5 - Propósito


Había olvidado lo bien que se siente el contacto humano y como el calor y la alegría de otra persona poder permear sobre la propia. Lisa por mucho que me quiera solo podía ofrecer como máximo un brazo del cual sostenerme… pero era solo eso, un ancla de esperanza.

Lo que tenía ante mí era el barco completo y nada más ni nada menos que alguien que yo conocía, Hannah la chica de mi escuela que me saludaba siempre que nos veíamos en el bus. Siempre tuve la corazonada de que yo le agradaba pero que su timidez no le dejaba acercarse.

La Hannah del pasado ha de estar orgullosa de que esta pueda estar ahora abrazándome.

—Lincoln, no te imaginas lo feliz que estoy de encontrarme contigo, cuando empecé a escuchar los ruidos pensé por un momento que alguna criatura se había escabullido en mi refugio.

—Me quitaste las palabras de la boca. — respondí con una sonrisa al mismo tiempo que me fije en el bate que llevaba sujeto con una correa montada en su cintura. —Me alegra que me viste a mi primero, posiblemente hubieras atacado al dron de Lisa.

—Sin duda lo habría hecho, lo mejor en estos mundos es golpear primero y preguntar después.

El dron de Lisa, que hasta ese momento se le había quedando viendo a mi amiga, finalmente volvió a reaccionar, dando un pequeño salto aéreo, — perdón por la ausencia chicos, solo estaba corroborando si algún familiar de Hannah se encontraba en el refugio. Lamento informarles que la búsqueda no produjo resultados.

Hannah se separó de mí y se le acercó al dron de Lisa, —¿Un dron funcional? … Curioso…

La chica se quedó un rato pensativa, ni idea de lo que estaría pasando por su cabeza. —Oye Lisa, — llamé, —¿Ahora como deberíamos de seguir? Si nos encuentra alguno de esos monstruos de antes-

—No detectó la interferencia que esas criaturas suelen proyectar, — aclaró con rapidez mi hermana, —tal vez estas oficinas puedan servirnos como nexo. Además, con las piezas electrónicas que encontramos aquí se abre la posibilidad de que termine mi trabajo dentro de dos días.

—Espero que al menos este considerando dormir doctora, — la voz de un hombre venia del dron, seguro que un compañero de Lisa.

—No estamos en peligro inmediato, — respondió mi hermana con algo de apatía en su tono, —gastar preciadas horas en dormir sería un desperdicio.

Pronto la pequeña sugerencia había desencadenado una pelea que termino en el apagado del dron. Cambié mi enfoque y volví con Hannah, quien aún estaba pensativa. —¿Sucede algo?

—¿Eh? — Hannah me miró, sus ojos evitándome poco después de que hubo contacto visual, —no, nada. Solo me perdí por un momento. ¿Te Parece si hablamos un rato? Me intriga saber porque aun conservas tu cuerpo en ese estado.

Apunte un dedo hacia mí pecho, —¿Mi cuerpo? La verdad no lo sé, Lisa descubrió que mi ropa lleva existiendo por al menos veinte años, pero no entiendo por qué mi cuerpo no creció. La única conclusión que se me ocurre es que donde me quedé dormido era un sueño…— por un breve momento note un movimiento, pero no quise prestarle atención, — que termino alterando mi cuerpo.

—Interesante…— Hannah entonces se sentó en un escritorio del lugar, — ¿y solo eso cambio? En los años que me he estado moviendo entre mundos he visto y experimentado cada cosa. Hace unos años incluso me topé con un sitio que volvía el aire que exhalaba en azúcar. Fue una experiencia horrible, perdí la cuenta de las veces que casi me ahogo.

—La verdad a primeras sonaba como un buen sueño, —otra vez me fije que Hannah reaccionaba ante esa palabra. —pero es bueno que salieras con vida. Te soy honesto me sorprende que hayas logrado sobrevivir tanto tiempo. Yo literalmente morí tan pronto como crucé la primera puerta.

Hannah quedó confundida ante esa declaración; la verdad fui un tonto al pensar que podría soltar algo así como si nada.

—Lo siento, debí explicarme mejor. Ese mismo cambio en mi cuerpo me hizo inmortal de alguna forma. Los huecos en mi ropa… son sitios que mis huesos traspasaron luego de mi primer encuentro con una pesadilla.

Los ojos confundidos se tornaron hacia el suelo, su flequillo me imposibilitaba verla directamente, pero era claro que algo estaba mal.

—¿Hannah, estas bien?

—Sí, es solo que tenía una duda… sueño, pesadilla… ¿Por qué los llamas así?

¿Sera bueno hablarle de ti? Pensé, Bueno considerando por todo lo que ha de haber pasado es muy probable que si me cre-

El monitor al lado de Hannah explotó de forma súbita.

—¡¿Pero que demonios?!

¿Eh?

Los ojos de Hannah se dejaron ver nuevamente, — te vi. — estaba molesta, y su mano pronto tomó en posesión el bate.

¡Huye, huye!

Light me estaba gritando sin parar, pero no podía solo hacerle caso esta vez, era ilógico.

—Hannah, oye, oye, no entiendo que pasa.

—Parece que no estas enterado de lo que te sucede. Lo cual no debería ser el caso… a menos de que alguien se beneficie de ello.

En un rápido movimiento Hannah lanzó el bate hacia arriba. La madera giro dos veces en el aire antes de arremeter con fuerza contra la cabeza de la niña.

Pero esta ni se inmutó.

—Veras Lincoln, la verdad es que no sobreviví por tanto gracias a mis habilidades. — Los ojos de Hannah brillaban de un rojo escarlata, con un brillo y color imposible de conseguir con la iluminación del lugar.
No era eso, la luz venia de ella, y su voz también estaba cambiando de tono, volviéndose más neutra, y con un chirrido estático. — Tenía miedo, hambre, era débil y mis esperanzas estaban por los suelos. Necesitaba ayuda, de alguien que me acompañara.

—Y entonces eso vino… — finalmente su voz se tornó abstracta, una mezcla de múltiples voces al unísono, — aquello que tu llamas pesadilla, aquello que otros llaman pesadilla, yo le llamo Tee. Es tierno y le encanta estar siempre inventando cosas, haha.
El cuerpo de Hannah empezó a levitar con la misma velocidad que cursaba sobre mi cuerpo un escalofrió, mis piernas no aguantaron la sacudida y terminé cayendo en el suelo. No, no era solo el miedo, algo, un peso, una presión gigantesca estaba sobre mí.

—Me sentí bien estando junto a ellos, llevaba años sola, ¿Tú me entiendes no? Es horrible… no quiero eso para nadie o nada. Lo que quisiera es que todos se sientan tan seguros como yo cuando estoy junto a ellos. Pero…

El pánico inicial se estaba asentando de a poco, y ya podía intentar arrastrarme lejos de ella, aun cuando la tarea pareciese fútil.

Hannah suspiró, el sonido saliendo de su boca parecía provenir de un altoparlante, — No todos son como Tee, buscan mantener el control en todo momento, ser los dueños de todo y todos. Descubrí por las malas que los hermanos de Tee no quieren su compañía, Es por eso que es un peligro latente dejar a Light dentro de ti.

Me detuve en el acto, el miedo forzándome a tragar, llevándose consigo algo de aire y lastimando mi garganta; me sostuve del cuello por instinto para apaciguar el dolor.

¿Como? ¿Cómo sabe sobre Light?

Puedo sentirlo, Light no quiere tampoco compartir este sitio con Tee.

Cables empezaron a surgir de las paredes, equipos, y escritorios, jalando el mundo entero hacia atrás y en respuesta un chirrido metálico rechino por todo el lugar, y aun cuando era madera y metal lo que se movía, dentro de mí solo podía ver imágenes de huesos y músculos siendo descuartizados y luego restaurados.

El mundo estaba siendo desgarrado más allá de su límite, y las imágenes que me provocaban me hacían imposible mover el cuerpo.

— Hannah, que… ¿Qué es esto?

Mi pecho se empezaba a inflar conforme intentaba robar más aire del que podía tomar, pero esa falta de aire me parecía innatural. El sonido me estaba afectando, pero cuando veía las paredes a mí alrededor volverse más grandes algo más surgía.

Incertidumbre, pánico, un miedo irracional. ¿Era inútil escapar? ¿Volvería a experimentar la muerte? ¿Por qué no podía solo enfocarme en correr? Era como si no tuviera sentido nada, como si-

¡MAMÁ SAL DE ALLI!

La llamada de Light logró darme un momento de claridad, suficiente para frenar el sentimiento de desamparo dentro de mí y permitirme poner pies sobre la tierra nuevamente. Tenía que huir, donde fuera, a cualquier puerta que encontrase.

Mis pies aun dolían, mi cuerpo aún se sentía pesado, y mirar hacia las paredes más lejanas aun hacia que mi corazón intentara romper mi pecho y escapar de mi cuerpo; y aun con todo eso logré seguir corriendo.

—¡Es inútil Lincoln! — La voz ominosa de Tee resonaba dentro de mis oídos, — ¿Acaso no lo entiendes? No puede haber más de uno de nosotros en un solo sitio, tarde o temprano Light necesitara moldear la realidad al gusto de ellos; el conflicto es inevitable.

Miraba a mi alrededor por una forma de escapar, pero con cada posibilidad escapándose, con cada segundo que la oficina se volvía más un valle de cables, el miedo dentro de mí se volvía más fuerte, y a eso se le iba añadiendo un dolor profundo en la boca de mi estómago.

—¡Cállate, cállate, cállate! — Gritaba en un intento de alejar mis pensamientos del valle inquietante, —¡No me importa lo que digas, Light nunca me ha hecho nada malo solo queremos encontrar a mis hermanas, encontrar a Lucy!

—¡¿Lincoln con quien estás hablando?!

— ¿Eh? — Inhalé con dificultad a lo que hice el esfuerzo de mirar hacia mi izquierda; era el dron de Lisa, estaba encendido de nuevo, — a Tee, la cosa que está poseyendo a Hannah. Es uno de esos monstruos.

—¡No llames a mi amigo un monstruo! — podía escuchar a Tee gritar dentro de mi cabeza.

— ¿Que? Pe… ¡No importa solo sal de all…! — Lisa fue interrumpida, su máquina se apagó por un mero segundo, solo para volver a encenderse antes de caer al suelo y retomar vuelo. De sus bordes la luz escarlata de Tee era expulsada a una velocidad alarmante.

— ¿Lisa? — jadee de nuevo, casi perdiendo el equilibrio, pero pronto sacudí de mi cabeza el pensamiento de haber perdido a Lisa, esa solo era una máquina, mi hermana tenía más de esas.

En menos de dos segundos un fuerte sonido reventó mi oído izquierdo, ensordeciendo mis sentidos. No me importo, tenía que seguir huyendo, no sabía que tan cerca estaba Tee, pero tampoco tenía las fuerzas para poder voltear y corroborar, lo que me quedaba de fuerza solo podía ser usada en buscar una salida, y al fin tenía a la vista una.

A mis dos en punto se encontraba una salida. Un marco de puerta que parecía retraerse a su forma original cada que los cables intentaban jalarla, una entrada que daba visión a un campo verde, un prado donde el pasto podía llegarte a los talones, libertad.

Una felicidad se empezó a apoderar de mí, y aun cuando esto hizo que lograra sentir el dolor en mi brazo y oído, no podía evitar no sonreír. Un respiro, no, más que un respiro: salvación. Si lo que Hannah le dijo antes era cierto, otra pesadilla estaría esperando del otro lado, una pesadilla que sería capaz de ahuyentarle. Solo tenía que-

—Es inútil…

Tee… no, Hannah, era su voz de antes, justo detrás de mí.

—Sabes, pude haberte encerrado en una ilusión… un cuarto con realidad aumentada. Pero eso no hubiera sido suficiente, así que aquí estamos…

Podía ver una casa a lo lejos, descansando sobre una montaña nevada a la distancia, la salida más cercana. Me tomaría al menos un día entero corriendo llegar allí…

—Los otros se darán cuenta pronto que estoy usurpando su espacio, —Como si el destino mismo leyera sus palabras, el sol empezó a actuar de forma extraña, se estaba volviendo más grande, y más próximo, —Ah, no, ya se dio cuenta… bueno Lincoln, tú decides, volvemos a la habitación, o yo y Tee te perseguimos por el resto del viaje. Tee me puede proteger a mí, pero creo que Light no es de mucha ayuda para pelear contra otras pesadillas, ¿no?

Tomé un respiro lento y contuve el aire por un breve momento para disfrutar ese pequeño momento de libertad antes de que se me fuera arrebatado por completo; y mientras veía como el sol de ese mundo se acercaba a una velocidad alarmante, dije: —Solo… solo no nos hagan daño por favor.

—Eso dependerá de Light.


Habíamos regresado a las oficinas. Los cables cubriendo el lugar seguían allí, pero el sitio había vuelto a su tamaño original. Estaba sentado en el suelo con el libro en mi regazo abierto para dejar que la mano de Lisa saliera y sostuviera la mía.

Lisa tenia manchas de grasa en su muñeca, manchas cortadas antes de llegar a sus manos. Posiblemente estaría usando guantes hace un momento. El calor y sudor en sus manos también daban fuerza a esa idea.

Un dron intentó salir desde el plano de Lisa pero Tee destruyó sus circuitos tan pronto como salió del libro.

—Por favor, déjala enviar una de sus máquinas, es la única forma que tiene para comunicarse conmigo. Yo la detendré si intenta hacer algo.

Hannah entrecerró los ojos, —Alguien capaz de crear máquinas que se muevan entre los sueños. Tee no creé que una humana debería ser capaz de hacer eso posible. Solo los seres vivos pueden abrir las puertas.

Para probar su punto Tee movió los claves de la habitación, jalando la puerta de antes hacia la proximidad de ambos para luego lanzar una laptop que reposaba en uno de los escritorios hacia el otro lado. Pero no me impresionó tanto el ver como la laptop se mantenía en su campo de visión, sino el hecho de no poder ver el mismo campo verde esperándome del otro lado, era solo una entrada a otro pasillo ahora, una entrada con una laptop rota del otro lado.

—Y no es solo eso, también está el hecho de que ella puede moverlas usando algún tipo de señal, lo cual veo imposible. Las únicas señales que ella puede usar son las del sitio donde está, y aun así es posible que otras realidades alteren el flujo de su propia señal.

Apreté levemente la mano de Lisa, —No… no lo entiendo. Por favor, es mi hermana, no me ha visto en más de diez años. Solo déjame convencerla de que no intente nada peligroso.

Hannah se me quedó un rato mirándome, sus ojos cambiando de tonalidades de forma fluida, como si sus cuencas fueran una ventana hacia una galaxia en movimiento.

—Está bien, pero te dejare esto en claro, Lincoln, si veo que Tee peligra de alguna forma voy a eliminar ese libro, a tu hermana y a Light de todo esto.

Hannah cumplió su palabra y dejo que otra máquina de Lisa saliera, le explique rápidamente la situación en la que estaba y lo que pasaría de llegar ella alterarse.

El robot de Lisa entonces se colocó sobre mi hombro, la cámara dirigida hacia Hannah.

— En resumen, Light si existe…

Volteé rápidamente hacia el dron, —Espera, ¿no me creías?

—Siempre he sido una escéptica, Lincoln, aun con la realidad hecha trizas no podía ignorar la posibilidad de que Light era un invento de tu cerebro para protegerte. Pero…— Pude sentir como Lisa apretaba mi mano, —me alegró de que en verdad no estuvieras solo todo este tiempo.

Una cálida pero breve sensación recorrió mi pecho, Gracias Light. Pensé instintivamente.

—Bueno, suficiente, luego hablare con Lisa, por el momento nos interesa hablar con Light. Haz que salga.

—¿Eh? Apenas y la puedo escuchar de momentos, no creo que Light sepa tampoco como salir.

—Interesante…— Hannah entonces miro por un rato hacia el techo, —Tee dice que ella debió de haber salido en los momentos que estabas inconsciente.

—¿Inconsciente? Perdí la conciencia una vez, pero por las mordidas en mi ropa y la sangre que había en el suelo pensé que algún monstruo me había llevado hasta el lugar en donde desperté.

Hannah volvió a mirar al techo, —la segunda opción es buscar lo que hace a Light un dios... Tee tiene otro nombre para eso pero… nunca entiendo que significa así que les llamo dioses. Tee le encanta crear cosas, así que si yo empiezo a modificar circuitos con algunas de las piezas de acá puedo terminar invocándoles.

Lo pensé por un rato, pero solo una cosa en específico se me venía a la mente, —cantos, Light ha podido "hablar" conmigo usando canciones.

—Hmm…— Hannah se quedó pensando un rato, aunque debo admitir que luego de los primeros cinco segundos me pareció extraño.

—¿Has intentando cantarle tu alguna vez? —finalmente preguntó.

—No, no lo he intentado; aunque si lo pensé una vez. El problema es que no se en que momento en verdad esta despierta.

—No importa, se despertara en cualquier caso.

Con eso dicho, intente cantar a algunas de las canciones que recordaba. Probé con canciones de pop, rock, rap… fuera triste o alegre, nada parecía ayudar…

En ese momento, a Lisa se le vino a la cabeza una idea, y para ello tuvo que asegurarse de pedir permiso a Hannah y avisarle que iba a sacar una nota. Hannah le permitió moverse y luego de un par de minutos la mano de Lisa volvió a salir del libro con una nota en su posecion.

—a ver… dice: es una canción importante para mí, pondré la música de fondo mientras la cantas. — Dije antes de escuchar la tonada, era un piano pero sonaba artificial, y la música repetía cada tantos segundos.

—Bueno, nada cuesta otro intento, igual tu voz es hermosa. Hasta a Tee le gusta.

¿Debería de alegrarme por escuchar eso de la persona que hace unos momentos me estaba persiguiendo como si quisiera matarme?

La pregunta era válida, pero ya los músculos de mi boca habían formado una sonrisa.

—Okay, lo intentare…— y entonces me preparé con un respiro lento.

Y la música volvió a repetirse.

Gracias

Gracias por todo, mi amor.

Pero el fin del mundo no es,

No te has de culpar.

En ese momento sentí temblar la mano de mi hermana. Me apretó fuerte, como si tuviera miedo.

Y si es verdad,

Pues yo me encargo

Creare otro mundo para ti

Para los dos…

Repetí otras dos veces la letra, no por intentar de nuevo, simplemente sentí que tenía que repetirla.

Era un buen presentimiento, tenía que funcionar, ¿no?

Pues no…

—Olvídalo, Lincoln, no es eso… necesito pensar por un rato— Hannah se levantó y con un movimiento hacia arriba de la mano invoco púas a mi alrededor. —Quédate allí, ya vuelvo…

La vi por un momento dudar cuando se dio la vuelta, como si quisiera decir algo más. Al final sacudió su cabeza y se marchó.

Parece que aún hay algo de la antigua Hannah en ella.

—Oye Lincoln, — era la voz de mi hermana, —sé que no era la intención… pero agradezco que hayas cantado esa canción.

Con mi mano libre acaricié los dedos de Lisa, —Esa canción era importante, ¿no?

—Si… hace unos años conocí a alguien, un músico. Solía ser una recolectora en el refugio pero el hizo que me gustara la compañía de otros… No, déjame corregir, ya a mí me gustaba estar en compañía, siempre me gusto tenerte a ti y a todas nuestras hermanas; podía incluso enfrentarme a las leyes del espacio tiempo con tal de quedarme junto a ustedes.

Sentía con cada palabra como un picor consumía mi pecho; quería rascarme para intentar aliviar el malestar, pero eso significaría que una de mis dos manos estaría lejos de Lisa, y en ese momento no podía dejarla sola.

—Cuando los perdí a ustedes… perdí mi rumbo, no dormía bien, no me alimentaba bien, incluso mi habilidad para la ciencia se estaba viendo afectada por mi necesidad de reencontrarme con ustedes, de que algún día los volvería a ver. Gerald era un músico, no uno como Luan que puede entretener a todos, era de esos que puede sentarse en una fogata, cantar y reconfortar a todos, volver a un grupo de extraños en una familia.

No era difícil ver hacia donde iba todo, tal vez por eso el dolor se volvió más fuerte, sabía que Lisa me iba a necesitar allí para terminar de contar su historia, y lo único que podía ofrecerle era el tacto de mis manos.

—Ger no estuvo mucho tiempo con nosotros, había heredado una condición médica. Su corazón, incluso con mi ayuda, duró poco más de dos años. — Su mano otra vez estaba temblando, —él me superaba por diez años cuando lo conocí, era un joven tonto y tierno que creció en alguien apuesto, y algo desnutrido; pero no puedo pedir por adonis en un lugar como este hehe…

—Lisa…

La respiración de mi hermanita se quebraba y por la forma en que la escuchaba sabía que estaba cerca del micrófono, tal vez apretándolo igual de fuerte que mi mano.

—Apenas tenía dieciséis cuando se fue… nunca lo bese, no pude darme el gusto de decir que él era mío y que yo era de él… — Tomó un respiro, —pero él sabía lo que yo sentía, y.

Silencio. Solo podía saber que seguía allí por el sonido de ambiente que salía del micrófono.

—Siempre fui alguien orgullosa, es una maldición en momentos como este, donde solo quiero expresarme… pensé que contigo podría liberarme un poco pero.

—Desearía…— la interrumpí, pero Lisa no volvió a hablar así que continúe, —Desearía poder estar allí hermanita, decirte que tienes en mi un hombro donde llorar, que me hubiera gustado verte feliz y enamorada. Desearía poder abrazarte y decirte, una y otra vez, que puedes llorar.

La respiración cortada de mi hermana resonaba en mi cabeza, y junto a esta el sentimiento de impotencia.

Quisiera estar allí.

Una necesidad por dormir se apodero de mí, intenté combatirla pero mis ojos no me respondían, y poco después el resto de mi cuerpo tampoco.

Quisiera verte de nuevo, verlas a todas de nuevo…

Con lo que me quedaba de conciencia me enfoqué en la mano de mi hermana, intentando dar todo el amor que pudiese antes de caer.

Quisiera poder acompañarlas en todo momento…


Nota de autor: Mis disculpas por este mes (casi dos) de inactividad, un proyecto secundario me ha tenido entretenido y me alejó de mis otras historias.

La canción que usé de referencia para una sección de este capítulo es "Goodbye To A World" de Porter Robinson. Espero lo disfruten, estare nuevamente con el proyecto secundario y luego volvere áca.