Chalet 34
Lugar veintiuno
No lo había logrado.
-Quede en el lugar veintiuno ¡Yey!
-Eso es grandioso ¿Cuántos califican? – Pregunto su padre al teléfono, con mucho mejor ánimo que Merlin.
-Los primeros veinte. Así que no, al menos soy el primero en la lista de reserva. Tendré oportunidad si alguien se retira.
-Hiciste lo mejor que pudiste.
Las palabras de atoraron en la garganta de Merlin ¿Qué se supone que le dijera a su padre? ¿No salte porque me recuerda al accidente y tengo miedo?
Afortunadamente una puerta sonó, dándole la excusa perfecta para cortar la conversación.
-Papá, me tengo que ir Gwaine salió de la clínica
-Ok, adiós
La risilla de Gwaine lo animo el hombre estaba claramente baj0o los efectos de las medicinas.
-Escocia – susurro abrazando a su amigo maltrecho.
Detrás de ellos, Leon cargaba una bolsa con medicinas.
-La morfina es lo mejor – Soltó Gwaine.
-Son solo los ligamentos, gracias a dios – informo Leon – Besando la frente del herido.
Merlin solo atino a levantar la ceja.
-¡Oh cállate! – gruño Leon apenado.
