¡Buenas, lectores!

Perdonen haberme tardado tanto con el cap, pero estuve ocupada con un proyecto^^'

¡Un Animatic del fic!

Pueden ir a verlo a mi canal de youtube (TheZoe611)

Espero les guste x3

Y recuerden que desde hace unos cap la clasificación del fic pasó a T ^^ *y advierto que en este cap se hará mención de una situación delicada con respecto a un personaje. Así que están advertidos*

¡Sin más, los invito a leer x3!


Vamos de Viaje.

Destino: Base Final del Enemigo.


Digiquartz- Corea del Sur.

En aquella zona del Digiquartz se podía apreciar la peligrosa cantidad de Kopierer de diferentes formas rondando las calles y edificios digitales, manteniendo así una vigilancia constante en la zona donde se encontraba la Base del Proyecto Iluminati.

Pero no solo ellos vigilaban la zona. Los Tres Generales del Bagra Army se encontraban en diferentes puntos alrededor del edificio que en el mundo real correspondía la base de los humanos con los que trabajaban.

En esos momentos, los científicos de la sección de Topacio trabajaban con la sección de Deimos para construir armamentos y más Kopierer, mostrando así que aprovechaban el espacio que brindaba el Digiquartz.


-Ahhhh- suspiró Lilithmon, indignada, sentada en el borde de un edificio cercano a la base, mirando el horizonte- No puedo creer que tengo que mirar y mirar si viene un enemigo… Digo, ¿hola? ¡Aún me estoy recuperando de haber formado a un horrendo digimon junto a-a…!- el recordar que fue Ogudomon junto a Beelzebumon le indignaba cada dato que componía su cuerpo.

¡Y lo peor, era que no podía estar con su amado Gaiomon!

-¡AH! ¡¿Estamos destinados a un destino trágico?!- se preocupó, notando la similitud de su sufrimiento con los personajes de la telenovela humana que veía.

¡Telenovela que no podía ver al estar ahí afuera vigilando la nada!

Aún así, el pensar en ese programa le hizo recordar a LadyDevimon… quien estaba siendo inyectada en esos momentos con el Antivirus X que habían logrado desprender del brazo de la novia de Shoutmon…

-… En verdad…- la mujer digimon apoyó su mentón en su mano, seria y pensativa-… ¿Por qué decidiste hacer algo así…? Nada asegura que sobrevivirás a semejante evolución forzada… y si lo logras… ¿Cuánto podrías soportarlo…?- señaló-… ¿Qué fue lo que pasó mientras estuve inconsciente… que te cambió tanto…?- se preguntó en voz alta…


Blastmon estaba sentado en un parque digital, con una gran cantidad de diamantes a su lado, mientras los Evilmon preparaban un mantel con diferentes bocadillos.

La pequeña Misty los observaba, curiosa y confundida.

-¡Ta-da~!- los tres Evilmon terminaron de preparar el mantel, mostrándole a la peliazul lo que habían logrado.

-¡Maravilloso, Evs-chan! Ahora podremos tener una fiesta de té digna de nosotros- aseguró Blastmon, mientras la niña parpadeaba- ¿Verdad que esto te alegra, Misty-chan?-le sonrió.

-¿E-Eh…? S-Sí…- asintió la niña, nerviosa- Pero…- miró a los Kopierer que rondaban cerca de la plaza.

-Tranquila, Misty-chan- se le acercó un Evilmon.

-Con Blastmon-sama con nosotros, ellos no nos harán nada- aseguró el segundo digimon.

-¡Así que podemos disfrutar mientras tanto la fiesta de té que hicimos para celebrar que eres la compañera oficial de Blastmon-sama!- indicó el tercero, lanzando un poco de confeti.

-… Sí…- Misty volvió a asentir, y se sentó en silencio en el mantel.

Al verla así, los tres Evilmons se reunieron con Blastmon para una reunión de emergencia.

-¡¿No se suponía que Misty-chan se alegraría si teníamos una fiesta de té?!- quiso asegurarse Blastmon, indignado.

-¡E-Estábamos seguros-evil!- le dijeron sus súbditos, nerviosos.

-¡Ella quería jugar con nosotros, y como es una zona segura, pensábamos que sería lo mejor!- gimoteó uno.

-¡Pero Misty-chan extraña mucho a Kuro y a su hermano!- se rascó la cabeza otro de los diablillos.

-¡Ha-Había logrado conseguir unos bocadillos y un juego de tazas, pero no van a alegrar a Misty-chan!- se lamentó el tercero.

-Realmente sin Kuro-chan, celebrar que Misty-chan es mi compañera es un evento sin brillo…- suspiró Blastmon, mirando a la peliazul, la cual comía desanimada uno de los bocadillos.

En eso, el digimon de diamantes notó que alguien se acercaba, por lo que no se extrañó ver aterrizar cerca a una de las copias de Visdom. Sabía que era una copia al ver que no traía el Brave Snatcher.

-¡E-El gato malo…!- al verlo, Misty fue a esconderse detrás de unos arbustos, sobresaltando a los Evilmon.

-¡T-Tranquila, Misty-chan…!- los tres diablillos fueron con la niña.

-Ya le he dicho al original que no quiero que ni él ni sus copias se acerquen a Misty-chan- le señaló Blastmon a la copia del mago, el cual se le acercó, serio- Si crees que mi brillante memoria ha olvidado lo que le hicieron al hermano de Misty-chan, Ren-chan, estás MUY equivocado-le aseguró, lanzándole un diamante a medio masticar, a lo que el mono solo se inclinó un poco, sin inmutarse.

-No has podido convencer a Tobari Misty de trabajar en conjunto con nosotros, ¿verdad?- señaló la copia, mirando a la niña, la cual se asomó levemente, con los Evilmon asegurándole que estaba a salvo.

-¡Misty-chan se tomará su tiempo!- le indicó Blastmon- Es mi compañera, y como tal, sé que me apoyará en nuestra misión de recuperar a nuestro jefecito- aseguró, agarrando otro diamante y dándole un mordisco, molesto por la presencia de la copia del mago.

-… Si sus ideales no concuerdan, la niña no podrá sacar todo tu potencial- le dijo la copia- En la batalla contra Ogudomon, tu poder aumentó enormemente cuando la niña te dio de su energía, porque ambos querían derrotar a ese digimon-

-¡Ah, desde entonces, mi belleza y brillo aumentaron en grados que jamás imaginé!- admitió Blastmon.

-… Pero aún así, Tobari Misty no planea apoyar nuestra causa, ¿o me equivoco?- señaló el mago, incomodando y fastidiando al digimon de diamantes.

-… En la próxima fiesta de té pondré un letrero que diga "No aceptamos a feos"- murmuró el General.

-Si la niña no será nuestra aliada, no tiene utilidad para nosotros- sentenció Visdom, mirando a Misty, la cual se ocultó nuevamente, nerviosa.

La enorme mano de Blastmon aterrizó frente a la copia, mientras los ojos rojos del digimon de diamantes lo fulminaban con furia.

-Recuerda mi advertencia, Visdom… No le hagas nada a Misty-chan- le ordenó el General, sumamente serio.

La copia solo frunció el ceño, pero se alejó tomando vuelo…

… Había confirmado la teoría del original… Tobari Misty no iba a ser de ayuda… No mientras supiera que su hermano y aquel extraño ciborg estaban con el Xros Heart

Blastmon miró irse a la copia, serio y molesto.

No quería que ese mono volviera a lastimar o hacer llorar a la niña. La única razón por la que aceptaba trabajar con él, era porque así podrían liberar a Bagramon del castigo de Yggdrasil, y hacerlo regresar al poder.

Solo por eso…

Pero un suave tacto tomó su atención, por lo que bajó la mirada, para ver a Misty a su lado, con su mano posada en su pierna, preocupada.

-… Blast-chan… ¿Ese gato feo te molestó?- le preguntó la peliazul, preocupada por él.

El digimon de diamantes la miró, sorprendido…

… Ella era una humana… Era débil… Y él era un digimon, un hermoso pero poderoso digimon…

… Y aún así, ella, a pesar de su preocupación y nerviosismo, estaba preocupada por él…

… Era una niña amable… No hermosa como él, pero digna de ser su compañera.

-Tranquila, Misty-chan- le sonrió Blastmon, mientras los Evilmon se les acercaban, aliviados de que el mono se alejara- Solo era un aguafiestas, ¡pero nada podrá interrumpir nuestra fiesta de té!- le señaló.

La niña miró al digimon, aliviada de que no lo hubieran molestado, pero aún así preocupada…

-… ¿No podemos traer a Kuro? ¿Y a mi hermano y a Dracmon y a Damemon?- le pidió Misty, incomodando a los cuatro digimon.

-Misty-chan, no podríamos-evil- le dijo uno de los diablillos.

-¿P-Porque son el enemigo…?- murmuró la niña, nerviosa.

-¡T-Tranquila, Misty-chan! Te aseguro que todo saldrá bien, ¡mientras, podrías probar uno de mis diamantes…!- le sugirió Blastmon, intentando calmarla.

-¡B-Blastmon-sama! ¡Recuerde que los humanos no pueden comer eso-evil!- se le acercó uno de los Evilmon.

-Se me olvida que no resisten tanta hermosura…- se defendió su jefe, incómodo.

Aún así, los cuatro digimon se preocuparon cuando la niña se tapó el rostro con su boina, nerviosa.

… Ella no quería estar ahí…


Tactimon también vigilaba un punto en el Digiquartz, cerca de la base del Proyecto. El samurái estaba cruzado de brazos, con la espalda apoyada en un edificio, mirando la calle que debía vigilar.

No podía evitar sentir un poco de ironía y nostalgia.

Había sido en una calle parecida en donde había peleado por primera vez con OmegaShoutmon, durante las Xros Wars. En aquel momento, su altura había aumentado gracias a los datos que había absorbido del mundo humano, por lo que los edificios eran solo estructuras pequeñas para él.

Ahora, eso era diferente. Con su altura normal, las dimensiones de las estructuras humanas podían llegar a ser más altas que él mismo. Aun así, no planeaba sufrir una derrota contra el dragón. No ahora, que el dragón había recuperado su instinto de pelea, junto con la determinación de Kudou Taiki

La forma que obtuvieron durante el combate contra Ogudomon era la prueba fidedigna de que el poder de ambos crecía por cada dificultad que superaban juntos…

-La próxima vez que peleemos, será el combate que tanto he esperado…- pensó en voz alta, serio…

Pero se quedó quieto al recordar la imagen de Kai inconsciente, dañado por aquella infección digital…

El samurái frunció el ceño, serio…

¿Por qué, cuando meditaba por el combate que tendría contra Kudou Taiki, pensaba en Kai, peleando a su lado?

¿Era porque descubrió que con el niño tenía a su alcance el poder de la DigiXros, aumentando así sus posibilidades de salir victorioso?

-… Y aun así, consciente de tu papel en esta situación… Aún no despiertas, Kai…- frunció el ceño, serio… y preocupado…

… Pero se quedó quieto al sentir una gran oscuridad acercándose. Sensación que también detectaron Lilithmon y Blastmon desde sus posiciones.

Tactimon se incorporó de inmediato, haciendo aparecer su espada, mirando el cielo digital, para ver así la fuente de esa oscuridad. Era una figura negra que viajaba a gran velocidad, dejando tras de sí una estela oscura…

Omegamon Zwart D.

-¡¿E-Es…?! ¡¿Omegamon…?!- se sorprendió Tactimon, confundido y alerta.

Se quedó más sorprendido al ver que aquella grotesca criatura habría desaparecido en datos mientras volaba, dejando tras de sí una leve onda de viento.

-¡Tact-chan!- le habló Blastmon desde el comunicador, quien observaba serio el cielo, mientras los Evilmon resguardaban a la confundida Misty.

-Sí, lo vi. Desapareció al instante- respondió el samurái, serio.

-No hay duda alguna. Eso NO era Omegamon…- aseguró Lilithmon, seria- Emanaba la misma oscuridad que sentí siendo parte de Ogudomon. La oscuridad de Apocalymon-

-¿El tercer fragmento? ¿Apareció…?- frunció el ceño Tactimon, confundido con la situación.

¿Por qué había desaparecido del Digiquartz…? El único lugar al que pudo haber ido…

-¡Fue al mundo humano!- comprendió, serio, alertando a sus dos compañeros…


Mundo Humano- Corea del Sur.

Las luces anaranjadas indicaban que atardecía en el mundo humano. Los cálidos rayos bañaban el edificio que componía la base del Proyecto.

Visdom estaba parado en el techo, vigilando la zona… hasta quedarse quieto al sentir la oscuridad de Apocalymon

Salamandra, en su oficina, también la detectó, levantándose de inmediato, al mismo tiempo que sus ojos se tornaron ámbar de forma instintiva…


En una de las salas médicas se encontraba Topacio, vigilando como los enfermeros terminaban de estabilizar a Kudou Yuno.

La mujer estaba recostada en una de las camillas, respirando profundamente, aún inconsciente tras el disparo que había recibido de Izanami.

-De verdad… Esa mujer…- murmuró la peliceleste, mientras Green terminaba de teclear un panel, serio- No, esa arpía… Solo por su habilidad Salamandra la mantiene con nosotros…-

-… No disparó en una zona vital, pero mantendrá a Kudou Yuno hospitalizada para el Eclipse- le dijo su segundo al mando, recibiendo el informe de uno de los enfermeros- Eso no impedirá que podamos usar sus poderes, aún así…-

-Aún así, es un acto bajo. Muy bajo- le aseguró Topacio- No sé quién actúa de forma más vanidosa. Ella o Forward. Aunque al menos Forward es honesto y no miente cuando mete la pata diariamente…- le comentó, hasta notar que su comunicador comenzaba a sonar.

-¡Topacio!- era Lilithmon, a lo que la mujer, paciente, tomó el aparato.

- No, Lilithmon. No te daré mi Tablet para que veas tu telenovela…- le dijo de inmediato Topacio, sin el ánimo de escuchar los pedidos de la digimon.

-¡EL FRAGMENTO DE….!- dijo la digimon, pero la comunicación se cortó por interferencia.

Los soldados y Green miraron confundidos a Topacio, quien miraba el aparato, seria.

-… Algo está pasando…- murmuró la peliceleste, pero cayó al piso junto a sus soldados cuando una onda digital apareció en medio de la sala médica, causando levemente una ventisca en el lugar.

De la onda digital salió Mephismon, el cual había vuelto a tomar la forma oscura de Shoutmon, aterrizando sin problemas en el salón.

-¡¿E-El rey…?!- se alarmaron los enfermeros, al mismo tiempo que Green sacaba su arma…

Pero al segundo siguiente, varios látigos oscuros salieron de la sombra del dragón negro, atrapando a todos los humanos presentes, a excepción de la mujer inconsciente en la camilla.

-… ¿Qué le han hecho a Yuno?- exigió saber el dragón oscuro, mirando con sus ojos ámbar a cada uno de los humanos, claramente enfurecido.

-¿E-El fragmento… de Apocalymon…?- murmuró Topacio, atrapada, pero aún así fue capaz de apretar un botón de alarma de su cinturón.

Al reconocerla, Mephismon levantó su mano, dispuesto a acabar con la humana que había experimentado con Kokoromon…

… Hasta que el gemido de dolor de Yuno le hizo reaccionar.

-¡Yuno!- el dragón se volteó, para ver que la mujer estaba recuperando el conocimiento- ¡Aguanta, Yuno!- se le acercó, preocupado.

-¿E-Eh….?- la pelinaranja entrecerró sus ojos, tratando de vislumbrar la silueta del digimon oscuro- ¿S-Shoutmon… kun…?- murmuró, débil.

-¡Tranquila, Yuno! Te sacaré de aquí, pero primero les haré pagar a estos humanos…- Mephismon miró indignado a los soldados que aún tenía atrapado con sus látigos.

Yuno frunció el ceño, cansada y confundida…

… Algo no estaba bien…

No era por la piel y los ojos del dragón… Era algo más…

-… Ah…- comprendió la mujer, levantando apenas su mano y acariciando la mejilla del dragón, tomando de inmediato su atención-… Eres… ¿Ryu…?-

Aquello dejó sumamente quieto a Mephismon.

-¡¿D-De qué hablas, Yuno?! ¡Soy Shoutmon!- se señaló el dragón, confundido.

-… No… Je, Shoutmon-kun me llama Yuno-san…- le corrigió la mujer, sonriendo débilmente, dejando quieto de la sorpresa al digimon oscuro-… Tú… Eres uno de los fragmentos… de Apocalymon… No… Eres parte… de Ryu… De Ryudamon…- murmuró, pero el dolor de la herida pudo con ella, quedando inconsciente al mismo tiempo que su mano caía, dejando helado al dragón.

-¡YUNO!- se asustó Mephismon, hasta tomar su atención cuando la puerta de la sala médica se abrió.

Salamandra, con su fragmento activado, había entrado, sumamente serio.

De un chasquido, salieron de su sombra látigos que destruyeron los que retenían a Topacio y sus soldados, liberándolos.

-… Así que… El tercer y último fragmento hace acto de presencia…- sonrió Salamandra, mientras Mephismon lo miraba seriamente- … Realmente crees que eres el rey, ¿verdad? Incluso tomaste esta apariencia, cuando sé que no es tu verdadero yo…-

-… Saca a V-mon-le ordenó Mephismon, gruñendo, rodeado de la oscuridad de Apocalymon.

Dentro del xros loader azul grisáceo, V-mon, quien llevaba una banda de vidrio que ocultaba sus dañados ojos, tragó saliva al escuchar eso.

-… Crees que eres el rey… y tienes sus emociones negativas, como la venganza… Pero aún así, también el aprecio, ¿no?- el hombre miró a la inconsciente Yuno- ¿Qué buscas aquí realmente?-

-¡¿Qué otra cosa…?!- rugió Mephismon, mientras, de a poco, tomaba su verdadera forma, aunque de menor tamaño, para no destrozar la sala- ¡Demostrar que soy el verdadero Shoutmon…! ¡Recuperar a Taiki y a Kokoromon…! ¡Eliminar a Gumdramon…!- aseguró el carnero, indignado.

Aquello tomó la atención de V-mon dentro del xros loader, el cual levantó la cabeza, confundido.

-¿A Gumdramon…? ¿Por qué a ese niño?- sonrió Salamandra, curioso.

Mephismon solo rechinó los dientes, enfurecido, con la data oscura a su alrededor moviéndose peligrosamente.

-No importa lo que diga, no entenderás tu posición, ni tu propia identidad- aseguró Salamandra, sonriendo- Estás tan confundido… Aún así, tratas de ser el rey y al mismo tiempo no… Absorbiste a Omegamon Zwart, ¿verdad? Puedo sentir sus datos en tu programa… Y mírate, queriendo ahora salvar a Kudou Yuno… Tu mente está tan confusa…- señaló, sin inmutarse de que Mephismon lo hubiera agarrado con fuerza, asustando a sus soldados.

-¡Salamandra!- Topacio levantó su arma al igual que Green.

-Tranquila, Topacio. Estamos en una sala médica. Las armas no están permitidas, es de mala educación- sonrió sin inmutarse el rubio, mirando al enfurecido digimon que lo retenía-… Aunque estás confundido y enojado… ¿Puedes sentirlo…? ¿Cómo mi fragmento resuena con tu programa? ¿Cómo ambos muestran extraña preocupación por ver a Kudou Yuno herida…?- señaló, dejando quieto al digimon carnero- Aunque yo sea una parte del fragmento lógico de Apocalymon, y tú su parte emocional… Parece ser que, por el Eclipse… Las memorias de una de nuestros componentes comienza a florecer… Las memorias de Ryudamon-

Mephismon frunció el ceño, deseando aplastar al humano, pero miró de reojo a la inconsciente Yuno.

-… Te ofrezco una opción entretenida-le dijo Salamandra, sin dejar la sonrisa, tomando su atención- Sé que no serás mi aliado, y por lo que veo, tampoco de Kudou Taiki-kun- señaló, haciendo fruncir el ceño al carnero-… Pero te necesito para reformar a Apocalymon…-

Pero no pudo terminar, ya que Mephismon lo tiró con fuerza al piso, haciendo temblar la habitación, asustando a los soldados.

-¡QUIÉN CONTROLARÁ A APOCALYMON SERÉ YO!- rugió el carnero, emanando más data, pero abrió los ojos sorprendido cuando V-mon salió del xros loader, sacudiendo con fuerza su espada, haciéndole retroceder hasta chocar contra una pared.

-V-Vaya… No me dejó terminar…- sonrió adolorido Salamandra, mientras V-mon aterrizaba.

-¡¿N-No habías dicho que no hay que pelear aquí?!- le preguntó molesta Topacio, yendo a la camilla donde reposaba Yuno, para así vigilar que estuviera a salvo.

-En mi defensa, Topacio, no fui yo el que empezó- aseguró el rubio, sentándose adolorido, mientras sus soldados apuntaban a Mephismon con sus armas, el cual se incorporó levemente, tapando la herida ocasionada por la Reliquia de V-mon- ¿Cómo funciona tu nueva vista, V-mon?- le preguntó a su compañero.

-Más que ver, solo puedo sentir las siluetas…- le dijo el dragón, frunciendo levemente el ceño- Los datos de los humanos y de los digimon… Aunque el programa de este tipo es mayor que el tuyo, Salamandra- le aseguró, serio e incómodo.

-V-V-mon… Maldito traidor…- gruñó Mephismon, asustando al dragón.

-¡N-Nunca he traicionado a satanás!- le dijo V-mon, nervioso

-Jajaja. Confunde el resentimiento del rey y cree que es el suyo- sonrió Salamandra, levantándose y limpiándose el traje, mientras sus heridas sanaban- Realmente, que existencia más lamentable y menos cooperativa- ante sus palabras, Mephismon gruñó con fiereza, asustando a V-mon y a la mayoría de los soldados, aunque Topacio frunció el ceño, sin alejarse de la camilla de Yuno, para mantenerla a salvo- … Dime… ¿Te apetece una cacería?-


Digimon Land.

El ambiente en aquel parque de diversiones digital había cambiado abruptamente, puesto que los heridos, tanto humanos como digimon, habían sanado completamente gracias al poder de AlphaKokoromon Superior Mode.

Se podía ver a algunos digimon llorando de alegría al ver que sus compañeros habían sanado, junto a varios civiles contentos y aliviados de haberse recuperado.

Todo gracias a Kokoromon, quien, en aquel momento, dormía profundamente en el xros loader gamma de Tagiru, recuperando así la energía que perdió al sanar a todos en Digimon Land. La digimon dormía apoyada en MetalTyranomon, con Gumdramon, Bearmon y Pagumon dormitando a su lado, haciéndole compañía. Kotemon y los demás digimon observaban sonriendo aquello, aunque Breackdramon gruñía por lo bajo, celoso, incomodando a sus compañeros.

Tagiru miró la pantalla de su xros loader, sin poder evitar sonreír al ver a Gumdramon acurrucado, durmiendo junto a su querida amiga.

El joven sonrió más, pero levantó la mirada cuando Hideaki le dio un codazo, para que pusiera atención a la reunión.

Estaban en una tienda los jóvenes del Xros Heart, junto a Shoutmon, Dorulumon, Ballistamon, Damemon y Cutemon. También estaban Samanta, Jack, Sky, Dante, Tailmon, Wizardmon, el Relojero y los jóvenes que poseían un Emblema, incluyendo a Raquel, quien había sanado gracias al poder de AlphaKokoromon Superior Mode.

El pequeño Dante tomaba gustoso un jugo en caja que le habían dado, mientras que Zenjirou no paraba de sacar las galletas que había en la mesa, por lo que Akari le piñizco la mano, deteniendo su ataque.

-… Ya veo… Usan el edificio que le pertenece a la empresa Aonuma tanto en su versión en el mundo humano como en el Digiquartz para crear armas y Kopierer- murmuró Taiki, observando el holograma que había hecho aparecer Kyosuke con un aparato.

-Así ahorran mucho espacio…- admitió el Relojero, acariciando su barba.

-¿La Puerta Final que están construyendo para el Eclipse…?- le preguntó Kiriha al pelinegro, serio, mientras Nene, con Luminamon en su cabeza, miraba preocupada la instalación, pensando en su hermano…

… Esperaba que Yuu estuviera bien…

-La construyen en el mundo humano- le respondió Kyosuke, apretando un botón, haciendo zoom al holograma, mostrando así cuatro enormes antenas en construcción.

-¿Son… antenas de televisión?- parpadeó Hideaki, igual de confundido que Shouta, Mizuki y Kaoru.

-Cuando mencionaron que el enemigo estaba construyendo algo… pensé…- parpadeó Miho, igual de confundida, comiendo una de las galletas en la mesa.

-Se ven enclenque- dijo honestamente Zenjirou, a lo que Akari le dio un codazo.

-Tomen esto en serio- Dorulumon miró seriamente a los jóvenes cazadores, sobresaltándolos.

-Tranquilo, Dorulumon- sonrió Taiki, paciente, mientras Shoutmon negaba con la cabeza.

-Se equivocas si no se tranquilizan- suspiró Damemon.

-La funcionalidad de algo no se equipara a su aspecto- explicó Samanta, cruzada de brazos- Aunque se vean como simples antenas, su funcionamiento es muy complejo. Sin tomar en cuenta que han sido creados en base a tecnología muy antigua- indicó- Mediante esto, y los virus solitarios, podrán utilizar la energía del Eclipse para unir los fragmentos de Apocalymon- les recordó.

-Junto con la energía de Kudou Yuno- agregó Kiriha, mirando a Taiki, el cual asintió, serio, preocupado por su madre. Shoutmon frunció levemente el ceño, también preocupado.

-… No podemos negar que igual podrían ver cable en buena calidad…- admitió Jack, sin poder resistirse a hacer el comentario, a lo que Sky y Tagiru asintieron de acuerdo, los tres masticando unas galletas.

La Jefa pisó con fuerza el pie de la liebre blanca, haciéndole chillar, muy adolorido.

Dentro del xros loader gamma plateado, Slayerdramon suspiró, mientras Valkyrimon sonrió, sumamente feliz.

-… Como dices, Samanta. Sin los virus solitarios, no podrán utilizar la Puerta Final- señaló Taiki, serio- ¿Dónde están?- miró a la niña- Luke fue quien los guardó cuando se los quitaron a Kokoromon y a Sky-chan- le indicó.

-… No tengo ni la más mínima idea- confesó Samanta, incómoda.

-¡¿E-EH?!- la quedaron mirando sus hermanos, Tagiru, Akari, Cutemon y Zenjirou, atónitos.

-¡¿N-No sabes dónde están esas cosas tan importantes?!- se restregó el cabello Zenjirou, alarmado, mientras Ballistamon y Kyosuke intentaban calmarlo.

-¿Cómo que no sabes?- Shoutmon frunció el ceño, serio- ¡Esas cosas fueron un estigma para Kokoromon y para Sky-chan!- le señaló, molesto.

-No me digas, ¿en serio? En estos cinco años nunca me di cuenta de ese detalle. Gracias por iluminarme- lo ignoró Samanta, cabreando al dragón.

-Tranquilo, tranquilo- Taiki agarró de los hombros a su amigo, tratando de calmarlo.

-Se supone que Luke iba a mantenerlos seguros, ¿verdad?- le señaló Kiriha a su prima.

-Era el plan inicial, pero tal parece que él no los tiene- indicó la niña, mirando a Kyosuke.

-Por la información que logramos tener durante el tiempo en la nave, antes de la traición de Shademon y Vamdemon, Deimos nos informó que no detectó la presencia de los virus en el Disco Misterioso de Luke- informó Kyosuke, serio- Así que el Proyecto, por ahora, tampoco sabe dónde están-

-Esto es malo…- frunció el ceño el Relojero, serio y preocupado.

-¿Qué haremos-kyu?- se preocupó Cutemon, tomando jugo en caja.

-… ¿Luke volvió a hacer algo sin consultarte?- le sugirió Raquel a la Jefa, seria.

-Primero el programa de los Emblemas, y ahora esto…- se fastidió la niña- Lo he consentido demasiado por darle tanta libertad-

-… ¿Ves? Tienes favoritos entre nosotros- le indicó Jack, dolido.

Su hermana menor le pisó el otro pie, a lo que la liebre terminó acurrucado en el piso, con Sky dándole palmaditas.

Dante parpadeó al notar que Valkyrimon, en el xros loader gamma plateado, soltó una leve carcajada.

-Entonces, ¿supones que esta es otra artimaña de Luke para evitar el plan que tienes?- frunció el ceño Tailmon, mientras Wizardmon meditaba.

-Plan que no nos has contado a la totalidad- señaló Kiriha.

Samanta solo frunció el ceño, seria, mientras Tagiru la miraba, sumamente serio… porque él había visto lo que quería la niña, a través de lo que le mostró Quartzmon cuando agarró su rostro antes…

… Si es que lo que le mostró el digimon era real o solo una ilusión para jugar con su cabeza…

"… Por eso tengo que preguntártelo, Samanta…" apretó un puño el niño, nervioso y serio, extrañando y preocupando a Hideaki.

-… El objetivo de Jäger es traer de regreso a Ryudamon- les dijo Samanta, seria- Eso es algo que no ha cambiado-

-Y supongo que planeas aprovechar las cosas que ha construido el Proyecto para juntar a Apocalymon, y hacer que Kokoromon lo purifique por completo- frunció el ceño Kiriha.

-Eso sería demasiado arriesgado- le indicó su prima, sonriendo sarcásticamente- En el momento veré si es posible o no recuperar a Ryudamon. Siempre hay otras formas- agregó.

-Mph. Como siempre, no eres nada cooperativa- negó con la cabeza Kiriha.

Taiki sonrió paciente, hasta notar algo en su xros loader gamma, por lo que miró su brazo.

-¿Todo bien, Pinocchimon?- le preguntó al digimon marioneta, que se escuchaba meditando.

-¿Mm? ¿Yo? ¡Y-Yo no sé nada…!- se defendió el digimon en la pantalla, incomodándose cuando su nariz creció.

-¿Estás mintiendo? ¿Qué ocultas?- Shoutmon entrecerró los ojos, desconfiado, sobresaltando a su amigo.

"¿Q-Qué oculto…? ¡S-Sé dónde están esos virus…! ¡P-Pero no puedo decirlo!" Pinocchimon se tapó la boca, para no caer en la tentación, sumamente nervioso, con el resto del Xros Heart mirándolo confundido.

Sabía que no era su deber hablar de esos virus, por la relación de Kuro con ellos… Aún así, esa posición era muy incómoda…

-… ¿Tal vez comió mucha carne digital?- sugirió Taiki, a lo que Shoutmon movió los hombros, sin saber.

-… Incluso aunque no sepamos dónde están esos virus, debemos hacer algo pronto. Yuu, Saburo-kun y Kudou-san… También Luke y Delta Arresterdramon… Debemos rescatarlos a todos- aseguró Nene, seria, a lo que Kiriha asintió- Pero antes… Tengo algo que declarar- admitió, tomando la atención del grupo y de Luminamon en su cabeza- Sam-chan, ¿tú sabías que mi madre…?- miró a la niña…

-… Mph… Hablan y hablan… Nunca pensé que harían cosas tan aburridas…-

Aquella voz interrumpió a Nene, quien se quedó quieta como los demás, al ver que, de la espalda de una sorprendida Samanta, había emergido Quartzmon.

-… Hola…- sonrió burlescamente el digimon, ladeando tenebrosamente la cabeza.

-¡¿Q-Quartz…?!- murmuró sorprendido Taiki, al mismo tiempo que Shoutmon se ponía frente a él, alerta, y DarkKnightmon, en el xros loader de la sorprendida Miho, fruncía el ceño, serio.

-¡¿Q-QUARTZMON…?!- Tagiru fue el primero en reaccionar, solo para que el digimon blanco le quitara el jugo a Dante y se lo tirara a la cara, provocando que cayera al piso, para sobresalto de Hideaki.

El pequeño Dante miró su mano vacía, con una lagrimita por no haber podido tomar todo su jugo.

-Jejeje. Eso fue muy divertido- aseguró Quartzmon, apoyando el mentón en la cabeza de Samanta, la cual parpadeó varias veces, fastidiada.

-¡S-Samanta…!- Jack miró preocupado a su hermana, en pose de pelea al igual que Shoutmon, Dorulumon, Ballistamon y Damemon, mientras Kiriha y los demás jóvenes preparaban sus xros loader.

-R-Raquel… Haz el favor de no apuntarme con un rifle. No me gustaría morir de esa forma- le dijo de inmediato Samanta a la mujer, quien había levantado su arma, seria.

-¿E-Entonces él es Quartzmon?- gruñó Tailmon, preparada igual que Wizardmon.

-Todos, tranquilos…- pidió fastidiada Samanta, tratando de ignorar como Quartzmon le tiraba una mejilla, entretenido por el miedo que produjo su presencia- S-Se podría decir que tengo un trato de alto al fuego con este psicópata digital- indicó.

-¿Un trato…? ¿Por eso no te ha controlado, como le pasó a Astamon?- comprendió el Relojero, el cual había levantado levemente su bastón.

-¡A-Aún así…!- gruñó Jack, desconfiado, mientras Hideaki ayudaba al pobre Tagiru a levantarse.

-Tienen miedo, ¿verdad? ¿A cuántos en esta sala transformé en datos…? ¡A todos en este parque, ¿verdad?!- sonrió cruelmente Quartzmon, haciendo que los jóvenes fruncieran el ceño, desconfiados y nerviosos- ¿Y cuántos lograron sobrevivir a mi ataque…?- miró a Taiki y a Shoutmon, divertido.

Taiki frunció el ceño, colocando instintivamente su mano en su pecho, recordando cuando ese digimon controló a Ryouma para que lo atacara con el Brave Snatcher, a él y a OmegaShoutmon, quedando el joven con una cicatriz producto de la herida, al igual que su compañero.

Miró preocupado al dragón rojo, el cual no había dejado su pose de pelea, gruñéndole a Quartzmon, sumamente desconfiado, y con claro rencor en sus ojos por lo que había sucedido esa vez.

-… Tus amenazas pierden valor cuando nos damos cuenta que te acabas de vengar de Akashi tirándole una caja de jugo. Que venganza más planificada y cruel- indicó fastidiada Samanta al digimon blanco, tratando de ignorar como él le tiraba la mejilla sin parar.

El digimon blanco alargó una de sus manos, quitándole el jugo al nervioso Cutemon, para tirárselo a la cara a la niña, para sobresalto de sus hermanos.

-… ¿Ahora lo entiendes, Kiriha…? Esta clase de cosas he tenido que aguantar desde que tengo a este psicópata…- le dijo Samanta a su primo, tratando con todas sus fuerzas ser paciente con el digimon blanco, quien seguía tirándole la mejilla.

-M-Mi jugo-kyu…- gimoteó Cutemon, haciendo sonreír nerviosa a Luminamon.

-¡Q-Quartzmon…! ¡E-Eres un…!- trató de reclamarle Tagiru, pero aún estaba desorientado por el golpe, por lo que Hideaki lo sujetaba para que no volviera a caer.

-… Es como un niño berrinchudo y malo- les comentó en un murmuro Kaoru a Mizuki y Miho, las cuales asintieron con ella, de acuerdo.

-Bueno, Quartzmon es un digimon que ha existido ya casi dos años. Es normal que, a pesar de su peligrosidad, muestre facetas así… Creo~…- admitió el Relojero, incómodo y nervioso.

-Quartzmon, ¿qué es lo que quieres? Dudo que te aparecieras solo para interrumpir y soltar estupideces- le dijo Kiriha al digimon blanco, serio y molesto.

-… Je…- sonrió cruelmente Quartzmon- ¿Estupideces? Estupidez es lo que ustedes dicen- aseguró el digimon, haciendo fruncir el ceño a Taiki- Hablan como si fueran capaces de impedir que Apocalymon sea revivido. ¡Es sumamente absurdo! ¡No tienen el Brave Snatcher! ¡No cuentan con el poder de los líderes legendarios! ¡Al único que tienen es a Kudou Taiki, con un rey enamoradizo y quebradizo!- se burló, a lo que Ballistamon y Damemon sujetaron de inmediato a Shoutmon, al ver que gruñía y parecía abalanzarse a Samanta, la cual seguía intentando ser paciente- ¡Ni hablemos del cazador que fue escogido porque Ryouma, el verdadero Cazador Estrella, era un traidor! ¡La segunda opción que ni siquiera podría hacer algo sin el poder de los líderes!-

-¡¿AH?!- se indignó Tagiru, sujetado por Hideaki y Shouta para que se calmara.

-¿C-Cómo puede ser tan…?- murmuró Jack, nervioso y enojado, con Sky y Dante detrás de él, nerviosos.

-¿Qué les pasa? Han leído los informes, saben lo que este tipo ha hecho- les indicó Samanta a sus hermanos, moviendo la mano como si espantara una mosca.

-¡N-No significa que podamos verlo tranquilamente!- aseguraron Jack y Sky, nerviosos, a lo que Dante asintió varias veces, de acuerdo.

-Escuchen bien. No importa qué, los tres fragmentos de Apocalymon nos uniremos el día del Eclipse. Eso es algo que cada uno de nosotros tiene en mente, sin importar nuestra situación- les dijo Quartzmon, serio pero con una mirada vil en sus ojos, haciendo fruncir el ceño a los jóvenes y que los digimon no dejaran su posición de combate, alertas- ¿Significa que somos amigos? ¿Compañeros? ¡EN LO ABSOLUTO!- aseguró, con una sonrisa cruel- ¡SOMOS PARTE DEL MISMO SER, PERO NO SOMOS ALIADOS! ¡UNO DE NOSOTROS SERÁ EL QUE CONTROLE LA MENTE DE APOCALYMON! ¡UNO DE NOSOTROS SERÁ LA BASE PARA NUESTRA FORMA ORIGINAL, MIENTRAS LAS PARTES DÉBILES DESAPARECEN Y SE UNEN AL MÁS FUERTE!- señalaría- ¡Por eso he decidido seguir el juego de la Jefa! ¡Por eso he decidido que la fuerza del Xros Heart trabajará para mi! ¡Para que yo sea el digimon base! ¡Yo derrotaré a los otros fragmentos, y yo les lideraré! ¡¿Entienden?! ¡Apocalymon será revivido, no importa qué! ¡Así que no traten de pensar y planear impedirlo!- ordenó.

-¡Si crees que te ayudaríamos, estás muy equivocado!- le dijo Hideaki, molesto.

-Hablas como si tuvieran alguna opción- sonrió cruelmente Quartzmon, asustando al niño.

Tagiru y los demás fruncieron el ceño, molestos…

-… ¿Por qué…?- habló Taiki, a lo que el digimon blanco lo miró- ¿Por qué quieres ser la base de Apocalymon? ¿Para ser capaz de absorber de nuevo el mundo humano mediante el Digiquartz? No te veo usando el mismo plan dos veces, Quartzmon- le dijo, serio.

El digimon frunció sus ojos, sumamente serio.

-… Además, sabes que Jäger desea recuperar a Ryudamon… Purificar a Apocalymon…- indicó Taiki, serio-… ¿Por qué entonces tú…?-

-¡NO NECESITO EXPLICAR NADA!- aseguró de inmediato Quartzmon, aumentando su tamaño, alertando a los digimon- ¡SOLO DEBEN OBEDECERME, A MENOS A QUE NO QUIERAN RESCATAR A SUS PRECIADOS AMIGOS Y FAMILIARES!- indicó, sonriendo cruelmente.

-Y-Ya has dicho… suficiente…- murmuró Samanta, colocando su mano en Colgante, haciendo que la piedra brillara y que, en consecuencia, Quartzmon volviera a su cuerpo, desapareciendo.

Jack ayudó de inmediato a su hermana a mantenerse en pie, mientras Kiriha, Sky, Dante y Akari se le acercaron.

-Se acerca el Eclipse… Mantenerlo bajo control va a ser más difícil- le dijo Samanta a su primo, seria pero cansada, preocupando al rubio.

-… Revivir a Apocalymon, y purificarlo… Es lo único que podemos hacer, ¿verdad?- murmuró Nene, preocupada.

-… Incluso aunque impidamos que Apocalymon fuera revivido después del Eclipse, los tres fragmentos se mantendrán. No podríamos salvarlos, e impedir que hayan daños colaterales por la ira de cada uno sería casi imposible- le dijo Taiki, serio-… Y no podría darles la espalda en ese caso… Quartzmon tiene razón- miró al grupo, serio-… No hay de otra: debemos revivir a Apocalymon para detener todo esto- sentenció.

-¡¿E-En serio…?!- lo miraron Hideaki y Zenjirou, atónitos, mientras Miho, Mizuki y Kaoru intercambiaron mirada, preocupadas.

-Si Taiki lo dice, entonces debemos hacerlo- aseguró Shoutmon, serio, a lo que Akari asintió, sonriendo.

-Exactamente- asintió Dorulumon, apoyado por Ballistamon y Damemon.

-¿Tagiru?- Taiki miró a su amigo, el cual fruncía el ceño, nervioso.

-… Sí, Taiki-san. ¡Yo, el cazador super estrella, estoy de acuerdo con esto!- se señaló con el pulgar- ¡Además, con el poder de Kokoromon, podremos purificar a Apocalymon, ¿verdad?!- indicó, mirando a Samanta.

-No solo con la Reliquia de Kokoromon. Lo conveniente, sería tener las cuatro Reliquias a nuestro favor- señaló Kiriha, serio.

-P-Pero, Kiriha… La cuarta reliquia…- le señaló Sky, preocupada.

-… La tiene el traidor de V-mon- gruñó Gaiomon, en el xros loader de su amiga, frunciendo el ceño, enojado, preocupando a su amiga.

Wizardmon cerró los ojos, serio.

Shoutmon frunció el ceño, enojado al recordar a aquel dragón… Y todo lo que ocasionó su traición…

Los jóvenes intercambiaron mirada, serios y preocupados.

-… V-mon es un digimon, es leal completamente a su compañero humano- les dijo el Relojero, serio, tomando su atención- Veo muy difícil que él tenga un cambio de corazón y decida ayudarnos, siendo su compañero el mismo Salamandra-

-… Soy consciente de eso- le dijo Taiki, serio- Y no creo que quitarle la Reliquia para que la usemos sea fácil. ¿Qué opinas, Samanta?- miró a la niña, quien se había sentado en una silla, para descansar.

-¿Insinúas que algún otro digimon debería usar esa Reliquia?- dijo Tailmon, seria.

-… Está el hecho que la Bestia Sagrada que se encuentra en la Reliquia de V-mon, Zhuqiaomon, el ave sagrada del sur, mantiene intacto su odio por la traición de su líder- indicó Samanta, seria- Dudo mucho que su Reliquia actúe de acuerdo a lo que queramos de forma sencilla, y menos aún que V-mon la entregue fácilmente…-

-… La única opción viable sería eliminar a V-mon, y lograr suprimir el odio de Zhuqiaomon- sentenció Kiriha, serio- Y como dijo Tailmon, que uno de los nuestros se vuelva su nuevo portador- miró a Taiki, quien cerró los ojos, comprendiendo a su amigo.

… Todo indicaba, que los nuevos xros loader gamma permitían a los digimon con Reliquia alcanzar no solo el Superior Mode, sino que también el Limit Break, etapa a la que llegó AlphaKokoromon evolucionando a Eirmon…

… Por lo tanto, alguien con un xros loader gamma debería ser el compañero del digimon que escogieran para que fuera el nuevo portador para la espada de V-mon…

… Las dos opciones que habían eran Taiki o Dante…

"… ¿Tú podrías reprimir y calmar el odio de Zhuqiaomon, Shoutmon?" Taiki miró a su compañero, serio y preocupado, consciente del estado aún delicado de su compañero.

-¡Espera un poco, Kiriha-saaan!- se le acercó de inmediato Tagiru- ¡Sí, no niego todo lo que ha hecho V-mon…! ¡Pero FlameWizardmon y los demás me lo dijeron: cuando pelearon contra V-mon, él no actuó como si quisiera lastimarlos!- señaló su xros loader gamma en el brazo.

-Spadamon también me lo contó, Tagiru- le dijo Taiki, serio pero triste- Y aunque trato de pensar en alguna forma para ayudar a V-mon… No darle la espalda… Si él mantiene su lealtad hacia Salamandra, no habrá más opción que pelear contra él…- apretó su puño con fuerza, preocupando a Akari.

"… No se podría hacer nada por él, ¿no?" entrecerró los ojos Akari "Entonces… ¿Ni siquiera podríamos hacer algo para que Forward…? ¿Nada…?"

-¡V-mon me salvó, Taiki-san! ¡Cuando peleábamos contra Ogudomon…! ¡Él pudo haberme soltado y protegerse fácilmente del ataque de ese tipo…! ¡Pero me protegió…!- señaló Tagiru, determinado.

-… Entonces, según tú, ¿con eso podemos decidir que se redimió?- le preguntó Shoutmon, serio pero enojado, tomando su atención- ¡¿Cómo puedes decir eso después de que, por su culpa, tú perdiste a uno de los tuyos?!- exigió saber, dejándolo quieto.

-¡Cuernomon, cálmate!- le pidió Jack, nervioso, mientras Taiki lo miraba, triste.

-¡El rey tiene razón!- aseguró Vormundmon, en el xros loader gamma- ¡Por culpa de las acciones de V-mon, recibimos muchos daños! ¡Sin contar nuestras bajas y pérdidas…!- indicó, pero Samanta sacudió el aparato, para que se callara, aunque hizo que el resto de los digimon se marearan.

-¡Contrólate-kyu!- le pidió Cutemon al dragón, nervioso.

-¿Controlarme…? El solo recordar todo lo que pasé por culpa de ese traidor… - murmuró, a lo que Kyosuke bajó la mirada, ya que era consciente de aquello- Lo que le pasó a Kokoromon…- apretó con fuerza sus puños, aún enojado y dolido al recordar cuando su preciada amiga desapareció en sus brazos- ¡Sé realista, Tagiru!- le ordenó, mostrando los colmillos.

-¡No he olvidado a Betsumon, idiota!- le aseguró enojado Tagiru al dragón- ¡Tampoco a Wizardmon…! ¡A Knightmon…! ¡A ninguno de los que hemos perdido!- indicó- ¡Pero pensar en eso…! ¡No podría avanzar si solo retengo lo malo…! ¡No planeo olvidarlos, pero tampoco abandonar a V-mon!-

-¡Tampoco quiero abandonarlo, pero no haré oídos sordos a todo lo que ha hecho!- le indicó Shoutmon, serio, haciendo fruncir el ceño al niño.

-G-Ghiii. Samy, ¿no harás algo como darles un coscorrón para que se calmen?- se le acercó Sky, mirando nerviosa la discusión.

-… No tengo voz ni voto en este tema- le dijo Samanta, seria- No he conocido a V-mon, y es muy difícil que un digimon le sea desleal a su compañero humano- señaló- Si un humano le dice a su compañero que pelee contra el que fue su amigo, lo hará; si le dice que traicione a sus espaldas a otros, lo hará; incluso aguantaría los malos tratos que le dieran… La lealtad de un digimon a su compañero humano es algo que no puede tomarse a la ligera, Sky- sentenció, preocupándola.

-¡Gumdramon y yo nos encargaremos de V-mon!- le dijo Tagiru a Shoutmon, ambos enojados- ¡V-mon estuvo mayor tiempo en mi xros loader! ¡Encontraremos una solución!-

-¡Necesitamos el poder de Gumdramon, su Reliquia, para hacer frente al poder de Apocalymon, no para pelear contra V-mon!- le señaló enojado Shoutmon.

-¡Haremos las cosas a nuestra manera!- le dijo testarudamente Tagiru, pero se asustó cuando el dragón, enojado, hizo aparecer su micrófono.

-Shoutmon, cálmate- le pidió Taiki a su amigo, serio.

-¡Pero, Taiki…!- lo miró Shoutmon.

-Te comprendo perfectamente… No, aunque dijera eso, no podría comprender todo lo que sientes- le dijo su compañero, serio- Pero no puedes negar que todo indica que, todo lo que ha hecho V-mon, es a causa de las órdenes de Salamandra, su compañero. ¿Qué harías tú? ¿Qué pasa si yo te dijera que hagas algo que no quieres?- le preguntó, incomodándolo.

-… Yo…- murmuró Shoutmon, serio e incómodo.

-Haríamos lo que dijeras, sin importar qué fuera- le diría Dorulumon, serio.

-… Es nuestra lealtad de digimon hacia ti… Hacia nuestros amigos humanos- asentiría Ballistamon.

-Dorulumon, Ballistamon…- murmuró Akari, sorprendida al igual que Zenjirou.

-No importa qué, un digimon siempre hará lo que sea necesario por el bien de su humano… Eso lo sé muy bien-dame- aseguró Damemon, recordando su tiempo como parte del Bagra Army, cuando daba todo de sí para obedecer a Yuu en aquella época, a pesar de que estaba mal.

-¿Tú que dices, Samanta? ¿Crees que nos convendrá usar una de las Reliquias para pelear contra otra?- Kiriha miró a su prima, la cual meditaba.

-¿Samy?- la miró Dante, preocupado.

-… Si fuera para conseguir esa Reliquia, estaría de acuerdo-indicó Samanta, seria- Pero sigo diciendo que Jäger no puede opinar sobre este tema. El Xros Heart resolverá el asunto de V-mon personalmente, así que dejen de hacer tiempo con sus peleas y volvamos al tema que abarca esta reunión- sentenció, mirando a Shoutmon y a Tagiru.

-E-Eso fue muy directa…- murmuró Jack, incómodo como los jóvenes.

-… Mph- bufó Shoutmon, molesto.

-¡MPH!- bufó Tagiru, intentando imitarlo, enojando más al dragón.

-Calmadito, calmadito- le pidió Ballistamon, mientras Taiki sonreía apenado, Kiriha negaba con la cabeza y el Relojero suspiraba.

-¡Taiki!- a la tienda entró sonriendo Lunamon junto a Spadamon, ambos acompañando a Ryouma, Airu, Ren, Kuro, la pequeña Ai, Kiichi y Makoto.

-Perdonen la espera, pero es difícil caminar con tantos digimon contentos- admitió Spadamon, mirando como Ren sujetaba al indignado Kuro.

-¡Ese dinosaurio gigante la pensará dos veces cuando se atreva a pisarme la cola por accidente!- gruñó el ciborg.

-¿S-Se pelearon en el camino?- parpadeó Akari, nerviosa.

-Smith y Ryan se quedaron calmando al DarkTyranomon- dijo Airu, sin querer darle importancia al asunto, con la gatita Ciel en brazos, incomodando más a la pelirroja.

Raquel solo negó levemente, seria.

-¡Gracias por sanar a mis amigos~!- la pequeña Ai se acercó a Samanta, dispuesta a darle un abrazo, pero el pie de la pelicafé en su rostro la detuvo, sobresaltando a los presentes.

-¡S-Sam-chan!- se asustaron Akari y Nene, mirando como la niña sacudía sus brazos al tener el pie de Samanta en el rostro.

-¡¿Q-Qué estás haciendo?!- la Mikemon líder salió del xros loader de la pelinegra, indignada, pero el pie de la pelicafé aterrizó con fuerza en su rostro, liberando a la pobre Ai.

-Detesto que me atribuyan las cosas buenas que hacen los digimon de Jäger- aseguró Samanta, presionando con fuerza su pie en el rostro de la felina, haciendo que la pequeña Ai sacudiera sus manos, nerviosa- Fue Kokoromon quien sanó a las personas y digimon en todo Digimon Land, no yo. Yo solamente la hice evolucionar, ¿entendido?- miró a la niña.

-¡S-Sí!- asintió rápidamente la pelinegra, a lo que la Jefa dejó tranquila a Mikemon, la cual terminó cayendo al piso, con la marca de pie en el rostro.

-… Sigo sin… creerlo… ¿Eres… la compañera… de Kokoromon…?- jadeó estática la digimon felina.

-No tienes piedad, ¿verdad?- Tailmon miró paciente a la pelicafé.

-No me gusta cuando a los humanos se les atribuyen los logros de los digimon. Es sumamente hipócrita- bufó Samanta, haciendo suspirar a sus hermanos y a los digimon de su xros loader gamma, aunque se escuchó a Valkyrimon sonreír, de acuerdo con ella.

-¿Nos hemos perdido mucho?- preguntó Ryouma a Taiki, notando las miradas que se tiraban Tagiru y Shoutmon.

-… Lo usual- sonrió Taiki, rendido, mientras su gata se bajaba de los brazos de Airu e iba a sus piernas, pidiéndole cariño, a lo que él la tomó en brazos.

-¡T-Taiki/-san!- lo miraron Shoutmon y Tagiru, ofendidos y avergonzados.

Jack y Sky reprimieron la risa, mientras Dante no dejaba de sonreír.

-Ahora que están todos, me gustaría confirmar algo- dijo Kiriha, serio, tomando la atención de todos- Ren, entrégame a Kuro- le ordenó al peliazul, dejándolo quieto.

-¡¿AH?! ¡¿Qué quieres conmigo?!- exigió saber el felino, ofendido, pero Kiriha lo tomó de la cola.

-¡C-Cuidado, que he visto al gato disparando misiles desde ahí!- avisó Hideaki, retrocediendo unos pasos al igual que Shota, Kiichi y Makoto.

-Aún no puedo creer que ese es un ciborg- admitió Tailmon, a lo que Wizardmon sonrió levemente.

-¡¿Qué planeas, Aonuma?!- le preguntó molesto Ren a Kiriha, el cual ignoraba las pataletas y amenazas del felino.

-… ¿Qué energía usa?- le preguntó el rubio, dejándolo quieto- ¿Energía solar? ¿O absorbe datos para mantenerse prendido?- frunció el ceño, sacudiendo levemente a Kuro, el cual, boca abajo, sacudía sus patas, indignado.

Airu miró nerviosa a Ren, mientras Ryouma fruncía el ceño, serio pero preocupado.

… Kiriha se había dado cuenta.

-Samanta, ¿recuerdas que fue Luke quien salvó a este gato?- Kiriha miró a su prima.

-¿Cómo olvidarlo? Le dio todo el armamento que me quedaba…- respondió la pelicafé, hasta meditar-… Ah… Ya veo…- suspiró, paciente.

-¿A-Acaso…?- comprendió Taiki, mirando sorprendido y preocupado a Kuro.

-¡¿De qué hablan?! ¡¿Pueden hablar para nosotros las personas normales?!- exigió Zenjirou, mirándolos confundido.

-La batería de Kuro- Kiriha le lanzó el gato a Ren, quien lo atajó de inmediato- Son los virus solitarios, ¿verdad?-

-¡¿E-EH?!- se sorprendieron los presentes.

Ren se aferró más a Kuro, mirando enojado a Kiriha, ignorando que el ciborg lo miró, sorprendido.

-¡¿L-Los virus…?!- retrocedió un paso Sky, nerviosa, a lo que Dante le abrazó la cintura, para tranquilizarla.

-¡T-Tranquila, Sky!- se le acercó Jack, preocupado por ella, ya que su hermana se tomó su mano, asustada, recordando la sensación de haber tenido esos virus en su piel.

Desde el xros loader verde agua, Gaiomon frunció el ceño, serio al ver a su amiga tan asustada.

-¡R-Ren…! ¡¿T-Tú lo sabías?!- le preguntó Tagiru, sorprendido.

-… ¿Y qué si lo sabía…?- murmuró el peliazul- ¡Todo esto es culpa de Jäger y del Proyecto Iluminati!- le gritó, preocupándolo- ¡No tendría que estar involucrado en esto si mi padre no fuera un espía de Jäger, y tampoco si ese estúpido de Forward no hubiera secuestrado a mi hermana y atacado a mi gato…! ¡¿Qué harás?! ¡¿Usarán a mi mascota…?! ¡¿Le quitarán la vida…?!- miró enojado a Taiki- ¡Supongo que como él no es un digimon, le darás la espalda, ¿no?!- exigió saber, a lo que el pelicafé frunció el ceño, mientras la gatita Ciel se asustaba por sus gritos.

-Ren, cálmate…- le pidió Ryouma, preocupado.

Kuro solo miraba sorprendido a Ren… Sabía que su dueño estaba en contra de que le quitaran eso virus como se llamen que le daban vida, pero no esperaba que… que mostrara tanto enojo y preocupación…

-Y-Ya veo… ¿Qué mejor forma para ocultar el virus solitario, que colocarlo en un experimento?- comprendió el Relojero, meditativo.

-¡Kuro no es un experimento!- le dijo indignada Airu al anciano, dándole un gran susto- ¡Y tú!- apuntó a Kiriha- ¡No importa lo apuesto que seas, no puedes ser así de irrespetuoso!- le recriminó, indignada- ¡¿Conoces el tacto?! ¡¿Tienes un poquito de inteligencia para saber qué es el tacto?!- exigió saber, poniendo mala cara, asustando a la mayoría de los jóvenes.

Kiriha la miró, tratando de mantenerse tranquilo, pero no podía evitar sentirse incómodo por la expresión de la rubia.

-Airu, tranquila- le pidió Taiki, serio- Ren, no le haremos nada a Kuro. Aún así, debiste habernos dicho que Kuro tenía los virus solitario- le señaló.

-¡¿Por qué…?!- frunció el ceño Ren- ¡Tu madre nos dijo que no dijéramos nada!- le informó, sorprendiéndolo.

-¡¿Y-Yuno-san sabía?!- murmuró sorprendido Shoutmon.

-¡Ella sabía, y nos dijo que no dijéramos nada…!- repitió el peliazul- ¡Porque ella no confiaba totalmente en Luke y en lo que podría pasarle a Kuro…!- miró a Samanta, serio- ¡Escucha, Jefa! ¡A mi no me importa ni me interesa Apocalymon!- le dijo, sacando su xros loader gris, haciéndole alzar la ceja- ¡No dejaré que por culpa de ustedes, mi gato se muera de nuevo…!- del xros loader salió Dracmon- ¡No les permitiremos hacer nada!-

-¡E-Esperen! ¡Podemos conversar esto!- les dijo Mizuki, preocupada.

-¡N-No es necesario pelear!- aseguró Miho, nerviosa, para sobresaltarse cuando Samanta se levantó, mirando seriamente al peliazul.

-¿S-Samanta…?- parpadeó Tagiru, nervioso, mirando como ella caminaba hasta quedar frente a Ren, el cual frunció el ceño, nervioso.

-¡S-Sam...! ¡R-Recuerda que Ren es solo un niño…! ¡Y-Y que prometiste no volver a pelear…!- le indicó Jack, agarrándose la cabeza, sumamente nervioso.

-N-No me importa quién seas- le dijo el peliazul a la niña, nervioso pero enojado- No me retractaré- se aferró con fuerza a Kuro, mientras Dracmon se preparaba- No perderé a nadie más por culpa de esta estúpida pelea- sentenció.

-…- Samanta lo miró unos segundos, seria… para después sonreír honestamente- Je. Me caes bien- le dijo a Ren, haciéndole parpadear, sorprendido, mientras los jóvenes se sorprendían y aliviaban- No te acobardas ni te retractas, aunque sé que eres de los que suelen usar trucos sucios. Esa terquedad tuya es como la del tío Héctor- se cruzó de brazos.

Taiki sonrió, aliviado, hasta sonreír nervioso al notar la carita que puso Tagiru, celoso.

-… No le llames tío a mi viejo- bufó Ren, incómodo pero aliviado de mantener sus extremidades intactas.

-Mira que te haces el valiente, pero estás todo contento~- se burló Kuro, a lo que Dracmon reprimió una risita.

-¡Y-Yo no estoy…! ¡T-Te estoy defendiendo, saco de tornillos!- lo miró ofendido el peliazul.

-Je. Nos parecemos un poco, y no solo porque nuestros xros loader tengan casi el mismo color- Samanta le dio una palmadita en el pecho a Ren, haciéndole parpadear, extrañado y sonrojado- Tranquilo. Si todo va como planeo, puede que la energía de los virus solitarios no sea necesaria-

-¿E-Eh? ¿P-Por qué dices eso?- se sorprendió Kyosuke- Según la investigación, tanto de Deimos como de Topacio, esos dos virus ayudarán a asimilar a los Kopierer para que den energía a la Puerta Final, y así, con el poder de Kudou-san, activarla- señaló.

-Esa es la fuente que descubrió el Proyecto, pero Jäger tiene la fuente original en sí, por decirlo de una forma- le dijo Samanta, sonriendo levemente, confundiendo a los jóvenes.

-¿A-Acaso…?- comprendió Taiki- ¡Claro! ¡Luke!- sonrió.

-¡¿Eh?!- lo miraron Jack y Sky.

-¡Piénsenlo! Los virus solitarios fueron creados usando los datos de Sky, ¿verdad?- señaló Taiki- Y los dos virus solitarios originales se pulieron usando los datos de Kokoromon, pero, a pesar de todo, la fuente de esos datos sigue siendo la oscuridad que heredó Sky de Luke- explicó a sus amigos.

-Una fuente de poder más poderosa que las dos utilizadas, al ser la fuente original- comprendió Kiriha, levantando las cejas.

-¿Podría funcionar?- le preguntó Nene a Luminamon.

-… Bueno… Podría… pero aún necesitarían datos digitales, y eso es algo que Zodiaco no posee- admitió la digimon conejo, meditativa.

-No soy un experto…- admitió Hideaki, levantando la mano para pedir la palabra- Pero, bueno… ¿No que el Digiquartz está compuesto de muchos datos? Quartzmon lo creó y una vez lo usó para volvernos datos, ¿no?-

-¿Usar el poder de Luke… y los datos del Digiquartz…?- comprendió Tagiru, sonriendo sorprendido.

-Ese era nuestro plan de emergencia, en caso de que Kokoromon y Sky no pudieran ser sanadas antes del Eclipse- señaló Samanta, cruzada de brazos.

-¡¿Significa que Kuro estará bien?!- se alegró Airu, mientras Ryouma sonreía, aliviado.

-¡¿P-Por qué no lo dijiste antes?!- le preguntó ofendido Ren a Samanta, extrañándola- ¡He estado con el temor de que vuelvan a esta hojalata en nada por mucho tiempo!- aseguró, sacudiendo a Kuro, cabreándolo.

-¡SERÁS….!- y el felino se le abalanzó, tirándole al piso y haciendo que se tiraran de las mechas, haciendo suspirar a Dracmon.

-¿Por qué diablos te lo iba a decir si ni siquiera sabía el estado de los virus solitarios?- bufó Samanta, fastidiada, quitándose el xros loader gamma del brazo- Mudo, atájalo- se lo lanzó a Dante, el cual lo agarró dando un saltito.

-¿Q-Qué estás haciendo?- se confundió Kiriha.

-Sigan con los detalles técnicos. Necesito descansar de tanto ruido- se despidió Samanta sin mirarlo, sacudiendo la mano- Jack, tú me pones al tanto- y sin más, se fue de la tienda, dejando sorprendido a los jóvenes, a los digimon, al Relojero, y a Raquel.

-… ¿Y se fue…?- parpadeó Mizuki, incómoda.

-Esa es la Jefa…- suspiró Jack, paciente, a lo que Sky le dio unas palmaditas.

-Las reuniones de Jäger no suelen durar tanto… y tampoco tienen tantas interrupciones- explico Slayerdramon dentro del xros loader.

-¿L-La aburrimos…?- gimoteó Akari, avergonzada, a lo que Cutemon le dio unas palmaditas.

-A-Al menos no nos golpeó por eso, Akari-kun- le indicó Zenjirou, mientras Ren se levantaba, con Kuro mordiéndole la nuca sin parar.

-Samanta no es así- suspiró Dorulumon, paciente, haciendo sonreír incómodos a los dos niños.

Tagiru, en cambio, miró seriamente como Samanta se había ido, lo cual había tomado la atención de Taiki.

-¿Todo bien?- le preguntó su amigo, tomando su atención.

-Y-Yo… Bueno…- trató de explicarse Tagiru- ¡GHA! ¡Soy malo con cosas tan delicadas!- se restregó la cabeza- ¡N-Nos vemos luego!- se despidió, saliendo rápidamente de la tienda.

-¡¿E-EH?!- lo miraron irse Hideaki, Shouta, Makoto y Kiichi, sumamente confundidos.

-¿S-Se fue…? ¿A-Así de simple…?- parpadeó el Relojero, sorprendido por semejante irresponsabilidad por parte del niño.

-¿Tagiru…? ¿Pasó algo?- se confundió Ryouma, mirando a Taiki.

-… Fue culpa de Shoutmon- Taiki, sonriendo, señaló a su amigo, sobresaltándolo.

-¡¿E-Eh?! ¡T-Taiki!- se ofendió el dragón, haciendo reír por lo bajo al Xros Heart, por lo que hizo una mueca, avergonzado.


Fuera de la tienda en la que se realizaba la reunión del Xros Heart y Jäger estaban haciendo guardia las tres Sistermon y Hackmon, mientras que el propio Gankoomon vigilaba a la intrusa de nombre Momoka, la cual seguía reposando en una rama de un árbol cercano junto a sus dos acompañantes.

-Vaya… Da la sensación que no te veo desde hace meses- le dijo Momoka al digimon, el cual solo frunció el ceño, serio.

-¿Ah? ¿Jefa?- Sistermon Blanc parpadeó cuando vio a la niña salir de la tienda sobándose el cuello- ¿Y Dante-kun?-

-Dante sigue estando mudo mientras todos hablan- le avisó la pelicafé, sin dejar de caminar.

-¿A-A dónde vas…? La reunión no termina- le indicó Hackmon, ofendido.

-Me cansé de tantos niños gritando y tirándose juguetes…- se alejó Samanta, prácticamente ignorándolo.

-¡I-Increíble que ella está relacionada a Dante!- se ofendió el pequeño dragón blanco.

-Y aún así, Dante la adora tanto…- suspiró Sistermon Noir-… ¿Qué haremos, Ciel-oneesan?- miró a su hermana mayor- Dante querrá ayudarla, sin importar qué-

-Como le dijimos a Taiki-kun: nosotros somos Guardianes del Mar Digital- le recordó la digimon, mirando su katana- Nuestro trabajo es velar por los datos de los digimon fallecidos en el Mar Digital, sin intervenir en el plano de los vivos… Tú y Blanc ya intervinieron suficiente en el incidente de la nave del Proyecto Iluminati- les señaló a sus dos hermanas.

-Oye, impedí que algunos humanos murieran aplastados. Eso debe contar- señaló Noir, ofendida.

-E-En cambio yo… Terminé herida y sin poder hacer casi nada…- gimoteó Blanc, apenada.

-Ja. ¿Y ustedes me regañan en los entrenamientos? Miren como pueden llegar a fallar…- bufó Hackmon… hasta asustarse por la mirada que le dieron las tres hermanas.

-Jo… Hackmon, ¿acaso quieres calentar un poco? ¿Cómo en los viejos tiempos?- sonrió tenebrosamente Noir, preparando sus pistolas.

-Opinar cuando ni siquiera estuviste ahí, en la zona de pelea… Supongo que hablas desde tu nula experiencia en la batalla, ¿verdad?- sonrió Blanc, preparando su lanza.

-Me has acompañado a mi y a Gankoomon a nuestras misiones en el plano de los vivos para obtener experiencia… Veamos si además de tener la lengua afilada has aprendido algo- sonrió Ciel, desenvainado su katana.

-¡NOOOOOOOOO!- trató de huir el dragón, pero Ciel le pisó su capa con fuerza, deteniéndolo.

Pero la amenaza de las hermanas se detuvo cuando Tagiru salió torpemente de la tienda. El niño se detuvo, mirándolas confundido.

-… ¿Vieron por donde se fue Sam?- parpadeó el niño, sonriendo confundido.

-Ah, por ahí- le indicó Ciel.

-¡Gracias!- se alejó raudamente Tagiru, extrañando a las hermanas y al dragón.

-Ah, amor joven…- suspiró Ciel, apoyándose en su espada, la cual clavó por accidente en la cola de Hackmon, haciéndole chillar.


-¡No puedo creer que realmente te escapaste de la reunión para hablar con la Jefa!- suspiró FlameWizardmon, mientras Tagiru pasaba por una calle, mirando de reojo como algunos digimon abrazaban a sus compañeros, aliviados de que hubieran sanado de sus heridas.

-Tu madre nos dijo que a veces eres muy irresponsable…- admitió Ogremon, incómodo.

-No piensa las cosas. Ni para la escuela ni con las chicas- suspiró Fugamon, a lo FlameWizardmon rió por lo bajo.

-¡¿Q-Qué hablaron con mamá…?!- se detuvo derrapando Tagiru, avergonzado.

-¡No griten! Kokoromon, Gumdramon, Pagumon y Bearmon siguen durmiendo- los regañó Kotemon, incomodando a los jóvenes digimon.

-Pero aún así, Tagiru… Estás actuando raro. Más de lo usual- hizo notar Sephirotmon, mientras el niño miraba para todos lados.

-Desde que Quartzmon te agarró del rostro- señaló Dagomon, cruzado de brazos, serio.

-¡Ah!- Tagiru alcanzó a ver a Samanta adentrarse a un sector arboleado del parque, por lo que fue en esa dirección.


Dentro del xros loader gamma, Kotemon miró paciente como Sephirotmon y Dagomon acumulaban datos oscuros por la furia al ser ignorados por el niño, incapaces de gritarle por los digimon que dormían profundamente junto a MetalTyranomon.

Gumdramon, durmiendo junto a Kokoromon, se acurrucó levemente, sintiéndose seguro junto a la digimon.


Tagiru caminó por la zona arboleada, notando que ya estaba anocheciendo en el parque. Aún así, se podían escuchar las voces alegres de los digimon por ver curados a sus compañeros humanos…

El niño sonrió, contento por eso, y orgulloso de que Kokoromon hubiera sido capaz de sanar a todos los digimon, cazadores y civiles.

"Kokoromon quiere ayudar a todos… Pero Samanta… Tú…" frunció el ceño, preocupado, pero se detuvo detrás de un árbol al ver a Samanta agachada junto a un riachuelo.

Iba a hablarle al ver que ella estaba tosiendo, pero se detuvo al ver que la niña… tosía sangre…

-… D-Diablos…- Samanta se limpió la sangre con el dorso de la mano, incómoda- A pesar de que soy lo más cercano a una aliada, Quartzmon, no planeas sanarme completamente, ¿verdad?- bufó, sobándose el costado, sintiendo varias punzadas de dolor.

No era solo el dolor constante de la maldición en su columna, prueba del daño que le ocasionó Salamandra… También era el dolor en cada músculo de su cuerpo. Por eso se fue de la reunión…

… Dolía tanto que quería chillar de dolor, pero no podía mostrar esa faceta frente a sus hermanos o el Xros Heart… Tenía que actuar, como siempre lo había hecho…

-¿Por qué lo haría...?- la silueta blanca del digimon emergió de la espalda de la pelicafé, ladeando su columna, para ver cara a cara a la joven- Mientras más emociones negativas tenga mi… contenedor, más fuerte me haré. Fue lo mismo con Astamon, y será lo mismo contigo, Jefa- aseguró, con sus ojos sonriendo cruelmente, para después desaparecer en datos.

-… Sí, sí…- Samanta se sentó, cansada.

… A pesar de que ella quería rechazar la idea, sabía que no podía negarlo más… Su cuerpo no iba a seguir aguantando más…

… Era humana… ya no podía esforzarse sobre los límites…

"Al menos… Necesito un último esfuerzo para el 31… Deberé descansar… pero en caso de que Mephismon vuelva a atacar…" frunció el ceño, incómoda y seria al sentir las constantes punzadas de dolor en su cuerpo…

"… Samanta…" frunció el ceño Tagiru, mirándola detrás del árbol "… Lo sabía, no puedes pelear más…" apretó sus puños, nervioso…

-… ¿Kokoromon despertó, Akashi…?- preguntó Samanta, sin mirarlo, sobresaltándolo.

-¡GHA!- el niño cayó sentado, sintiendo que el corazón le latía mil por hora por el susto- ¡¿S-Sabías que estaba aquí…?!- se le acercó gateando, atónito.

-Tu melodía- la niña se limpió la comisura de la boca- Fue por eso que Quartzmon salió a burlarse de mi. Sabe que su presencia te enojaría, Akashi- le indicó.

-¡Y por supuesto! ¡Es súper malo!- aseguró Tagiru, echando humo de la nariz, indignado.

-Quitando a la araña psicópata… Akashi, te hice una pregunta: ¿Kokoromon despertó o no?- le preguntó Samanta, fastidiada.

-¡¿A-Akashi…?!- la quedó mirando Tagiru, dolido- ¡L-Llámame por mi nombre!-

-Según la cultura japonesa, los amigos o cercanos se refieren al otro por el nombre- le indicó Samanta- Tú y yo no somos amigos- le recordó.

El joven se quedó de piedra, con una lágrimita.

-¡¿E-Es por lo que dije esa vez en la cancha de básquetbol?! ¡Ya me he intentado disculpar por eso!- gimoteó el niño, dolido.

-Ella sigue durmiendo- le respondió Kotemon a Samanta por el xros loader gamma, paciente- Está profundamente dormida con Gumdramon y nuestros amigos- agregó, mirando a la digimon durmiendo tranquilamente.

-… Es natural. Evolucionar tres veces en menos de un día en Superior Mode… Además que usó el Limit Break…- comprendió Samanta, meditativa, tomando la atención de Tagiru.

-E-Exactamente… ¿qué es el Limit Break?- le preguntó Tagiru, confundido, tomando su atención- C-Cuando el Proyecto atacó Digimon Land, y Arresterdramon y yo peleamos contra Tactimon… Salió esa posibilidad en el xros loader gamma… Pero no alcancé a activarla…- le contó.

-… Tampoco estoy muy segura, pero en el instructivo de Betsumon lo mencionó- le indicó Samanta.

-¡¿E-Eh?! ¡P-Pero Taiki-san y yo lo revisamos…!- el niño sacó y comenzó a hojear el cuadernillo- ¡E-Espera…! ¡¿El tuyo también vino con un instructivo?!-

-Revisa la página final- le indicó Samanta, paciente.

El pelicafé hojeó más rápidamente, hasta llegara la última página.

-¡Aquí está…!- parpadeó Tagiru- Veamos, Limit Break… "El Superior Mode es la forma que toma el digimon al usar el poder de la Reliquia Digital, pero el Limit Break es diferente. Utiliza el poder de la Reliquia y la convicción del digimon para crear un nuevo digimon…" ¿Un nuevo digimon? ¿Cómo Eirmon?- parpadeó.

-Tu gato no explica bien ahí qué es el Limit Break, pero yo creo que es la evolución del Superior Mode, en resumidas cuentas- admitió la pelicafé- Y tal parece, que el xros loader gamma es el único que permite alcanzar este nivel-

-… Eso… Eso significa… V-mon no podría alcanzarlo. Salamandra no tiene uno, ¿verdad?- se preocupó Tagiru.

-No que yo sepa. Los gamma son creaciones, o actualizaciones directas hechas por Sanzomon a un xros loader normal. Mi xros loader gamma sigue siendo el mismo que heredé de mi madre- le indicó Samanta, levantándose- Dudo que Salamandra pueda hacerse con esa información- agregó, dándose media vuelta para retirarse.

Quería estar sola… Todo su cuerpo le dolía demasiado…

-Pero… ¡S-Significa…!- se levantó torpemente Tagiru, a lo que ella se detuvo, un poco fastidiada- ¡Taiki-san o el pequeño diablillo mudo…! ¡Ambos tienen un xros loader gamma…! ¡¿Uno de los dos debería ser el que obtenga la Reliquia de V-mon para usar todo su poder y llegar al Superior Mode y al Limit Break?!- señaló, indignado y asustado.

-… Eso es algo que ustedes deben decidir- reiteró Samanta, seria, haciendo fruncir el ceño al niño, ofendido- Pero creo que la mejor opción serían Kudou y el Rey- admitió, haciendo fruncir más el ceño a Tagiru- Tienen la experiencia, el poder y los lazos suficientes para tratar de eliminar el odio de la Bestia Sagrada en la espada de V-mon, por lo que dominar el Superior Mode y el Limit Break no sería un problema para ellos- indicó, sin mirarlo- El pequeño diablillo mudo no es buena opción. Creo que el compañero de Dante es Hackmon, pero tengo entendido que ese dragón chillón está entrenando con Gankoomon y Sistermon Ciel. No podrían con una Reliquia como la de V-mon- sentenció- No están listos-

-¡¿Entonces estás bien con que… con que debamos pelear contra V-mon…?!- se indignó Tagiru.

-… ¿Y siquiera importa lo que yo diga?- lo miró Samanta, fastidiada, incomodándolo- ¿Cuándo ha sido el día que tú has escuchado a alguien, Akashi? Tienes la idea fija de ayudar a ese digimon, ¿verdad? Entonces deja de buscar la aprobación o el apoyo de alguien- le pidió- Siempre has hecho las cosas sin importar la opinión de otros, y las sueles hacer a tu modo, como cuando cazaste a DarkKnightmon para salvarlo y ayudar a Amano- le señaló, haciéndole parpadear sorprendido- Si es tu deseo y el de Gumdramon ayudarlo… ¿Quién diablos soy para detenerte?- sentenció, sonriendo irónica, mirándolo de reojo.

Tagiru parpadeó varias veces, para después sonrojarse un poco, tímido.

-… Esa es mi opinión con el tema de V-mon- le dijo Samanta, tomando su atención- Ahora que la sabes, te pido me dejes tranquila. Necesito pensar unas cosas a solas- pidió, seria, sintiendo como las punzadas de dolor en su costado aumentaban.

Si no fuera buena actuando, estaría acurrucada en el piso, gruñendo de dolor.

"Pero claro está, que no pienso mostrar semejante debilidad" bufó, comenzando a irse.

-…- el niño la miró preocupado, para después fruncir el ceño, ofendido- ¡NO!- le gritó, echando humo de la nariz, haciendo que ella se detuviera y lo quedara mirando.

-… ¿Es por lo que te hace el pequeño diablillo mudo?- sugirió fastidiada Samanta- Eres un niño grande. Puedes defenderte solo- le indicó.

-¡No es eso!- negó varias veces Tagiru- ¡Aunque ayudaría que hicieras algo con Dante! ¡No dejaba de pisarme en la reunión!- levantó su pie, para que viera su pisoteada bota- ¡Pero eso no es lo que me importa!- apuntó a la incómoda joven- ¡Samanta, tengo que preguntártelo…! ¡Cuando Quartzmon me agarró del rostro…! ¡Vi…! ¡Te vi de niña! ¡De pequeña!- confesó, extrañando más a la Jefa- ¡Hablabas con Luke y Héctor-san…! ¡¿Es verdad eso que vi…?! ¡¿Desde hace cinco años… has planeado mo…?!-

… Pero no pudo terminar la pregunta…

De un momento a otro, la mirada de Samanta se había ensombrecido, al mismo tiempo que sus ojos se tornaron ámbar y la esclerótica negra, y varios látigos negros salieron de su sombra de forma amenazadora.

-… ¿Mo…rir…?- parpadeó Tagiru, en blanco-… Creo… Creo que debí empezar a preguntar esto de forma menos idiota, ¿verdad?- comenzó a sudar a mares, asustado.

Al segundo siguiente, Tagiru se encontró boca abajo, amarrado por completo por los látigos negros, mientras Samanta sostenía el xros loader gamma rojo, impidiendo así que los enojados digimon salieran a impedir la posible masacre de su cazador.

-¡¿Q-Qué intentas hacer, Samanta?!- reaccionó el niño, sacudiéndose en el capullo de sombras en el que estaba atrapado.

-Pensar en cómo cerrarte la boca sin quitarte los dientes- lo calló Samanta, cabreada, haciéndole tragar saliva- ¿Acaso Quartzmon te mostró… mis memorias?- frunció el ceño, seria.

-E-Eso creo… Te veías… pequeña…- el niño frunció el ceño, confundido- Luke y Héctor-san estaban contigo…-

-... Tenía vendadas mis muñecas, ¿no?- alzó la ceja Samanta, entregándole el xros loader gamma a un látigo, para que lo alejara de la conversación.

-¡Ah! ¡¿Entonces era una memoria real?! ¡¿Cómo la que me mostró Luke de cuando eras niña y Jack usó Defens System por primera vez?!- comprendió Tagiru, recordando cuando la liebre le mostró a él y a Gumdramon esa memoria.

-¿L-Luke te mostró eso…? ¿Qué rayos pasa contigo para que atraigas a criaturas oscuras para que te muestren memorias de mi infancia?- lo quedó mirando la Jefa, apenando al niño- Tsch. Ya veo, ya veo… Quartzmon realmente te detesta. Sabe qué tipo de persona eres, y te mostró eso, tanto para preocuparte como para crear más emociones negativas en mi- murmuró, sobándose el cuello, sintiendo más punzadas de dolor.

-E-Entonces… ¿es verdad…?- frunció el ceño Tagiru.

-… ¿Qué te ha dicho Kokoromon sobre mi situación después que regresé al mundo humano tras la muerte de mis padres?- le preguntó Samanta, mirando al piso, seria.

-¡B-Bueno…!- parpadeó el niño, tratando de hacer memoria…

"-… Cuando Samanta regresó… Los bomberos aun combatían las llamas que quemaban su casa... Solo había pasado media hora… Las personas creyeron que solo ella sobrevivió al incendio, mientras que sus padres terminaron calcinados…- recordó tristemente Kokoromon-… Samanta la pasó mal. Sus abuelos no la ayudaron, solo la humillaron en los medios de comunicación… Fue bueno que Luke tuviera la falsa identidad de "Derek Wolf", sino, ella hubiera entrado a un orfanato… Y después… un mes después… Cuando Sky y yo estábamos paseando por los techos de Berlín, preguntándonos como alentar a Samanta… El… El Proyecto Iluminati nos secuestró…- se aferró con fuerza a su chaqueta-… Y experimentaron con nosotras-"

… Tagiru frunció el ceño, sintiendo la misma molestia que sintió la primera vez que Kokoromon les había contado el pasado de la Jefa…

-… Que tus abuelos… te trataron mal… Que quedaste sola…- frunció el ceño el niño, molesto y dolido.

-Tenía solo ocho años. Sí, Luke siempre ha dicho que veía las cosas diferentes, pero seguía siendo una niña. Mi trauma es algo que aún no he superado, a pesar de que una vez me ayudaste a plantearme a pelear no por venganza, sino porque era algo que debía hacer- recordó Samanta, seria, tomando la atención del niño- … Jack, Sky y Kokoromon no me ayudaban… Los tres estaban sufriendo de igual forma. Los veía tan… tristes y deprimidos… No me sentía capaz de apoyarme en ellos al verlos tan frágiles… Y estaban los digimon de Aldea Natural que traje conmigo en el xros loader de mi madre… Ellos podían vivir sin problemas ahí dentro, pero el sentirme responsable de todos ellos… Slayerdramon me decía que no debía estresarme…- apretó un puño.

-… Pero… ¿Te estresabas?- frunció el ceño Tagiru, preocupado, tomando su atención- … Porque amas a los digimon, ¿no?-

-… Era demasiado para mi… Pensé que me volvería loca- confesó Samanta, seria- Mi trauma… la responsabilidad… Me sigue afectando incluso cinco años después… Desde que mis padres murieron, apenas puedo sentir el sabor de la comida… Je, creo que la una de las pocas veces que lo sentí fue cuando comí en la casa de los Kudou…- suspiró, seria.

-… Samanta…- la miró Tagiru, serio nervioso- Entonces… Lo que vi en ese recuerdo era verdad…- frunció el ceño-… Trataste… de suicidarte, ¿verdad?-

Samanta lo miró, seria, para cerrar los ojos, haciendo que los látigos que retenían a Tagiru lo dejaran suavemente en el césped, quedando solo la sombra que retenía el xros loader gamma, impidiendo que los digimon escucharan.

-… Me rendí, Tagiru… Ese horrible primer mes fue un horror para mi…- le aseguró Samanta, seria- No podía superar lo que pasó con mis padres… Y entonces, mis hermanas mayores son secuestradas y experimentadas… Gracias a las indicaciones de Luke pude liderar a los digimon para rescatarlas… ¿Cómo crees que me sentí al ver a mis hermanas, que ya habían estado sufriendo, llorar al ver ese virus repugnante en sus manos, junto con el trauma de la experimentación?- le preguntó, seria, pero con un atisbo de tristeza en su mirada- Fue y sigue siendo horrible, Tagiru… Yo veía a Jack, esperando que él nos dijera que hacer ahora, porque era el mayor… Pero él me miró a mi… Mis hermanos mayores no podían con la situación… Yo, la menor… por ser la humana… tenía que tomar la responsabilidad…- frunció el ceño- ¿Lo entiendes…? Quienes crearon a la Jefa fueron ellos…-

-¡P-Pero…!- se levantó torpemente Tagiru- ¡Estoy seguro…! ¡Jack, Sky-chan y Kokoromon jamás habrían hecho eso a propósito!- le aseguró.

-Eso lo sé… Lo sé, pero… En ese momento, para mi… toda esa presión…- Samanta se sobó una de sus muñecas, seria-… Me había rendido… Luke detectó lo que intenté hacer y con el tío Héctor me detuvo… He vivido estos cinco años porque ambos me detuvieron. Me dieron un propósito…-

-… Recuperar a Ryudamon, ¿verdad?- frunció el ceño Tagiru, apretando sus puños, sintiendo un nudo en la garganta-… Lo que vi en tus memorias… Nos mentiste… Para tu plan, no es necesaria la Puerta Final, los Virus Solitarios o el poder de Yuno-san…-

-… Esa información es un método que el Proyecto desarrolló- le dijo Samanta, seria.

-… E-Entonces…- la miró asustado Tagiru-… ¿Realmente…? ¡¿P-Por eso decidiste resguardar a Quartzmon en tu cuerpo…?!- exigió saber, enojado- ¡S-Samanta…! ¡La forma que Luke te dijo cómo purificar a Apocalymon…!- apretó sus puños- ¡Una vida por otra…! ¡Acumular los tres fragmentos oscuros en tu cuerpo… y que AlphaKokoromon te purifique…! ¡Ryudamon regresaría… pero tú…! ¡Un cuerpo humano no aguantaría eso! ¡¿Y aun así aceptaste…?! ¡¿Este es tu verdadero plan?!- le gritó.

-… Sí…- le confesó Samanta, dejándolo quieto de la sorpresa- Por eso me molesta un poco que Luke creara uno de reserva, en contra del plan que habíamos determinado… Los Emblemas… Incluso sin ellos, e incluso sin mi plan, nada asegura que no habrá un efecto secundario en nuestro mundo si la Puerta Final es disparada- le dijo, seria- Lanzar una onda de energía usando los virus solitarios y activada con el poder de Kudou Yuno… Junto con la oscuridad del Darkness Loader… No importa si es disparada en el Digiquartz, habrá efectos secundarios devastadores en la ecología humana. Ejemplo claro es el caso de Volcdramon, el digimon que Kiriha cazó. Sus datos eran tan poderosos que la isla en la que estaba, en el mundo humano, estaba siendo afectada gravemente con solo su presencia-

-¡No hables como si fueras noble!- le exigió Tagiru, enojado y dolido- ¡A ti no te interesan los humanos! ¡¿Por qué te preocuparías y arriesgarías la vida para que no usaran esa Puerta Final!?-

-Porque mis hermanos viven en este mundo- le respondió Samanta, seria, sorprendiéndolo- Yo ya no deseo vivir en este mundo… Hace cinco años que me rendí y solo pienso en desaparecer… Pero mis hermanos aman este mundo… Viven en él, a pesar de que no son humanos… No puedo crear un mundo que los acepte por lo que son, porque, seamos honestos, los humanos nos discriminamos simplemente por nuestra piel o etnia, ¿no?- sonrió sarcásticamente- No puedo cambiar esta basura de mundo, pero al menos puedo mantener el hogar de mis hermanos a salvo- sentenció, seria.

-S-Samanta…- la miró Tagiru, enojado y dolido- ¡N-No es justo…! ¡No es justo en lo absoluto! ¡¿P-Por qué piensas en… terminar así…?! ¡Ha-Hay tantas cosas…!-

-… Pero no me interesan…- le sonrió con tristeza Samanta, dejándolo quieto- … La idea de seguir viva me carcome, Tagiru… Ya no quiero más… Estoy cansada…- le confesó, mientras sus ojos volvían a ser café, y el látigo que sujetaba el xros loader gamma caía al césped al desaparecer el látigo que lo retenía- No importa lo que digas… No retrocederé… E incluso si lograras detenerme y purificar a Ryudamon con algún otro método… Eso no quitará el hecho que simplemente quiero cerrar los ojos y no abrirlos más…- le aseguró…

… Pero se quedó quieta cuando Tagiru la abrazó, aguantando el llanto.

-¡NO ES JUSTO…! ¡NO LO ES…! ¡NO ES JUSTO…!- le dijo Tagiru, con los ojos brillosos- ¡TENEMOS A LOS DIGIMON…! ¡SON LOS MEJORES…! ¡¿Y AÚN ASÍ…?! ¡¿POR QUÉ PENSAR…?! ¡TUS HERMANOS…! ¡S-SAMANTA…!- cerró los ojos, indignado y dolido.

No sabía qué decirle… ¿Cualquier palabra que dijera serviría para cambiar de parecer a Samanta…?

Luke y Héctor le habían dado ese plan a la niña, ¿para ganar tiempo y hacerle cambiar de opinión? ¿Para salvarla…? ¿O para darle un motivo para desaparecer de ese mundo…?

No podía… No podía entenderlo… Él era un idiota… Un idiota que pensaba que con palabras o gritos se podía hacer reaccionar a alguien…

Pensaba que eso funcionaba, cuando había hablado con la Jefa durante el ataque de Gaiomon, ayudándola a superar en parte su trauma al hacerle entender que no debía pelear por venganza… pero un trauma… no era algo que podías superar tan fácilmente…

… El trauma de Samanta Wolf se encontraba vigente… y la Jefa era prueba de ello…

… No pensaba en alguna palabra… y por eso sentía tanto dolor y rabia…

"…" Samanta lo miró, seria, pero después cerró los ojos, consciente que era natural la reacción del joven al saber la verdad "… ¿Contento, Quartzmon…? Lo has hecho llorar…" le dijo, cansada, sintiendo la cruel sonrisa del digimon en su interior.

… Quartzmon realmente odiaba a Tagiru… y lo había demostrado al mostrarle algo que sabía haría llorar al joven…

"… Me pregunto si Sanzomon también quiere arruinar mi plan…" pensó Samanta, seria, ya que la existencia de Dante cambiaba todo el paradigma…

… No era como sus hermanos mayores, a los que podía dejar solos… Dante era su hermano menor…

… ¿Sería capaz de abandonarlo, cuando recién al fin se pudieron reunir…?

"… Me temo… que sí…" la joven abrió levemente sus ojos…

… Aquel cansancio, fastidio y sentimiento de rendición... Ni siquiera había desaparecido con la existencia de Dante…

-¿P-Por qué…?- gimió Tagiru, hipando, a lo que Samanta le dio unas palmaditas- N-No es… justo…. Yo…- se separó, sujetándola de los hombros- ¡NO TE DEJARÉ HACERLO!- sentenció, enojado.

-No quiero tu opinión- Samanta le tiró las mejillas, haciéndole sacudir los brazos- Tagiru, decídete… ¿A quién salvarás? ¿A V-mon o a mi?- le preguntó, seria, dejándolo quieto- No importa qué, reuniré el fragmento de Salamandra y aquel que es ahora Mephismon… Cumpliré mi promesa con Quartzmon y le haré ser el fragmento ganador, y haré que se fusionen y se purifiquen… ¿Cómo me detendrás si también tendrás que ir por V-mon?- lo soltó.

-¡Los salvaré a ambos!- le dijo Tagiru, testarudo.

-A-Aquí no es un caso de salvar o no. No puedes salvarme. Ni hablando, ni peleando- le señaló Samanta, paciente e incómoda.

-¡Te acusaré con Kiriha-san!- se dio media vuelta Tagiru…

… No alcanzó a irse, porque nuevamente fue atrapado por los látigos de Samanta, quien volvía a activar el poder de Apocalymon.

-… No debí haber dicho mi plan en voz alta, ¿verdad?- parpadeó Tagiru, boca abajo, a lo que la Jefa suspiró, paciente.

-… Te sugiero no decir mi plan, Tagiru- le dijo Samanta, seria- No por mi… Bueno, yo te amenazaré con gusto y sabes que voy a cumplir mi amenaza…- le indicó, incomodándolo- Pero Quartzmon, por otra parte… No estará contento si haces algo que atrase cualquier método que le permita ser el fragmento ganador- le señaló, haciéndole fruncir el ceño- Así que mantén la boca cerrada, a menos a que quieras que Quartzmon o yo tomemos cartas en el asunto-

-¡¿Y-Y qué harías…?!- exigió saber Tagiru, indignado.

-… Eliminar a alguien con un Emblema, por ejemplo- le dijo sin miramientos Samanta, dejándolo quieto.

-¡N-No harías eso…!- le dijo el niño, nervioso.

-Quiero acabar con estos cinco años de vida inútil, Tagiru- lo calló la Jefa, asustándolo- He acabado con digimon antes… Eliminar humanos es una línea que estoy dispuesta a cruzar- sentenció, seria.

Tagiru la miró, enojado y nervioso…


En el xros loader gamma rojo oscuro…

-¡GHA! ¡No puedo escuchar algo!- se molestó FlameWizardmon, mirando la situación desde la pantalla digital que se mostraba frente a él y los demás digimon de Tagiru que se encontraban en la plaza digital del aparato.

-Todo indica que Tagiru la hizo enojar- señaló Jokermon, incómodo.

-¡T-Todos vimos que Tagiru la abrazó sin recibir un puñetazo!- FlameWizardmon sacudió sus brazos, dando a entender su punto de lo importante que era la situación.

-… ¿Lo habrá rechazado?- se preguntaron Ogremon y Fugamon, dejando meditativo a los digimon.

Mientras, MetalTyranomon seguía durmiendo plácidamente, con Kokoromon apoyada en él, acompañada de Gumdramon, Bearmon y Pagumon, quienes dormían profundamente.

Aun así, el escándalo de los digimon por saber lo que pasaba hizo despertar al dinosaurio digital, el cual levantó la cabeza, dando un gran bostezo. El movimiento hizo que Kokoromon, Pagumon y Bearmon despertaran. Gumdramon, por el contrario, se acurrucó más al lado de su amiga.

Kotemon se percató que empezaron a despertar, por lo que se les acercó.

-A-Ah…- bostezaron Bearmon y Pagumon, mientras Kokoromon se sentaba, restregándose los ojos, cansada.

-¿Cómo te sientes, Kokoromon?- le preguntó Kotemon, preocupado por ella.

-A-Aún… cansadita…- lo miró somnolienta la digimon- Gumdramon, arriba- miró al pequeño, acurrucado en su hombro.

-¿M-mm…?- el dragón morado abrió apenas sus ojos, somnoliento, tratando de enfocar el rostro de la digimon- ¿M-Mami…?- murmuró.

Aquello hizo que Kokoromon despertara de golpe, mirando parpadeando a Gumdramon, el cual, al darse cuenta que le dijo así a su amiga, comenzó a enrojecer de vergüenza pura.

-Jojojo. Gumdramon es un niñito sensible~- se burló Pagumon de su amigo.

-Eso, eso, eso- asintió Bearmon, de acuerdo.

-¡USTEDES….!- y el dragón morado comenzó a perseguirlos.

-Acaban de despertar, y tienen tantas energías…- suspiró Kotemon, paciente, hasta notar que Kokoromon se tapó el rostro- ¡¿E-Estás bien…?!- se preocupó.

-L-Lo siento…- murmuró apenada la digimon- S-Sé que Gumdramon me dijo así porque estaba somnoliento… y tal vez le recordé a su mamá… pero aún así… Me siento tan feliz que creo que quiero llorar…- lo miró la hembra, con los ojos llorosos.

-… Jeje. Llegamos a un punto en que no podemos negar que eres prácticamente una figura materna para Gumdramon- admitió Kotemon, dándole un pañuelo, mientras MetalTyranomon los miraba, curioso- Claro que es demasiado orgulloso para admitirlo-indicó.

-E-Es que… aunque sea travieso, es un niño tan bueno… N-No tengo palabras…- gimoteó Kokoromon, ignorando como Gumdramon había agarrado a Bearmon y a Pagumon, creando una estela de humo al darles una paliza.

-¡Ah! ¡Kokoromon, despertaste!- se acercaron FlameWizardmon, Sagomon y Harpymon.

-Buenos días~- sonrió cansada la digimon, hasta parpadear cuando el mago la arrastró rápidamente al parque digital, sobresaltando a MetalTyranomon, a Kotemon, Sagomon y Harpymon.

-¡Tienes que hacer algo, AHORA!- el mago rojo se detuvo frente a la pantalla digital que mostraba a Samanta usando los poderes de Apocalymon para mantener al pobre Tagiru boca abajo.

-… ¿Mm…?- Kokoromon parpadeó varias veces al ver la escena, asimilando lo que veía- ¡¿AH?!-


Tagiru miró, enojado y nervioso a Samanta, consciente que la amenaza de ella no debía tomarse a la ligera… aún así…

-¡ERES IDIOTA!- le gritó Tagiru, testarudo.

… Samanta lo quedó mirando, sumamente confundida y descolocada.

-… Acabo de amenazar a tus amigos… ¿y solo dices eso?- quiso asegurarse Samanta, paciente.

-¡IDIOTA! ¡IDIOTA! ¡IDIOTAAAA!- se sacudió Tagiru, incomodando más a la niña- ¡No me rendiré, Samanta! ¡Eres una idiota, igual que yo! ¡Por eso definitivamente no te dejaré salirte con la tuya!- le aseguró- ¡A ti y a V-mon…! ¡Los salvaré a ambos! ¡A todos!- sentenció, haciendo fruncir levemente el ceño a la Jefa.

-… No, ya en serio… ¿Por qué dices que soy tan idiota como tú?- le preguntó Samanta, incómoda y curiosa.

-¡Lo eres!- le mostró la lengua Tagiru…

Pero parpadeó cuando Samanta sonrió levemente, confundida y cansada.

-Realmente… ¿Qué pasa por tu cabeza?- negó levemente Samanta, sobándose el cuello, sin notar que Tagiru había enrojecido…

-¡NO TE LO COMAS, SAMYYYYYY!- del xros loader gamma en el piso a lo lejos salió Kokoromon, abalanzándose a Samanta y agarrándose a su rostro, no solo purificando el poder de Apocalymon, sino que también botando al césped a la niña.

Al purificarse el poder de Apocalymon, Tagiru ya no era sujetado por los látigos oscuros… cayendo de cara al césped.

-¡A-Ayyyyy!- gimoteó el niño, girando por el lugar, mientras Samanta estaba estática en el piso, con Kokoromon abrazándole la cabeza.

-K-Kokoromon… I-Idiota…- murmuró apenas Samanta, con lágrimitas en los ojos, no solo por el porrazo que se dio por culpa de su hermana, sino porque ahora le dolía aún más todo el cuerpo.

-¡S-Si vas a romperle el corazón a Tagiru, no lo hagas literalmente!- le pidió Kokoromon, a lo que su hermana le agarró del rostro, liberándose de ella.

-¿De qué diablos estás hablando?- le gruñó Samanta, sentándose y sacudiéndola un poco.

-… ¿Eh? ¿Acaso Tagiru no se estaba confesando y tú le estabas rechazando?- parpadeó Kokoromon.

-¡¿AH?!- Tagiru se sentó al escucharla, todo rojo y alarmado.

-… ¿Confesar...? ¿Qué cosa…?- parpadeó Samanta, sumamente confundida y cansada, queriendo ir a un lugar más tranquilo.

-¡N-NADA, ABSOLUTAMENTE NADA!- Tagiru agarró a Kokoromon tapándole la boca, haciéndole parpadear, extrañada- ¡Lo único que debes saber es que no te dejaré hacer lo que te plazca!- sentenció, mirándola determinado pero sonrojado.

Samanta lo miró confundida, para suspirar y levantarse.

-Buena suerte con eso- le dijo, alejándose.

Tagiru la vio irse frunciendo el ceño, preocupado pero aún algo sonrojado.

… No iba a dejarla… No iba a permitirle desaparecer de su mundo…

Tagiru reaccionó cuando Kokoromon le dio unos toques, por lo que dejó de taparle la boca.

-… ¿No era una confesión?- parpadeó la digimon naranja.

-¡¿P-Por qué lo sería?!- la quedó mirando Tagiru, todo rojo.

-Entonces… ¿Qué hablaste con Samy?- lo miró Kokoromon, confundida y algo preocupada.

El niño abrió la boca para hablar… pero recordó la amenaza de Samanta…

No… No era la amenaza de la Jefa… sino que temía que Kokoromon, al igual que Sky-chan y Jack, se enteraran de la verdad… Del plan de la Jefa… Del daño que le hicieron sin darse cuenta al apoyarse en ella después de la muerte de los padres de la niña…

… Era… Todo eso era demasiado cruel…

El pensar en eso hizo que unas lágrimas cruzaran las mejillas del niño, preocupando de inmediato a Kokoromon.

-¿T-Tagiru…?- se preocupó Kokoromon, mientras el niño la abrazaba- ¿E-Estás bien? ¿Q-Qué pasó?- le preguntó, nerviosa.

-Solo… Necesito un Kokory-abrazo- le aseguró Tagiru, determinado a cambiar las cosas…

… Las iba a cambiar, a como dé lugar…

Kokoromon lo miró preocupada, para después corresponder el abrazo, dándole palmaditas al niño, apoyándolo…


-G-Gh… Realmente… Todo esto es un gran problema…- murmuró Samanta, mientras caminaba por la arboleada.

No tenía energías para nada, y le dolía demasiado el cuerpo…

Sin contar el estrés que tenía ahora porque Tagiru había descubierto su verdadero plan.

"Realmente… Este mundo no puede dejar de darme problemas, ¿no?" suspiró, deteniéndose frente un árbol.

-… Sí… Este lugar…- murmuró, saltando a una de las ramas del árbol, sentándose sin problema en él- … Realmente es…- frunció levemente el ceño, apoyándose en la madera, comenzando a dormitar.

… Estaba sumamente agotada.

En eso, un Monitamon aterrizó a las ramas de un árbol cercano de forma silenciosa.

Al ver a la niña, activó su cámara…


La reunión había terminado, y la mayoría de los jóvenes habían ido a descansar o a reunirse entre ellos para hablar.

En la tienda solo quedaba un cansado Taiki, junto a Kiriha, Akari, Zenjirou y Nene, acompañados por Shoutmon, Dorulumon, Ballistamon, Cutemon y Luminamon.

-Mm…- frunció el ceño Zenjirou, incómodo- ¿Nii-san se tardará mucho para ir por las palomitas?- se preguntó.

-Dudo mucho que encuentre palomitas- le señaló Ballistamon, paciente.

-¡Pero…!- hizo puchero su amigo.

-Hideaki-kun y los demás… Es difícil para todos mantener este ritmo- mencionó Akari, preocupada.

-… Llegamos al punto, en que tal vez tengamos que enfrentar y eliminar digimon- le dijo Kiriha, tomando su atención- Es algo a lo que no están acostumbrados- señaló.

Aquello dejó pensativo al Xros Heart original…

… Volver a eliminar digimon… Realmente… habían vuelto a la guerra…

-… Por lo que dijo Kyosuke, hay digimon apoyando al Proyecto, además de los Generales del Bagra Army… Pero que se mantienen protegiendo la zona de la Puerta Final- frunció el ceño Dorulumon, serio.

Shoutmon frunció el ceño, serio y molesto.

-… Esos digimon… liderados por tu madre, Nene…- Taiki miró a su amiga, quien tenía en su regazo a Luminamon.

Su amiga sonrió tristemente.

-Me sorprendió… Que tomaras la noticia así, sin sorprenderte- admitió Akari, preocupada, mientras Cutemon abrazaba la pierna de la pelicafé.

-… Fue por las memorias de Shademon- confesó Nene, acariciando la cabeza de Cutemon- Pude ver a mi madre trabajando con ese hombre que Kyosuke-san me aseguró es Deimos… Je… Ahora entiendo que hacía todo este tiempo, después de divorciarse de papá…-

-… Lo siento…- murmuró Luminamon, a lo que Nene la abrazó suavemente.

-¡N-No te entristezcas, Nene-san!- le pidió Zenjirou, preocupado por ella, pero Ballistamon le tapó la boca, haciéndole sacudir los brazos.

-Estoy seguro que con tu madre, harán que el xros loader de Yuu se oscurezca más rápidamente- frunció el ceño Kiriha- Y con lo que nos dijo Ballistamon, sobre el Chrome Digizoid que le quitó ese mono, no podemos descartar la idea de que el enemigo fortalezca a algunos digimon-

-Por ahora, tendremos que seguir con nuestro plan para ir a Corea- sentenció Taiki, serio- No podemos quedarnos esperando a que nos vuelvan a atacar, especialmente con el peligro que Mephismon representa para Kokoromon- señaló, a lo que Shoutmon lo miró de reojo, serio- Je, lo bueno que Kiichi y Locomon accedieron a ayudarnos, así que podremos viajar a Corea sin problemas- sonrió.

-¿S-Seguro que podremos, Kudou Taiki?- lo miró incómodo Zenjirou, logrando quitarse una mano de Ballistamon.

-A-Admito que también tengo la duda… Nunca he viajado al extranjero- se rascó la mejilla Akari- N-Ni siquiera tengo un pasaporte- confesó, a lo que Zenjirou asintió, en su misma situación.

Eso hizo que Taiki, Kiriha y Nene los quedaran mirando.

-… No van a necesitar un pasaporte- les dijo Kiriha, tratando de ser paciente.

-¡¿I-Iremos ilegalmente?!- Akari y Zenjirou lo miraron sujetando sus manos, escandalizados, fastidiando al rubio.

Taiki no pudo evitar reprimir una risa, mientras Nene se tapaba la boca, también intentando no reír.

-Esto del pasaporte suena a un problema- les dijo Ballistamon a Dorulumon y a Shoutmon.

-¿Será alguna herramienta que necesitan los humanos para viajar?- sugirió el lobo.

-¿Deberíamos implementarlo para los viajes a los Países Digitales?- meditó Shoutmon- Aunque esa idea no me atrae. Suena a mucho papeleo- bufó, incómodo.

-… Cierto…- parpadeó Taiki, tomando la atención de los digimon-… Shoutmon, como rey, tú tienes que leer y escribir muchas cosas, ¿no?-

-L-Lamentablemente, pero lo bueno que Dorulumon y Ballistamon me ayudan, al igual que los Ministros- le indicó el dragón, señalando a sus amigos.

"… ¿Greymon será capaz de escribir con esos brazos tan cortos que tiene…?" Kiriha parpadeó al tener esa duda, ya que su compañero era uno de los Ministros del dragón, ignorando como Akari y Zenjirou seguían escandalizados.

El enorme dinosaurio… con un lápiz en su garrita…

El rubio miró para otro lado, bufando levemente, queriendo ocultar la risa que le dio su imaginación, extrañando a Akari y a Zenjirou.

-Bueno, con la reunión terminada y todo decidido, deberíamos ir a descansar también- mencionó Nene.

-El Relojero dijo que él iba a organizar a los cazadores que harán rondas, así que sí, podríamos descansar- sonrió Taiki…

-… Antes de eso…- habló Wisemon desde el xros loader gamma del joven, tomando su atención y la de sus amigos-… Antes de eso…- repitió, saliendo del aparato, quedando de pie frente a los jóvenes-… Necesito hablar con ustedes- confesó, serio.

-¿C-Con nosotros…?- parpadearon Akari y Zenjirou, dejando de hacer escándalo.

-¿Qué pasa-kyu?- parpadeó Cutemon, acercándose al mago.

-¿Qué es?- le preguntó Shoutmon.

Pero su amigo no le respondió. Se veía ensimismado, como si pensara bien en las palabras que debía utilizar.

-… ¿Wisemon?- Taiki miró al mago, confundido y preocupado.

Aquel digimon no era de mostrar expresiones además del entusiasmo por el conocimiento, así que era muy extraño verlo ahí, parado, tomándose las manos, como si fuera un niño que debía confesarle a su madre que hizo algo muy malo.

-¿Descubriste algo de los datos que sacaste de la nave del Proyecto?- le preguntó Kiriha, cruzándose de brazos.

-¿Ah? Ah, esos datos. Sí, los estuve analizando…- murmuró el mago, casi sin prestarle atención.

El rubio miró a sus amigos, confundido por esa actitud.

-… ¿Qué tienes que decirnos, Wisemon?- le preguntó Taiki.

El mago respiró hondo, serio.

-… Es algo que tienen derecho a saber…- les dijo al fin el digimon, colocando las manos en su espalda, serio- Y mejor lo digo ahora, que está el Xros Heart original reunido- admitió.

-¿Qué es? ¿Qué es? ¿Un vergonzoso secreto?- sugirió Zenjirou, a lo que Ballistamon lo volvió a agarrar y taparle la boca, a lo que Akari levantó el pulgar, agradecida.

-… Yo…- murmuró Wisemon, serio-… Yo creé a Topacio- confesó.

Aquello dejó sumamente quieto de la sorpresa a los jóvenes y a los digimon dentro de la tienda.

-… ¿Q-Qué tú…?- murmuró lentamente Dorulumon, confundido y sorprendido.

-La mujer que creó el virus solitario y produce a los Kopierer… Junto con haber revivido a los Generales de la Muerte y a Lopmon para convertirlos en Semi-digitales- continuó Wisemon, serio-… Yo la creé- volvió a informar.

Nene se tapó la boca de la impresión, asustada y confundida, mientras Akari y Zenjirou miraban sorprendidos y sin habla al digimon.

… Taiki miró seriamente al mago, pero antes de poder decir algo, Kiriha había dado un paso al frente, mirando con el ceño fruncido a Wisemon.

-… Explícate, ahora- le ordenó el rubio, sumamente serio, preocupando a Nene.

-… Hace años, en el tiempo en el que vivía en mi libro en el Espacio Digital, me topé con que habían… aperturas al mundo humano- contó el mago, con los jóvenes y digimon atentos a lo que decía- Estas aperturas eran pequeñas, y muy diminutas. Permitían que hubiera un leve flujo de datos entre el mundo humano y el digital. Como científico, aquellas aperturas tomaron mi atención, y estuve mucho tiempo investigándolas. Comprendí que un digimon de mi nivel no podría pasar por estas fisuras para explorar el mundo humano… Así que decidí tratar de hacer una conexión entre alguna máquina en ese mundo con las mías, para al menos entrar al sistema y obtener un poco de conocimiento-

-¿Cómo una conexión Wi-Fi?- parpadeó Zenjirou, a lo que Ballistamon puso su otra mano para taparle la boca a su compañero.

-… Al final, pude entrar en contacto con un computador del mundo humano- siguió Wisemon- Era el computador de un centro médico, y mediante el que podía conectarme a la red y obtener información humana que deseaba, aunque estaba limitada al ser la mayoría información médica. Sin contar que la descarga de la información a mis máquinas iba a tardar bastante tiempo-

-¿Qué tiene que ver esto con Topacio?- le preguntó Kiriha, serio.

-Es aquí, Kiriha- le dijo el mago- El computador al que había accedido era uno que usaba una niña humana. Su hermano menor había sido internado y tal parece que ella solía pasar el tiempo en el hospital, por lo que le permitían utilizar un computador del establecimiento-

-… Topacio, ¿verdad?- frunció el ceño Dorulumon.

-… Me temo que sí- asintió el mago- Creo que su nombre era Hana. Descubrió mi presencia en la red mediante el computador. Parece que en esa época habían rumores sobre criaturas digitales en los computadores. Como un mito humano- meditó- En todo caso, ella estaba fascinada con mi presencia en la pantalla del computador. Fue la primera humana con la que hablé. De igual forma, yo tenía curiosidad sobre ella. En esa época me hubiera gustado investigarla, pero mi limitada presencia no me lo permitía, así que me centraba en esperar que la descarga de la información que quería terminara, mientras la niña humana respondía mis preguntas sobre la información que no podía obtener en el hospital-

-¿Se…? ¿Se volvieron amigos…?- murmuró Akari, confundida.

-… Desde mi perspectiva, no- le aseguró Wisemon- En esa época, solo deseaba información. Hana me hablaba y me daba información sobre los humanos… Aunque ahora, que he aprendido más de ustedes… comprendo que en realidad ella quería entablar una amistad conmigo, al contarme sobre su familia y amigos durante esos días- admitió, serio.

Taiki lo miró, serio pero preocupado.

-… ¿Qué fue lo que hiciste, Wisemon?- le preguntó Kiriha, serio.

-… Antes no lo comprendía, Kiriha… Pero ahora tengo una sospecha- le dijo el mago, serio- … Cuando descargué por completo toda la información que… robé del sistema del hospital, hice un cortocircuito en todo el establecimiento, apagando todos los aparatos tecnológicos, incluyendo el computador por el que veía y tenía contacto con Hana- informó- Para mí, ese fue el término de ese experimento, y en ese momento solo lamenté no haber podido investigar personalmente a un humano… Fue por eso que lo primero que hice al conocer a Taiki fue intentar diseccionarlo, usando la información que había obtenido del hospital humano… Y con esa misma información, pude "matar" momentáneamente a Taiki cuando estábamos en Hell's Field, para así burlar el bloqueo que impedía la salida de esa zona…- recordó, serio-… Ahora… Creo entender que hice algo muy malo cuando robé toda esa información-

-E-Espera un momento…- se levantó Nene, con Luminamon en brazos- ¿Hi-Hiciste un apagón en un hospital…? ¡W-Wisemon…! ¡E-Eso es muy grave!- le dijo la joven- Muchas personas suelen estar conectadas a las máquinas de un hospital para sanar. En algunos casos, los usan como un soporte vital- señaló, nerviosa.

El mago cerró los ojos en silencio.

-… ¿W-Wisemon…? Topacio… Hana… ¿E-Ella sabía que habías estado robando esa información del hospital…?- le preguntó Akari, preocupada.

-… Cuando todo comenzó a apagarse alrededor, ella me dijo que algo estaba pasando… Le dije que debía ser un efecto secundario de la información que obtuve…- le respondió el mago-… Lo último que vi de ella fue su expresión de sorpresa, antes de que la pantalla y la conexión se apagaran-

Akari lo miró, sumamente nerviosa, al igual que Nene y Zenjirou.

-¿Q-Qué significa…? ¿Qué relación tiene eso con que Topacio ahora sea… mala?- preguntó Ballistamon, confundido, mientras Dorulumon fruncía el ceño.

-… Wisemon dijo, que Topacio tenía un hermano internado en el hospital- le dijo Kiriha, sin mirarlo- Si ocurrió un apagón de tal magnitud, entonces el sistema que debía haber mantenido con vida al niño debió apagarse…-

Aquello dejó quietos a sus amigos…

-… Exactamente…- Wisemon abrió los ojos, serio, pero con un claro brillo de derrota y arrepentimiento en su mirada-… En esa época… no lo sabía… Pero con lo que sé ahora puedo decirlo sin dudarlo… El apagón que causé al robar los datos y sobrecargar el sistema… debió haber matado humanos… incluyendo al hermano menor de Hana… de Topacio- sentenció, serio.

Los jóvenes miraron sorprendidos y horrorizados al mago frente a ellos, sin poder creerlo… pero sintiendo que eso habría sido posible, mientras Wisemon no hubiera conocido a Taiki y aprendido más de los humanos.

-W-Wisemon…- gimió Cutemon, tapándose la boca, sumamente conmocionado.

-… Yo creé el odio de Topacio a los digimon… - sentenció Wisemon- Soy el responsable directo de que ella experimentara con nuestra gente, creara e inyectara los virus solitario a Sky-chan… y a Kokoromon- miró a Shoutmon…

… Pero al segundo en que lo miró, había recibido el puñetazo del dragón, siendo de tal magnitud el golpe que cayó encima de la mesa, rompiéndola en el proceso.

-¡S-Shoutmon…!- se alarmaron Ballistamon y Dorulumon, mientras el dragón aterrizaba, claramente enojado.

-¡W-Wisemon…!- Akari y Cutemon fueron con el mago, el cual se sentó costosamente entre la astilla, sobándose la mejilla.

-¡E-Espera, Shoutmon…! ¡S-Sé que estás enojadito, pero…!- sacudió las manos Zenjirou, nervioso, mientras Nene observa preocupada la situación.

Kiriha miró serio al dragón, y después a Taiki, quien había estado en silencio en todo el relato…

-… La recordabas…- gruñó Shoutmon, tomando la atención del adolorido mago- Me juré… Me juré que si habías olvidado lo que habías hecho, yo mismo me encargaría de ti- le dijo al digimon, enojado y dolido.

-¿T-Te juraste…?- se confundió Cutemon, sosteniendo a Wisemon al igual que Akari.

-… ¿A-Acaso…?- el mago frunció levemente el ceño, confundido, y miró a Taiki, quien lo miraba seriamente, pero con una pizca de dolor en sus ojos- ¡¿L-Lo sabías, Taiki…?! ¡¿C-Cómo…?!-

-… Alphamon- confesó Lillymon en el xros loader gamma del General.

-¿A-Alphamon…?- Kiriha miró sorprendido a Taiki, el cual sonrió levemente, con tristeza.

-¿Recuerdas que me quedé conversando un poco con Alphamon, mientras tú y Tagiru iban a ayudar por el ataque de Mephismon?- le preguntó el pelicafé, a lo que el rubio asintió-… Le pregunté sobre Forward- confesó, sorprendiendo a sus amigos, especialmente a Akari- Ahora entiendo su situación y lo que lo motivó a odiar tanto a los digimon… Y, antes de irnos… Me contó sobre Topacio- miró a Wisemon.

-… Y nos contó lo que pasó, Wisemon- le dijo Jijimon, serio.

-… Como dijiste, Wisemon… Tus acciones egoístas… mataron a varios humanos en ese centro médico- le dijo Taiki, acercándose al mago-… Incluyendo al hermano menor de Topacio- le informó, serio pero triste.

Wisemon lo miró, sumamente sorprendido, para después bajar la cabeza.

-… No pensé las consecuencias… Los humanos no me importaban… Solo eran una especie que quería investigar…- murmuró el mago- Gracias a toda la información que había robado había crecido más mi curiosidad por la humanidad... y por eso... años después, cuando te vi perdido en el Espacio Digital... intenté investigarte...-

-... Creaste a Topacio- le dijo Kiriha, serio- Y por lo que dices, Topacio es lo que tú alguna vez fuiste, solo que ella investiga sin piedad a los digimon… Y por ella, es que las hermanas de mi prima han sufrido tanto…- apretó su puño.

-K-Kiriha-kun- se le acercó Nene, preocupada, a lo que el rubio frunció levemente el ceño, molesto.

Dorulumon y Ballistamon miraron serios pero preocupados a Wisemon, al igual que Akari y Zenjirou…

… El hecho que un digimon del Xros Heart había matado humanos, aunque fuera de forma indirecta… era algo que debían procesar…

-… Incluso así, Wisemon… A pesar de que en el pasado no fuiste un buen digimon, no olvidaste lo que sucedió- le dijo Taiki, serio, tomando la atención del mago.

-… La verdad, cuando Alphamon nos contó tu pasado… La idea de que tal vez hubieras olvidado a la humana que heriste… me causó mucha furia- le dijo Shoutmon, serio- Por eso me había jurado… Si antes del Eclipse, descubría que habías olvidado ese incidente, o siquiera el nombre real de Topacio, entonces jamás te lo perdonaría- le aseguró-… Pero recuerdas ambas cosas… Si tú recuerdas algo… es porque es importante- sentenció.

-… De igual forma, yo no podría juzgarte- admitió Dorulumon, sentándose- Como miembro del Bagra Army, eliminé a muchos digimon… Y bajo las órdenes de Tactimon, miré la ejecución de Hinata y Félix… Al igual que tú, no soy un santo- sentenció, serio.

-No somos ningún digimon para juzgarte, Wisemon- le aseguró Beelzebumon, en el xros loader de Nene- Vivíamos en tiempos de guerra… Al menos, lo que tú hacías era por el conocimiento… Yo acabé con muchos para buscar y obtener mi venganza- frunció el ceño, a lo que Sparowmon y Mervamon se le acercaron, apoyándolo.

El mago los miró, serio pero derrotado.

-… Un momento…- murmuró Akari, preocupada-… E-Esto… ¿Esto no significa que Topacio… es la compañera de Wisemon?- comprendió, sorprendida.

-… Alphamon nos dio un término para eso… Un niño fallido- le dijo Taiki- Un humano que falló en poder ser compañero de un digimon… Pero, Wisemon…- se agachó a la altura del mago- Por azares del destino, Hana se volvió tu enemiga, y han tenido sus enfrentamientos. Le robaste la fórmula para el antídoto del virus solitario mediante un gran susto, y ella después te secuestró… Wisemon, si esto sigue así, temo lo que ambos puedan hacerse- le confesó, sumamente preocupado- Por eso tengo que preguntártelo… ¿Le vas a dar la espalda a Topacio?-

-…- el mago lo miró, serio y preocupado-… ¿Insinúas que hay algo que yo pueda hacer a estas alturas?- murmuró.

-¡No dudes en los lazos, Wisemon!- le pidió Deckedramon en el xros loader de Kiriha- ¡Los lazos entre humanos y digimon son algo muy valiosos! ¡Pueden ayudar a volver mejores personas a un humano, como pasó con Kiriha, o puede suceder el caso de Topacio!-

-Si te rindes ahora, no podrás recuperar a tu compañera- le señaló Lopmon, en el xros loader de Akari.

-¿Estás de acuerdo con ayudarla?- Luminamon miró el aparato naranja- ¿La perdonas fácilmente por lo que te hizo?-

-… No puedo perdonarla, pero no quiero guardar rencor- le dijo el digimon conejo.

-¡No olvides que tú estás en la cuerda floja!- le dijo Pinocchimon desde el xros loader gamma- ¡A pesar de lo que le hiciste a Nene…! ¡Y de que nos quitaste a Knightmon…!-

-Sabemos que en parte fue nuestra culpa, ya que como Xros Heart te vimos como enemigos cuando apareciste en el Mundo Digital- señaló Jijimon, serio.

-Y solo por eso, no te daremos la espalda- frunció el ceño Shoutmon, a lo que Luminamon bajó la mirada, nerviosa.

-… Algo parecido es con V-mon, ¿no?- le dijo Taiki, preocupado, incomodando al dragón- Sabes que Tagiru es el que debe encargarse y ayudarlo-

-… Incluso aunque sea lo correcto… No puedo perdonar lo que hizo… Muchos sufrieron- le dijo Shoutmon-… Starmon, Kokoromon, Sky-chan… También Gaiomon… Y Betsumon y Wizardmon… Creo que el perdonar a otros es algo que siempre me va a costar- admitió, preocupado.

-Y por eso estoy aquí- le sonrió Taiki, a lo que el dragón sonrió levemente- Y a ti tampoco te daré la espalda, Wisemon- miró al mago, tomando su atención- Si realmente deseas recuperar, o al menos sacar a Topacio del lugar en el que está, daré todo de mi para ayudarte- le aseguró.

-No estás solo en esto- le dijo Ballistamon, a lo que Zenjirou asintió.

-Te apoyaremos- le aseguró Akari.

-No podrás borrar lo que hiciste, pero puedes hacer algo para compensarlo- le dijo Nene, sonriéndole.

Kiriha solo cerró los ojos, consciente que Taiki era demasiado blando.

-… A pesar de todo, no sé si ella podrá perdonarme- admitió Wisemon, levantándose, preocupado- Ni siquiera recuerdo el nombre de su hermano…-

-Podrás ayudarla, Wisemon. Te lo aseguro- le dijo Taiki, tomando su atención- Alphamon nos dijo cuál era su nombre… Y eso explica el comportamiento de Topacio- admitió.

-… ¿Cuál era el nombre?- lo miró Kiriha.

-… Kai- le sonrió con tristeza Taiki, sorprendiendo a los presentes.

-¿E-El mismo nombre que el de Kai…? ¿El compañero de Red Vagimon?- se sorprendió Akari.

-… Eso… Eso explica todo…- murmuró Wisemon, sorprendido y atando cabos- Vi que Topacio estaba muy pendiente y preocupada de Kai… Llegando a investigar lo que pasó con sus padres e intentando mantener a salvo al niño…-

-Ve a Kai… como el hermano que perdió…- comprendió Nene, sorprendida.

-Los salvaremos- aseguró Taiki, a lo que sus amigos lo miraron- No solo a nuestros amigos. Haremos algo con Topacio, con Kai… y con Forward- miró a Akari, la cual sonrió agradecida- Pero necesito tu determinación y apoyo, Wisemon- miró al mago- Con tus habilidades, podremos hacer algo… - aseguró, tendiendo la mano al digimon.

El mago lo miró unos segundos, meditativo, pero después asintió y se dispuso a tomar su mano…

… Pero un leve temblor tomó la atención del grupo…


Minutos antes

Tagiru estaba sentado en la arboleada del parque, con Kokoromon dándole un abrazo, apoyándolo, a pesar de que no sabía qué había hablado con Samanta.

Sea lo que sea, la digimon sabía que debía ser algo delicado como para que su amigo se viera tan afectado.

-¡¿Sigues llorando?!- Gumdramon salió del xros loader gamma en el césped- Estás preocupando a Kokoromon-sama- le señaló, tomando el aparato y acercándose, algo ofendido.

-Gumdramon, eso no es cierto- le dijo Kokoromon, incomodando al pequeño- Tagiru, ¿te sientes mejor?- se separó, mirando preocupada a su amigo.

-S-Sí…- asintió Tagiru, sonriendo levemente, cansado- Realmente, los Kokory-abrazos siempre ayudan- le dijo, haciéndole sonreír.

-Dime… Si no fue una confesión rechazada… ¿De qué hablaste con Samanta?- le preguntó Kokoromon, curiosa y algo preocupada.

-¡También queremos saber!- dijo FlameWizardmon en el aparato rojo, a lo que Jokermon le dio un coscorrón, callándolo.

-B-Bueno…- parpadeó Tagiru, algo incómodo…

… Sabía que Samanta no decía las cosas por decirlas… La amenaza de ella era real… Si decía algo… Hideaki y sus amigos peligrarían…

Gumdramon miró confundido a Tagiru, sintiendo que algo iba mal con su amigo, ya que era su compañero y podía notarlo.

-Dilo- le dijo el dragón morado, tomando su atención- ¡N-No me pongas esa cara! Recuérdalo: no vamos a dejar que nada ni nadie nos retenga ni deprima, ¡así que, sea lo que sea que te dijo Samanta, no dejes que te afecte!- le ordenó, ofendido y orgulloso.

Tagiru lo miró sorprendido, para después sonreír levemente, sintiendo algo de vergüenza porque su compañero le regañara.

-Sí, tienes razón. ¡Nosotros los idiotas no nos dejamos decaer fácilmente!- aseguró el niño, emanando vapor de la nariz, haciendo sonreír a su compañero- ¡Y somos testarudos, ¿verdad, Kokoromon?!- le sonrió a su amiga.

-¡Sí, somos testarudos!- asintió Kokoromon, sonriendo.

-¡N-No le digas idiota a Kokoromon-sama!- lo quedó mirando Gumdramon, ofendido.

-Está bien, Gumdramon. No podemos negar que soy algo Idiotamon- admitió su amiga, sin ofenderse, apenando a su pequeño amigo.

-¡E-En todo caso, Tagiru! ¡Ahora que estás bien, dinos lo que pasó con Samanta!- le pidió Gumdramon, queriendo cambiar de tema.

-Eso…- parpadeó Tagiru-… Es algo que debo manejar yo- le dijo, serio y determinado, haciéndole fruncir levemente el ceño- Pero necesito tu confianza para lograrlo- le aseguró- ¿Podrías confiar en mi, aunque no te diga por qué…?-

Gumdramon lo miró, al principio incómodo, ya que Tagiru no era de secretismos, especialmente con él. Así que, si el niño tenía un secreto, debía ser algo importante…

-¡Mph! ¡Tienes suerte de que yo sea un digimon confiable y poderoso!- sonrió el pequeño dragón- Haz lo que quieras, Tagiru. Sea lo que sea, estaré ahí- aseguró.

-¡Jejej! ¡Eres un orgulloso!- lo abrazó Tagiru, feliz.

-¡N-No me abraces!- forcejeo Gumdramon, avergonzado, haciendo reír al niño.

Kokoromon los miró sonriendo, contenta de que sus dos amigos estuvieran tan alegres.

Aun así, no pudo evitar sentirse preocupada, ya que también quería saber lo que había hablado Tagiru con Samanta… Debía ser algo importante y muy serio, para preocupar de esa forma a su amigo…

"… No estás haciendo nada malo, ¿verdad Samanta…?" pensó Kokoromon, preocupada por su hermana…

-Por cierto, Kokoromon- le habló Tagiru, tomando su atención, a lo que la digimon lo miró- Hay algo que no alcancé a preguntarle a Samanta…- le dijo el niño, ignorando como él tenía sujeto a Gumdramon, el cual le tiraba una mejilla, avergonzado por el abrazo en el que estaba- Ryouma me dijo que Samanta confesó que no podía usar la digixros, ¿es eso cierto?- parpadeó, curioso.

-…- Kokoromon parpadeó varias veces- ¡¿Eh?! ¡¿E-Ella lo confesó?!- puso las manos en sus mejillas, atónita- ¡E-Eso es un secreto de Jäger!- gimoteó, nerviosa.

-B-Bueno… En realidad parece que Bearmon lo dijo…- le aclaró Tagiru, sonriendo algo divertido por la tierna expresión de preocupación de la digimon.

-¡Se me chispoteó!- se disculpó el pequeño oso, saliendo del xros loader gamma del niño, aterrizando junto a Kokoromon.

-Ay, Bearmon. Eso no se hace- le dijo Kokoromon, paciente, a lo que su pequeño amigo sonrió.

Gumdramon infló las mejillas, celoso.

-¿Entonces es verdad…? ¿No puede usar la digixros…?- se preocupó Tagiru.

… Él era un idiota en varias cosas, pero no con los digimon. Era por eso que podía comprender un poco la situación.

La digixros se realizaba por medio del Code Xros que tenía cada humano, y el que permitía poder tener un compañero digimon. Según recordaba, era gracias al poder de soñar de los humanos…

… Que Samanta tuviera limitado su Code Xros… era a causa de su trauma y su deseo de no seguir en ese mundo…

… Pero, a pesar de que ella tenía ese sentimiento… ¿Por qué aún era capaz de usar su Code Xros?

El niño frunció el ceño…

… Si supiera la razón…

-Ella puede usar la digixros- le respondió Kokoromon, parpadeando, descolocándolo- Pero no libremente- le indicó.

-¿E-Eh…?- parpadeó Tagiru, sumamente confundido.

-A pesar de que Samanta quiere mucho a Jäger, solo puede hacer que Slayerdramon y yo hagamos digixros- le contó su amiga- Jack y Sky también son capaces de hacer digixros con algún digimon, pero es un método que dejamos de usar- recordó.

-¡E-Espera un poquito…!- le pidió Tagiru, haciéndole parpadear- ¿E-Eso significa…?- trató de pensar en una respuesta, incómodo.

-Significa que Samanta puede solo usar la digixros con su familia- le señaló Gumdramon, ofendido de tener que pensar por su amigo.

Tagiru parpadeó, para después sonreír, contento.

¡Eso era!

A pesar de todo, Samanta seguía sintiendo un gran aprecio por sus hermanos y Slayerdramon. Eran la razón, en un principio, por la que ella se volvió Jefa, y había ideado ese horrible plan para traer de regreso a Ryudamon, y así el mundo en el que viven no se viera afectado.

No importaba qué, ni por qué… Todo lo que había hecho Samanta Wolf hasta ahora fue solamente por su familia… Para nadie más…

Y ese aprecio hacia ellos era lo que mantenía su Code Xros activo, a duras penas, pero aún funcionando.

"Aún sueñas, Samanta…" sonrió Tagiru, determinado pero feliz "A pesar de que ya no quieres nada en este mundo… Hay una parte de ti que ignoras, que desea seguir viviendo junto a tu familia. Y es esa pequeña parte la que te permite usar tu Code Xros, aunque de forma limitada… No todo está perdido, Samanta… Te salvaré" apretó su puño, decidido.

-… ¿Tagiru?- parpadeó Kokoromon, confundida al verlo tan pensativo.

-No se preocupe tanto por él, Kokoromon-sama. Todos sabemos que es un idiota- le dijo Gumdramon.

-¡Eso no es verdaaaad!- y el niño le tiró las mejillas, comenzado ambos a tirarse de las mechas.

Kokoromon no pudo evitar sonreír levemente, mientras Bearmon vitoreaba…

… Pero los dos compañeros se detuvieron al sentir un temblor…


El Relojero estaba sentado en una banca del parque, observando como Hideaki, Kaoru, Mizuki, Kiichi, Souta, Makoto, y la pequeña Ai hablaban de lo que tendrían que hacer en ese momento, algo nerviosos pero determinados. Estaban acompañados por Damemon, Lunamon y Spadamon.

El grupo de Ryouma había decidido hacer unas rondas. También era una buena excusa para que Ren pudiera despejar su mente, aliviado de que Kuro estaría a salvo… por ahora.

Sentado al lado del anciano estaba uno de los Monitamon de Nene, quien le mostraba la imagen que su compañero compartía de Samanta durmiendo en la rama de un árbol, al cual se le habían acercado Jack y los demás miembros de Jäger, aliviados de haberla encontrado y que no hubiera roto nada a su paso.

-Mm… Parece que la Jefa realmente está cansada…- meditó el Relojero, vigilando a la joven por petición de Taiki.

… Taiki era amable… pero después de todo lo que había pasado… no podía confiar en la Jefa.

"… ¿Quién soy yo para juzgar a esa niña…?" pensó Bagramon, serio "Soy en parte responsable de crearla…" frunció el ceño, para después respirar hondo.

-¿Seguro que tu compañero no logró captar lo que conversó con Tagiru-kun?- le preguntó el anciano al Monitamon, mientras MidoriGumon salía de su xros loader negro, para estirarse.

-Solo captó la imagen. Estaba muy asustado de acercarse al ver a la Jefecita tan enojada- admitió el digimon tv, recordando el susto que él y su amigo pasaron al captar a Samanta usar su poder para amarrar a Tagiru.

-… Bien. Avísenme si ella vuelve a hacer un movimiento- le pidió el Relojero, a lo que el Monitamon asintió y desapareció rápidamente- … ¿De qué habrán hablado?- meditó, serio y curioso, hasta que el dragón verde oscuro le piñizco el brazo- ¡M-MidoriGumon! ¡R-Respeta tus mayores!- lo regañó, adolorido.

-¿Por qué te pones a vigilar a la Jefa?- le gruñó el dragón verde, subiéndose a la espalda del anciano y tirándole de la barba, haciéndole chillar- ¡¿No vas a buscar algún antídoto para Kai?!- exigió saber, tirando con más fuerza.

-¡M-Me gustaría…! ¡T-Te juro que me gustaría…!- gimoteó el Relojero- ¡P-Pero…! Pero Taiki-kun me encargó vigilar a la Jefa… A-Además, con mi poder y habilidades actuales, no podría buscar una cura…- aseguró.

-¡¿Entonces qué planeas hacer?!- tironeó con más fuerza MidoriGumon, molesto.

-… Confiar en Taiki-kun- le dijo serio el anciano, extrañándolo- Él sabe de la condición de Kai… Sé que no le dará la espalda-

-… Es un niño- le dijo el dragón verde, soltándolo- Es solo un poco mayor que Gumdramon… ¿Por qué… estás seguro que podría hacerlo…?-

-Viste el combate contra Ogudomon, ¿verdad?- sonrió el Relojero, incomodándolo- Has visto lo que Taiki-kun puede lograr al ayudar y no dar la espalda a los digimon o a las personas. La nueva forma digixros de Shoutmon es prueba de ello… Por eso, sé que podrá hacer algo por Kai… Pero eso no significa que no haré nada- le aseguró, y el dragón se asustó levemente al ver, por unos momentos, que bajo el lente del anciano brilló su ojo rojo- La situación y enfermedad de Kai es mi responsabilidad. No dejaré a ese niño solo- sentenció.

MidoriGumon lo miró, al principio nervioso, ya que aún le costaba asimilar que el anciano era Bagramon. Pero el pasar tanto tiempo con él le hizo comprender que él no lo lastimaría, por lo que lo miró algo incómodo y aliviado.

-… Más te vale- bufó MidoriGumon, bajándose de la espalda y aterrizando sin problemas en el piso- Solo espero que esos locos del Proyecto no le hagan algo a Red Vagimon y los demás…- murmuró.

-Vaya~ Preocupado por tu amigo~- se burló el Relojero, cabreándolo.

-Eres un buen digimon- sonrió Clockmon, en el xros loader negro.

-¡Cierra la boca!- y MidoriGumon aplastó el pie del anciano con su cola-martillo, haciéndole chillar de dolor.

Hideaki y los demás miraron desde donde estaban el pequeño escándalo.

-… MidoriGumon realmente es peor que Gumdramon- suspiró Damemon, a lo que los jóvenes asintieron, de acuerdo…

Pero, como los demás, se quedó quieto y alerta por el temblor que comenzó a sentirse.


El temblor se sintió en todo Digimon Land, alertando a los cazadores, digimon y civiles.

Taiki y sus amigos salieron de la tienda, mientras las Sistermon les decían que no sabían lo que pasaba; Jack y el resto de Jäger mirarían a su alrededor, al lado del árbol donde dormitaba Samanta, la cual abrió sus ojos, seria; Tagiru dejó de tirarse de las mechas con Gumdramon y miró a su alrededor, confundido…

"Este temblor… Son datos…" frunció Gankoomon, serio, mirando a su alrededor, mientras Momoka sonreía levemente, curiosa…

… Entonces, de la sombra de cada uno de los seres en el parque digital, aparecieron ojos malignos de color ámbar, aterrando a los civiles y alarmando a los digimon…

-… Mephismon…- murmuró lentamente el Relojero, mirando en su sombra los ojos del tercer fragmento de Apocalymon

-… Taiki… Kokoromon…-

Esa voz resonó en todas los ojos en las sombras de los humanos y digimon, los cuales comenzaron a desaparecer hasta quedar solamente en la sombra del sorprendido Taiki, quien estaba parado frente a la tienda junto a sus amigos, las Sistermon y Hackmon; al igual que en la sombra de la asustada Kokoromon, sentada en medio de la arboleada acompañada de Tagiru, Gumdramon y Bearmon…

… Pasó al mismo tiempo…

Al mismo tiempo que de la sombra de Taiki salieron látigos para atrapar al joven, de la sombra de Kokoromon también salieron esos látigos para atraparla…

Pero en ambos casos aquellas técnicas fallaron.

Kiriha empujó a tiempo a Taiki, salvándolo de los látigos, aunque el látigo atravesó su brazo, aterrando a su amigo…

En el caso de Kokoromon, Tagiru la abrazó de inmediato, al mismo tiempo que usaba su xros loader gamma para crear un escudo digital que refrenó los látigos, deteniendo el ataque…


Tras haber empujado a Taiki, Kiriha y él cayeron con fuerza al piso.

-¡Taiki-kun! ¡K-Kiriha-kun!- se asustó Nene, aterrada como sus amigos.

-¡Rowdy Rocker!- sin perder tiempo, Shoutmon, sumamente enojado, sacudió con fuerza su micrófono, atacando la sombra de Taiki, provocando que los ojos ámbar desaparecieran.

-¡¿Q-Qué fue…?!- Zenjirou miró asustado a sus amigos, reaccionando a lo que había pasado.

-¡K-Kiriha…!- Taiki se sentó, mirando asustado a su amigo, el cual se agarraba el brazo, tratando de aguantar el dolor, mientras Akari y Nene se les acercaban.

-¡Blanc!- Sistermon Ciel miró a su hermana, la cual asintió y raudamente fue a atender al rubio, al mismo tiempo que Greymon, MailBirdramon y Dracomon salían del xros loader azul, preocupados por el joven.

-K-Kiriha… gimió Dracomon, nervioso.

-¡E-El de recién…!- gruñó enfurecido Greymon, mirando la zona.

-Sí, fue Mephismon- gruñó Dorulumon, alerta, al igual que Ballistamon y los demás digimon presentes.

-¡Ay, no…! ¡¿Habrá atacado también a Kokoromon…?!- se asustó Akari, a lo que Taiki la miró, asustado.

Shoutmon los miró de inmediato, enojado… y aterrado.

-¡Greymon-osan! ¡Te encargo a Taiki!- le dijo enojado Shoutmon, dispuesto a irse, pero una risa oscura resonó en el parque, deteniéndolo y tomando su atención como la de los presentes…


-¡T-Tagiru…!- Kokoromon miró asustada a su amigo, el cual, sin dejar de abrazarla, seguía usando el escudo que le brindaba el xros loader gamma para retener los látigos que habían intentado atraparla.

-¡N-No dejaré…! ¡No volverán a lastimar a Kokoromon…!- frunció el ceño el niño, determinado.

-¡Jacked Hammer!/ ¡Golpe de Oso!- Gumdramon y Bearmon golpearon al mismo tiempo la sombra de la asustada Kokoromon, haciendo desaparecer los látigos y los maliciosos ojos ámbar.

-¡Kokoromon-sama!- Gumdramon se volteó a ver a su amiga, mientras Tagiru hacía desaparecer el escudo, aliviado de haber reaccionado a tiempo- ¡¿Se encuentra bien…?!- se le acercó de inmediato, preocupado.

-E-Esos… ojos…- gimió Kokoromon, claramente asustada- M-Me… Mephismon… E-El que hirió a Samanta… A todos…- cerró los ojos.

-¡El viejo chancludo!- asintió Bearmon, molesto por lo que pasó.

-Tranquila, Kokoromon-sama- Gumdramon puso su mano en el hombro de su amiga, quien lo miró, asustada- No permitiré que nada le pase- le prometió.

Kokoromon lo miró con el labio temblando y asintió, preocupando a Tagiru.

No podía culpar a la V-mon hembra por estar tan aterrada… El solo recordar cuando su amiga fue capturada cuando el cuerpo de Mephismon se volvió aquella sustancia viscosa… No debía ser un recuerdo placentero para Kokoromon.

-Kokory, te llevaremos con Shoutmon- le dijo Tagiru, levantándose con la digimon en brazos- No dejaremos que nada te pase- le prometió.

Kokoromon lo miró, nerviosa, pero después asintió y se acurrucó.

Pero antes de que Tagiru pudiera dar un paso, se pudo escuchar una risa oscura, haciéndole fruncir el ceño, asustado…


Esa risa resonó en todo Digimon Land.


-¡¿Q-Qué está pasando…?!- murmuró Jack, con Dante aferrado a su polera, asustado, mientras Sky, Wizardmon y Tailmon miraban a su alrededor, todos al lado del árbol donde estaba Samanta sentada en una rama.

-Todo indica que es Mephismon- murmuró Tailmon, moviendo levemente su cola, enojada, sin darle confianza alguna la malvada risa que resonaba en el parque.

-¿Qué hacemos, Jefa?-le preguntó Slayerdramon, en el xros loader gamma plateado que aún sostenía Dante.

-… Escuchar el monólogo del carnero con problemas de identidad- frunció el ceño Samanta, sumamente seria, sintiendo aún el dolor de punzadas en su cuerpo.


-… De nuevo… De nuevo impiden que obtenga lo que me pertenece…- las palabras de Mephismon resonaron en Digimon Land, haciendo fruncir el ceño a los cazadores y digimon que reconocieron su voz como la criatura oscura que había atacado el Edificio Administrativo del parque- Pero… Sí, está bien… ¿Por qué hacerlo tan fácil…? ¿Creen que soy parte de Apocalymon? ¿Creen que soy el Rey falso…?- la maligna voz rio levemente, haciendo fruncir el ceño a Taiki y a Samanta- Está bien… Hagamos las cosas interesantes… Quieren rescatar a Yuno y a los demás, ¿verdad? Pero también atraparme… Hagamos un juego- rió.


-¿U-Un juego…?- gruñó enfurecido Greymon, mientras Sistermon Blanc sanaba a Kiriha, quien fruncía el ceño, tratando de aguantar el dolor de la herida.

Nene, al lado de su amigo, lo miró sumamente preocupada y nerviosa.


-¿A-A qué quiere llegar ese monstruo…?- murmuró Hideaki, mirando para todos lados, desconfiado.

-Nada bueno- aseguró DarkKnightmon en el xros loader de Miho, preocupándola.

-S-Sí…- asintió Damemon, de acuerdo con él, mientras el Relojero estaba alerta.


-Son cazadores, ¿verdad?- continuó resonando la voz de Mephismon en el parque- Entonces, propongo una cacería: la mayor cacería de todas… Traten de cazarme- ante sus palabras, un mensaje llegó a todos los xros loader, incluyendo a los cuatro xros loader gamma.


-E-Esto es…- Slayerdramon, en el xros loader gamma plateado, frunció el ceño, confundido.


-¿U-Un mapa…?- murmuró Beelzebumon, mirando el mensaje en el xros loader de Nene.


-Les comparto la ubicación en donde estaré esperando… Para el que quiera intentarlo… Para el que quiera intentar cazarme… Para el que quiera intentar hacerme liberar los pocos datos de Omegamon…- informó cruelmente la voz del digimon carnero, haciendo fruncir el ceño al Xros Heart y a Jäger- Estaré ahí hasta el Eclipse, Taiki… Veamos qué gran plan harás… ¿Le darás la espalda a Omegamon e irás a la base del Proyecto Iluminati…? ¿O le darás la espalda a Yuno e irás tras de mi…? Sorpréndeme…- y ante sus propias palabras, la criatura rió cruelmente.


Taiki frunció el ceño, sumamente serio, mientras la risa del digimon carnero desaparecía, dejando un sabor amargo en todos los cazadores y digimon.

-… Es una amenaza, ¿eh?- frunció el ceño Sistermon Ciel, mientras Noir bufaba, ofendida.

-¡Cobarde!- gruñó Hackmon.

-¿Cuál ubicación dio, Taiki?- le preguntó Shoutmon, serio, mientras su amigo miraba su xros loader gamma.

-Es al sur de Corea del Sur…- murmuró el pelicafé, serio- ¿Una isla?-

-Es la isla Jeju- le explicó Nene, mirando el mensaje en su xros loader- Es parte de Corea del Sur, y es conocida como una de las Siete Maravillas Naturales del mundo- le informó, seria y preocupada.

-¡Era de esperarse de Nene-san! ¡Sabe muchas cosas!- alagó Zenjirou, a lo que Dorulumon le dio un coletazo, haciéndole chillar.

-Un lugar muy importante para los humanos…- murmuró Wisemon, mirando a Akari, la cual asintió, confirmándoselo.

-Tsch. Esto demuestra lo vanidoso y altanero que es ese intento de doppelganger- bufó Shoutmon- Taiki, ¿no estás herido?- miró a su compañero, serio y preocupado.

-Estoy bien, gracias a Kiriha- el pelicafé miró preocupado al rubio, atendido por Sistermon Blanc.

-¿Q-Qué planeas hacer, Taiki…?- lo miró costosamente Kiriha, aguantando el dolor.

-N-No hables, Kiriha-kun- le pidió Nene, preocupada por él.

-G-Greymon… M-Mailbirdramon… Hagan una inspección rápida por la zona. Nada nos asegura que ese monstruo se fue realmente…- les ordenó el rubio al dinosaurio y al digimon ave.

-¡Sí!- asintieron ambos, retirándose rápidamente.

-Me quedaré contigo, Kiriha- le dijo Dracomon, preocupado.

El rubio sonrió levemente, pero después reprimió un gemido, cansado y adolorido, preocupando al pequeño dragón y a Nene.

-Estoy por cerrar la herida. Aguanta un poco- le pidió Sistermon Blanc, nerviosa.

Taiki los miró preocupado, hasta notar que varios cazadores se le habían acercado.

-¡¿E-Escuchaste…?! ¡E-El tipo que atacó antes…!- le dijo un cazador, nervioso.

-¡¿Qué haremos…?! ¡¿Nos uniremos para darle su merecido?!- pidió otro cazador, con su compañero entusiasmado.

-Tranquilos. Primero hay que verificar que Mephismon no causó más daños…- Taiki fue a hablar con los cazadores para mantener la calma.

"C-Causar más daños…" pensó Shoutmon, nervioso por Kokoromon…

Si Mephismon intentó secuestrar a Taiki… ¿habría intentado lo mismo con la V-mon…?

-¡Taiki-san!- escuchó Taiki, quien miró a Tagiru acercarse corriendo junto a Gumdramon y Bearmon, llevando en brazos a una nerviosa Kokoromon.

-¡Tagiru! ¡Kokoromon!- sonrió el pelicafé, aliviado de que su amiga estuviera a salvo.

-¡Kokoromon…!- se alegró Shoutmon, dispuesto a acercarse, pero se sobresaltó cuando Lillymon, Starmon, los Pickmons, y ChibiKamemon salieron del xros loader gamma del sorprendido Taiki, yendo directamente contra Tagiru.

-¡K-Kokoromon…!- los digimon abrazaron a Kokoromon, tirando con fuerza a Tagiru al piso.

-¡T-Tagiru…! ¡K-Kokoromon-sama…!- los miró Gumdramon, atónito.

-¡BHUA! ¡K-Kokory…! ¡Que alegría que estás a salvo…!- gimoteó Lillymon, abrazando a su descolocada amiga.

-¡C-Cuando ese monstruo trató de llevarse al General, temimos lo peor, Kokoromon-sister!- lloriqueó Starmon, aferrado a la digimon al igual que sus súbditos.

-¡K-Kokoromon…!- gimoteó ChibiKamemon.

Taiki sonrió levemente al ver la preocupación de sus amigos, aunque no pudo evitar sentir un poco de pena por Shoutmon. La expresión del dragón indicaba claramente que estaba ofendido e indignado por no haber podido ir a abrazar primero a Kokoromon.

Akari y Cutemon también notaron esa expresión, por lo que reprimieron una risita.

-P-Perdonen… No quise preocuparlos…- aseguró Kokoromon, aun nerviosa, mientras sus amigos se separaban, aun gimoteando de alivio.

La digimon naranja miró a Shoutmon, preocupada y nerviosa.

-… ¿Estás bien?- le preguntó, preocupada por él, mientras el dragón se le acercaba.

-… Je, piensa en ti- Shoutmon se agachó y la abrazó con suavidad, aliviado de que estuviera a salvo- ¿No te lastimó ese tipo?- le preguntó, preocupado.

-Estoy bien. Tagiru, Gumdramon y Bearmon me salvaron- Kokoromon cerró los ojos, sintiéndose al fin segura al ser sostenida por el digimon que amaba.

-Entonces, ¿también los atacaron?- Dorulumon miró al adolorido Tagiru.

-S-Sí… M-Más bien, a Kokoromon…- le dijo el niño, levantándose algo mareado por la estampida recibida.

-¡Pero la protegimos! ¡Protegí a Kokoromon-sama como lo prometí!- informó Gumdramon, mirando a Shoutmon, el cual le sonrió, alegrándolo.

-… Significa que Kokoromon y yo seguimos siendo sus objetivos…- frunció el ceño Taiki, mirando preocupado como Sistermon Blanc sentaba con cuidado a Kiriha.

-N-No puedo sanarlo por completo- aseguró la digimon de traje blanco, preocupada.

-¿P-Por qué…?- se acercó Taiki, preocupado, mientras Dracomon y Nene se asustaban.

-… Creo que te salvé de una grande, Taiki- le dijo Kiriha, mirando su herida…

… Taiki abrió los ojos, asustado al ver que a los bordes de la herida… había data negra…

-… No puedo mover el brazo…- confesó Kiriha, serio, asustando más a sus amigos.

-… K-Kiriha-kun…- murmuró Nene, aterrada- ¡K-Kokoromon!- llamó a la digimon, la cual se había separado de Shoutmon y se había acercado, intentando usar su Reliquia para sanar los datos oscuros en la herida del joven.

-N-No… No puedo…- murmuró Kokoromon, nerviosa- D-Debería ser capaz de sanarlo… De purificar esta oscuridad… ¿P-Por qué no puedo…?-

-… Porque es una maldición- escuchó la digimon, por lo que, como los demás, vio a Samanta acercarse, acompañada de sus hermanos, Wizardmon y Tailmon.

-¡S-Sam…!- se alegró Tagiru.

-¡Taiki! ¡¿Estás bien?!- Jack se acercó al joven, preocupado.

-Sí, Kiriha me salvó… Recibió el ataque por mi…- le dijo Taiki, mirando preocupado a su amigo, el cual miraba seriamente a su prima.

-… ¿Una maldición…?- frunció el ceño Kiriha- ¿Cómo la que te hizo Salamandra y la que tiene Gumdramon?- exigió saber.

-Según Quartzmon, sí- Samanta se agachó junto a su primo, inspeccionando la herida. Frunció el ceño al ver lo profunda que era.

-T-Tu maldición no te permite sanar…- recordó Taiki, serio, extrañando a la preocupada Kokoromon- La de Gumdramon caer en la oscuridad si él y Tagiru sienten desesperación- miró al pequeño dragón, el cual hizo una mueca, aún sin entender cuándo y cómo recibió esa oscuridad en su programa-… ¿E-Entonces…? ¿La de Kiriha no le permite sanar…?- se preocupó.

Kiriha frunció el ceño, serio.

… ¿Sería la misma maldición que tenía su prima en su columna…?

Algo en él le decía que no… Que algo iba mal…

… ¿Acaso…?

-… Dracomon. Cyberdramon. Digixros- ordenó Kiriha, extrañando al pequeño dragón a su lado…

… Aún así, su xros loader azul no se activó…

-¿E-Eh? ¿N-No pasó nada?- Dracomon se miró, confundido.

-… Kiriha…- murmuró Samanta, frunciendo el ceño al comprender la maldición.

-… S-Selló…- murmuró Taiki, atónito-… Selló tu Code Xros- comprendió.

-¡¿Q-Qué…?!- lo miraron Akari y Zenjirou, atónitos y asustados.

-K-Kiriha-kun- Nene miró asustada a su amigo, el cual miraba serio y molesto su herida.

-… Mph. Era natural… A quien intentó sellar el Code Xros fue a ti, Taiki, para refrenar los poderes de Shoutmon…- bufó el rubio- Y parece que es algo que no puede hacer a la ligera, sino, lo habría intentado de nuevo al ver que falló por mi culpa…-

-¿F-Fue capaz de sellar las habilidades de un humano…?- murmuró Wizardmon, serio y preocupado.

-Peor…- se levantó Samanta, tomando la atención del mago- Sin Kiriha, Greymon no podrá alcanzar el nivel de ZekeGreymon… Por lo tanto…- apretó su puño, seria y molesta.

-… Por lo tanto… No podremos volver a usar a Shoutmon EX6 ni a X7…- informó Taiki, serio y asustado.

Sus amigos lo miraron, sorprendidos y asustados…

… Mephismon había hecho una jugada muy astuta…

Shoutmon miró sorprendido a Taiki, y después a Kokoromon, quien se veía claramente asustada por la amenaza de Mephismon.

El dragón rechinó sus colmillos, enfurecido de verla tan aterrada.


Mundo Humano- Corea del Sur.

Su mente le daba vueltas… Le molestaba respirar… Y su cuerpo… Todo su cuerpo le dolía…

Kai frunció el ceño, comenzando a recuperar la conciencia, por lo que abrió apenas los ojos.

Estaba recostado en la camilla de una sala médica, y, por las ventanas abiertas, se podía ver que era plena noche.

El rubio frunció el ceño, aun tratando de enfocar su visión, hasta escuchar un ruido a su lado, por lo que movió levemente el cuello para mirar.

Era Red Vagimon, quien, parado junto a su camilla, lo miraba sumamente sorprendido, con lágrimas en los ojos.

-… ¿T-Tú…?- murmuró costosamente Kai, confundido y cansado.

-Sir! You are awake! How you feel?!- le sonrió el digimon planta, sumamente feliz al verlo despierto.

-¿C-Cómo me siento…?- Kai cerró los ojos un momento- M-Me duele… respirar…- puso la mano en su cuello, notando las manchas moradas- Ya veo… Creo que usé la digixros… Mi Code Xros… Eso empeoró mi estado, ¿no?- bufó, cansado, preocupando a su compañero-… ¿Dónde estoy…? ¿Con el Xros Heart, o con el Proyecto Iluminati…?- lo miró, confundido.

-We are with the Project- le respondió Red Vagimon, sorprendiendo levemente al rubio- Topacio took care of you. She said that she will create a suit that will keep your body stable... But...-

-… ¿Pero…?- se sentó con cuidado Kai, cansado.

-Several soldiers saw the infection... Rumors spread...- le informó el digimon, haciéndole fruncir levemente el ceño- So... She fears that the one who was behind what happened with your parents, will take more interest in the infection and... hurt you-

Aquello hizo que el joven lo mirara, sorprendido.

Así que ahora, que varios soldados lo vieron con la infección, estaba la posibilidad de que el responsable de lo ocurrido a sus padres… ¿fuera por él…?

-… Sir…?- Red Vagimon miró preocupado a su compañero, ya que estaba pensativo y con el ceño levemente fruncido.

-… Que así sea- murmuró Kai, extrañando al digimon- No me importa quién haya sido…- miró la marca magenta en su mano- Lo atraparé, y usaré el deseo de Apocalymon para traer a mis padres de regreso- apretó su puño- Si falla alguna…- sentenció, determinado.

Red Vagimon se sorprendió ante las palabras del niño, pero no pudo evitar admirarse por la determinación en la mirada del joven. No había duda. Él realmente quería recuperar a sus padres…

… Pero… ¿Realmente el revivir a Apocalymon le cumpliría su deseo…? El Xros Heart y el Relojero habían dicho que eso no iba a ocurrir, pero…

¿Pero podía confiar en el Relojero…? Era Bagramon… Esa era su verdadera identidad… El digimon que infectó a su compañero en su intento de destruir el mundo…

-… ¿Y tú…?- escuchó, por lo que miró al rubio, el cual lo miraba serio y curioso-… ¿Qué vas a hacer?-

-I... I am loyal to you, sir. I have always been it- le recordó Red Vagimon, serio- I don't like the idea of you being in this place...but everything indicates that you will be able to heal here, and discover who is behind the accident of your parents...- admitió, extendiendo sus látigos y tomando el xros loader café en la mesa de noche-…If you're going to stay here, then me too. All of us- le aseguró, tendiéndole el aparato.

Kai lo miró, sorprendido de que, a pesar de todo, Red Vagimon iba a quedarse a su lado.

-¡Red tiene razón!- Kai se sorprendió cuando IceDevimon, uno de sus digimon, le gritó, algo exasperado- ¡Ustedes dos nos cazaron, aunque usando trampas! ¡Pero lo hicieron! ¡Nuestra lealtad es contigo, Kai! ¡No con el Xros Heart, ni con Jäger, ni menos con el Relojero! ¡No ahora que sabemos que tu vida peligra por culpa de lo que hizo como Bagramon!- aseguró, bufando, a lo que SkullGreymon y Raremon rugieron, de acuerdo.

-Nuestra misión y objetivo es ayudarte- asintió Andromon, a lo que ShimaUnimon, a su lado, relinchó y asintió.

-This is our determination, sir- le dijo Red Vagimon a Kai, serio, para después sonreír levemente.

-…- Kai lo miró, sorprendido e incómodo por la vergüenza-… E-Espera… ¿MidoriGumon no está en el xros loader?- le preguntó, notando la ausencia del dragón verde.

Sí, él no había cazado a ese Gumdramon, pero era parte… de su grupo.

-...No, I'm sorry…- negó Red Vagimon, aun triste por haberse separado de su amigo- He was with Tagiru at the time of the attack- le informó.

-¡¿C-Con… ese tipo…?!- se molestó Kai, recordando a Tagiru.

Tagiru aún le caía mal. No le perdonaba el puñetazo que le dio cuando intentó cazar a Kokoromon, ni los problemas que le dio en Digimon Land.

¿Ahora tenía a MidoriGumon?

Kai apretó sus puños, pero después hizo una mueca, tratando de calmarse.

Tenía que pensar en lo que debía hacer, y no lo que quería.

-… Tsch, como sea- bufó Kai, tomando el xros loader- Red Vagimon, si volverás a seguirme tendrás que obedecer sin chistar, ¿entendido?- lo miró, serio.

-… Yes, sir!- asintió Red Vagimon, serio.

Kai parpadeó y bufó, mirando para otro lado, intentando ocultar la vergüenza que le dio.

"… Ahora que lo pienso… Tactimon no está aquí…" notó el rubio, mirando el aparato café oscuro…


En una de las habitaciones del edificio, se podía ver a la pequeña Misty dormida en una cama, a la cual Esmeralda le puso otra frazada, sonriendo preocupada.

Le preocupaba el papel que había tomado su hija en toda la situación. La compañera de Blastmon… Jamás se les hubiera pasado por la cabeza que la niña terminaría siendo compañera de ese General…

Por órdenes de Salamandra, Horfe y Esmeralda habían permitido que Misty acompañara a Blastmon en sus rondas, para que el digimon convenciera a la pequeña de que usara sus poderes para ellos… Pero aunque la niña quería a Blastmon y a los tres Evilmon, no mostraba interés alguno en querer ayudar en una pelea que ella no entendía…

"… Héctor dijo que debemos aguantar y esperar el Eclipse…" la pelinegra miró preocupada a su pequeña dormir "Debemos ser fuertes… Solo… Solo espero que Ren… Mi pequeño esté bien…" juntó sus manos, pensando en su hijo mayor…

Pero sus pensamientos fueron interrumpidos cuando la puerta de la habitación se abrió, por lo que Esmeralda se volteó, esperando ver a su marido, pero no.

Era Izanami.

-Veo que el cuidar de tu hija te ha dado la excusa de escaparte de tus labores- sonrió la rubia, entrando sin permiso a la habitación.

-Es el trabajo de una madre cuidar de sus hijos- le señaló Esmeralda, seria pero nerviosa.

No le agradaba esa mujer. No solo por haberle disparado ese día a Kudou Yuno, sino porque la consideraba una persona… muy tóxica.

Sabía que Izanami pensaba que ella, Esmeralda, había ganado su puesto como uno de los altos mandos de la sección de Topacio porque era la esposa de Horfe. Solo por eso, cuando en realidad la pelinegra logró infiltrarse y ayudar en la organización por sus estudios en biología y tecnología.

Claro está, que Izanami prefería ignorar esos factores.

-Pensé que estarías cuidando de tu hijo- le dijo Esmeralda- O vigilando la Puerta Final o alguna cosa de tu jurisdicción- indicó, incómoda.

-… ¿Sabes algo curioso?- la rubia se sentó en la cama donde dormía Misty, ignorando las palabras de la pelinegra, quien frunció levemente el ceño- Acaba de despertar Red- le comentó.

-¿Red? ¿Logró sanar sus heridas?- se alivió Esmeralda.

Tampoco le agradaba ese hombre, pero ella prefería que no hubieran más muertes.

-Sí, sí… Está algo atontado… Más de lo normal- le dijo Izanami, mirando con sus ojos gris claro a la pequeña dormir, lo cual le dio mala espina a Esmeralda- Y aunque sea imposible de creer, Red dijo algo muy… curioso- le indicó a la pelinegra.

-… ¿Qué cosa…?- frunció el ceño Esmeralda, confundida.

-… Lo sabrás mañana en la mañana- la rubia se levantó suavemente, pasando al lado de la confundida pelinegra- Es algo que Salamandra ya sabe pero va a hablar con todos en la reunión de mañana-

-E-Espera… ¿Entonces por qué me dices todo esto?- se confundió Esmeralda, viéndola ir a la puerta.

-Porque ahora que terminaste de cuidar a la niña, debes ir a trabajar- le informó Izanami, apoyándose en el borde de la puerta- Necesitamos más manos para atender a los heridos. Aún falta que varios soldados recobren la conciencia. Lo bueno que en la extrañada parada que hizo Mephismon aquí, él sanó a Kudou, así que no tenemos que preocuparnos de ella. Aún me pregunto a qué vino… Se fue tan rápido…- suspiró sonriendo, meditando.

-No voy a dejar a mi hija sola- le aseguró Esmeralda, a lo que Izanami la miró con una ceja alzada, dejando la sonrisa- Topacio es mi jefa de sección, no tú, Izanami. Ella me dio el permiso de velar de Misty mientras ella no esté con Blastmon- le indicó- Es normal cuidar de un hijo, Izanami… Que tú no hayas cuidado a los tuyos es tu problema, no mío- agregó, mirándola seriamente.

Izanami la miró con una ceja alzada, fastidiada y molesta.

-… Había escuchado que tu hijo mayor tiene una actitud… horrenda. Pensé que tenía el carácter fuerte de Horfe, pero veo que no solo heredó tu peinado- le dijo Izanami, sonriendo con un toque de burla, pero Esmeralda solo la miró seriamente, con el ceño fruncido.

-Si no tienes nada más que decir, la puerta está abierta- le indicó Esmeralda, molesta, pero tomó su atención que su comunicador se activara- Aquí Esmeralda, ¿qué ocurre?- respondió.

-Esmeralda, sé que estás cuidando de la pequeña Misty, pero necesito que organices a los enfermeros del segundo piso- le dijo la voz de Topacio- Parece que Mercurio ha despertado y me dirijo a su habitación. Será perfecto para que pruebe su nuevo traje, sino me lo lanza por la cabeza en una pataleta- admitió.

Esmeralda sonrió, aliviada de que Kai despertara, pero no pudo evitar sentir molestia por la sonrisa burlona de Izanami.

-Entendido, Topacio. Espero que Mercurio-kun esté bien- cortó la comunicación la pelinegra, saliendo de la habitación al igual que Izanami, la cual, sin dejar su sonrisa, sonrió divertida.

La pequeña Misty quedó sola en la habitación, durmiendo profundamente, acurrucada…

… Es por eso que la niña no despertó por la súbita aparición de Visdom en medio del cuarto.

Era el mago original y no una copia, siendo prueba de ello el que su brazo izquierdo fuera el Brave Snatcher bañado en el Chrome Digizoid que le robó a Ballistamon.

En silencio, Visdom se acercó a la niña, la cual se acurrucó un poco más, sin notar su presencia.

Por supuesto que no lo notaría. Era solo una niña normal. Lo único excepcional de ella era que había logrado obtener un nuevo Code Xros gracias al extraño y curioso lazo que formó con Blastmon, el cual le brindaba un gran poder de ataque y defensa al digimon de diamantes…

… Siempre y cuando, Tobari Misty estuviera sincronizada al General, lo que implicaba que ella estuviera de acuerdo con los ideales del Proyecto Iluminati, cosa que parecía lejos de lograrse.

Esto lo sabía por la copia que había tenido contacto ese día con Blastmon, y con la cual supo que la niña, a pesar de su conexión con el digimon de diamantes, no parecía que sería de utilidad…

El mago blanco frunció el ceño, y colocó su mano derecha frente al rostro de la durmiente Misty…

De a poco, la mano comenzó a ser rodeada de energía amarilla, al mismo tiempo que una leve ventisca emergía en la habitación, y un círculo de magia aparecía debajo del mago y la pequeña peliazul…


Al día siguiente…

Martes 30 de Octubre…

Digimon Land.

Aunque era de madrugada, se podían ver a varios cazadores junto a sus compañeros haciendo vigilancia por el parque. Esto es porque, además de la alegría de que todos hubieran sanado el día anterior, muchos estaban enojados por la extraña amenaza de Mephismon al parque.

Ese comunicado… Como si se burlara de los cazadores…

Aquello había prendido la chispa en varios cazadores, quienes, testarudos, hacían las rondas solo para desahogarse.

Wizardmon y Tailmon hacían una ronda, caminando por parte del dañado centro del parque.

-Realmente parece un parque embrujado- admitió la felina, mirando las atracciones dañadas.

-El ataque del Proyecto Iluminati, junto con el posterior golpe que dieron tanto Mephismon como Omegamon Zward… Es un milagro que ningún humano perdiera la vida- le señaló el mago azul.

-Pero los digimon del Xros Heart y Jäger sí, ¿no?- la gata se detuvo y lo miró de reojo, seria.

-…- Wizardmon se detuvo, mirando fijamente a su amiga-… Si no te conociera, diría que estás insinuando algo- le señaló, serio.

-… ¿Crees que no lo he notado?- le preguntó Tailmon, molesta- … Ese programa… El otro Wizardmon… Sigue en ti, ¿verdad?- exigió saber, seria.

Su pregunta tomó por sorpresa al mago azul.

-Te conozco desde hace años, Wizardmon- continuó la felina, seria- Puedo sentir una extraña… resonancia en tu programa… Es… Es como… Si latieran dos corazones al mismo tiempo- admitió, moviendo levemente sus orejas.

-… La… La verdad…- sonrió tristemente Wizardmon- La verdad, es que estoy tan confundido como tú- le aseguró, sentándose en unos escombros cercanos, por lo que su vieja amiga se sentó a su lado, seria y preocupada-… Cuando el joven Wizardmon de Jäger usó el programa de Luke y entregó los Emblemas, sus datos desaparecieron de este cuerpo, quedando solo los míos. Por eso que pude despertar estando dentro de los circuitos del Mar Digital, porque yo no había muerto en ese momento-

-¿Entonces…?- lo miró Tailmon, confundida.

-… Esto que sientes, Tailmon… Me atrevería a decir que son los datos de respaldo del joven mago- admitió Wizardmon, sorprendiéndola- No importa qué, seguimos siendo datos. Programas. Es normal que en nuestros cuerpos digitales se mantenga siempre un respaldo. Es gracias a estos datos de respaldo que yo pude mantenerme con vida cuando me encontraba dentro del programa del otro Wizardmon- le indicó- Yo pensaba que no sentiría más los datos de ese mago en mi, pero… pero creo que resonaron gracias a lo que hizo el clan de los V-mon-

-¿El clan de los V-mon? ¿A-A qué te refieres?- se confundió más Tailmon, seria.

-… Dentro de los circuitos digitales del Mar Digital, tanto Valkyrimon como yo no podíamos hacer reaccionar los datos de Kokoromon. Fueron los datos de su familia fallecida… Los datos de los V-mon fallecidos los que no solo lograron despertarla, sino que lograron sacrificarse y reparar su Reliquia Digital-

-… Eso significa… Que todos murieron definitivamente al sacrificarse, ¿no?- murmuró Tailmon, a lo que su amigo asintió- ¿Pero qué tiene que ver… con tu situación?-

-… Aquello fue un acto de amor, Tailmon. Un sentimiento que no muchos digimon experimenta o conoce, después de todos, al ser programas, nuestra primera meta en la vida es hacernos fuerte y evolucionar- le indicó el mago azul, serio- El amor de un digimon… Los sentimientos de aprecio y cariño de todos aquellos V-mon, no usuales en nuestra gente, no solo lograron reparar la Reliquia y hacer reaccionar los datos de Kokoromon… Resonaron en los datos de respaldo del joven Wizardmon- puso la mano en su pecho, en donde apareció un tenue brillo verde, dejando sorprendida a la digimon gata a su lado-… Es leve… No sé si hay conciencia o no… Pero… Pero el Wizardmon de Jäger no ha desaparecido por completo- sentenció, serio.

La pregunta que carcomía al mago azul era la siguiente: ¿cuánto de aquel mago verde se había salvado en los datos de respaldo…?

-… ¿Qué harás…?- la voz seria pero triste de Tailmon tomó su atención, por lo que la miró, confundido- Este cuerpo digital es tuyo, no es el mismo que el de ese mago… P-Pero aún así, ¿se lo darás para que él pueda regresar a la vida…? ¿Tendré que perderte de nuevo?- le preguntó, seria pero con las orejas gachas, indicando como le afectaba la situación.

-… Tailmon…- la miró su viejo amigo, sorprendido, para después sonreír con tristeza- Aunque quisiera, no podría… Los datos de respaldo del joven Wizardmon no son suficientes para que pueda adaptarse a mi cuerpo digital- le contó, acariciándole la cabeza- Sus datos siguen dentro de mi, pero me temo que están fragmentados… Son muy pocos… Aunque su corazón lata junto al mío, no veo capaz que pueda sobrevivir usando mi cuerpo… No puede crear la energía suficiente-

-¿Entonces…?- le preguntó Tailmon, confundida.

-… No lo sé… No puedo hacer nada… Además, aunque sienta la calidez del joven mago… no siento su personalidad… Son… fragmentos de él… Pequeños rasgos… Es muy trágico- le aseguró, sonriendo con tristeza- Por eso aún no le he contado a la Jefa o a los demás… Con solo unos fragmentos de datos… no se podría traer de regreso a ese joven mago que dio la vida por sus amigos-

Tailmon lo miró, seria y preocupada, y después al cielo.

-… Díselos después del Eclipse- le pidió la felina, tomando su atención- Estos jóvenes han demostrado un gran potencial… Estoy segura que podrán salvarlos, a ambos- lo miró, seria y determinada.

Ante eso, Wizardmon sonrió levemente, de acuerdo con ella.

-… Sí, tienes razón… Los humanos jóvenes no dejan de sorprender a un digimon…- sonrió el mago, mirando el cielo rosado encima de ellos…


En una zona del parque, se podía apreciar a Locomon, el digimon tren de Kiichi, el cual hablaba con Taiki y Samanta, ambos acompañados de sus compañeros. Aunque, claro está, que Kokoromon, Jack y Sky miraban por todos lados al enorme digimon, sumamente impresionados.

Cerca de ellos estaba Tagiru, junto a Shouta y Miho. El joven hablaba con Makoto, el cual se veía claramente molesto.

-¡¿P-Por qué no puedo acompañarlos?!- pidió saber el niño, preocupando a Shouta y Miho- ¡Somos compañeros de clases! ¡¿Es porque no tengo un Emblema?!-

-Tranquilízate, Makoto- le pidió Phelesmon, en su xros loader.

-¡Y yo te sigo diciendo que es porque es muy peligroso!- le indicó Tagiru, indignado, mostrando su poca paciencia, a lo que Gumdramon y Damemon, al lado del joven, suspiraron, intentando ser pacientes.

-¡Shouta, Miho-chan...!- Makoto miró a sus compañeros- Los tres tenemos a digimon que Tagiru nos encargó. ¿Están de acuerdo con esto?- pidió saber.

-Makoto-kun… Recuerda lo que dijo Taiki-san: nadie nos asegura que no volverán a atacar el parque cuando nos vayamos- le indicó Miho, preocupada.

-Phelesmon es un digimon poderoso- Ekakimon salió del xros loader de Shouta, colgándose en su hombro- En caso de peligro, podrá hacer algo genial- aseguró.

Blossomon, en el xros loader de Miho, rugió suavemente, de acuerdo con su amigo.

-Pero… Kiichi también irá con ustedes y no tiene Emblema…- señaló Makoto, nervioso.

-¡Te digo que es porque nos llevará con Locomon a salvar a Yuu y a los demás! ¡¿Por qué no lo entiendes?!- exigió saber Tagiru- ¡Queremos ir a salvar a todos! ¡Pero necesitamos asegurarnos que haya alguien fuerte que cuide del parque mientras no estamos! ¡Y Makoto, no olvides que tú eres fuerte! ¡Y nuestro amigo, así que debes tenernos confianza!- lo apuntó dramáticamente, emanando vapor de la nariz.

-… Es por eso…- admitió Makoto, extrañando a sus compañeros-… Me he llevado tan bien con nuestro curso… Y con todo lo que pasó… Nuestros padres… Nuestros profesores… Nuestros compañeros… ¡No quiero que se vayan y me dejen solo!- les dijo, nervioso, preocupándolos.

-… Yo también extraño a mis compañeros… A Masaru y sus recetas de ramen… O cuando Kaneda me enseñaba su colección de bichos…- murmuró Shouta, preocupado.

-¡¿E-Extrañas a Kaneda?!- lo quedó mirando Tagiru- ¡Con solo recordar los problemas que me metió esa vez a mí y a Hideaki cuando nos siguió al DigiQuartz al confundir mi cacería digimon con una búsqueda de bichos feos…!- se restregó la cabellera, ofendido.

-T-Te equivocas si crees que tienes bien tus prioridades-dame- lo quedó mirando Damemon, incómodo.

-¡D-Damemoooon!- el niño le tiró las mejillas al digimon, ofendido.

-¡Te equivocas si crees que soy Gumdramon-dame!- y tras el sonido de un coscorrón, Tagiru hizo un puchero, ya que tenía el coscorrón dado por Damemon en la cabeza.

-Los gorditos son peligrosos- parpadeó Gumdramon, pero se sobresaltó y miró para otro lado por la miradita que le dio Damemon.

-Yo también extraño a todos, Makoto-kun- le aseguró Miho a su amigo- A Mami-chan y su grupo… A todos… Debemos hacer todo lo posible para ayudar. Tagiru no nos entregó a nuestros digimon para que fuéramos a pelear, sino que para ayudar y proteger a otros- le recordó, tomando con cariño su xros loader- Por eso también estoy de acuerdo con que te quedes, y ayudes a los Bakomon y demás cazadores- le pidió.

-… Sí, también creo lo mismo- admitió Shouta.

Makoto los miró, un poco dolido, pero después se dio palmadas en las mejillas, sobresaltando a sus compañeros de clase.

-¡E-Está bien!- asintió el niño- ¡Cuidaré a todos a como dé lugar! ¡Pero deben prometer salvar a nuestro amigo Yuu!- les pidió.

-¡Así se habla, Makoto!- Tagiru lo abrazó y chasconeó la cabeza, haciéndole reír, mientras Shouta y Miho sonreían, contentos.


-… Sé que es un parque y eso, pero podrían mantenerse callados un momento- murmuró Samanta, mirando fastidiada la situación, tomando la atención de Taiki.

-Parece que Tagiru logró convencer a Makoto de quedarse- sonrió el pelicafé- ¿No te alegra?- miró a la niña.

-… ¿Por qué? Somos compañeros de clase, pero no he interactuado con casi ninguno. Lo que haga Tamura no es asunto mío- aseguró Samanta.

-… Dices eso, pero hasta sabes su apellido- le hizo notar Taiki.

-Es lógico saber los nombres de los demás- lo quedó mirando Samanta, fastidiada y algo ofendida, haciendo sonreír apenado al joven- ¿Cómo quieres que me refiera a mis compañeros? ¿Idiota N°1 e Idiota N°2?-sugirió, apenando más al pelicafé- Aunque esos títulos se lo ganan esos- bufó, mirando como Kokoromon, Jack y Sky seguían observando asombrados a Locomon.

"S-Su lengua afilada no deja de sorprenderme…" sonrió incómodo Taiki, mientras Shoutmon, su lado, miró molesto a Samanta al insinuar eso de Kokoromon.

Slayerdramon negó con la cabeza, paciente.

-Locomon y yo ya hicimos los cálculos- Kiichi se acercó a los dos jóvenes y a los dos dragones- Podremos llegar en seis horas a Corea del Sur- informó, sonriendo emocionado, mostrando el mapa que indicaba la trayectoria.

-¡¿Seis horas?!- lo quedaron mirando Jack, Sky y Kokoromon, asombrados.

-¡E-En avión debería ser…! E-Este…- comenzó a calcular Jack- De una hora y media a casi dos horas, ¿no?- parpadeó.

-Ah, Jack, ¿eres bueno en matemáticas?- parpadeó Taiki.

-No es solo un flaquito y un buen hermano. También es bueno con las matemáticas- señaló Sky a su hermano, sonriendo orgullosa, mientras Kokoromon asentía.

-¡Sí! No solo soy un…- sonrió Jack, hasta parpadear- ¡S-Sky!- miró apenado a su hermana, la cual reprimió una risita al igual que Kokoromon.

Samanta miró su xros loader gamma en el brazo, notando la risa de Valkyrimon.

-Pero hablando en serio, Jack tiene razón- sonrió Taiki-La distancia de Japón y Corea del sur es un poco más de 900 kilómetros. En avión, un viaje duraría de una hora y media a dos horas- indicó- Los aviones tienen como velocidad entre 800 a 900 kilómetros por horas, mientras que un tren como el Shinkansen, es de 300 aproximadamente. Locomon es una locomotora, así que su velocidad es de 80 kilómetros por hora- señaló.

-… Realmente eres un erudito- lo quedó mirando Samanta.

-¿Eh? ¿No sabías esto?- parpadeó Taiki, mientras Shoutmon estaba confundido con tantos números.

-No soy fans de los vehículos- admitió la niña, moviendo los hombros- Pero siguiendo lo que dices, si Locomon debe tener una velocidad de 80, deberían ser al menos 11 horas de viaje- le indicó a Kiichi.

-Jejejeje. Eso es lo asombroso de Locomon- aseguró Kiichi, dándole palmaditas al metal- Hemos aprendido a viajar a largas distancias en tiempos records- indicó.

-¡Woa!- se asombraron Jack, Kokoromon y Sky.

-Mira tú, que bonito…- sonrió con ironía Samanta, extrañando a Kiichi.

-Este… ¿No creen que podrían viajar por esta vez lento…?- pidió Taiki, sonriendo y juntando las manos.

-¡¿L-LENTO?!- los quedaron mirando Kiichi y Locomon.

-Ya sabes… Un poquito más de 11 horas…- sugirió Samanta, aún con la sonrisa irónica.

-¿P-Por qué debería viajar lento…?- los quedó mirando Locomon, dolido

-Debemos evitar ser descubiertos por el enemigo. 80 kilómetros por hora ya es una gran velocidad que puede ser notada en un radar con la tecnología del Proyecto- les explicó Slayerdramon- Debemos ser precisos, no rápidos-

-S-Sí, eso, eso- asintió Shoutmon, tosiendo un poco, incómodo, ya que casi perdió el hilo de la conversación por los números que habían dicho anteriormente.

-Pero debemos rescatar a nuestros amigos… A Yuu… A tu madre- le dijo Kiichi a Taiki, preocupado.

-Y lo haremos- le aseguró Taiki, sonriendo y colocando la mano en el hombro del joven- Pero debemos hacer las cosas bien. No podemos llamar la atención, tanto de los radares del enemigo, como de los militares- indicó.

-¡¿M-Militares?!- se asustó Kiichi.

-Viajaremos por el mundo humano para evitar a los Kopierer- le dijo Samanta, colocando las manos en sus bolsillos- Con la situación en el Tokio del mundo real, no me extrañaría que hubieran varios aviones sobrevolando el lugar, y los militares y el mundo atentos a todo ese hielo- señaló- ¿Tú que crees, Jack?- miró a su hermano mayor.

-D-Disfrutas restregármelo en la cara, ¿verdad?- se lamentó Jack.

-Hablas como si no me conocieras- le indicó la niña, mientras Valkyrimon volvía a soltar una risa dentro del xros loader gamma plateado, ofendiendo a la liebre.

-¿Podrán hacerlo? ¿Kiichi? ¿Locomon?- los miró Taiki, serio y preocupado.

-… Si reduzco mi velocidad, podría hacer que el viaje dure 12 a 13 horas- señaló el digimon locomotora- ¿Crees que Tagiru-kun y los demás niños podrán aguantar un viaje tan largo?- le preguntó.

-Sí, y la verdad, tendrán que hacerlo. Si llegamos justo el día del Eclipse, sin ser detectados por el enemigo, tendremos el factor sorpresa, tanto para enfrentarnos a Salamandra en la base, como a Mephismon en la isla- aseguró el joven, serio.

-¿Podrás, Locomon?- Kiichi miró preocupado a su compañero.

-… Es un desafío, Kiichi. No hay nada que emocione más a un digimon que un desafío- aseguró Locomon, emanando un poco de vapor para mostrar su entusiasmo, alegrando a su amigo- Aún así, tendré que pedirles que lleven su propia comida. No cuento con el alimento necesario para tantas horas de viaje-

-Sí, ya tenemos eso cubierto. Gracias- sonrió Taiki, contento.

-Será mi gran desafío como conductor de trenes- sonrió contento Kiichi.

-… ¿Por qué te das crédito?- lo quedó mirando Samanta, haciéndole parpadear- Va a ser Locomon quien hará todo el trabajo, no tú. Por eso no aguanto a los cazadores. Se atribuyen los logros de sus digimon- bufó, dejando sumamente dolido a su compañero de clase.

-Es lo contrario, Jefa- sonrió Locomon, tomando su atención- Gracias a las instrucciones de Kiichi, he podido viajar por el mundo humano sin equivocarme de dirección. Es gracias a él que podremos llegar a nuestro objetivo- aseguró, alegrando a su amigo.

-… Ajá- bufó Samanta, sin creerle mucho, haciendo sonreír a Kokoromon.

-¡¿AH?!- escucharon a Tagiru, por lo que miraron.

El joven acababa de apuntar dramáticamente al grupo de cazadores que había llegado a la zona.

Era el grupo de Lynxmon con sus cazadores, junto a más jóvenes y digimon.

-¡¿Qué hacen aquí?! ¡¿Vienen a culpar a Jäger por lo de Mephismon o porque son feos?!- exigió saber Tagiru, acercándose mientras se arremangaba- ¡Vamos! ¡No es necesaria Sam! ¡Yo mismo les daré una buena…!- aseguró alzando los puños, hasta que Jack le agarró de la chaqueta, deteniendo su intento de estampida.

-R-Respira hondo, chico googles. Tal parece que no vienen en pie de guerra- le indicó Jack, paciente, mientras Tagiru no dejaba de sacudirse, indignado.

-¿Pasó algo?- Taiki y Shoutmon se acercaron al grupo, confundidos.

-B-Bueno…- murmuró gruñendo Lynxmon, incómodo, intercambiando mirada con Guardromon, Sukamon, Panjyamon y Tyrannomon.

-¿Qué querrán ahora?- se molestó Rapidmon en el xros loader de la fastidiada Samanta, mientras Kokoromon se ocultaba detrás de la niña, nerviosa por la presencia de tantos digimon.

-Ellos son los digimon que molestaron a Jäger antes, ¿verdad?- preguntó Pegasusmon, a lo que Sky asintió, nerviosa.

-¡Sí! ¡Fueron una molestia!- pataleó Ranamon- Ayer la Jefa los apaleó, ¿acaso quieren una revancha?- sugirió, molesta, con los tres Piximon y tres DemiDevimon apoyándola.

-Controlen esa sed de sangre- Samanta le dio un toque a la pantalla del xros loader.

-… L-La verdad…- la compañera de Lynxmon dio un paso al frente, sosteniendo con cuidado un casco negro, tomando la atención de Taiki.

-¿N-No es tu casco, Samanta?- el joven miró a la niña, quien se había acercado, desconfiada.

-La Jefa me lo dio durante el ataque de ese digimon negro… Así el veneno no me afectó en gravedad- explicó la compañera del felino, nerviosa- No había tenido tiempo para devolverlo, y, bueno…- se lo tendió a Samanta- ¡G-Gracias por salvarnos!- agradeció, apenada.

-¡G-Gracias!- agradecieron los demás cazadores.

-¿Acaso serán todos los cazadores que estuvieron ayer peleando contra Omegamon Zwart?- comprendió Shoutmon.

-¡Y le agradecen a Samy!- sonrió contenta Kokoromon, mirando a Slayerdramon, el cual sonrió levemente.

-¡Al fin Jäger recibe gratitud!- Sky juntó sus manos con la digimon naranja, tan contenta como ella.

-¡Jajajaj! ¡Genial!- sonrió Tagiru, aun sujetado por el sonriente Jack, quien también se alegró.

Taiki sonrió, contento ante el buen cambio.

-¿No es genial, Samanta…?- miró a la niña…

… Para ver la expresión de fastidio en la Jefa, lo cual hizo parpadear a Taiki y a los demás.

-… ¿Samy…?- parpadearon sus hermanos, sonriendo nerviosos.

-¡¿P-Por qué pones esa cara?!- se molestó Lynxmon.

-¡N-Nuestros compañeros están siendo honestos!- aseguró Panjyamon, ofendido.

-… "¿Gracias por salvarnos?"- repitió Samanta, fastidiada e incómoda, tomando el casco- Aunque mi memoria está borrosa por haber sido empalada por Mephismon, creo recordar que en realidad todos ustedes fueron un fastidio, y aunque les ordené alejarse, no lo hicieron- indicó, incomodando a los jóvenes.

-¡S-Sabemos que no querías confiar en nosotros…!- admitió un cazador, apenado e incómodo.

-¡Pero pudimos ayudarte…! ¡Y nos salvaste, ¿no?!- señaló otro, ofendido y apenado.

-¡Además, gracias al poder de tu compañera sanaste a todos los heridos!- indicó una niña, admirada- ¡Nos salvaste!- sonrió.

"… La harán enojar…" sonrieron asustados Tagiru, Taiki, Jack, Sky y Kokoromon.

-… ¿Qué diablos…?- Samanta volvió a poner su expresión de fastidio, incomodando a los cazadores- Ah, ya veo… Creen que soy una buena samaritana como el pacifista este- señaló con el pulgar a Taiki, quien parpadeó en blanco- Primer punto: fue Kokoromon quien decidió ocupar lo que le quedaba de energía para sanar a todos. Si por mi hubiera sido habría hecho que ella descansara- indicó, sobresaltando a los jóvenes.

-¡S-Samyyyy!- gimoteó Kokoromon, apenada por su lengua afilada.

-Segundo punto: si realmente creen que agradecerme algo que no hice hará que perdone u olvide el mal trato que le dieron a Jäger cuando yo no estaba, están malditamente equivocados- continuó Samanta.

-¡C-Cuida tu lenguaje!- le pidió Slayerdramon, mientras los compañeros de clase de la niña parpadeaban, aun no acostumbrados a la verdadera actitud de ella.

-Tercer punto: no soy alguien que hace algo sin obtener otra cosa a cambio- aseguró la Jefa- Recuerdo que tu michi se asustó bastante cuando fuiste afectada por el veneno- le señaló a la compañera de Lynxmon, ofendiendo al digimon por el apodo- Dime… ¿Sufres asma?- sugirió.

-¡¿E-Eh?! ¡¿C-Cómo supiste?!- se sorprendió la niña.

-Cuando te entregué el casco, mejoraste de inmediato. Esta cosa limpió tus vías respiratorias, así que fue natural que presentaras una gran mejoría- indicó Samanta, dándole unos toques al casco.

-¿S-Solo con eso…?- se sorprendió Taiki.

-Bueno, en ese momento era mi teoría, pero con esto puedo asegurar que es cierto- Samanta le mostró el inhalador celeste en su mano, sobresaltándolo.

-¡¿E-EH?! ¡¿M-Mi inhalador?!- la compañera del atónito Lynxmon se tocó los bolsillos- ¡¿C-Cuándo?! ¡¿C-Cómo…?!- miró sin habla a la Jefa.

-¡Ay, Sam!- Sky y Kokoromon se taparon el rostro, mientras Jack se daba una palmada y Tagiru quedaba asombrado.

-¡Deja de hacer eso!- Slayerdramon le dio un coscorrón a Samanta, sobresaltando a los cazadores.

-S-Sí, sí…- la niña le lanzó el inhalador a la confundida cazadora, la cual lo atajó sin problemas- Así que en teoría, tú fuiste la única a la que salvé- le señaló a la cazadora, quien asintió torpemente-… ¿Tú qué opinas, michi?- miró a Lynxmon, sobresaltándolo.

-… Sí, que lo hiciste- le dijo el digimon felino, incómodo.

-… ¿En serio? ¿Eso es todo lo que me dirás por haber salvado a TU compañera?- Samanta se agachó frente a Lynxmon, sonriendo sarcásticamente, dándole mala espina al digimon- Por su enfermedad, ella realmente pudo haber muerto por ese veneno, pero yo la salvé… ¿Cómo se dice, gatito?- le preguntó, sonriendo divertida.

-¡G-GH!- la miró más incómodo y nervioso Lynxmon.

-… Ah…- parpadeó Taiki, en blanco-… S-Samanta… ¿Acaso…?- tragó saliva-… ¿Acaso salvaste a la compañera de Lynxmon…?-sonrió, muy nervioso.

-¿Para lograr que él se trague su orgullo y te agradezca personalmente?- comprendió Slayerdramon, paciente.

-… No hay nada más satisfactorio que un matón tenga que agradecerle de corazón a alguien que le cae mal- sonrió gustosa Samanta.

Eso dejó en shock a los jóvenes y digimon presentes.

-¡ESO ES FEO!- la quedaron mirando sus hermanos, ofendidos ante la maldad de la niña.

-¡No te rías!- le pidió Jack a Tagiru, el cual se abrazaba el estómago, sin dejar de reír.

-¡G-Gaiomon!- se avergonzó Sky, tomando su xros loader, ya que el samurái se escuchaba claramente riéndose, divertido y gozando lo que había hecho la Jefa.

-T-Te equivocas… si piensas que esto era sospechable…- aseguró en blanco Damemon, mientras Gumdramon no podía evitar sonreír por la expresión de sorpresa de Lynxmon.

-¿E-Ella realmente no puede hacer algo bueno por otros sin tener malas intenciones…?- gruñó Shoutmon, mientras Slayerdramon se tapaba el rostro con una mano, tratando de ser paciente.

-En realidad, Rey. Creo que es porque Samanta aún no perdona los malos tratos que sufrimos- le aseguró D'arcmon en el xros loader gamma plateado, a lo que el resto de Jäger asintió, de acuerdo.

A excepción de Valkyrimon. El digimon emanaba estrellitas, admirado por la tenacidad de la Jefa, incomodando a los Piximon y a los DemiDevimon a su lado.

-¿M-Me salvó para esto…?- parpadeó atónita la cazadora, mientras Lynxmon estaba sin habla, sudando a mares.

-¿Y bien, bola de pelos?- le sonrió Samanta al digimon felino, sobresaltándolo- No tengo todo el día, así que empieza a maullar- le ordenó.

-¡G-GH…!- la miró indignado y avergonzado Lynxmon, pero tragó saliva, intentando luchar con la vergüenza-… G-Gracias…- murmuró lentamente.

-¿Por qué? ¿Por limpiarte la caja de arena?- alzó una ceja Samanta, haciendo que Tagiru se tirara al piso, abrazándose el estómago de la risa.

-¡G-GHHHHH!- se avergonzó más Lynxmon, con las orejas gachas- ¡Gracias por haber salvado a mi compañera!- le gritó, avergonzado.

-… Ay, solo gracias. ¿No hay nada más que me tengas que decir? ¿A mi? ¿A la salvadora de tu querida compañera?- sonrió más irónica Samanta, disfrutando la expresión de vergüenza y rabia del felino.

-¡¿Desde cuándo eres tan mala?!- le preguntaron avergonzados sus hermanos mayores.

-…. G-Gh…- Lynxmon miró molesto y avergonzado a Samanta, pero después miró de reojo a su apenada compañera, y se dio fuerzas- Y… Y lamento mucho haber tratado mal… a tus compañeros…- se disculpó, avergonzado.

Samanta lo quedó mirando un buen rato… y sonrió, sumamente feliz.

-Un gusto hacer tratos contigo, Silvestre- sonrió irónica Samanta, levantándose y alejándose.

-¡GH!- Lynxmon se tapó el rostro con las patas, sumamente avergonzado, a lo que su compañera le dio unas palmaditas, sonriendo apenada.

-¡¿Por qué… eres… así…?!- le preguntó Jack cuando Samanta se acercó.

-… El tipo ese tuvo que agradecerme y disculparse con Jäger. Para ser un día antes del fin del mundo, creo que vamos bien- le dijo la Jefa, colocándose el casco- ¿O me vas a negar que se sintió bien una buena disculpa?- le sugirió a su hermano, cruzándose de brazos.

Jack abrió la boca, dispuesto a regañarla, pero comenzó a hacer unas muecas, bajando las orejas, incómodo.

-¡E-Eso fue tan genial, Samanta…!- le aseguró Tagiru a la Jefa, tomando su atención- ¡Se tuvo que tragar su orgullo y disculpar…! ¡Eso fue genial!- sentenció, tratando de levantarse y dejar de reír.

La Jefa lo quedó mirando, algo confundida de que él actuara normalmente tras saber su verdadero plan…

… ¿Qué estaba planeando Tagiru?

-Pero debes comenzar a portarte bien- le pidió Kokoromon, tomando su atención, mientras Sky sacudía con fiereza su xros loader, intentando aplacar la risa de Gaiomon, el cual aún reía, disfrutando lo ocurrido.

-Háblale al zapato- y Samanta colocó su pie en el rostro de su hermana, haciéndole sacudir los brazos.

-¡Que la dejes de tratar así!- Shoutmon fue con ellos, indignado, a lo que Taiki sonrió, cansado.

-Ella es como un adulto arisco- admitió uno de los cazadores, tomando la atención de Taiki.

-Sí, pero lo hizo para que Jäger obtuviera una disculpa por todo lo que pasaron- le señaló el General, tomando su atención y de los demás cazadores-… La verdad, creo que yo habría hecho algo parecido si hubieran tratado así al Xros Heart- admitió, sonriendo inocente, sobresaltando a los cazadores y digimon.

-… Realmente lamentamos habernos portado mal…- le dijeron los cazadores y digimon, apenados.

-Sí, mientras hayan aprendido la lección- asintió sonriendo Taiki.

"… Taiki realmente estaba muy enojado por los malos tratos a Jäger…" pensaron al mismo tiempo los digimon en el xros loader gamma del joven, sudando un poco, notando la ira contenida en la inocente sonrisa del General.


Al rato…

Ya era casi la hora de partir, y los jóvenes que iban a viajar se habían reunido para una última revisión.

-¿R-Realmente viajaremos dentro de un digimon?- Ryan miró incómodo a Locomon, al lado de Smith y Raquel.

-No totalmente dentro mío, pasajero. Cuento con cuatro vagones, revistas para leer, y en caso necesario, unos baños- sonrió la locomotora.

-Dime que tienes un sector para fumadores y te haré el padrino de mi hijo- sonrió Smith, a lo que Raquel le pisó el pie con su rifle, haciéndole chillar.

-Ah, por cierto…- Locomon miró a Ren, quien se había acercado junto a Ryouma, Airu y Kuro- Le tendré que pedir que lleve su propio arenero. No cuento con servicio para animales- se disculpó sonriendo.

-¡¿ARENERO?!- lo quedaron mirando Ren y Kuro, avergonzados y ofendidos.

-¡YO NO VOY AL BAÑO!- el felino sacó su ametralladora, dispuesto a abalanzarse a la locomotora si Ren no lo agarra a tiempo, comenzado un forcejeo.

Ryouma sonrió paciente, mientras Airu bufaba, fastidiada, hasta ver a Kokoromon hablando con Shoutmon y los demás.

-¡KYA~! ¡Lo único bueno de este viaje es que estaré mucho tiempo con ustedes, ternuritas~!- y agarró en un abrazo a Kokoromon, Cutemon, Gumdramon y Bearmon.

Shoutmon hizo una mueca, incómodo y celoso, mientras Wizardmon sonreía incómodo por el abrazo de Airu a los pobres y tiernos digimon.

-¡Listos!- Zenjirou y Akari dejaron en el piso sus mochilas rellenas, haciendo parpadear a Taiki y a Kyosuke.

-¿Q-Qué fue lo que pusieron ahí?- parpadeó desconfiado Dorulumon, mientras Samanta a lo lejos intentaba aguantar a Dante en su cintura, al que Sistermon Noir trataba de despegar dando tirones frente a los Guardianes, haciendo suspirar a Sky.

-¡Vamos al extranjero!- sonrió emocionado Zenjirou.

-¡A una isla!- indicó igual de emocionada Akari- ¡Nene nos habló de que la Isla Jeju tiene balnearios! ¡Definitivamente debemos ir ahí después de salvar el mundo!- aseguró.

Taiki miró incómodo a Nene, quien, al lado de Kiriha, sonrió juntando las manos, disculpándose en silencio por soltar la lengua.

El rubio llevaba el brazo en cabestrillo, ya que la herida no podía cerrarse completamente a causa de los datos oscuros de Mephismon. Tenía su chaqueta verde olivo sobre sus hombros, para mayor comodidad.

-¡Balnearios~! ¡Balnearios~!- juntaron las manos Zenjirou y Akari, totalmente emocionados.

-No es un viaje de placer…- suspiró Kyosuke, a lo que Ballistamon le dio unas palmaditas.

-¡Claro que lo es! ¡Iremos a balnearios!- sonrió Hideaki, dejando también su enorme mochila, haciendo sonreír incómodas a Mizuki y Kaoru.

-¡Sip!- asintió la pequeña Ai, emocionada.

-¿Por qué piensan eso…?- suspiró Miho, mientras Kiichi y Shouta sonreían incómodos.

-No es un viaje de placer- los calló Kiriha, fastidiado.

-¡¿EH?!- lo miraron los jóvenes, dolidos.

-¡¿EH?!- escucharon Taiki, Nene y Kiriha, quienes miraron al Relojero llegar…

… El anciano ahora tenía un sombrero de paja, una polera celeste con estampado de flores rojas, un short de playa y sandalias.

-¡¿N-No vamos a veranear después del combate?!- preguntó el Relojero, dolido, mientras MidoriGumon se daba otra palmada en la cara.

Taiki lo quedó mirando, sonriendo sumamente confundido…

El relojero… Bagramon… Con traje de turista…

… Esa iba a ser una imagen que no podía sacar de su cabeza aunque quisiera…

-No. Cámbiate, ahora-le ordenó Kiriha, cabreado, deprimiendo al anciano- Y ustedes, solo lleven lo necesario. La demás basura tírenla- miró a Akari, Zenjirou e Hideaki, shockeandolos.

-… Bhuaaaaaaa- lloriquearon los tres, comenzando a vaciar sus mochilas.

-Sé paciente, Kiriha-kun- le pidió Nene, sonriendo apenada.

-¡D-Danteeee!- Sistermon Noir continuó dando tirones al rubio, el cual negó varias veces, tiernamente indignado.

-Eso, sigue tirando. Ya veo que me partirán a la mitad, pero eso no es importante. Sigue tirando como si no hubiera un mañana- le dijo Samanta, tratando de ser paciente, haciendo sonreír apenada a Sky.

-Dante, tienes que entender. Somos Guardianes del Mar Digital. Ya interferimos bastante en el mundo humano- le indicó Gankoomon, cruzándose de brazos.

-Además, debemos vigilar a estos…visitantes- Ciel miró a Momoka, la cual, sentada en una banca a lo lejos con sus dos compañeros cerca, levantó la mano para saludar, sin dejar la sonrisa.

Dante infló las mejillas y negó varias veces.

-¡QUE SUELTES!- ordenó Noir, tirando con más fuerza…

… La digimon monja terminó en el piso, con un fuerte coscorrón en la cabeza, dado por una adolorida y fastidiada Samanta.

-¿Acaso intentabas quebrarme la columna, monjita?- le preguntó fastidiada la Jefa, tronando sus nudillos.

-Vamos, Dante-kun- le pidió Blanc, pero el niño negó.

-¡Tenemos nuestro deber, Dante!- le indicó Hackmon.

Dante levantó la cabeza, mostrando sus ojitos con lágrimas y el labio temblando…

Los Guardianes sintieron como una flecha de culpa les daba en el corazón por la miradita del rubio.

-N-No… Debemos ser fuertes…- trató de resistir Gankoomon- D-Dante, es peligroso ir allá… Si ese mono descubre quién eres, peligrarás, y no podremos acompañarte para protegerte- le indicó, mientras Blanc se tapaba el rostro, gimoteando por la mirada de tristeza del niño.

-...- Dante los miró con más penita, dejando quietos a los digimon-… ¿Por favor…?- imploró, gimoteando un poco.

… Eso fue suficiente para que Gankoomon se tirara al piso, al igual que las Sistermon y Hackmon, derrotados.

-... Sigo diciendo… De entre mis hermanos… soy la más normal…- parpadeó Samanta, mientras Sky estaba atónita al ver que el ataque de dulzura de Dante era tan poderoso.

-E… Está… bien…- levantó apenas el brazo Gankoomon, mientras Dante continuaba con su carita de pena-… N-No podremos a-acompañarte… Debemos vigilar a los visitantes… L-Lleva a Hackmon contigo… P-Pero solo… protéjanse… N-No vayan a pelear… T-Tómenlo como una pequeña prueba para v-ver que tanto han… avanzado… en los… e-entrenamientos…- les dijo, tratando de aguantar.

-¡Yupi~!- sonrió contento Dante, abrazando con más cariño a la fastidiada Samanta.

-M-Mas te vale… hacer bien tu trabajo…- le ordenó Sistermon Ciel a Hackmon, tirándole una mejilla al dragón blanco.

-¡D-Daré… todo de mi… para cuidar… a Dante!- gimoteó el pequeño digimon, aun afectado por el ataque de ternura y pena del niño.

La Jefa bufó, pero tomó su atención Tagiru a lo lejos, quien, con Jack, escuchaba todas las instrucciones que los padres del niño le daban a la liebre.

-… Y por favor vigila que no se ponga a hablar solo frente al espejo de un baño del tren digimon- le pidió la madre a Jack, el cual asintió, sonriendo incómodo al ver a Tagiru tan rojo de vergüenza.

-¡M-Mamá!- se molestó Tagiru.

-¡¿Ah?! ¡¿Tienes algo que decir?!- exigió saber su madre, asustándolo- ¡Deberías agradecer que te demos permiso para ir a un lugar tan peligroso!- le indicó, tirándole la oreja.

-Pero estamos tranquilos, ya que irás con Jack-kun, y tus compañeros digimon- sonrió el padre, haciendo parpadear a Jack- Te encargamos a nuestro hijo- se inclinó, al igual que su esposa, quien agarró de la nuca a Tagiru para que también se inclinara.

-¡G-GHA! ¡N-No hagan eso!- les pidió apenado Jack- ¡P-Prometo cuidar y vigilar a Tagiru!- aseguró, con las orejas gachas.

-Gracias, Jack-kun- sonrió el padre, incorporándose al igual que su familia.

-Antes de que me olvide- la madre le entregó a Jack dos enormes bolsos, haciéndole parpadear- Estoy segura que mi tonto hijo solo metió bocadillos en su mochila, así que te encargo vigilar que coma la comida que preparé junto a varios padres-

-¡M-Mamá!- se avergonzó Tagiru, pero calló por la mirada de su madre.

-¿E-Eh?- parpadeó Jack, mirando todas las cajas de comida casera dentro de los bolsos- ¿L-Los civiles cocinaron esto para nosotros?- parpadeó.

-Por supuesto- la mujer señaló con el pulgar al grupo de adultos a lo lejos, quienes sonrieron y saludaron con la mano- Van a salvar a personas importantes para ustedes, después de habernos protegido tanto. Es lo menos que podemos hacer- sonrió.

Jack parpadeó, para después sonreír apenado y agradecido.

-¡Sí, gracias!- sonrió la liebre.

-Jejeje- sonrió la mujer- Y esto…- tomó la mochila que le tendió su marido, y fue hacia Samanta, extrañando a Tagiru y Jack.

-¿Mm?- la Jefa notó a la mujer acercarse, haciendo parpadear a Sky y a Dante.

-¿Crees que no me di cuenta que eres la única que no ha empacado nada?- le preguntó la madre, ofendida.

-… Tengo esto- la niña sacó de su bolsillo una barra de cereal.

-¡Eso no es suficiente para alimentarte, niña!- le dijo enojada la madre, sobresaltándola- ¡Había escuchado que apenas y te cuidas, pero esto es demasiado!- le entregó la mochila en las manos, casi desequilibrando a la Jefa- Hice mi famoso caldo de carne con arroz. Además de unos dulces y ropa abrigadora para el viaje- le indicó, haciendo parpadear a la confundida niña- ¡Más te vale alimentarte bien! ¡Sabré si lo tiras al mar!- le aseguró.

"¿C-Cómo supo…?" miró para otro lado Samanta, incómoda.

-¡Y esto…!- le quitó de una el casco a la Jefa, descolocándola aún más- Los adultos hemos escuchado los rumores, de que tu peleas y todo eso. ¡Pero también escuché que ya no pelearías, así que vas a ir a quitarte ese traje de ninja o lo que sea!- le ordenó.

-…- Samanta la quedó mirando, fastidiada-… ¿Y por qué lo haría?- alzó una ceja, haciendo que Tagiru se agarrara el cabello, aterrado.

-¡Porque yo te lo digo!- le respondió la mujer, incomodándola y fastidiándola, haciéndole pensar que las madres siempre daban esa respuesta a todo- ¡Y confío en los digimon!- aseguró, tomando por sorpresa a la niña- ¡Este traje es para protegerte! ¡¿Cómo le darás confianza a la peluche de tu compañera de que confías en ella, si usas esto para protegerte?!- señaló, apuntando a Kokoromon en brazos de Airu.

La digimon parpadeó, apenada de ser considerada aún un peluche por parte de los humanos.

-La confianza es algo que se demuestra- sentenció de brazos cruzados la madre de Tagiru a la incómoda Samanta.

"… Como sea… Puedo volver a ponerme el traje antes de llegar a Corea…" bufó Samanta, apretando un botón de su traje, haciendo que desapareciera en un brillo negro junto al casco, volviendo todo eso en una esfera negra que guardó en su bolsillo.

La madre de Tagiru frunció el ceño, preocupada al ver las cicatrices y vendajes en los brazos de la niña, al ahora ella mostrar que usaba su polera sin mangas y pantalones negros.

La mujer abrazó a Samanta, dejándola sumamente quieta de la sorpresa.

-Sé una buena niña, ¿bien? Eres la hermanita de Jack-kun después de todo- le sonrió la mujer a la sorprendida pelicafé.

Samanta abrió los ojos, sumamente sorprendida por el gesto…

Era diferente a la calidez que le brindó el abrazo de Kiriha el día anterior, preocupado por ella…

… Era un abrazo… maternal…

… El recuerdo de su madre, sonriéndole, la dejó sumamente quieta… y le dio nauseas.

Entonces, para total sorpresa de la madre de Tagiru, la niña desapareció de sus brazos en un brillo amarillo dejando tras de sí la mochila, reapareciendo cerca de Locomon, sumamente incómoda.

-¡¿E-Eh?! ¡¿C-Cómo…?!- parpadeó atónita la mujer, mirando para todos lados, sin habla.

-Kudou, Kiriha. Que todos suban ya- les dijo Samanta, fastidiada- No tenemos tiempo que perder- bufó, subiendo a Locomon.

-¡¿E-Eh…?!- parpadeó la madre de Tagiru, confundida, mientras Dante caminaba rápidamente a Locomon, sonriendo, seguido por Hackmon.

-Perdónela… No sabe expresarse bien- se disculpó Sky, tomando la mochila- Pero gracias por preocuparse por mi hermanita- le sonrió.

-… S-Sí…- asintió la mujer, aún confundida-… Tagiru me había dicho… que ella necesitaba apoyo…- admitió, extrañando a Sky- ¿Me habré pasado…?- se preocupó.

Tagiru miró preocupado a Samanta subirse a Locomon…

Él le había pedido a su madre que hiciera una mochila para Samanta, asegurándole que la niña era distante y de mal genio por no tener padres. Eso fue suficiente para que su madre se pusiera manos a la obra…

Pero fue demasiado directo para Samanta.

"… No te dejaré morir, Samanta…" apretó un puño Tagiru, serio y nervioso, sin darse cuenta que Taiki lo miraba, serio…


Así, Locomon emprendió vuelo, con los jóvenes despidiéndose por las ventanas de los vagones de las personas y digimon que quedaron en el parque.

-¡Nos vemos!- se despidió Tagiru, asomado al igual que sus amigos, sacudiendo los brazos para despedirse de sus padres, Makoto, Phelesmon, Bakomon y los demás cazadores.

-Ah…- suspiró el Relojero, con sus ropas usuales, sentado en uno de los bancos en el vagón en el que estaban todos, no podía evitar deprimirse, ya que no habría visita a los balnearios después de completar la misión.

Además de él, Samanta, Kiriha, Ryouma, Ren, Airu y los tres miembros de la Organización eran los únicos que no estaban asomados y despidiéndose de otros.

Kuro, por el contrario, estaba pegado con sus garras al respaldor de uno de los bancos, totalmente aterrado de estar en un tren volador.

Taiki miró sonriendo levemente como se alejaban, esperando poder volver y reparar la situación en Tokio

-Gracias por dejarnos acompañarte, Taiki- agradeció Spadamon, dentro de xros loader del joven junto a Lunamon.

-Sí, no se preocupen- sonrió el pelicafé, hasta notar a que Shoutmon se acercó a Kokoromon, preocupado.

-Kokoromon, ten cuidado. Puedes caerte- le dijo el dragón, preocupado al verla tan asomada.

-¡Es que nunca he estado en un tren! ¡Menos en un digimon vehículo!- le aseguró Kokoromon, sin dejar de sacudir sus brazos, haciéndole sonreír al verla tan entusiasmada…

… Hasta que Kokoromon se resbaló, sobresaltando a Shoutmon y a los jóvenes…

-¡TE TENGO!- Sky agarró a tiempo a Kokoromon abrazándola, pero se resbaló con el piso y estuvo a punto de caer si Jack no le agarra la pierna, quedando casi colgado.

-¡K-Kokoromon! ¡Sky-chan!- se alarmaron Akari y Nene.

-¡N-No se sacudaaaaan!- les pidió Jack a sus hermanas, tratando de sostenerlas.

-¡L-LOCOMON, DETENTE! ¡PASAJEROS EN PELIGRO!- le dijo preocupado Kiichi a su compañero, el cual se detuvo, extrañando a los que estaban en el parque.

-¡¿Te ayudamos?!- le preguntó Taiki a Jack, alarmado.

-¡E-Esperen…! ¡Y-Ya casi…!- la liebre intentó hacer fuerza, pero no sabía quién de sus hermanas era más pesada…

Y claro está, definitivamente NO diría eso en voz alta…

-¡GHA!- al distraerse, Jack se resbaló, casi cayendo sin soltar a Sky si Samanta no le agarra sin problemas la pierna, dejando colgados por la ventana a las dos liebres y a la digimon.

-¡Buena atajada, Samanta!- se alivió Tagiru, asomándose como los demás por la ventana para ver a sus amigos.

-¡Kokoromon! ¡¿Estás bien?!- le preguntó Shoutmon, asomado junto a Gumdramon.

-¡S-Sí!- sonrió la digimon abrazada por la aliviada Sky- ¡Samy, gracias…!- miró arriba, sonriéndole a su hermana…

… Pero parpadeó asustada al verla con una ceja alzada…

Los tres hermanos comenzaron a sudar a mares.

-¡E-Espera un poco, Sam…! ¡¿Q-Qué planeas?!- le preguntó alarmado Jack.

Samanta los quedó mirando, y, al ver que estaban sobre el lago del parque, soltó sin problemas a Jack, para sobresalto de todos los presentes.

-¡¿POR QUÉEEEEEEEE?!- y Jack, Sky y Kokoromon cayeron al agua, para perplejidad de los presentes.

-¡K-KOKOROMON!- se alarmó Shoutmon, atónito, mientras Gumdramon, Tagiru y Damemon se agarraban la cabeza, sin habla.

-¡¿P-Por qué…?!- Hideaki miró atónito a Samanta, la cual se sentó en una de las bancas, sacando su barra de cereal.

-¡¿Por qué soltaste a Jack?! ¡Es peligroso!- le reclamó Shoutmon, indignado.

-… No debo esforzar mi cuerpo- sonrió irónica la niña, a lo que Kiriha negó con la cabeza, paciente.

-¡¿POR QUÉ ERES ASÍ?!- se restregó la cabeza el dragón.

-D-Debemos… bajar e ir… por ellos…- sonrió apenado y cansado Taiki.

-S-Sí, entendido…- sonrió Kiichi, apenado.


-Mundo humano- Corea del Sur.

En la sala de reuniones de la base del Proyecto estaban instalados Salamandra, Forward, Deimos, Horfe, Topacio, Izanami, Green y Esmeralda. También estaba Kai, el cual se había unido a la reunión para poder actualizarse con todo lo que se había perdido.

En la mesa estaba el xros loader de Kai, en donde estaba Tactimon; el de la pequeña Misty, donde estaba Blastmon; y el charger de Topacio, donde Lillithmon estaba aburrida, y algo molesta por no poder ver aún su telenovela.

El joven se veía un poco pálido, pero además de eso se encontraba en perfectas condiciones. El nuevo traje que le hizo Topacio, que era parecido al uniforme de la organización, solo que morado, detenía momentáneamente la expansión de las células digitales malignas en su cuerpo, además de aplacar el dolor que estas le producían, por lo que podía respirar sin sentir molestia en sus pulmones.

-¿Estás seguro que no quieres seguir descansando, Mercurio-kun?- le preguntó Horfe al rubio, preocupado aún por su estado de salud.

-Estoy bien. Quería salir de la enfermería. No me gusta ese olor a medicina que tiene- bufó Kai, incómodo por la preocupación del adulto.

Ahora entendía mejor al peliazul. Horfe, al ser padre, debía tener ese instinto paternal que le hacía preocuparse tanto por él…

… Internamente eso alegraba a Kai, pero aquello le daba tanta vergüenza que prefería bufar, haciéndose el ofendido, a lo que Horfe sonrió levemente, sin molestarse.

-Antes que nada, creo que todos te debemos un gran agradecimiento, Mercurio- le dijo Salamandra al rubio, extrañándolo- Aún se me hace tan extraño que la Jefa pidiera una alianza de forma tan indirecta, y que el Xros Heart la siguiera… Me sorprende aún más, que tú te dieras cuenta de sus intenciones y movilizaras rápidamente a Tactimon contra Ogudomon- le señaló.

-¿C-Cómo supiste…?- frunció el ceño Kai, confundido.

-Mph- bufó Forward.

-¡¿AH?! ¡¿Tú le dijiste…?!- lo quedó mirando el rubio, atónito.

-¡No creas que es para felicitarte! Solo rellené el informe con la verdad- le aseguró el pelinegro, molesto- Aún la idea de que hubo una alianza con Jäger… Arg, siento que vomitaré el desayuno- bufó.

-Recuerda que puedes usar un basurero para eso- sonrió Topacio, fastidiando al soldado.

-… ¿Cómo está tu compañero?- se atrevió Kai a preguntarle a Salamandra.

-Oh, sus heridas sanaron- Salamandra sacó su xros loader azul grisáceo- Pero lamentablemente el daño en su vista fue demasiado grave. Lo bueno que gracias a Deimos, V-mon ahora tiene unos lentes que le permiten a sus ojos ciegos ver las siluetas usando la data que circula en el ambiente-

-¡Un gran invento!- sonrió Deimos, orgulloso de sí mismo.

-Lamentablemente, será inútil para ver cosas o seres que no emanen data, como los mestizos y los monstruos cibernéticos- sonrió Izanami.

-Estoy en desacuerdo- le aseguró Topacio, a lo que la rubia la miró con una ceja alzada- Una vez que un ser interactúa en el ambiente del Digiquartz o del Mundo Digital, su cuerpo debe digitalizarse en la medida suficiente para que pueda permanecer sin problemas en el terreno- señaló, seria.

-… Sí, sí- la ignoró Izanami- Lo que atrae más mi curiosidad es tu extraño estado, Mercurio-kun- le sonrió a Kai, dándole mala espina- Topacio no me ha dejado ver los informes, pero todo indica que es una enfermedad causada por datos, ¿me equivoco?-

-¡Por favor, compártenos todos los detalles!- pidió Deimos, sonriendo con emoción, acercándose al joven, incomodándolo bastante.

"¡Ya veo porque a Topacio y a Horfe le caen tan mal estos tipos!" Kai miró para otro lado, deseando mandarlos a volar con SkullGreymon.

Dentro del xros loader de niño, Tactimon se cruzó de brazos, sin gustarle que intentaran obtener la información de esa forma tan absurda.

-Deimos, Izanami- sonrió Salamandra, tomando la atención de ambos- Ya les he dicho que es Topacio quien se encarga de Mercurio. Ella también es quién vigila su estado- señaló, ya que él había dado la misión a la peliceleste de cuidar al niño, junto con la de encontrar al traidor que provocó el incidente en el que murieron los padres del rubio.

Por eso no confiaba en nadie más que en Topacio y Green respecto a ese tema… Ni siquiera en Deimos… Menos en Izanami.

-… Bueno, si Topacio debe encargarse, significa que no es tan importante el asunto- sonrió Izanami, mirando a la peliceleste.

Topacio sonrió, doblando con su mano su lapicera, haciendo que Kai la mirara asustado.

Esmeralda le entregó otra lapicera a su compañera, mientras Green iba a botar los restos de la otra. Ambos entendían perfectamente a la peliazul, pero tenían que ser pacientes.

-En todo caso, Salamandra- tomó la palabra Horfe, ya que sentía que a la próxima palabra que dijera Izanami, Topacio rompería otra cosa- Vas a hablarnos de lo que pasó ayer, ¿verdad?-

-Sí- asintió el rubio, tomando la atención de los presentes- Ayer nos visitó el tercer y último fragmento de Apocalymon: Mephismon- les contó- Como suponíamos, no tiene conciencia de quién es exactamente, confundiéndose con los datos que quedaron del rey, por lo que cree precisamente que es él-

-Cuando lo vimos pasar, tenía la forma oscura de Omegamon- señaló Tactimon, serio.

-¡Absorbió a mi creación!- sonrió emocionado Deimos, sorprendiendo a los presentes.

-¡¿A Omegamon Zwart?!- murmuró sorprendido Horfe.

-Sí. Parece que usa sus poderes y después guarda los datos de lo que queda de ese pobre digimon en el interior de su programa- sonrió Izanami, sin sentir pena alguna, fastidiando a Kai.

-¿Y qué vino a hacer?- bufó Forward- ¿Es cierto que casi te mata?- miró a Topacio.

-¡¿EH?!- Kai la miró, asustado y sorprendido.

-Parece que el odio del rey hacia mí por experimentar con Kokoromon se quedó con Mephismon… Así que sí, casi recibo una muerte no grata- sonrió Topacio, queriendo ocultar su nerviosismo del asustado Kai.

-Vaya, vaya. Parece que nos perdimos mucho mientras hacíamos rondas- sonrió Lilithmon.

-¿Oh? Eso suena a casi una preocupación de tu parte. Me siento alagada- le señaló Topacio, a lo que el charger comenzó a sacudirse escandalosamente, mientras la digimon ahí replicaba cosas inentendibles, ofendida y avergonzada.

-Pude convencer a Mephismon a que tomara un camino menos directo- continuó Salamandra, algo divertido por las sacudidas del charger- Que, antes de tomar mi fragmento, probara que era el verdadero rey- señaló- Que nos retara a una cacería digital- informó.

-¿Ah? ¿Una cacería?- se fastidió Forward, mientras Kai parpadeaba sorprendido.

-Era eso, o que destruyera todo el edificio- sonrió Salamandra, incomodando al pelinegro- Para probar que es el verdadero rey, derrotará a los digimon que nosotros mandemos a cazarlo en la Isla Jeju en el Digiquartz, junto a los del Xros Heart- explicó- La zona de cacería se abrirá a las 9:00 de la mañana el 31 de Octubre-

-¿Mañana mismo?- se sorprendió Green.

-¿Justo el día del Eclipse?- meditó Topacio.

-¡Pero no a la misma hora!- sonrió Deimos.

-¿A qué hora era el Eclipse?- preguntó Mercurio, aún con la memoria borrosa por haber estado inconsciente un día.

-A las 10:17 de la mañana- sonrió Izanami- Y durará tan solo 5 minutos con 38 segundos-

-¿T-Tan poco…?- el niño frunció el ceño, fastidiado- Supongo que nos dividiremos, ¿no?-

-En efecto- sonrió Salamandra- Un grupo irá a la isla a cazar a Mephismon, y en consecuencia enfrentarse al mismo tiempo al enemigo- señaló- El otro se quedará cuidando la base. Es más que seguro que el Xros Heart y Jäger se dividirán por el corto tiempo que habrá-

-¡Perfecto!- sonrió Forward, emocionado por al fin derrotar a Jäger.

-¿Quiénes irán a cazar a Mephismon?- preguntó Horfe, serio.

-Obviamente, nuestro cazador estrella- Salamandra miró a Kai, el cual se quedó sorprendido- Junto con Topacio y la pequeña Misty-chan- agregó.

Horfe y Esmeralda intercambiaron mirada, preocupados.

-Irán los Tres Generales del Bagra Army, ¿no?- comprendió Topacio- Tendremos que ir con algunos I.A., ya que nada asegura que será fácil- señaló, a lo que su jefe asintió.

-E-Espera, Salamandra- le pidió Kai, confundido- Ya, obvio que yo voy a ir porque fui un cazador y sé de trampas y eso…- admitió-… ¿Pero por qué la hija de Horfe?- señaló al peliazul- Sé que es la compañera de Blastmon, pero es apenas una niña. Solo va a estorbar- aseguró.

-¡Misty-chan no estorbaría!- aseguró Blastmon, ofendido, haciendo sacudir el xros loader en el que estaba, por lo que los Evilmon comenzaron a rodar por el piso digital.

-Mph. Ni siquiera han logrado hacer que la niña esté de acuerdo con nosotros- indicó Forward, fastidiado- ¿Cómo harán que nos ayude enfrentando a un monstruo?- miró a Salamandra, pidiendo una respuesta.

-… Visdom- sonrió Salamandra.

Al decir el nombre del mago, apareció un vórtice blanco a su lado, de cual salió el monstruo cibernético…

Con la pequeña Misty a su lado, sonriendo.

-¡¿M-Misty?!- Horfe y Esmeralda se levantaron al mismo tiempo de la sorpresa.

-¡¿M-Misty-chan?!- se sorprendió Blastmon, dejando de patalear.

-¡¿Q-Qué hace ella contigo?!- le preguntó molesto Horfe al mono, mientras Esmeralda se acercaba a su hija- ¡Aún no olvido lo que una de tus copias le hizo a mi hijo!- le señaló, indignado.

-Misty, ¿qué haces con él?- le preguntó Esmeralda, agachándose junto a la pequeña- Pensé haberte dejado durmiendo anoche en la habitación- le señaló, preocupada y confundida.

-Horfe, Esmeralda, mantengan la calma- sonrió Salamandra, tomando la atención de ambos padres- Esta decisión no fue fácil de hacer, pero después del testimonio de Red y algunos soldados, decidí optar por esto, como medida de prevención- les aseguró.

-… ¿Testimonio…?- frunció el ceño Horfe, confundido y serio.

-… Sí- sonrió Izanami, tomando la atención de los presentes, especialmente de los padres- Red sigue internado, pero según sus propias palabras, él mató al traidor de Blue- informó.

Aquello dejó quieto a Horfe.

-¡¿A-A Blue…?!- murmuró Green, sorprendido y shockeado.

-¿Por qué él haría algo como eso?- frunció el ceño Topacio, enojada.

-… Porque lo vio intentando salvar y ayudar a unos miembros del Xros Heart que habían quedado enterrados en algunos escombros, después del ataque de Shademon a la nave- sonrió la rubia, enojando y confundiendo a la peliceleste.

-¡Eso es algo que Blue haría!- aseguró Kai, golpeando la mesa con ambas palmas, enojado- ¡Aunque sean enemigos, está claro que Blue haría eso porque era un blandengue, pero eso no significa que fuera un traidor!-

-¿Quiénes estaban en los escombros?- frunció el ceño Topacio, molesta.

-Parece que Akashi Tagiru, Gaiomon y la mestiza- contó la rubia, sin dejar la sonrisa.

-¡Entonces con más razón!- aseguró Green, también levantándose- ¡Blue tenía un hermano menor! ¡Estoy seguro que él no iba a ser capaz de dejar a un niño entre los escombros siendo un hermano mayor!- indicó, molesto.

-Los otros soldados dijeron que vieron a Blue intentando huir con la pequeña Misty-chan, y tal parece que Ballistamon los salvó de ellos- Izanami miró sus uñas pintadas, sin dejar la sonrisa.

Aquello sorprendió a los presentes.

Horfe solo frunció el ceño, molesto y serio…

… Estaba enfurecido al saber que Red mató a Blue… pero debía pensar cuidadosamente lo que diría, porque si Red descubrió a Blue siendo un traidor o en una actitud dudosa…

… Podría poner en peligro su credibilidad, junto con arruinar el plan de Samanta y Luke…

-… ¿Lo sabías, Horfe? El hermano menor de Blue era Tsurugi Zenjirou. Un miembro del Xros Heart- le indicó Salamandra a Horfe, sorprendiendo a Kai.

-… Sí, lo sabía- le aseguró el peliazul, sumamente serio- No negaré que Blue debió intentar rescatar a Tagiru-kun de los escombros, al ser un hermano mayor. Debió también hacerlo porque estaba dudando de su lealtad. Nosotros o su hermano- indicó, aguantando la ira que le provocaba la sonrisa de Izanami- El que intentara sacar a mi hija de todo el desastre que ocurría en la nave era algo lógico, y que le ayudara Ballistamon era algo obvio. Debió reconocerlo como el hermano mayor de su compañero- señaló.

-Además, Blue estuvo presente cuando capturamos al Rey por primera vez- indicó Green, molesto e indignado- No ayudó ni hizo nada por el Rey cuando lo torturamos y amenazamos con la vida de Kokoromon para convencerlo de soltar la información que necesitábamos- informó.

-¿Seguro que no mostró dudas?- sonrió Izanami, soplando sus uñas.

-… Era normal. Como dijo Mercurio: Blue era blandengue. No era cruel ni estaba dispuesto a causar daño- le aseguró indignado Green.

-…- meditó Salamandra- Así que tenemos dos situaciones- indicó- O Red mató a Blue al verlo ayudando al enemigo en un momento de compasión… O Blue era un traidor y le dio información a su hermano menor- señaló.

-… Sugieres que más de mis hombres, o yo mismo podemos ser traidores, ¿no?- sugirió Horfe, levantando una ceja.

-No me malentiendas- sonrió Salamandra- Me has demostrado tu lealtad muchas veces, Horfe, pero con el Eclipse a un día de producirse, no se puede pecar de confiado- aseguró- Así que tu sección no va a participar hasta nuevo aviso, y, como persuasión, Visdom tuvo una idea- señaló al mago.

-¿Q-Qué idea…?- frunció el ceño Horfe, desconfiado.

-… Para probar tu lealtad, y la de tu esposa, he decidido hacer lo único posible para que Tobari Misty pueda trabajar de forma coordinada con Blastmon- le aseguró el mago con su voz grave, señalando a la pequeña frente a la preocupada Esmeralda-… Borré parte de sus memorias- informó.

… Aquello dejó helados a los padres, sorprendiendo a Forward, Topacio, Green y Kai…

Deimos, e Izanami especialmente, no parecían sorprendidos en lo absoluto…

… El xros loader azul oscuro en la mesa se quedó sumamente quieto…

-… ¿Q-Qué…? ¡¿Qué le hiciste a mi hija?!- Horfe apuntó a Visdom con su pistola, enfurecido.

-¡Tranquilo, tranquilo, Horfe!- sonrió Salamandra, levantando las manos- Será algo temporal. Para que así Misty-chan sea nuestra aliada-

-¡M-Misty…!- Esmeralda miró asustada y angustiada a su niña, la cual parpadeó, sonriendo- ¡¿S-Sabes quién soy…?!-

-¡Sip!- sonrió la peliazul- Eres mi mamá. ¡La mamá más linda!- la abrazó- ¿Por qué papá está enojado?- miró curiosa a su padre, el cual frunció el ceño, confundido y enojado.

-.. ¿Qué hiciste que la niña olvidara?- Topacio miró a Visdom.

-Todo lo que la hacía no confiar en nosotros- aseguró el mago, serio- Su encuentro con el digimon Damemon, lo sucedido tanto en Tokio como en Digimon Land, la existencia de ese ciborg extraño… Y que tiene un hermano mayor- informó.

Aquello horrorizó más a los padres.

-¡N-No es posible…!- negó aterrada Esmeralda- ¡M-Misty…! ¡E-Es imposible que olvidaras a Ren…!- miró a su hija.

-… ¿Quién?- frunció el ceño Misty, sumamente confundida

Enfurecido, Horfe disparó contra Visdom, el cual detuvo la bala con su magia, sin inmutarse.

-¡Ah!- Misty se asustó del disparo, abrazando a su angustiada madre.

-¡T-Tranquilízate, Horfe!- Topacio y Green sujetaron al peliazul.

Kai miró asustado y atónito a Horfe…

Siempre había sido el más tranquilo… Pero su expresión de furia no tenía palabras para describirlas…

Era… la furia de un padre…

El rubio apretó sus puños y miró enojado a Visdom, al cual parecía no importarle la situación.

-E-Esto es una locura…- le dijo Forward a Salamandra.

-¡No hay de qué preocuparse!- aseguró sonriendo Deimos- Visdom nos aseguró que ha borrado la memoria a muchos humanos. Después que todas las sospechas se eliminen, y que termine el Eclipse, le devolverá la memoria a la pequeña. Ese es el trato- indicó, sin dejar la sonrisa.

-¡A-Aún así…! ¡Salamandra, debiste informarnos antes de que harías algo así!- le aseguró Topacio a su jefe, sin dejar de sujetar al enfurecido Horfe con ayuda de Green, ambos temiendo que la ira del militar causara un desastre.

-Te aseguro que es algo momentáneo, y necesario- le aseguró Salamandra.

-¿Necesario? ¡Haz hecho llorar a uno de los míos!- le dijo Topacio, indignada, ya que Esmeralda abrazaba a la confundida Misty, aguantando las lágrimas.

La peliceleste se indignó más al notar que Izanami veía todo con una sonrisa.

-… Sí, admito que debí hablarlo. Pero ya nada aseguraba que la niña iba a trabajar para nosotros siendo leal a su hermano y los demás digimon que conoció antes- aseguró Salamandra, serio, consciente que era algo grave lo que hicieron- Pero prometo que la pequeña recuperara la memoria una vez acabado todo- prometió, serio y honesto…

… Pero, como todos los demás, se quedó quieto cuando una gran silueta salió del xros loader azul, aterrizando estrepitosamente en el piso del salón, haciendo temblar todo el cuarto…

-… ¿Blast-chan…?- Misty levantó la mirada, mirando confundida y curiosa a su amigo, especialmente al verlo… tan enfurecido…

Nunca había visto a su amigo de diamantes con semejante expresión de furia…

Su rostro estaba ensombrecido, y sus ojos rojos brillaban amenazadoramente.

-¡¿Q-Qué diablos…?!- Forward se levantó y retrocedió, al igual que los demás humanos, a excepción de Salamandra, quien miraba serio a la enfurecida criatura de diamantes.

-… Te lo había dicho…- le dijo el furioso digimon a Visdom, el cual frunció el ceño, sorprendido- … Te lo advertí… Que si volvías a hacerle algo a Misty-chan…-apretó sus puños, emanando data peligrosa, la cual resquebrajó levemente el piso y las paredes en el salón.

-¡Blastmon, contrólate!- le ordenó Tactimon en el xros loader café, mientras que Lilithmon, en el charger, estaba sin habla al ver a su compañero tan furioso…

… Ninguno de los Generales recordaba haber visto a su compañero con tanta furia y odio…

-Es algo necesario, por el bien de revivir a Apocalymon- le aseguró Visdom al enfurecido ser, serio pero alerta.

-Cierra la boca… Tú… ¡MALDITO MONO!- rugió con furia el ser digital, lanzando su puño al sorprendido mago…

… El impacto fue tal, que las ventanas del salón se rompieron estrepitosamente, dejando paso al polvo causado por el ataque…


En medio del mar…

Locomon cruzaba el cielo azul sobre las nubes, para así evitar encontrarse con alguna nave humana o sus radares.

El grupo estaba instalado en uno de los vagones del digimon locomotora, aunque Smith había sido echado al último vagón, al insistir en querer fumar un cigarrillo.

-¡Achú!- estornudó Kokoromon.

La digimon estaba arropada en frazadas, sentada en una banca junto a Shoutmon y Taiki.

Jack y Sky estaban sentados en otra, ambos también arropados.

-¿Aún tienes frío?- Shoutmon acomodó más las frazadas de su amiga, preocupado.

-Hacía tiempo que no caía a un lago- admitió la digimon naranja, mientras Tagiru, Hideaki, Zenjirou y Shouta miraban asombrados las nubes bajo ellos asomados levemente por una ventana.

-Temo que se resfríen- admitió Nene, preocupada por sus amigos, mientras Miho le daba un té a Sky que Mizuki hizo con el termo con agua caliente que había empacado.

-Estaremos bien- le aseguró Jack, recibiendo el té que Kaoru le dio- Además, a mí el frío no me molesta- admitió, sonriendo levemente.

-¡Kokoromon-sama! Para que se abrigue- Gumdramon se acercó y le tendió uno de los té.

-Gracias, Gumdramon- sonrió agradecida su amiga, tomando el vaso, pero no pudo evitar estornudar tiernamente.

-Lo bueno que podrás descansar, Kokoromon- le sonrió Taiki, preocupado por ella.

-¿Pero de quién será la culpa de que estén resfriados?- Shoutmon miró fastidiado a Samanta, quien, recostada en unas bancas más lejanas, solo movió la mano, ignorándolo, con Dante sentada a su lado, sonriendo, mientras Hackmon estaba metido en la mochila del niño en el piso, buscando un bocadillo.

Kiriha estaba sentado en la banca paralela a la de su prima, mirando la ventana con Dracomon a su lado, mientras Raquel y Ryan en otra banca, cerca de donde estaba sentado el Relojero, quien aún se deprimía porque no habrían balnearios, fastidiando a MidoriGumon a su lado, pero haciendo sonreír a Clockmon dentro del xros loader negro.

-Aún así, los estornudos de Kokoromon son tan tiernos~- aseguró Airu, sentada en una banca junto a Ryouma, Ren y Kuro.

"E-Eso lo sé…" hizo una mueca Shoutmon, incómodo al pensar lo mismo.

-Será un viaje largo, Shoutmon. Tenemos que ser positivos- le indicó Taiki a su compañero, incomodándolo más- Lo bueno que Kiichi le está dando un tour a la pequeña Ai, y Damemon, Wizardmon y Tailmon están vigilando que Smith no se asome con su humo. Así que tomemos las cosas con calma-

-… Sí- hizo otra mueca el dragón, no muy seguro.

Kokoromon lo miró un rato, y le dio un beso en la mejilla, sonrojándolo.

-¿E-Eh?- el dragón rojo la miró confundido y apenado- ¿P-Por qué fue eso…?-

-Porque te quiero mucho- sonrió Kokoromon, acurrucándose a su lado, sonrojando más a su amigo.

-¡Kya! ¡Son tan tiernos!- sonrió enternecida Akari, asomada a la banca en donde estaban.

-¡No veo la hora en que termine toda esta pesadilla para poder planear la boda!- aseguró Airu, igual de enternecida.

-… No habrá boda- la quedó mirando Samanta, fastidiada.

La rubia la quedó mirando.

-… Perdona, ¿qué acabas de decir?- exigió saber Airu, mientras Ren y Ryouma intercambiaban mirada, incómodos.

-No-habrá-boda- repitió la pelicafé, sentándose fastidiada- No estoy de acuerdo en que Kokoromon se case con ese intento de gobernante- aseguró.

-¡¿I-Intento?!- eso ofendió a Gumdramon.

-Pero, Sam-chan. Shoutmon y Kokoromon se quieren mucho- le aseguró Akari, nerviosa.

-¿Se van a casar a tan solo unos meses de haberse conocido? Eso es sumamente estúpido- le aseguró Samanta, incomodándola- Sin contar que es por esa estúpida ley, ¿verdad?- miró a Shoutmon, el cual entrecerró los ojos, ofendido- MI hermana no es alguien para que cumplas un estúpido deber, ¿entendido, estúpido rey?-

-¡¿AH?!- se indignó Shoutmon.

-Cuernomon, tranquilo- le pidió Kokoromon, cansadita.

"T-Temía que esto pasara…" pensó incómodo Taiki, sonriendo nervioso.

-¡Te equivocas completamente si crees que permitirás que ese par no se case!- le aseguró Airu a Samanta, parándose junto a ella- ¡La proposición fue algo hermoso coordinado por mi!- se indicó, dándose aires- ¡Y definitivamente NO dejaré que eso se pierda porque no quieres que Kokory se case! ¡ELLA SE CASARÁ! ¡Y YO DISEÑARÉ SU TIERNO VESTIDO!- aseguró, indignada.

-… ¿Vestido…?- la quedó mirando Samanta, fastidiada y algo burlona- ¿Vas a hacer que Kokoromon use un accesorio de vestido? Eso es estúpido. Los digimon no deberían usar accesorios que los humanicen tanto- aseguró, masticando su barra de cereal.

-¡Kokoromon se vio hermosa con el vestido que le hizo Betsumon! ¡Cegatona!- Airu, indignada, sacó su celular y mostró la foto de Kokoromon con el vestido plateado que le había hecho el gato.

Samanta parpadeó varias veces.

-.. Bien, definitivo. Kokoromon, te alejas del idiota ese- Samanta se levantó, se acercó a Kokoromon y la tomó del brazo para sentarla en otro lado.

-¡¿AH?!- Shoutmon agarró a Kokoromon del otro brazo- ¡No alejarás a Kokoromon de mi!- le aseguró, indignado.

-¡Tanto Slayerdramon como yo estamos en desacuerdo con ese estúpido matrimonio!- le indicó Samanta- Así que suelta a mi hermana o te lanzo por la ventana-

-… No- le gruñó Shoutmon.

-… Mizuki, ¿trajiste por casualidad un té relajante?- sonrió rendido Taiki a Mizuki, mientras cierto dragón era lanzado por la ventana, para horror de Gumdramon y los demás.

… Iba a ser un viaje largo…


*mariajuliabarbosabello6_ No, la historia de Shoutmon no está inspirada en Naruto, aunque admito que he escrito unos fic de esa franquicia^^'

¿La madre de los hermanos? ¿Nunca la he mencionado? Bueno, creo que podemos dejarlo en misterio, ¿no? ^^'

*NovaStarPrime_ Me alegra que pudieras leer el cap anterior con tranquilidad ^^. Me gustó poder al fin escribir a Momoka en este fic, aunque sus apariciones sean breves. Y sí, fue divertido escribir el lado protector de las hermanas con el pobre Jack X'D

*Moonstruck-Dreamo_ You don't know how happy you make me to know that you like my story so much! I hope you continue to enjoy reading!

*takedigi_ Me alegra que los combates contra Mephismon y Omegamon Zwart te gustaron. A veces es complicado organizar estas escenas, pero lo bueno que con tu revisión puedo escribirlas tranquila, ya que si se me olvida algo me lo mencionas ^^'

Sí, lamentablemente, con todo lo pasado, es normal que Kokoromon le tenga temor y terror a Mephismon, no solo por ser un ser de oscuridad que ella no puede purificar, sino que también por su maldad, y su toxicidad hacia ella.

Sip, Taiki sigue siendo el chico listo de siempre. Y leyendo tu comentario me alegra mucho que te emocionara tanto el cap anterior, pero creo que lo que se llevó la corona para ti fue Momola, ¿verdad x3?

Y sí, creo que con este cap Visdom sigue siendo tu personaje favorito ^^'

*Sebastian_ Veamos, respondiendo tus preguntas

1-Nop, no me basé en Todoroki de boku no hero academia para crear la armadura de Jack. Más que nada, me inspiró un personaje de Bleach.

2-Luminamon (o Shademon) es antigua. Nació después de que se destruyó el templo que sellaba al segundo fragmento de Apocalymon, dividiéndose este en dos, y uno de ellos (Salamandra) la creó. Yo creo que ella debería tener casi 100 años, la misma edad digital que Shoutmon. Pero siendo los digimon longevos, la edad digital no afecta la edad mental, ¿no?

3-¿Herrismon? Sí, lo ubico. Es del último juego de celular que hay de digimon, ¿verdad? No creo que aparezca en el fic ^^'

*FerMrack_ ¡Que bien que también te gustaron los combates del cap anterior! Y sí, me gustó como Gaiomon (de entre todos los digimon) fue el más sensato para detener la discusión entre Vormundmon y DarkKnightmon^^' (¿Gaiomon sensato? Con razón en el fic están cerca del fin del mundo X'D)

¡Me dio risa tu comentario de lo que hubiera hecho Akari si ve a Momoka molestar a Taiki X'D!

Oh, te aseguro que con este cap Izanami te ha caído más mal, ¿verdad?

¿Son tan tiernos Shoutmon y Kokoromon para ti? ¡Imagínate las ideas que take y yo solemos tener de ese par pero que aún no se pueden colocar en el fic! Según él, son demasiado tiernos para que el resto aguante tanta ternura x3


¡Y espero que les haya gustado el cap, queridos lectores x3!

Este cap fue más tranquilo (por así decirlo), pero se ha obtenido bastante información, ¿no?

El plan de Samanta… Hablando con takedigi, sé que el motivo de la Jefa para hacer todo lo que hace es muy oscuro, y al mismo tiempo triste. Pero trato de ser realista con el personaje. Un trauma no es algo fácil de manejar, menos si no se tiene el apoyo necesario.

Lamentablemente, aquel primer mes desde la muerte de sus padres, Samanta no contó con el apoyo de sus hermanos mayores, al estar ellos mismo en mal estado, pero no tanto como la niña.

Ni Luke ni Héctor pudieron tranquilizarla, ya que tenían que lidiar con los comentarios de los abuelos de la pequeña (y no, no eran buenos comentarios) La verdad, no me extrañaría que hubieran logrado dejar a Samanta en un orfanato si Luke no hubiera estado pendiente.

Todo ese estrés emocional, incluyendo el trauma por la muerte de sus padres…

Es algo oscuro, y sé que es un problema real hoy en día, pero creo que no hay que hacer oídos sordos ni mirar a otro lado en casos como este. Y aquí entra Tagiru…

… Él hará todo lo posible para cambiar la mentalidad de Samanta…

Además de esto, tenemos el pasado de Wisemon con Topacio.

Lo que ocurre cuando un digimon, de forma egoísta e inconsciente, crea a su propia enemiga, cuando solo quería buscar información sin pensar en las consecuencias. Claro está que el Wisemon actual ha madurado bastante gracias a Taiki, y por eso ve el gran error en sus acciones, sintiendo arrepentimiento y deseando reparar el daño, si es que es posible…

No vimos a Yuu y a los demás, pero tal vez en el próx cap.

Pero sé que muchos se han enojado más con Visdom por su plan, y lo que le ha hecho a Misty (lo sospecho porque take se enfureció cuando leyó esa parte^^') Ni hablar el daño que le hizo Mephismon a Kiriha. Ese tipo realmente es un ser oscuro y tóxico, ¿no?

¡Y ahora el grupo va a viajar a Corea del Sur…!

… Casi un día viajando en Locomon… con una fastidiada Samanta y una ruidosa Airu…

… No me gustaría estar en el lugar de pobre Taiki X'D

Espero que les haya gustado el cap. Me demoré porque estuve trabajando en vacaciones en el Animatic que les hablé para el fic (que está en mi canal de youtube, para que vayan a verlo x3) y me relajé bastante esos días^^')

… Y para los lectores de Viajes Comerciantes… Sé que no he hecho el dibujo del top 10 que tengo pendiente desde Septiembre de año pasado TvT… Pero no tengo inspiración… y ahora estoy estudiando… Sean pacientes TvT

¡Gracias por leer, y no olviden comentar XD! ¡Y muchas gracias por la paciencia, queridos lectores!

PD: perdonen cualquier error ortográfico ^^'

PD2: ¡agradezco a takedigi- mi beta reader-, el apoyo dado para escribir las situaciones y corregirme en algunas partes ^^!

PD3: ¡cuídense y sean precavidos!

PD4: ¡y no olviden ir a ver el animatic x3!

¡Nos leemos X3!