Hora 4:40 - El capitán Stevens

.

.

En aquel preciso instante, se materializó frente a sus ojos la figura tambaleante de Theodore Stevens.

.

Caminaba con paso incierto, dirigiéndose al puente de mando. No tenía sentido que fuera porque ya las anclas habían sido retiradas.

Parecía que no los había visto mientras caminaba absorto en sus trágicos propósitos.

Adrian se le acercó.

-``Capitán, pero ¿A dónde va? Esa parte está ya toda inundada. ¡Dentro de poco también la cabina de control estará llena de agua!´´.

El hombre lo miró delirantemente.

-``¡Déjeme solo, oficial Foster! ¡Estoy destrozado por los sentimientos de culpa!´´.

-``¿Pero qué es lo que dice? Usted debe venir con nosotros. Es verdad, ha cometido un error, pero gracias a su maniobra también ha evitado que el impacto fuera devastador. ¡Ha permitido que nos pudiéramos acercar más a la costa para acelerar los tiempos de rescate y se ha esforzado hasta ahora para ayudar a los pasajeros y salvar tantas vidas humanas!´´.

-``¡La verdad es que soy un débil, Adrian! Jamás me perdonaré mi cobardía. Tengo un peso dentro que me está aplastando el corazón. ¡Dejadme solo, por favor! No merezco vuestra compasión ni vuestra preocupación ¡Soy el responsable de este desastre!´´.

Adrian lo tomó de las muñecas.

-``¡No renuncie voluntariamente a vivir, capitán! ¡El Mauretania todavía lo necesita!´´.

-``¡No puedo, Adrian, aquel iceberg también ha desgarrado mi alma esta noche! Quiero hundirme con mi barco. ¡será mi manera de ofrecerle mis disculpas!´´.

Entonces el joven le ofreció su brazo.

-``¡Sé que usted es buena persona… no quiero que se inmole sin sentido! ¡Iré con usted hasta el puente de mando y me quedaré hasta que no decida usted también salvarse!´´.

Después, dirigiéndose a Terence, lo animó para que se marcharan.

-``¡Chicos os lo ruego, marchaos! ¡En verdad ahora no hay tiempo que perder! Tenéis que poneros a salvo lo antes posible. ¡Dentro de poco os alcanzaremos… los dos!´´.

Terence le dedicó una mirada que decía más que mil palabras.

-``Adrian, yo...´´.

-``¡He dicho que os marchéis Terence! ¡Tú piensa en poner a salvo a Candy ahora!´´.

La sonrisa que intercambiaron pareció una despedida silenciosa.

.

Terence tomó a Candy de la mano y empezó a subir las escaleras hasta alcanzar el corredor de clasificación. Sentían sus piernas tan pesadas.

.

La cubierta B estaba solo a un tramo corto de camino.

A veces, sin embargo, en la vida los principales obstáculos se presentan justamente cuando pensamos ver el final de los mismos…

.

.

¡Gracias de todo corazón a quienes me están leyendo y a quienes quieren dejarme un muy apreciado comentario!