(Descargo de responsabilidad: No soy dueño de los personajes del elenco de Gintama ni de Ranma ½ y ya saben lo que sigue).
Capítulo 9:
El poder de dos
Interrumpimos este programa por una edición especial
Despertando en medio de la calle con una terrible Jaqueca Sakata Gintoki se sienta en el suelo llevando una mano en el área de su frente mostrando una mueca de dolor reflejada en sus dientes.
- Maldita sea con este mareo, esta vez me he pasado con el Sake Kagura ¿Dónde dejaste las aspirinas? Pregunto a modo de grito, sin recibir respuesta alguna el apodado como demonio blanco abriendo sus ojos a punto de quejarse toda palabra murió cuando su ceño se tornó incrédulo observando como una parte de la ciudad fue diezmada y atacada viendo como el Shinshengumi se encargaba de poner a salvo a los civiles conforme los médicos y enfermeras se encuentran esparcidos acudiendo a los civiles para curarlos.
Impulsado por un mal presentimiento Gintoki se corriendo a su morada que se ubica a pocas casas de su posición, llegando al Bar su expresión se tornó a preocupación observando como los médicos atendían a una anciana sentada en una banca conforme la enfermera termina de vendarle su brazo.
- Puedo ver que sigues convida, anciana. Pronuncio Gintoki caminando hacia su casera.
- Cállate vago bueno para nada, no sé en qué te has metido esta vez pero debí suponer que estas involucrado. Protesto Otose ladrando disgustada – Esos desgraciados salieron de la nada y destrozaron el bar.
Pese a sus ojos fríos de pescados Gintoki miro confuso a la anciana - ¿A qué te refieres?
- Unos payasos vinieron de la nada se veían sospechosos, parecían hombres pero de la nada se convirtieron en monstruos y espantaron a todos mis clientes, cuando los enfrente fueron demasiado para mi es cuando ese saco de pulgas gigante vino y los espanto. Comento Otose señalado con su pulgar a Sadaharu sentado en el sipo mientras un veterinario le cura las heridas.
- Puedo darme cuenta de eso, uhhh ¿Dónde están Kagura y Shimpachi? Teníamos un trabajo.
- ¿No escuchaste lo que acabo de decirte? Pregunto la anciana encabronada elevando su tono de voz al nivel de grito por lo que el peliblanco tuvo que taparse sus orejas con sus manos para no quedar sordo, en su enfado Otose afilo su ceño mirando al Samurai como si fuera estúpido - ¿Qué acaso no lo recuerdas?
Llamando su atención el Samurai peliblanco adopto un semblante que denota interés y confusión – Creo que no.
…..
Desde la entrada de la ciudad
Saltando de un árbol a otro con la habilidades que superan a las des ninja aplicando un salto largo desde la rama que estaba parado dando varios giros en el aire da un aterrizaje perfecto sobre sus pies.
- Bien ya regrese, hombre Otae y sus ideas de mandarme a la ciudad vecina para conseguir jengibre solo porque tienen mejor precio es algo exagerado. Pronuncio un joven artista marcial Ranma Shimura antes conocido con el apellido Saotome se reincorpora, al ser enviado a comprar el ingrediente le tomo horas de viaje a pie aun con su método de viaje, fue cuando vio el desastre ocurrido es que suelta el pequeño saco a lo visto fue lo más parecido a un escenario sacado de una película de desastre naturales donde un huracán paso dejando el caos, en su entorno ve hogares, civiles y animales son atendidos por los médico, enfermeras y demás organizaciones de rescate - ¿Qué demonios ha pasado aquí?
Su preocupación llego pensando en sus primos por lo que corriendo se puso en marcha corriendo por las calles Ranma fue dando su ayuda a los civiles ayudando a la gente a rescatar a los demás que siguen en estado de peligro entre los escombros de los hogares derribados o los que recibieron heridas de moretones como daños con armas filosas como daños internos siendo un número considerado mientras tanto su preocupación iba en aumento. Avanzando en su paso el artista marcial conforme avanza se encuentra a una cortesía de la muerte junto a sus chicas que brindan su apoyo a las víctimas por lo que se acerca a las mencionadas.
- ¿Conque al fin das la cara? Pregunto una nada contenta Tsukuyo fumando de su pipa apartada del resto de sus colegas.
- También me alegra verte Tsuku – Le responde con sarcasmo Ranma mirando a la puta con ceño afilado mostrando su seriedad - ¿Dime que mierda fue lo que paso? Toda la ciudad es un caos nadie me dice nada ¿Y dónde están Shimpachi y Otae?
- Eso iba a preguntarte, sabía que tu aparición traería consecuencias a este lugar tranquilo, tú y ese baka son iguales siempre atrayendo a fenómenos.
- No sé de qué estás hablando, más preciso no puedes culparme de esto lo que haya sido yo acabo de llegar y de pronto veo que todo se convirtió en una mala película de monstruos.
Afilando su mirada la mujer ve directo a los ojos del artista marcial notando que dice la verdad aunque estos dos no se lleven muy bien debían ver que están en la misma situación, es así que soltando un suspiro Tsukuyo decidió tragar su orgullo sin aligerar su semblante serio – Vinieron de la nada a principios de la tarde un extraño grupo de gente vino en tu búsqueda, al principio no parecían hostiles, nos sorprendieron cuando de la nada se transformaron en monstruos atacaron a todos sin razón intentamos detenerlos pero nos superaron en número de 20 a 0 fue que comenzaron a destruir y saquear todo el sitio se robaron todo lo de valor.
- Eso suena difícil ya que estando ustedes, el Yorozuya y esos incompetentes del gorilon es difícil creer que alguien pudiera con ustedes.
- Mira cállate y déjame continuar, enfrentamos a los forasteros lo mejor que pudimos pero terminaron por vencernos, Gintoki vino a respaldarnos con sus empleados , esos bastardos se llevaron a Shimpachi y Kagura en medio de la batalla también secuestraron a esa chica de más carácter..
- ¿Qué fue lo que dijiste? ¿Se llevaron a mis primos y a la tomboy? Pregunto Ranma serio aproximándose a la mujer cerrando sus manos en puños a su vez su enojo iba en aumento – Dime quien lo hizo e iré por ellos.
Exhalando el humo de su boca Tsukuyo piensa fríamente en que debiera continuar hablando, de por si ella y la coleta no eran exactamente los mejores amigos pero por mucho que quisiera sentía que le debía una por lo sufrido con la Poción De Amor, en medio de las accione de Yorozuya cuando todos estaban bajo los efectos de la droga la coleta separándose del grupo tuvo que lidiar con los pervertidos que acosaban la mayoría de las mujeres en el área poniendo a dormir a la mayoría conteniendo su fuerza para no matarlos, fue en eso que llego hasta un área en específico donde vio que su prima derribando a varios hombres con sus puños, como estos caían volvían como si nada rodeando a la joven, sabia que Otae es fuerte pero ahora que estaba bajo sus efectos resulto más vulnerable y era cuestión de tiempo hasta que se agotara, es entonces cuando los hombres iban a abordarla una poderosa patada de la coleta los desvió siendo Ranma que les cerraba el paso.
Lo peor de esto fue que en un descuido de una anciana en el segundo piso de su casa sin querer hecho una cubeta de agua fría sobre donde estaba la coleta, ante las vistas de los hombres resurgió una pelirroja de menor estatura de busto grande, como si hubieran ganado el premio gordo por ambas chicas impulsados por sus instintos naturales los hombre se lanzaron a las chicas, los próximos minutos las primas Shimura estuvieron derribando a sus acosadores con sus propias manos dando una buena coreografía trabajando en equipo.
Para colmo de las cosas Ranko ha tenido que enfrentarse a Kyubbei evitando que así matara a una mujer inocente por culpa de esa droga siendo una víctima, pero una vez más el destino le jugo en su contra, ya que esquivando un corte de la Katana de la joven del parche ella dio con un tuvo plomería del cual salió agua caliente mojando a la pelirroja, de su ojo parpadeando la espadachín contempla al primo de su amiga con sus ropas húmedas pegadas a su cuerpo marcando un poco su físico trabajado a lo que un ligero sonrojo se notó en sus mejillas, acto seguido se ve a Ranma escapando de una Kyubbei con su ojo en forma de corazón con su arma en su mano, así es al aspirar la droga hizo que Kyubbei se enamorara de Ranma.
Dejando caer sus hombros Otae ante tal situación con el fin de salvarle el trasero a su primo fue tras ellos evitando que su mejor amiga lo violara lo que en un par de veces lo reconsidero ya que significaría que tendría sobrinos pero como no podría hacerle eso a su sangre tuvo que resignarse.
- Puedo ver que no te diste cuenta que se llevaron a tu amiga la acosadora. Responde Tsukuyo con una sonrisa burlona lo que puso confundido al artista marcial.
- Espera también se llevaron a Ayame, era lo que faltaba.
- ¿Preocupado por tu novia?
- Ella no es mi novia, pero si tuviera que elegir la prefiero a ella que a cierta Tsundere que estoy viendo. Le devolvió el comentario Ranma generando una vena amine en la cabeza de la mujer rubia.
Tsukuyo iba a responder cuando escucharon la voz de un peliblanco acercarse a paso de correr así que poniéndose al día con lo sabido, tras discutir un rato sobre el par de hombres jóvenes se separaron de la mujer atractiva, sin hablar mucho, era claro que ambos no se llevan muy bien que digamos habiendo cierta tensión que podía estalla en cualquier instante, mirando por el rabillo de su ojo al peliblanco concentrado en otras cosas la coleta sabía que este y la cortesana de la muerte tenían cierta atracción especial claro que ninguno lo admitiría pero la atracción está ahí, debes en cuando los había visto coqueteando aunque estos lo negaran.
Por parte de Gintoki no era distinto, tener que pasar tiempo con este afeminado como le dice le parecía repugnante, no le agrado nunca este sujeto porque actúa demasiado serio ya que no bebe, no sale de parranda, y mucho menos se vio andar de putas ya que odia a esas mujeres prefiriendo quedarse al margen, demasiado aburrido para su gusto llegando a pensar que pudiera ser Gay de ser así entendía porque Kagura lo trata así en su opinión los fenómenos deberían estar en un circo pero mientras no se meta en su camino no será su problema.
Los pensamientos del artista marcial se detuvieron cuando se detuvo de repente llamando la atención de un descuidada Gintoki que ve raro a la coleta con el semblante filoso de Ranma mirando hacia un lado le hizo sospechar.
- ¿Ahora tu qué te pasa? Le pregunto vagamente Gintoki.
- Por allá siento una presencia debajo de esos escombros. Declaro rápido Ranma señalando hacia una dirección.
Sin dudar ambos corrieron hacia los escombros de una de las casas destruidas, entre los restos de un techo caídos moviendo las rocas y pedazos de escombro por fin dieron con una espadachín con un parche en su ojo.
- Es Kyubbei. Dijo el samurái peliblanco.
- Kyubbei reacciona, di algo. Expreso el artista marcial.
Con algo de dificultad la mencionada abre su ojos observando al par de muchachos - Gintoki, Ranma por fin llegaron.
- ¿Dinos quien hizo todo este desastre? – Le pregunto Gintoki inexpresivo - ¿Quien hizo esto?
Antes de poder decir algo la samurái vuelve a cerrar su ojo.
- Maldición Kyubbei despierta – Exclamo Ranma preocupado cargando en brazos a la antes dicha la coleta poniendo dos dedos en un lado del cuerpo siente su pulso – Todavía respira esta inconsciente.
- Ya que será mejor conseguirle atención medica. Se apresuró a decir Gintoki a lo que ambos la llevan al Hospital.
….
En el espacio
Dentro de una nave espacial cerca del sistema Andrómeda unos seres mitad hombre mitad gárgolas con una piel verde con escamas cubriendo su cuerpo, portando un par de alas en su espalda y pantalones largos color morado sin usar calzado pisando el suelo con sus pies teniendo garras en sus tres dedos uñas del diámetro de velos raptor como en sus manos teniendo cuatro dedos y ojos purpura llevando en una manos lanzas retroalimentadas con electricidad llevan cautivos a Otae, Kagura, Ayame y Shimpachi esposados con esposas futuristas que reprimen la fuerza de la chica más pequeña como la de Otae.
Pasando entre las demás celdas donde se hallan diversas especies de extraterrestres por fin llegan a una vacía con oprimir un botón de sus muñequeras desactivan los barrotes de energía a lo que empujan a los humanos dentro de la celda volviendo a activar los barrotes que cuando Shimpachi en un mero intento de correr hacia sus captores termina electrocutándose lo que hizo que saliera disparado dentro de la celda dando contra una de las paredes de metal reforzado. Así cayendo sentado en el suelo.
- Shimpachi-chan. Grito Otae yendo en auxilio de su hermano.
- Oigan reptiles ¿Para qué nos trajeron aquí? Les reclamo Kagura mirando feo a sus cautivos.
- Guarda silencio chimpancé, comparados a ustedes los Reptiliatrus estamos en lo más alto de las especies. Le dijo uno de los secuestradores sonriendo con superioridad a la niña.
- ¿Qué quieren de nosotros? ¿Para quién trabajan? Pregunto algo adolorido Shimpachi poniéndose de pie con ayuda de su hermana.
- Es un chiste, ustedes los terrícolas son una raza misteriosa como valiosa para vender en el mercado negro como esclavos, en especial las jóvenes terrícolas no ellas son las preferidas de muchos gobernantes son vendidas como esclavas sexuales con fines reproductivos.
Los hermanos Shimura como el par de chicas fruncen el ceño ante lo que acaban de escuchar, el enojo iba en aumento en conjunto con su desesperación acto seguido Otae rodeada por su aura sádica se acerca al lado de Kagura.
- Eso ya lo veremos, cuando mi primo llegue aquí arruinara tu cara y si él no lo hace yo lo hare. Pronuncio Otaae mostrando sus verdaderos colores intimidando un poco a los Reptiliatrus lo que no duro volviendo a verla son soberbia.
- Lo que dijo ella además Gin-chan vendrá a rescatarnos y cuando lo haga lo lamentaran. Declaro segura Kagura mirando seria a sus captores.
- Ah sí, pues cuando vengan a su muerte dígales como es siente esto. Exclamo el guardia golpeando con su arma de electricidad al par de chicas recibiendo diez veces la descarga de un teaser en su cuerpo haciéndolas gritar por el inmenso dolor.
- Anee-san, Kagura-chan. Grito Shimpachi tras la tortura impuesta.
- Humanos esta es una demostración que nuestra especie esta sobre cualquier otra, hasta entonces despídanse de sus patéticas vidas. Declaro el hombre-reptil en modo de borla con su tono de villano a lo que los tres extraterrestres se fueron por el pasillo.
E u lado de la celdas Ayame ve todo de forma analítica llevado una mano sobre su cabeza (Gin-san ven pronto a salvarnos, no obstante ¿Por qué no puedo dejar de pensar en Ranma? ¿Y por qué mi corazón late más fuerte?) El recuerdo de ese beso invadió sus mentes viendo la realidad que no había visto.
…
De regreso a la tierra
Ya en el Hospital
En los pasillos del área de visitantes junto a Otose, Catherie, Katsura nuestros dos protagonistas se encuentran discutiendo.
- ¿Y tú se puede saber dónde demonios estabas? Te confié a mi prima y su seguridad. Le reclamo Ranma al peliblanco.
- Por lo menos yo estaba aquí intentando salvar a las personas tú en cambio te fuiste a perder el tiempo en otro sitio. Le devolvió el grito Gintoki enojado.
Mirando con molestia al demonio blanco aproximo su ceño al del mencionado - ¿Quieres pelea simpático? Pues aquí me tienes.
- Encantado Afeminado. Le respondió el demonio blanco.
- Basta los dos – Los interrumpe Otose separándolos – no es momento de pelear entre nosotros, lo menos que necesitamos es perder la cabeza.
Si las miradas mataran ambos ya estarían muertos por los puñales que se lanzan por lo que ambos se dieron la espalda cruzados de brazos.
- Se llevaron a Shimpachi y a Otae y este estúpido dejo que los secuestraran. Disparo promero el aquasexual señalando con su dedo al peliblanco en su cara.
- Por si no te diste cuenta también se llevaron a Kagura. Responde el demonio blanco mirando serio al sujeto de frente.
- Y no solo ellos, la acosadora de Gintoki también desapareció en el ataque. Se limitó a decir Katsura desde su asiento a lo que el samurái responde.
- No es mi problema.
- ¿Qué no te preocupas de que a tu novia le pase algo? Le pregunto el Shimura adoptado mirando mal al peliblanco elevando su tono de voz.
- Ella no es mi novia maldito afeminado ¿Por qué no mejor cierras tu puta bocota? Le grito el peliblanco con una vena en la cabeza sacando su espada de madera – Mejor ocúpate de que esa marimacho de Otae no sea vendida como esclava, aunque pensándolo bien ningún hombre tocaría ni con un palo a alguien tan inútil como ella.
- ¿Cómo te atreves? Tu maldito hijo de tu – Expreso Ranma enojado por el insulto a su prima asumiendo una pose de pelea listo para enfrentarlo.
- Ambos no griten par de idiotas que estamos en un hospital. Les grito Otose mirando con fastidio al par de jóvenes.
- Tu también estas gritando abuela. Le contesto de igual forma Katsura mirando mal a la anciana.
- Tú también deberías no gritar mocoso. Le replico Katherine sentada al lado de Katsura y Otose.
La tensión en el pasillo era definitiva hasta que la puerta corrediza de la habitación se abrió rebelando al doctor – Todos cállense, la paciente ya despertó y espera hablar con todos.
Sin decir nada todos asintieron.
….
Mientras tanto
Obtenida la información de sus amigos Gintoki y Ranma se pusieron en marcha a rescatarlos, solo había un detalle ¿Cómo llegar a la nave de los Reptiliatrus? Haciendo una llamada Gintoki soluciono eso llamando a un amigo y ex-camarada de la guerra Sakamoto Tatsuma, pese a ser un cabeza hueca es un buen piloto contando con una nave espacial en la cual los tres en compañía de su copiloto una hermosa mujer viajan con rumbo a lo desconocido.
- ¿Cómo están ahí atrás? Pregunto Sakamoto mirando atrás notando como la coleta como el peliblanco sin decir media palabra dejan que su ceño fruncido hablen por ellos conforme se mirando con enojo, una clara señal que apenas se soportan – Oigan no hablen demasiado a ver si se cansan.
- Cállate. Dijeron al unísono mirando feo al piloto sintiendo un escalofrió recorrer por su espalda por lo que decidió cambiar eso mostrando una sonrisa agradable.
- Si ustedes sigan negando la situación pero saben que esto posiblemente los mataran por lo deberían dejar de lado sus problemas. Comento Sakamoto piloteando su nave – Hace mucho tiempo quería conocer al apodado Caballo Salvaje, el mejor artista marcial de su generación.
El semblante de Gintoki se limitó a arquear una ceja teniendo su curiosidad a lo que voltea a ver a su ex-camarada - Espera dijiste "el caballo salvaje" como el de Nerima.
- Si porque. Pregunto Sakamoto.
- Escuche rumores sobre un artista marcial que mato a un semi-dios causando un desastre en China, quieres decir que Ranma es ese sujeto.
- Bien no te diré. Menciono divertido el piloto concentrado en los controles, por su lado Gintoki se apresura a ver a la coleta sin aflojar su semblante neutral luego de pensar bien las cosas volvió a abrir sus ojos pasando a ser una interrogación.
- ¿Es cierto lo que dicen de ti? Pregunto el peliblanco dejando descansar su espada envainada en su hombro derecho.
- ¿Qué? Se limitó a preguntar el oji-azul sentado en posición de loto cruzado de brazos.
- ¿Qué tu eres quien mato a un dios?
- En realidad era un semi-dios ahora renació en un bebe. Responde Ranma sin querer hablar de eso.
- Se puede saber que te llevo a cometer esa locura. Comento Gintoki mirando atento aunque distante.
Sin mostrar expresión alguna Ranma simplemente movió la cabeza de lado - No quiero hablar de eso, lo que paso en el monte fénix quedo entre Saffron y yo.
Por algún motivo el peliblanco conocía esa mirada en el pasado la había visto muchas veces - Conozco esa mirada, le pasa a los que hemos visto lo peor que este mundo tiene, fuimos obligados a hacer lo imperdonable para sobrevivir o en todo caso para que otro pueda tener sus manos limpias.
Guardando silencio por unos segundos Ranma soltó un suspiro de molestia siendo su turno de hablar - ¿Tú has combatido en una guerra verdad? He escuchado rumores acerca del demonio blanco, aquel que hizo pasar su Katana sobre muchos que cayeron estaría mintiendo si no dijera que nunca quise conocerte Shimpachi siempre hablo bien de ti.
Teniendo un punto de conversación Gintoki mirando por el rabillo de su ojo responde - ¿Que fuiste obligado a hacer?
- Por la persona que amaba me vi obligado a matar, rompí al regla más importante de un artista marcial, me vi obligado a matar para que ella estuviera a salvo sabía que como un fénix Saffron reviviría pero no es excusa, no hay un día que no piense en eso, el mundo puede hablar pero hay que estar en el lugar de otro para entenderlo.
El peliblanco no dijo nada solo asintió con la cabeza sabiendo bien de lo que habla, nunca lo dirían pero de alguna forma los dos se ven reflejados en el otro, ambos han visto y probado lo peor que el mundo tiene.
- Debemos dejar de lado nuestras diferencias lo que vaya a pasar lo hacemos por ellos, odio admitirlo pero es demasiado para nosotros por separado si queremos salir de esto vivos lo mejor será que trabajemos juntos.
- ¿Tú crees? Le respondió Ranma pensativo por unos segundo viendo que tenía razón - ¿Tregua? Pregunto el peliblanco arqueando una ceja.
- Tregua. Asintió Gintoki chocando sus antebrazos ambos se cubren la espalda del otro ambos se preparan mentalmente para lo vendrá.
- Vaya esto es un momento único. Comento Sakamoto.
Arqueando una ceja Gintoki mira a su amigo sin entender - ¿De qué hablas?
- Esto es monumental, es como esas historias de ficción cuando un mal más grande amenaza un Samurái perdido – Mirando a Gintoki - y un Artista marcial deshonrado – Dijo ahora mirando a Ranma - dejan de lado sus problemas y enfrentan a un enemigo en común.
Tanto Gintoki como Ranma se miran igual de confundidos ante las palabras de Sakamoto por mucho que quisieran discutirlo tiene razón, con sus seres queridos en riesgo aquí están dejando de lado sus problemas para ir a rescatarlos, cualquiera diría que es un momento único jamás visto.
….
Horas después
Por medio de unos trajes espaciales y más la ayuda de la mano derecha de Sakamoto su hermosa copiloto experta en el jaqueo de sistemas de seguridad de última tecnología teniendo una brecha de diez minutos nuestros protas lograron infiltrarse en la nave principal, llegando al casco de la nave bajo la guía de la copiloto estando en el área de carga manipulando su ki en su mano dándole forma de espada la coleta hizo un agujero lo bastante grande para que entraran, sin moros en la costa quitándose sus trajes de Astronautas usando el sigilo Gintoki y Ranma recorren el área usando la técnica de manto invisible de la coleta usando suficiente ki para los dos, para aliviar la tensión el mencionado saco un tema a la luz.
- ¿Así que tú y Tsuku son algo eh?
- Cállate. Gruño el peliblanco por lo bajo sacando una risa de dientes en el artista marcial.
- Oye no es mi culpa que esa chica este loca pero no sé qué vio en ti.
- Podría decirte lo mismo sobre la acosadora. Le devolvió el golpe el peliblanco.
- No sé qué quieres decir. Le dijo Ranma evitando su mirada.
Esta vez fue el turno de Gintoki de burlarse - Por favor, desde hace tiempo no ha aparecido en mi cuarto, ahora está más apegada a ti incluso sé que la besaste ¿Cuándo será que la llevaras a la cama?
Un ligero sonrojo se notó en las mejillas del oji-azul seguido de enojarse - Debí suponer que los de tu tipo solo tienen eso en la mente, para que lo sepas yo no la bese ella me beso es distinto y para que lo sepas tendrías más suerte con las mujeres si abrieras tu mente.
- Si como no ¿Qué puedes saber tú de mujeres? Por lo que se tu esposa te engaño con tu mejor amiga. Dijo Gintoki murmurando.
- Se lo suficiente en el tiempo que llevo en el distrito Kabuki Ayame es lo más cercano que tengo a una amiga aun con sus cosas aprendí que es genial cuando permite mostrarse, si no fueras tan idiota varias la suerte que tienes. Le dijo Ranma neutral.
Arrugando su ceño Gintoki confronto a la coleta - ¿Debo tomarlo como un insulto?
- Considéralo un consejo de amigo, cuidado. Menciono Rama a lo que ambos se esconden evitando que un guardia los vea, pasando este de largo fue que ambos lo siguieron dentro de una bóveda de suministros, los sonidos de puñetazos se hicieron escuchar, quitándole la muñequera futurista presionando unos botones el peliblanco activo una imagen holográfica.
- ¿Es lo que creo que es? Pregunto Ranma arrugando su frente poniendo una mano en su mentón.
- Creo que es una imagen del mapa de la nave indicado donde está la tripulación y los sitios – Responde Gintoki usando su intelecto – Y parece que no es todo, según esto estos sujetos al parecer quieren apoderarse de las mujeres y pretenden venderlas a otras especies como concubinas.
- Maldición, ningún extraterrestre le pondrá un dedo encima a mi prima sin sufrir las consecuencias. Gruño Ranma enojado.
- Ya cálmate según esto las celdas están aquí, hay como cien especies capturadas según el mapa si seguimos este camino llegaremos a las celdas antes – Comento Gintoki a lo que Ranma asiente ambos siguieron las indicaciones del mapa.
…..
Llegando a otro sitio en la nave
Permaneciendo ocultos detrás de un muro de acero un peliblanco y una coleta ven que la entrada es custodiada por doce guardias armados.
- ¿Alguna idea? Pregunto Gintoki.
- Si encárgate de los reptiles con armas láser y yo hare el resto. Comento Ranma con burla.
- Idiota – Musito Gintoki - Necesitamos una distracción.
. Estoy en eso. Le responde el oji-azul mirando hacia el cuarto de máquinas extendiendo su mano apuntando a una de las consolas disparando una ráfaga de ki invisible dañando las maquina haciendo las chispas salgan volando de los daños.
. ¿Ahora que sucede? Pregunto fastidiado uno delos guardias
- Muévanse estúpidos, hay fallas en el cuarto de máquinas.
- Maldita sea, justo cuando estaba por realizarse el puente espacial a nuestro planeta. Gruño otro de los guardias, pasando de largo para ver el daño no vieron a dos humanos ocultos detrás del otro cuarto.
- De acuerdo lo admito, eso fue genial. Comento Gintoki con una media sonrisa.
. Lo sé. Asintió Ranma a lo que los dos se pusieron a correr por los pasillos bajando las escaleras hasta dar con el área del calabozo, después de recorrer las celdas por fin dieron con sus amigos.
- Ya era hora. Pronuncio con poco humor Kagura.
- ¿Por qué tardaron tanto? Dijo ahora Otae.
- También me alegro verte prima. Responde con sarcasmo apunto de tocar las rejas es ccuando una mano de Gintoki lo detiene.
- Espera son celdas de energía si tocas eso tus manos se cortaran como mantequilla. Le advierte el peliblanco.
- ¿Alguna idea? Pregunto Shimpachi.
- Tama me dio esto – Sacando de sus ropas el peliblanco en su mano sostiene un pequeño artefacto – Es una descodificadora.
- Espera alguien viene. Susurro Ranma por lo que se escondieron en extremos opuestos de la entrada ambos listos para lo que venga.
Llegando una tropa de Reptriliatrus entrando en el sitio buscando cualquier objeto a la vista es cuando de la nada retirando su manto de ki las criaturas de otro planeta fueron emboscados por dos hombres que en sincronía los diezmaron a punta de espada de Gintoki seguido de manos y pies por lado de Ranma en poco tiempo ambos dejaron inconscientes a la tropa de extraterrestres, usando la decodificadora prosiguió en abrirse las celadas a lo que Otae fue directo a los brazos de su primo junto a Shimpachi reuniéndose los tres primos.
- Bien estamos todos vámonos de aquí. Dijo Gintoki siendo detenidos por la coleta.
- Oigan donde esta Ayame? Pregunto la coleta notando la falta de la chica de pelo lavanda.
- Se la llevaron a Sacchan – Expreso Shimpachi a modo de grito – ahora mismo la están subastando Gin-san debemos ir por ella.
- Por mi dejémosla total nadie la extrañara, es tan pegajosa merece que sea una esclava. Exclamo Kagura sin mucho entusiasmo.
- Cierra la boca Kagura – Le grito Ranma callándola de una sola vez haciendo que el grupo lo vean a la coleta – Gintoki encárgate de ponerlos a salvo, usen la nave de emergencia que vimos en el depósito. Comento la coleta corriendo en dirección contraria.
- Ranma piensa rápido. Dijo el peliblanco aventándole la muñequera de alta tecnología – buena suerte.
Dando una sonrisa segura el artista marcial siguió su camino, lo mismo fue para la Yorozuya y Otae en sentido contrario mientras abren las celdas liberando a las especies capturadas.
…
En el centro de mando
La tripulación en sus estaciones de control se están volviendo locos tras realizar un control de los daños yendo de mal a peor.
- Informe de control. Hablo con autoridad el capitán de los Reptiliatrus desde su asiento de control.
- Señor informo que hay los sistemas en la sala de máquinas sufrieron grandes daños, lo mismo sucede en el área de las celdas sus prisioneras han sido liberadas causando un motín en contra de los guardias, se está saliendo de control.
. No, estoy cerca de conseguir vender a esta humana siendo una virgen los compradores pagaran mucho por ella y nadie a detenerme.
De pronto una explosión inminente vuela las puertas rebelando a un combatiente de la coleta extendiendo su mano adelante.
- No si yo no lo permito. Expreso un artista marcial con el ceño fruncido entrando al centro de mando.
- Ranma. Expreso Ayame mirando a la coleta sin poder moverse.
- ¿Tú quién eres asqueroso humano? Protesto el líder de los piratas extraterrestres.
- Atacas mi planeta – Comento Ranma caminando hacia al capitán de la tripulación crujiendo sus nudillos conforme una aura de instinto asesino cubre su cuerpo – Atacas mi ciudad, secuestras a mi familia y peor te atreves a vender a mi amiga como esclava a imbéciles por dinero así que esto te va a doler y por Kami que voy a disfrutarlo.
- Maldito humano hare que te tragues tus palabras ataquen. Ordeno el capitán a sus subordinados, quienes sin dudar se lanzaron al ataque a un Ranma preparado para todo cuando de repente una espada de madera los golpea.
- ¿Necesitas ayuda? Pregunto un samurái peliblanco.
- Gin-san. Dijo la asesina ninja sorprendida.
- ¿Qué no estabas con los demás? Pregunto Ranma.
- Otae me envió a buscarte, que fastidio quedándote con toda la diversión – Comento Gintoki con burla cuando los dos son rodeados por un mínimo de treinta guardias armados con espadas de energía purpura mientras que otro portan armas de rayos laser, es así que ambos están espalda con espalda acto seguido el peliblanco con su espada de madera en mano con la otra sacando su Katana una sonrisa sádica se vio reflejada en su rostro - ¿Qué dices podemos con ellos? Son quince para cada uno.
Chocando su puño con su palma de la mano abierta liberando su instinto asesino Ranma le devuelve la sonrisa de la misma manera asumiendo una pose de pelea – Es un lastima para ellos, vamos a acabarlos.
El escenario de una batalla se produjo donde los gritos de dolor y golpes se oyen en toda la nave Ranma como Gintoki se abren paso apaleando a los subordinados alienígenas dejando claro sus apodos, por un lado Gintoki fiel a su estilo los golpea y corta con su Katana y espada de madera mientras que por su lado Ranma usa sus habilidades en las artes marciales junto a sus técnicas las más pronunciada es el Kachu Tenshin Amaguriken como el Alma De Hielo.
El capital de los Reptiliatrus acorralado detrás de la máquina de contención donde tiene a la asesina ninja solo puede ver con temor como dos humanos fueron capaces de vencer a sus subordinados estando esparcidos por la sede de comando quedando solo los protas y el mencionado, tragando grueso ve como los hombres caminan hacia el como auténticos Bad Ass.
- Ahora sigues tú. Declaro el Demonio Blanco.
Una mueca de enojo se vio en el extraterrestres envalentonado no se dejó intimidar de su cinturón saco artefacto que con presionar un botón a convirtió en una hacha de doble filo por lo que se lanzó al ataque – Ni crean que pueden intimidarme, ustedes humanos no son más que bolsas de carne – Rugió este lanzado un corte de hacha con fines dañinos.
Rodeando su mano con su aura de chi sin problemas Ranma atrapo el arma por el filo seguido de enterrar su puño en la cara del Reptil en combinación con una poderosa patada giratoria mando a bolar al extraterrestre dentro de la enorme pantalla rompiendo esta con su cuerpo.
- Creo que esta fuera del aire. Menciono Gintoki en el segundo que la alarma de auto-destrucción se activa – Bien hora de irnos.
- En un segundo – Dijo Ranma usando su chi desmantelando los controles de la maquina contenedora liberando a la peli-lavanda quien sin dudarlo de un salto va a los brazos de la coleta uniendo sus labios con los de ella en un beso.
- Mi héroe. Se limitó a decir Ayame algo sonrojada a un Ranma que esta aturdido.
- Oigan pueden conseguir un cuarto después hay que salir de aquí. Se quejó el peliblanco mirando al oji-azul que al darse cuenta que carga en brazos a Ayame este recupera el sentido poniéndose serio por lo que se ponen a correr.
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En el cuarto de las naves
Dentro de una nave de escape los hermanos Shimura más Kagura se ponen más histéricos por la falta de presencias de tres personas.
- No van a lograrlo, estamos perdidos. Grito el Otaku con lentes sujetando su cabeza con ambas manos enloquecido.
- ¿Dónde demonios pueden estar? Más les vale regresar o hare que regresen de la tumba solo para matarlos yo. Declaro una Otae temblando de una ceja a la vez que su lado sádico comienza a resurgir.
- Miren ahí vienen. Declaro Kagura señalando con el dedo a los lejos donde ven a los tres que faltaban corriendo con todas sus fuerzas es que se introducen en la nave donde están.
- Ya era hora de que llegaran idiota. Los regaño un histérico Shimpachi.
- Cállate y sácanos de aquí. Le ordeno Gintoki a su empleado.
- ¿Ah y porque debo ser yo? Se quejó Shimpachi a modo de pregunta.
- Porque nosotros hicimos todo el trabajo mientras hacías el vago coqueteando con esta marimacho enana. Dijo ahora Ranma mirando con burla a Kagura que lo mira feo.
- Maldito ¿Cómo te atreves? Exclamo Kagura.
Poniendo fin a la discusión Otae interviene tomando el asiento del piloto - Ya basta yo conduciré.
- Anee-san ¿Tu sabes pilotear? Pregunto Shimpachi.
- No pase tiempo jugando videojuegos de naves sin aprender algo. Dijo una confiada Otae que mostrando ingenio activo los controles seguido de que las escotillas de que la gran nave se abren las diversas naves de escape huyen con distintos rumbos, de entre ellas la nave de los humanos escapan antes de que la gran nave explotara en mil pedazos, en medio de la celebración todo se reduce en un encaro entre el peliblanco y la coleta donde el primero muestra una media sonrisa.
- Nada mal para un afeminado. Expreso Gintoki extendiendo su puño.
- Lo mismo digo para un imbécil. Responde Ranma devolviendo la mirada chocando su puño con el de Gintoki.
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Fin capítulo 9:
(Nota: Cumpliendo con la petición de una colega he decidido hacer este capítulo que vengo pensando desde un tiempo puede que no sea tan bueno pero no se me ocurrió algo mejor, me vino la inspiración de golpe pienso que después de este capítulo pienso darle el cierre final en el próximo capítulo, ya sabes que sus opiniones y criticas vienen bien espero que las pasen bien con la historia).
Hasta la otra.