Capítulo 3

"Miedo"

Aquel día por la mañana antes de salir al trabajo, Brienne le había dicho a Jaime que se sentía algo intranquila, a lo que Jaime simplemente le dijo que todo estaba bien y le sugirió tomarse un té, llamó a los niños para llevarlos a la escuela, hoy era su turno y luego iría al trabajo.

-Creo que son fascinantes los diseños para el marketing que ha hecho Loras- decía Tyrion mirando las impresiones en la oficina de Jaime

-Es bastante sorprendente que pudo haber hecho esto, después de su pérdida- comentó Jaime

-Aún no puedo creer que haya muerto Renly- decía bebiendo un poco de whisky

-Y yo no puedo creer que siendo las once de la mañana te encuentres bebiendo- le reclamó a su hermano menor

-¿Qué es la vida sin un poco de riesgo? - preguntó sonriendo

-¿Qué dice Shae al respecto?- preguntó

-Que es injusto que nuestro padre no la deje entrar a la compañía y pueda tomar una junto conmigo- rió desvergonzadamente

-No tienen remedio- dijo Jaime dejándose caer en su silla

-No lo tenemos, mejor dime como se encuentran mis queridos sobrinos, no los he visto desde que regrese de Braavos - decía con una sonrisa

-Te extrañan con la vida, Joanna habla tan igual a ti, que a veces pensamos que definitivamente eres una mala influencia

-No pretendo tener hijos, así que es un orgullo que pueda dejar mi legado a través de ella- dijo orgulloso

-Es un orgullo que Brienne sea su madre y la pueda corregir antes de que sea tu clon, aunque debo admitir que agradezco tenga tu inteligencia y no la mía - dijo riendo

-No te menosprecies hermano- le dijo acomodándose en la silla- lo has hecho bien, aun siendo el Lannister más estúpido

-Cierra la boca- dijo lanzandole un papel a la cara

-Lo digo enserio, tus hijos son buenos niños, no como la basura que se encargó padre de que fuéramos nosotros

-Si bueno, hago mi mayor esfuerzo- dijo mirando las fotos de sus hijos en su escritorio

-¿Están bien Tommen y Myrcella?

-Desearía poder verlos más pero es lo que hay, ellos están bien - afirmó -Tengo una junta con los de recursos humanos hermano, espero puedas venir a cenar a la casa hoy- le decía dirigiéndose a la puerta

-Ahí estaré

Cuando salió de su junta, tenía varias llamadas perdidas de un número desconocido, algunos mensajes de voz y finalmente un mensaje de Brienne y uno de Tyrion.

Tyrion

-¡NO PUEDE SER QUE NI TU NI BRIENNE CONTESTEN! Cuando leas esto dirígete de inmediato al hospital, ya lo estoy atendiendo yo.-

Brienne

-Estaba en una junta y supongo tú también, Joanna ha tenido un accidente, no podía contestar, voy camino de regreso a Lannisport, te veo en el hospital.-

Cuando leyó la palabra accidente, todo en él se bloqueó y corrió directo a la salida cuanto antes. Condujo lo más rápido y prudente posible hasta el hospital donde lo estaba esperando Tyrion.

-¿Qué ha pasado? - preguntó preocupado observando a su hermano en urgencias

-Nada de lo que debas alarmarte tanto- lo tranquilizó y entregó la documentación -Necesitas llenar esto

-¿Dónde está Joanna?- preguntó prácticamente ignorando a su hermano y los papeles

-Está bien- le dijo- Se fracturó el brazo y necesitará unas puntadas en su pierna y cabeza- dijo extendiendo los papeles- los médicos dicen que está bien, nada de qué preocuparse, creo que puedes estar con ella, en cuanto llenes los papeles - le insistió

Jaime asintió un poco más tranquilo y llenó aquellos papeles, que para él eran una pérdida de tiempo, al final ya tenían toda la información por el seguro de vida. Cuando terminó de inmediato corrió a la habitación donde le dijeron que estaría la niña.

-¡Papi!- gritó al verlo y las lágrimas amenazaron salir de sus ojos, Jaime al verla sabía que no había soltado ni una lágrima, era orgullosa y le gustaba hacerse la fuerte, sobre todo delante de mamá, pero con papá solía quebrarse más rápido- Yo no quería caerme - dijo muy bajito

-Lo sé cariño- dijo sonriendo y acercándose a ella, la observó detalladamente, no le habían puesto ningún punto aún, en su lugar tenía un parche donde acababa su frente, uno en la espinilla derecha y su brazo derecho se encontraba descansando sobre su cuerpecito - Todo va a estar bien

-Me duele- dijo mirándolo con las lágrimas ya en sus mejillas- Cleos Baelish, dijo que las niñas somos débiles- informaba mientras sorbía su nariz- y que no podíamos subir árboles ni pelear, y le quise demostrar que sí podemos, pero la rama

-Joanna, Cleos es dos años mayor que tú - le recrimino su padre, Joanna tenía 8 años y si bien Jaime y Brienne estaban acostumbrados a curar las heridas de su hija más aventurera, fracturarse y necesitar sutura ya había sobrepasado la línea

-Pero nos molesta - dijo ella- a mi y a mis amigas, y yo necesitaba defenderlas y demostrarle a Cleos que no tiene razón

-Mártir como tu madre- bufó Jaime, observando que entraba un enfermera - Cariño en casa hablaremos de esto, ahora lo que importa es que curen tus heridas y te encuentres bien- le dijo dándole un beso en la frente.

Al término de las suturas y enyesar el brazo de Joanna, el médico le informó a Jaime, que pasaría el resto del día y la noche en el hospital para observación, ya que se había golpeado la cabeza y querían monitorear que todo estuviera en orden.

Jaime suspiró desde el sillón donde estaba sentado observando a su cachorra dormir, había hablado con Brienne y acordaron que ella iría por los niños a la escuela y los llevaría a casa de Podrick, iria por una maleta de ropa para ellos y se dirigiría al hospital.

-Hola- entró a la habitación Brienne saludando a Jaime

-Hola cariño- le sonrió Jaime al verla entrar

-¿Cómo está?- preguntó acercándose a la niña quien dormía y mirando sus heridas

-Bien- dijo Jaime- es tan terca como tú, que no entiende el porque no podrá entrenar por un tiempo, siendo bastante capaz de manejar el caballo con una mano- dijo alzando una ceja

-Que le puedo hacer, es mi hija- rió ante el comentario de su terquedad

Cuando despertó Joanna al día siguiente su madre se encontraba ahora sentada en el sillón, la había visto por la noche, cuando papá fue a dormir a la casa con sus hermanos.

-Buenos días - saludó papá entrando a la habitación- ¡Es hora de irnos! - dijo Jaime - Odio los hospitales y ya fue suficiente

-Pero antes de irnos, tenemos que dejar unas cosas en claro Jo- dijo Brienne

-Mamá tiene razón- Jaime se sentó junto a ella

-Ya se que no debo escalar árboles sin supervisión, ni pelearme con personas mayores, tampoco debo golpear a alguien, ni brincar algo que tenga más altura que yo- decía enumerando lo que sus padres le habían dicho

-Joanna, tu madre y yo no podemos concebir la idea de que te pueda pasar algo más serio- decía Jaime- nunca te hemos limitado a nada, pero debes aprender a ser responsable cariño, no está bien que termines en el hospital por demostrarle algo a un niño, no necesitas demostrarle nada a nadie

-Lo sé- dijo en voz baja

-Es bueno que lo sepas- contestó Jaime

Brienne le dio la mano para ayudarla a bajar de la camilla y cambiarla de ropa, cuando estuvo lista, pidió que Jaime la cargara, la herida en su pierna le lastimaba cada vez que ella pisaba. Mientras salían, Jaime observó a Brienne dejar todo listo en la recepción y no pudo evitar no sonreír, Joanna era tan igual a su madre, feroz, pero a la vez lo Lannister se le escapaba por los poros. De sus hijos con Brienne, Joanna era la única con ojos verdes y el cabello tan dorado como el de él, pero sus mejillas y nariz estaban decoradas con finas pecas, que Jaime adoraba, pero lejos de parecerse a él, ella era sumamente independiente como su madre, tenía un carácter firme y aventurero, dura y orgullosa, terca como una mula, tenía un vocabulario extenso gracias al tío Tyrion y adoraba usar vestidos, era todo un personaje su pequeña niña.

-Papá, tú has dicho que mamá te dio una lección más de una vez y que estuvo cerca de romperte la nariz- decía desde el asiento trasero del auto haciendo que Brienne se sonrojara- ¿Porque yo no puedo hacer lo mismo con alguien que me moleste?

-Jo- dijo Brienne avergonzada, buscando cómo explicar aquello- A veces hay que poner límites con la gente, en su momento lo necesite poner con tu papá, pero yo tenía poco más que tres veces tu edad, ya era una adulta, tu eres una niña aun cielo y no estoy diciendo que sea lo correcto, pero tampoco debes permitir que la gente te moleste

-¿Entonces debo defenderme o no? - preguntó confundida

-Lo debes hacer Joanna, siempre defiende lo que pienses y sea correcto o no dañe a nadie- le dijo Jaime- pero si eso implica ponerse en riesgo para demostrar algo, no debes hacerlo, no vale la pena hacerse daño solo por impresionar

-Entiendo- dijo ella pasando su mano por la sutura de su pierna - Cuando lleguemos a la casa Gally y Alys ¿pueden escribir en mi yeso?- preguntó emocionada

-Podrán - aseguró Brienne

-¿Y Tommen y Myrcella también? - volvió a preguntar

-También podrán- ahora dijo Jaime

Cuando llegaron a su casa, Joanna se desánimo al no ver a sus hermanos, se encontraban en la escuela, quería contarles cómo habían puesto los puntos en su pierna y que tan valiente había sido, Brienne se sentó junto a la niña en el sofá para ver una película. Jaime en la cocina se sirvió una taza de café y suspiró, sabía que aquel incidente era simplemente una travesura de niños y agradeció que no llegara a más, pero no pudo evitar tener un escalofrío cuando leyó un dia anterior en su teléfono "Joanna ha tenido un accidente", pensó lo peor en ese momento y lo que sintió no se lo desea a nadie, nunca podría superar si algo le pasara a alguno de sus hijos.

-No quiero nunca volver a experimentar esa sensación- le dijo a su esposa que entraba por un vaso de agua a la cocina- Realmente me asuste ayer - le explicó a Brienne que parecía no entender- Me aterra pensar que algo les puede pasar- Brienne entendió a qué se refería y lo abrazó, ella se sentía de la misma manera, pero estaban seguros que ninguno de los dos permitiría que les sucediera algo malo a alguno de sus hijos.

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¡Hola a todos nuevamente!

Aquí les dejo otro capítulo de la historia, me gustaría leer algún comentario de ustedes, sobre que piensan de la historia, en verdad la disfruto. Me está gustando bastante escribirla y espero que a ustedes les guste, tal vez no se la mejor definitivamente, pero es algo fresquito.

Muchas gracias si pasaste por aquí y tomaste unos minutos para leer

Saludos a todos y síganse cuidando!