy a estar bien, he estado en peores situaciones y la he librado.

.- Tonta, costillas rotas y puedes estar sufriendo una hemorragia, apenas puedes hablar – Dijo mirándola aún más seria a su compañera pero esta se acerca y le acaricia su mejilla, parece que su amor se concretado a un nivel mucho más grande de lo esperado – Tienes que curarte, necesitas estar bien, tu cuerpo ha sufrido mucho daño y todavía puedes morir.

.- Pero no aquí queridas – Dije levantándome, saco mi varita y llevo a Chang en una camilla invisible – Nos están esperando afuera, curaremos a Cho Chang, la prueba ha terminado y estoy orgullosa de lo que han logrado, esto marcará un precedente, estarán todas sorprendidas.

Cuando llegamos a la entrada, con mi mano abrí la gran puerta, había un silencio pero bastante gente alrededor esperando nuestra llegada, cuando salí, hicieron reverencia como es de esperar pero puse adelante a Cho Chang y a Gabrielle Delacour, las caras de asombro era evidente, Fleur Delacour corrió sin esperar indicaciones o órdenes mías se acercaba a su hermana y a su elección, no dije nada pero Fleur veía con evidente preocupación a Chang sin importar la cara de los demás que observaban la escena con total incredulidad.

.- Por todos los dioses Chang – Dijo Fleur asombrada de verla en tal estado y más se sorprende de ver a su hermana con una vestimenta diferente – Estás muy malherida, apenas te puedes mover ¿A qué desgraciado feo te has enfrentado en ese lugar que te ha dejado en tal estado? Además, Gaby, tú no llevabas ese vestido cuando entraste ¿Qué pasó en esa sala?

.- Estoy bien Fleur – Dijo Chang tratando de quitarle importancia al asunto, la muchacha apenas podía hablar – Ambas estamos bien, es lo que importa, salimos bien de esa sala.

.- No, no lo estás joder – Dijo Fleur que analizaba su cuerpo con su varita – Tienes destrozado todo tu cuerpo, estás sufriendo una hemorragia interna lenta y te duele demasiado, mírate apenas puedes hablar, tengo que curarte pronto o entrarás en paro, es un milagro que puedas mantenerte viva con esas heridas.

.- Hermana cálmate – Dijo Gabrielle que se acercaba a abrazarla, esta le corresponde el abrazo, Fleur nota el mechón plateado, el detalle no pasa desapercibido – Es el precio por estar en ese lugar, ambas nos hemos enfrentado a una prueba dura, yo caí y Cho tuvo que pelear hasta el final por lo que se llevó la peor parte pero afortunadamente salimos vivas y unimos nuestro lazo aún más fuerte que antes.

.- Ya me explicarás todo después – Dijo Fleur que abrazaba a su hermana pero no dejaba de mirar a la muchacha que estaba tendida en la camilla invisible, no deja de lado su trabajo como medimaga – Por ahora, la prioridad es curar a tu pareja, está en muy mal estado y su vida peligra todavía.

Con una indicación, llamo a diferentes veelas medimagas, podría curarla yo misma pero Fleur está más que capacitada, tiene muchísima experiencia por lo que veo, está en buenas manos, observo que se la llevan a otro lugar, los padres de Gabrielle van con ellos, antes de que se fueran, les hablo a todos.

.- La prueba ha sido culminada, un hecho sin precedentes – Dije a viva voz, todos prestaron atención – Nunca en mi vida vi una pareja tan poderosa, que no haya dudas de que han sido destinadas a estar juntas, la sala de la pureza es un lugar especial, si no lo hubieran logrado, no estaríamos aquí, por fortuna, las cosas salieron bien y han salido vivas que es lo que importa, su magia se ha estabilizado, el resto, queda de ellas enfrentar su vida, han podido eliminar toda la maldad que habitaba en sus corazones, es un día histórico, como tal merece una celebración, manden centinelas a todas las villas del clan, merecen saber lo que ha pasado.

Las cosas se van calmando ahora, las demás veelas están celebrando este acontecimiento, no es algo que me esperaba pero al final todo salió bien. Elena se quedaba mirando la sala del trono, yo me acerco a ella.

.- ¿Todo bien? – Le pregunto.

.- Si – Me dice observándome – Mi reina, hace mucho que no se usaba la sala de la pureza menos con un caso así, podría haberlas enviado al bosque de Norwich, en ese lugar podrían haber salido mejor.

.- Si la magia de las dos no fuera tan inestable – Dije mirando todavía la sala del trono, ella se queda un tanto confusa – La sala de la pureza es la única que permite contener la magia veela que se descontrola, el caso de Gabrielle y Cho, nunca había visto una conexión veela tan desbordada, ellas dos se unieron incluso mucho antes pero no tenían controlado su magia, se desbordaba, además toma en cuenta sus personalidades, no eran santas pese a que son jóvenes, las dos ocultaban su verdadera naturaleza, pudieron ser sádicas con los demás con el pasar del tiempo.

.- ¿Las considera un peligro? – Me pregunta con seriedad, yo volteo a verla con una sonrisa, disipando toda clase de duda.

.- No Elena – Dije sin dudar – Si ellas hubiesen fracasado en esa sala, yo misma habría contenido a la bestia que saldría de esa puerta y ahora que han podido salir con vida, han eliminado esa maldad que tenían en sus corazones, así que no, no son un peligro para la sociedad, estarán juntas a partir de ahora.

.- Eso me quita un peso de encima – Dijo Elena soltando un suspiro de alivio pero luego se pone seria – Me ha llegado informes del sujeto que mandaron a uno de los bosques de nuestro clan, un muchacho pelirrojo si no mal recuerdo.

.- Ronald Weasley – Dije recordando el nombre de ese chico pelirrojo – ¿Qué noticias hay?

.- La matriarca de las veelas dice que es un caso un tanto complicado – Dijo Elena aun con seriedad – No sé qué tipo de maldad tiene el muchacho, parece tener mucho odio acumulado.

.- No es odio sino una frustración acumulada por el hecho de no aceptar las cosas – Dije volteando a ver el camino por donde se fue Gabrielle y Cho – Estoy al tanto de su historia, quién diría que ese muchacho intentaría cortejar a una de las Damas de Hogwarts, un amor no correspondido es el camino para ser un mago tenebroso, Ronald Weasley era un perfecto candidato a serlo y todo por un amor, peores motivos hay pero ninguno tan poderoso como eso, el rechazo amoroso de una chica en la que el muchacho pensó que sería su amor único.

.- Mi reina – Dijo mirándome con cierta preocupación - ¿Tomará cartas en el asunto?

.- No es necesaria mi intervención – Le respondo sorprendiéndola – El caso del pelirrojo depende de él mismo, tiene que enfrentarse a sí mismo y reconocer sus errores, su camino está claro, la matriarca puede encargarse de eso si las cosas no salen bien, hay modos de sellar una maldad e eliminarla.

.- Pero – Me dice aun consternada – Él podría morir en esa sala.

.- Sabes nuestras leyes Hèléne – Le digo volteándola a ver con mis ojos azules intensos, ella se arrodilla ante mí, eso me molesta un poco – No es necesario que te dirijas a mí con tanta formalidad y por el muchacho no te preocupes, no es tan débil como muchos piensan, es un mago talentoso pero cegado por muchas cosas, lo que sea que pase en ese bosque, esperemos que tenga un buen resultado, aún está a tiempo de poder eliminar la maldad que habita en su corazón.

.- ¿Qué le diremos a su familia en caso contrario? – Me pregunta – Me dicen que su hermano mayor está en el bosque esperando.

.- Qué se hizo todo lo posible como es de esperar – Le respondo sin dudar – La matriarca del bosque veela de Norwich se encargará del cortejo fúnebre, se encargará de él en caso de que se salga de control pero en mi corazón, confío en que el muchacho logre superar su camino, tiene el poder necesario para enfrentar a su mismo ente maligno.

.- Entiendo, lamento importunarla con este asunto que parece que está controlado – Dijo parándose, estaba a punto de irse a hacer sus deberes como guardiana pero yo no la permito irse, le agarro su mano donde lleva el anillo plateado, ella se sorprende y me voltea a ver – Mi reina ¿Necesita algo más?

.- Por favor Elena ¿Vas a seguir con ese teatro de guardiana seria ante mí? – Dije mirándola de forma seria, ella se asombra y le muestro mi anillo plateado, el mismo anillo que ella lleva – Déjate de tanta formalidad que eres mi esposa por amor a los dioses, llevamos mucho tiempo juntas, no hay nadie mirando, puedes soltarte ahora.

.- Y-yo – Dijo esta vez sonrojándose – No debería decir eso estando en un sitio público, nadie sabe que estamos casadas, podrían estar escuchando.

.- Es nuestra vida privada, es verdad – Dije acercándome a ella, abrazándola por la cintura, ella se deja querer – Decidimos hacerlo así por diversas razones pero eres mi elección y yo soy la tuya, eres mi esposa, te quiero ver sonreír que tienes una bella sonrisa, eres hermosa, no quiero ver una guardiana autómata que sigue ordenes sin chistar que pareces no tener vida, tienes que soltarte de vez en cuando, te lo he dicho cientos de veces.

.- Alizee – Dijo correspondiendo mi abrazo – Lo sé pero debes guardar apariencias, eres una reina, después de todo ostentas un título poderoso, eres la veela más poderosa, la reina del clan, eso significa que yo también debo de tener una postura seria, tengo mis deberes como guardiana, debemos mostrarnos impasibles y serias.

.- Mira que eres boba – Dije acariciándole su mejilla – Inteligente, amable, seria y dedicada pero también posees frialdad con aquellas personas que lo merecen, actúas con justicia, haces las cosas sin dudar de lo demás e incluso disimulas no tener pareja, llamas mucho la atención pero ocultas tu aura sin embargo, no me lo puedes ocultar a mí, eres una veela pura como yo, yo te encontré hace mucho tiempo, estás a la par conmigo, podrías ser mi sucesora.

.- Eso nunca – Dijo Elena que me miraba con esa seriedad, llevó sus manos a mis mejillas y me daba un casto beso en mis labios – No puedo tomar tu lugar Alizee, eres más fuerte que yo.

.- Eras la candidata a ser la matriarca de las veelas en este lugar pero cediste ese puesto a otra, sorprendiste a muchas con esa decisión – Le respondo acariciando su mejilla derecha – Mi querida Hèléne, luego de que te nombré mi guardiana…

.- Me pediste casarme contigo, lo recuerdo como si fuera ayer – Dijo completando aquella frase, ella muestra sus ojos azules intensos al igual que yo hago lo propio – Yo acepté, soy tu esposa pero también soy tu guardiana, mi deber es protegerte Alizee.

.- Elena – Dije llevando mi mano a su cadera y tomando su mano libre, juntándola con la mía.

.- Alizee – Dijo apartando mi mano de su cadera, yo solo suelto unas risillas – Aquí no, puede venir alguien y cacharnos en el acto, por mucho que yo quiera dejarme llevar, no podemos aquí, así que ¿nos podemos poner serias ya? Todavía hay trabajo que hacer.

.- Si – Dije mirando el camino hacia donde se fueron los demás, me separo de Elena – Tengo que revisar su estado, como reina, tengo que velar todavía su seguridad, haz los preparativos para la ceremonia oficial.

.- ¿No son muy jóvenes para dicha ceremonia? – Me pregunta Elena alzando una ceja – Hacerlo significaría que ellas dos…

.- Por favor, ya las has visto – Dije con una sonrisa - ¿Acaso no has notado la mano de Gabrielle que agarraba la mano de su compañera y pareja? Su amor se ha concretado en la sala, se ha intensificado, es verdad que tienen tres años de diferencia de edad pero ya es un hecho que están juntas, son dos cisnes reuniéndose, la ceremonia es solamente de rutina, todo mundo sabe lo que vendrá a continuación, el camino que ellas tomarán, dependerá solamente de ellas, continuarán con sus vidas y los obstáculos que enfrentarán, lo podrán superar sin ninguna duda, se han ganado el derecho de ser aceptadas por las veelas, Cho Chang ya forma parte de nuestro clan.

.- Si, es verdad – Dijo Elena que cerraba sus ojos pero luego las abría – Me iré a hacer los preparativos, lo tendremos listo a tiempo, con su permiso mi reina.

.- Querida – Dije llamándola de vuelta, ella se voltea pero antes de que diga nada, me acerco a ella y le estampo un beso, ella se sorprende, fueron un par de minutos pero la dejo lo suficientemente roja, me gusta dejarla así, la miro con descaro – Ve y no te demores Elena, hay mucho trabajo que hacer, tengo que ir al área médica pero después, nos veremos en mis aposentos, sorpréndeme como siempre lo haces querida mía.

.- Alizee – Dijo volteando a ver a otro lado, estaba roja por escuchar eso último que dije, yo solo sonrío con descaro, ella se voltea a verme aun sonrojada – Nos vemos después cariño, ponte seria por favor, ya te he dicho que no me tomes así de sorpresa.

Ella se va y yo tengo que hacer mi trabajo como reina, en verdad hacía tiempo que no veía un caso que causara tanto revuelo, a decir verdad estaba emocionada porque no he hecho otra cosa que andar resolviendo cosas relacionadas con la maldita burocracia, puros papeleos de solicitudes que no me llaman la atención o que no eran de mi completo interés pero son asuntos que debo de atender y antes de eso, estuve en la guerra mágica, casi pierdo a mi esposa pero afortunadamente salimos ilesas, tuvimos que rescatar a mucha gente inocente, eran personas no magas, es decir, muggles, en varios suburbios y Elena no quiso dejarlos a su suerte, de no ser porque sentí su aura que me indicaba que estaba en aprietos no me habría enterado. De inmediato fui a su búsqueda para pelear a su lado, sola contra un puñado de mortifagos que la rodeaban pero llegué yo para rescatarlas, no eran cualquier mamporrero de mago o brujo, no eran mortifagos comunes, ese loco psicótico de Voldemort liberó a mucha gente peligrosa de diferentes cárceles del mundo mágico y a la larga tuvimos que tirar a matar, era mejor así y nadie los iba a echar de menos, posteriormente tuvimos que borrar memorias a la gente inocente, haciendo como que no pasó nada, no me arrepiento de esa decisión, al fin y al cabo, es mi esposa, estamos unidas y cuando peleamos juntas, somos muy fuertes. Me dirijo al ala médica, ya que me preocupaba el estado de Cho Chang, en verdad es una muchacha muy fuerte, otra probablemente no habría resistido tal prueba.

Área médica del Clan Veela, sala de espera (POV Gabrielle)

Tengo que admitir que la prueba fue dura a comparación de otras cosas por lo que he pasado e incluso cuando caí en el duelo sentí que mi vida se iba y tal como le había explicado a Cho que mi cuerpo no era más que una carcasa vacía, eso es algo muy extraño, que un ente se haya robado mi alma y mis poderes mágicos, aun me sigue perturbando ese hecho sobre todo los recuerdos que aparecieron en esa extraña sala. Está claro que Cho Chang mantiene cosas guardadas, puedo entender el hecho de que no es muy platicadora con ciertos temas por lo que se entiende que es alguien hermética, al menos en ese sentido se reserva de hablarlo, llegará el momento en que me hable de ello sobre todo de su familia.

Claro que yo tampoco soy una santa o que hable de ciertos temas como es el hecho de tener un poder que los demás no poseen, especial entre comillas, mi poder veela es tan solo un plus como siempre lo he visto aunque Cho pudiera tener otro punto de vista respecto a eso sin embargo, en la sala correspondió mi sentimiento, lo que siento por ella, un beso es significativo, quizá para algunos no es sinónimo de empezar algo sobre todo que yo soy menor que ella, tres años para ser exactos pero aun así, ella correspondió mis sentimientos y al igual que yo pude sentir sus sentimientos, ese momento la conexión veela se intensificó por ahora solo me preocupa su estado, ella estaba herida en todo su cuerpo que apenas y podía mantenerse de pie pero como sea logró salir conmigo. Solo puedo esperar aquí en la sala de espera mientras que mi hermana y algunas asistentes atienden a Cho Chang, mis padres han ido a hablar con la matriarca de las veelas, no sé qué pasará después ahora que todo terminó.

Por ahora estoy esperando que mi hermana trate las heridas de Cho Chang, no sé hasta qué punto ha podido soportar tanto castigo pero es un hecho que logró superar ese ente tan misterioso que nos conocía tan bien a ambas. Lo que más me desconcertó de esa sala es el uso de los recuerdos o memorias de la persona, usarlos como un medio para enfrentar a la verdadera naturaleza es algo que no puedo entender o concebir.

Entiendo que los recuerdos son un medio poderoso para que la persona sea fuerte o puede caer en un abismo de oscuridad, despertar a algo peor y menos mal que pudimos salir con vida de ese sitio por ahora solo tengo preocupación por una cosa; El estado de salud de mi pareja, Cho Chang. No sé cuánto tiempo pasó antes de que viese a mi hermana salir de la sala de operaciones pero cuando la vi, me paré para esperar su diagnóstico, esta solo me sonríe.

.- No hay nada de qué preocuparse – Dijo mi hermana con una sonrisa, yo solo suspiro de alivio – Estará en descanso unos días, es fuerte sin ninguna duda sin embargo…

.- ¿Sí? – Le pregunto mirándola seria.

.- Sus heridas fueron graves – Dijo Fleur que se sentaba y me miraba a los ojos – Nunca vi unas heridas de magia como esas, Cho Chang estuvo a nada de morir pero sobrevivió porque convocó un escudo especial, ignoro de qué manera pero eso le permitió sobrevivir ¿Qué pasó en esa sala hermana?

.- Una larga historia – Dije sentándome a su lado, ella me observaba – Para no hacerla larga, nos enfrentamos a nosotras mismas, un ente o una versión oscura por así decirlo, este ente convocaba recuerdos y secretos que nadie más conoce, jugó siempre con eso y afectaba a nuestra personalidad, Cho y yo, no somos santas Fleur, tenemos una naturaleza muy volátil aunque en diferentes niveles, Cho es más fría mientras que yo soy…

.- Mucho más sádica – Dijo mi hermana completando la frase – Imprudente sin embargo, han logrado pasar la prueba.

.- Si, de lo contrario no estaríamos aquí hermana – Dije mirándola con una sonrisa.

.- Me alegra bastante que las cosas hayan salido bien – Dijo Fleur mirando la puerta y me voltea a ver de nuevo - ¿Quieres verla?

.- ¿Puedo? – Le pregunto levantándome.

.- Al final, es tu pareja Gabrielle – Dijo Fleur soltando un suspiro, casi como de lamento – Aun sigo sorprendida pero está bien, sé que son tres años de diferencia, aun así, tienen una conexión muy especial, adelante, está pasando por esa sala, luego entra a la derecha, la verás acostada en su cama, no seas brusca, está todavía delicada y recuperándose de la operación, sus heridas fueron en verdad graves, no me fue nada fácil operarle.

Tan solo le doy las gracias, abrazo a mi hermana para luego dirigirme a la gran puerta, sé que le habrá costado aceptarlo pero ella curó a mi pareja, sé que no hemos formalizado la relación pero ya es un hecho, estamos juntas, qué más da que tengamos que esperar un poco más de tiempo, tan solo deseo verla.

Sala de espera (POV Fleur)

Por merlín que mi hermana casi que se va corriendo a verla, la verdad es que nunca esperé que las cosas resultarían de esta manera, me alegra verla vivas a las dos porque no sé qué habría hecho si era el caso contrario y ahora lo que queda por hacer, dependerá de ellas dos sobre todo de Gaby, en cuanto regrese a Beauxbatons, se armará tremendo escándalo, no me entrará ninguna duda de que uno de los tótems se prenderá e iniciará un nuevo camino. Me paro para ir a verlas, noto que alguien más entra a la sala de espera, volteo a ver quién era y me sorprendo de ver a la reina de las veelas, hago una reverencia pero esta me indica con una mano que no debo de hacerlo.

.- Dejémonos de formalidades por el día de hoy, ya he tenido suficiente – Me dice la reina de las veelas - ¿Cómo se encuentra Cho Chang?

.- Está estable, he podido curarla en su totalidad, aún está delicada pero recuperándose – Dije sin más volteando a ver la puerta – Su vida ya no peligra pero deberá descansar por unos días, sus heridas…

.- Si, no es necesario que me des el informe completo – Dijo la reina que me observaba con una sonrisa – Sé que te cuesta dejar ir a tu hermana.

.- Ella es importante para mí, siempre lo ha sido – Dije suspirando – Qué ella tenga pareja a tan corta edad, no me hace ninguna gracia pero también entiendo que es su vida y merece ser feliz.

.- ¿Te preocupa su estado veela? – Me pregunta la reina, yo solo agacho la cabeza – Es verdad que las veelas solemos tener una naturaleza oculta ante la vista de todos, qué somos posesivas, Gabrielle no es la excepción, de hecho, no había visto a una con una aura tan determinante pero a la vez explosiva, no es una muchacha que, para no hacerla larga, no es normal.

.- Su aprendizaje, su magia veela, todo eso comenzó cuando conoció a Chang – Dije sentándome de nuevo – Desde ese día supe que mi hermana iría a un camino donde no la tendría fácil, una joven con una decisión que no sería fácil de tomar, es un camino peligroso y yo como su hermana mayor, no me podía permitir que se jugara el cuello y siempre traté…

.- De limitarla – Dijo la reina que se sentaba y cruzaba sus piernas, en eso noto que tiene un anillo en su mano derecha, por alguna extraña razón se me hacía muy familiar, sentía que lo había visto en alguna parte – No podías limitar a tu hermana, en el fondo sabías que ella debía de seguir su camino, es sorprendente ver hasta donde ha podido llegar, una semi veela con semejante talento.

.- Si, es verdad, pude enseñarle bien – Dije sin dejar de mirar el anillo que tenía la reina en su dedo anular – Es una muchacha fuerte.

.- Habrá una ceremonia en un par de días – Me dice la reina, yo la observo con asombro al escuchar lo que me dijo – Es una tradición en la cual se da la bienvenida a una pareja entre una veela y alguien ajeno, en este caso, Gabrielle y Cho Chang.

.- La ceremonia de las veelas – Dije un tanto sorprendida - ¿No son muy jóvenes para eso?

.- Ya lo sabrás a estas alturas – Dijo la reina con una sonrisa – Pero tú misma sabes que su amor se ha intensificado, por tanto su conexión mágica y el aura que poseen, es de admirar, todas en el clan desean verlas y darles sus respetos, es una tradición, además se ganaron el derecho de pertenecer a los anaqueles de la historia de las veelas, ya tienen un lugar asegurado en el clan.

.- Si, al final tendré que aceptar a Cho Chang – Dije suspirando pero a la vez me alegra, Chang ha podido librarse de las ataduras que le atormentaban, tal vez le quedan cosas por hacer pero eso ya depende de ella, vuelvo a mirar a la reina, me fijo en su anillo, empiezo a recordar dónde había visto un anillo similar; Hèléne, ella llevaba un anillo de características iguales – Reina Alizee, ese anillo que lleva…

.- ¿Te da curiosidad? – Dijo la reina que observaba con una sonrisa su anillo que tenía puesto en su dedo anular – Es plateado por fuera y por dentro es de color azul platino, forjado en lo más profundo del bosque de las veelas, es especial para mí.

.- No quisiera meterme en su vida privada – Dije casi balbuceando torpemente pero tenía mucha curiosidad – Pero he notado que Elena tiene…

.- Silencio – Dijo Alizee que llevaba su dedo a su boca, ella observa la sala como si estuviera buscando quien estuviera escuchando nuestra conversación, ella saca su varita y encanta el lugar, un hechizo silenciador, de inmediato cierra sus ojos por unos segundos, luego de eso los vuelve a abrir, con una sonrisa me responde – Lo siento pero nadie puede escuchar lo que te voy a decir, Hèléne Blanchet, es mi guardiana y mano derecha pero no solo eso, es mi esposa.

.- Eso no lo sabía – Dije sorprendida y recuerdo las palabras de Elena que me había dicho que no tenía a nadie – Ella dijo que no tenía tiempo para esas cosas.

.- Normal que diga eso – Dijo la reina soltando unas risillas – Elena y yo decidimos que nuestra vida sería privada ante los demás ojos, recuerdo que ella era la más odiada entre todas, no le tenían aprecio y había candidatas más cualificadas entre comillas para ser mi guardiana pero yo la conozco desde hace mucho, me tendrás que perdonar si me ahorro los detalles, no te puedo contar mucho.

Le respondo que no pasa nada y que entendía perfectamente su situación, era probable que me contaría esa historia en otra ocasión, ambas nos paramos para ir a ver a mi hermana y a Cho Chang, ya que estarían preparándose para la ceremonia especial que estaba por venir.

NOTA DEL AUTOR:

Hasta aquí el capítulo de hoy, espero que lo hayan disfrutado, se me olvidó agregar este apartado jaja. Seguiremos con el arco de Cho y Gabrielle, probablemente tenga 3 partes, ya que tiene mucho potencial, me gusta escribir sobre ellas y su historia, nos veremos en la próxima actualización. El próximo arco, como dije al principio, no sé cuál escogeré pero de mientras seguiré escribiendo el arco de Cho y Gabrielle. Nos vemos x3