La Isla de la Dra. Lisa Loud
- Una Duda -
-¿Hace cuanto que no vemos a Lincoln y a Lisa, Rita?- Preguntó Lynn a su esposa.
-Pues, creo que ya como tres años, Lynn.- Respondió la mujer mientras desayunaba algo rico, que su fiel esposo le había preparado.
La pareja tenía ya rato que vivía sin el bullicio que alguna vez fue su casa. Los chicos habían crecido, y actualmente los únicos que estaban con ellos, era Lana y Lily, aun en la vieja casa en Royal Woods.
Verdad era que la mayoría de sus hijos los visitaban con mucha frecuencia. El amor fraternal aun era muy palpable y la pareja nunca se sentía sola. Pero eso no compensaba el hecho de que dos miembros habían casi desaparecido del mapa familiar desde hacía alrededor de ocho años, cuando Lisa les anunció que, debido a la enfermedad con potencial pandémico que se cernía sobre todos; ella se vería recluida casi totalmente, en un trabajo de investigación.
"¡Mi niña va a salvar al mundo!" Habían sido las palabras de Lynn padre. Quien abrazó a la chica de lentes dándole vueltas por la sala.
"Padre, esto es embarazoso."
"¡Sabía que estabas hecha para grandes cosas! Sin ofender chicas, saben a qué me refiero" Había dicho cuando notó los celos en las demás hijas.
Lisa nunca les dijo cuanto duraría su investigación, ni ningún detalle del mismo. Solo concretó que sería hasta lograr el resultado deseado. Lo sorpresivo en esa ocasión fue cuando mencionó que Lincoln se iría con ella para trabajar en el proyecto.
Lincoln, por su parte, no sonrió en lo absoluto en aquella ocasión. Causó extrañeza su seriedad, puesto que era una oportunidad de oro. Su trabajo como ilustrador y diseñador grafico estaba teniendo problemas. Después de su divorcio, había quedado en depresión y bueno, todos sabíamos que estaba a nada de regresar a la casa a vivir hasta que rencontrara la estabilidad.
"Se que el hermano no esta pasando por un buen momento, y quiero aprovechar mi influencia en el proyecto para que nos acompañe en el sector de mantenimiento a la infraestructura digital."
"Voy a reparar sus computadoras." Finalizó Lincoln. Y todos los felicitaron y les llenaron de buenos deseos, por la gran oportunidad.
Partieron a finales de septiembre de esa año, con todo y las lluvias.
Al principio las videollamadas eran frecuentes, sobre todo de Lincoln. Pero después del primer año, se hicieron significativamente menos, hasta ser, casi nulas.
Y todas las visitas, desde hace ocho años, caben contadas con una mano.
-¿Estarán bien, Rita?- Preguntó aquel hombre mientras veía, sin ánimo, su plato de frutas con verduras.
-Claro que sí, Lynn. Son unos chicos grandiosos. Encontrarán la cura y volverán como héroes. - Le dijo ella tomando la mano de su esposo. Las ojeras de Rita, eran cada vez más notorias.
Reglamento de la Isla
"Fuera de los laboratorios está estrictamente prohibido el uso de celulares."
"Fuera de los laboratorios esta prohibido hablar de cualquier tema relacionado con lo que se realiza dentro"
"El uso de Internet esta reducido a las áreas autorizadas y solo para fines laborales"
"Queda prohibido el contacto intencional con los Sujetos de Prueba"
"Está prohíbo tomar fotografías, videos y cualquier medio de captura de imagen"
Sujetos de prueba...
Lupa despertó en su cama.
El cómo había llegado y el qué había pasado en la revisión, era, como siempre, un vacío en su mente.
Miró por la ventana, luego el reloj.
7:30 am.
Se bajó de la cama con pereza, se talló los ojos y se encaminó al cuarto de baño, donde de inmediato se desvistió completamente quedando frente al espejo de cuerpo entero.
132 pecas, se dijo para luego, revisarse minuciosamente; brazos, pechos, piernas.
Luego, sacó un espejo pequeño de un buró de pared. Era el espejo con el que solía colocarse las sombras oscuras que tanto le gustaban. Dio media vuelta y comenzó a revisarse la parte de atrás.
Sonrió.
-Allí estás, hija de perra.- Expresó al ver una minúscula, casi imperceptible herida, en la zona baja de la espalda.
-Otra punción lumbar. Que tanto necesitas de tus "sujetos de prueba" tía Lisa.-
Lupa no sabía nada a ciencia cierta, pero recordaba entre sueños haber visto en el laboratorio, en una de tantas veces que la habían llevado, un letrero. Unas anotaciones en un cuadro, como un extraño reglamento. De esto hacía poco más de un año.
A partir de allí, se había convertido en una asidua a la biblioteca de la mansión, donde sus principales intereses eran las que tenían que ver con pruebas médicas; aunque, para no levantar sospechas (sin saber de qué realmente), a Lincoln le había dicho que llegaba allí a leer sobre las antiguas batallas del mundo.
-¿Sabías que Napoleón perdió en Waterloo por las lluvias y un volcán?-Le había dicho una vez.
-La película de 300 es terriblemente inexacta, ¿Por qué las hacen así?-
-Las películas son exageraciones de la realidad, Lupa.- Y ella sonreía porque él no sospechara la realidad de sus lecturas.
Lupa se volvió a mirar en el espejo, suspiró un poco e hizo una mueca.
-Quien sabe que tanto me tocan…- Pensó y aprovechó que estaba desnuda en el baño, para ducharse.
Alguien tocó la puerta de la habitación de Libby.
La chica, al igual que Lupa, se había despertado en su habitación sin saber nada más. Sin embargo, a diferencia de su hermana Lupa, para la joven de brackets era algo normal en su vida. Parte de la rutina de la revisión médica continua.
Ya se había bañado, cepillado, revisado la cara por si alguna espinilla aparecía, colocado perfume.
Estaba por salir cuando tocaron su puerta.
Abrió y, como una ráfaga, Lupa se adentró al cuarto cerrando la puerta y tomando a su hermana de la mano, halándola al interior.
-Que rayos…¡Lupa!- Exclamo molesta. Sin embargo, la albina no se detuvo, y forzó a su hermana a acostarse boca abajo en la cama.
-Lupa, ¿Qué haces?-
Lupa no dijo nada y, presionando la cabeza de su hermana contra la cama, le levantó la blusa hasta los hombros.
-¡¿Que rayos haces?! ¡Esto es invasión a la intimidad! ¡Te voy a acusar con Lyra!-
Lupa le esculcó la espalda de ida y vuelta.
-Aquí esta. - Dijo por fin y la soltó.
Libby se levantó molesta y la empujó para luego acomodarse la ropa.
-¡Toda me arrugaste! ¡Como me enoja que seas así! ¿Por qué hiciste eso? -
-Te hicieron una punción lumbar y ni siquiera eres consciente de ello.- Le dijo la albina mientras daba media vuelta y se levantaba la sudadera.
-Ves ese punto que esta justo en el centro de mi espalda baja? Esa es la prueba.-
Libby si acercó y pudo distinguir la pequeña herida. Sin embargo, realmente no significaba nada para ella.
-Pudo ser un mosquito, Lupa, un insecto, que se yo. Estás enloqueciendo con esto de que la tía es mala.-
Lupa se acomodó la ropa y volvió a quedar de frente a su hermana.
-No es que sea mala, es solo que no nos dice la verdad. Una prueba de estas no es de rutina. Son para personas con enfermedades serias.-
-Más a mi favor, nos monitorea para que estemos bien.-
-Estas cosas no funcionan así, Libby. No es normal, hay cosas que no nos están diciendo.-
-Estas paranoica, Lupa. Ya te pareces a Loan.- Le replicó molesta. -Ya, vamos a desayunar que me muero de hambre.-
Antes de visitar a Loan, el día de ayer fui a ver a Liena. La niña de Leni.
Tan dulce como ella.
Lyra me dijo que se había sentido mal y yo, sinceramente, tengo temor de cualquier cosa que les pase.
Lisa me dice que son niñas perfectamente sanas, pero, cada que veo a Loan, me aterroriza pensar que todas puedan manifestar daños posteriores, por el hecho de ser creadas artificialmente.
Le pregunté desde atrás de la puerta si podía pasar y ella, con su voz leve, me dijo que sí.
Estaba acostada, cubierta con su sábana.
Su cabello es rubio claro hasta los hombros, con la luz del sol se vuelve brillante, al igual que el de su madre.
Le toqué la frente y tenia algo de temperatura. Me dijo que ya le habían dado unas pastillas, que solo era sensación febril por alergia.
-¿No te duele nada más? – Le pregunté y ella dijo que no con la cabeza. Me tomó de la mano.
-Solo un poco la cabeza.- Me dijo sonriendo.
Liena es la más noble de todas las hermanas, algo que indudablemente viene de su madre. Es una mediadora, justa y capaz. Ni siquiera Lupa o Leia se meten demasiado con ella. Le tienen cierto respeto.
-Nos quieres mucho, Linky, ¿verdad?- Me preguntó de pronto.
Le apreté la mano.
-Si, Liena, ustedes son mi familia.-
-¿Sabes que todas pensamos que Lupa es tu hija?, ya sabes, por eso del cabello.-
Le sonreí, y le dije.
-Todas son como mis hijas, Liena. Estaré con ustedes siempre.-
-Mentira. Cuando me toque irme, como Loan, ya no estarás conmigo.-
Ella apretó mi mano.
Luego, le comenzó a sangrar la nariz.
- Sujeto de Prueba 02 -
Liena L.
Cava Genética: Leni Loud & Lincoln Loud
Edad física: 16 años.
Edad mental: 16 años.
El Sujeto Experimental 02 ha presentado un desarrollo mental de normal a óptimo.
Edad temporal: 7 años
Características físicas:
Cabello: Rubio claro.
Ojos: Azul oscuro.
Estatura: 1.65
Peso: 72 kl
Características físicas particulares:
El sujeto 02 es de constitución física débil, obesa y propensa a las enfermedades.
Desde muy pequeña presentó un marcado sobrepeso, consecuencia de la alteración genética a la que fue sometida. Dicho padecimiento la ha hecho sensible a enfermedades como: hipertensión, diabetes infantil, cardiopatía isquémica, dislipidemia leve, así como padecimientos del hígado.
Es alérgica al polen.
Fecha de nacimiento: 12 de julio de 2022.
Liena L., al igual que el Sujeto de Prueba 01, tiene un código incompleto y erróneo, sin embargo, a aportado valiosos datos para las siguientes pruebas.
Detalles de su código: . 02
Lisa y Lincoln se encontraban en aquella habitación del sótano.
Esa que habían hecho suya desde ya hacía varios años y que les funcionaba como un escape a ese universo que, al final, les estaba comiendo la humanidad.
En esa habitación, se hacían una especie de tiempo muerto donde ella dejaba afuera a la doctora, y él, podía nuevamente ser su hermano.
Era poco más que un cajón de paredes grises con un amplio cuarto de baño, justo al fondo del ala central, y al lado del cuarto donde estaba el último contenedor que Lincoln conocía, el del Sujeto de Prueba # 8. Habitación no registrada en el mapeo del lugar.
Ella lo abrazaba y se apoyaba completamente en su pecho. Él tenía las manos detrás de la cabeza, pensativo.
-¿Por qué hoy no me abrazas?-
Lincoln no se movió, solo suspiro con profundidad.
-Hoy Liena sangró de la nariz.-
Lisa frunció el ceño.
-Es una humana normal, Lincoln. Tiene alergias como todos. No creé super niñas.-
-Fue muy abundante, Lisa, no pude detenerla por métodos convencionales. Tuve que llamar a una enfermera para que le auxiliara-
-Es hija de Leni, Lincoln. Leni es la de constitución más débil de todos nosotros. Sin contar que la niña es obesa.-
-¿Eso que tiene que ver?-
-¿Quién de nuestra familia lo es, Lincoln? Es obvio resultado de su modificación genética con las consecuencias que dicha condición acarrea.
-Entonces, ¿me juras que es algo normal? ¿Solo es alergia y sobrepeso?
-Si te digo que sí, ¿me abrazarás?-
-Aunque me digas que no, lo haré…-
-Entonces hazlo y dejemos esta charla para el laboratorio.-
Ella se le pegó completamente. Su bata se extendía por toda la cama.
Lincoln la abrazó por fin, y Lisa sonrió cerrando los ojos.
-Necesito olvidar todo esto, aunque sea por un momento, Lincoln. Disfrutarme…disfrutarte…antes de que ya no reconozca quien soy…
Le dio un leve beso en el pecho.
-Lyra, créeme, todas tenemos marcas.-
La chica castaña, miraba a su hermana con algo de cansancio. Estaban sentadas en una de las mesas del jardín.
-Te creo, Lupa, y si, es posible que nos hagan estas pruebas, pero ¿y eso que? Estamos bien, estamos sanas. Lisa nos cuida y todos aquí lo hacen. –
-Pero los libros dicen que…-
-Los libros igual hablan de familias y ciudades. Antes de cualquier cosa, recuerda que a nosotras nos abandonaron. Lo mejor que podemos hacer es estudiar, aprender, y querer a esta gente que nos está dando una oportunidad de ser alguien. -
Lupa no dijo nada. Lyra tenía razón en eso.
Ellas eran huérfanas, acogidas por la doctora Lisa y Lincoln. No eran obligadas a pagar nada por la estancia y la comida, recibían tratamiento médico y estudios. Hacían deporte y podían ver cine. Hasta les daban algo de dinero semanalmente para comprar cosas en la tienda.
…sujetos de prueba…
-Sé que tienes razón, Lyra. Les debemos mucho. Pero yo sé lo que vi.-
-Lo que soñaste…-
-Lo vi y hay algo raro y voy a averiguar que es. -
-Eres libre de hacer lo que quieras, Lupa; pero si te metes en problemas por tu comportamiento indisciplinado, no digas que no te lo advertí.-
El celular de Lisa recibió un mensaje.
"Doctora, necesitamos que acuda al quirófano # 4 del Ala Derecha.
El Sujeto de Prueba 02, está presentando complicaciones.
Tercera parte de este fic típico.
Se viene una tormenta.
Las niñas andan inquietas.
Saludos a los chicos que siguen esta historia. Les aprecio :)
Lobo Hibiky
