-Eramos muy jóvenes, supongo que por eso él aceptó
Ryoga guarda silencio esperando una respuesta de mi parte, pero ahora mismo no tengo idea de que puedo decir.
-Pero las cosas solo empeoraron con el tiempo. La madre de Yuri desapareció y Yuri, ella estaba pasando por un momento difícil, ya sabes.
Asiento con la cabeza, mientras lo escucho atentamente. Cada detalle es más abrumador que el anterior.
Ranma está, él está... casado. Santo dios ¿¡por qué siempre me gusta el tipo más complicado!?. No solo eso, su esposa, ella está en coma desde hace varios años.
-Ella se obsesionó con Ranma al punto en que lo llamaba todo el día, le pedía que fuera a verla sin importar que hora era y él no podía concentrarse ni en la universidad ni en el trabajo. En su momento cuando me contó lo de su boda yo le pedí, casi le rogué a Ranma que no lo hiciera. Pero él decía que no podía abandonar a la chica como su madre había hecho. Y además él se sentía responsable por la promesa de matrimonio que habían hecho sus padres cuando eran niños.
-Y qué pasó después, cómo es que ella...?
-Una tarde tuvimos que ir a una reunión en China. No lo teníamos agendado, solo pasó algo y subimos al avión, entonces Ranma apagó su celular.
Estuvimos tan ocupados que él olvidó encenderlo hasta casi las 10 de la noche y para cuando lo hizo tenía, no sé, cientos de mensajes y llamadas perdidas de Yuri. Uno de esos era un vídeo mensaje donde ella lo amenazaba con suicidarse si no iba de inmediato a verla.
-Santo cielo!
-Pero Ranma no vio el vídeo sino hasta un par de horas después de que Yuri lo envío.
Mis ojos se abren al máximo de su capacidad, pero Ryoga continúa contándome todo mientras toma otro de los chocolates de la caja.
-Ranma llamó a la policía de Japón y afortunadamente la encontraron con vida pero se había tomado no sé cuántas pastillas. No sé qué más pasó en el hospital pero la chica quedó en coma desde entonces.
Él dice todo tan distraído mientras intenta escoger su siguiente chocolate y yo solo quiero gritarle: Ryoga ya deja eso en paz y termina de contarme qué pasó de una buena vez!. Por supuesto no lo hago y tengo que esperar a que él reanude la historia.
-La madre de la chica regresó y culpó a Ranma, que la mantiene desde entonces. La señora, ya te imaginas, lo chantajea con el estado de su hija cada vez que él intenta negarse a sus caprichos.
-Que horrible mujer. Todo eso debió ser muy díficil para Ranma-añado.-Ellos, es decir-hago una pausa intentando regular mi pregunta-Ranma tuvo hijos con su esposa antes de todo eso?
-No. El matrimonio fue solo de palabra, de esa forma Yuri no tenía que quedarse en el orfanato hasta cumplir los 18 años. Firmaron los papeles y luego Ranma la dejó en un apartamento pequeño que consiguió y él siguió viviendo en el campus hasta terminar su carrera, luego se mudó conmigo y por último compró un departamento en el mismo edificio en el que viviamos.
-Entonces ellos dos nunca...
-No. Y era uno de sus más grandes conflictos porque ella si estaba enamorada de Ranma, pero él no.
-Cuanto tiempo han estado casados?. Es decir, no están divorciados, no es así?
-No lo están, todavía. Déjame ver,-Ryoga hace un gesto como si le costara recordar y luego devuelve su atención hacia mí- la boda fue hace unos ocho años, más o menos, y Yuri ha estado en coma los últimos cinco años.
Joder.
-Podriamos demostrar que nunca consumaron el matrimonio, pero eso sería admitir que Ranma cometió fraude o esperar unos meses más hasta que yo pueda interponer una demanda de divorcio por factores determinantes.
-Unos meses?
-siete meses, para ser exactos.
-Entonces, que pasará con la chica si Ranma se divorcia de ella?
-Pues, su tutela regresaría con su madre y Ranma solo estaría obligado a pagar las facturas hospitalarias, que son mucho menos de lo que gasta con su suegra ahora mismo.
-Ya veo.
-Akane-La voz de Ryoga suena más profunda que de costumbre-Es por eso que estoy realmente aquí contándote una historia que no es mía.
-Disculpa, no entiendo lo que quieres decir.
-Tú, eres la respuesta a todo.
-Lo siento, pero no entiendo que tengo yo que ver en lo que sea que pretendas decir, Ryoga.
-Ranma es más que solo un buen amigo, mucho más, pero él no escucha lo que le digo por que simplemente asume que nunca hablo en serio.
-Y?
-Convéncelo de firmar los papeles de divorcio ahora. No hay razón para seguir atado a esa chica.
-Qué te hace pensar que puedo hacer eso? Yo soy solamente su asistente.
Ryoga mira hacia la puerta y después de unos segundos de silencio finalmente responde
-Le interesas, más de lo que cualquier otra mujer le ha interesado en mucho tiempo. Es solo que es un tonto la mayoría de las veces.
Me sentiría bien de oír eso de no ser por que ahora sé demasiadas cosas que antes ignoraba.
-No lo supiste por mí, de acuerdo?-añade está vez mirándome a los ojos.
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-Akane lamento no haberte visitado en el hospital, cuando me enteré ya te habían dado el alta-Ukyo me abraza tan pronto como salgo del elevador.
-Si, y tú apartamento es muy pequeño así que no quisimos incomodarte, Akane-añade Shampoo.
-Claro, no se preocupen, ya estoy bien.
-Tu jefe está en la sala de reuniones y pidió que no lo molestaran-me susurra Ukyo-Así que tú vienes con nosotras. Tenemos muchas preguntas que hacerte, Akane.
-Sobre qué?
-Pues sobre cómo terminaste en el hospital o la identidad de la mujer que golpeó a Kodachi, por ejemplo-me responde Ukyo con las manos en la cintura.
-Yo...
-Akane, tienes que contarnos todo. Somos amigas, no es así?-Estas vez es Shampoo, quien se aferra a mi brazo derecho.
Si, claro, sobre todo a ti te diré algo, Shampoo.
-Lo siento chicas, tendrá que ser después. Tengo una pila de trabajo acumulado. Las veré en la cafetería más tarde-les respondo y me alejo en dirección a la oficina.
-Cielos, estoy segura de que Akane sabe quién es-le escuchó decir a Shampoo.
-Solo volvamos a trabajar-le contesta Ukyo.
Atravieso el pasillo hasta llegar a la puerta de cristal de la oficina que compartimos Ranma y yo, al final del corredor. Sé que él no está aquí y aún así dudo antes de abrir la puerta.
Después de inspirar profundamente dos veces, finalmente entro. La oficina está en completo orden, excepto por las carpetas sobre el escritorio de Ranma. Me acerco para arreglarlas y compruebo que lo dicho por Ryoga es cierto. Leo algunas páginas, entre ellas el acta de matrimonio de Ranma.
Demonios.
Una sensación desagradable se instala en mi pecho. Me gusta mucho Ranma a pesar de su mal genio, pero aún así no creo que pueda hacer esto...
Regla única del manual de citas de Akane Tendo
1:No salir con tipos casados.
La razón? Son demasiados problemas y de esos ya tengo suficientes yo sola.
-Akane?-Mi jefe entra sin hacer ruido y me sorprende leyendo su acta matrimonial.
Retrocedo por instinto al escuchar su voz a unos pasos de mí.
-Yo, solo estaba acomodando su escritorio.
Ranma se acerca y me quita de las manos los papeles, devolviéndolos a la carpeta sobre el escritorio.
-Los leíste?-dice sin mirarme
-Yo, es que yo no. Solo estaba.
-No importa, toma tus cosas, te esperaré en el estacionamiento.
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JGS, Alicia e invitados que comentaron, mil graciassssss. Espero les siga gustando mucho. Un abrazo virtual.
