- Ahí viene Izumida-senpai.

- Cuidado, que no la vean o les destrozará los dientes.

- No de nuevo… - Izumida se había hecho fama entre los de primero, más que nada por su apariencia de delincuente, por más que ella quiso arreglarlo, solamente empeoró las cosas. – No creo que esto logre resolverse de algún modo… pero no importa. – Sonrió por debajo, recordó lo sucedido anoche con aquel chico que la ayudó a pelear, quizás hasta ahora el único que le ha visto como una chica. – (Quiero volver a verlo…)

- ¡Ey Kureiji, vuelve aquí! – Hubo un pequeño altercado, observó a alguien huir de unos chicos que le perseguían. - ¡Que te detengas!

- ¡Lo siento pero no puedo, ustedes empezaron por querer acosar a ese chico! – Ella se sorprendió, era el mismo chico que la ayudó, no pudo evitar avergonzarse. - ¡Cuidado!

- ¿Eh? – Ella reaccionó y estiró su puño por puro reflejo, deteniendo de un golpe al trío de chicos que perseguían al peliazul, eso sorprendió y aterró a los de primero a su alrededor.

- ¡Esos pobres fueron lastimados!

- ¡En serio es una delincuente!

- Eh, esto…

- Que mierda… - El que parecía ser el líder levantó la mirada, observando la amenazadora figura de la pelimorada. – Izumida… senpai…

- ¿Estás bien?

- ¡Nos va a destrozar!

- ¡Huyan! – Y totalmente asustados corrieron lejos, dejando a la pobre con la mano estirada.

- Otra vez pasó…

- Eso estuvo cerca. – El chico se limpió el sudor, entonces la miró. – Oh, eres la misma que ayudé la noche pasada, así que eres mi senpai.

- Tampoco creí que estudiaras en Satogahama, gracias por lo de anoche.

- No es nada. – Este sonrió levantando el pulgar. – No puedo evitar meterme si alguien está en problemas, así que hago todo lo posible por ayudar.

- Ya veo, aunque creo que me las arreglé sola.

- Eso no es verdad. – Exclamó este. – No es de un hombre el abandonar a una dama en apuros. – La pelimorada se sonrojó.

- (Dama…) B-Bueno… gracias por todo.

- No es nada, ya entonces eres mi senpai, soy de primer año, Kureiji Eizan.

- Izumida Kyoka, no sé si habrás escuchado esos rumores sobre mí…

- Lo he hecho y la verdad, exageran bastante, eres mucho más femenina de lo que he visto, con solo el hecho de trabajar en una florería.

- … ¿En serio? Jeje… - Escondió su sonrisa. – Solamente es un trabajo a tiempo parcial, como necesito dinero para obtener mejor equipo de béisbol.

- ¿Estás en un equipo? Eso no lo sabía.

- Deberías ir a vernos en algún momento, tendremos un partido pronto, por mi parte, me gustaría que nos animes.

- Claro, no sé mucho de ese deporte, pero si es por apoyar, iré con gusto.

- Me alegra, es hora de irme, nos vemos. – Se despidió de Eizan, estaba realmente feliz de verlo y saber que era su Kouhai. – (Es la primera vez que me siento de esta forma… realmente deseo llegar a conocerlo mejor…)

- ¡Alto ahí, tienes la corbata desatada! – Tsukishima estaba en la entrada, ella no formaba parte del comité disciplinario pero ya era una especie de ritual el que vaya arreglando a los alumnos que se vean con una imagen mala. – Tienes que acomodártela.

- E-Entendido… - Exclamó el chico que estaba asustado de la pelinegra, esta soltó un suspiro.

- ¿Qué les pasa? Los de primero se supone que deberían estar más motivados… - En eso vio a un chico con el peor aspecto que pudo haber encontrado, su camisa totalmente arrugada, pantalones sin cinturón y su corbata desarreglada, incluso su cabello estaba revuelto, casi al verlo le daba un infarto. - ¡¿Qué le pasa!?

- ¿Eh? ¿Sucede algo? – Expresó este con rostro de desgano, la pelinegra apretó el puño.

- ¡Tienes que guardar una buena imagen para nuestra escuela, arregla esas pintas ahora mismo!

- … No quiero. – Tsukishima gruñó por debajo.

- ¿No quieres? ¿Sabes que cada uno de nosotros representa a nuestra escuela frente a la sociedad? Tenemos que vernos lo mejor posible, ser personas ejemplares.

- Hablas demasiado, eres como una vieja histérica. – Una vena apareció en su frente.

- ¿Vieja histérica? Tu eres el que parece vagabundo de calle.

- Si no tienes nada qué decir, me voy. – Estaba por retirarse pero la pelinegra lo tomó del brazo. - ¿Qué rayos haces?

- No puedo permitir que des esa imagen, así que te arreglaré a la fuerza. – Y se lo llevó arrastrando muy a pesar de sus quejas. Entraron a un salón para sentarlo contra su voluntad.

- ¿Qué haces? – Se quejó este, ahí Tsukishima cerró la puerta con candado. - ¡Oye!

- No escaparás de aquí, no hasta que te veas más presentable. – Sacó de entre sus dedos un peine, unas tijeras, rociador para el cabello y más artículos de belleza. – Prepárate para sufrir una transformación total.

- ¡E-Espera, no hagas esto sin mi consentimiento, esto es violación!

- Grita todo lo que quieras, nadie vendrá a tu ayuda. – Tenía una sonrisa segura en su rostro. El pobre chico se quedó totalmente indefenso mientras ella hizo todo el trabajo, pasada una hora, admiró su obra. – Perfecto, ahora eres la viva imagen de la disciplina.

El chico ahora tenía una mejor pinta, su cabello totalmente acostado con gel, una camisa planchada y arreglada, su corbata bien puesta, pantalones totalmente limpios y zapatillas igual, se veía totalmente pulcro.

- ¿Es en serio? Me veo bien ñoño.

- Que importa, esta es mi visión de un estudiante ejemplar de nuestra escuela. – Para su sorpresa, el chico se desarregló el cabello totalmente. - ¡Que haces!

- No quiero verme como un nerd. – Se sacó la camisa interior del pantalón y el cuello. – Así está mejor.

- Todo mi trabajo… - Se puso de rodillas. – Y yo que me esforcé.

- Escucha, si piensas hacer esto con todos, solamente conseguirás caerles mal.

- No me importa, solo quiero que todos den una buena imagen de la escuela, que tengan disciplina. – El chico soltó un suspiro.

- Eres alguien increíblemente terca.

- No eres quien para decírmelo… así deba hacerlo a la fuerza, arreglaré todo rastro de indisciplina en esta escuela. – Declaró con seriedad, tanto que al chico le parecía gracioso, escondiendo una risa. - ¿De qué te ríes?

- No es nada… es solo que eres inusualmente seria en algo tan trivial… como sea, aprecio un poco que arreglaras mi imagen pero no quiero verme tan limpio, aunque creo que dejaré un poco esta limpieza en mi uniforme, así que al menos aprecio aquello. – Sonrió, eso sorprendió a Tsukishima la cual se sonrojó un poco.

- ¡N-No es nada! Solamente hice mi deber, eso sería todo. – Se cruzó de brazos desviando la mirada.

- Es cierto que no me he presentado, soy Matsuoka Ikki.

- Tsukishima Yui, recuerda que tarde o temprano haré que estés bien arreglado.

- Veremos eso Tsukishima-senpai. – Así se conocieron ambos, donde la pelinegra buscaría llevarlo por un camino en el que se viera presentable, y donde quizás cambien otras cosas.

Akino estaba descansando encima de un árbol, ahí su ardilla mascota comía una bellota, había buen viento lo cual causaba que se relajara bastante.

- Es un día tranquilo… ¿no lo crees Lou-chan? Me dan ganas de dormir aquí, quizás deba saltarme las clases de la tarde… - En eso ella comenzó a moverse, su ardilla le empezó a advertir de algo pero fue demasiado tarde, se cayó del árbol. - ¡Waaah!

- ¡Aaauch! – Sin querer acabó cayendo sobre alguien en ese momento.

- Mi trasero… ¿eh? ¿Sobre quién caí?

- Esto… ¿podrías quitarte de encima? – Era un chico, la morena se dio cuenta, apartándose al instante.

- ¡Lo siento, me relajé demasiado! – Comenzó a disculparse.

- No es nada… pero si es algo peligroso que duermas sobre los árboles ¿eres una especie de mono por así decir?

- ¡No soy un mono! – Reclamó haciendo un puchero, Lou-chan pareció esconder su risa. - ¡Lou-chan, no te rías!

- No quise decirlo de esa forma, pero si que estás demasiado relajada.

- Bueno… en un día como este con un viento tan rico, es inevitable.

- Es verdad, incluso lo pensé de esa forma. – Respondió este. – Pero si que eso dolió, mi espalda aun duele un poco.

- ¿Necesitas algo? Quizás pueda ayudarte a aliviarlo.

- Gracias, pero estaré bien, tengo un poco más de resistencia de lo que se ve. – La morena asintió. – Por cierto… escuché algo de saltarte clases. – En eso ella empezó a sudar.

- Esto… no es que me esté escapando realmente, en ocasiones quiero darme un descanso de las pesadas clases y…

- Descuida, no diré nada, a decir verdad… yo igual tenía pensado lo mismo. – le susurró, la morena se sorprendió.

- ¿En serio? Entonces eres como yo. – Sonrió mientras sujetaba su mano. – Finalmente tengo un compañero de crimen, desde que Emi-chan dejó de ser una holgazana ahora que tiene novio, me he sentido algo sola. Ahora ya podré compartir una vez más la sensación de ser una floja con alguien.

- Me alegra. – Sonrió el chico. – No está nada mal el relajarse de vez en cuando.

- Eso, me entiendes totalmente. – Expresó ella con brillo en los ojos. – Soy Akino Komugi.

- Sanosuke Kanno, de primero.

- Oh, entonces eres de un año menor que yo, eso me hace tu senpai tanto en la escuela como en el arte de ser holgazán, seguro aprenderás mucho de mí.

- Espero fervientemente tus enseñanzas, Akino-senpai. – Exclamó este, la morena finalmente tenía un nuevo compañero para relajarse, algo que apreciaría mucho más adelante.

- Escuchen todos. – Taiga reunió a todo el equipo luego de acabar el entrenamiento, ya una vez las chicas estuvieron ahí, comenzó a hablar. – Finalmente se acerca el día de nuestro siguiente partido, ya saben que, por el sorteo de grupos, la academia Meijou serán nuestras rivales.

- Es el equipo de esa idol ¿no? – Preguntó Takuto, el castaño asintió.

- ¿Una idol? ¿Nos enfrentaremos a esas chicas superficiales que solo les sonríen a todas como si de putas baratas se trata? – Preguntó Honjou, todos soltaron gotones de sus frentes.

- ¿Tienes algo contra ellas Honjou-senpai? – Preguntó Tsubasa, la pelivino desvió la mirada.

- No realmente es solo que… una vez quisieron reclutarme para una unidad, lo probé pero solo para descubrir que la industria está llena de zorras que hacen favores para ganar puestos.

- Mejor dejemos el lado oscuro de la industria, nuestra ocupación ahora es estar listos para el siguiente partido, si logramos ganar, eso nos abriría paso en los cuartos de final para el torneo.

- ¡Vamos a darlo todo y divertirnos! – Animó Tsubasa a lo que todos la siguieron. Luego de la reunión, Taiga llamó a Nakano para lo habitual, ella asintió pues ya conocía su trabajo.

- Descuida Shimazu-kun, seré mejor que muchos otros paparazis que seguro siguen a esa idol, nadie me descubrirá.

- Gracias, realmente necesitamos obtener la información sobre su equipo, así como su estilo de juego para armar una estrategia con Waka.

- Me pondré en camino, espera noticias pronto. – La castaña se fue en ese momento, ya quedando solo con Takuto.

- Llegó la hora ¿eh amigo?

- Claro, esta vez estamos llegando mucho más lejos que en la primera ocasión, me aseguraré de llevarlas hasta la final y más que eso, ganar el torneo.

- Es nuestro trabajo, vamos a darlo todo. – El castaño asintió.

En otro lado, justamente en la academia Meijou estaba pasando algo, un concierto estaba ocurriendo.

- ¡Miyo-chan! – Varios hombres estaban reunidos mientras una chica de cabello verde atado a una coleta estaba cantando.

- ¡Gracias, aprecio totalmente su apoyo!

- ¡Miyo-chan! – Todos estaban emocionados, cuando ella terminó, salió del escenario.

- Buen trabajo Miyo-chan. – Exclamó una chica, esta sonrió.

- Gracias, ahora quisiera volver a mi camerino.

- Claro, descansa. – Ella se movió saludando a miembros del staff en el camino, al entrar, su rostro cambió.

- Finalmente terminó… - Se dejó recostar sobre el sofá. – Esto realmente me agota, complacer a sucios cerdos como esos que simplemente se masturban pensando en mí, que asco. – Le dio escalofríos, en eso revisó su teléfono, tenía mensajes. – Así que llegó la hora del partido… menos mal, no hay nada mejor para aliviar este estrés de ser una idol que destrozando sueños de otras chicas. – Sonrió de forma malvada. – Satogahama ¿eh? Los usaré para aliviarme, disfrutaré totalmente cuando los arrastre por el suelo como las sabandijas que son.

Ozaki Miyo, una famosa idol y representación de Meijou, delante de las cámaras era alguien distinta pero su verdadero ser yacía en lo profundo, ella haría todo lo posible por acabar con las esperanzas del equipo para avanzar.

El partido estaba pronto a llegar y se vería un gran desempeño de ambos, solo el tiempo diría cual sería el resultado al respecto.

Nombre: Eizan Kureiji.

Edad: 15 años.

Apariencia: Un joven de cabello rubio, ojos rasgados, sus dientes parecen colmillos por los afilados y puntiagudos que son, su complexión es promedio, cuando no lleva el uniforme, anda con playeras holgadas y pantalones.

Personalidad: Alguien que totalmente accede a ayudar a otros, aunque eso pueda meterlo en problemas, tiene un sentido de la justicia bastante fuerte, nunca abandona al débil y siempre busca proteger a otros cuando se necesite, respeta igualmente a las mujeres.

Nombre: Ikki Matsuoka.

Edad: 15 años.

Apariencia: De cabello negro desarreglado, ojos oscuros con ojeras en ocasiones, es alguien que no cuida mucho su apariencia, llevando siempre las camisas medio abiertas o los pantalones caídos.

Personalidad: Alguien que prefiere llevar su ritmo, no soporta demasiado el orden o disciplina, así que le encanta molestar a gente que sea demasiado aplicada, bromea y también se divierte, mayormente le gusta ver las reacciones de ese tipo de personas ante sus hábitos.

Nombre: Kanno Sanosuke.

Edad: 15 años.

Apariencia: Cabello magenta, ojos de color amarillo, su complexión es bastante promedio y, además del uniforme, le encanta llevar pantalones cortos con camisas abotonadas, mayormente holgadas.

Personalidad: Un joven que lleva todo de forma relajada, se puede decir que es algo flojo, normalmente se salta algunas clases pero, por alguna razón, se las arregla para sacar buenas calificaciones, un joven que aprecia la naturaleza y le gustan los animales.

Ninja Britten 11: Como ahí Kojou sintió la confianza con Tomoe, pues por eso escogió esa película jaja y pues ya Honjou anda bien desatada en su perversión la verdad.

El Redentor 777: ya así como Kojou fue quien se divirtió y por el lado de Honjou y Kiribe tienen otro tipo de diversión jaja, ya les va dando consejos a ellos.

Bueno, en este cap tuvimos a varias chicas y también nuevos encuentros, ya se viene entonces el siguiente partido, a ver como es que les irá con ese equipo que esa idol no se guardará nada, nos vemos en el próximo cap. Saludos.