Disclaimer: Esta historia no me pertenece, los personajes son de Stephenie Meyer y la autora es fanficsR4nerds, yo sólo traduzco sus maravillosas palabras.
Disclaimer: This story doesn't belong to me, the characters are property of Stephenie Meyer and the author is fanficsR4nerds, I'm just translating her amazing words.
Thank you fanficsR4nerds for giving me the chance to share your story in another language!
Gracias a Yani por ser mi beta en esta historia.
Día 258: 26 de noviembre de 2020
Jasper
16:08 PDT
Los Ángeles, California
La mesa está puesta con una vajilla que no hace juego y no teníamos suficientes copas, así que Emmett está bebiendo su vino en una taza, pero de alguna manera las imperfecciones de esta comida la vuelven completamente perfecta.
—Me gustaría hacer un brindis —digo antes de empezar a comer. Los ojos de mis amigos se posan en mí—. Sé que las cosas han sido una locura este año —digo lentamente, mirando a todos—, pero yo, para empezar, no podría sentirme más agradecido. He podido pasar el último año no solo con la mujer a la que amo —hago una pausa, me giro hacia Alice que sonríe y estira el brazo para tomar mi mano libre. Me giro de nuevo hacia la mesa mientras aprieto sus dedos—, sino que también pude pasarlo con unos grandiosos amigos, nuevos y viejos por igual. —Mis ojos se posan en Edward y él ladea ligeramente la cabeza hacia mí para mostrar que me entiende.
»Detesto decirlo, pero siento que este confinamiento es una de las mejores cosas que me pudieron haber pasado. He encontrado una nueva familia con todos ustedes y estoy muy agradecido por eso.
Puedo notar que el sentimiento resuena profundamente en todos nosotros mientras el silencio se posa sobre la mesa. Rose estira la mano hacia Emmett y él le sonríe como si ella fuera su mundo. Frente a ellos, Bella se recarga en Edward, que se gira para plantar un beso en su frente. Hay muchísimo amor en esta habitación y de pronto lo entiendo.
Es hora.
Me giro hacia Alice —mi mundo— y ella me sonríe.
—Alice, iba a esperar por el momento adecuado, pero no puedo pensar en un mejor momento que justo ahora con nuestra familia —digo, sacudiendo lentamente la cabeza. Me bajo de mi silla y en algún sitio al final de la mesa escucho un jadeo cuando me pongo sobre una rodilla frente a Alice. Las lágrimas se acumulan en sus ojos—. Te he amado desde el momento en el que te conocí, Mary Alice. Eres buena y amable, compasiva y muy inteligente. Eres mi mundo, mi luna y mis estrellas, el universo mismo en torno al cual giro. —Meto la mano en el bolsillo de mis jeans, y saco el pequeño anillo de diamante que compré para ella hace muchos meses. Es pequeño y simple, pero elegante, igual que ella—. ¿Te casarías conmigo?
Alice jadea, se lleva de golpe la mano a la garganta mientras asiente, claramente las palabras se han quedado atoradas dentro de ella. Sonrío cuando carraspea.
—Sí, por supuesto —solloza.
Está en mis brazos incluso antes de que pueda ponerle el anillo en el dedo. A nuestro alrededor puedo escuchar a nuestros amigos vitoreándonos.
