Disclaimer: Helluva Boss y Hazbin Hotel son creaciones de Vivziepop. "Turn back Time" es creación de TalosLives. Por favor apoya el material original.
Millie siempre tuvo una debilidad por las cosas sobrenaturales como el vudú o la adivinación, por lo que curiosear en los 'Espejos del Destino' fue una experiencia emocionante para ella.
Hasta ahora, había visto varias líneas de tiempo futuras que eran buenas o malas: En uno engendró cinco hijos con Moxxie después de ganar la lotería. En otro Moxxie murió poco después de dar a luz a su primer hijo y ella tuvo otro tras casarse con Blitzø años después. Otro en el que ella y su equipo fueron asesinados por ángeles que estaban hartos de que ellos interfirieran en el mundo humano. Y uno en el que ella y Moxxie descubrieron que no podían tener hijos propios, pero habían adoptado algunos pequeños y los trataban como si realmente lo fueran... Todo esto solo alimentó aún más su deseo de formar una familia con Moxxie.
Al crecer en una familia numerosa, Millie siempre vio a su mamá como su mayor modelo a seguir. Cuando se trataba de cosas no relacionadas al asesinato, claro; Para eso ella tenía como ídolo a Vlad el Empalador (1). No fue fácil para una pareja de diablillos criar hijos en la pobreza, especialmente cuando eran doce (2). Aun así, ella y sus hermanos eran valiosos a los ojos de sus padres, y mamá ni una sola vez dejó de agradecer a Satanás por esa bendición.
Queriendo ser como su mamá en todos los sentidos, Millie quería tener muchos pequeños diablillos en pañales para amar y acurrucar hasta envejecer y volverse gris.
Por supuesto, Moxxie era más realista y estaba preocupado por su situación financiera que, en retrospectiva, era válido: Millie había visto el esfuerzo de sus padres para criarlos, y eso que fue en el campo; Criar una familia en Imp City era mucho más costoso. Aún así, la sensación de poder tener a su propio bebé era demasiada para que Millie la ignorara por más tiempo y realmente quería ser madre... Pero confiaría en que su marido sabría cuándo sería el momento adecuado para ellos.
―Hmm, veamos cuál debo ir ahora...―se dijo Millie mientras miraba las tres opciones que tenía delante: Un espejo de mano sobre un gran cajón, un espejo circular colgando de un hilo y un roto espejo ovalado colgado en una pared de madera. ―Hmm... De Tin... Marín... De Do... ¡Pingue!
Agarró el espejo de mano y se arregló rápidamente el cabello a la vez que su mente comenzaba a ser absorbida en la visión...
...
Fuera lo que fuese que esperaba Millie, no era una habitación oscura llena de jaulas.
Apenas podía ver alrededor por las pequeñas bombillas que colgaban del techo. No era ninguna habitación que hubiera visto antes en su vida o en ninguno de los otros posibles futuros. Un gemido familiar hizo que Millie mirara a su alrededor para verse a sí misma levantándose lentamente dentro de una jaula lo suficientemente grandes para contenerla. A diferencia de las otras Millie del futuro, esta no se veía diferente de la actual... De hecho, ni siquiera parecía que hubiera pasado mucho tiempo. "¿Será este un futuro cercano?" se preguntó.
La otra Millie maldijo acerca de un payaso robot antes de mirar a su alrededor con miedo en sus ojos. ― ¿Mox? ¡¿Moxxie?! ¡¿Estás bien?!
―Agh, despiértame cuando se acabe ese solo de batería en mi cabeza...―gimió Moxxie mientras se levantaba dentro de una jaula más grande que la de la otra Millie. Sacudiendo la cabeza, miró a su alrededor antes de girarse hacia su esposa, que estaba a unos metros de él pero fuera de su alcance. ―. ¡Maldición! Si ese estúpido payaso robot no me hubiera atrapado...―respiró hondo. ―. ¿Crees que Blitzø y Loona están bien?
―Los vi escapar justo antes de que Verosika y sus putas comenzaran a disparar.―contestó la otra Millie negando con la cabeza. ―. No sé que más pasó. Estaba demasiado ocupada luchando contra esa... bueno, supongo que llamarla querubín no es la forma correcta, así que solo la llamaré Malparida Perra Oveja. Supongo que se volvió una ángel caída, ¿eh?
―Ya echo de menos cuando eran unos maricas bajitos y adorables.―murmuró Moxxie mientras se frotaba el hombro. Al mirar más de cerca, la verdadera Millie pudo ver que tanto su yo futuro como su esposo estaban seriamente magullados, por lo que debió ser una ruda pelea. ―. ¿Qué crees que nos pasará? Porque recuerdo la vez de esos niños caníbales y como casi me invitan a cenar.
"¿Niños caníbales? ¿No era esa familia que matamos por petición de esa maestra de escuela? Espera un segundo..." pensó la verdadera Millie mientras comenzaba a comprender: El payaso robot tenía que ser Fiizzarolli, los querubines eran los tres ángeles que habían jodido esa vez, y era claro que la perra de Verosika estaba aliada con ellos. ¿Qué tenían los cuatro en común? I.M.P. ...Y Blitzø en mayor medida, pues había arruinado sus vidas, matándolos o humillándolos... "¿Así que todas las personas que cabreamos decidieron hacer una Legión del Mal? Guau, realmente deben odiarnos para llegar tan lejos."
― ¡Estoy segura de que Blitzø y Loona nos ayudarán!―exclamó la otra Millie, optimista. ―. ¡Solo tenemos que poner nuestra fe en ellos!
―...De acuerdo, estamos jodidos.―replicó Moxxie con un profundo suspiro. ―. Siempre supe que este trabajo me mataría. ¡Podría haber tenido una carrera como cantante o haber trabajado como camarero! ¡O incluso haber sido un bloguero sobre comedias románticas! ¡Pero nooo, tenía que trabajar para un jefe imbécil y la jodida perra de su hija, viviendo en una ciudad que apesta a mierda! ¡Hasta me sorprende haber llegado tan lejos en mi vida!
―Ay cállate, Mox. Suenas como un bebé llorón.―dijeron ambas Millies al mismo tiempo.
―¿Pero qué más podemos hacer? Estamos desarmados, encerrados, ¡y quién sabe qué nos harán esos psicópatas!―gritó Moxxie.
Entonces otra voz le respondió: ―Los v-v-va-van a usar como c-c-ce-cebo.
Moxxie, la otra Millie y la verdadera Millie miraron a su alrededor para ver de dónde venía esa voz, solo para ver una figura moviéndose cerca de una de las jaulas más grandes. Al principio fue difícil de ver, pero cuando se levantó lentamente, los diablillos se sorprendieron de quién era.
Era uno de los querubines, la oveja púrpura que tartamudeaba. Sin embargo, a diferencia de los otros dos que se habían convertido en ángeles caídos, este aún conservaba su forma de ángel pero con una significativa degradación: Todo su cuerpo estaba sucio y tenía profundos cortes que parecían estarse curando; Sus alas estaban tan maltratadas que parecía imposible que volara con ellas. Su halo estaba torcido y su rostro mostraba un labio partido y un hematoma en el ojo derecho... Si no fuera por el hecho de que estaba emitiendo una débil aura angelical, bastante tenue, uno podría creer que estaba medio muerto.
― ¿Tú?―exclamó la otra Millie. ―. ¿Qué diablos estás haciendo aquí?
―Soy un prisionero.―respondió el querubín con un suspiro. ―. Ju-ju-justo como ustedes.
― ¿Por qué estarías encerrado aquí... uhh... cuál es que es tu nombre?―preguntó Moxxie inclinando la cabeza.
―Es C-C-C-Collin.―respondió antes de mirarles con enojo.―. C-C-Considerando que arruinaron m-m-m-mi vida, deberían al menos re-re-re-recordarlo.
―Hey, a ustedes los echaron. De acuerdo, quizás nosotros tuvimos algo que ver, pero aún así, todo fue culpa suya. ―señaló la otra Millie, a lo que todos esperaban una réplica, pero en cambio, Collin suspiró y se sentó mientras se inclinaba contra los barrotes de su jaula.
―S-S-Sí... esto realmente fue... nuestra culpa.―sollozó Collin mientras comenzaba a llorar en silencio. Esto sorprendió a los diablillos, incluida la verdadera Millie.
―Que curioso, tus amigos no dijeron eso.―repuso Moxxie.
―¡No son mis amigos!―siseó Collin, lo que hizo que el diablillo de cabello blanco se echara hacia atrás. ―. ¡Ya no! ¡No después de lo que hicieron! A mí... a los otros... yo...
Comenzó a sollozar cubriéndose la cara con sus pezuñas, lo que hizo que todos en la habitación se sintieran incómodos. Tanto la otra Millie como Moxxie se miraron sin saber qué hacer. La verdadera Millie tampoco sabía qué hacer, y no es que pudiera ayudar ya que era un fantasma y todo eso. Finalmente, la otra Millie suspiró y le preguntó con voz suave: ―Oye, mira... Collin, ¿verdad? ¿Podrías decirnos qué está pasando?
Collin suspiró profundamente y cerró los ojos. ―D-después de que el cielo nos echó... I-I-Intentamos orar y pedir una oportunidad de redención. Para que alguien nos escuchara... El líder de los Q-Q-Querubines, Lord Gabriel, nos habló una noche.
―Espera, ¿el Arcángel? Increíble.―comentó Moxxie con asombro y miedo en su voz: Los Arcángeles estaban entre los ángeles más poderosos y se decía que igualaban en poder a Lucifer.―. ¿Que les dijo?
―...Que habíamos hecho m-m-más cosas de lo que pensábamos para ser castigados así.―susurró Collin negando con la cabeza. ―. Digamos que... algunas de las personas que salvamos... no estaban d-d-destinadas a ser salvadas... no hace falta decir que nuestras a-a-acciones en el mundo humano tuvieron consecuencias que nunca debieron suceder. La muerte de L-L-L-Lipton fue el c-c-colmo y por eso nos expulsaron.
―Si eso es verdad, ¿por qué no eres un ángel caído como tus amig... quiero decir, ex-amigos?―Le preguntó la otra Millie.
―Porque Lord G-G-Gabriel dijo que había una posibilidad de redención para nosotros.―respondió Collin, mirando al matrimonio. ―.Teníamos que trabajar duro para lograr tener la oportunidad de regresar al Cielo. Pasaron las s-s-semanas y fue muy difícil. Pensé que estábamos progresando, pero Cletus y Keenie... estaban muy impacientes; S-s-supongo p-p-porque siempre estaban tan enojados por lo que nos pasó.―Se removió un poco.―. Entonces esa s-s-súcubo vino y nos ofreció una o-o-oportunidad para vengarnos de ustedes. Cletus y Keenie aceptaron, su odio era tal que se corrompieron como demonios. Querían que me uniera, pero yo... ¡No me importaba la venganza y yo-yo-yo-yo no quería convertirme! ¡Solo quería concentrarme en volver a casa! ¡C-c-con mis padres! ¡M-M-M-Mis amigos! ¡Quería volver a s-s-sentir la luz amorosa de Dios!
―...Y cómo te negaste ellos te hicieron esto, ¿no es así?―preguntó Moxxie con compasión en su voz. El silencioso asentimiento de Collin fue la respuesta. Moxxie suspiró profundamente y miró a Collin con lástima. ―. ¿Por lo que valía? Lamento que hayas tenido que pasar por eso.
―¿E-En serio?―preguntó Collin mirando a Moxxie con sorpresa. ―. P-Pero soy un ángel...
―Sí, bueno, tenemos a los de nuestra propia especie tratando de matarnos, así que supongo que eso nos convierte en aliados en este sentido.―secundó la otra Millie con una sonrisa.―. Además, si tus supuestos compañeros estaban dispuestos a hacerte esto, entonces no eran para nada tus amigos... Quiero decir, Blitzø y Loona pueden ser unos cretinos a veces, pero nunca nos dejarían tirados para morir.
La verdadera Millie asintió ante esa afirmación: A pesar de todos sus defectos, Blitzø los cuidaba, era solo que Moxxie era tan fácil de hacer enojar. Ella sabía que su jefe era un buen tipo con algunos problemas, pero, bueno, esto es el Infierno: ¿Quién no tiene problemas? Además, todos los futuros que había visto mostraban a Blitzø como un buen tipo... Incluso en ese dónde fue asesinado por los ángeles, en el momento final él le había dicho al equipo que los amaba justo antes de que su corazón fuera atravesado con una lanza.
¿Qué tan irónico era que un bastardo de baja ralea como lo es Blitzø era un mejor jefe y camarada que un ángel? Bueno, ángel caído, pero el punto seguía siendo válido.
―Gracias... de verdad...―murmuró Collin con una pequeña sonrisa. ―. Je, s-s-supongo que ustedes diablillos no son tan m-m-malos...
―¿Incluso si matamos gente para ganarnos la vida?―preguntó Moxxie con tono divertido.
―...Ese viejo chupapollas se lo merecía.―admitió Collin con una risa que hizo que los demás se rieran también. ―. ¿Y ahora que?
―Esperaremos a Blitzø.―contestó la otra Millie inclinándose hacia atrás con una sonrisa.
―El diablillo alto, ¿no? ¿P-P-Por qué? ¿Él qué puede hacer?―preguntó Collin.
La otra Millie, Moxxie y la verdadera Millie se miraron entre sí, sacudieron la cabeza y respondieron con una palabra:
―Lo que sea.
...
Millie se mordió el labio cuando el espejo la devolvió a la realidad. Reflexionó sobre lo que vio y se preguntó si Collin estaba atrapado o si se había unido a ellos para convertirse en ángeles caídos. ¿O habían resistido y continuaron sus esfuerzos por regresar al Cielo? Ese futuro parecía demasiado pronto para que no sucediera dentro de unos meses o un año... ¿Significaba que el grupo que los perseguía en esa línea de tiempo los perseguiría ahora?
"Debería avisarle a Blitzø sobre esto por si acaso." pensó Millie, y se preguntó qué harían con Collin. "...Hmm, ¿si todavía es un ángel y sus amigos no lo son? Supongo que podemos perdonarle y ayudarlo. ¿Pero si es un caído también? Su culo será hierba."
Estaba a punto de dirigirse a otro espejo cuando escuchó un fuerte grito ahogado y notó que Loona no estaba tan lejos de ella. Millie corrió hacia Loona, la cual agarraba al espejo y gritaba:― ¡No! ¡Necesito ver qué pasa! ¡Llévame de vuelta!
― ¿Loona?―La cachorrita se dio la vuelta y vio que Millie la miraba preocupada. ―. ¿Estás bien? C-cariño, estás llorando...
Las lágrimas caían por el rostro de Loona y retrocedió.― ¡Yo... necesito el baño!―Antes de que Millie pudiera detenerla, Loona corría hacia la salida.
―¡Loona, espera!―Le gritó Millie, pero un gran demonio gordo se interpuso y le hizo perder de vista a la cachorrita infernal. ―. ¡Mierda! ¡Blitz!―Miró a su alrededor buscando a su jefe solo para verlo igual de asustado y aterrorizado mientras tenía la mirada perdida en un espejo. Maldiciendo, corrió y zarandeó el brazo de su jefe. ―. ¡Maldición, Blitz! ¡Sal de ahí! ¡Tenemos un problema! ¡Blitz!
...
"¿En serio estaré casado con Stolas en cada uno de mis futuros?" se había dicho Blitzø mientras caminaba alrededor de la gran tienda buscando otro espejo. Había pasado por cuatro futuros diferentes y todos eran iguales en eso, con él y Stolas casados; Incluso hubo un futuro en el que logró casarse con Stolas y la perra de esposa debido a una antigua ley demoníaca sobre la poligamia... Aunque en ese futuro, ella también estaba enamorada de él, algo que lo asustó. "Pero... realmente me veía feliz con él... quizás... ¿quizás es hora de que me abra más a él?"
No es que Blitzø no encontrara atractivo a Stolas. Diablos, era uno de los hombres más guapos con los que había salido, así como mucho mejor y más amable que las mujeres con las que salió, salvo Charlie. También estaba el hecho de que Stolas había pasado por muchos problemas para mostrar su afecto por Blitzø... Hasta el punto de que el diablillo comenzaba a darse cuenta de que eran genuinos y no solo un medio para llevarlo a la cama... Principalmente.
"¿Quizás debería darle una oportunidad? Quiero decir, mis otros yo del futuro lo hacen." había pensado Blitzø antes de detenerse frente a un espejo cuadrado negro sostenido por tablas de madera. "Bueno, también podría ver lo que este tiene reservado para mí. Apuesto lo que sea a que estaré en la cama con Stolas."
El espejo comenzó a hacer lentamente su magia cuando Blitzø había sido arrastrado hacia adentro...
...
― ¿Bueno, ¿quien lo diría? Tenía razón.―se dijo el verdadero Blitzø al ver a Stolas y su futuro yo entre sábanas, un brazo del demonio búho envuelto alrededor de él. ―. Otra fiesta de pijamas mensual... o...―Miró a su alrededor y vio algunas cosas que se destacaron. ―. ¿Quizás algo más?
En primer lugar no había fotos de Stella, sino fotos de Stolas y Blitzø. Incluido uno donde Stolas estaba vestido con un esmoquin y cargando a un Blitzø con vestido de novia por las escaleras de una Iglesia. En segundo lugar, había algunas de las pertenencias de Blitzø, como su colección de figuritas de My Little Pony colocadas ordenadamente en unos estantes... Y por último pero no menos importante, brillaban anillo de bodas en los dedos de Blitzø y Stolas.
―Ajá, un futuro donde ya estamos casados, ¿eh?―repuso el verdadero Blitzø cruzando los brazos. ―. Oh, bien. Pero verme follar con él se está volviendo un poco aburrido.
De repente, un teléfono comenzó a sonar, haciendo que el otro Blitzø gimiera antes de levantarse lentamente y bostezar. La versión futura del diablillo agarró el teléfono del cajón cercano y se lo colocó en la oreja. ―. ¿Quién diablos eres? Será mejor que tengas una buena razón para llamarme a la una de la mañana. ―Hubo una pausa y el otro Blitzø levantó la ceja.― Sí, soy yo. ¿Qué quieres?―Otra pausa mientras el verdadero Blitzø se acercó para tratar de escuchar lo que decía la llamada... Y saltó hacia atrás porque su yo futuro se estremeció con los ojos muy abiertos y una expresión de horror.―. ¡¿Q-Qué?! ¡¿Estás seguro?!
―¿Blitzy?―susurró Stolas levantándose lentamente. Vio la mirada horrorizada y asustada en el rostro de su esposo y rápidamente estuvo a su lado. ―. ¿Qué ocurre?
―Sí, ¿qué sucede que parece que acabo de descubrir que tengo diez minutos de vida?―se preguntó el verdadero Blitzø con una ceja levantada... Sin embargo, sus sentimientos entraron en modo pánico cuando vio a su yo espejo cubrirse la boca con horror y comenzó a llorar. ―¿Q-Qué? ¡¿Qué pasa?!
―Oh, Dios... no... por favor...―sollozó el otro Blitzo mientras Stolas lo abrazaba sin decir nada. ―. ¡Yo... estaré allí enseguida!
―¿Blitzy?―preguntó Stolas mientras su amante saltaba de la cama y comenzaba a vestirse. ―. Cariño, ¿qué ocurre?
El otro Blitzø respiró hondo y se llevó una mano al corazón. ―. La encontraron, Stolas... ellos... la encontraron...
El verdadero Blitzø estaba a punto de preguntar a quién se refería, pero la escena se desdibujó a una habitación oscura. Al principio se asustó, pero se calmó al ver a alguien allí bajo una bombilla: Era un Pecador humanoide con piel y cuernos de color rojo oscuro... Fue lo que vestía lo que le llamó la atención, pues llevaba guantes quirúrgicos y ropa que los solían usar los cirujanos; el verdadero Blitzø se preguntaba quién era hasta que vio un cuerpo en una camilla cubierta por una sábana blanca con manchas rojas que tenían que ser sangre seca. Pronto, quedó claro qué lugar era: Una morgue.
Blitzø pudo constatar con rapidez que esta figura fue asesinada hace solo unas horas, después de haber pasado por agonía. Los puntos donde estaban las manchas rojas eran todas áreas críticas y de muerte instantánea... Quienquiera que fuera este pobre imbécil, había muerto en instantes.
Se preguntó por qué estaba allí cuando de repente se abrió la puerta. Un demonio gigante parecido a un minotauro con ropa de oficial de policía entró con el otro Blitzø, viéndose asustado y tembloroso mientras Stolas lo agarraba por los hombros, luciendo también angustiado. Ambos estaban vestidos con ropas principescas que normalmente harían que el verdadero Blitzø comentara lo bien que se veía con una túnica elegante, pero se estaba preocupando: Este cádaver bajo la sábana tenía que ser alguien a quien personalmente conocía, porque no estaría mostrando sus emociones tan abiertamente así... Se quedó mirando la figura muerta justo cuando su yo futuro y Stolas se acercaban.
Echó un vistazo más de cerca: La figura era alta. Muy alta... La única persona que Blitzø sabía que podía ser así de... alta... era...
―No...―El verdadero Blitzø sintió con horror como su interior se congelaba y sus ojos se abrían de par en par... Sus ojos se fueron a un extremo de la camilla, viendo una cola grisácea y blanquecina cubierta de sangre que le resultó inquietantemente familiar. Comenzó a temblar cuando comprendió:―. ¡No! ¡Nononononono! ¡ELLA NO, POR FAVOR!
La sábana fue apartada y hubo dos gritos de desesperación; Ambos provenientes de la misma persona, pero uno era un fantasma viendo cómo se desarrollaban los eventos, y el otro era de esa línea de tiempo viviéndolo. Ambos cayeron de rodillas con desesperación mientras las lágrimas corrían... Porque sobre esa mesa, sin vida y pálida como un fantasma, había una Loona unos años mayor y de horrible aspecto; Sus ojos estaban cerrados y su cuerpo inmóvil. Las heridas en su pecho mostraban esencias blancas brillantes proveniente de armas angelicales... Esta no fue solo una simple muerte. Era una muerte permanente.
Loona se había ido.
Su hija estaba muerta.
Su bebé ya no estaba.
― ¡LOONA!―chilló el verdadero Blitzø y extendió la mano, solo para atravesar la mesa y el cádaver de su hija. Intentó tocarla una y otra vez... Esto no podía ser real. Esto no podía estar sucediendo... Cada vez que se levantaba, sentía su alma desgarrarse al ver su rostro muerto hasta que no pudo más y se desplomó al suelo de baldosas, desesperado. La bilis comenzó a subir por su garganta hasta que salió. Jadeando y sollozando, el verdadero Blitzø comenzó a gritar como nunca antes lo había hecho... Sabía que esto era un sueño. Sabía que esto no era técnicamente real, sino un futuro hipotético que aún no había sucedido.
...Y, sin embargo, no le importaba.
Era su hija. Pasado, presente o futuro, ella era su bebé. Él había prometido protegerla para siempre, y aquí había fracasado. Cualquier padre, cualquier verdadero padre amoroso, se horrorizaría al ver a su hijo morir, sin importar si era real o no. Y para el verdadero Blitzø, sintió su corazón romperse al ver esta horrible visión de este oscuro y lúgubre futuro.
― ¡Loona! ¡Oh Dios! ¡Loona! ¡Loooonnaaaaa!―El otro Blitzø sollozaba a la vez que, a diferencia de su contraparte fantasma, se desplomó sobre el cuerpo de su hija, abrazándola tan fuerte como pudo, apoyando la cabeza contra su frente gélida y la acarició mientras sus lágrimas caían sobre su rostro inmóvil. ―. ¡Por favor, levántate! ¡Por favor, bebé! ¡Vamos! ¡Grítame! ¡Ódiame! Haz lo que quieras, ¡pero por favor levántate! ¡LEVÁNTATE, CARAJO!
Stolas también lloraba mientras arrullaba con suavidad. Después de unos minutos de silencio, salvo por los sollozos de Blitzø, el príncipe preguntó: ―. ¿Dónde estaba todo este tiempo?
El policía y el médico se miraron antes de que el el policía suspirara y se frotara la nuca.
―Llamaron por unos disparos cerca de un picadero (3) de crack. Cuando llegaron los oficiales, encontraron un montón de adictos muertos... y entre ellos estaba ella.―El verdadero Blitzø alzó la cabeza: ¿Su hija era una... yonqui? (4) ¿Qué estaba haciendo ella allí? ¿Por qué no estaba en casa? ―. Parece que fue un trato que salió mal: Le dispararon con balas angelicales como a los otros. Íbamos a incluirla como otra habitante de la calle cuando encontramos el informe de persona desaparecida que hizo hace unos años.
―Persona... desaparecida...―susurró el verdadero Blitzø con horror. ―. Ella... ¿Ella huyó de casa?―¿Ella lo había dejado? ¿Y simplemente dejó que sucediera? La tristeza se convirtió en rabia cuando el verdadero Blitzø se levantó, mirando a su sollozante yo del futuro. ¿Este Blitzø dejó que su hija saliera a las salvajes y peligrosas calles del Infierno sin siquiera detenerla? Comenzó a gritar de nuevo, pero esta vez al otro Blitzø:― ¡¿QUÉ HICISTE?! ¡¿QUÉ HICISTE, HIJO DE PUTA?! ¡¿POR QUÉ NO LA PROTEGISTE?! ¿¡DÓNDE ESTABAS?! ¡¿DONDE ESTABAS CUANDO ELLA NOS NECESITABA?! ¡TE MATARÉ! ¡TE MATARÉ POR DEJARLA MORIR!
El verdadero Blitzø intentó golpear a su futuro yo, pero terminó fue golpeando el aire. Si fuera alguien más, encontraría surrealista el hacer eso... Pero no entenderían lo que significaba para un padre perder a su hija. Que un padre perdiera a su bebé... Era algo impensable y lo más terrible que podía experimentar cualquiera que hubiera criado una vida inocente en este mundo... Que fuera arrebatado así.
Stolas se acercó lentamente a su marido con sus propios ojos empañados en lágrimas y trató de poner una mano en su hombro, pero el otro Blitzø lo apartó. ―Blitz...
― ¡No me toques! ¡Déjame en paz!―chilló el otro Blitzø sin dejar de acunar el cuerpo de su hija. ―. Déjennos... déjennos en paz... por favor...―Stolas asintió lentamente mientras él y los otros dos retrocedían, dejando a los dos papás con el corazón roto y llorando en silencio. El otro Blitzø acunaba el cádaver de su hija en sus manos, meciéndola y aún llorando al ver a su amada hija muerta ante él. ―. ¿Por qué? ¿Por qué no regresaste...? Loona... ¿Por qué huiste?
― ¡¿Por qué no la detuviste?! ¡¿Por qué no la buscaste?! ¡Quiero respuestas, maldita sea!―exigió el verdadero Blitzø , pero antes de que pudiera seguir, la escena comenzó a cambiar. ―. ¡No! ¡Espera! ¡Detengan esto!
La nueva escena era el dormitorio del palacio de Stolas, lo que hizo que el verdadero Blitzø se preguntara por qué estaba aquí de nuevo. ¿Por qué no estaba con su hija?
― ¡¿Qué diablos está pasando?!―se preguntó al borde de arrancarse los cuernos. Tomándose un momento para calmarse, miró a su alrededor y vio a Stolas llorando en silencio en la cama, pero sin el otro Blitzø allí... Luego la puerta se abrió y el verdadero Blitzø se dio la vuelta y sintió su corazón casi hundirse. ―. ¿L-Loona?
No, no era Loona, pero el solo verla le recordó a Blitzø su propia hija.
Era otra loba infernal de siete años, usando un mameluco azul hecho de tela suave y lujosa. El símbolo de la familia de Stolas estaba sobre su corazón, lo que significaba que ella estaba al parecer bajo su protección. La cachorrita avanzó lentamente y Blitzø pudo verla mejor: Quienquiera que fuera esta chiquilla, era mucho más pequeña que Loona a su edad. Su cabello era lo suficientemente largo para cubrir su ojo, pero era más suave y limpio que el de Loona, casi como si se empeñara en ser limpia y ordenada en lugar de desordenada y salvaje. El pelaje era una mezcla de blanco con manchas negras como las de un dálmata, e incluso había una mancha negra sobre su ojo rojo derecho, mientras que el izquierdo era azul.
La tímida cachorra infernal se acercó lentamente a Stolas, quien alzó la cabeza y se quedó sin aliento al verla. ―¿Papá? Te escuché llorar. ¿D-dónde está papito?
― ¿Papá? ¿Papito?―se dijo el verdadero Blitzø con un sollozo mientras se secaba los ojos. ―. Espera... no me digan que...
Stolas se levantó y tomó a la cachorrita en sus brazos. ―Oh, Selena... (5) yo... no sé cómo explicártelo...―Respiró hondo y presionó su cabeza contra la frente de la pequeña―. Papito está... Papito descubrió... algo horrible y... ahora está pasando por un momento difícil.
―¿Pero... no deberíamos estar ahí para él?―le preguntó Selena inclinando la cabeza.
―Es complicado. Ahora mismo papito Blitzy necesita su espacio.―respondió Stolas antes de acunar a la chiquilla contra su pecho.―. Pero los dos estaremos allí para él cuando nos necesite. Especialmente tú, mi pequeña Lena.
― ¿Qué sucedió, papá?―preguntó Selena inocentemente pero con una pizca de miedo en su voz.
― ¿...Recuerdas cuando te contamos acerca de... la hija mayor de papito? ¿Tu hermana mayor?―preguntó Stolas preguntó con tono suave, sus ojos estaban llorosos.
―S-sí, se escapó porque se peleó con papito.―respondió Selena, lo que hizo que el verdadero Blitzø se quedara mirando a la niña con horror.―. Papito la buscó por mucho tiempo pero nunca la encontró.
―Sí, por mucho tiempo, pero no hubo rastro de ella. Incluso entre las diversas reservas de perros infernales...―Stolas luego sonrió y le dio un toquecito en su naricita. ―. Por supuesto, en medio de la búsqueda te encontramos y pronto te adoptamos.
―Sí, por fin conseguí una familia.―sonrió Selena tan radiante que incluso el verdadero Blitzø en medio de su dolor, no pudo evitar encontrarlo adorable. ―. ¡Ahora tenía un papá y un papito, mi hermana mayor Octavia, el tío Moxxie y la tía Millie con muchos primos!
―Sí... bueno... siempre tuvimos la esperanza de traer a Loona de regreso a casa, pero...―Stolas suspiró y negó con la cabeza. ―. Me temo que... llegamos demasiado tarde.
― ¿...Papá?―preguntó Selena inclinando la cabeza, su expresión mostraba que entendía que había sucedido algo terrible. ―. ¿Q-qué le pasó a la hermana mayor Loona?
―...Ella está durmiendo.―susurró Stolas sollozando de nuevo mientras sostenía a su hija contra su pecho. ―, y... me temo que nunca volverá a despertar...
―¿...Como el abuelito Octavius?―susurró Selena con tono triste.
―Sí... como el abuelito Octavius.
El verdadero Blitzø cerró los ojos, retrocediendo. ¿Por qué? ¿Por qué le mostraron esto? Él tenía una familia que parecía tan feliz, pero una familia no era nada sin su preciosa Loonie. Loona... ¿de verdad se escapó por una estúpida pelea?
...Pensó en el día en que comenzó toda esta extraña aventura. Cómo Loona, enfurecida porque Blitzø le había arruinado el día, le había gritado con odio absoluto en su cara: "¡Gracias por arruinar mi noche, Blitzo! ¡Siempre haces tonterías como esta! ¡Te odio! ¡Hazme un favor y desaparece de mi vida!"
¿Esa fue la pelea? ¿O fue algo similar o peor? Blitzø se abrazó a sí mismo mientras más recuerdos de los conflictos entre él y Loona lo atormentaban: Desde el mismo día en que ella comenzó a llamarlo por su nombre en vez de 'papá', hasta el momento en la playa en que ella dijo que él no era su verdadero padre... Durante dos años y medio, cualquier interacción cariñosa se había roto por razones que Blitzø aún no sabía. Todo lo que quería era que su hija volviera a amarlo, llamarlo papá y abrazarlo una vez más... ¿Qué lo había causado? ¿Qué había provocado que su relación se volviera así?
¿...Y si este era su destino si no lo arreglaba?
La escena cambió de de nuevo, y esta vez fue la peor de todas:
Había numerosas coronas de flores con pancartas que tenían las palabras "Descansa en paz", y el verdadero Blitzø se sintió enfermo con solo mirarlas. Se podían ver pequeños santuarios con fotos de Loona desde su infancia hasta la edad adulta con velas encendidas por su fallecimiento. Había asientos llenos de figuras, todas vestidas de negro; Vio a Moxxie y Millie con quienes tenían que ser sus hijos, junto con algunos otros que reconoció como antiguos clientes. Allí estaban Stolas, una Octavia con más edad y la pequeña Selena, todos abrazados mientras el otro Blitzø estaba parado frente a un ataúd negro que estaba abierto para que el mundo lo viera.
El verdadero Blitzø caminó hacia adelante y sollozó por lo que vio: Su hija... se veía tan hermosa. Usando un vestido blanco con flores rosas a lo largo del dobladillo. Su cuerpo yacía sobre un cojín de seda blanca con flores azules a su alrededor. Su pelaje había sido limpiado y alisado. Sus patas, descansando sobre su estómago, brillaban y estaban recortadas a la perfección. Su expresión tenía una pequeña sonrisa como si finalmente hubiera encontrado la paz mientras su maquillaje favorito decoraba su pálido rostro. Era como si solo estuviera durmiendo... pero era un sueño del que nunca se despertaría.
El otro Blitzø seguía llorando mientras colocaba un lirio negro en el ataúd y sollozaba por su amada hija, quien se fue a su descanso final mientras que el verdadero Blitzø cayó de rodillas. Cerrando los ojos, se cubrió la cara y susurró para sí:
―No... no más... No me importa lo que cueste... No me importa lo que tenga que arriesgar... No me importa lo que tenga que perder... ¡No dejaré que este futuro suceda! ¡Lo juro!
El mundo comenzó a desvanecerse lentamente, pero el dolor en el corazón de Blitzø no se fue.
...
Jadeando por aire, Blitzø miró a su alrededor y vio que estaba de vuelta en la tienda con Millie tirando de su brazo. Al darse cuenta de que su jefe había vuelto, Millie suspiró. ―. ¡Al fin! ¡Pensé que nunca saldría! ¡Loona se...!
― ¡¿Dónde esta ella?! ¡¿Dónde está Loona?!―preguntó Blitzø mientras agarraba a Millie por los hombros. Tenía que verla. Tenía que ver que su bebé aún estaba viva y respirando. Las imágenes de su cadáver estaban clavadas en la retina. Quería encontrar a Loona, largarse de allí, abrazarla con fuerza y no soltarla jamás. ―. ¡Carajo, Millie! ¡¿Dónde está Loona?!
― ¡Salió corriendo de aquí como si tuviera miedo de algo!―exclamó Millie señalando la salida. ―. Dijo algo sobre querer ir al baño, pero...
Blitzø no se molestó en quedarse para escuchar el resto, ni miró hacia atrás cuando su nombre fue mencionado varias veces. Tenía que encontrar a Loona. Necesitaba encontrar a Loona. Mientras corría buscándola, la imagen de su rostro pálido y sin vida se apoderaba del diablillo, haciéndolo correr más rápido. El miedo comenzó a devorar su corazón cuando la repentina comprensión de que no tenía idea de dónde estaba ella estaba se coló en su cabeza.
Corrió a todos los baños de su alrededor y registró tanto la sección masculina como la femenina mientras ignoraba los gritos de ocupantes enojados y asustados que llamaban a Seguridad.
Loona no estaba allí.
Buscó en los juegos y atracciones más cercanos.
Loona no estaba allí.
Blitzø incluso intentó preguntar a los empleados si la habían visto, pero le respondieron que no.
Loona no estaba en ninguna parte.
El pánico devoró el pecho de Blitzø y el mundo comenzó a girar a su alrededor. Miró a izquierda y derecha, arriba y abajo, a los lados y al costado del camino, tratando de atisbar alguna colita peluda. ¿Se había escapado? ¿Descubrió la verdad? ¿Fue robada? Numerosas preguntas lo atormentaron mientras su corazón latía cada vez más rápido y el sudor corría a chorros.
Perdió a su hija.
Y en ese momento, gritó más fuerte que jamás había hecho en toda su vida.
― ¡¿DÓNDE ESTÁ MI BEBÉ?!
...
Lucas marcó rápidamente mientras sostenía en brazos a la pequeña mocosa inconsciente: Mientras la niña sollozaba, un simple abrazo durmiente fue todo lo que necesitó y nadie vio nada.
― « ¿La atrapaste, Lucas?» ―preguntó Marcus en la otra línea.
―Conseguí a la mocosa fácilmente.― se jactó Lucas con una sonrisa. Miró a la chiquilla dormida y se preguntó qué tipo de daño podrían hacer él y los demás frente a Blitzø antes de llenarlo a él de plomo.
―«Bien. Vuelve aquí. Si alguien te pregunta, solo di que es tu hija y que se cansó. Pronto tendremos nuestra venganza.»
―No puedo esperar.―dijo Lucas antes de colgar.
CONTINUARÁ.
Glosario/Notas:
(1) Vlad III Tepes (1428 - 1477) conocido como Vlad el Empalador, fue príncipe de Valaquia, Rumania. Célebre por su inconmensurable crueldad hacia sus enemigos, entre los cuales están los famosos 'bosques' de estacas humanas, es considerado un héroe nacional de Rumania. Además de ser la inspiración del mítico "Drácula" de Bram Stoker, fue ancestro de Elizabeth Báthory, la Condesa Sangrienta.
(2) Este capítulo salió meses antes del episodio 5, "The Harvest Moon Festival" , por lo que con Millie serían en realidad 6 hermanos y no 12, pero se decidió mantener como estaba.
(3) Picadero: ("Crack House" en inglés) Término usado para un edificio antiguo, abandonado o quemado donde traficantes y consumidores de drogas pueden interactuar.
(4) Yonqui: ("Junkie" en inglés) Drogadicto, en especial heroinómano.
(5) Esto es más una curiosidad: Durante la emisión del original "Salvando a Blitzø", no se sabía el nombre de Stella; hasta entonces Talos había usado el nombre provisional de 'Selena' hasta el estreno del episodio "Loo Loo Land" , cuando fue finalmente corregido.
