Capítulo 79: Un nuevo comienzo

Disclaimer: No soy dueño de ninguno de los personajes de Potterverse de JKR y no gano dinero.

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Harry se deslizó por la larga acera, parecía correr al lado de una vía de tren. Todo parecía blanco: las columnas de piedra que se elevaban tan alto hasta un techo invisible oscurecido por la niebla a la deriva, el camino que se extendía interminablemente junto a las vías. Incluso los bancos de piedra.

Eso no parecía muy importante, por supuesto, mientras Harry brincaba, saltando arriba y abajo de los bancos. Sabía que conocería a alguien pronto, el conocimiento de eso había estado en primer plano en su mente en el momento en que se encontró aquí.

Por fin escuchó unos pasos que no eran de él. Se apresuró, sin seguir su pequeño juego y alcanzó a la persona. Pudo ver que la figura se detenía y giraba, esperándolo. Fue Larkin.

Harry se rió y lo agarró por la cintura, girando con el sonriente Larkin. El viejo hombre lobo se veía bien… ya no se veía cansado y no había cicatrices visibles.

"Larkin, es bueno verte." Harry se rió y se dio la vuelta, incapaz de quedarse quieto. "Te vi…" Harry vaciló, frunciendo el ceño. "... te vi morir ..."

"Si lo hiciste." Larkin respondió gentilmente. "Y tengo que continuar… a mi próxima aventura, como le gusta llamarla a Albus Dumbledore." Larkin puso su mano ya no artrítica y dolorosa sobre la cabeza de Harry. "Pero tú aún tienes mucho que hacer ... habrá alguien que te ayude con eso ..."

La niebla se esparció un poco por un lado y una puerta quedó despejada. Sombras y susurros surgieron de él. Harry no podía verlos ni entenderlos, pero Larkin claramente sí, mientras sonreía en la entrada.

Harry observó mientras Larkin caminaba ansiosamente hacia las acogedoras voces y sombras. Se giró brevemente para saludar a Harry antes de pasar. La niebla a la deriva oscureció la pared y las puertas una vez más, cuando la figura de Larkin atravesó el arco de la puerta.

Harry miró por un momento, se sintió un poco abandonado, pero Larkin había dicho que alguien vendría pronto, y sabía que eso era cierto. Era extraño que no tuviera miedo de estar aquí, solo. Debía de estar muerto, como Larkin, aunque Larkin había parecido un poco vago al respecto. Harry tarareó y caminó a grandes zancadas, pateando la niebla y riéndose de las extravagantes formas que tomó. La forma de un unicornio se convirtió en un dragón brumoso y luego en un kneazle de cola esponjosa muy grande.

Por fin escuchó pasos que venían de otra puerta tenuemente iluminada y una figura se acercó a Harry, volviéndose más clara a medida que se acercaba.

"Te conozco." Harry rió alegremente. "¡Eres mi padrino, Regulus Black!"

Regulus le devolvió la sonrisa y lo tomó de la mano. "Es bueno verte de nuevo, Harry." Regulus llevó a Harry a uno de los asientos frente a las vías y se sentaron. "Estoy aquí para asegurarme de que llegues a salvo a tu destino".

"¿Dónde es eso, exactamente, Regulus?" Harry preguntó, un poco preocupado, ahora.

Regulus señaló un poco hacia las vías y la niebla se separó, al menos lo suficiente para que Harry pudiera ver un tren allí, y la terrible forma de una criatura esquelética, seguida de seis formas más pequeñas. Las criaturas en la neblina los estaban conduciendo hacia un tren que se los llevó, sus gritos resonaban en la cámara.

"¿Qué fue eso?" Harry jadeó, alarmado por primera vez.

"Eso es lo que queda de Tom Riddle, quién se hacía llamar Lord Voldemort. Las criaturas más pequeñas son los horrorcruxes, las pequeñas piezas de su alma, que él mismo arrancó". Regulus respondió.

"¿Por qué hay seis? Él solo tenía cinco que conocíamos". Objetó Harry.

Regulus suspiró. "Cuando me mató y luego te atacó, accidentalmente hizo un sexto, que se alojó en tu cicatriz. Cuando te volvieron a lanzar la maldición asesina, éste se envió con los demás". Regulus sonrió, "Pero la maldición asesina está destinada a matar solo a uno ... no a dos, así que puedes regresar si lo deseas. No puedes ser obligado a volver ..." Un tren se detuvo lentamente mientras Regulus hablaba "... pero tu familia te extrañará si no lo haces ".

La puerta se abrió y Regulus se puso de pie, haciendo que Harry se pusiera de pie. "Entonces, ¿no tengo que morir?" Preguntó Harry.

Regulus negó con la cabeza, "Solo sube al tren, te llevará a salvo de regreso a tu vida". Regulus lo miró con una sonrisa. "... pero tengo algunos mensajes para que lleves contigo ..."

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Harry yacía acostado, luciendo muy pequeño, en su cama. Lily sostuvo a Cybele y apretó su mano a un lado. Severus se sentó al otro lado, sosteniendo la otra pequeña mano de Harry y permaneció inusualmente silencioso. Su esperanza inicial cuando Harry comenzó a respirar de nuevo se estaba desvaneciendo rápidamente.

En las pocas horas transcurridas después de la batalla, se había producido un frenesí de actividad. Lucius había reunido a los niños, recogiendo a los de la Mansión Malfoy y, entre él y Narcissa los habían calmado. James inmediatamente había llevado a Albus y al ministerio allí, haciéndose cargo de los cuerpos, y del único sobreviviente de los Mortífagos, Bellatrix.

St. Mungos había enviado un escuadrón de sanadores, afortunadamente para los granians, algunos de ellos sabían cómo tratar a los equinos, o al menos mantenerlos con vida el tiempo suficiente para que llamaran a un veterinario. Los cortes de Cardo dejarían cicatrices, pero él viviría para robar manzanas una vez más. Los huesos destrozados de las piernas de Ortiga se pudieron volver a unir. El veterinario inicialmente había tenido dudas, pero al enterarse de que él y los otros dos habían luchado y derrotado a Voldemort, había sudado hasta el agotamiento y había declarado que el granian cojearía, pero en un caballo alado eso significaba poco.

Remus había llevado el cuerpo de Larkin a Hogsmeade, para que los licántropos lo enterraran con el mayor honor posible. Fudge había insistido en que se le permitiera al ministerio colocar un monumento y Remus asintió con aire fatalista.

Los sanadores que atendían a Harry, estaban desconcertados y no tenían respuestas. Algunos ofrecieron una teoría- que la magia de sacrificio de Regulus había desviado parcialmente la maldición una vez más ... pero algo de daño había sido hecho. Dado que esto nunca había sucedido antes, no podían decir qué daño exactamente. Una mujer con una gran capacidad empática había sido empujada en la habitación, para ver qué pensaba ella. La pena y el dolor en la habitación la abrumaban, pero lo intentó.

Se volvió hacia Lily, "No siente dolor ..." ofreció la mujer, esperando que eso consolara a la madre del niño. "... pero no puedo sentirlo, no está muerto, pero tampoco parece estar realmente aquí en este momento".

Dumbledore había parecido preocupado por esto, había notado que la cicatriz del chico tenía algo diferente - ya no estaba roja, parecía vieja y casi desaparecida. Sabía que esto significaba algo, y sus temores a medio formar sobre la cicatriz lo aguijonearon. No había sido capaz de afrontar la posibilidad de un horrorcrux parcial, definitivamente era uno hecho de forma rudimentaria en el mejor de los casos, y había esperado que no fuera suficiente para retener a Tom aquí. Ahora, otro Avada Kedavra, y tanto Harry como la parte de Tom faltaban ...

Ahora, al lado de la cama de Harry, con su vida apagándose, posiblemente, no era el momento para hablar de eso.

Lucius ahora parecía que flotaba al lado de Severus, luciendo tan indefenso como se sentía. James se paró detrás de Albus y sostuvo al lloroso Charlus a su lado. Sirius había llegado junto el ministerio y se había unido a la vigilia al lado de Harry, junto con Corbin y Neville. Draco había logrado arrastrarse junto a Severus cerca de los pies de Harry, sin querer dejar a su amigo.

Lucius, sin embargo, fue el primero en notar que la respiración de Harry cambió y una pequeño gesto o movimiento. Le siseó a Severus, "Mira ..."

Todos los ojos en la habitación estaban fijos en Harry, mientras éste bostezaba y miraba a su alrededor con sorpresa. "¿Qué están haciendo todos aquí?" Preguntó, perplejo.

Lily rompió en lágrimas, asustando a Harry. Severus rescató a Harry de ser aplastado hasta la muerte por su madre, o quizás ahogado por sus lágrimas, y luego lo estrujó en un fuerte abrazo, él mismo.

Los otros niños vitorearon felices el regreso de Harry, los pensamientos de su muerte desaparecieron rápidamente.

James tomó las manos de Charlus y Neville, "Me alegro de que Harry esté bien". Le dijo a Lucius, sabiendo que era poco probable que Lily y Severus se dieran cuenta de que él se había ido, y fue por la red flú.

Los desconcertados sanadores miraron a Harry, lo declararon en buena salud y también se fueron. Albus lo miró desconcertado y dijo. "Tengo curiosidad, Harry, ¿tu cicatriz se siente diferente?" Ante la mirada inquisitiva de Severus, añadió. "Creo que Harry sobrevivió porque había un pedazo de Tom quedó atrapado allí".

Severus y Lucius parecían horrorizados, pero sus protestas ante esa implicación fueron silenciadas por Harry. "Oh, tiene razón en eso, Director. Regulus me lo explicó todo". Parecía ajeno a la bomba que les había arrojado y continuó. "Dijo que también era un horrorcrux, pero se supone que como la maldición asesina solo tomaría una vida, la magia me envió de regreso".

"¿Regulus?" Sirius se las arregló para gruñir.

Corbin no estaba tan preocupado por reprimirse, gorjeó: "¿Viste a mi padre?"

Harry asintió, "Sí, me dijo que te dijera a ti y a Sirius que está orgulloso de ustedes, y que le diga a Laurel que está contento de que ella te haya encontrado y que está bien".

Sirius se sintió un poco mareado del alivio, todavía llevaba una gran carga de culpa por su hermano. La había tenido tanto tiempo que no se había dado cuenta de cómo todavía lo había agobiaba. Se acercó y palmeó la pierna de Harry. "Gracias chico." Y arrastró a Corbin, prometiéndole que regresarían pronto. Necesitaba ver a Laurel y pensar.

"Cuéntanos lo que viste, Harry." Preguntó Severus en voz baja, acomodando a Harry contra las almohadas y colocando las mantas sobre él.

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Lily se sentó en el porche, varios días después, viendo como el último grupo de reporteros estaba haciendo mucho ruido de los Granians y Mia, la Aethonon. Narcissa la había dejado aquí, por ahora, para que la prensa los dejara en paz. Los granians se habían atiborrado de golosinas y Cardo había necesitado que lo trataran por los cólicos ... de nuevo.

Jimmy Parkin y Andrew ahora vigilaban a los granians para evitar más glotonería. Irlandés siguió a Lily o protegió a Harry tanto como le era posible. Había habido una gran turba de gente del ministerio para "ver cómo estaba Harry Snape".

Aquellos que habían estado en la habitación con Harry estuvieron de acuerdo en que era mejor dejar que el mundo creyera que la protección de Regulus todavía se había mantenido firme contra Voldemort, en lugar de que alguien mirara mal a Harry por haber mantenido durante un tiempo un pedazo del alma de un Señor Oscuro. Se hizo un pacto para mantener el y se lanzó un hechizo de restricción para que nadie hablara de ello por accidente.

Fudge, Albus y Rufus anunciaron que Voldemort había sido derrotado, esta vez para siempre. Fudge estaba feliz, había tomado la decisión correcta al respaldar a Albus y los demás. Le había resultado difícil, pero lo había logrado.

Lily suspiró y les dijo a los reporteros que la ceremonia de Larkin estaba a punto de comenzar. Se dispersaron como gallinas asustadas y, Lily llamó al resto de su familia para que tampoco llegaran tarde. El ministerio había insistido en un monumento y sus escultores y artesanos habían trabajado día y noche en él.

Lo habían visto anoche, para dar su aprobación. Los Malfoy dijeron que era insoportablemente exagerado, Severus se había quedado sin habla por el horror y Lily tuvo que admitir que era… un poco demasiado. A los niños les encantó, por supuesto, e insistieron en que era "maravilloso".

Todos utilizaron trasladores para llegar a un área segura cerca del monumento. Cornelius pronunció un sofocante discurso lleno de elogios por el coraje y la dedicación de Larkin como líder de manada. Remus y Andrew le hicieron un breve pero sincero homenaje y la fuente fue descubierta. La tumba de Larkin estaba justo en medio, cubierta por la estatua.

Dos enormes granians mostraban encabritados, con las alas extendidas y un Aethonon parado en el medio con las alas plegadas, mirando imperiosamente a la multitud. Larkin se encontraba parado frente a ella, con sus brazos rodeando a tres niños de manera protectora. Un kneazle descansaba a sus pies, luciendo demasiado arrogante considerando lo intimidante que se suponía que debía ser la estatua.

Los artesanos tenían la intención de que solo estuviera Harry parado frente a Larkin, pero Severus insistió en que hubiera más de uno y que ninguno se pareciera exactamente a Harry. Este estaba destinado a ser el memorial de Larkin, no uno de "El niño que vivió". Así que había dos niños y una niña, generalmente niños bonitos, mirando inocentemente al mundo.

Las figuras estaban rodeadas por una pequeña piscina de agua con chorros saliendo alegremente (o sea, es una fuente). A Severus le dieron ganas de vomitar, aunque admitió que habían captado de forma puntual la teatralidad exagerada de Ortiga y Cardo, y la majestuosa mirada de Mia también se reproducía perfectamente en el Aethonon. Harry había insistido en que se incluyera al Irlandés, y el kneazle se parecía a él, en su forma más desdeñosa. Larkin, por supuesto, siempre lucía tan bondadoso como lo hacía parecer la estatua, a menos que estuvieras amenazando a sus seres queridos.

Severus supuso que podría ser peor. Miró a Lucius, que tenía una expresión de dolor en su rostro. Lucius prefería que las tumbas y memoriales fueran más modestos. Miraron a la multitud asombrada; los jóvenes, por supuesto, amaban a los caballos alados y gritaban felices. Lily le dio unas palmaditas en el brazo.

"A Larkin le habría encantado que los niños disfrutaran de la fuente y los caballos, incluso si es muy ... grande". Dijo Lily.

Por fin escaparon y se fueron a casa con la esperanza de pasar una tarde tranquila. Las cosas se calmaron en el mundo mágico durante las siguientes dos semanas, interrumpidas solo por la noticia de que Bellatrix había muerto. La noticia de que su Señor estaba muerto, realmente muerto esta vez, la había destrozado. Ella había sobrevivido solo dos días después de que finalmente la enviaran a Azkaban. Narcissa la había enterrado en la parcela familiar, ella y Andrómeda eran sus únicos dolientes; no dejaron que ni Lucius o Ted los acompañaran al entierro de su hermana.

Se habían parado junto a la tumba, recordando a la niña una vez feliz. Ella había estado un poco fuera de lugar, incluso entonces, pero no cruel ni salvaje. Sus padres habían permitido que eso sucediera, entregándola a la oscuridad y al Señor Oscuro. No tenía por qué haber sido así. Bellatrix podría haber sido diferente si sus padres la hubieran ayudado en lugar de ayudar a destruirla.

Colocaron una pequeña lápida y colocaron las flores, espuelas de caballero y orquídeas en la tumba, las flores que Bellatrix tanto había amado de niña, y luego se fueron.

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Albus observó a la banda del primer año ese septiembre mientras avanzaban para ser sorteados. James se sentó a la mesa, tenso. Este año se ofreció como profesor de DCAO, estaban seguros de que la maldición se había roto con la muerte de Voldemort, pero el ministerio quería estar seguro, así que iban a ver si era cierto y un Auror podía sobrevivir durante más de un año.

Severus y Lucius se sentaron al otro extremo de la mesa; habían negociado un acuerdo de enseñar algunas clases especiales a cambio de poder ver la selección hoy.

Las chicas Abbott y Bones fueron las primeras, entraron en Hufflepuff, y cualquiera podría haberlo predicho. Longbottom y el chico Potter entraron al trote en Gryffindor como se esperaba. Corbin pasó uno o dos minutos bajo el sombrero y luego se dirigió a la animada mesa de Hufflepuff. El sombrero gritó "¡Slytherin!" incluso antes de tocar la cabeza de Draco, haciendo sonreír a Lucius al recordar su propia selección. Llamaron a Harry Snape y las mesas se quedaron en silencio, observando con atención. Harry se sentó por unos momentos con el sombrero luciendo desconcertado y finalmente refunfuñó "Ravenclaw". Harry saltó y se dirigió a la mesa asombrada que vitorearon felices mientras se sentaba.

"Entonces lo lograron, Lucius." Severus dijo con una leve sorpresa.

"Sí", agregó Lucius, "Dijeron que ellos y sus amigos iban a entrar en todas las casas, insistieron en que entre ellos podrían mantener todas las casas unidas, empiezo a pensar que lo lograrán".

Albus sonrió, escuchándolos con bastante claridad. Sí, era un nuevo día, sin nubes oscuras o Señores Oscuros para el caso, en el horizonte. Oh, uno vendría algún día, siempre lo hacían. Sin embargo, Harry y sus amigos estarían listos para ellos.

Albus se puso de pie y pidió que comenzara el banquete.

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N / A - Por fin, el final. Tardaron casi tres años, ¡pero aquí estamos! Espero que lo hayas disfrutado, he aprendido mucho escribiéndolo.