Pinchar la Mente de la Gente es Algo Peligroso

'Todavía no puedo creer que tú y Remus os ganarais una detención,' dijo Lily riendo mientras estaban trabajando en los deberes en el laboratorio.

Severus murmuró algo inaudible en respuesta.

'¿Qué fue eso?' preguntó Lily, incapaz de borrar la sonrisa burlona de su cara.

'Todavía tengo ampollas en las manos,' gruñó Severus.

La profesora McGonagall había pillado a Severus y Remus después de que se saltaran la clase de Cuidado de Criaturas Mágicas, y habían estado cumpliendo detención todo el viernes por la noche en el aula de pociones, fregando la grasa de los calderos a mano.

'¿Te gusta mi dibujo de un Crup?' preguntó él mientras sostenía un boceto para que Lily lo viera.

'Habrías conocido más detalles si hubieras aparecido en clase,' dijo Lily mientras miraba la pobre excusa de dibujo de Severus. 'Esos dos pobres Crups pequeños. No tenían nadie con quien jugar.'

'Si estás intentando hacer que me sienta mal,' dijo Severus con acritud, 'no está funcionando.'

Los ojos de Lily se encontraron con Severus por un momento, y pareció como si decidiera ceder. 'Ve a buscar un poco de Esencia de Murtlap, y yo puliré esa atrocidad que acabas de dibujar ahí.'

Severus no tuvo que pensar dos veces en aceptar la oferta de Lily. Enseguida se encaminó al almacén de Slughorn y rebuscó en él para encontrar el frasco de esencia de murtlap.

'Buenas noches, señor Snape,' dijo una voz jovial detrás de él. El Profesor Slughorn estaba apoyado contra el marco de la puerta, observando a Severus luchar por bajar el frasco de murtlap por la escalera. '¿Sabe que podría simplemente lanzar un accio al frasco si no puede alcanzarlo?'

Severus se detuvo y se dio la vuelta. 'Admitiré que no pensé en eso.'

'Sólo déjeme cogérselo,' dijo Slughorn extendiendo la mano.

Severus le entregó el frasco y bajó. 'Gracias, profesor.'

'Lástima que había pasado tiempo desde que esos calderos tuvieron un buen fregado,' dijo Slughorn, devolviéndole el frasco de murtlap. 'Debió llevarles una eternidad limpiarlos todos.'

Severus levantó la mano izquierda que estaba cubierta de ampollas. 'Debo decir, profesor,' dijo Severus, 'que ha pasado tiempo desde que realmente había recibido una detención, y no planeo volver a pasar por ello.'

'Bueno, en ese caso ha aprendido una lección,' dijo Slughorn con una leve sonrisa. '¿Se dirige de vuelta al laboratorio?'

'Sí, voy,' dijo Severus. 'A hacer los deberes con la señorita Evans, y mañana voy a averiguar si mi poción para el señor Lupin es un completo desastre o no.'

'Bien, y,' dijo Slughorn un poco de mala gana, 'no me importa si usted y la señorita Evans comparten el laboratorio para trabajar en pociones y todo eso, sólo prométame que no harán nada, irracional.'

Severus no pudo evitar mirar con los ojos muy abiertos ante el comentario de Slughorn. 'No, señor, no lo haremos,' respondió Severus rígidamente. 'Que tenga un buen día.'

Con el frasco de murtlap metido bajo el brazo, Severus enseguida corrió de vuelta al laboratorio.

'¿Qué te pasó?' preguntó Lily cuando vio la mirada perpleja en el rostro de Severus. 'Parece que hayas visto un fantasma.'

'Veo de ésos a diario, curiosamente,' dijo Severus. 'Pero sólo me topé con Slughorn mientras estaba buscando en sus provisiones.'

Mientras Severus se desplomaba en su asiento, Lily había cogido un cuenco para el murtlap. Él vertió la esencia en el cuenco, metió la mano en él y dejó escapar un suspiro de alivio.

'¿Te asustó o algo así?' preguntó Lily.

Severus se mordió el labio inferior, deseando no haberlo mencionado en absoluto, y sacudió la cabeza. 'Me dijo que no fuera… irracional… porque pasamos mucho tiempo juntos en el laboratorio.'

La boca de Lily cayó abierta de incredulidad. '¿De verdad te dijo eso?'

Severus asintió, y sintió que su rostro brillaba un poco rojo a pesar de su mejor esfuerzo por evitarlo.

Lily estalló en un ataque de risitas. 'Oh, eso es embarazoso, Sev…'

'No estás ayudando riéndote de ello, ¿sabes?' dijo él con un gruñido. 'Pero hablando de cosas embarazosas, ¿Potter ha vuelto a pedirte una cita por casualidad?'

'Sí, lo hizo,' dijo Lily despreocupadamente. 'Anoche, en realidad, antes de que me fuera a la cama.'

El murtlap no era lo suficientemente calmante para que Severus sintiera volver a aumentar la tensión en sus manos. 'Le dije que te dejara en paz,' dijo enojado.

'No creo que pillara la indirecta,' dijo Lily encogiéndose de hombros. 'De cualquier modo, le dije que no, como siempre hago.'

'Se lo advertí,' dijo Severus con una voz que dejaba claro que todavía no se había calmado. 'Le dije que no te molestara, y aun así lo hizo.'

'¿Cómo es que te molesta tanto, Sev?' preguntó ella con una abierta sonrisa.

'¿No te molestaría a ti si alguien me pidiera salir todo el tiempo cuando claramente no quiero?' dijo Severus con incredulidad.

'Tienes toda la razón,' admitió Lily.

'Simplemente no quiero verte lastimada, Lily,' dijo Severus, 'eso es todo.'

. . . . . . . . .

Severus estaba preocupándose más y más por Evan. Al principio asumió que el mal humor de Evan tenía que ver con la ruptura de él y Emma, pero en lugar de ver a Evan salir de su desdicha, estaba cayendo más y más en el agujero emocional que estaba cavando.

Durante la reunión de la Joven Orden, Evan sintió que era hora de que Severus pinchara la mente de alguien para ver si alguno era capaz de expulsarlo. Al mencionarlo, todos parecían reticentes a ofrecerse voluntarios para el primer intento.

Severus estuvo tentado de llamar a Potter y pasar por todo lo que Potter asociaba con Lily, pero fue Frank quien finalmente cedió y se ofreció voluntario.

'Ahora recuerda,' le dijo Evan a Frank, 'que no te entre miedo si ves recuerdos subiendo. Sólo intenta relajarte y empujarlos atrás.'

Frank asintió comprendiendo y se preparó parándose frente a Severus.

No verbalmente, Severus lanzó el hechizo de Legeremancia sobre Fran, y vio imágenes de Frank persiguiendo la snitch, de él y Lily trabajando en Herbología, de él y Alice escabulléndose en un aula vacía y…

'¿En serio, Frank?' gritó Severus horrorizado. '¡Esta no es la manera de empujar a la gente fuera de tu mente!'

La cara de Frank estaba poniéndose de un bonito tono rojo. 'Lo siento,' murmuró, inseguro de qué decir.

Severus gruñó para sí mismo. 'Seriamente, Frank, ahórrame los detalles de tu vida amorosa.'

Alice, Mary y Lily habían estallado en un ataque de risitas. 'Aunque parece que funcionó,' dijo Alice, incapaz de contenerse.

'Supongo que no quieres hacer otro intento, Severus,' preguntó Frank con cautela.

'No, no lo hago,' dijo Severus resueltamente. 'Desearía que existiera algo así como un trapo para la mente de modo que pudiera limpiar la porquería que acabas de meter en ella.'

Frank se mordió el labio inferior, volvió a tomar su sitio en el círculo, y se ocultó detrás de una Alice risueña.

'Regulus,' dijo Severus. '¿Estás dispuesto?'

Con aire de confianza, Regulus se puso en pie y encaró a Severus. 'Simplemente lánzamelo, puedo cogerlo.'

Severus le lanzó el hechizo a Regulus y vio imágenes de él jugando al ajedrez mágico con su elfo doméstico, de ser seleccionado en Slytherin, de observar cómo Sirius era golpeado por su padre a través de una grieta en la puerta de su dormitorio…

Entonces, por un momento todo se volvió negro, y Severus volvió a ver a Regulus parado frente a él, recuperando el aliento.

Regulus abrió la boca, pero no salió ningún sonido, y volvió a cerrarla. Ya no estaba parado derecho con la misma confianza que siempre llevaba consigo, sino que parecía turbado y derrotado en cambio.

'Reg-'

'-No lo menciones, Severus,' lo cortó Regulus.

Severus asintió comprendiendo. 'Lograste expulsarme en tu primer intento,' dijo Severus. 'Eso es una hazaña notable.'

'Gracias,' murmuró Regulus. 'Tengo que agradecérselo a la prima Bella.'

Regulus se dio la vuelta y volvió a sentarse en el círculo, no queriendo mirar a nadie a los ojos.

Puede que todos los demás en el grupo no hubieran visto lo que pasaba en el interior de la mente de Regulus, pero era obvio que no era nada tan remotamente inocente como la vida amorosa de Frank.

'Supongo que nadie quiere ya ofrecerse voluntario por hoy,' dijo Severus. 'Pero espero que ahora todos comprendáis por qué es tan importante ser capaces de cerrar vuestras mentes.'

'¿Lo dejamos por hoy?' sugirió Frank al grupo.

Todos parecieron de acuerdo en que eso sería lo mejor. Mary fue la primera en salir con Regulus a su lado, seguidos por Frank y Alice.

'Toma,' le dijo Lily a Severus cuando se paró en la puerta, 'es una tableta de chocolate.'

'Bien, gracias,' dijo Severus cuando le cogió el chocolate. '¿A qué debo esto?'

'No es para ti, bobo,' susurró Lily. 'Es para Remus, para su cosa cíclica mensual.'

'Me hiciste ilusiones y luego me las quitaste,' dijo Severus bromeando. 'Pero gracias, esto podría ser útil.'

'Buena suerte esta noche,' dijo Lily con un guiño. 'Estaré en el laboratorio por si acaso, bueno, por si hay alguna razón por la que necesites volver corriendo.'

Lily corrió detrás de Frank y Alice, dejando a Severus con Remus y Potter, que todavía estaban dentro de la sala, tal como Severus había esperado.

'¿Tomaste hoy tu última poción, Remus?'

'Lo hice esta mañana,' dijo Remus. '¿Estás seguro de que todavía quieres venir?'

'Sólo si nos quedamos dentro de la Casa de los Gritos,' dijo Severus, mirando a Potter en particular.

Potter y Remus asintieron comprendiendo. 'Dumbledore sabe que voy contigo esta noche,' continuó Severus. 'Así que eso debería darte al menos un poco más de tranquilidad, sabiendo que me respalda en caso de que lo necesitemos.'

El rostro extremadamente pálido de Remus pareció iluminarse sólo un poquito ante la idea de tener a Dumbledore como respaldo. 'Es bueno saberlo,' dijo.

'¿Algo más que necesite saber antes de que lo hagamos?' preguntó Severus de manera seria.

'Normalmente nos dirigimos al Sauce Boxeador nada más cenar,' dijo Potter. 'Sugiero que nos encontremos allí.'

'Entonces, que así sea.'