Disclaimer: Esta historia no me pertenece, los personajes son de Stephenie Meyer y la autora es fanficsR4nerds, yo sólo traduzco sus maravillosas palabras.

Disclaimer: This story doesn't belong to me, the characters are property of Stephenie Meyer and the author is fanficsR4nerds, I'm just translating her amazing words.

Thank you fanficsR4nerds for giving me the chance to share your story in another language!

Gracias a Yani por ser mi beta en esta historia.

Día 18: 30 de marzo de 2020

Bella

12:36 PDT

Los Ángeles, California

—Entonces —dice Emmett, bajando la vista a la mesa. Los seis estamos reunidos afuera para comer y tengo que admitir que se siente increíble. A pesar de que solo estamos en el patio, es agradable poder respirar un poco de aire fresco.

Claro, el aire en LA está muy contaminado, pero no importa.

—¿Cuál es el plan? —Alzo la vista hacia Emmett para encontrarlo mirando a Edward. Me giro para verlo también.

Se traga su bocado de sándwich y suspira.

—Supongo que terminar mi maestría de la mejor manera posible —gruñe, encogiendo un hombro. Rose sacude la cabeza.

—Carajo, me enojaría si me hubieran arrancado así de mi programa —murmura.

—Sí, ha sido difícil. —Suena molesto, para nada como el chico desenfadado que he estado conociendo en los últimos días. Frunzo el ceño y le quito una papa de su plato. Es enorme, y me la meto toda a la boca, mis mejillas se estiran a su alrededor. Él me mira, y al ver la forma en que se inflan mis mejillas, se remueve sobre su silla, su mano roza sobre sus shorts. Sonrío y lo pateo ligeramente debajo de la mesa. Este pervertido se está excitando al verme comer papas. Me encanta. Ve mi sonrisa y se ríe en voz baja, sacude la cabeza y baja la vista a su plato. Ya está sonriendo y me echo hacia atrás satisfecha.

—¿Cómo se sienten tus padres de que hayas decidido no ir a Chicago? —pregunta Jasper.

—Papá lo entendió. Mamá está… —Edward hace una pausa, frunciendo un poco el ceño. Alice sonríe.

—Mamá está preocupada por su niñito —le dice con voz mimosa. Me burlo y siento que su pierna me patea en respuesta. Me encanta lo juguetón que es. Quiero montarlo justo aquí frente a nuestros amigos.

Alzo la vista para encontrar a Alice mirándome y siento que me espabilo. Me siento incómoda coqueteando con su hermano frente a ella. Me ofrece una sonrisa y siento que mis hombros se relajan ligeramente.

—Tendré que llamarles pronto —murmura Edward, sigue pensando en sus padres. Nunca he conocido al doctor y la señora Cullen, pero los he escuchado en llamadas con Alice. Suenan muy amables, aunque su riqueza me intimida muchísimo. Alice no presume el dinero de donde viene ella, de hecho tampoco Edward. Ambos tienen los pies en la tierra y son tan casuales que es fácil olvidar que no les hace falta nada.

Terminamos la comida platicando sobre la escuela. Edward casi no ha sabido nada de su escuela, algo que sé que lo está estresando. Yo al fin recibí noticias de algunos profesores, al igual que la mayoría en la casa. Nuestras instrucciones son generalmente las mismas: leer un poco, mantenernos en contacto.

Se siente como algo inútil, pero si eso conseguirá llevarme a la graduación, entonces bien.

—¿Alguien quiere hacer un poco de yoga? —pregunta Rose, mirándonos a todos. Alice, Jasper y Emmett asienten, y yo miro a Edward, me sorprendo al verlo asentir también. ¿Edward estirándose? Solo voy a hacer yoga para poder comérmelo con la mirada mientras se estira.

Todos se giran hacia mí y Edward debe poder leer mi mente porque sonríe un poco.

—Yo le entro —digo, mirando a Rose. Me giro hacia Edward y le regreso la sonrisa. Se agacha cerca de mi oído y su repentina cercanía me marea. Su incipiente barba me roza el cuello, cosquilleando y enviando olas de energía directo a mi clítoris al mismo tiempo. Puedo sentirlo sonreír en mi cuello al susurrar:

—A jugar.