¡Hola!
Esta vez he decidido subir una adaptación con los personajes de Kimetsu no Yaiba del increíble dorama "What's Wrong with Secretary Kim?" del 2018. Dos series que puedo decir me tiene más que fascinada, así que no puede evitar iniciar esta adaptación. Y como buena adaptación esto incluye Ooc, situaciones irreverentes, un mundo alternativo, pero sobre todo Ooc.
La pareja principal sera SaneNezu (un shipp que ame desde el capitulo 204) y que pensé eran perfectos para esta adaptación, unos toques de GiyuShino, InoAoi e Iguro x Mitsuri (no recuerdo el nombre de este Shipp XD).
Así que sobre advertencia no hay engaño. Si no te gusta el shipp, esta bien, en el mundo hay espacio para todos los gustes, pero espero que seamos lo suficientes maduros como para ignorar este trabajo y leer algo de la pareja que si les guste. A los que se queden a leer este trabajo, espero disfruten este largo viaje y que al menos esta historia los ayude a separarse un poco de la dura realidad en la que estamos.
El anime / manga Kimetsu no Yaiba le pertenece a Gotoge-sama y al estudio Ufotable. Así mismo el k-drama "¿Qué le pasa a la secretaria Kim?" le pertenece a la cadena de televisión coreana TvN.
La portada fue hecha por mi. Créditos a todos los autores de las imágenes de Sanemi y Nezuko, la verdad estuve un día completo buscando sus autores pero jamas los puede encontrar: c, todos los créditos son suyos. Si alguien sabe el nombre de alguno de los autores le estaría muy agradecida.
Lo se mucho texto, pero necesita dar las advertencias y los créditos. Ahora si disfruten.
.
Shinazugawa Sanemi tiene la apariencia y habilidades perfectas, el es el ambicioso Vicepresidente de Unqui Group, un corporativo sumamente exitoso. Sanemi siempre ha tenido a su lado a su secretaria altamente capaz Kamado Nezuko.
Pero los malentendidos surgen cuando ella le dice que renunciara a su puesto, después de 9 años de trabajar para él. Sanemi decide hacer todo lo posible para asegurar de que Nezuko permanezca a su lado mientras se da cuenta de cuanto necesita a su secretaria.
.
¿Qué le pasa a la secretaria Nezuko? - Cap. 1
Shinazugawa Sanemi acomodo su traje color negro mientras bajaba de su lujoso automóvil, sin mirar al vallet parking que le había abierto la puerta siguió su camino por el lujoso hotel hasta la reunión a la que había sido invitado. Cuando pasaba todas las personas a su alrededor se giraban a verlo, las mujeres comenzaban a susurrarse entre ellas mientras le sonreían coquetamente, los hombres lo miraban con admiración.
-Vicepresidente del grupo Unqui Group, Shinazugawa Sanemi. Después de convertirse en Vicepresidente, aumentó las ganancias en más del doble de lo que su corporativo ganaba.
Si no estaba tan molesto quizás la situación habría subido el ego hasta el infinito, todos querían ser como él, y Sanemi no los podía culpar. Era perfecto, desde niño sus padres siempre se lo había dicho, tenía el cuerpo perfecto, una sonrisa encantadora, un atractivo rostro y sus ojos color púrpura podía hacer que las mujeres se rindieran ante él. Su cabello blanco perfectamente peinado hacia atrás destacaba cada uno de sus rasgos masculinos, su corbata estaba perfectamente acomodada y los trajes le sentaban de maravilla. ¡Por el amor de dios! Era el jodido vicepresidente de uno de los corporativos más importantes del país. Lo tenía todo.
O al menos así pensaba hasta hace unos días.
-Por eso fue seleccionado como el número uno y más exitoso, entre los CEO's más jóvenes. Tiene un cuerpo perfecto, cara atractiva y los trajes parecen que fueron hechos para que él lo utilizará. En pocas palabras él lo tiene todo.
Lo único que no parecía concordar con su perfecta apariencia era el ceño fruncido que su rostro tenía. Pasaba de la gente sin importarle quienes eran o si querían hablar con él. Revisó su reloj para ver el tiempo que tenía antes de volver a casa. Necesitaba descansar para aliviar el dolor de cabeza que tenía.
-Pero, hay rumores de que no deja que ninguna mujer lo toque.
-Is true.
Una hermosa joven de largos cabellos castaños rio mientras cruzaba las piernas, el corto vestido negro que utilizaba resaltaba su piel pálida -Eso no tiene sentido. En realidad, he estado saliendo con él recientemente- todos la miraron sorprendidos -Claro, no me deja tocarlo- susurro mientras jugaba with a de sus mechones de pelo.
Las puertas del restaurante fueron abiertas y por ella ingresó Sanemi claramente molesto. Sus inmediatamente alzaron los brazos para que él los viera. La joven de cabellos castaños se levantó emocionada -¡Cariño! - gritó emocionada mientras le sonreía.
-¡Vicepresidente!
Sanemi paso de largo de ellos y se dirigió al sofá de cuero negro que estaba en una de las esquinas del restaurante, donde podía tener unos minutos a solas sin tener que soportar a gente que solamente quería quedar bien frente a él. Se sentó en el sofá con elegancia y colocando su mentón sobre sus manos, comenzó a reflexionar.
-¿Por qué ella hizo eso?
-¿Qué? - preguntó la castaña. Sanemi ni siquiera se inmuto ante su presencia, sabía que una vez que él no se sentará con los demás ella vendría con él.
-¿Por qué la secretaria Nezuko hizo eso? ¿Por qué es así?
.
Kamado Nezuko caminaba con paso firme por el largo pasillo que conducía desde los jardines hasta la mansión de su jefe. El día era soleado y ella podía sentirse relajada antes de comenzar otro día más en la oficina. En su hombro derecho colgaba una de las tantas bolsas que tenía en su armario y su mano sostenía la Tablet con todos los horarios del Vicepresidente. Vestía lo más ligera que podía, necesitaba poder moverse rápidamente si salía alguna emergencia, su blusa de maga larga de color blanco era ligera y le permitiría respirar a su piel, tenía una falda lápiz de color crema que le llegaba dos dedos arriba de la rodilla .
El sonido de sus tacones del mismo color que su falda resonaban por la silenciosa mansión y su impecable vestimenta se reflejaba en las puertas de cristal que daban al inmenso jardín. La cola de caballo que era parte fundamental de su look rebotaba de un lado a otro, meciendo sus largos cabellos negros. Sin pedir permiso se adentró a la habitación del Vicepresidente, camino hasta el cuarto que consistía de su armario y selecciono el traje que su jefe utilizaría.
Opto por un modelo sencillo de color azul marino, unos zapatos de diseñador color negro, una corbata azul que seguramente valía su salario y uno de los tantos costosos relojes que Shinazugawa-sama tenía. Cuando el Vicepresidente salió de su habitación vestido, ella se acercó a él con una sonrisa y una taza de té.
Colocó la corbata alrededor de su cuello y prosiguió a amarrarla perfectamente, tantos años de práctica la actividad hecho una profesional -Hoy he preparado una corbata monótona que va con una imagen intelectual y moderna- comentó mientras miraba satisfecha el resultado de su trabajo.
-Me agrada.
-Gracias- Nezuko lo siguió y ambos salieron de la habitación no sin antes recoger su saco.
Sanemi se terminaba de arreglar mientras su secretaria acomodaba su corbata. Se miró en el espejo que estaba en la sala de estar. Abrocho su reloj y quedó satisfecho con la imagen que veía.
-¿No es genial? - preguntó a su secretaria quien inmediatamente lo vio con una pequeña sonrisa.
-¿Qué cosa?
-El aura que emana de mi- elevo los brazos para señalarle a Nezuko a lo que se refería.
La pelinegra miró a su jefe con los ojos abiertos, estaba tan acostumbrada a que fuera tan dramático. Se giró para tomar la Tablet y después sonrió -Si, es cegadora. Esta es la agenda para hoy.
Sanemi tomó la Tablet para comenzar a leer las actividades del día, un minuto después asintió mientras le regresaba la tableta a su asistente. Antes de que pudiera decirle alguna cosa un teléfono sonó y Nezuko disminuyó su sonrisa, Sanemi alzó una ceja y dejó que su secretaria se explicara.
-Es el ejecutivo Kim, ¿Debería contestarle?
-No, seguro que dirá que el contrato en Vietnam no fue bien. No quiero escuchar ese tipo de historias y arruinar mi ánimo esta mañana.
-¿Es un pecado?
-Los pecados no solo incluyen herir a otros o robar. La incompetencia es uno de ellos, así mismo el ser ignorante de tu ignorancia es un grave pecado- Nezuko asintió mientras sonreía -¿Secretaria Nezuko, de casualidad lo sabes?
-¿What?
-¿Como puede una persona ser incompetente?
-Tienes razón.
-Intentar y lograrlo, es simple. ¿Por qué no pueden hacerlo?
-Umm… No todas las personas son como tú, Vicepresidente.
-¿Eso crees? - Sanemi cruzó los brazos. El saco marcando cada uno de sus músculos.
-Por supuesto. En toda mi vida, nunca he visto a alguien tan perfecto como tú, Vicepresidente.
Sanemi sonrió mientras asentía, y nuevamente antes de que pudiera decirle algo a su asistente su teléfono volvió a sonar -¿Quién es?
Nezuko simplemente sonrió -Es una persona que ha cometido un gran pecado. ¿Cómo debería hacerme cargo?
El peliblanco simplemente suspiro mientras frunció el ceño. Hoy sería un día largo.
.
-Hemos llegado- Nezuko anuncio mientras desabrochaba el cinturón de seguridad. Por el espejo retrovisor pudo ver como Shinazugawa-sama inhala profundamente antes de abrir los ojos y colocar esa máscara de seguridad y frialdad que siempre mostraba cuando estaba trabajando.
Ella fue la primera en bajarse del automóvil inmediatamente por el Vicepresidente, dos empleados le abrieron la puerta al futuro presidente de Unqui Group permitiéndole el paso, Nezuko camino detrás de él estando atenta a todo a su alrededor. Mientras pasaban con a las oficinas de los directivos todos los empleados comenzaban a realizar una reverencia en manera de saludo para Shinazugawa-sama.
Cuando llegaron a la oficina del pobre diablo que se había atrevido a provocar la furia de Shinazugawa-sama el no dudo ni un segundo y abrió con fuerza las dos puertas. Nezuko entró inmediatamente después que el peliblanco cerrando las puertas con cuidado. El pobre director saltó del miedo cuando vio el ceño fruncido del Vicepresidente y comenzó un temblar mientras intentaba explicarse.
-¡Vicepresidente! Es un malentendido. Un malentendido.
-Durante las horas de trabajo, ¿Tiene sentido que salgas para obtener favores sexuales? - Sanemi dijo dejando entrever toda la ira que sintió. El estúpido tipo había corrido desde su escritorio hasta quedar frente a él. Sanemi tenía muchas ganas de matarlo en ese mismo momento, guardó las manos en los bolsillos de su pantalón y comenzó a caminar de un lado a otro tratando de controlar las ganas de golpearlo. -Como director ejecutivo, ¿No piensas en la imagen de la compañía?
-L ... Lo siento.
Nezuko realizó una mueca mientras leía el título de uno de los tantos artículos que circulaban en internet. "Ejecutivo de grupo" M "descubierto recibiendo servicios sexuales durante horas laborales". Ella podía entender perfectamente porque el Vicepresidente estaba tan enojado, ella lo estaba. Solo podía rezar para que el equipo de recursos tuviera la suficiente inteligencia para borrar todos los artículos y controlar el escándalo.
-¡Secretaria Nezuko!
Tanto ella como la otra chica, secretaria del director, saltaron cuando escucharon la voz claramente enojada de Shinazugawa-sama -¡Si!
Ingresó en la amplia oficina y caminó hasta quedar un costado del Vicepresidente. Ella pudo ver como rebuscaba algo en los bolsillos internos de su saco -Siguiente reunión- prácticamente exigió ligeramente irritado.
-Hay una reunión ejecutiva en el nuevo edificio.
Sanemi asintió mientras sacaba un cigarro de la cajetilla que habitualmente traía consigo. Lo colocó en sus labios y cuando estaba intentando prender el encendedor Nezuko se lo arrebató. El la miró molesto y ella le sonrió.
-Sabes que está prohibido fumar dentro de las instalaciones.
El peliblanco realizó una mueca y al sentir la mirada del estúpido empleado que lo había orillado a casi romper una de sus reglas, giro su rostro para verlo fijamente. El cobarde bajo la mirada mientras temblaba, el resoplo mientras salía de la habitación.
-¡Vicepresidente, Vicepresidente, Vicepresidente!
Al ver que el joven peliblanco salía por las puertas sin mirarlo siquiera, el director se dejó caer de rodillas mientras lloraba. Nezuko sintió un poco de lástima por él, se acercó hasta su cuerpo tembloroso y colocó una mano sobre su espalda.
-Director ejecutivo Jo, no se ponga demasiado triste- dijo con la voz más tranquila posible. El hombre alzó su rostro para mirarla, las lágrimas corrían por sus mejillas y su tez era pálida -Con la cancelación del proyecto y ahora el artículo de servicios sexuales, el vicepresidente tenía muchas expectativas y se ha decepcionado, así que está así de molesto. Para ser honesta, intenta detener que el nombre de nuestra compañía se divulgue por estos artículos. Debe comprender que fue especialmente difícil para el Vicepresidente.
-Secretaria Nezuko, ¿Por qué hice eso? Debí haber sido poseído por algo.
-Espero que no lo olvides para la próxima, debería reflexionarlo para poder vivir mejor de ahora en adelante. ¿Qué le parece irse temprano hoy y descansar un poco?
El director ejecutivo sonrió sinceramente -¿Debería hacerlo?
Nezuko asintió con una gran sonrisa, llena de amabilidad y comprensión. El director ejecutivo se colocó de pie y sacudió su traje.
-Seré más cuidadoso a partir de mañana- Nezuko asintió mientras veía como el hombre pasaba a un lado suyo solo para detenerse frente a su secretaria -Secretaria Im, me iré primero del trabajo.
La temblorosa secretaria se giró para ver a su superior tan tranquila -Disculpe, ¿Esto significa que aún puede seguir trabajando?
Nezuko solamente sonrió antes de realizar una llamada que esperaba su compañera comprendiera -Háganse cargo de todo el escritorio y posesiones del director ejecutivo Jo inmediatamente- ordenó por teléfono con la voz seria. Se giró para ver a la pálida chica y le dedicó otra sonrisa -¿Alguna vez has visto al vicepresidente dar segundas oportunidades?
Sin detenerse otro segundo Nezuko salió de la habitación, tenían una junta a la que llegar.
.
-Después de absorber un negocio coreano de tercer rango con potencial de expansión global, en cinco años, la meta es hacerlo el negocio número uno nacionalmente y que esté en el top diez entre los negocios globales.
Iguro Obanai, el más importante de los directivos y mejor amigo de Sanemi, explicaba a sus compañeros mientras sentía la mirada de su amigo. Su dulce secretaria anotaba atentamente los datos importantes para realizar un informe a su amigo. Si no estaba tan acostumbrado seguramente estaría temblando de miedo ante la mirada tan malvada de esos ojos púrpuras. El día de hoy había elegido uno de sus mejores trajes y su cabello estaba peinado hacia atrás, tal como el código de vestimenta determinaba.
-Después de anunciar que adquiriremos el negocio de aerolíneas global, para darle movimiento, estaremos buscando activamente relaciones y tomando vuelos de América, Indonesia y Vietnam. Si ven un ejemplo representativo en el plan de negocios, ya que los bienes están en 2.24 trillones de yenes y las obligaciones son de 0.94 trillones de yenes, las ganancias a futuro serán gigantes, alrededor del 275%.
Sanemi alzó una ceja -215.319149.
Todos los ejecutivos se giraron para ver al Vicepresidente quien cruzaba los brazos, Nezuko sonrió mientras corregía los números.
-¿Qué? - pregunto Iguro sin comprender a qué se refería su amigo.
-Si los bienes son de 2.24 trillones de yenes, y las obligaciones actuales son de 0.94 trillones de yenes, ¿La ganancia no debería ser del 215.319149, director Iguro?
Obanai se giró para ver la diapositiva proyectada y suspiro -Tienes razón, tienes razón. Me pregunto por qué los cálculos están…
-Adelante con la adquisición. Terminamos la reunión- ordenó Sanemi antes de ponerse de pie y salir de la sala de juntas seguida por su secretaria.
Todos en la sala dieron un suspiro de alivio, la tensión de la habitación había disminuido considerablemente, al mismo tiempo la mayoría se dejó caer descuidadamente en sus asientos.
-Esto parece una guerra en lugar de una junta- comentó uno de los directivos más jóvenes. Su compañero siguió la conversación jugando con la tapa de su botella de agua.
-¿El Vicepresidente no es demasiado duro?
-Mi esperanza de vida se está acortando, ¿Cómo puedo vivir así de asustado?
Para aliviar un poco la tensión, Obanai decidió jugar una pequeña broma. Se acomodó el traje y miró fijamente las puertas de entrada y salida -¡Oh, Vicepresidente!
Todos los directores ejecutivos se colocarán inmediatamente mientras bajaban las cabezas -No es- exclamó Iguro con una sonrisa en el rostro. Toda la sala dejó escapar un pequeño gemido colectivo mirando mal a Iguro.
-Estoy de acuerdo con ustedes también- Obanai terminó antes de salir de la sala de juntas.
-Ah, estaba muy sorprendido. Ya que es su amigo, no quiere que lo insultemos, ¿Verdad? - susurro un hombre de edad avanzada mientras sus compañeros asienten.
.
Nezuko caminaba rápidamente para poder seguirle el paso a Shinazugawa-sama, quien daba un paso por cada dos suyos. Atendía una llamada importante de la embajada mientras intentaba no perder al Vicepresidente -He sido invitado a una fiesta privada en la embajada de España. ¿Estaría bien que te llame mañana para confirmar? (Ha sido invitado a una fiesta privada en la embajada española. ¿Estaría bien que lo llamara mañana para confirmar?)
Todos los empleados que se encontraban pasando por el mismo pasillo que ellos se detenían momentáneamente para dar una pequeña reverencia al Vicepresidente antes de seguir su camino. Nezuko se adelantó cuando vio los elevadores y rápidamente oprimió el botón mientras Shinazugawa-sama se paraba frente a las puertas automáticas. Una vez hecho eso, Nezuko volvió a pararse detrás de él.
Esperaba unos segundos antes de que el elevador llegara, ella le tocaron el paso al primero y después se colocó un paso detrás de su gigante ser. -Has mejorado mucho- le dijo el presidente mientras le dedicaba una pequeña sonrisa, imperceptible para los demás, pero no para ella.
-¿Perdón?
-Tu inglés- Nezuko sonrió -Solo hace 9 años cuando fuimos por primera vez a América, te era difícil interactuar con extranjeros.
-Así es. Pero mejore ahora y todo es gracias a ti, Vicepresidente.
-Correcto, mi consejo interminable hacia ti debe haberte ayudado bastante.
-Más que nada, cuando tenía problemas de pronunciación o utilizaba mal un awc-cent , no dudabas en avergonzarme o reprenderme. Eso me motivó mucho.
Sanemi asintió -¿Vergüenza y regaños? Está bien, si eso te ayudo a desarrollarte, seguiré haciendo lo mismo.
Nezuko frunció ligeramente el ceño, pero aun así sonrió -Gracias.
-Pero sabes, también te equivocaste antes.
-¿Qué? - Ahora sí la sonrisa de Nezuko se borró, giró para mirar al presidente sorprendida.
-No es awc-cent , es ack-cent .
Nezuko abrió los ojos cuando supo su error para después volver a sonreír -Aprendí algo otra vez.
Sanemi sonrió satisfecho antes de que ambos volvieran a girar sus rostros, pero el silencio no duró mucho ya que el estómago de Nezuko gruño. La pelinegra se sonrojo avergonzada mientras miraba su torso, Sanemi se giró para verla ligeramente sorprendido de escuchar ese sonido en particular.
-Me disculpo, tuve que saltarme el desayuno para usar el vestido de hoy. Hablando de eso, no fui capaz de proveer refrigerios para ti hoy, Vicepresidente ¿Estás bien?
-No siento nada. Deberías saber que me pongo así cuando me concentro. Ni siquiera puedo sentir hambre.
Inmediatamente que Sanemi terminó de hablar su estómago gruño. Nezuko mordió sus labios tratando de contener la risa que amenazaba con salir -Preparare los refrigerios- fue lo único que dijo antes de sonreír, controlando la risa que se atoraba en el fondo de su garganta.
Sanemi solamente asintió.
.
Sanemi y Nezuko entraron al salón donde la reunión a la que estaban invitado el peliblanco se llevaba a cabo. El portaba un traje de diseñador color negro con una camisa blanca y un moño en su cuello, por otra parte, Nezuko utilizaba un largo vestido rojo entallado que dejaba al descubierto sus hombros, su largo cabello negro estaba suelto, llevaba una pequeña cartera dorada que hacía juego con sus aretes largos. Cualquiera que no conociera su relación pensarían que venían como pareja en el lugar de ser empleado y jefe, especialmente al ver como ella tenía su brazo enredado con el masculino.
Comenzaron a caminar entre los invitados con elegancia, Sanemi fijó su mirada en la mesa de centro donde distintas personas estaban platicando mientras reían, Nezuko se acercó para susurrarle quienes eran -El hombre de en medio es el recién nombrado embajador español, es quien te invito a la embajada española en unos días.
Ambos se acercaron hasta el hombro -Buenas noches, lo felicito por su nuevo puesto- Sanemi dijo hablando un perfecto español. Nezuko sonrió cuando vio a todos sorprendidos porque un empresario japonés supiera hablar español tan bien.
-Me han hablado mucho de usted Vicepresidente Shinazugawa, el placer es mío- el embajador le tendió una mano al peliblanco que no dudo ni un segundo en aceptar. Nezuko asintió mientras se relajaba un poco, al parecer todo estaba saliendo conforme a sus planes.
Después de unos minutos ambos terminaron separándose, ella disfrutando de la fiesta sin descuidar en ningún momento su trabajo y el platicando con distintos empresarios que podrían convertirse en futuros socios para su empresa. A lo lejos un grupo de jóvenes no despegaba la vista del fornido peliblanco mirando atentamente cada movimiento que hacía mientras platicaban entre ellas.
-Es genial.
-¿No es guapo?
-Mira su nariz perfecta.
-Es realmente guapo.
Sanemi giro su rostro y miró al grupo de chicas, pero algo más le llamó la atención -Nuestro se encontraron- susurró emocionada una de ellas, sus manos apretaron la cartera que llevaba mientras sentía sus piernas temblar al sentir esos ojos púrpura sobre ella. Sanemi sonrió y se disculpó con los dos hombres con quien estaba platicando para después comenzar a caminar.
-El viene hacia aquí.
-¿Eso tiene sentido? Él viene por mí.
Sanemi pasó de largo de los tres jóvenes para caminar hasta el mesero que estaba repartiendo el champagne, tomó una flauta y sonrió mientras olía el delicioso líquido, los jóvenes quedaron estupefactas mientras sentían su orgullo herido. Se alejaron mientras maldecían al hombre sumamente apuesto que parecía tener gusto por el alcohol. Nezuko lo encontró de esa manera, admirando las burbujas de tan exquisito líquido, ella sonrió mientras tomaba su brazo.
-El embajador te está esperando, Vicepresidente.
Sanemi no giró su rostro para ver a su confiable secretaria, sus ojos no podría dejar de ver ese hermoso líquido dorado -Secretaría Nezuko.
-¿Si?
-¿No es hermoso el Champagne?
La pelinegra río -Es perfecto Shinazugawa-sama.
Sanemi asintió mientras tomaba un sorbo de la flauta, una sonrisa se abrió paso por sus labios -Vamos- dijo mirando a su secretaria quien le sonreía.
.
Eran alrededor de la una de la mañana cuando ambos decidieron que era hora de volver a casa, después de despedirse de todos e intercambiar números para organizar futuras juntas corporativas con distintas empresas, ambos pudieron subirse al automóvil que los estaba esperando. Ahora se encontraban camino a la casa de Nezuko, Tomioka manejaba una velocidad superior al límite de velocidad al observar que las calles de Tokio estaban prácticamente solitarias, Sanemi estaba sonriendo mientras tenía los ojos cerrados, se sintió tan satisfecho por lo exitoso que había resultado la reunión. A su lado su secretaria miraba fijamente el paisaje nocturno en completo silencio.
-¿Cuándo aprendiste español? - preguntó sin poder evitarlo. La había visto muy feliz hablando con distintos españoles y le sorprendió que ella pudiera actuar conforme a lo que le decían.
-¿Español?
-Pasaste gran parte de la velada hablando con distintos hombres españoles, que intentaban acercarse a ti durante bastante tiempo.
-¡Ah, eso! Apenas aprendí inglés y chino, gracias a ti. ¿De dónde sacaría el tiempo para aprender español? Lo único que acabas de presenciar es mi sensibilidad.
Sanemi alzó una ceja sorprendido por su respuesta -¿Sensibilidad?
-Si. Si me dan champaña mientras me miran, probablemente quieran decir "discúlpame por un momento". Cuando ellos me miran y comienzan a hablar, probablemente sean cumplidos- Sanemi asintió interesado por todas las observaciones que había hecho -entonces sonreía y asentía con la cabeza.
-Por supuesto.
-Y cuando se acercan a mí con una sonrisa coqueta mientras me miran fijamente a los ojos, toco mi pendiente con mi mano izquierda.
-¿Por qué tu mano izquierda?
Nezuko alzó la mano mencionóda donde una sencilla argolla dorada brillaba en su dedo anular -Si les muestro mi anillo, todo se soluciona. - Explicó con un tono orgulloso que seguramente había aprendido de él. Sanemi asintió impresionado por el ingenio de su secretaria -Este es el premio que gané en la última competencia atlética.
-Eso fue asombroso.
Nezuko abrió la boca sorprendida al escuchar el halago de Sanemi -Después de trabajar tanto tiempo junto a ti, creo que es la primera vez que escucho un halago de ti, Vicepresidente.
-Felicitaciones.
-Gracias.
-De todos modos, lo hiciste bien hoy, te mereces una recompensa. Cuando veas una cartera o ropa que quieras, házmelo saber. Tus resultados deben ser compensados.
Nezuko dio un suspiro agarrando valor -Vicepresidente.
-No dejaré que lo rechaces. Si tu no eliges lo haré yo.
Nezuko negó con la cabeza asustada, la última vez que él le había comprado algo su armario se quedó sin espacio -No es eso. Tengo algo que decirte.
-No te me confiesa. - advirtió Sanemi -Estamos en una relación solamente de trabajo.
La pelinegra borró su sonrisa, de alguna manera había sido un poco doloroso, sacudió la cabeza y sonrió incómodamente -No estaba pensando en hacer eso.
-Entonces, ¿Qué me quieres decir?
Nezuko se mordió su labio inferior tratando de encontrar la manera correcta para decir lo que quería -Vicepresidente, debería buscar una nueva secretaria- ella vio como la sonrisa de su jefe desaparecía -voy a renunciar.
Sanemi giró lentamente su rostro para ver a la que hasta esa mañana era su secretaria. Ella lo miraba fijamente y Sanemi sintió que algo se rompía dentro de él. La sola idea de ella no estando a su lado le causaba una serie de sentimientos que no sabía definir con claridad, pero estaba seguro de una sola cosa, le dolía que ella decidiera dejarlo -¿Por qué de repente?
-Por razones personales.
Él se sintió tan fuera de su zona de confort que se asustó, mirándola fijamente solo pudo decir una cosa -Haz lo que quieras- giro su rostro nuevamente para mirar por la ventanilla, deseosos de no sentir lo que sea que estaba sintiendo. Solo volver a respirar normalmente y no sentir que su corazón dolía tan solo de imaginar que ella quería se fuera de su lado.
Nezuko asintió para también girar su rostro y recargar su frente en la ventanilla, el auto estaba en un silencio incomodo y ella se sintió abrumada. Deseaba tan solo llegar a casa y acostarse en su cama y dejar de sentir ese dolor en su corazón que tenía desde que había decidido dejar su trabajo.
Quizás solo necesite platicar con su familia.
Esa misma noche Shinazugawa Sanemi no pudo dormir, solamente giraba en su cama intentando conciliar el sueño. Su cabeza no podia dejar de pensar en las palabras que su secretaria le habia dicho hace unas horas.
"Vicepresidente, debería buscar una nueva secretaria, voy a renunciar".
! Y hemos terminado el primer capitulo de esta historia!
¿Que les pareció ? Espero que les hayan gustado mucho. Conforme avance la historia saldrán mas personajes y esta wea se va a prender XD.
Si ustedes gustan pueden dejarme un lindo comentario, eso me ayudaría mucho a seguir escribiendo. Esta historia también esta disponible en Ao3 y Wattpad, por si quieran pasar a dejar amor por ahí .
De corazón espero que ustedes y su familia están bien, tratan de quedarse en casa si es posible y si no es así ¡ Cuídate mucho! Nos vemos en el segundo capitulo, el cual, espero, llegue en unos tres o cuatro días .
Con amor, la secretaria Fer.
