Disclaimer: los personajes de Twilight son de Stephenie Meyer. La autora de esta historia es CaraNo. Yo solo traduzco con su permiso.


Link del blog: https (dos puntos) / / caranofiction (punto) wordpress (punto) com


Capítulo 52

—Ahora, Edward —susurras. Beso tu cuello, y tú levantas tu pierna sobre mi cadera—. Por favor, te necesito...

No tienes que pedírmelo dos veces.

Te quito la camiseta mientras tú desabrochas mis jeans, y los bajas mientras yo tomo tus pechos. Ha pasado demasiado tiempo, carajo. Me inclino. Beso, mordisqueo, y succiono. Soy impulsado por una necesidad contundente. Es delirante, y ni de cerca suficiente, pero siempre he sido bueno en aceptar lo que nos dan.

—Mierda —gruño cuando envuelves tus dedos alrededor de mi polla. Me estremezco—. ¿Estás lista para mí, nena?

—Siempre —susurras, y te ayudo a quitarte los jeans.

Contra la pared, embisto dentro de ti.

—Oh, Dios —jadeas contra mi hombro.

Me detengo por un segundo, sintiéndote pulsar a mi alrededor. Es caliente, húmedo, y mi hogar.

Familiar—pero aún así siempre excitante y nuevo.

Mis labios están firmemente unidos a cualquier parte de tu cuerpo a la que puedo llegar.

Lo mismo pasa contigo mientras empujo fuerte.

Lo necesito. Tú lo necesitas. Siempre y cuando permanezcamos en silencio.

Tu excitación cubre mi erección, y ambos observamos cómo entro y salgo de ti. Entonces volvemos a besarnos. Gemidos suaves. Susurros sin aliento.

—Te amo.

—También te amo.

—Te amo —repito, jadeando contra tu cuello.

Tus piernas se encuentran alrededor de mis caderas.

Embisto dentro de ti sin parar.

—También te amo.

Mi lengua se asoma para saborear tu piel. Mis labios la siguen, y siempre necesito más de ti. Pero pronto, nena... Pronto lo tendremos todo.

—Te lo prometo, Bella —gimo. Más y más cerca...

—Siiiií —siseas, seguido por una fuerza constrictiva... Estás tan jodidamente cerca.

Mis pensamientos viajan al mismo tiempo que mi mano, y cerca no comienza a describirlo cuando coloco mi mano sobre tu vientre. Nuestro hijo está allí, y te beso fuerte, profunda, apasionadamente, transmitiendo silenciosamente... todo.

Tú sabes, siempre lo sabes, y sientes lo que yo siento. Lo sientes todo, y comienzas a desmoronarte.

Cierro fuertemente los ojos.

Mis movimientos se vuelven irregulares e incluso más urgentes.

Mierda —exhalo, sintiendo todo dentro de mí tensarse antes de llegar al orgasmo. Creciendo, precipitándose. Me corro fuerte, sintiéndote estrujarme, y siempre es de esta manera con nosotros.

Tendremos más pronto.


Espero que hayan tenido buen día, hasta mañana ;)