Hola todo el mundo, por fin llegamos a al capitulo 5 de esta historia. Mil perdonen la tardanza de este capitulo, pero la serie continúa SI O SI
Antes de empezar: este capitulo esta ubicado entre en capitul consta de momentos de la vida de Lincoln y como profundiza en su relacion con Margo y como termino en el hospital mucho después. Son momentos cronológicos, así que perdón si están un poco desordenados.
Sin nada mas que decir: disfruten el nuevo capitulo
Hace un año y medio atrás. Hospital General de Royal Wood.
-¡LINCOLN! ¡POR DIOS! ¡LIIINCOOOLN!- gritaba entre sollozos una Lynn Loud en el cuarto del hospital donde estaba su hermano internado. Cuando los policías se fueron y los médicos autorizaron la entrada de la familia Loud, la primera en entrar como un rayo fue Lynn ante la mirada atónita del doctor y las enfermeras que atendían a su hermano.
Lincoln estaba acostado en la cama del hospital con un respirador conectado a un pequeño soporte vital. Le habían dicho a los Loud que Lincoln no corría peligro, pero el panorama que veía la joven Loud ere muy diferente a "no correr peligro". A parte del soporte vital y la máscara que le proporcionaba oxigeno, la cabeza de Lincoln estaba vendada y debajo de la banda se podía notar un parche sobre su ojo derecho, su brazo derecho estaba enyesado y con una soga estaba siendo levantado para evitar alguna lesión y en su otro brazo tenía un aparado extraño de metal que separaba los dedos de la mano haciendo que se extiendan por completo, mientras un yeso dentro de ese armatoste estaba pegado a los dedos que se veían como un racimo de bananas color violetas por lo hinchado que estaban. En cuanto al propio Lincoln, el parecía simplemente dormir y sus signos vitales a decir verdad, eran estables y continuos.
Lynn tenía ganas de vomitar y la cabeza se le estaba partiendo del estrés de todo la situación, detrás de ella aparecieron los miembros restantes de la familia Loud y su reacción fue casi igual que la de Lynn.
-¡MI BEBE!- dijo una Rita Loud, para acercarse a la cama donde estaba su hijo.
-Señora por favor, no toque al paciente- advirtió el médico a la mujer.
-¡OIGAME! ¡Nosotros somos su familia, tenemos todo el derecho a estar aquí!- dijo Lola, al ponerse a la par de su madre mientras mirada al doctor, alternando entre triste y enojada.
-¡Hija por favor! Disculpe Doctor… estamos todos un poco tensos por lo que paso… pero, no sabemos muy bien que paso, la verdad. – decía un Lynn Sr primero a su hija y después al doctor en frente suyo.
-Descuiden… no les iba a prohibir ver al chico- cuando dijo esto su vista se posó en Lola por unos segundos, para volver a ver a Lynn Sr. –La policía ya nos puso al tanto de lo que paso, nosotros ya tenemos nuestro informe preliminar de las heridas de Lincoln. – terminaba de decir el doctor.
-¿Es muy grave? ¿Se va a recuperar Doctor… Ahh?- comentaba Luan acercándose a sus padres.
-Doctor Serrano y si, el joven Lincoln se recuperara, pero nuestra preocupación ahora se concentrara en el proceso de recuperación, miren esto por favor- el doctor Serrano se aparto un poco para que los Loud miraran una placa de rayos x en la pared detrás de él.
-No entiendo… ¿Qué son esos huesos en el papel de la pared?- decía una confundida Leni detrás de sus hermanas Lucy y Lana.
-Eso es una radiografía Leni, es una toma del sistema esquelético de nuestro hermano y se usa para ver si hay algún tipo de traumatismo significativo- contestaba la genio de la familia Lisa Loud y mientras se acercaba para ver aquella radiografía continuó hablando. –Y por lo que veo… parece que hay varias fracturas significativas en el cuerpo de nuestro querido hermano Lincoln- terminaba de decir Lisa Loud contemplando aquellas radiografías.
-En efecto pequeña –decía el doctor Serrano antes de continuar. – Como pueden ver, Lincoln sufrió varias fracturas, como: un hombro dislocado y clavícula rota, así como un tobillo dislocado y todos los dedos de su mano izquierda rotos… por eso le conectamos aquel aparato para asegurarnos que sanen correctamente. Ahora, lo más complicado…. Lincoln sufrió una contusión significativa que lo tendrá al menos una semana en observación, así como también 3 costillas rotas del lado izquierdo… tendrá que estar al menos un mes hospitalizado mientras monitoreamos su tratamiento.
-Por dios… mi niño…- decía Lynn Sr mientras contemplaba a su hijo en aquella cama. Sus lágrimas parecían querer salir disparadas.
-Me imagino que la razón del respirador es debido a esa contusión que mencionó… y las costillas rotas dificultaron la respiración óptima de Lincoln. Pero… ¿él no necesita el respirador y el soporte vital, verdad?- decía Lisa mientras miraba a Serranos.
-A decir verdad… yo decidí autorizar contactárselos… una costilla rota podría dificultar su respiración mientras duerme y ahora mismo está sedado para conciliar el sueño al menos por las próximas 5 horas mientras descansa.
-¿Quién fue?- decía Lynn Jr sin apartar su vista de Lincoln en un tono neutro
-Disculpa… ¿Cómo dices…?- preguntaba Serranos a la castaña que estaba al lado de la cama.
-¡¿Quién fue!? ¿Quién le hizo esto a Lincoln?- levantaba la voz con furia Lynn Jr al médico. Su mirada reflejaba ira pero sus ojos continuaban llorando.
-Bueno… según los policías que vinieron al hospital luego de que trajeran al chico y algunos testigos, aparentemente un grupo de unas 6 personas interceptaron a Lincoln a la salida de la escuela y parece que tuvieron un altercado… pero no sabemos el motivo. Tendrán que preguntarle a Lincoln cuando despierte. – decía esto último mirando a Lincoln acostado en su cama.
Lynn seguía llorando pero su ira parecía aplacarse al menos momentáneamente, sabía que estallar en Irá ahora mismo seria lo peor y ahora necesitaba mantener la cabeza fría para su familia y para su hermano. Miro una vez más a su hermano mientras contemplaba ese aparato de respiración contra su boca, pero aparte de eso… Lincoln parecía dormir en paz, como si estuviera en su casa.
Lynn se sentía un poco culpable por no haber estado ahí, por no anticipar esto y estaba segura que su amiga Margo estaba detrás de todo esto y apenas ponga un pie fuera del hospital le pediría explicaciones con ella. Pero ahora no se separaría de Lincoln, iba a estar con él para asegurarse que se recuperaría lo más rápido posible. Pero ahora Lincoln solo dormía, estaba perdido en lo más profundo de su mente mientras se recuperaba en este estado de inconsciencia temporal, tal vez soñaba con algo, con lo que pasó, con sus amigos o con su novia o su familia o tal vez su mente rememoraba los acontecimientos que lo condujeron ahora mismo al hospital donde ahora estaba enclaustrado.
Hace un par de años atrás. Escuela Secundaria Royal Woods
La escuela oficialmente ya había finalizado el día de hoy y casi eran la 1pm y uno de los pocos estudiantes que todavía estaban presentes en la escuela era el estudiante de segundo año Lincoln Loud. El peli blanco caminaba por los pasillos solitarios con la única presencia de las puertas de los salones abiertas y uno que otro conserje limpiando las aulas vacías. La razón por la que Lincoln, de 14 años, seguía todavía en la escuela era porque se dirigía a la parte de atrás de la misma, más precisamente a los vestuarios femeninos que estaban dentro del salón de gimnasia, ahí lo estaría esperando su hermana Lynn para poder irse juntos caminando a casa. Los horarios de entrenamiento con el equipo juvenil de la escuela eran durante las últimas horas de clases y ahora Lynn salía tarde, pero no lo suficiente, por eso Lynn le había pedido a Lincoln que la pase a buscar para poder irse juntos.
El peliblanco llego al espacioso salón donde se hacía gimnasia y fue directo a las gradas, donde al lado estaban los vestuarios. Ya le había mandado un mensaje a Lynn que la esperaría en las gradas y Lincoln se limitaría a esperarla en ese lugar. El peli blanco se sentó en los bancos de las gradas mientras se acomodaba para esperar a su hermana y después de unos minutos, se abrió la puerta del vestuario de chicas y Lincoln levanto la cabeza para ver quién era, pensando que era Lynn. Para su sorpresa no era ella, sino la amiga y compañera de equipo de Lynn: Margo Roberts. Parecía que había terminado de ducharse porque tenía un conjunto de ropa deportiva nueva y el pelo mojado y todo su equipo en su bolso deportivo color marrón.
-Ohh Hola Lincoln- saludo amablemente al peli blanco.
-Hola Margo ¿Cómo estas? Tanto tiempo que no nos vemos… -le respondió de regreso a la chica de cabello naranja rojizo.
-See, no nos vemos desde… ¿cuándo? ¿Aquel partido de soccer contra Beaverton Bees?- le dijo Margo acercándose al peli blanco que estaba sentado en las gradas.
-Ahh si, tienes razón. Estuviste genial ese partido. – le comento con una sonrisa Lincoln.
-Jeje… yo diría que fue más bien, trabajo en equipo. – contento Margo con modestia en su voz.
-Pero metiste los únicos dos goles de victoria y el equipo gano- le contesto Lincoln con entusiasmo
-Mmm pero de no haber sido por el pase tal vez nunca los hubiera hecho por mi cuenta. – dijo Margo con algo de timidez.
-No seas tan modesta Margo, todo el equipo te necesita. Incluso Lynn piensa que eres grandiosa en el equipo.- dijo Lincoln con una sonrisa.
-Ohh no sabia jaja… -dijo apenada una Margo que bajaba su gorro ligeramente para evitar que la viera sonrojada. Después de unos segundo le preguntó a Lincoln - ¿Vienes por Lynn, no?
-Sí, la estoy esperando… Me dijo que ahora entrenan en la última ahora y me pidió que la pase a buscar para ir a casa- dijo Lincoln acomodándose en el asiento.
-Si si, nos cambiaron los horarios. Yo no tengo problema la verdad, llego justo a casa para ver mi pro… - Margo se detuvo en seco ante lo que estaba por decir y su cara se puso ligeramente roja. No le gustaba contarle a la gente sobre sus cosas personales.
-¿"Programa" ibas a decir? ¿Cuál programa?- pregunto Lincoln viendo como Margo empezaba a verse nerviosa.
-Bu.. Bueno… me gusta ver después de los entrenamientos… Ahhh… el programa: Aaaarg!- dijo con bastante vergüenza la chica de pelo naranja esquivando la mirada del peli blanco.
-¿En serio? ¡Me encanta esa serie!- le dijo con entusiasmo Lincoln.
-De…¿De verdad?- pregunto incrédula Margo
-¡Por supuesto! Es uno de mis programas favoritos… pero ¿Por qué te cuesta tanto decir que te gusta?- pregunto Lincoln a la peli naranja.
-Mmm bueno… digamos que tengo problemas para hablar de lo que me gusta- admitió Margo visiblemente avergonzada.
-No te avergüences de lo que te gusta Margo…- comenzó a decir Lincoln. – Creo que hacer cosas que no te gustan sería peor… por ejemplo, hace un tiempo intente meterme en el equipo de Football Americano de Royal Wood, sobra decir que di asco y arruine el partido final- decía con mucha gracia Lincoln ante este recuerdo particularmente bochornoso para él.
-Supongo que tienes razón Linc… - dijo con un ligero rubor. – Es que a veces…. Las otras jugadoras pueden ser un poco pesadas cuando le compartes cosas que no son "deportivas"… Me gustan los deportes pero no son toda mi vida, ósea… hay otras cosas que me gustan, sabes… - decía Margo poniendo un pie para sostenerse sobre las gradas donde estaba Lincoln.
-No… la verdad, no se… ¿Te gustaría contarme un poco? Yo puedo contarte sobre mi también…. –decía con una sonrisa Lincoln, mientras se apartaba donde estaba e invitaba a Margo a sentarse con él.
Margo vio el gesto de Lincoln y con una sonrisa tonta dejo su bolso a un lado de las gradas y se sentó al lado de Lincoln. Los dos jóvenes empezaron a intercambiar anécdotas sobre sus vidas, hobbies, cosas que les gustan así como cosas que no les gustan y uno que otro secreto pequeño. Ambos se reían ante las palabras del otro y ninguno se dio cuenta cuando sus rodillas estaban juntas debido a la cercanía de ambos sentados en aquellas gradas. Margo le contaba sobre sus programas favoritos y lo que le gustaba hacer fuera de los entrenamientos y para sorpresa de Lincoln, ella era una chica muy tranquila que disfrutaba salir al aire libre y películas del mundo, muy alejado de su hermana Lynn quien vivía las 24 horas haciendo algún deporte. Margo en los entrenamientos era una chica deportista y cuando terminaban era otra, más humana y femenina… y a Lincoln parecía gustarle esto de la chica de pelo naranja.
-¡¿En serio la chica con la que salías te dio un golpe en la cara cuando intentaste besarla!?- pregunto Margo entre incrédula y con mucha gracia.
-See… tuve el ojo morado por casi 3 días, fue un golpe certero… - dijo Lincoln con nostalgia recordando a Ronnie Ann. –Pero no salíamos la verdad, éramos más bien… "amigos cercanos"- comento Lincoln mirando a la chica al lado suyo.
-Ohh… bueno, me parece un poco tierno que al menos se volvieran amigos después. Qué raro que no hicieran nada después. – dijo Margo acomodando ambas manos en una de sus rodillas, haciendo una pose elegante. –Pero todo esto ¿Fue antes o después de que filmaras a tus hermanas para ese concurso de 5°?- le pregunto Margo al peli blanco.
-¿Recuerdas eso jaja? Fue antes… después de ese video mío me sorprende que me siguiera hablando… tu… ¿No viste el video?- pregunto avergonzado Lincoln.
-Yo y media ciudad Linc- dijo con ligera sonrisa Margo para desgracia de Lincoln que se veía más divertido que avergonzado ahora. –Pero aun si… me parece muy lindo lo que hiciste por tus hermanas… sacrificaste el premio por ellas. – dijo Margo con una sonrisa cálida al peli blanco. –Al menos tu amiga te siguió hablando- decía la joven mirando sus dos manos.
-Tal vez… y tu ¿tienes un "amigo" así?- preguntaba Lincoln devuelta.
-Bueno… ahora mismo…. – Margo se veía pensativa y después de unos segundos decidió contestar –No, la verdad que no Linc… - decía avergonzaba Margo por la pregunta de Lincoln.
-Ahh genial… - decía Lincoln ahora sintiendo algo de vergüenza y comprendiendo que su pregunta podría tener cierta intencionalidad. –Mmm sabes… es algo tarde y Lynn está por salir… tal vez te gustaría… Ahh… Bueno, podríamos pasar numero de "Whorap" para continuar esta conversación… si tu quieres – le dijo Lincoln sintiendo algo de rubor y evitando ver de frente a Margo.
La chica se veía algo sorprendida por la propuesta de Lincoln, ella no tenía muchos contactos en su celular y menos de chicos… pero había algo en Lincoln que le resultaba… lindo y tierno y ese pelo blanco lo hacía ver muy exótico, por lo que decidió pasarle su número sin pensárselo mucho.
-Claro Linc… si tienes para agendarme- la joven saco su celular para pasarle el número a Lincoln.
-Claro… Te paso el mío... es 02325… -Lincoln empezó a dictarle a Margo su número mientras la peli naranja agendaba su número con su celular. Al ver que eran 1:30pm, Margo se despidió de Lincoln para retomar su camino.
-Nos estamos viendo Linc- saludo la pelo naranja a Lincoln mientras se iba con su gran bolso de entrenamiento.
-Nos estamos hablando- decía con un saludo Lincoln y cuando por fin Margo salió. Lincoln quedo solo pensando en lo que había hecho. –Le pase mi numero a una chica… ¡una chica mayor que yo!... y ella me paso el suyo- decía Lincoln muy feliz ante su buena suerte. El peli blanco puso sus dos manos en su nuca y se dejo llevar por sus pensamientos.
Estaba tan distraído que no vio el bolso gigante caer sobre su flacucho cuerpo.
-UUUUHHGGGGGG –decía ahogándose por el impacto del bolso sobre su torso. Mientras se recomponía, el peli blanco se saco el bolso gigante de su cuerpo y miro para la dirección donde había caído.
-¿Ya estas descansando Linc? Necesitas prestar atención… bajas muy fácil la guardia. –decía Lynn Loud a su hermano con expresión triunfante. Tenía el pelo mojado y llevaba el mismo atuendo de margo, pero tenía una remera ajustada del equipo que le marcaba su tonificado cuerpo adolescente de 15 años, casi 16.
-Hola Lynn… - decía Lincoln mientras se recuperaba de impacto. – Tardaste bastante en el baño- decía Lincoln mientras bajabas del asiento de las gradas.
-Sip… 25 minutos de baño, ni un minuto más o menos. Es parte de mi ritual de buena suerte después de los entrenamientos- decía Lynn mientras se acercaba a Lincoln. –Y una cosa hermanito… - en esto Lynn tomo a Lincoln con sus brazos y lo abrazó en un poderoso abrazo, sacándole mas aire que el bolsón sobre su torso.
-Gracias por esperarme Linc… eres muy tierno. – decía Lynn mientras dejaba a su hermano en paz en el piso.
-Aaaggghhh… Ni lo menciones Lynn… vamos a casa ¿Si?- decía Lincoln incorporándose de aquel abrazo mientras salía con su hermana del gimnasio.
Mientras caminaban, Lynn le contaba lo que hicieron en la práctica a su hermano y este escuchaba atentamente, pero Lincoln estaba pensando en lo que había hecho hace unos minutos atrás. Le había pasado su número a una chica y ahora ambos podría conocerse mejor y tal vez… podrían salir y todo. Esto puso muy feliz al peli blanco y hizo que el viaje a casa con Lynn sea más emocionante, porque podría mandarle mensaje a Margo después.
Centro Comercial Royal Woods. 1 año después
El centro comercial un sábado por la mañana por lo general siempre está repleto de gente y hoy no era la excepción. Los locales abiertos y la gente feliz iban y venía, había grupos de amigos y parejas felices que iba para pasar el rato. Entre estas personas estaba una chica que se encontraba sentada en la fuente que estaba justo en el medio de la entrada del centro comercial. Esta chica era una bonita chica de unos 16 años casi 17, pero parecía más joven. La chica estaba mirando sus zapatillas negras mientras ocasionalmente miraba a su alrededor, buscando a alguien. La joven vestía con una bonita falda color naranja que hacia juego con su pelo y una campera de deportista de un color rojizo anaranjado que llevaba su nombre bordado. Estaba tan entretenida viendo sus zapatillas que no vio al joven aproximándose a ella.
-Hey Margo… - decía el joven de pelo blanco a la chica que estaba sentada en la fuente.
Margo levantó la vista de repente y contemplo al joven que la saludaba, su sonrisa se le formo con alegría mientras salía disparada para abrazar al chico que estaba con ella. Este joven era un año y medio menor que la joven pero era más alto que ella, llevaba una camisa de jean naranja abrochada y unos pantalones vaqueros azul oscuros que resultaba mucho el contraste de colores. Ambos jóvenes se besaron en la boca mientras se abrazaban y al romper el beso todavía abrazados la chica le hablo el recién llegado.
-Te extrañe mucho Lincoln- decía muy jovialmente la chica al peli blanco.
-Y eso que solo hace dos días que no nos vemos- decía Lincoln mientras volvía a besar a la chica.
La pareja de adolescentes se había juntado para celebrar el aniversario de un año que hoy cumplían. Todo había empezado con aquella vez que se vieron en el gimnasio y Lincoln se animo a pedirle su número. Y ahora estaban en el centro comercial pasando un tiempo de calidad, a punto de ir a ver una película que ambos estaban esperando desde hace meses, el nuevo remake de la película de los 2000 de Ace Savvy: "Ace Savvy: Deuces Wild". Cuando se estaban conociendo resulta que Margo no solo es fan de "Aaaargg", sino también de muchas otras cosas que Lincoln ama, entre ellas el súper héroe Ace Savvy y que mejor forma que festejar su aniversario que viendo la nueva película del súper héroe favorito de ambos.
-Perdón si tarde Margo, las chicas no paraban de acosarme con preguntas y entre gritos agudos no entendía muy bien que me decían- se disculpo Lincoln separándose del abrazo.
-Ohh entonces, tu familia ya sabe de lo nuestro- dijo Margo tomando la mano de Lincoln.
-Mmm digamos que sospechan algo… pero todavía no les digo a ninguna. – dijo Lincoln luciendo un poco apenado.
-Linc, llevamos saliendo un año ¿Cómo es posible que no le dijeras todavía a tus hermanas o a tus padres?- dijo Margo con cierto reproche.
-Es difícil para mí, tu sabes cómo se ponen con esto de las relaciones… es más fácil para mí simplemente decirle que voy a salir y punto, sin dar mayor explicaciones- decía con cierto fastidio Lincoln recordando la última vez que tuvo una "relación" y como reaccionaron sus hermanas. –Cuando estemos todos juntos reunidos, les diré la noticia… solo espero un momento oportuno para hacerlo.- terminaba de decir el peli blanco.
-Mmm es que se siente raro… como si te avergonzaras de mí o algo así. – dijo tratando de sonar un poco triste ante su novio. Los dos iban de la mano directo a la fila para comprar sus tickets.
-De ti no me avergüenzo Margo…. En cambio de ellas si me avergüenzo y mucho- decía con gracia tratando de hacer que su novia se riera. Y lo logro, Margo se reía por el descaro inocente de Lincoln y cuando por fin llegaron a la fila Lincoln continuo hablando. –Tú sabes lo complicado que es lidiar con ellas y se ponen de acuerdo no pararan de molestarme… ¡Sobre todo Lynn hoy! Quería que la acompañe a las jaulas de bateo… tuve que decirle que iba a trabajar en un proyecto con Stella para la escuela…- dijo con simpleza Lincoln pero Margo escucho muy bien esto último.
-Pero Lynn esta lesionada en su mano izquierda… No puede batear.- decía Margo pero siguió agregando. – ¿Y… porque Stella y no Clyde o cualquier otro de tus amigos… hombres?- decía Margo con voz neutral.
-Se lesiono la mano pero dice que todavía puede usar la otra, además no le gusta estar mucho tiempo sin hacer nada… y en cuando a Stella, me da más resultados con ella que usando a Clyde o los chicos como excusa. Lynn por alguna razón no me insiste mas cuando la nombro a Stella… solo aparta la mirada y se va sin decirme nada.- decía Lincoln en la fila con su novia. -¿Por qué preguntas? ¿Celosa?- decía un poco divertido el peli blanco.
- Si- decía sin ninguna pena Margo, tomando a Lincoln por los hombros y besándolo. Lincoln era más alto que ella, así que Margo tenía que ponerse de punta de pie para alcanzarlo. –Recuerda Linc… tu eres mi novio, no me gusta verte con otras chicas- terminaba de decir tratando de sonar graciosa, pero se reprimía tratando de no sonar molesta.
-Tranquila Margo, solo tengo ojos para ti. – decía Lincoln mientras la pareja avanzaba en la fila todavía tomados de la mano. Ya casi era su turno para sacar boletos.
-Sabes… Lynn es tu amiga ¿Por qué no se lo dices tú?- le pregunto Lincoln a Margo
-No es…algo fácil de tratar. La verdad nada con Lynn lo es, tu sabes cómo es ella con sus cosas… podría ponerse muy competitiva con el asunto- decía Margo mientras pensaba en su amiga Lynn. Ella podría ser muy difícil de llevar con algunos asuntos y contarle que tenía una relación con su hermano, era una de ellas.
-Pff… por supuesto que te entiendo –decía Lincoln llegando a la ventanilla para comprar su entrada –Tal vez los dos tengamos que hablarle a ella personalmente sobre nuestra relación… tal vez sea más fácil así.- ya en el puesto Lincoln se dirigió al joven detrás de la ventanilla. –Hola si… dos boletos para la nueva de Ace Savvy, por favor- le dijo al muchacho de la ventanilla y el procedió a imprimir dos boletos para la nueva película.
La pareja tomo sus boletos y se dirigió a la nueva fila para esperar su ingreso a la sala de cine para poder ver la película. En la fila Margo abrazo a Lincoln mientras esperaban.
-Sabes Linc, no es una mala idea lo de decirle a Lynn juntos. Ósea, tu eres su hermano y yo su compañera de quipo… no puede ser difícil comentarle sobre lo nuestro- decía por lo bajo Margo para que solo Lincoln la oyera.
-Mmm tal vez, podríamos decirle después de nuestra cita. – decía Lincoln mirando al frente.
-La verdad… esperaba que ambos vayamos a mi casa para pasar el resto del día juntos. Mis padres no estarán el resto del día, sabes. – esto último se lo dijo al oído para besarlo después.
Lincoln se ruborizo y miro a su novia y esta solo le devolvió a una sonrisa cómplice, ambos se miraron a los ojos para confirmar lo último que Margo había dicho y no era una mala idea pero si un paso bastante grande en su relación. Lincoln estaba nervioso por la proposición pero no se iba tirar atrás.
-Ohh… eso sería genial, pero sabes Margo, no tengo… como decirlo… "protección" ¿entiendes?- decía el peli blanco con un ligero temblor en su voz.
-Tranquilo Linc, podemos comprar a la salida en la farmacia del Centro Comercial sabes- le volvía a decir Margo en el oído a su novio para terminar abrazando su brazo para recostar su cabeza.
Lincoln tensó un poco el brazo ante lo que su novia le dijo, esto era nuevo para el peli blanco considerando el hecho de que Margo era su primera novia oficia y ahora ella quería llevar las cosas al próximo nivel era genial pero aterrador para el albino. Lincoln tomo un poco de aire y se relajo un poco mientras le entregaba los boletos al empleado para ir con Margo a la sala de cine donde proyectaría la película que ellos fueron a ver.
Después de unas dos horas de películas la gente empezaba a salir de la sala de cine, entre la multitud salía una pareja abrazada, eran Margo y Lincoln que acababan de salir de ver el remake de Ace Savvy. Margo no se veía muy feliz.
-AAJJJ… esa película fue un bodrio- decía Margo sujetando firmemente el brazo de Lincoln.
-¿Dices? Mmm a mi me gusto.- decía Lincoln mientras ambos se alejaban de la entrada del cine. Ambos seguían en el centro comercial y se pusieron a caminar un poco por el lugar.
-¡Por supuesto Linc! Ósea, ya de por si no me gustan estos remakes innecesarios sino que también ponen a estos personajes que en el comic no tienen relevancia y los ponen como coprotagonizas relegando a Ace - decía Margo mientras extendía su otro brazo. –Además… Ace parece un personaje de One Pieces… ¡por dios! Nada que ver con el héroe frio y calculador original, aquí tienes a un adolecente cabeza hueca que se la pasa comiendo y gritando cada frase que dice, que resuelve todo con fuerza bruta… ¡eso no es genial!… es muy molesto-terminaba de decir Margo mirando a su novio.
-Je… Esta mas que obvio que los guionistas estaban muy inspirados en el manga contemporáneo para hacer esta nueva adaptación.- terminaba de decir Lincoln con gracia pero Margo todavía seguía indignada por la película.
-¡Eso es otra cosa! Deberían dejar de contratar Weebus de internet para hacer producciones Americanas… ¡como si tuviéramos los mismos parámetros para hacer las cosas!- Margo sujetaba firmemente el brazo de Lincoln cuando volteó su cabeza a la izquierda, y ahí fue cuando se detuvo en seco.
-¡Uuoou! ¿Qué pasa Margo?- decía Lincoln que también fue parado en seco. El peli blanco levantó la vista para ver donde estaba mirando su novia y se ruborizó ante lo que estaba viendo. Era la farmacia del centro comercial.
Margo miro un poco apenada a Lincoln y mientras se ponía contra él para abrazarlo y susurrarle al oído.
-Sabes Linc… podemos irnos a casa ahora como te había dicho.- Margo ponía su rostro contra el pecho del peli blanco mientras le hablaba, generando calor en su cuerpo. – Pero… ¿Por qué no vas a dentro y compras… protección?- terminaba de decir Margo.
El corazón de Lincoln ahora estaba dándole patadas a través de su pecho del nerviosismo. Por supuesto que él quería esto pero ahora mismo sentía que estaba muy nervioso y no quería arruinarlo. Pero al mismo tiempo sabia que esta es una gran oportunidad, que no podía desperdiciar algo así y más cuando es la misma Margo quien sugirió la idea y encima pone la casa para eso.
Lincoln respiro un poco y se separo de Margo para tomar su billetera y ver cuando dinero había.
-Mu... Muy bien Ma.. Margo… -decía Lincoln con voz temblorosa mientras tomaba unos billetes y se disponía a ir dentro de la tienda. Pero mientras daba el siguiente paso, Margo lo agarro de la manda de su abrigo. Ambos se miraron por unos segundos antes de hablarse.
-Sabes Lincoln… me gustas mucho y quiero estar contigo… -decía un ruborizada Margo al peli blanco. –Pero si tú no estas cómodo hoy, no quiero presionarte.-
Lincoln solo levanto un poco la frente haciendo una mueca de sorpresa, mientras sentía que su inseguridad de a poco abandonaba su cuerpo. El peli blanco se acerco a su novia y mientras la envolvía en un tierno abrazo continuaba hablándole.
-Gracias Margo, perdón por estar nervioso… - decía Lincoln mientras abrazaba a su novia.
-No pasa nada Lincoln- le contestaba de regreso Margo. –Ven, vamos… tal vez podamos comer algo antes de volver.- le respondía de regreso al peli blanco pero este se aparto gentilmente de su agarre antes de continuar.
-Pero sabes… ya que estamos aquí… -decía Lincoln mirando la farmacia. –Sera mejor que compremos "eso" por si lo necesitamos para otro momento ¿no crees?- decía esto último con una mirada astuta. Margo se puso ruborizada ante esta declaración
-¡Por supuesto!- decía eufóricamente, pero después se arrepintió. – Es decir mmm claro, Linc, lo que te parezca bien. –decía con una sonrisa de complicidad a su novio.
Lincoln no dijo nada más sino que se puso en movimiento y con el dinero en su mano, entro dentro de la farmacia dispuesto a comprar una caja de condones.
Casa Loud. Esa misma noche
La noche había azotado sobre la casa Loud y todos sus habitantes ya estaban preparándose para irse a dormir. Algunos se mantenían despiertos por diversos motivos, uno de ellos eran Lynn Loud Sr el patriarca de la familia, hombre bonachón y padre amoroso. Se encontraba en la sala de estar mirando la repetición de su serie favorita "Breaking Mad", a él no le gustaba que sus hijas jóvenes miraran ese programa por lo que se cercioraba de verlo solo de noche para no molestar a nadie.
Otra persona que se encontraba despierta también era la joven Luna Loud, que se encontraba en el garaje practicando unos acordes con su guitarra para su próximo concierto.
Por último, la otra persona despierta era la deportista Lynn Loud Jr. La joven estaba haciendo unas sentadillas en tu habitación. Esta noche tenia la habitación vacía debido a que su hermana menor Lucy, con quien comparte la habitación no se encontraba esa noche por que había ido a una pijamada en la casa de su amiga Haiku.
Lynn hacia las sentadillas a un nivel lento pero constante y mientras lo hacia su brazo izquierdo lastimado estaba sujeto a una bandana protectora para evitar que se moviera. En su estado no debería hacer ejercicio pero ella odiaba estar quieta por mucho tiempo. El sudor le pasaba por sus mejillas pecosas mientras rebotaban sobre su trabajado cuerpo. Lynn tenía puesto un conjunto deportivo de musculosa y pantalón cortó color rojo con zapatillas. Usualmente era el conjunto con el que dormía pero hoy le estaba dando otro uso.
-37….38….39… 40…- repetía Lynn mientras miraba la pared e intentaba mantenerse firme. La verdad el dolor no la dejaba concentrarse bien, apenas podía hacer 5 repeticiones de 50 y eso que solo estaba lastimada un poco. -… 45…46…47…48… -repetía para sí misma Lynn con esfuerzo. – 49…. ¡50!..- decía esto con fuerza en su voz y de un salto se incorporó sobre sí misma.
Lynn sentía un calor dentro de sí misma y respiraba un poco agitadamente pero sentía más fastidio que otra cosa. Fastidio por su estúpida lesión que la alejara de su entrenamiento regular, de su vida deportiva e incluso la dificultaba para mantenerse en forma, apenas hizo 5 repeticiones de 50 y se sentía como una debilucha.
-Maldita sea…. Estúpida lesión… -decía para sí misma en silencio, mientras se dirigía a su armario para tomar un poco de su ropa para irse a bañar. Mientras seleccionaba la ropa que iba a ponerse no podría evitar recordar lo que había hecho durante el día. Básicamente: nada. Lynn Loud Jr odiaba no hacer nada por mucho tiempo y cuando era el caso, se aseguraba un mínimo de movimiento, aunque sea un juego donde pueda seguir en movimiento.
Mientras tomaba sus pantalones largos con estampa de beisbol que usaba como pijamas, recordaba lo que le había dicho Lincoln como respuesta a su invitación a las jaulas de bateo hoy.
-"Uhh lo siento Lynn… tengo trabajo con Stella hoy… aaah"- comentaba para sí misma simulando la voz de Lincoln de manera burlona. –Tonto Apestoso… - decía Lynn mientras se dirigía al baño para ducharse.
Ya en el baño y con la puerta cerrada Lynn procedía a desvestirse y dejar su ropa sudada en el cesto de ropa sucia. La ropa limpia que tenía en la mano la dejaba sobre la tapa cerrada de inodoro.
El cuerpo de Lynn estaba fuerte mente tonificado y para tener solo 16 años, era considerablemente musculosa pero esbelta. Ella no usaba ningún producto vitamínico o dietas raras, es más, Lynn podía comer como cerdo y no engordar nada y eso sumándole su rutina de ejercicios a la que se sometía diariamente quemaba mucha más grasa de la que consumía. Lo único que no podía remediar Lynn era que su estatura era muy pequeña, prácticamente no crece desde los 13 años y se mantiene con una altura bajita que a veces le acompleja. Mientras corría las cortinas del baño para meterse y prender la llave de la ducha, Lynn mantenía el seño fruncido. Todavía seguía pensando en el rechazo de su hermano esta mañana, últimamente él pasaba mucho tiempo con esta chica Stella y a Lynn le parecía extraño y un poco molesto por que acapara a su hermano e impedía que él y ella tuviera un lindo momento afuera haciendo ejercicio o divirtiéndose.
-Tonto Apestoso….- repetía Lynn mientras el agua le mojaba la cara y ella se llevaba el resto de agua por su cuerpo esbelto. El agua caía como lluvia sobre la muchacha empapándola toda y haciendo ligeros surcos con su pelo empapado sobre sus hombros.
Con su seño fruncido todavía firme se enjabonaba el cuerpo con el jabón de frambuesa que tanto les gustaba a sus hermanas mayores asegurándose de pasárselo suavemente por el cuerpo, pasando por sus fuertes hombros, seguido por sus senos copa A que se encontraban con los pezones ligeramente erectos por el frio y para pasar por su cadera fina pero firme. Todo esto lo hacía con una sola mano por que la otra estaba incapacitada para trabajar, aunque todavía seguía molesta. Sip Lynn podía ser muy obstinada, más cuando ya tenía una idea en la cabeza.
-Mmm tonto apestoso… -continuaba repitiendo así misma mientras se enjuagaba el cuerpo con una mano. –Tonto… de todos los días… ¿por qué me dejaste sola hoy?- decía Lynn mientras cerraba la llave de la ducha y salía de la misma para ir a secarse.
Ya en su cuarto Lynn Loud se preparaba para ir a dormir, no sin antes tomar su celular que se encontraba cargando en la mesita de noche. Lynn tenia puesto una vieja remera color negra que usaba para dormir y sus clásicos shorts rojos.
La joven Loud aparto las sabanas de su cama y se dispuso a entrar dentro de las sabanas, todo con el celular en su mano y asegundándose que su otra mano no se lastime.
Lynn miro su celular para ver la hora y eran casi las 12 am, entró dentro de su "Whorap" y se dispuso a buscar el número de su hermano y efectivamente había sido la última persona con la que había hablado antes de que este se fuera. Lincoln tenía como imagen de fondo una foto de Ace Savvy que Lynn consideraba tonta para un adolecente de su edad, mientras que ella tenía una foto de ellas levantando un manojo de pesas de 50 quilos cada una.
La castaña estaba tentada a mandar mensaje a su hermano y preguntar dónde diablos se había metido pero según su padre Lynn Sr su hermano se iba a quedar en lo de su amigo Clyde. Naturalmente Lincoln le dijo esto a su padre como seguro porque Lynn Sr era un terrible mentiroso y si su hijo le decía la verdad muy seguramente terminaría diciéndoselo hasta al vecino. Pero Lynn sospechaba la verdad, o al menos estaba muy cerca.
-De seguro esta con esa larguirucha amiga suya…- comentaba con desagrado mientras cerraba su celular y lo ponía debajo de su almohada. La joven Loud contempló la luz de la luna que entraba por su cuarto y si dio cuenta lo bien que esta iluminaba completamente la habitación. Después de unos minutos Lynn relajo sus músculos y por fin se quito su seño fruncido y se fue a dormir en un sueño tan rápido que ni a joven se dio cuenta cuando se quedo dormida.
Cajas de Bateo. Royal Wood. 1 mes después
Lynn estaba eufórica el día de hoy, no solo por fin se había recuperado completamente de su lesión sino que también podía salir a hacer sus actividades favoritas con su hermano. Lincoln había planeado un día excelente para ellos dos: primero habían salido a patinar, después a comer a la hamburguesería el "Eructo", después a las jaulas de bateo y ahora se dirigían a la feria anual de Royal Wood por una malteada. Era un día genial para la pareja de hermanos y Lynn la pasaba como nunca.
-JaJa, sabes Linc tienes que perfeccionar ese swing tuyo, pasaron 3 pelotas antes de que pudieras darle a una de ellas.- decía Lynn a su hermano mientras caminaban hacia la feria.
-Hace mucho que no lo hacía, pero lo considero como un logro.- le respondía de regreso Lincoln. –Al menos no me golpeo en la cabeza esta vez.- decía con gracia Lincoln haciendo que Lynn se riera por lo bajo.
-Bueno, eso es genial Linc no quiero llevarte a casa sobre mis hombros como antes.- decía Lynn posando su mano sobre el hombro de su hermano.
-¡Como si pudieras! Recuerda que soy más grande que ti ahora.- decía Lincoln burlonamente pero Lynn no se tomo muy bien esto.
-¡Oye! Solo eres alto ¡no eres más fuerte que yo!- decía de regreso Lynn molesta y ligeramente ruborizada. –Dos por creído- y golpeaba dos veces sobre el hombro de su hermano, haciendo que este se aparte un poco de la gracia y un poco adolorido.
-¡Oye, era una broma!- decía de regreso Lincoln mientras tomaba a su hermana Lynn por detrás y la alzaba como una niña
-¡Ooh… ohh!.. ¡Oye! ¡¿Qué… que estás haciendo…?!- muy apenada Lynn mientras Lincoln la alzaba por el aire y la volvía a dejar en el suelo. Esto le produjo a Lynn una sensación de pena, asombro y una mezcla de alegría y emoción que la dejaron confundida de cómo reaccionar.
-Vamos no te pongas así… Ya estamos aquí- decía Lincoln mientras miraba el parque de la ciudad ahora transformado en una genial feria donde había comida, juegos y demás puestos de ventas. Lynn había olvidado su molestia y confusión y contemplo el panorama en frente suyo y sus ojos se iluminaron.
-¡Vamos a encestar en el aro de básquet primero!- decía Lynn mientras tomaba la mano de su hermano y lo llevaba a rastras como si fuera un saco de papas.
Durante las siguientes horas los dos hermanos jugaron, comieron y rieron en el parque de la ciudad mientras iba a todos los puestos que se cruzaban en su camino. Para el final de la jornada ambos se sentaron a la salida de uno de los puestos donde estaban emplazadas unas mesas con sillas para que las personas se sentaran. Ambos ahora compartían un asiento enfrentados entre sí.
-¡Oh Linc este día fue genial! Gracias por pasar el día conmigo Linc- decía Lynn mientras saboreaba su Flippy que había comprado en el puesto del viejo Flip.
-Te lo merecías Lynn… hacia mucho que no hacíamos nada los dos- le regresaba Lincoln de regreso con una sonrisa. Aunque Lynn se quedo pensativa un poco de esto último y se lo hizo saber a su hermano.
-Mmm… tal vez, si no pasaras tanto tiempo con tu novia, podríamos salir mas- decía Lynn apartando la vista y sorbiendo su Flipy
Lincoln si hubiera estado tomando una bebida ahora mismo la estaría expulsando por la nariz. Aunque se ahogo ligeramente con su propia saliva y quedo un poco atónito por lo que su hermana le había dicho. "¿Lo sabía?" Pensaba para sí mismo.
-Noo…¿Novia?.. De.. ¿de qué hablas Lynn?- decía Lincoln tartamudeando y un poco nerviosa. Lynn entrecerró los ojos y termino de sorber su Flippy y lo arrojo al cesto de basura que estaba a dos metros de ellos, encestando perfectamente de una.
-Linc… no soy tonta. Sé que tienes novia, no tienes… porque ocultármelo.- decía Lynn tratando de sonar solemne pero le costaba.
-Ehh bueno… Ahh…-ahora Lincoln estaba actuando como un tonto, se recompuso y suspiro y volvió a hablar. -¿Hace cuanto que lo sabes?- "¿A caso Margo ya se lo dijo?" pensaba Lincoln
-Bueno… no es que seas muy discreto Lincoln.- Lynn se inclinaba y se cruzaba de brazos para decir esto. –Pasas mucho tiempo fuera de casa… ni hablar de que según Papa te la pasas en la casa de uno de tus amigos, por no decir…- trago saliva para decir esto último. –…Esas "escapadas" que te haces para ir a estudiar con tu amiga la latina.- decía esto último en un tono que Lincoln no podía descifrar pero no era lo más importante ahora mismo.
-¿Latina? ¿Quién?- decía Lincoln genuinamente confundido.
-¡Vamos Lincoln!- ahora Lynn levantaba la voz haciendo que algunas de las personas presentes se voltearan a verlos. –Tú sabes a quien me refiero, a tu amiguita alta de tez bronceada… la delgaducha alta- decía esto último apartando su vista, todavía estaba cruzando de brazos. Lo que Lynn noto alrededor suyo era que la mayoría de los presentes en las demás mesas parecían ser parejas de novios compartiendo un agradable momento y ellos parecían una pareja que estaba discutiendo. Al percatarse de esto se encogió un poco de hombros y esperaba que nadie los confundiera por una pareja de novios. Aunque a esto último Lynn no le hubiera importado.
Del otro lado de la mesa Lincoln se veía confundido y ligeramente aliviado por un lado. "Al menos no sabe de lo mío con Margo", pensaba para sí mismo. Aunque le resultaba un poco gracioso que Lynn pensara que él y Stella estuvieran saliendo y un poco raro que confundiera a Stella por una latina.
-En realidad Lynn… Stella es de ascendencia Filipina… no es latina ella.- corrigió primero esto. – Y en realidad yo…- antes de terminar de decir esto Lynn la interrumpió.
-Ok es Filipina, perdón por eso ¡Pero tú y ella están saliendo!- decía Lynn como recriminándoselo
-¿Qué? Noo… nosotros no… espera, pero ¿Por qué te importa tanto esto?- decía Lincoln un poco gracioso de la actitud de Lynn.
-Ahh bueno…- ahora Lynn se encontraba sin palabras y dijo lo que tal vez diría su hermana Lori en una situación así. -¡Somos familia!- dijo con la voz un poco aguda. –Y además… y… además.. ahh..-trataba de encontrar las palabras adecuadas para esto. -… ¡Soy tu hermana mayor, merezco saberlo!- dijo tratando de poner un tono intimidante pero por alguna razón su voz sonaba mas al de su hermana Lola que a otra cosa.
-Bueno… si, mereces saberlo….- le reconoció esto último a Lynn. En realidad todas sus hermanas tenían que saberlo, pero por obvias razones Lincoln evitaba decirles de momento. –Pero Lynn…-otra vez fue interrumpido por su hermana.
-¡Pero nada Linc! Somos tu familia, debemos saber esto ¿Sabes?- decía Lynn poniendo sus manos sobre la mesa.
-Sí, ya se… pero- Lincoln no podría terminar su sentencia porque Lynn continuaba hablando.
-Sabes, ya sé que a veces con las chicas podemos ponernos intensas pero no es motivo para que nos ocultes cosas Linc, nosotras te queremos.- esto último hizo que Lincoln se sorprendiera y enterneciera a la vez.- Solo queremos lo mejor para ti y nos preocupamos con quien estés- Lynn terminaba de decir esto como un susurro, sentía la garganta seca y necesitaba otro Flippy para calmarse.
-Wow Lynn… gracias- decía Lincoln mirando a los ojos a su hermana, los cuales brillaban por la capa ligera de lágrimas que estaba conteniendo. –Tienes razón Lynn, disculpa por haber estado evitando el tema. Debí habérselos dicho a ustedes desde un principio- admitía Lincoln a su hermana quien lo miraba con algo de reproche.
-Si… si debiste- decía Lynn con el corazón en la garganta, después de esto iba a hacer que Lincoln le compre un Flippy extra grande para calmarla. –Pero descuida Linc… no pasa nada- decía esto último con una sonrisa.
-No no, tienes razón Lynn, debí habérselos dicho desde un principio en vez de actuar como un extraño.- el peli blanco ahora se sentía un poco apanado pero continuaba hablando. –Pero Lynn… sabes, no es con Stella con quien estoy saliendo- admitía Lincoln analizando con la mirada a Lynn, quien lo miraba perpleja y algo confundida.
-¿Qué...? Pero entonces… ¿Quién es tu novia?- decía Lynn con una voz un poco ronca que no paso desapercibido a su hermano.
Ahora si estaba nervioso Lincoln, no esperaba el día de hoy decirle a Lynn con quien estaba saliendo desde hace ya un año, pero necesitaba decírselo de una vez por todas.
-Bueno… Ahh.- Lincoln intentaba mirar para otro lado pero le resultaba inútil. –Mira Lynn… te lo diré, pero promete que no te vas a alterar- decía Lincoln con un tono serio a su hermana. Ella solo le devolvió una mirada de poker de ojos entrecerrados.
-¡Vamos Linc! No puedes ser tan malo. ¿O qué? Me dirás que eres gay y estas saliendo de Clyde o uno de tus amigos raros- decía con un tono burlón Lynn a su hermano.
-¡No seas tonta Lynn!... ¡Y mis amigos no son raros, ellos son geniales!- ahora Lincoln estaba un poco ruborizado. Lynn se limito a reír para quedar en silencio y dejar hablar a su hermano. –Bueno… mira, el asunto es que tu ya conoces a esa persona… con la que estoy saliendo- ahora las risas de Lynn se detuvieron y pasaron a una genuina confusión.
-La.. ¿La conozco? ¿Quién es?- decía Margo de vuelta a su hermano quien lo miraba expectante.
-Es… es Margo, Lynn… Estoy saliendo con Margo.- admitía muy solemnemente Lincoln a una Lynn que lo miraba atónita con los ojos bien abiertos pero luego de unos segundos su semblante pareció relajarse extrañamente.
-Ahh… -fue lo único que atino a decir Lynn. –Estas… saliendo con una chica que se llama Margo.- dijo en tono neutral sin sacarle los ojos de encima a su hermano.
-No Lynn, estoy saliendo con Margo Roberts- dijo Lincoln con un tono serio
-Ahh tiene el mismo apellido y nombre que mi amiga y compañera.- dijo rápidamente mientras ponía una sonrisa incrédula.
-¡No Lynn!- a Lincoln se le hacía cada vez más difícil. –Te digo que estoy saliendo con Margo, tu… amiga y compañera de equipo… no con una chica de nombre parecido- terminaba de decir Lincoln a la joven en frente suyo, quien parecía que sus ojos se le iban a reventar si no pestañaba.
-Eso… eso no puede ser Linc- decía incorporándose sobre la silla y poniendo su espalda sobre el soporte de atrás de la misma.- No, es imposible… Margo no tiene novio…-decía Lynn en negación.
-Si… lo tiene y soy yo Lynn… - a Lincoln se le escurría una gota de transpiración en la parte izquierda de la cabeza.
-¡Te digo que no Lincoln!- dijo Lynn levantando la voz y poniéndose de pie. Ahora varias personas los estaban viendo. Lincoln ignoro al resto y solo se limito a seguir a su hermana que parecía estar alejándose del lugar a paso rápido.
-¡Espera Lynn!... Te digo que es verdad. Margo y yo estamos saliendo… No hay nada de malo en eso- al decir esto Lynn freno en seco y se volteo para verlo a los ojos
-¡¿Qué no hay nada de malo en eso?! Lincoln… Margo es mayor que tu ¡Podría ser tu hermana!- decía Lynn levantando los brazos.
-¿Qué?... Es mayor que yo por un año y medio nada mas…. Las dos tienen la misma edad Lynn.- decía Lincoln no comprendiendo el exabrupto de su hermana.
Lynn no aguantaba más, no podía creer lo que su hermano le estaba diciendo. Todo este tiempo su hermanito estaba saliendo con su amiga a escondidas y en ningún momento ella le dijo nada al respecto.
-Voy a llamar a Margo- decía Lynn buscando su celular
-¡No Lynn!- decía Lincoln balanceándose sobre su hermana.
-¡Déjame apestoso! Ella me debe una explicación- decía la castaña al peli blanco esquivando su ofensiva rápidamente.
-¡SOLO VAS INCOMODARLA LYNN y HACER QUE PASE UN MAL MOMENTO!- decía Lincoln casi gritando estas palabras. La gente que iba y venía se detenía para ver a la pareja discutir.
Lynn empezó a mirar alrededor suyo y se dio cuenta que estaba llamando mucho la atención y decidió alejarse corriendo del lugar. Lincoln vio como su hermana estaba alejándose rápidamente y el solo se limito a intentar seguirla también.
Después de 3 minutos corriendo, Lincoln se alejo completamente de la feria del pueblo y ahora mismo se encontraba en otro parque, uno más alejado y con casi nadie de gente… salvo una chica bajita de pelo castaño que estaba sentada en una de las bancas sujetando su celular.
El peli blanco se acerco a la chica y en efecto era Lynn quien se veía ahora un poco triste y con cara de pocos amigos.
-Lynn… - decía Lincoln tratando de acercarse a su hermana, pero esta le aparto la mano de un golpe de palma rápido. -¡AUCH! Oye, eso dolió.- decía Lincoln sujetándose las manos. -¿Qué es lo que te pasa Lynn?- decía Lincoln con fastidio.
La castaña solo alcanzo a mirarlo de reojo para bajar la cabeza.
-Nada…- es lo único que alcanzó a decir
-"Nada"… Esto no parece nada Lynn.- le respondía Lincoln sentándose al lado de ella. Lynn seguía en el mismo lugar que antes. –No te enojes Lynn… perdón por no decirte antes, pero no te molestes con Margo…- dijo Lincoln a su hermana que ahora se volteo para verlo.
-No estoy molesta Lincoln…- dijo algo seca a su hermano.
-¿Y que fue esa escenita en la Feria, eh? Eso me pareció muy molesto a mi.- le contestaba sarcásticamente a Lynn quien no pareció tomarse muy bien.
-¿Ah sí? Toma dos por tramposo- en esto Lynn le pego dos veces en el hombro a su Lincoln.
-¡Basta Lynn!- en esto Lincoln se froto su golpe pero al mismo tiempo se empezó a reír y con él, Lynn también.
Ahora ambos hermanos estaban riendo como dos niños sobre el faro que iluminaba la banca donde ahora estaban sentados. Ignorando el hecho que prácticamente estaba oscuro ya. Cuando las risas terminaron, Lynn por fin se puso a hablar.
-Lo siento Linc… Sobre reaccione…- se disculpaba Lynn apanada.
-Y eso que solo te lo dije a ti… no quiero imaginar lo que dirán las demás.- dijo Lincoln juntando los pies.
-No es eso Linc… Es que solo…- Lynn sentía un mundo de sensaciones dentro de él. Por un lado estaba molesta con Lincoln y Margo por no haberles dicho que estaban saliendo y también se sentía traicionada con Margo por salir con su hermanito menor a sus espaldas, Lynn no podía traducir esto en palabras pero el sentimiento que más se le acercaba eran los celos, cosa que negaría hasta morir si era necesario.
-Mira Lynn… Hace un año y medio que estoy saliendo con Margo.- apenas dijo esto su hermana le clavo la vista y una mirada asesina en sus ojos.
-¡¿Y apenas me lo dices?! Toma dos por tonto. – en esto Lynn golpeo dos veces sobre el hombro sano de Lincoln.
-¡Carajo Lynn basta!- decía Lincoln parándose y viendo a su hermana de frente. –Si… estoy saliendo con Margo por un año y medio ya… pero no hay nada de malo en esto ¿ok? Ella no me está obligando a nada, es mas ¡yo fui quien la invito a salir!- decía tajantemente Lincoln a su hermana quien se sentía más pequeña de lo que era ahora mismo. –Sabes Lynn… me gusta mucho Margo, de verdad… y quiero que esto funcione pero tampoco quiero que haya fricciones entre las dos por esto… ¿Si?- terminaba de decir el peli blanco a la joven sentada
- Para ti es fácil decirlo- decía Lynn parándose de su lugar. –Tú no tienes que entrenar con ella todos los días y pensar en…-a Lynn le costaba decirlo a sí que se contuvo. –Mira Linc… perdón por lo de hace rato… ¿Si?... No supe cómo reaccionar e hice lo primero que se me paso por la mente… No debí reaccionar como lo hice, lo siento ¿Si?- Lynn se disculpaba genuinamente con Lincoln, cosa que lo sorprendió bastante, no esperaba que su testadura hermana diera tan poca pelea.
-Ahhh… muy bien Lynn… pero por favor, no llames a Margo ¿sí? Teníamos pensado decírtelo los dos… -admitía Lincoln pero por alguna razón esto hizo enojar a Lynn pero no lo demostró y simplemente aplacó su enojo momentáneo
-Muy bien Linc… no lo hare, pero tienes que darme una chance, todo esto es… incomodo para mi ¿sí? Tu eres mi hermano menor… y ella una muy querida amiga mía… es difícil para mí verlos juntos, sabes… -admitía Lynn acomodándose un poco el pelo. Lincoln a penas se dio cuenta de esto: su hermana Lynn tenía el pelo suelto hasta los hombros y tenía un conjunto deportivo con unos shorts ajustados y zapatillas simples color rojo. La luz del faro sobre ella la hacía resaltar lo hermosa que era pero Lincoln simplemente ignoro esto y continuó.
-Descuida Lynn… te entiendo… Ya los tres podremos hablar de esto después- decía Lincoln acercándose a su hermana. – Ven vamos a casa.- en esto puso su mano sobre el hombro de Lynn y ambos comenzaron a alejarse de aquel lugar.
Mientras caminaban Lynn se dio cuenta que todavía tenía su celular en la mano y se le ocurrió algo muy gracioso.
-Pero sabes que Linc… estuvo muy mal no decírmelo antes.- en esto Lynn se detuvo y abrió su celular y se puso a buscar el chat familiar de "Whorap".- Te mereces un castigo…- decía Lynn levándose el celular a la boca para mandar un audio ante la mirada atónita de Lincoln. –Familia… adivinen que… ¡LINCOLN TIENE NOVIA!- en esto Lynn envió el audio de apenas 5 segundos ante la mirada horrorizada de su hermano, quien tenía la mandíbula tan abierta que parecía que se le iba a desprender.
-¡NOOOO! ¿! Por qué hiciste… ¡?- antes de terminar lo que iba a decir el celular de Lincoln comenzaba a sonar frenéticamente. No solo le había llegado el audio que Lynn acababa de mandar al grupo familiar sino que también le llegaban otros audios, mensajes e incluso llamadas de sus otras hermanas que ahora estaban eufóricas y con miles de preguntas para Lincoln, quien ahora miraba a Lynn horrorizado con su mano en el celular.
-Ese va a ser tu castigo apestoso, diviértete explicándoselo al resto de nuestras hermanas- en esto Lynn comenzó a alejarse del peli blanco a paso ligero y este solo se limito a verla alejarse mientras sostenía y veía los mensajes que le llegaban sin cesar por el celular.
El día todavía no terminaba pero Lincoln sentía que iba a ser eterno apenas llegara a su casa.
Casa Mc Bright. Unas semanas después
Era casi el medio día en la casa Mc Bright y el sol se imponía completamente sobre la bella casa habitada por esta peculiar familia. En la puerta de entrada se asomaba nada más que el hijo de los padres Howard y Harold: Clyde Mc Bright, un joven considerablemente alto y esbelto pero con apariencia de "Geek" visualmente incomodo y no era para menos, Clyde ahora mismo levaba consigo una mochila repleta de productos de limpieza y en sus manos llevaba su equipo de limpieza ensamblable para casos extremos de suciedad.
Clyde cerraba rápidamente la puerta y le ponía el seguro antes de irse, salió corriendo hacia el garaje para tomar su bicicleta ya estacionada y salir pedaleando hacia la casa de su mejor amigo: Lincoln Loud. Aparentemente la casa Loud fue víctima de una jugarreta que causo graves destrozos a la propiedad y Lincoln llamo a Clyde contándole la situación y de inmediato su mejor amigo se ofreció en ayudar en la limpieza. Lincoln sonaba entre alterado y enojado por alguna razón.
Clyde por fin llego a la Avenida Franklin al 1216 después de pedalear 10 minutos y contempló el panorama: la casa Loud estaba manchada completamente de lo que parecía ser proyectiles de pintura, de esos que se disparan con esas armas de paintball, también los cubos de basura habían sido prendidos en llamas y algunas bolsas fueron arrojadas a la residencia loud manchando las paredes y algunas ventanas, así como también algunas parecían quebradas por el impacto, también la propiedad sufrió destrozos en el exterior como si alguien hubiera venido con un martillo o una palanca y hubiera roto todo en un frenesí de violencia sin sentido. Pero lo peor lo sufrió la pobre camioneta familiar Vanzilla: no solo le habían pinchado todos los neumáticos, sino que rompieron todas las ventanas, pintaron con aerosol toda la carcasa exterior y arrojaron pintura enlatada dentro del vehículo, manchando todo de un color verde musgo asqueroso.
Algunas hermanas Loud se encargaban de limpiar los restos de lo que alguna vez fue la van familiar. Leni y Luan con guantes en sus manos y mascarillas limpiaban con lejía la van intentando al menos sacar la pintura, Luna y Lucy por otro lado recogían la basura quemada con trinchetas improvisadas y las gemelas movían los cubos de basura para hacer espacio para que Lynn sacara los escombros y madera rota del porche destruido de a casa.
Clyde se acerco a esta escena del crimen impactado por la violencia que había visto. En esto fue abordado por Lana que movía el cubo de basura más grande que ella.
-Hola Clyde y permiso Clyde.- decía le gemela moviendo el cubo casi chocando contra el joven que se movió en el último segundo.
-SI, muévete Clyde si no vienes a ayudar entonces no molestes cariño.- decía agriamente Lola con cara de pocos amigos mientras sujetaba un bolsa grande de basura con los restos de basura que estaban recogiendo. Ambas gemelas se alejaban para poner la basura y el cubo a un costado de la calle.
Clyde miro a las gemelas alejarse para ver a Lynn moviendo un bloque pesado de hormigón que había sido estrellado contra la valla de la casa. El chico se acerco para agarrar el escombro pesado junto con Lynn.
-Deja que te ayude Lynn…-en esto el chico tomo parte del escombro y se arrepintió casi al instante porque era verdaderamente pesado.
-Gracias Clyde pero te vas a lastimar, es muy pesado para ti.- decía Lynn levantando sin problemas en escombro gigante con ambas manos. El moreno miro a la chica tonito mientras recobraba el aliento.
-Ok… pero Lynn ¿qué rayos paso aquí? ¿Paso un tornado o algo?- dijo el chico haciendo un panorama de la destrucción.
Lynn no le contesto de inmediato sino que se puso en marcha a un costado de la casa y tiro el escombro junto con otros de igual o menor tamaño para que no molestaran al pasar.
-No lo sabemos Clyde… Quien sea que fuera, parece que no las tenía jurada de algo.- decía Lynn estirando un poco los brazos y acomodando la ropa del polvo.
- ¿"Jurada"…?- decía confundido Clyde. -¿Quién haría tal…?- en esto el moreno se quedo callado al darse cuenta que iba a preguntar de mas. Por suerte Lynn no se dio cuenta de esto, en cambio siguió levantando escombros.
-No lo sé viejo… tal vez Lincoln o Lisa puedan ayudarte.- decía Lynn alejándose del moreno.- Lisa esta dentro fijándose en las cámaras de seguridad y Lincoln está limpiando el garaje… lo peor está ahí.- terminaba de decir Lynn levantando otro escombro más grande de lo que alguna vez fue la columna de entrada de ladrillo de la casa.
Clyde le hizo caso a la castaña y se fue directo al garaje donde el panorama era dantesco. No solo habían abollado la cortina de metal del garaje hasta arrancar parte del tejido, sino que dentro destruyeron todo lo que había a su paso, las herramientas fueron robadas, las paredes fueron pintadas, la puerta que conectaba al garaje y la casa fue incendiado (gracias a dios no se extendió el fuego) pero lo peor estaba por venir: alguien se había cagado sobre la mesa del garaje y no conforme con eso lo habían desparramado por todos lados.
Clyde iba a vomitar su desayuno de no haber sido por que una persona con máscara de gas apareció portando varias bolsas de basura y una cubeta con agua y detergente. Clyde grito del susto pero aquella persona rápidamente se saco la máscara y se trataba de su amigo Lincoln, quien tenía una cara de angustia, asco e ira todo combinado.
-Clyde… gracias por venir.- decía su amigo a Clyde mientras ambos salían del garaje.- ahora ambos estaban alejados de aquel horrible hedor. Clyde no sabía cómo empezar a hablar con Lincoln por lo que se limito a tomar la cubeta con agua y detergente y acompaño a su amigo a la parte de atrás del garaje. – Ven… también hicieron destrozos atrás.- decía Lincoln resignado.
Ambos amigos fueron a la parte de atrás de garaje y el panorama fue igual al anterior: destrucción por todos lados pero por suerte, no había excremento.
-Quería limpiar… lo que dejaron en el garaje.- decía Lincoln con asco. –Pero Lisa quiere que lo deje de momento para recolectar evidencia, ahora cuando ella termine de ver las cintas de seguridad.- decía Lincoln mientras tomaba una palita y una escoba y limpiaba como podía la destrucción.
-Linc…-decía Clyde viendo a su amigo inusualmente callado. –Fue… él ¿verdad?- decía el moreno mientras venia a su amigo visiblemente incomodo pero sin dejar de limpiar. Lincoln no contestó de inmediato, solo tomo un par de guantes de látex de su bolsillo y le arrojo un par a su amigo Clyde. Mientras el moreno se los ponía el peli blanco empezó a hablar.
-Lo más probable es que fuera él, Clyde… no creí que llegaría tan lejos como para venir a destruir la casa.- decía Lincoln tomando la escoba y barriendo la basura desperdigada por el patio. – Mis padres ahora están en la comisaria, fueron a hacer una denuncia y también ver si el seguro cubre los destrozos del auto.
Clyde tomo la esponja dentro del cubo con agua y empezó a limpiar el grafiti que habían hecho en la pared de la casa. Mientras lo hacía pudo leer cosas como: "Muérete Loud", "Púdrete" e incluso una que otra esvástica fue dibujada, algunas mal hechas por cierto. Clyde se molesto de sobre manera por esto pero inmediatamente lo borro porque sabía que era más un acto de intimidación estúpida que una verdadera proclama.
-Fue él… estoy seguro, todo esto tiene su sello.- decía Clyde a su amigo Lincoln. –Tal vez puedas hablar con Margo… decirle lo que paso y luego…- antes de terminar Lincoln miro a su amigo con enojo para decirle algo en voz alta.
-¡No voy a meter a Margo en esto! – dijo tajantemente el peli blanco. – Ella no está enterada de esto… no voy a decírselo, solo la voy a hacer preocupar más.- decía el peli blanco a su amigo quien ahora lo veía atónito.
-Pero Linc… ese tipo no solo te acosa en la escuela… ¡sino que también vandalizó tu casa! – decía Clyde sujetando la esponja en su mano. –Ese tipo podría la próxima vez… -le resultaba difícil terminar su sentencia.-… atacarte o algo.- termina de decir ante la mirada de su amigo.
-Eso… eso es algo que estoy dispuesto a correr. No voy a meter a mi familia o a Margo en esto. Por lo que mis hermanas y papa y mama piensas: se trato de un caso de vandalismo y robo vinculado a pandillas.- decía Lincoln tirando la basura dentro de una de las bolsas. –Después voy a pensar en un plan de cómo manejar esto Clyde, ¿sí? Gracias por venir a ayudar viejo, eres el mejor.- decía Lincoln poniendo una mano en el hombro de su amigo.
Clyde se sintió un poco reconfortado con estas palabras y por un minuto se sintió seguro con las palabras de Lincoln pero todavía había algo que le molestaba pero no iba a decírselo a Lincoln de momento. Ambos simplemente se limitaron a limpiar el desastre, esperaban terminar antes de que los padres de Lincoln volvieran.
Pero lo que Lincoln no le dijo a Clyde o nadie en realidad fue que entre los escombros estaba emplazada a la vista la vieja caja de veterinaria del gato Cliff , como si alguien la hubiera puesto ahí a propósito y en una de las paredes de la caja había una flecha apuntado hacia adentro y efectivamente adentro de la caja había una nota escrita a puño y dirigida para Lincoln.
"Disfruta la remodelación perdedor, la próxima remodelación que haremos va ser en tu cara. Recuerda quien es el hombre de verdad aquí Lincoln Loud".
La nota no tenia firma pero Lincoln la sacó y se la metió dentro de los pantalones y cuando nadie estaba mirando la quemó con uno de los encendedores de Luna para que nadie lo encontrase. Lo último que quería era que sus hermanas metiches se enterasen que todo este desastre era culpa de él, por que había hecho enojar a un loco de mierda y lo peor era que Lincoln nunca antes había visto o interactuado con esta persona para que le hiciera esto.
Escuela Superior de Royald Wood. 1 semana después
Lincoln corría por su vida rodeando la escuela como podía, había arrojado su mochila a unos arbustos y esperaba que sus perseguidores no lo hayan visto. Después de haber terminado su jornada escolar estos locos vestidos con chaquetas y pasamontañas y ropa militar lo confrontaron a la salida de la escuela y gracias a su destreza logró escapar ileso pero no por eso el grupo lo había dejado tranquilo
Lincoln les llevaba algo de ventaja pero ellos eran varios y por lo que alcanzo a ver: tenían palos. Eso no es bueno. De no haber sido por el entrenamiento que tenia con Lynn esos tipo ya lo hubieran agarrado.
El peli blanco alcanzó a rodear la escuela mientras a no mas de 10 metros lo seguían unos 5 tipos furiosos con pasamontañas y pantalones militares, y al llegar al estacionamiento de la escuela se escabulló entre los autos que había que por suerte no eran pocos.
Lincoln se encontraba agachado debajo de un auto descapotable rojo lo suficientemente grande para esconderlo a el. Mientras veía como aquellas personas miraban alrededor y se gritaban entre si pero ninguno estaba seguro de que hacer, entonces cada uno empezó a separarse, las dos personas que tenían palos se separaban de izquierda a derecha y las dos restantes se mantenían juntas buscando entre los autos.
Que suerte que Lincoln era de contextura delgada y podía meterse entre debajo de aquel descapotable. Mientras se metía debajo de aquel auto y rodaba a su izquierda su mente empezaba a enfriarse y a la adrenalina a mermar, haciendo que lo invadiera un frio extraño que solo vinculaba con una especie de miedo primitivo. Estos tipos sean quien sean, querían lastimarlo y el no iban dejárselas fácil. Debajo del auto empezaba a ver como aquellos tipos se alejaban hacia la parte de atrás del estacionamiento y por alguna razón no lo buscaban por debajo de los autos, tal vez esperaban que el saliera por su propia cuenta.
Lincoln estaba bastante asustado y sucio por estar revolcándose debajo de aquel auto, aprovechó un punto ciego que le dejaron aquellos tipos y rodo rápidamente a su izquierda hasta quedar de espaldas afuera y a gatas empezó a moverse lentamente sobre el suelo, como en aquellos videojuegos de guerra que tanto le gustaban. Milagrosamente ningún lo vio y el peli blanco aprovecho esto para salir justo por el mismo lugar donde había entrado. Iba a hacer un escape perfecto pero no contaba con una cosa: uno de ellos se había quedado a esperar justo en la entrada del estacionamiento, contra uno de los autos, de forma que Lincoln no lo vio hasta que fue demasiado tarde. Una patada en sus costados lo puso fuera de combate y lo estampo contra la pared que daba hacia el estacionamiento.
Ahí mismo comprendió que no eran 5 sino 6 matones con ropa militar quienes lo estaban siguiendo pero este matón no tenia pasamontañas, su cara estaba al descubierto revelando un rostro que para desgracia de Lincoln conocía muy bien.
-Estoy harto de ti Loud- decía aquella voz grave que acercaba a un Lincoln adolorido en el piso.
Lincoln se retorció de dolor en el piso pero aprovecho esto para saltar sobre su estomago y pudo haberse incorporado y salir corriendo de no ser porque aquel tipo lo aplasto con su borcego sobre su espalda, dejándolo totalmente inmóvil
-¡MALDITA RATA! Deja de moverte.- gritaba con furia aquella voz. Ese grito alerto a los demás que estaban por el fondo del estacionamiento.
-Carajo… –decía Lincoln enojado y adolorido en el piso mirando de frente la salida tan cerca.
El resto de aquel grupo se acerco y entre risas y gritos empezaban a burlarse de Lincoln a clamar por el sujeto que tenia su pie sobre su espalda.
-¡Muy bien viejo! Encontraste al albino… a nosotros se nos escabullo.- decía uno de los presentes. Parecía ligeramente mas delgado que todos los demás, que tenían entre contextura robusta o gorda.
-Maldito mocoso… me hizo corretearlo hasta el estacionamiento.- decía el mas gordo con pasamontañas sosteniendo un bate de beisbol de aluminio. Parecía bastante agitado y respiraba con dificultad.
-Miren al mocos. Apuesto que ya se cago en los pantalones.- decía con malicia uno de ellos. Su voz sonaba ligeramente aguda, tal vez era el menor del grupo.
-Rompa moleste las piernas y vámonos antes de que venga alguien Elliot.- decía con sadismo uno de los mas grandes al que parecía el líder del grupo.
-Elliot… ¡Mierda Elliot!- dijo Lincoln mirando con furia a aquel tipo en frente suyo.
Eliot Pierce, aquel gigante que se imponía sobre Lincoln lo miraba con una furia ciega, casi psicótica. Desde hace un tiempo atrás este joven apenas 2 años mayor que Lincoln se había transferido a la preparatoria y desde ese instante solo se dedicaba a hacerle la vida imposible al peli blanco. Por lo que había escuchando el albino, Elliot paso parte de la secundaria y la preparatoria en un internado militar y ahora había vuelto al pueblo. Pero no eran un bully común de secundaria, este tipo parecía como si odiara a Lincoln. Mientras miraba con rabia al peli blanco aparto su pie de la espalda de Lincoln no sin antes aplastarlo en el piso una ultima vez mas.
-¿Te gusto la remodelación que hicimos Loud?- decía con burla Elliot a Lincoln mientras los demás se reían. – ¿Te gusto el regalo que te dejamos en el garaje Loud? De seguro tuvieron que tirar la mesa completa después.- al decir esto todos los demás se rieron al recordar aquella salvajada que hicieron en la casa de Lincoln.
Lincoln no contesto de inmediato, solo se dedico a mirar el camino esperando una apertura para escapar. Pero Elliot predijo esto y de un fuerte golpe hundió su borcego sobre la mano izquierda de Lincoln, rompiéndole los dedos completamente.
Lincoln dejo escapar un grito de dolor insoportable y mientras se retorcía en el piso, uno de lo esos matones lo tomo del hombre y lo alzo sobre sus piernas con mucha facilidad. Lincoln todavía seguía gritando con su mano adolorida y entumecida por el golpe. Sin mediar palabra alguna el gordo que tenia el bate le hundió fuerte mente la punta del mismo sobre la barriga de Lincoln haciendo que se le escapara el poco aire que tenia y callándolo un poco.
Todos se pusieron a reír por aquel acto de violencia injustificada y sin sentido, todos menos Elliot que seguía mirando sin pestañar a Lincoln. Elliot era casi tan alto como Lincoln pero si era mas fuerte y tenia una musculatura bastante marcada, cosa que le gustaba imponer.
-¿Estas prestando atención Loud? ¡¿Lo estas ?!.- esto ultimo lo dijo gritando con toda la potencia de su voz haciendo que sus amigos se callaran de la sorpresa. Ahora lo miraban asombrados y algo extrañados por la actitud de Eliot.
Lincoln solo estaba arrodillado sosteniéndose la mano y tosiendo difícilmente el aire y la saliva que le quedaban. En ese momento levantó la vista para ver a Elliot, le dificultaba respirar y solo sentía dolor.
Elliot dejo escapar un poco de aire de la nariz y volvió a hablar.
-Desgraciado… no solo te metes con mi chica, sino también me miras con rabia ¡Todavía tienes el atrevimiento de mirarme mal!- grita esto ultimo para sacarle después el bate a uno de los matones y con toda su fuerza golpear el hombro izquierdo de Lincoln. El impacto lo devolvió de vuelta al piso al peli blanco que ahora solo hacia sonidos débiles y roncos por el dolor cada vez mas fuerte. Estaba a dos segundos de perder la conciencia.
Elliot con ambas manos sobre el bate lo tiro al piso cerca de uno de sus amigos, quienes lo levantó débilmente sin apartar la mirada de Eliot.
-Te dije que la dejaras en paz… que no le buscaras, Ella es mía desgraciado.- decía Eliot conteniendo no gritar sus palabras. –Pero ella también… también me insulto a mi, a nuestra relación ¡a lo que habíamos construido!... para meterse con un beta maricon como tu…- esto ultimo lo dijo con un odio y asco tan autentico. La cara de Eliot estaba tan roja del coraje y sus ojos parecía que le iban a saltar de los ojos al no pestañar. Aquel tipo de verdad odiaba a Lincoln. -Yo soy mas hombre que tu Loud, tu no mereces Margo, y ahora yo...- el gran joven moreno no termino de decir esto ultimo por que fue interrumpido por Lincoln
-Ella no hizo nada…- dijo débilmente Lincoln en el suelo.
Eliot pestaño dos veces por primera vez de incredulidad
-¿Qué dijiste…?- dijo sombríamente al peli blanco en el piso.
-¡ELLA NO TIENE NADA QUE VER… CONTIGO! ¡Maldito enfermo de mierda!….- Lincoln parecía que dejo escapar su ultimo aliento con este grito. Con la poca fuerza que le quedaba se re-incorporo sobre sus pies para sorpresa de los demás quienes lo miraban genuinamente asombrados. Elliot en cambio lo miraba en silencio.
-¡OYE! Quien te creer que eres pequeño…- apenas puso Elliot su mano sobre el hombro sano de Lincoln, este le devolvió un cabezazo tan fuerte que le hizo retroceder del dolor pero no llego a derribarlo.
Lincoln casi sale corriendo apenas hizo esto pero la persona que estaba a la izquierda de Eliot, el matón de voz aguda, lo tecleó estampándolo de nuevo contra la pared y arrojándolo salvajemente contra el suelo del estacionamiento. Lincoln había golpeado la cabeza muy fuerte contra el piso, haciendo que perdiera momentáneamente la conciencia por un segundo.
-¡Pedazo de hijo de puta! Te voy a matar. ¡VAMOS!- grito Elliot por ultima vez al grupo y entre los 6 comenzaron a patear y golpear a Lincoln en el suelo. Lincoln solo alcanzo a cubrirse la cabeza.
Aquella brutal golpiza duro 5 segundos en total y hubieran seguido por mas tiempo de no haber sido por que una pareja de estudiantes aparecieron dé repente en el estacionamiento para ir por su coche y vieron la escena.
-¡¿QUE DIABLOS HACEN?!- grita el muchacho al grupo que se detuvo en seco y dejaron de golpear a Lincoln. La chica que acompañaba a aquel chico grito al ver a aquel joven que reconoció al instante tendido en el piso. Ese grito fue el que puso punto y final a aquella golpiza que pudo haber terminado de la peor manera.
-¡VAMOS DE AQUÍ!- grito uno de los matones. Y los 6 en total salieron disparados de aquel lugar escapando por la parte de atrás del estacionamiento. El pobre peli blanco quedo magullado en el piso. Mucho tiempo después, Lincoln se dio cuenta que ninguno de esos tipos alcanzo a golpearlo con los bates de beisball, de haber sido el caso muy posiblemente lo hubieran matado antes de que aquella pareja hubiera intervenido
-¡BECKY! Rápido, llama a la policía…!- decía el joven yendo hacia donde estaba el peli blanco tirado en el piso.
-Sss… si si ¡SI! ¡Bret! Enseguida- decía la chica tartamudeando entre lagrimas y sacando sus celular con dificultad mirando a aquella figura inmóvil en el piso que esta mañana fue su compañero de case: Lincoln Loud.
El chico llamado Bret se acerco para mover a Lincoln y ponerlo sobre su estomago. De verdad que le habían dando una golpiza fuerte y no estaba seguro si le hicieron algún daño interno al pobre chico.
-Amigo… ¿puedes oírme? Vamos a llamar a la policía, ellos ya se fueron…. – le dijo Bret al odio a Lincoln quien tenia los ojos cerrados y respiraba con dificultad.
Lo único que pudo sentir Lincoln ese día antes de desmallarse fueron sonidos, recordaba a alguien hablándole al oído, el sonido de una sirena de la policía a la distancia y lo que el creyó que era una chica llorando no muy lejos suyo. Por alguna razón, pensaba que tal vez era su hermana Lynn quien lo había encontrado y lo había visto en ese estado.
Y en esto, perdió el conocimiento completamente.
Fin del Capitulo 5
Fin de este nuevo capitulo, ojala lo hayan disfrutado y perdonen si hubo una confusión en cuanto al orden cronológico de los eventos. Originalmente era mas confuso todavía, parecía The Last of Us 2 XD Pero si se dieron cuenta, todo esto se ubica entre el capitulo 3 y 4. Y no va a ser lo ultimo que escuchemos de Elliot, eso es seguro.
Sin nada mas por decir.
Nos vemos
MXRgrunt