Dentro de la Casa de los Gritos
Estaba oscureciendo velozmente. Los cuatro merodeadores, junto a Severus, estaban parados al lado del Sauce Boxeador, preparados para tomar el túnel subterráneo hacia la Casa de los Gritos.
'¿Todavía estás seguro de que quieres hacer esto, Severus?' Remus estaba temblando violentamente en el frío de febrero. 'Todavía puedes marcharte si quieres.'
'Quiero hacerlo,' dijo Severus con determinación, pero en su interior se sentía cualquier cosa excepto decidido, y no era la situación de Remus lo que lo causaba.
La última vez que habían ido a Hogsmeade y habían pasado junto a la Casa de los Gritos, Severus casi había colapsado en otro ataque de pánico ante la simple vista de ella. Ahora, iba a tener que entrar voluntariamente. El mismo lugar donde había perdido la vida.
'Vamos a movernos antes de que se ponga el sol, ¿vale?' dijo Black con un movimiento de la mano.
Pettigrew asintió comprendiendo y se transformó en una rata de modo que pudiera tocar el nudo al pie del árbol. De repente el árbol, que había estado balanceándose al viento, se había quedado inmóvil.
Potter fue el primero en entrar, metiéndose a Pettigrew en el bolsillo mientras se encaminaba túnel abajo. Black siguió su ejemplo, y Remus, que dejó escapar un sollozo sofocado, se arrastró por la abertura.
Severus se volvió y miró alrededor una última vez al castillo, vacilando si echarse atrás y dejar que todo se resolviera por sí mismo, pero decidió que no, ya que no quería abandonar a Remus después de todo lo que le sucedió a la poción que había estado tomando.
El ritmo del corazón de Severus se aceleraba con cada paso que daba túnel abajo, y estaba temblando en el momento que llegaron a la casa.
'Habitualmente, Lunático se transforma aquí,' dijo Black mientras señalaba una vieja y polvorienta cama rota. 'Nosotros nos quedamos a su alrededor y esperamos hasta que se ha transformado.'
Remus, que estaba temblando aún más que Severus, se sentó en la cama y se envolvió en las mantas.
Severus se paró en un rincón de la habitación, observando cómo los amigos interactuaban entre sí. Pettigrew había saltado fuera del bolsillo de Potter y se acurrucaba contra el hombro de Remus, como si le dijera que todo iba a salir bien.
'Sólo unos minutos más,' dijo Potter. '¿Estás preparado para esto, Snape?'
Severus sacudió la cabeza mientras los cuatro merodeadores lo miraban. 'Sólo puedo esperar que esta poción funcione,' dijo Severus, incapaz de ocultar el temblor en su voz.
'¿No lo hacemos todos?' dijo Black con sequedad. Potter y Black se transformaron en sus formas de Animagos y Severus sacó su varita, preparado para protegerse si era necesario.
Remus, a quien se le habían puesto los ojos llorosos ante el despliegue ante él, ocultó el rostro debajo de las mantas. 'Gracias por intentarlo, Severus,' dijo Remus en voz baja desde debajo de las mantas. 'Pero no sé si mi mente podrá manejar la transformación.'
Pettigrew se arrastró desde debajo de las mantas y soltó un chillido. Lo que sea que Pettigrew dijo, Severus supo que la transformación había comenzado.
El evidente llanto de Remus atravesó el corazón de Severus. Sólo podía imaginar lo doloroso que debía ser tener un monstruo arrastrándose fuera de ti desde el interior. El sonido de huesos rompiéndose hizo evidente que el lobo estaba saliendo, y el llanto de convirtió en aullidos.
Parecía casi surreal, estar parado frente a un hombre transformándose en licántropo mientras estaba rodeado por una rata, un perro y un ciervo. Cuando las mantas cayeron del cuerpo de hombre-lobo de Remus, Severus lanzó velozmente un hechizo Protego Máxima, creando una burbuja de luz blanco-azulada para protegerlo a él y a los restantes merodeadores de Remus.
Remus estaba resoplando de agotamiento. Por un rato, sólo se quedó sentado en la cama, mirando fijamente a Severus y los merodeadores detrás del escudo protector.
No queriendo esperar más una reacción, Potter pisoteó el escudo con una pezuña, tratando de provocar una reacción.
Despacio, Remus se levantó de la cama y presionó la pata contra el escudo protector y enseñó los dientes, haciendo que Severus diera un paso involuntario hacia atrás.
'¿Puedes oírme, Remus?' preguntó Severus con cautela, sin atreverse a apartar los ojos de los dientes de Remus.
Las orejas de Remus se volvieron bruscamente en dirección a Severus, y soltó un asentimiento ahogado.
'¿Puedes?' preguntó Severus, todavía no por completo seguro de la situación.
Black dejó escapar un suave gruñido, y volvió a transformarse en su forma humana. Se arrodilló frente a Remus sólo protegido por el delgado escudo que lo separaba del lobo, y presionó la mano contra él.
Fue evidente que la tensión en la habitación se disipó en cuanto Remus presionó la pata contra el escudo desde el otro lado, como si dijera que comprendía lo que estaba pasando.
'Wow,' fue todo lo que Black fue capaz de decir. 'Esto es increíble.'
Tanto Potter como Pettigrew volvieron a transformarse en su forma humana, mirando a Remus como si estuvieran presenciando un milagro.
'¿Creéis que puedo desarmar el escudo?' preguntó Severus.
'Sólo hazlo,' dijo Black. 'Creo que estamos bien.'
Severus respiró hondo y bajó su varita, haciendo que el escudo desapareciera.
'Funcionó,' murmuró Severus para sí mismo. 'No puedo creer que funcionara.'
'Remus, ¿puedes oírnos?' preguntó Potter, sus ojos todavía tan grandes como platos por mirar fijamente a Remus.
Remus asintió con la cabeza. 'Puedo,' dijo.
Ante eso, Severus casi rompió su tranquila seriedad. '¿Puedes hablar? No puedo creerlo- ¿puedes hablar de verdad?'
'Supongo,' dijo Remus, sonando extrañamente ronco. 'Aunque no puedo creer que os esté mirando de verdad a todos, desde esta perspectiva.'
'¿Cómo te sientes, Remus?' preguntó Pettigrew. '¿Va todo bien?'
'Un poco mareado,' dijo Remus, 'pero por lo demás, bien, supongo.'
Potter estaba comenzando a acumular lágrimas en los ojos. 'Esto es tan maravilloso, colega,' dijo con la voz llena de emoción. 'Simplemente no puedo creer lo que estoy viendo.'
Severus, por supuesto, había visto a Remus antes en su estado de licántropo seguro, pero el habla llegó como una sorpresa inesperada. 'No puedo creer que puedas hablar.'
'Yo no puedo creer que pueda ver al lobo en mí sin perderme,' dijo Remus, emocionándose tanto como lo permitía su estado lobuno.
Mientras los merodeadores se rodeaban unos a otros y hablaban, Severus encontró el momento para escabullirse lejos del grupo y sentarse en el sofá roto en la otra habitación.
Severus comprendía que tenía que ser un momento emotivo para ellos, pero no podía evitar preguntarse cómo Remus, aparte de lograr conservar su mente humana, también conservaba su voz humana. La única explicación posible que tenía era el accidente con el beleño. Era el mismo ingrediente que también se empleaba para crear el Veritaserum, y parecía ser la única explicación posible para el habla. Quizá Remus también era incapaz de mentir, en su forma de licántropo, y sólo había un modo de averiguarlo.
'¿Lo llevas bien, Sn- eh, Severus?' preguntó Pettigrew. 'Pareces un poco agobiado.'
Pettigrew se había alejado del grupo y estaba parado en el umbral de la puerta de la sala de estar.
'Estoy bien,' dijo Severus. 'Simplemente no me van todas esas muestras de afecto de unos por otros.'
'¿Te importa que te acompañe?'
Lo último que quería Severus era que Pettigrew comenzara a hablarle, pero estar sentado solo en un lugar donde una vez murió tampoco le sentaba bien.
'Claro,' dijo Severus cuando cedió. '¿Por qué no?'
Pettigrew se acercó a Severus, levantó un cojín del sofá y sacó dos cervezas de mantequilla. '¿Quieres una?' preguntó Pettigrew cuando se sentó en el sofá.
'Gracias,' murmuró Severus cuando cogió la botella de la mano de Pettigrew. '¿Tienes más de donde salieron?'
'Conservo una pequeña provisión sólo por si acaso,' dijo Pettigrew. 'No siempre voy con ellos cuando salen de correría por el bosque. Simplemente no me parece seguro para mí, así que espero aquí a su regreso y tengo algo de tiempo para mí mismo.'
'Eso no suena demasiado mal a decir verdad,' dijo Severus mientras descorchaba su botella.
'Lo es,' respondió Pettigrew. 'Puedo beber cerveza y leer libros sin que me molesten. Incluso me acostumbré a este lugar después de un tiempo, una vez lo conoces, no es tan siniestro como parece desde fuera.'
Severus quería diferir, pero claro, Pettigrew no sabía que Severus había muerto justo en la misma habitación donde estaban sentados ahora. Por un fugaz segundo, lo hizo preguntarse lo que había ocurrido con su cuerpo después de que terminara la batalla, pero luego pensó que sería mejor no pensar en cosas así en absoluto.
'Aquí estáis los dos,' dijo Potter alegremente cuando entró en la sala de estar, seguido por Remus y Black. '¿Tienes más de esas cervezas de mantequilla, Colagusano?'
Pettigrew señaló el sofá enfrente de donde él y Severus estaban sentados. 'Coged ésas si queréis.'
'Remus,' llamó Severus, '¿puedes venir aquí para que te mire más de cerca?'
Remus se acercó a Severus meneando la cola, y cuando se sentó, quedó más alto que Severus sentado en el sofá. 'Eres enorme,' dijo Severus con curiosidad. '¿Todavía te sientes mareado?'
'Un poquito,' dijo Remus. 'Debe haber sido la transformación. Eso siempre es doloroso.'
'Tengo algo para eso,' dijo Severus mientras rebuscaba en su bolsillo. Sacó la tableta de chocolate que Lily le había dado y se la tendió a Remus. '¿Quieres un poco?'
Los ojos de licántropo de Remus se iluminaron al verla. '¡Sí, por favor!'
Severus desenvolvió el chocolate y lo rompió en pedazos. 'Tengo que admitir,' dijo Severus mientras sostenía el chocolate en la mano, 'se siente muy incómodo estar dándote de comer con la mano.'
'Entonces no hablemos de ello fuera de la casa, ¿vale?' dijo Remus con una sonrisa, exponiendo demasiados dientes para el gusto de Severus. 'Gracias.'
'Es a Lily a quien deberías agradecérselo,' dijo Severus. 'Es ella quien pensó en darte esto.'
'¿Evans sabe de Lunático?' preguntó Potter, casi escupiendo su cerveza de mantequilla por la sorpresa.
'Sí, lo sabe,' dijo Severus con sequedad. 'Porque a diferencia de la mayoría de la gente, no es completamente ignorante de lo que ocurre a su alrededor. Aunque no os preocupéis. Sabe guardar un secreto.'
'Hablando de Lily,' continuó Severus. 'Remus, ¿la besaste una vez allá en tercer año?'
'Sí, lo hice,' dijo Remus, y se sorprendió por su propia reacción un momento después. 'Oh…'
La boca de Potter cayó abierta y Severus no pudo evitar sonreír abiertamente. 'Sabía que lo habías hecho,' dijo para asegurarle a Remus que no estaba enojado, 'Lily me lo contó hace un tiempo. Sólo te pregunté para ponerte a prueba.'
'¿Ponerme a prueba para qué?' preguntó Remus, poniéndosele un poco ronca la voz.
'Hay algo en la poción que preparé que también se emplea en los sueros de la verdad,' explicó él, 'y creo que es la razón de que puedas hablar, pero no mentir.'
'¿Entonces Lunático no puede mentir en absoluto?' dijo Black ladrando una carcajada. 'Eso es estupendo.'
'¿Besaste a Evans?' preguntó Pettigrew incrédulo. '¿Y nunca nos lo contaste?'
'Sí,' dijo Potter amargamente, '¿cómo es que nunca nos lo contaste?'
'Porque sabía que te disgustarías,' le dijo Remus a Potter. 'Como lo estás ahora.'
Potter cruzó los brazos sobre el pecho y apartó la vista. El buen humor que había llegado con el exitoso experimento con Remus se había borrado de su cara por completo.
'Entonces, Snape,' dijo Black en un intento de cambiar de tema, '¿qué va a pasar ahora que sabes que tu poción funciona?'
'Trabajé junto a un pocionista llamado Damocles Belby,' dijo Severus, 'y le escribiré a primera hora de la mañana. Él creó una poción muy similar y también tiene un sujeto de prueba, así que comparar resultados será interesante.'
'Lo cojo,' dijo Black, 'pero lo que quería decir en realidad era que, si esta poción va a estar en el mercado para otras personas con licantropía, va a ser una gran noticia, ¿verdad?'
'No había pensado en eso,' dijo Severus sinceramente. 'Tampoco es que me importe mucho. Funciona, y eso es todo lo que importa.'
'¿No te importa obtener algo de gloria por ello?' preguntó Black perplejo.
'Black, asumo que sabes lo que me sucedió durante la Navidad,' dijo Severus con rostro severo. 'No quiero que mi nombre vuelva a estar expuesto como lo hizo más temprano este año. Sólo levantaría sospechas.'
Black tenía una mirada en los ojos que Severus nunca había visto antes, y apartó la vista como si estuviera tratando de ocultar la culpa que lo cubría.
'Aunque tiene que haber algo que podamos hacer por ti,' dijo Pettigrew. 'Creo que algo tan impresionante como esto no puede pasar desapercibido.'
'¿Qué tal si todos vosotros dejáis de llamarme Quejicus y quedamos en paz?' dijo Severus, sin tener ni idea de qué otra cosa podrían hacer por él.
'No, tiene que haber algo,' insistió Remus, poniéndole la pata en el hombro a Severus.
Severus se tomó un momento para pensar, y entonces se le ocurrió. 'Pettigrew, Black,' dijo Severus mientras se volvía hacia ellos. 'Uníos a la Joven Orden con el resto de nosotros. Siempre nos irían bien más miembros.'
Pettigrew miró al suelo. 'Aunque yo no soy mucho de luchar,' dijo tímidamente.
'Prepararte para una guerra es mucho más que sólo luchar, Pettigrew,' dijo Severus sombríamente. 'Y Black, ¿qué hay de ti?'
'Mi hermano pequeño es miembro, ¿no?' dijo Black, más como afirmación que como pregunta. 'Quizá es hora de que averigüe qué se trae entre manos.'
Severus rememoró el recuerdo que había visto en la mente de Regulus el día anterior, y no pudo evitar mirar a Sirius con otros ojos.
'Creo que te hará bien,' afirmó Severus.
'¿Y eso por qué?'
'No me preguntes por qué,' dijo Severus, 'pero tengo la sensación de que tú y yo no somos tan diferentes el uno del otro.'
