Una Estudiante ha sido Petrificada
Damocles sirvió el desayuno a su esposa e invitados a la mañana siguiente. 'Ideamos un gran plan anoche,' le dijo Damocles con entusiasmo a Catriona.
'Cuenta,' dijo Catriona, sus ojos muy abiertos con expectación.
'Severus me ha dicho que hay cierta dama en el Ministerio que puede ser capaz de ayudarnos.'
Severus tenía una sonrisa maliciosa en el rostro. 'Esta dama en particular tiene ciertas disconformidades con respecto a las personas que considera "híbridos". Así que, si vamos a ofrecer esta poción como un medio de ayudar a cualquiera que sufre licantropía, probablemente se agarrará una rabieta, y todo el mundo mágico lo sabrá enseguida.'
'Y eso incluye a todos con licantropía,' añadió Remus. 'Lo que significa que la mayoría de los licántropos del país comenzarán a buscar la poción en el momento que se mencione, anónimamente o no.'
'Otro resultado,' añadió Severus, 'es que les será notificado a pocionistas de todo el país, y en consecuencia podrán colaborar, haciendo la poción más barata debido a la oferta y la demanda.'
'Sin embargo, ¿creéis que el Ministerio seguirá valorando vuestro trabajo?' preguntó Catriona. 'Si vais a entregárselo a alguien que preferiría ver que los licántropos se marchan en lugar de venir, ¿no significaría eso que cualquier tipo de reconocimiento por vuestro trabajo se vuelve cuestionable?'
'Lo será,' dijo Damocles, 'pero Severus y yo llegamos al acuerdo de que no creamos esta poción a cambio de reconocimiento. Lo hicimos para ayudar a las personas como tú y Remus, y eso es más valioso que cualquier premio que pueda otorgarnos el ministerio.'
'¿Alguna idea de cuándo vais a acudir al ministerio para esto?' preguntó Catriona.
'Recibí una invitación de mi antiguo profesor para asistir a su fiesta en algún momento en marzo,' dijo Damocles. 'Creo que el profesor Slughorn estará más que dispuesto a participar.'
'¿Cuándo será su próxima fiesta?' preguntó Severus. 'No he oído nada de él todavía.'
'El veinte, si no me equivoco,' dijo Damocles. 'Una manera perfecta de volver a reunirnos y trabajar en una estrategia con la implicación de Slughorn. El hombre tiene un montón de contactos útiles que podríamos aprovechar. ¿Hay algo que os gustaría hacer a vosotros dos antes de regresar a Hogsmeade hoy?'
'Hablamos de visitar la Galería Nacional esta mañana,' dijo Remus. 'Está justo junto a la estación de tren, así que es un modo estupendo de pasar el tiempo antes de regresar.'
'¿Puedo confiar en que encontréis el camino hasta allí?' preguntó Damocles. 'A mi esposa y a mí nos gustaría pasar algo de tiempo juntos en nuestro día libre.'
'Eso no será problema,' dijo Severus. 'Cogeremos nuestras cosas después de desayunar. Tenemos un largo viaje de regreso a Hogsmeade por delante.'
Después de compartir su gratitud y despedidas, Severus y Remus se encaminaron de regreso al centro de la ciudad.
'Unas personas geniales,' dijo Remus. 'Si hay algún modo de que pudiera colarme en la próxima reunión del club Slug para volver a ver a Damocles, estaría más que feliz de hacerlo.'
'No es necesario,' dijo Severus. 'Se nos permite llevar citas.'
'¿Estás pidiéndome una cita, Severus?' preguntó Remus bromeando, parpadeando de manera seductora.
'Técnicamente, sí,' dijo Severus, tratando de mantener la cara seria. 'Pero honestamente, siéntete libre de venir. Cuanta más gente haya, más contento se pone Slughorn.'
Dieron una vuelta rápida por la Galería Nacional, admirando pinturas desde Rafael a Rembrandt. Severus no pudo evitar recordar a Petunia después de pasar junto a una colección de paisajes de varios artistas.
'A pesar del hecho de que todas estas pinturas Muggles están estáticas en sus marcos,' dijo Remus mientras se dirigían hacia el tren, 'puedo ver por qué la gente las admira y- ¿ése es Leo?' Remus estaba señalando al cielo donde veía una pequeña lechuza de color herrumbre volando en círculos por encima de ellos.
'¡Leo!' llamó Severus, haciendo que la gente mirara en su dirección. Enseguida Leo se lanzó en picado y aterrizó en el hombro de Severus. En su pequeño pico llevaba una nota diminuta, que le entregó a Severus.
Severus desenrolló la nota y leyó el mensaje apresuradamente escrito de Lily.
"Regresa a Hogwarts cuanto antes. ¡Peligro!"
Severus no le dio a Remus la oportunidad de leer, y lo agarró de la manga para arrastrarlo a un rincón oscuro en un callejón. Enseguida se metió a Leo en el bolsillo y miró a Remus directamente a los ojos. 'Remus,' dijo con firmeza. '¿Me prometes que no dirás una sola palabra de esto?'
'¿De qué?' preguntó Remus, temeroso de lo que estaba pasando.
'Algo malo está ocurriendo en Hogwarts,' dijo Severus apresuradamente. 'Agárrate de mi brazo.'
'Pero-'
'¡Haz lo que te digo!'
Remus agarró a Severus firmemente por el brazo y al instante desaparecieron de la escena. Con un suave sonido de estallido, aparecieron en la linde del bosque junto a los terrenos de Hogwarts un momento después.
Remus casi cayó por la repentina sensación de opresión que causó la aparición. '¿Acabamos de aparecernos aquí?' preguntó Remus incrédulo, todavía tratando de recuperar el resuello. 'Pero, ¿cómo?'
Severus sacó a Leo de su bolsillo y enseguida lo lanzó al aire. 'Avisa a Lily de que estamos de vuelta,' le dijo a Leo. Leo le lanzó una mirada furiosa y de inmediato voló hacia el castillo.
Sin mirar atrás, Severus comenzó a correr hacia el castillo, Remus siguiéndolo de cerca. 'Mi madre me enseñó,' mintió Severus. 'Nunca fue alguien que se atuviera las normas.'
'Entonces, ¿por qué no nos aparecimos en Edimburgo simplemente?' preguntó Remus. '¿Por qué molestarnos en tomar el tren?'
'Porque no es exactamente legal, ¿verdad?' respondió Severus con desprecio. 'Por favor, hazme un favor, Remus, y no digas una palabra de esto a nadie. Ni a tus amigos. Ni a los profesores. Especialmente no a Lily.'
'No lo haré,' dijo Remus. 'Lo prometo. ¿Te importa contarme qué está pasando?'
'Recibí un mensaje de Lily de que algo peligroso está pasando en el castillo,' dijo Severus, ahora siguiendo el camino que conducía a la entrada principal, 'así que será mejor que saques la varita y estés preparado para lo que sea que esté a punto de llegar.'
Remus no necesitó que se lo pidiera dos veces y sacó su varita justo antes de que entraran en el vestíbulo de entrada.
Había un silencio mortal en el vestíbulo de entrada, pero en cuanto doblaron la esquina hacia el gran comedor, todo el colegio estaba sentado allí, montando escándalo.
'¡Sev!' gritó Lily desde la mesa Gryffindor. Enseguida corrió hacia él y le echó los brazos alrededor. 'Esperaba que estarías aquí en cuanto Leo llegó volando. ¿Cómo es que regresaste tan rápido?'
'Damocles nos apareció de vuelta,' dijo Severus. '¿Te importa contarme qué está pasando?'
'Una chica Ravenclaw ha sido petrificada,' dijo Lily. 'Y dejaron un mensaje en el muro del primer piso donde la encontraron.'
Como si un yunque hubiera caído dentro de su estómago, Severus recordó la última vez que los estudiantes habían comenzado a ser petrificados. '¿Dónde está Dumbledore?' preguntó apresuradamente.
'Todavía en el ministerio,' dijo Lily. 'Es por lo que McGonagall está en pie allí.'
'¿Podrías llevarme al primer piso entonces?' pidió Severus. 'Tengo que verlo por mí mismo.'
'Sev, se supone que no debemos-' pero antes de que Lily fuera capaz de terminar la frase, Severus ya había salido corriendo hacia las escaleras.
'¡Sev, puede haber peligro ahí afuera!' llamó Lily detrás de él, pero lo siguió de todos modos.
Allí, sobre el muro, escritas con sangre, estaban las palabras "ENEMIGOS DEL HEREDERO, TENED CUIDADO."
Algo estaba mal en el mensaje. Algo faltaba.
'Lily,' dijo Severus lo más tranquilo que pudo, '¿tienes idea de dónde está Hagrid? Hay algo que tengo que confirmar por mí mismo.'
Lily le lanzó una mirada perpleja. 'Probablemente en el gran comedor como todos los demás, pero por qué-'
'Sólo sígueme,' dijo Severus mientras se daba la vuelta y se dirigía de regreso al gran comedor. Allí encontró a Hagrid, rodeado por un grupo de Hufflepuffs.
'Hagrid,' llamó Severus. '¿puedo preguntarte algo?'
'Dale,' dijo Hagrid. '¿Estás preocupado por algo?'
'¿Por casualidad,' dijo Severus con claridad, 'han muerto unos pollos recientemente?'
'Bueno, perdí un par de gallos a manos de los zorros, creo,' dijo Hagrid. 'Aunque ocurre de vez en cuando. Es extraño que fueran sólo los gallos-'
Severus no necesitó oír nada más. Su peor sospecha se había confirmado. Pero, ¿cómo? ¿Por qué esto estaba volviendo a suceder en un momento diferente comparado con su pasado? ¿Por qué había sólo una advertencia, y no que la Cámara de los Secretos había sido abierta de nuevo?
'Gracias, Hagrid,' dijo Severus. 'Ya sé lo suficiente.'
Severus se volvió hacia Lily, cuya expresión estaba más allá de la confusión. '¿Sabes lo que está pasando, Sev?' le preguntó de manera casi enojada.
'Tengo una sospecha,' dijo Severus. 'Una sospecha que sólo puedo confirmar con seguridad una vez Dumbledore esté de vuelta.'
'No comprendo-'
'Lo harás más adelante,' la tranquilizó Severus. '¿Están todos los que conocemos aquí en el gran comedor?'
Lily miró alrededor apresuradamente para ver si veía a todos los que conocía. 'A Evan no se le ve bien,' dijo, señalando a Evan, que estaba blanco como un fantasma. '¿Te importa si voy a cuidarlo?'
'Por favor, hazlo,' dijo Severus, 'yo veré si puedo averiguar cuándo estará de vuelta Dumbledore.'
Enseguida, Severus corrió hacia la profesora McGonagall, y ella le aseguró que Dumbledore debería estar de regreso en cuanto el mensaje le hubiera sido entregado. Desde el estrado de los profesores, Severus pudo ver a Avery y Mulciber sentados a la mesa Slytherin. Parecían tan confundidos como el resto de los estudiantes, y Severus llegó a la conclusión de que tampoco sabían lo que estaba pasando.
En la mesa Ravenclaw, Severus pudo ver al profesor Flitwick tratando desesperadamente de contar a todos sus estudiantes. Cuando contaba, parecía que estuviera faltándole uno una y otra vez, y volvía a comenzar como si no pudiera creer del todo que estuviera faltándole uno.
Severus pudo ver que Barty Crouch estaba presente. Mientras seguía mirando con Flitwick para descubrir quién faltaba, notó que los de primer año estaban todos apretados juntos en un grupo, y entonces cayó en la cuenta.
Una vez más se escapó del gran comedor y corrió de regreso al primer piso. Lily había dicho que había sido una chica Ravenclaw quien había sido petrificada, lo que significaba que no podía haber sido Lockhart, y seguía aquí afuera en alguna parte.
Lógicamente, el primer lugar donde buscar era dentro del cuarto de baño de chicas del primer piso, ya que Severus sabía que era allí donde estaba la entrada a la Cámara de los Secretos.
Allí, su sospecha se confirmó.
'Estarás bien,' dijo una dulce voz desde cerca de los lavabos. 'Será mejor que yo- ¡QUIÉN ERES!'
Mirtle la llorona había visto a Severus, y no quedó ningún rastro de la amabilidad con la que había hablado antes.
'Hay un estudiante perdido, Mirtle,' dijo Severus con calma. 'Y creo que es el mismo estudiante con el que estás hablando en este momento.'
Sentado en el suelo contra el lavabo, estaba Lockhart, secándose los ojos con la manga de la túnica.
Era una visión casi irónica que contemplar. El hombre que una vez pretendió conocer la entrada secreta a la Cámara de los Secretos, estaba ahora apoyado contra ella, por completo ignorante del peligro que se ocultaba debajo.
'Hola, Lockhart,' dijo Severus, '¿te importa decirme por qué estás aquí cuando todos los demás están en el gran comedor?'
'¿Te importa decirme por qué tú estás aquí cuando todos los demás están en el gran comedor?' respondió Lockhart con desprecio. '¿Cómo es que sabes quién soy siquiera?'
'Recuerdo tu nombre de la ceremonia de selección,' dijo Severus, un poco cogido por sorpresa por la postura a la defensiva de Lockhart. '¿Estás dispuesto a seguirme de vuelta al gran comedor?'
Lockhart sacudió la cabeza, sus ojos todavía rojos de las lágrimas que derramó.
Severus, para irritación de Mirtle, se sentó frente a Lockhart. '¿Te importa contarme lo que está ocurriendo, entonces?'
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N/A Odio la aparición. Es una de las cosas principales que llena toda la historia de agujeros tan grandes en la trama, que es como intentar tapar un colador que gotea.
