Me odio a mi misma, se suponia que debia de publicar esto hace como 3 días hahahahahaha, pero la flojera de tener que hacer todo el proceso para subir capitulos a fanfiction me ganó, creo que se deberia mejorar el sistema de publicacion, es incomodo.

Camilaski: No se si has escuchado de un programa de tv llamado "Le digo que si al vestido" o "say yes to the dress", lo pasan en Discovery H&H y cuando tenia television era de las pocas cosas que veia en ella, amaba ese programa y hoy en dia sigo viendolo por youtube! Pero siempre me conmovia hasta las lagrimas cuando habia novias que po razon no podian ir acompañadas por sus madres (principalmente porque habian fallecido) y sinceramente creo que si ha de ser algo triste no tener a quienes amas en un momento que se supone es de los mas importantes en tu vida.

Por cierto, me encanta el hecho de que Elsa salga de lo convencional, la mayoria tiene perros de mascotas, pero siento que Elsa seria como de que "Al carajo las mascotas convencionales, yo quiero una salamandra"

P.D.: No tienes ni idea de lo mucho que grité al ver el corazon de William Joyce en esa publicacion. Fue emocionante saber que tenemos un fan de alto calibre como él!

Cristina: Hay muchas cosas que ignoro de fanfiction hahahahaha y eso que ya llevo unos añotes por aqui. De personajes como Jack, Hipo, Kristoff, Eugene (exceptuando unas ciertas caracteristicas de él) aprendí que no debo de aceptar menos que eso en la vida. Demonios, por que todos los mejores hombres son personajes ficticios :c

Siento que si, algun día tendremos nuestra pelicula jelsa, aunque tal vez ya estemos en silla de ruedas, pero no importa, sere la viejita mas gritona en la sala del cine al ver la pelicula jelsa que tanto he esperado. Jelsa forever!

Mar sant: Me alegro que estes oficialmente dentro de esta hermosa comunidad que es fanfiction, respondiendo a tus preguntas, ya tenia planeado un capitulo sobre la propuesta de Jack, pero en ese entonces entré en depresion y no tenia animos para escribirlo, asi que decidí dejarlo a un lado y enfocarme en lo bueno del asunto, pero el capitulo era respecto a Jack despertando con una resaca y viendo que Elsa ya se habia ido con Hipo, entonces empieza su plan para la propuesta (ayudado por todo el grupo de amigos), pero cuando va a buscar el anillo se da cuenta de que no esta donde lo habia dejado, asi que emprende una larga larga y tortuosa busqueda. Mientras tanto Hipo intenta desesperadamente de distraer a Elsa en lo que se llega la hora de la sorpresa, en un momento Elsa y Astrid se quedan a solas y Elsa le confiesa que ya sabe lo que estan tratando de hacer y que no quiere arruinar la sorpresa, Astrid le dice que a ella le paso lo mismo cuando Hipo se le iba a proponer asi que la entiende y le cubre la espalda. Jack por su parte se rinde y se dirige al lugar de la propuesta sin anillo, ahí se encuentra con Elsa y los demas, los chicos se van dejandolos solos y entonces Jack le da un emotivo discurso sobre lo mucho que la ama y lo perfecto que queria que fuera, pero que lo habia arruinado todo y no la merecia. Elsa al final se arrodillaba y ella le pedia matrimonio. Todo esto estaba basado en la cancion eliminada de Frozen 2 Get this rigth.

No incluiremos a Nokk ni a Gale :c el Kristaana se resuelve... AHORA!

1. Cuando le confesó lo ocurrido con Olaf el día que lo perdió.

2. Cuando le contó lo del beso con el hermano de Honeymaren.

3. Cuando accidentalmente quemó la libreta de dibujos de Jack con bocetos importantes para el libro.

4. Cuando despues de la propuesta de matrimonio llegan al hotel y ella le revela lo del anillo y que lo habia guardado en la maleta.

5. La primera vez que le contó sobre lo de sus padres.

–Oh, Elsa, te ves hermosa– Anna y el resto de las amigas de la rubia se enternecieron al ver a Elsa completamente lista con su vestido de novia puesto.

–Te ves radiante– le dijo Merida.

–Gracias a todas– ella suspiró –Significa mucho para mí que todas estén aquí–

–¿Y cómo te sientes?, ¿nerviosa?– preguntó Astrid quien cargaba en sus brazos a una dulce bebe de nombre Zephyr.

–No, no realmente... quiero decir, me voy a casar con Jack, no tengo nada de qué preocuparme– se sentó con gracia en la silla –Aunque un trago no me vendría nada mal– respondió con voz ronca.

–Yo me encargo de eso– dijo con orgullo –Por algo soy tu dama de honor– se arremangó con las manos la falda del largo vestido azul turquesa y salió de la habitación con la cabeza bien en alto.

Anna caminó por el pasillo hacia donde sabía que estaba la coordinadora de la boda e invitada –Mavis– saludó animada al divisar a la chica de vestido negro estilo gótico.

–¿Sucede algo, Anna?– preguntó sin dejar de escuchar a la persona que le hablaba a través del auricular.

–Elsa, bueno, ella tiene sed– rio nerviosa.

–Espera un momento Nani– le dijo a la ayudante al otro lado de la línea –Creí que habían dejado varias botellas de agua en la habitación–

–Oh, sí, me refiero a algo más fuerte que agua– explicó.

–Entiendo– volvió a abrir la línea del auricular –Nani, por favor envía a un mesero a la habitación de la novia, quiere algo para tomar–

–Gracias– Anna se aclaró la garganta –Por cierto, me gustaría pedirte un favor...–

–Claro, ¿Qué sucede?– se colocó los brazos en la cadera de forma casual.

–Si llegara a ocurrir cualquier percance durante la boda, por favor comunícamelo a mí, no me gustaría que molestaran a Elsa o a Jack para nada hoy, es su día–

Mavis asintió comprendiendo –Claro, aunque si hay algo muy serio deberé comunicárselos, ¿entiendes?–

Anna asintió.

–Bien, ahora debo de ir con Jack, debo de escoltarlo abajo, alguien ira en unos minutos por Elsa, de esta manera no se cruzaran–

–Muy bien– Anna se frotó ansiosa las manos porque el momento se acercaba.

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Las chicas reían mientras tomaban tragos, todas a excepción de Rapunzel, quien recientemente había descubierto que estaba embarazada y estaba guardando la sorpresa de la revelación para esta noche.

Las risas se calmaron, pero no se apagaron del todo, al escuchar como alguien llamaba a la puerta.

–Soy Perla– se asomó una bella chica de cabellera azul –Es hora–

Elsa tomó aire y se puso de pie lista.

–Por cierto, alguien quiere hablar contigo– abrió la puerta por completo revelando a Frederic portando un traje.

–Elsa, sé que no soy tu padre... pero me haría muy feliz que me dejaras entregarte en el altar–

La chica se sintió conmovida hasta las lágrimas, pero no quería arruinar su maquillaje –Por supuesto que si– tomó el brazo que el hombre le ofrecía y juntos caminaron por el pasillo hasta el elevador el cual los dejó en el piso donde estaba aquella pequeña capilla.

Las damas se acomodaron y una a una desfilaron por el pasillo hasta el altar donde los varones se encontraban en sus posiciones a un lado de Jack, era fácil ver que él si estaba visiblemente nervioso por la manera en la que jugueteaba con los dedos de su mano.

"Todo va a salir bien" se repetía el peliblanco en su mente una y otra vez.

Todos sus temores desaparecieron al momento en el que la vio entrar por la puerta. Si pudiera describirla con sola una palabra, seria perfección, su cabello estaba cuidadosamente arreglado, sus uñas recién hechas, su maquillaje estaba impecable, sus ojos brillaban como un par de luceros y podía notar el sube y baja de su pecho con su respiración agitada.

Frederic le entregó su mano como si le hubiera otorgado un tesoro y él la tomó un poco tembloroso, porque tenía miedo de romper aquel encanto. Con cuidado la guio hacia el altar.

–Hoy nos reunimos aquí para celebrar la unión entre Jack Frost y Elsa de Arendelle–

Mientras el que oficiaba la ceremonia hablaba, la joven pareja se miraba profundamente a los ojos sin soltar sus manos, solo se separaron para poder leer sus votos.

–Copo de nieve, todavía puedo recordar cuando apenas teníamos 17 años, éramos solo unos chicos que muy apenas se podían dirigir la palabra y es que siempre nos poníamos tan nerviosos. Por ello agradezco a nuestros amigos, sobre todo a Hipo, quien al comenzar nuestro último año me recordó que las oportunidades son limitadas y me alegró haberle hecho caso, porque eso nos trajo al ahora... 9 años después– leyó el chico con voz fuerte y clara –Hay tantas cosas que quisiera jurarte ahora mismo, pero empezaré con algo sencillo... prometo amarte en la medida de tiempo más corta que puedo pensar, para siempre–

–Querido Jack, no soy una persona muy espiritual, pero conocerte fue lo más cercano a un milagro, pensándolo bien, ¿Cuáles eran las posibilidades de encontrarnos?, creo que las mismas que hay para ser golpeado por un rayo. Al igual que tú, también recuerdo la escuela, ahí fue donde nos enamoramos, no a primera vista porque eso sería muy extraño, en cambio fue algo mucho mejor; te amaba un poco más con cada cosa que aprendía sobre ti y con cada cosa que hacías por mí. Por ello pretendo dedicarme los próximos años a tratar de pagarte con la misma moneda, prometo amarte, cuidarte y respetarte, en la riqueza y la pobreza, en la salud y la enfermedad, en la vida y aun después de ella... para siempre– Elsa arrugó sin querer el pequeño pedazo de papel entre sus dedos al sentir la emoción.

–Dicho esto, y si no hay alguien que sepa de algún impedimento para que no se celebré esta unión, por el poder que me ha otorgado el estado de New York los declaro marido y mujer... puede besar a la novia–

Con un suspiró de anhelo y el pecho inflado de amor Jack se inclinó hacia su esposa para darle su primer beso como recién casados.

Los invitados se pusieron de pie y aplaudieron a la feliz pareja que no quería apartarse ni un segundo de los labios del otro, pero la necesidad de aire los obligaba.

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–La ceremonia estuvo increíble– Hipo abrazó a Jack y a Elsa por la espalda –La verdad creí que se incendiaria algo, pero salió todo bien–

–¿A qué te refieres con incendiarse?– preguntó Elsa con mirada de pánico.

–¡A nada!– Anna empujó a Hipo lejos de la pareja –Es solo una frase, como la de "rómpete una pierna"–

–Okeyyy– Jack arqueó una ceja confundido.

–Chicos, una vez acaben con las fotos iremos a la recepción– informó Mavis pasando frente a ellos.

–Esposa, ¿serias tan amable de acompañarme por un trago?– Jack pasó una mano por la exquisita cintura de la rubia para atraerla a su lado.

–Nada me gustaría más, esposo– los recién casados se alejaron totalmente embriagados por el hecho de que ahora era oficial su unión eterna, dejaron atrás a la pelirroja de cabello recogido y maquillaje sencillo que tenía una mirada de enternecimiento al verlos a ambos caminar tomados de la mano mientras Jack acariciaba el anillo de Elsa.

Anna dejó salir un estruendoso suspiro y se preguntó si alguna vez ella tendría la fortuna de vivir algo así.

–Hey, Anna– Kristoff asomó la cabeza por una de las puertas –Los chicos y yo queríamos decirte que pensábamos hacerle una broma a Jack– el rubio sostuvo en alto de forma orgullosa el liguero que llevaba en su mano izquierda.

–Oh– la chica intentó no soltar una carcajada.

–Pero queríamos ver si Elsa estaba de acuerdo con esto, ¿podrías ayudarnos a distraer a Jack para hablar con ella a solas?–

–Por supuesto–

–Genial, iré a decirles a todos– el rubio alzó un puño en señal de victoria –Por cierto... yo quería decirte que te ves muy hermosa hoy, no es que normalmente no lo seas, pero hoy en especial y más porque hacía mucho tiempo no nos veíamos–

–Gracias– Anna le sonrió –Yo también me alegro de volver a vernos–

–Yo quería...– Kristoff intentaba encontrar las palabras adecuadas –Quería saber si ibas a estar por aquí un tiempo, yo planeo quedarme unos días más después de la boda–

El rostro de la chica se iluminó –Si, yo también me quedaré–

–¿En serio?, eso es genial, tal vez podríamos... salir juntos por ahí–

–¿Cómo una cita?– Anna dio unos pasos acortando la distancia entre ellos.

–Sí, como una cita– suspiró el muchacho esperando no ser rechazado –Si te gusta la idea–

–Me gusta– respondió con sencillez ella.

–¿De verdad?– el muchacho estaba incrédulo, pero muy emocionado –Increíble...–

–Aquí están– Eugene los tomó por sorpresa –Ya va a comenzar, andando–

Los tres se apresuraron a entrar al salón de la recepción que estaba adornado de forma majestuosa con temática de invierno, una escultura de hielo recibía a los invitados y cientos de miles de pétalos blancos cubrían la pista de baile como si de nieve se tratara y la iluminación era de tonos azules.

Anna se sentó en la mesa asignada junto a Rapunzel, Eugene, sus tíos, Kristoff y otros invitados por parte de la familia Corona.

El cantante de la banda que habian contratado se encargó de darle la bienvenida a todo el mundo y a presentar a los novios, la pareja entró y se dirigió con gracia al centro de la pista para su primer baile como marido y mujer con la canción de Thinking out loud.

Conforme la música avanzaba y la pareja se movia al son de esta con movimientos lentos y llenos de gracia ambos se miraron el uno al otro con una mirada que era la pura descripción de devoción.

–¿Alguna vez te he dicho cuanto te amo?– preguntó él.

Elsa fingió una mueca pensativa –Umh, creo que casi todos los días, pero no importa, vuelve a decírmelo–

–Te amo más que nada Elsa de Frost–

–Elsa de Frost, suena perfecto– ella recargó su cabeza en su hombro –Yo también te amo más que nada Jack Frost–