El Decimosexto Cumpleaños de Lily II
'Pero hablemos de alguna otra cosa, ¿vale?' dijo Lily.
'¿Como qué?' preguntó Severus, todavía sintiéndose desanimado por el comentario de Lily sobre Dumbledore.
'Como, ¿quién ganó el partido? No llegué a verlo.'
'Creo que ya sabes la respuesta a eso,' dijo Severus con amargura. 'Nos destrozaron, y Frank llevó a Hufflepuff a la victoria en bandeja de plata.'
'Tengo miedo de preguntar,' dijo Lily, 'pero, ¿cuál es el daño?'
'Trescientos veinte para ellos, contra treinta puntos para nosotros.'
'Parece que Gryffindor todavía tiene oportunidad de ganar después de todo,' dijo Lily alegremente.
'¿Por qué todavía llevas una bufanda Hufflepuff?' señaló Severus.
'Porque quería apoyar a Frank,' dijo ella mientras tiraba de los flecos de la bufanda en torno a su cuello.
'¿Así que escogiste apoyar a Frank en lugar de a tu mejor amigo?' dijo Severus con el ceño fruncido, pero tampoco pudo evitar sonreír.
'Oh, cállate, Sev,' dijo Lily juguetona. 'No es que el quidditch te importe una mierda.'
'Eso es cierto,' dijo Severus. 'Sólo espero que Evan vuelva a estar bien antes del próximo partido contra Ravenclaw. No estoy hecho para todo este asunto del quidditch.'
Lily no pudo evitar reír. 'No, no estás hecho para ello en absoluto, pero de todos modos, yo tampoco.'
Severus le dio un codazo juguetón en las costillas. '¿Todavía estás enfadada conmigo?'
Lily sacudió la cabeza. 'Bueno, quizá un poquito, pero estoy más desilusionada que enfadada, para decirte la verdad.'
'No es por la poción, ¿verdad?' preguntó Severus mientras señalaba la poción de acónito potencialmente estropeada en su caldero. 'Porque lo juro, no fue más que un acci-'
'-No, no es por la poción,' lo cortó Lily. 'Es el hecho de que cuando me desperté esta mañana, no estabas allí esperando junto al retrato de la Dama Gorda.'
'Oh,' fue todo lo que Severus pudo decir.
'Los últimos cuatro años siempre has estado esperando allí afuera por mi cumpleaños para ir a hacer algo juntos, y ahora en realidad tuve que ir a clase.' Lo último lo dijo con mirada de disgusto.
'Haces que saltarse clases suene como algo bueno,' dijo Severus con desaprobación.
La mandíbula de Lily cayó ante su declaración. '¿Lo estás diciendo en serio?'
'¿Qué? Es algo mal-'
'-Los últimos cuatro años en mi cumpleaños,' citó Lily, 'siempre has estado insistiendo en recogerme temprano por la mañana y saltarnos clases si teníamos alguna, y salir a hacer cosas divertidas juntos, ¿y ahora de repente has desarrollado una conciencia moral al respecto?'
Severus se había quedado sin palabras. Después de todos esos años había olvidado por completo su tradición de cumpleaños.
'Yo- yo, bueno, me encontraste dormido aquí,' tartamudeó Severus. 'Y, y yo- yo lo olvidé.'
'Eso noté,' dijo ella con una mirada amarga en el rostro. 'Ni siquiera me has deseado feliz cumpleaños todavía.'
'Oh, lo siento,' dijo Severus con una voz dulce que era muy distinta de la suya. 'Ven aquí y déjame que te lo compense.'
Severus atrajo a Lily a un abrazo y le dio un beso en la mejilla. 'Eso, feliz cumpleaños.'
Las mejillas de Lily comenzaron a brillar con un tono oscuro de rojo. '¡Sev, tú nunca haces eso!' chilló.
'¿Hago qué?' dijo Severus con una sonrisa mientras se levantaba de la cama.
'Besarme, o cualquier otra cosa para el caso,' respondió ella con una risita.
'Prometo que te lo compensaré,' dijo Severus mientras le tendía las manos. Lily puso las manos en las de él y él la ayudó a levantarse de la cama. '¿Hay algo que te gustaría hacer?'
'Apuesto a que no quieres volver a escabullirte al bosque prohibido conmigo,' dijo ella moviendo las cejas.
'Hicimos eso en segundo año, ¿no?' dijo Severus cuando rememoró el recuerdo.
'Sí, lo hicimos,' dijo Lily, 'y luego nos encontramos una manada de centauros que nos dijeron que regresáramos al colegio o se lo dirían a Dumbledore.'
'Demasiado para nuestro espíritu aventurero,' dijo Severus, resoplando por lo patético que había sido su intento de ser sigilosos. 'Pero tengo una idea. ¿Qué tal si birlamos algo de comida de las cocinas, y subimos a la torre de Astronomía como siempre hacemos?'
'Aunque no tenemos clase esta noche.'
'No,' dijo Severus. 'No tenemos.'
. . . . . . . . .
Mientras el resto del colegio estaba cenando en el gran comedor, Severus y Lily se colaron en las cocinas.
'Adelante, hazle cosquillas a la pera,' dijo Severus cuando se pararon ante el retrato.
Lily extendió la mano hacia la pera, le hizo cosquillas y la observó transformarse en un picaporte.
Cuando abrió la puerta, fue recibida por la Joven Orden, incluidos los nuevos miembros, y sorprendentemente, Emma y Evan.
'¡Feliz cumpleaños, Lily!' gritaron todos al unísono. Un rincón de la cocina estaba decorado para una fiesta de cumpleaños. La mesa a la que sentaba el grupo estaba repleta de comida de aspecto delicioso, y los elfos domésticos estaban ocupados sirviendo las necesidades de todos.
Todo lo que Lily pudo hacer fue mirar maravillada a toda la gente que se había reunido para celebrar con ella.
'Sev,' dijo Lily cuando se volvió hacia él. '¿Tú hiciste esto?'
Severus se encogió de hombros ante su pregunta. 'Quizá,' dijo con un centelleo en los ojos.
De inmediato, Lily corrió hacia todos los que estaban sentados alrededor de la mesa. '¡Esto es alucinante!' chilló mientras daba un abrazo a todos. 'Y Evan, ¿cuándo saliste de la enfermería?'
Evan, que tenía un par de muletas tiradas a su lado, presionó el dedo índice contra sus labios. 'Técnicamente se supone que no debo estar aquí,' dijo en un susurro. 'Madame Pomfrey no sabe dónde estoy.'
'Entonces no diré una palabra,' susurró Lily en respuesta. 'Me alegro de verte aquí.'
'¿Quién quiere una cerveza de mantequilla?' preguntó Potter. '¡Colagusano y yo conseguimos un suministro completo recién salidas de Hogsmeade!'
Severus no se había percatado al principio, pero Sirius y Pettigrew también habían aparecido para la celebración. Mientras Lily estaba ocupada conversando con cada persona en la sala, Severus aprovechó la oportunidad para tomar asiento entre Remus y Regulus.
'Oh, gracias, Horton,' dijo Regulus mientras cogía unas cervezas de mantequilla descorchadas de las manos del elfo. 'Muchachos, deberíais conocer a Horton. Es un dulce elfo doméstico.'
Un tímido elfo doméstico de aspecto joven con brillantes ojos azules estaba mirando a los hombres sentados en torno a la mesa. 'Hola, señores,' dijo Horton tímidamente.
'Hola, Horton,' dijeron Severus y Remus mientras saludaban con la mano al elfo. 'Gracias por las cervezas de mantequilla.'
'A su servicio, señores,' dijo el elfo con una reverencia, y se marchó para ayudar a los otros elfos en la cocina.
'Nosotros también tenemos un elfo doméstico en casa, ¿sabéis?' dijo Regulus. 'Su nombre es Kreacher, y es muy viejo y un poco malhumorado, pero me gusta de todos modos.'
Severus conocía a Kreacher de su vida anterior, y lo recordaba principalmente como un viejo elfo amargado con problemas de supremacía.
'Yo nunca he tenido un elfo doméstico,' dijo Remus, 'pero parecen criaturas maravillosas.'
'Lo son,' dijo Regulus. 'Si los tratas bien así es. Si lo haces son los compañeros más leales que puedas imaginar.'
'Severus,' dijo Frank desde el otro lado de la mesa. 'Conseguí lo que me pediste.'
'¡Estupendo!' dijo Severus. '¿Dónde lo pusiste?'
'Justo allí,' dijo Frank mientras señalaba un objeto cubierto por una sábana sobre otra mesa. '¿Necesitas que vaya a ponerlo?'
'Espera sólo un poquito,' dijo Severus. 'Hay algo que he de hacer primero.'
Severus se levantó de la mesa. 'Remus,' dijo Severus, '¿podrías seguirme, por favor?'
Remus miró a Severus por un segundo, y entonces se dio cuenta de qué quería hablar Severus. Juntos, cruzaron hasta el otro lado de la cocina, hasta que pudieron sentarse en un lugar donde no podrían oírlos.
De su bolsillo interior, Severus sacó un vial de la poción de acónito que había preparado. 'Tómate esto,' dijo Severus cuando le entregó la poción a Remus. 'Si puedes retenerlo te daré el resto que tienes que tomar cada día hasta el próximo plenilunio.'
Remus descorchó el vial y lo olió. 'Huele asqueroso,' dijo Remus con la nariz torcida. '¿Se supone que tiene que humear?'
'Se supone que sí,' dijo Severus encogiéndose de hombros. 'Sólo hay un modo de averiguarlo en realidad.'
'Aunque, ¿qué pasa si me enveneno?' dijo Remus con una mirada de temor en los ojos.
'Remus,' dijo Severus en tono serio, 'pensé en elaborar un puñado de antídotos sólo para estar seguro, y luego pensé para mí mismo, por qué debería si puedo simplemente meterle un bezoar por la garganta en cambio.'
Remus le echó otro vistazo a la poción, lo consideró por un momento, y entonces asumió el riesgo llevándose el vial a los labios y tragando toda la poción.
'Eso estaba asqueroso,' dijo Remus con un sonido de ahogo.
Severus observó a Remus atentamente por un momento, pero nada malo parecía estar ocurriendo, y lo alivió ver que el beleño no la había estropeado.
'Algo más antes de que volvamos a unirnos al resto para la fiesta, Remus,' dijo Severus, y cogió el vial vacío de las manos de Remus, 'quiero estar presente el día de tu transformación.'
'¿Estás seguro de eso?' preguntó Remus.
'No, en absoluto,' dijo Severus honestamente. 'Pero tengo que averiguar si mi poción ha funcionado de un modo u otro.'
'Entonces arreglaremos algo cuando llegue la luna llena,' dijo Remus. 'Volvamos, ¿vale?'
Lily estaba charlando alegremente con todos a la mesa cuando Severus y Remus regresaron.
'Lily,' dijo Severus para llamar su atención. 'Tengo algo para ti.'
De un estante en las provisiones de hierbas de las cocinas, Severus sacó dos paquetes. 'Sí, los escondí aquí sólo en caso de que te entrara mucha curiosidad. Éste es de tus padres.'
Severus le entregó el pesado paquete que Erwin le había enviado.
Lily lo alcanzó y lo miró complacida. Careciendo de paciencia, rasgó el papel, revelando una antología de las obras de Edgar Allan Poe y H.P. Lovecraft.
'¡Sí!' gritó Lily con deleite. 'Les pedí esto a mamá y papá hace una eternidad.'
'¿Qué es?' preguntó Alice. '¿Quiénes son Poe y Lovecraft?'
Lily le entregó los pesados libros. 'Dos autores Muggles maravillosos,' dijo, todavía sonriendo de felicidad. 'Tengo que escribirles a mis padres una nota de agradecimiento.'
Severus se aclaró la garganta. 'Disculpa, Lily, todavía no he terminado.'
'¡Exijo un discurso!' gritó Regulus.
'¿Por qué daría un discurso?' preguntó Severus confuso.
'Porque nos reuniste a todos por una razón,' dijo Regulus. 'Por lo tanto, me gustaría oír un discurso.'
Severus quería protestar, pero el daño ya estaba hecho. Todos los que habían aparecido para el cumpleaños de Lily tenían los ojos fijos en él.
'Ehm,' dijo Severus con timidez, rascándose el brazo por lo torpe que lo hacía sentirse. 'Supongo que podría.'
Severus era el único que estaba en pie, y mantuvo los ojos enfocados en Lily, que parecía estar ansiosa por oír su discurso completamente improvisado.
'Me gustaría hacer un brindis,' comenzó Severus levantando su cerveza de mantequilla. 'Por Lily Evaans.'
Todos los demás cogieron sus cervezas de mantequilla. 'Hemos sido amigos durante… ¿aproximadamente siete años?' dijo Severus mientras calculaba velozmente en su cabeza. 'Y como la mayoría de las personas aquí presentes saben, el último par de meses ha sido un viaje al infierno para mí. La razón por la que quería hacer algo especial para ti es porque, de algún modo, quería darte las gracias.'
Lily estaba comenzando a tener los ojos llorosos, y Severus supo que ella sabía adónde llevaba esto.
'Así que, gracias, por acogerme en tu hogar cuando perdí a mi familia, y también gracias por-' Un nudo que Severus no había esperado había comenzado a formarse en su garganta. 'Gracias por no darte por vencida conmigo cuando estaba dándome por vencido conmigo mismo.'
Severus dejó su cerveza de mantequilla, y Lily se levantó de la mesa y la rodeó para atraer a Severus a un abrazo. 'Nunca me daré por vencida contigo, Sev,' le susurró de modo que sólo él pudiera oír. 'Lo prometo.'
Severus enseguida se secó una lágrima que había comenzado a formarse en su ojo antes de separarse. 'Todavía tengo un regalo para ti,' dijo lo más casualmente que pudo.
Del mismo sitio donde había guardado el regalo de sus padres, sacó el paquete plano y cuadrado que había pedido por lechuza.
Lily cogió el regalo de sus manos y lo rasgó, revelando un disco sin estrenar, y se quedó boquiabierta cuando vio el título.
'¿Ésta es la banda AC/DC de la que oí hablar a Sirius y Regulus en clase de música?' preguntó Lily.
Ambos hermanos Black estaban mirándolo con ojos llenos de codicia. '¿En serio él-' fue todo lo que Sirius pudo murmurar a un Potter de aspecto derrotado.
Frank había aprovechado la oportunidad para revelar el gramófono que había estado ocultando. '¡Tadaa!' dijo Frank. 'La Profesora McGonagall fue tan amable de prestármelo.'
Lily parecía haberse quedado sin palabras, así que Severus le señaló el gramófono y la hizo poner la aguja en el disco.
'¡Esto es genial, Sev!' dijo Lily con un chillido de deleite cuando el gramófono comenzó a sonar mágicamente. 'Gracias.'
Mientras el álbum High Voltage de AC/DC comenzaba a sonar, todo el grupo levantó sus cervezas de mantequilla, y pasaron una noche llena de diversión y risas. La guerra temporalmente olvidada.
