Advertencia: Contenido sexual explícito. Lenguaje inapropiado.

Playlist sugerido:

Hips don´t lie - Shakira

Black night town - Akihisa Kondo (Hay un cover buenísimo en español de Bastian Cortés en Youtube)


LA CHICA LATINA

El siguiente pasó en su relación fue conocer a sus amigos. Indirectamente ambos habían visto a sus amigos cercanos esa noche en el bar, pero querían hacerlo formalmente. Con ayuda de Ino y Temari arreglaron una pequeña reunión en su departamento. Eran sus únicas amigas en Konoha, al menos importantes para ella.

-No puedo creer que al fin voy a conocer a Dios Itachi-

-Ya lo conoces- mencionó con fastidio Temari mientras colocaba algunas lámparas decorativas.

-Solo de vista- La otra rubia colocaba varios jarrones transparentes con flores. -¿Crees que Dios Itachi tenga algún amigo guapo?

-¿Dios Itachi?- Hinata se asomó desde la barra de la cocina, se encontraba preparando las botanas.

-Es el apodo que Ino le ha dado a tu novio- Su mejor amiga le robó un canapé.

-Es de la única forma en que se me ocurre llamar a un chico que hace que te vengas 6 veces en la misma noche.- río traviesamente

-¡I-I-Ino!- La chica se sonrojó como tomate.

-Merece crédito el tipo, lo admito. ¿Con Gaara alguna vez…? ¡Oh dios! Es mi hermano, olvida que pregunté- termino de comer otro canapé. Hinata retiro la charola.

-Pues para que sepas el sexo con tu hermano era increíble- Se sorprendió un poco así misma al mencionarlo de forma tan natural. Ya no le oprimía el pecho.

-Es oficial, perdí el apetito- levantó las manos en señal de derrota.

-¿En serio? ¿Tienes otro hermano, no es así Temari? Tal vez podrías presentármelo. – dijo de forma sugerente.

-Si pero es un tarado. –

-¡Ay qué lástima!.- bajó los brazos derrotada.- Desde que llegué a este País no he tenido sexo y Hina se ve tan feliz….necesito un novio.

-¿Y en verdad necesitas un hombre para ser feliz?-preguntó Temari

-Solo para más placer-le guiñó un ojo, un gesto característico de la coquetería de Ino.

-Repito la misma pregunta. ¿Acaso no tienes juguetes para eso? Yo tengo a Mr. Pinky-

-¿De verdad? Nunca me he animado a usar un consolador. ¿Es bueno?-

-¡El mejor! ¡De lejos! Incluso Hinata tiene el suyo…¿Cuál era su nombre bebé?-

-Mr. Purple- contestó con un pequeño sonrojo.

-Y te ha salvado de la soledad ¿no es cierto? - le sonrió pícaramente mientras la morena con un sonrojo aún mayor no se ha animaba a confirmar ni a negarlo.

-E-Es una gran ayuda…cuando una- junto sus dedos como cuando era una niña y tenía pena de pedir algo en la casa de Temari- pues…tiene…necesidades….-

-¡Ay Hina!- le dio una palmadita en la espalda- Cuando una está caliente, prendida, cachonda. –Se colocó una mano en la cintura- Además si fueras más creativa podrías usarlo con Itachi.-

-¿Has usado a Mr. Pinky con algún chico?- se sorprendió Ino. Tal vez no había estado con chicos tan creativos como creía.

-Por supuesto. Pueden enriquecer tu sexualidad de forma increíble, no hay nada de malo ni de que avergonzarse al respecto. -

-Lo sé Temi, pero no soy tan abierta como tú, sé que no hay nada de malo, pero si no fuera por tu influencia creo que no sabría más que lo básico-

-¿Sabías que antes se desmayaba cuando hablábamos sobre estos temas?-fingió susurrar tapando ligeramente su boca con la mano.

-¡Temari!- gritó totalmente avergonzada

-¿Y cómo se usa durante el sexo? –Ino ahora estaba intrigada.

-Ah mira, hay varias formas, una…

El timbre sonó para fortuna de Hinata. Normalmente estaría más serena al hablar de esto, sino estuviera esperando la visita de su novio para presentárselo a sus amigas. Además, en la actualidad Mr. Purple le traía a la mente las noches en las que se había dado placer pensando en Gaara, y después lloraba como magdalena, tratando de superar su ruptura. Ahora permanecía en el fondo de un cajón, arrumbado y esperaba no necesitarlo de nuevo. Si en algún punto se decidía a usar algún juguete con Itachi, no sabía si Mr. Purple estaría invitado.

Itachi llegó junto con otros dos chicos. Su primo Shisui, al que le parecía recordarlo vagamente de aquella noche, y otro Moreno delgado de nombre Shikamaru con un peinado bastante raro, y las barbas de una cabra al parecer de Ino. Llegaron con unas botellas de vino y sake.

El alcohol fue rápidamente relajando el ambiente y pronto todos hablaban animadamente. El click más evidente era entre Shikamaru y Temari, quienes en algún punto habían trasladado la conversación a la cocina, ahí platicaban animadamente "alejados" del resto.

-Hay un bar aquí cerca que toca rock y música en general bastante agradable, tal vez les gustaría conocerlo. –propuso jovial Shisui, viendo que el ambiente se animaba y el alcohol escaseaba.

Itachi volteó a ver a Hinata con cara de súplica, traía toda la semana encima. Aunque claro, si ella quería ir no iba a objetar.

-¡A mí me encantaría!- gritó emocionada Ino.

-¡Nosotros también vamos!- gritaron al unísono Temari y Shikamaru desde la cocina.

-Yo….nosotros casi no nos hemos visto en la semana, prefiero quedarnos en casa. ¿Itachi?-

-Claro, pueden ir ustedes. Tuve una semana bastante pesada- se llevó una mano a la cabeza.

-¡Oh Tachi! No sean aguafiestas. ¡Anímense vamos! -

-¡Déjalos Shisui-kun! Estoy segura de que tienen mucho de qué platicar. - Tanto Temari como Ino arrastraron a los dos hombres fuera del departamento, pese a las quejas de Shisui.

-Gracias Hina, siento que no fuéramos, pero en verdad estoy algo cansado-

-No te preocupes, no creas que tenía muchas ganas de salir, la verdad, te he extrañado mucho.- le sonrió con ternura- Prefiero quedarnos y ponernos al corriente-

De pronto la imagen de Mr. Purple le vino a la mente y un leve sonrojo pintó sus mejillas. Itachi lo interpretó por sus palabras, y le robó un casto beso en los labios.

-Gracias Hina. ¿Qué tal si recogemos y vemos una película o lo que tú quieras?

-Me encanta la idea- emocionada se puso de pie- Creo que necesitamos algo de música para motivarnos. Alexa reproduce Hip´s don´t lie de Shakira.-

Una música bastante movida comenzó a sonar.

Ladies up in here tonight. No fighting….Shakira Shakira

Itachi con una bolsa comenzó a tirar las botellas vacías y la basura. Hinata apilaba los platos sucios mientras movía rítmicamente las caderas.

I never really knew that she could dance like this. She makes a man want to speak Spanish

Itachi sonrió al escuchar esa parte de la canción. Hinata aún con los platos le pegó su espalda bailando sensualmente y cantando: -¿Cómo se llama? Bonita. Mi casa, su casa.- dio un saltó y se dirigió a la cocina.

Oh baby when you talk like that,- Hinata cantaba mientras recargada en la barra de la cocina bajaba y subía con movimientos cada vez más sensuales- you make a woman go mad. So be wise…¡sí!…and keep on…¡si! Reading the signs of my body

El pelinegro sonrió sensualmente. Nunca se cansaría de ver a Hinata bailar de esa forma, tal vez, después de limpiar debería confesarle que no tenía Netflix.


El bar al que habían ido era bastante bonito y moderno. Se escuchaban la batería y las guitarras eléctricas a todo volumen del grupo que tocaba en vivo. Eran unos chicos muy guapos y tocaban increíble. Sobre todo el vocalista, con su cabello rubio despeinado, ojos azules y su ropa negra ajustada perfectamente a su muy bien formado cuerpo. Traía una bandana en la frente amarrada por la parte de atrás de su cabeza. Así como un chaleco largo naranja bastante llamativo.

A media noche las luces se apagan en la ciudad. Baila hoy, pasemos esta Tipsy night…

Su voz era excepcional y cantaba con muchísima pasión. A pesar que la canción era algo triste y hasta un poco oscura, vibraba en su interior. El lugar estaba bastante animado e incluso había quienes coreaban las canciones. Junto a ellos había una mesa con dos chicas que no paraban de reírse. Al principio no les tomó mucha importancia, al parecer estaban burlándose de un chico muy tonto llamado Naruto.

-¿Puedes creer que me invitó al festival? Como si yo fuera a ir con un perdedor como él.

-¡Ay vamos! No está tan mal ¿y qué hacemos aquí entonces? -

La pelirrosada levantó su copa con orgullo- ¡Bebidas gratis!

Hay un lugar que ni la luz de luna alcanza. Hay un pueblo en el que hasta la soledad canta…

-Pobre chico. En verdad le gustas a pesar de lo mal que lo tratas y todo porque Sasuke-kun no te hace caso.- sorbió de su copa la chica pelirroja y de gafas grandes.

-Tampoco te hace caso a ti estúpida-le sacó la lengua la chica de cabello rosa

-Un día de estos tal vez cambie de parecer. Se ve bien Naruto ¿no crees?-

-¡Si claro! Sobre todo su gran chaleco extravagante- exclamó con sarcasmo- y esa estúpida bandana que lleva a todos lados. No lo soporto- se terminó de un trago su bebida.

-Es cierto, es bastante tarado.

Solo hay un enloquecedor y escalofriante dolor. Me vuelve frágil, como una joya que puede perderse…

Eso captó los sentidos de la rubia. ¿Naruto sería el chico que cantaba? ¿Acaso esas chicas estaban ciegas? Él lucía algo exótico y tal vez demasiado llamativo, pero, esa es la idea del vocalista de un grupo musical ¿no? Y a quién le importa, con ese físico, era indudable que practicaba algún deporte o al menos hacía ejercicio. Y su cara, ¡Es guapísimo! Par de taradas.

No hay como compararte, ni como robarte. Está bien si eres tú mismo, vamos sonríeme

Cuando la canción terminó todo el local aplaudió eufórico. Realmente eran talentosos y la canción. ¡Wow! La rubia estaba maravillada. De pronto, el chico de grandes ojos azules se acercó a la mesa de aquellas arpías. Ino fingió estar atenta a su bebida mientras de reojo veía lo que ocurría en la mesa continua.

-¡Sakura-chan! ¿Qué tal lo hice? Dime ¿Te gustó la canción? ¡Verdad que la letra esta genial dattebayo! Veo que trajiste una amiga. Gracias por venir- el chico se llevó una mano a la nuca y un bonito sonrojo adornaba sus mejillas. Parecía que las palabras no dejarían de brotar de su boca. Qué tierno. En verdad le gusta esa chica de cabello rosado.

-Karin, Naruto, Naruto, Karin.- Sakura bebió de su vaso- Bueno, nos vamos ya. Mi mamá me regañará si llego tarde. - agregó fastidiada

-¿Tan pronto? ¿No quieres tomar algo más? Mi abuelo es el dueño así que…-

-Lo sé, lo sé- movió la mano de un lado a otro- supongo que las bebidas corren por tu cuenta no ¿Naruto?-sonrió coquetamente. El rubio se sonrojó.

-¡Claro dattebayo! Ya terminé mi turno, ¿tómenos algo juntos sí? O-o s-ssi en verdad tienen que irse, al menos déjenme acompañarlas, solo le aviso a mi abuelo y listo. ¡No tardo dattebayo!- corrió hacia el fondo de local bastante apresurado.

-Vámonos antes de que regrese- se terminó de un golpe la última bebida y salieron a toda prisa. Cuando el chico volvió Ino vio con tristeza como su bonita sonrisa desaparecía. Y sus bellísimos ojos lucían más azules al llenarse de agua.

-Creo que les surgió algo y tuvieron que irse. Se veían bastante apuradas. –Le dijo. La rubia notó como el chico fingía una sonrisa y se dirigía hacia los baños. Al regresar su atención a sus acompañantes vio como Temari y Shikamaru se estaban besando. Shisui estaba en la barra platicando alegremente con un par de chicas. Se levantó tranquilamente suspirando.


Con la seguridad característica de Ino, entró al baño de hombres. Afortunadamente, solo estaba Naruto en el lavamanos limpiándose la cara. Éste volteó en su dirección al escuchar el "click" del seguro de la puerta.

El rubio abrió sus ojos y miró varias veces alrededor. -¡Ay no! ¡Volví a entrar al baño de chicas de nuevo! ¡Lo siento dattebayo!- agitó sus manos e hizo repetidas reverencias.

-No es el baño de chicas. - sonrió Ino mientras escondía sus manos atrás y se recargaba en la puerta. –Quería…platicar contigo…a solas. - El baño estaba arreglado muy elegante. Tenía bonita iluminación, azulejos claros y un gran espejo reluciente. Olía a madera y vainilla.

Inclinó un poco su cuerpo hacia el frente permitiéndole ver el asombroso escote de tu top morado. Después caminó aún con las manos atrás y ligeramente hacia el chico, quien la veía entre sorprendido y apenado. Cuando estuvo frente a él se puso de puntitas y acercó tanto como pudo sus rostros.

-Tus ojos son…bellísimos. - Su voz era suave, dulce y sensual. Naruto retrocedió un paso sonrojado.

-G-gracias…-Se llevó una mano a la nunca. Sin embargo, Ino volvió a avanzar y entraron en un juego en el que cada que la rubia avanzaba el chico retrocedía nervioso, hasta que al fin chocó con la pared.

Ino pasó una mano por su larga cabellera y después con un toque casi angelical de sus dedos limpió las lágrimas invisibles de la mejilla del rubio. Eliminó la distancia colocando ambas manos en su pecho.

-No deberías llorar por esas tontas Naruto…es muy triste que un chico tan guapo y talentoso como tú, pierda esa hermosa sonrisa. Vamos, sé tú mismo, sonríeme. –le repitió su propia letra.

-¿Escuchaste mi canción?- respondió aun nervioso pero sorprendido.

-Si- bajó ligeramente la mirada fingiendo un poco de pena. Sabía que ese juego de vergüenza les gustaba a los chicos. –Me pareció maravillosa- eso por supuesto, no era mentira. Acercando sus rostros vio como Naruto cada vez se ponía más nervioso. Al parecer no tenía mucha experiencia, eso le pareció lindo.

-¿Puedo besarte?-

-¡QUE?!- Naruto tragó saliva sintiendo como la chica acariciaba con un dedo sus labios.

-También tienes lindos labios, pero el consenso es muy importante. - Le guiñó un ojo. –Si no quieres- fingió tristeza- será una lástima, pero lo respetaré.- Con cierto nerviosismo, pero con determinación asintió. Sin despegar las manos de su pecho lo besó delicadamente. Poco a poco, lo sintió relajarse y responder a sus besos. Cuando ingresó su lengua, él titubeó un poco.

-Relájate- cuando acoplaron un ritmo, sin dejar de besarse, la rubia tomó ambas manos del chico, llevándolas a su cadera. Naruto se tensó, sus manos parecían tiesas, como de cartón, pudo sentir la piel tibia del abdomen descubierto de la sensual chica.

-Tranquilo, puedes tocarme. Quiero que lo hagas…yo te guiaré- nuevamente tomó sus labios y emprendió un viaje por su cuerpo con sus propias manos sobre los nudillos de aquél sexy muchacho. Una la detuvo sobre su trasero y la otra la llevó a su seno. Cuando abrió los ojos y se separaron él estaba completamente sonrojado pero su rostro ya mostraba signos de placer.

-¿Cuántos años tienes Naruto?- lo miró inocentemente mientras él abría lentamente sus ojos. Sus manos se encontraban aún adheridas en las partes redondas de la rubia exótica casi pegada como otra piel a él.

-Dieci..Dieciocho- titubeó. Su gran altura, así como su fornida musculatura lo hacían ver mayor. Hubiera jurado que mínimo tenía 21

-Bien-sonrió coquetamente, haciendo círculos con el dedo índice sobre su pecho. -¿Te gustaría ir algún lugar más privado? Escuché que ya habías terminado tu turno. Y yo últimamente he estado…muy sola-suspiró con tristeza exagerada.

-¡Cl-claro! ¿Qué te gustaría hacer…este…?-

-Ino, mi nombre es Ino. Pero…primero creo que debo ayudarte con esto ¿no crees?- dijo tocando su entrepierna. El rubio se puso rojo hasta las orejas y quitó sus manos de la chica.

-¡LO-LO SIENTO!- Abanicó sus brazos vigorosamente y después se cubrió con sus manos aquella zona. –Es que...Es que, la forma en que me besaste y eres tan-tan hermosa….yy-yo lo siento de verdad- exclamó totalmente apenado.

Ino sonrió tiernamente cubriéndose un poco los labios con su mano. –No es algo de lo que debas sentir pena Naruto, al contrario, eso me halaga mucho. ¿Me dejas ayudarte entonces?-

Naruto sentía como la sangre ardía en sus mejillas e Ino se preguntaba cuántos tonos de rojo podría provocar. ¿Sería inexperiencia o simple timidez? La verdad había disfrutado mucho de sus besos y dudaba que un chico tan guapo como él fuera Virgen, lo cual no le molestaría en absoluto.

Ella había perdido su virginidad a los 14 años con un chico mucho mayor, lo cual aún consensuado, con más experiencia se daba cuenta que no la habían tratado con la delicadeza que merece una persona que vive su primera vez. Sin importar en el País que se encontrara, parecía atraer a hombres mayores que les gustaba dominar. Por eso, Naruto le parecía algo singular, nuevo, muy tierno y MUY ATRACTIVO, no solo por su físico.

-Naruto, ¿Te han hecho un oral alguna vez? - El color vino tinto invadió su rostro y exhaló fuertemente. Al parecer le estaba costando respirar. Negó con la cabeza, había perdido el habla por la pena.

Ino dio pequeños besitos en sus mejillas tratando de calmarlo. –Seré cuidadosa. Y si en algún momento te sientes incómodo puedes decirlo y me detengo ¿si? Trata de relajarte. - Vio como el chico inhalaba y exhalaba de forma exagerada. Cuando la sangre de su cara disminuyo y asintió con determinación ella le sonrió y siguió su camino de besos por su cuello.

-Hueles delicioso- sus labios iban descendiendo lentamente por todo su cuerpo. –guau, que pecho tan marcado tienes Naruto…se siente- un beso-…duro-otro beso-…muy trabajado.-

-Gra-gracias, tú también eres hermosa…Ino.- ella sonrió y siguió bajando lenta y sensualmente. Cuando llegó a la hebilla de su pantalón inmediatamente lo sintió ponerse rígido.

-Voy a abrir lentamente tu pantalón ¿estás de acuerdo? - lo vio directamente a los ojos. Nuevamente el carmín adornaba sus mejillas, pero podía ver cómo era por excitación, tal vez mezclado con vergüenza, pero veía claramente la lujuria y determinación de su mirada.

Naruto escucho el sonido metálico de su cinturón moverse. Sintió el tuc de su botón y el metal descender de su cierre. – Voy a bajarlo- tragó saliva. Tenía miedo y se sentía ansioso al mismo tiempo. Estaba viviendo una de escenas cliché que solo pasan en el porno, pero a diferencia de ese material audiovisual, Ino estaba siendo tierna y paciente. Y extremadamente erótica. Lentamente sentía como la vergüenza bajaba junto con sus jeans. Después sintió resbalar por sus piernas la tela de algodón de su bóxer negro. Contuvo el aire. No sabía qué esperar después.

-Mucho gusto en conocerte guapo. –La rubia aún de pie veía con asombro su miembro. –No esperé que fueras…pelirrojo de aquí abajo-río quedito.

-¿E-es-so es malo? – tartamudeó.

-Para nada. Tranquilo Naruto, nada está mal contigo o tu enorme amigo. Solo me sorprende un poco, es todo. –se sintió más tranquilo con aquel cumplido.

Ino sonrió al verlo más relajado. Sabía que los hombres, sin importar su nacionalidad, se sentían orgullosos de su pene, algo primitivo y hasta estúpido, pero si eso ayudaba a hacerlo sentir mejor, nada le costaba mencionarlo. Aparte no era mentira. No era algo descomunal, pero si era de buen tamaño y los vellos rojos le daban cierto encanto.

-Voy a tocarlo ¿está bien? - él asintió. Cerró los ojos e instintivamente echó la cabeza para atrás. Sus manos se sentían cálidas, seguras y suaves. Nada comparado a cuando se tocaba él mismo.

-¿Te gusta?-

-Sss-si…mucho-

-Ahora voy a probarte. Si te lastimo o quieres que me detenga, no dudes en decirme ¿de acuerdo?-

Apenas y pudo asentir. Sintió su excitación exponenciarse cuando la vio simplemente arrodillarse en el piso. No podría describir con palabras sus sentimientos cuando sintió sus labios por primera vez, su lengua y su saliva. Sus rodillas flaquearon y tuvo que sostenerse con las manos cuando empezó con un ritmo de entrada y salida.

Ya no podía pensar en nada más que en el sonido que le recordaba cuando brincaba en lo charcos bajo la lluvia. La humedad que se extendía por toda su virilidad y como comenzaba a escurrir la saliva por su entrepierna. Ya no podía sentir más placer, o eso pensó erróneamente hasta suavemente la rubia comenzó a masajear sus testículos.

-Estoy por….ya casi yo…- Lejos de detenerse sintió su vaivén acelerarse. Fue maravilloso sentir como se vaciaba en su boca. Cuando finalmente fue capaz de bajar del cielo y abrir los ojos la vio aún de rodillas subiendo su ropa interior y su pantalón. Con nerviosismo le ofreció una mano para ayudarla a ponerse de pie.

-Gracias- se limpió los labios con un dos dedos- ¿Te ha gustado?- con cuidado le cerraba el pantalón y acomodaba su cinturón.

-Sii…muchas gracias Ino. ¡Se sintió increíble dattebayo!- sus mejillas rosadas y su hermosa sonrisa adornaron su rostro.

-Esa es la expresión que quiero ver en tu cara. No dejes que nadie opaque esa luminosidad que desprendes. –le acarició suavemente antes de besarlo suavemente. Esta vez la abrazó y la envolvió con más confianza.

-¿Aún quieres ir conmigo a otro lado?-Ino lo miró con sorpresa. –No tengo mucha experiencia- desvió apenado la mirada- pero…si tú me dices como…quiero hacerte sentir lo que tú…me hiciste sentir a mí-

-¿Estás seguro?


No era la primera vez que lo notaba, pero cada vez era más obvio. Por alguna razón, desconocida actualmente para él, llamarla Hime la excitaba. Y a su vez lo excitaba que llamarla Hime la excitara. Era un ciclo vicioso. Sinceramente no era algo importante, es sabido que las mujeres son mucho más auditivas que los hombres, aun así, cada vez era mayor su curiosidad sobre el tema.

Hinata estaba recuperando el aliento de su más reciente orgasmo mientras sentía las últimas embestidas de Itachi sobre ella. Su olor invadió sus fosas nasales, como siempre que terminaba. Acarició de forma tierna su nuca mientras todo su peso caía en sus pechos y la envolvía fuertemente con sus brazos.

La había llamado Hime en cuanto sintió que estaba cerca del éxtasis. El resultado fue el deseado, inmediatamente la sintió colgarse más fuerte a él y emitir los sonidos más hermosos que jamás escuchado.

-¿Hina?- le preguntó sin verla usando todavía sus pechos como almohadas.

-¿Si?- ella seguía acariciando su cabeza con ternura.

-He notado que llamarte Hime…cuando estamos juntos…te gusta bastante. - sintió como respingaba. –No es nada malo, solo me ha dado curiosidad. ¿Tiene algún significado especial para ti? ¿O es solo que te agrada? – giró un poco la cabeza para verla. No sabía si estaba roja por el esfuerzo de lo que habían hecho o apenada. Tal vez un poco de las dos.

-Me agrada…pero es algo vergonzosa la razón- Itachi se levantó un poco apoyando cada brazo de un lado sobre ella. Su cabello caía sensualmente por sus hombros. Ella colocó ambas manos sobre sí misma juntas, como haciendo un pequeño escudo. Sus profundos ojos negros la veían con intensa curiosidad.

-Te lo diré si prometes no reírte- él parpadeó varias veces y luego asintió.

-Entiendo perfectamente lo que es Hime, o sea no tengo confusión con él término en lo absoluto. Pero cuando estamos…haciéndolo…yo…no puedo evitar- se llevó ambas manos a la cara avergonzada. Respiró profundo tratando de calmarse. –pienso que estás pidiéndome que yo….- parecía que iba empezar a hiperventilar en cualquier momento.

-Está bien Hinata, si no te sientes cómoda al decírmelo no es necesario que lo hagas, lo importante que es algo que te gusta y no..

Sin despegar las manos de sus mejillas las abrió ligeramente para contestar-¡SIENTO QUE ME PIDES QUE GIMA! HIME Y GIME SUENAN IGUAL! PERO SIGNIFICAN COSAS TOTALMENTE DISTINTAS…pero mientras tu y yo…solo puedo pensar en que quieras que gima más fuerte. Mi cerebro lo procesa como el verbo gemir y no como princesa.- volvió a cubrir su rostro.

Iba a morir de la vergüenza. Si Temari se enteraba reiría hasta vomitar. Sintió algo vibrar.

-¡Prometiste que no ibas a reírte!- reprochó totalmente roja. Hacía bastante tiempo que no encontraba algo tan gracioso y tierno.

-Lo siento, lo siento. – comenzó a llenar de besos tiernos todo su rostro, su cuello. –Es tierno. Gracias por decirme…HIME.

-¡ITACHI!- reprochó dando pequeños golpes a su pecho.

-¿Será nuestro secreto de acuerdo?- beso su frente.

Escuchó el timbre del grupo de Whatsapp que tenía con las chicas. Lo ignoró hasta que cada vez era más insistente por la cantidad de mensajes. Sin salir del encierro de su amante, estiró el brazo para alcanzar su teléfono. Parpadeó un poco acostumbrándose al brillo de la pantalla.

Grupo de whatsapp:
Las chicas superpoderosas. (De foto de aparecían las tres sonrientes afuera de la facultada de idiomas.)

Bellota: ¡Al menos manda tu ubicación estúpida! Para estarte monitoreando. Emoji de carita enojada.

Bombón: Tranquila, es un buen chico, en cuanto lleguemos al motel la comparto. Emoji de corazón gigante.

Burbuja: ¿Motel? ¿No estaban juntas? ¿De qué hablan? :O

Bellota: La tarada de tu amiga se acaba de ir con un fulano que conoció en el bar sin avisarme.

Burbuja: ¡¿Con QUIÉN?!

Bellota: No tengo idea de con quien carajos se fue. ¡Eres una BÁRBARA INO! Te pueden matar y yo ni enterada que te largaste.

Burbuja: Ino traélo a la casa. No vayan a un motel. :(

Bombón: Tranquilas, no pasa nada. Es un buen chico, además no quiero interrumpir tu noche candente. Y si a Temari se le ocurre llevar a Shikamaru, no quiero participar en el coro de gemidos jajaja. ;)

Bellota: No voy a dormir con él…al menos no hoy baka.

Burbuja: Sticker de gatito sonrojado.

Bombón:

Ubicación en tiempo real Motel ICHA ICHA PARADISE. Bueno me despido chicas, creo que las veré hasta mañana. ¡Deséenme muchos orgasmos!

Bellota: ¡Cállate zorra! Vas a ver mañana que te tenga enfrente. Me estaba muriendo de la preocupación.

Burbuja: ¡Por favor ten mucho cuidado Ino! No dudes en llamarnos a cualquier hora. Estaré pendiente. ¡Disfruta! Emoji carita sonrojada.

Bombón: ¡Gracias! ¡Las amo! Sticker de Ino mandando un beso.

-¿Está todo bien?-

-Eso creo….Ino se fue con un chico que conoció en el bar….me preocupa un poco.

-¿Y Shisui?- se paró con cuidado de no lastimarla y se acercó al buró dónde estaba su celular. Hinata suspiró al verlo frunciendo el ceño mientras se mensajeaba con su primo, con el cabello alborotado totalmente desnudo. Dios, es tan guapo.

-¿Te dijo algo?

-Que conoció unas chicas sexys- rodó los ojos- y qué no tiene idea con quien se fue Ino, pero que es bastante madura y grande para cuidarse sola- bufó molesto

Hinata se sentó con una mano en su pecho. –Tiene razón. Ino, a pesar de ser la más chica de las tres, es la más valiente y sabe cuidarse perfectamente. Me recuerda a Hanabi, y a Temari también, creo que por eso nos preocupamos tanto. –sonrió con melancolía

-¿Tu hermana menor?

La chica asintió. –Es igual de rebelde. Pero más responsable, al menos nos ha enviado su ubicación.

-Bien. Si surge algo no dudes en decirme e iré a buscarla. - Como respuesta la morena se hincó todavía sobre la cama cerca de él y lo besó apasionadamente. Al parecer la lucha de lenguas y caricias estaba lejos de terminar.


Notas:

Espero no haya confusión en el chat respecto a quien es cada quien. Por si las dudas: Bellota: Temari. Bombón: Ino. Burbuja: Hinata.

¡Un abrazo!