-Mousse, por allá!-Shampoo apunta hacia una puerta metálica, una suerte de enrejado que protege la escalera. La reviento de una patada.
Ella se abraza a mi cuando la puerta se abre revelando un conjunto de escaleras. No tenemos tiempo, bajamos tan rápido como podemos. El escándalo debe haber alertado a cualquiera que esté aquí.
Después de algunos tramos, llegamos a otra puerta y está vez la empujó cuidadosamente, intentando no revelar nuestra ubicación.
-Te amo.- Me susurra la mujer por la que soy capaz de dar hasta lo que no tengo. Sus manos se sostienen a mi espalda cuando la puerta cruje al abrirse.
Está sumamente oscuro, y realmente no tengo idea de donde estamos. Distingo dos camiones a cierta distancia dentro de este viejo depósito y cientos de viejas cajas apiladas, más allá hay otra puerta.
Sin perder tiempo, corremos, sacudo el picaporte que cruje y chilla.
-Cómo! se van tan pronto? Shampoo, querida, hay tantas cosas pendientes- Su prometido, al que apenas reconozco, nos observa desde el tercer piso con un arma en la mano. Shampoo se aferra un poco más a mí.
Estamos en el lado opuesto al que entré y corremos ciegamente por las calles vacias y oscuras, intentando no salir heridos por los tiros que impactan lejos de nosotros.
Hemos logrado cierta distancia, pero no conozco está zona, soy un recién llegado que se guía por las señalizaciones.
Justo entonces veo algo conocido; estamos en la zona industrial de la ciudad, el río está tan cerca que puedo escucharlo a pesar de los edificios viejos que nos rodean.
Ese psicópata aún nos esta siguiendo, así que debemos decidir qué camino tomar. Miro por encima de mi hombro, para asegurame de que aún tenemos algo de ventaja. El vendaje improvisado que hizo Akane en mi herida esta empapado en sangre y si sigo corriendo es solo por la técnica que me he aplicado para mitigar el dolor.
-No hay nada abierto aquí, excepto el hotel M en la carretera, pero aún está lejos. -me recuerda Shampoo
-Conoces esta zona?
-Apenas. El río también está cerca, podríamos intentar llegar hasta ahí.
-Te daré algo de tiempo, trata de llegar al hotel y pedir ayuda.
-Qué, estás loco?. No me iré sin ti, Mousse
-Tiene un arma, no puedo dejar que te lastime-respondo mientras intento alejarme
Ella me detiene, lleva su boca a la mía, y me besa con tanta pasión que desearía no estar aquí y poder entregarme por completo a este momento. Tomo su rostro entre mis manos para demostrarle cuanto la amo. Entonces recordamos que estamos huyendo de su ex.
-Voy a vivir o morir contigo, así que no intentes alejarte-Shampoo me abraza a pesar de que no tenemos tiempo.
-Te amo. Desde la primera vez que te vi y hasta el último de mis días.-le respondo y beso su frente.
Seguimos corriendo, estamos cada vez más cerca al hotel y el tiempo se detiene cuando escuchamos el rugido de un motor detrás de nosotros. Ambos nos volvemos al mismo tiempo, un auto se acerca a toda velocidad.
-¡Demonios, ese psicópata ! - grita Mousse mientras seguimos huyendo de las balas que silban alrededor.
Ambos sabemos que no podemos huir. A mi derecha, veo un callejón estrecho entre dos edificios.
Entramos justo a tiempo para evitar ser arrollados. El auto se detiene con un frenazo.
El callejón conduce a una de las calles principales y sé que podemos llegar al hotel más rápido de esta manera. Estoy demasiado cansada, pero no puedo detenerme. Hemos llegado muy lejos. No voy darme por vencida.
Me detengo de golpe, justo cuando el callejón termina, comprobando antes de salir. Mousse se adelanta, y poco a poco caminamos a la calle llena de tiendas y cafés, cerrados. Estoy aterrada porque no sé lo que pasará. Él toma mi mano con más fuerza a medida que trotamos por la acera. Entonces lo escucho, el auto se acerca nuevamente.
-No te detengas- Mousse sigue tirando de mí, que estoy exhausta y también preocupada por la herida en su costado. A la distancia puedo distinguir el hotel. Estamos a unas tres calles.
El motor ruge cuando él pisa el acelerador. Nos va a atropellar y está vez no tenemos lugar para correr.
Viene disparado hacia nosotros. Cierro los ojos, pero sigo corriendo... Me preparo para el impacto pero el auto termina dando una vuelta por delante de nosotros. Paramos en seco y la puerta del conductor se abre.
-Shampoo, cariño, ven aquí-dice mientras apunta su arma hacía nosotros.
-Eres un cobarde, deja el arma y enfrentame como hombre!-grita a mi lado Mousse
-Sabes, estoy harto de ti, campesino. Yo siempre te he querido Shampoo, pero no me amas. La amas a él, aunque no es nadie, aunqueno tiene en que caerse muerto. ¿Por qué no te quieres casar conmigo? ¿Qué hay de malo en mí?- Él aprieta el gatillo. No puedo dejar que lastime al único hombre en el mundo al que amo, así que cubro con mi cuerpo el de Mousse. Escucho disparos por todas partes y el dolor empieza a quemarme.
-Shampoo- La sangre brota de mi hombro derecho.-Por que hiciste algo tan estúpido?!-me grita entre molesto y preocupado por lo que hice.
Recuerdo que hubo disparos y miro al rededor una turba de policías. Akane y Ranma han vuelto con ayuda. En medio del caos veo a mi ex tirado en el suelo en un charco de sangre.
