Espero que les guste el capítulo 2.
Disfruten (:
Punto de vista de Blu
No hay manera real para describir la sensación que me siento ahora como Rafael y me encontré con la espalda camino al garaje de Luiz O tal vez fue una combinación de muchos sentimientos que siento. Tengo miedo de que ya sea demasiado tarde para evitar que Pepillo llegue a Perla. Estoy preocupado por Perla, sí está bien o agonizando en estos momentos. Pero sobre todo, estoy nerviosa. Si de alguna manera logró llegar a Perla antes de que lo haga Pepillo, ¿qué voy a decir? Y sobre todo, ¿qué pensará de mí? ¿Me odia? Supongo que lo descubriré pronto. Ahora mismo, es hora de actuar.
"Espera, Blu "¿Por qué estamos corriendo? Ella no puede ir muy lejos en 15 minutos." Rafael jadeó de la carrera.
Dispara, olvidé que hice correr a Rafael cuando él puede volar. También olvidé que no mencioné a Rafael o los otros chicos sobre el pájaro malvado llamado Pepillo.
No hay tiempo suficiente para explicar todo, así que sólo murmuré, "Pepillo".
"¿Quién es ... Pepillo?", preguntó Rafael mientras usaba su ala libre para limpiar una gota de sudor de su frente.
"Pepillo es el pájaro que nos capturó a Perla ya mí antes de conocerte. No me podrá capturar, ya que es muy difícil encontrarme como no puedo volar, pero seguramente puede secuestrar a Perla. Ambos pueden volar ". Fue la mejor forma en que pude explicarle la situación actual.
"¡Blu! ¡Rafi! " Dos voces gritaron detrás de nosotros. Nos detuvimos en seco cuando reconocimos instantáneamente a los dueños de esas voces. Nuestros amigos de Samba: Nico y Pedro.
"¿Qué pasa?" Yo pregunté. Pensé que estarían enojados conmigo por lo que dije durante la discusión ("¡Odio la Samba!"). Pero sus expresiones, máscaras de pánico, significaban que teníamos algo más grande de lo que preocuparnos que una discusión.
"¡Es ... Perla, la perdimos!" Pedro logró decir entre jadeos por aire.
"Sí, un segundo ella está frente a nosotros, el siguiente segundo, ¡ella desapareció de nuestra vista!" Nico agregó.
Mis ojos se abrieron cuando me di cuenta de lo que querían decir.
"Llegamos demasiado tarde" yo lentamente susurré con un pequeño esfuerzo. No hay forma de localizarla antes de que Pepillo lo haga. Sentí que toda la esperanza se iba por el desagüe mientras me imaginaba a Perla como yo, en una jaula con pájaros burlándose de ella y clamando por su libertad. Todo es mi culpa.
Pero sentí que solo la esperanza de mi cerebro se había ido, pero la esperanza de mi corazón todavía estaba allí. Comencé a caminar de un lado a otro como un leopardo luchador en una jaula, esperando que una Idea me golpeara. Rompí mis plumas.
"Rafael, ¿dónde está la jungla más cercana?"
"No muy lejos, veinte minutos mientras el Cuervo vuela".
"¿Y en un Bulldog?" Pregunté con un tono curioso.
Rafael, Nico y Pedro se miraron el uno al otro con las cejas levantadas (solo imagínense con las cejas levantadas), luego, lentamente, una sonrisa apareció en sus rostros.
Cinco minutos después ...
"¡Woohoo!" Luiz, nuestro amigo que es un bulldog, vitoreó mientras corría por las calles de Río con una sonrisa en su rostro babeante. Nico y Pedro volaban a mi izquierda mientras Rafael volaba a mi derecha.
"Pepillo, te juro que si tocas una pluma en el cuerpo de Perla, ¡haré que te arrepientas!" Dije con voz dura mientras nos dirigimos a la jungla más cercana.
Punto de vista de Perla
"Hola, pájaro bonito". Una voz desde la entrada me amenazó.
Levanté la cabeza para mirar a los ojos al pájaro que entró en el hueco. Mis ojos se abrieron con sorpresa, ira y miedo.
"¡Pepillo!" Jadeé.
"El único." Dijo con una sonrisa torcida mientras se inclinaba como si estuviera protagonizando un programa.
Lo miré con los ojos entrecerrados. Asco, esa es la forma en que puedo describir el sentimiento que tenía hacia él. Una sola lágrima cayó de mi ojo izquierdo y rodó por mi rostro.
"Aww, algo tan hermoso no debería ser triste". Gruñó.
"Sabes lo que pasó ese día". Logré decir con la garganta ahogada. Hice lo mejor que pude para sonar intimidante, pero mi combinación de sentimientos me ganó. No sabes cuánto quería arrancar cada pluma de esa Cacatúa y hacerle sufrir por lo que me hizo pasar.
"¿Qué día?" Preguntó con voz inocente, pero sabía muy bien de lo que estaba hablando, "Oh, ese día". Finalmente admitió, con su sonrisa torcida convirtiéndose en una sonrisa siniestra.
"¿Dónde está mi familia?" Lo interrogué.
Él respondió: "¿Cómo se supone que voy a saberlo? No creas que no sé quién eres, Ju-Ju ".
Mis ojos se agrandaron.
"Puede que no sepa dónde están, pero sé que están vivos. Beto, tu mami, tu padre. Toda la tribu azul. Están todos bien, sin ti ".
Esas palabras fueron como una daga en mi corazón. Me quedé en silencio, deseé que eso fuera todo lo que Pepillo tuviera que decir, pero continuó torturándome, "Pensé que eras un pájaro inteligente, pero supongo que estaba equivocado. De un centenar de pájaros, al menos uno debería haber sobrevivido a ese ataque, ¿no crees?
Tenía razón, no podía ser el único que sobreviviera. Lentamente bajé la cabeza, mi corazón hundido profundamente en el río de tristeza y agonía.
"Si te quisieran, te habrían buscado. ¿No es así? Según mi conocimiento, la distancia entre donde estamos y el Amazonas es un poco lejana. Pero sí se preocuparon por ti, ellos viajarían muchos días y noches para encontrarte, pero nunca lo hicieron. ¿Verdad?
¿Hicieron ellos?"
Este fue el golpe de la verdad que me rompió aún más. Él tenía razón, de nuevo.
"Cuando los humanos te encontraron y te llevaron al aviario, ¿algún pájaro te preguntó quién eras? ¿O cómo te sentías? No, recuerdo ese día. Te silbaron y te llamaron 'pájaro caliente' o 'ángel'. Te quieren por tu cuerpo. Todos lo hacen.
"Enfréntate a los hechos, 'Ju-Ju'. Nadie te recuerda. Nadie se preocupa por ti. Nadie te querrá ni querrá amarte ". Terminó su pequeño discurso.
Puedes decir cómo me siento. Me sentí peor que roto. Caí desintegrado, toda esperanza de que alguien se preocupara por mí, que alguien me quisiera, se había ido. Perdido en un vacío oscuro que nunca volverá. Supongo que realmente estoy solo.
Comenzaron a caer más lágrimas, inhalé y comencé a temblar.
Pero había una pequeña llama de esperanza en mi corazón, todavía allí. Siguió creciendo y creciendo mientras mi corazón decía un nombre: Blu.
"Estás equivocado, Pepillo." Yo lo corregí, con valentía y esperanza que se escuchaba claramente en mi voz.
"¿Lo estoy? ¿Acerca de?" Preguntó con una expresión confusa.
Una sonrisa se deslizó en mi pico cuando miré hacia arriba e hice contacto visual con él.
"Todavía hay un pájaro que me ama. Y sé que lo amo con todo mi corazón. Su nombre es Blu ".
Tan pronto como el nombre de Blu salió de mi pico, Pepillo se echó a reír. Se rió con tanta fuerza que le empezaron a brotar pequeñas lágrimas en los ojos.
"Dime ... ¡dime que esto es una broma!" Dijo entre risas.
Eso me enojó, nadie se burla de Blu.
"¿Qué es tan gracioso?"
"Que estás enamorado de un pájaro nerd que ni siquiera puede volar. ¿Cómo podría alguien tan sexy como tú estar enamorado de un patético bufón como él?
"Puede que no pueda volar, pero me mostró el mundo de una manera diferente, me cuidó cuando estábamos encadenados, nunca mencionó mi cuerpo ni mostró ningún dominio tonto de machote. Es dulce y cariñoso ".
"No te preocupes. ¡Ustedes dos estarán juntos, encerrados en una jaula por el resto de sus insignificantes y miserables vidas! " Habiendo dicho eso, saltó sobre mí en un intento de capturar me. Pero siendo yo la pájara voladora que soy, esquivé su ataque y salí volando del hueco.
"¡Vuelve aqui, preciosa!" Pepillo ordenó con furia en sus ojos. Se levantó y salió volando detrás de mí.
Punto de vista de Blu
Después de unos minutos de montar a Luiz, finalmente llegamos a la jungla.
"Aquí estamos", dijo Rafael mientras se paraba frente a nosotros. Aunque estábamos en medio de la tormenta, no nos dimos por vencidos.
Perla está aquí, lo sé.
"¿Adónde vamos ahora?" Pedro me preguntó.
"Umm, no estoy muy seguro". Confesé. Este es el único lugar al que podría pensar que Perla iría.
Ella está en medio de la jungla. Mi corazón me lo dijo.
"Ella está en medio de la jungla". Yo les dije.
"¿Cómo lo sabes?" Nico preguntó con confusión.
"Solamente lo sé." Respondí. Era cierto, simplemente lo sabía.
Sin unos segundos de sobra, caminé solo por la jungla. Bueno, estuve solo durante cinco segundos hasta que escuché a Rafael decir: "¡Espera, Blu, estamos contigo!"
"¡No puedo dejar que te diviertas!" Luiz agregó mientras sorbía saliva de su hocico.
"Gracias chicos." Dije mientras arrancaba hojas de nuestro camino.
Un minuto después de la búsqueda, Nico preguntó: "¿Por qué no simplemente volamos? Nos lo hará más fácil ".
"Eso hará que sea más fácil capturar nos". Respondí en un susurro bajo.
"¿Quién es Pepillo?" Preguntó Luiz.
"Rafael, ¿puedes explicárselo, por favor? Me preocupo más si lo sigo recordando ". Le pregunté con sinceridad.
Rafael asintió con la cabeza mientras comenzaba a explicar la situación en la que estábamos. Pero había algo en esta jungla, no sé cómo explicarlo. La mejor forma de nombrar este sentimiento era como Deja Vu. Siento que he estado aquí antes, pero eso es imposible. Linda y yo nunca pisamos este terreno.
Hogar. Dijo mi corazón en voz baja.
"A casa", repetí con la misma voz baja. Me quedé mirando a la nada mientras mis ojos se abrían con dolor y miedo. Los recuerdos malditos de mi pasado comenzaron a apoderarse de mi mente. Recuerdo que me caí de un árbol, que había otros pájaros gritando y volando con miedo, luego yo caí en una jaula.
Entonces Nico me llamó la atención, estaba pisando cierto lugar en el suelo. Mi instinto se hizo cargo cuando lo levanté del suelo justo a tiempo. Un milisegundo después se activó una jaula y se cerró de golpe, como una trampa para osos.
"¡Woah!" Gritó en estado de shock.
"Todo este lugar está lleno de trampas. Paso donde yo paso ". Yo les instruí.
Asintieron mientras los guiaba. Sabía exactamente dónde estaban ubicadas las trampas. Con mi corazón siendo mi GPS, navegué por la jungla. Hay otro, y allí, y allí. Mi corazón me advirtió.
Entonces escuché un gruñido y jadeos por respirar. Miré arriba.
"¡Perla!" Susurré, sabiendo que si gritaba, Pepillo me oiría. Una sonrisa se deslizó en mi pico, pero luego se desvaneció y en su lugar fue reemplazada por un pico ancho (la mandíbula colgando abierta de par en par en estado de shock).
¡Perla estaba siendo perseguida por Pepillo!
"¡Ahí está Perla!" Luiz gritó.
"Ese es un pájaro feo". Pedro añadió mientras sacaba la lengua con disgusto.
"¡Va tras Perla!" Nico advirtió cuando todos vimos a Pepillo acercarse cada vez más a Perla. Perla claramente se estaba agotando por la persecución.
¡Ayúdala, tonto! Mi corazón me ordenó: ¡ No te quedes aquí!
"Umm", traté de pensar en un plan, pero luego me di cuenta de que también había otras aves en la jungla. ¡Pájaros inocentes, niños, familias! podrían resultar heridos por Pepillo o por las trampas para pájaros. ¡Tenemos que sacarlos del camino del peligro!
"¡Rafael, Nico, Pedro! ¡Evacua a los pájaros de la jungla! Pepillo no irá a por ti, ¡quiere a Perla ya mí!
"¿Qué hay de mí?" Preguntó Luiz, queriendo ayudar a los pájaros.
"¡Asegúrate de que nadie toque el suelo, tienes que advertirles y ayúdalos si quedan atrapados en una jaula! ¡Usa tu conocimiento humano para abrir las jaulas! "
"¡Okey!" Todos dijeron simultáneamente. Los muchachos volaron mientras Luiz comenzaba a ladrar y gritar: "¡No toques el suelo! ¡Hay trampas! "
Los otros muchachos volaron hasta las entradas y empezaron a gritar: "¡Eyerone, hay un pájaro depredador que está causando problemas! ¡Evacue esta área! "
Inmediatamente, todos los pájaros comenzaron a salir volando de sus huecos. Hay demasiados, Pepillo puede capturarlos a todos. O nosotros. Tenemos que detener a Pepillo.
"¡Piensa en Blu! ¡Pensar!" Traté de pensar en una forma de ayudar a Perla y los demás.
Las vides. Recordé las largas enredaderas que subían y bajaban de los árboles. Son la mejor forma de subir a las ramas. Luego esperaré hasta que Perla y Pepillo se acerquen, y luego lo derribó en una trampa para pájaros. Mientras ella esté bien, no me importa lo que me pase. Me parece un buen plan.
Corrí a las enredaderas más cercanas. Los pájaros que pasaban volando a mi lado dificultan el acceso a las enredaderas. Todo parecía una película en mi cabeza, el valiente héroe corriendo hacia el peligro mientras otras personas corrían en la otra dirección en pánico.
Agarré la enredadera y comencé a trepar. Una tentación me hizo mirar hacia abajo. Inmediatamente me arrepentí al ver lo bajo que estaba el suelo de donde estaba colgando. Estaba colgando de una enredadera muy delicada, posiblemente trece por encima del nivel del suelo. Comencé a sentir pánico, pero luego Perla vino a mi mente. La verdadera amenaza es que la Perla se lastime, no una ilusión tonta.
Negué con la cabeza mientras corría por las ramas. Manteniendo mi equilibrio lo más estable que puedo mientras persigo a Perla. Mantuve mi vista en mis garras mientras me aseguraba de no caer.
"Colócate en las vides y agárrate". Me dije a mí mismo, tratando de no dejar que mis miedos se apoderaran de mí: "Es como el acrobático en Minnesota".
"Perla, nadamas falta un poco más." Prometí mientras me acercaba a su ubicación.
Punto de vista de Perla
"¡Vuelve aquí!"
"¡Nunca!" Grité de vuelta mientras continuaba volando a través de la jungla en un intento por perderlo. Hasta ahora, no lo he logrado. Los pájaros volaron junto a nosotros y chocaron contra nosotros, pero él solo quería capturarme.
Sé que me encanta volar y que soy una voladora rápida, pero no soy una máquina. Soy un pájaro. Mi cuerpo se estaba agotando. ¡Hora del plan B!
"¡No puedes volar para siempre! ¡Te atraparé a ti y a tu patético amante! " Dijo con orgullo en su voz: "¡Nadie le gana a Pepillo!"
"¡No, pero alguien puede hacer que te estrelles!" Dije mientras me sumergía.
"¿¡Qué!?" Pepillo estaba confundido por mis palabras cuando me vio hundirme. Distraído mientras volaba, estrelló su cuerpo contra la rama de un árbol.
"¡Sí!" Reclamé mi victoria cuando vi que Cockatoo cerraba los ojos y gemía de dolor. Cayó directo al suelo. Giré a la izquierda y volé directamente hacia él. ¡Esta es mi oportunidad para detenerlo!
¡Mamá, papá, te haré sentir orgulloso! Mi mente se lo prometió, sabiendo que me estaban mirando desde arriba.
Lo abordé rápidamente sin ningún problema.
"¡Maldita criatura!" Maldijo mientras trataba de volver a levantarse, pero apreté mi garra que se aferraba a su gordo cuello. Su piel lentamente comenzó a brillar de un color púrpura oscuro, incluso a través de su plumaje blanco todavía podía ver el color de su piel, también comenzó a jadear por oxígeno.
¿Lo iba a matar? No. Lo iba a noquear, dándole un tiempo para escapar a esos pájaros que tienen familias aquí.
Pero perdí la concentración cuando Pepillo agarró una mano llena (o más exactamente, un ala llena) de tierra. Me tiró la tierra a la cara.
"¡Argh !" Grité cuando sentí que la suciedad entraba en mis ojos y me picaba. Usé mis alas para tratar de limpiarme los ojos, pero Pepillo aprovechó esta oportunidad para aflojar mi agarre y volver a levantarse. Fue demasiado rápido.
"¡Te tengo ahora, pájaro bonito!" Declaró la victoria mientras me inmovilizaba contra el suelo y me estrangulaba con una de sus garras. Probablemente pesaba el doble de mi peso. Pero aún así, seguí empujándolo, pero sin resultado.
Traté de gritar pidiendo ayuda, pero mi garganta ahogada impidió que salieran palabras de mi pico. Pequeñas lágrimas comenzaron a formarse en mis ojos y rodaron por mi rostro cuando sentí que el verdadero miedo se hundía en mi corazón, algo que no había sentido después de ese día.
"¿Tratando de pedir ayuda a gritos? Creo que olvidaste de lo que hablamos, déjame refrescarte la memoria. ¡NADIE se preocupa por ti! "
"¡No!" Me las arreglé para gritar.
Punto de vista de Blu
Me detuve en seco cuando escuché a un pájaro familiar gritar que no. Fue Perla.
Eché un vistazo hacia abajo desde la rama en la que estaba. Mi corazón dio un vuelco y esta vista me dejó sin aliento.
Pepillo ya tenía a Perla debajo de ella.
"¡Tengo que hacer algo!" Entré en pánico mientras trataba de pensar en una forma de ayudar a Perla.
"Si voy allí, Pepillo me amenazó con matar a Perla si no obedezco sus órdenes. Entonces habrá terminado el juego para Perla y para mí."!
Entonces, de milagro, una nuez brasileña me golpeó la cabeza.
"¡Ay!" Me quejé. Entonces me di cuenta, "¡Eso es!" Jadeé.
Punto de vista de Perla
"Espero que te haya gustado tu pequeña visita a la jungla, ¡porque será la última vez que estarás en ella de nuevo!" Pepillo se burló de mí mientras luchaba bajo sus garras.
Mientras estaba ocupado burlándose de mí, vi caer una nuez brasileña de una de las ramas de un árbol. ¡Iba a aterrizar junto a nosotros!
Una vez que la Nuez hizo contacto con el suelo, una jaula se cerró de golpe, me asusté, pero había asustado más a Pepillo.
"¡¿Qué?!" Preguntó, confundido. Debilitó el agarre en mi cuello.
¡Ahora es mi oportunidad!
Rápidamente me di la vuelta, liberándome de su agarre en mi cuerpo. Instintivamente, me fui volando.
Punto de vista en tercera persona
"¡Parece que lo vamos a hacer por las malas!" Gritó de ira mientras volaba hacia un hueco.
Dentro de ese hueco, una familia de cuatro, un guacamayo macho, una guacamaya hembra y dos polluelos inocentes estaban jugando juntos. No escucharon toda la conmoción que sucedía afuera.
Pepillo entró en el hueco sin ser invitado, su pluma estaba empapada por la lluvia, sus pesados pasos resonaban en el gran hueco. El padre de la familia decidió enfrentarse al intruso, pero Pepillo lo golpeó y se dirigió hacia los niños.
"¡D-déjalos en paz!" Ordenó el Padre, recuperándose del golpe.
"¡Mike, ayuda!" La Mujer lloró al escuchar, empujando a los niños detrás de ella, tratando de protegerlos.
Pepillo fácilmente la arrojó a un lado y agarró a uno de los niños con su enorme garra.
El niño gritó: "¡Mamá! ¡Papito! ¡Ayudar!"
El padre finalmente se recuperó del golpe y se preparó para enfrentar a Pepillo, pero Pepillo lo detuvo.
"Tsk, tsk, tsk. Tengo a tu preciosa pollito. No querrías que lo lastimara, ¿verdad?" Amenazó mientras movía su pluma índice. El Padre obviamente no quería, pero al ver a su pobre hijo lleno de miedo y lágrimas en los ojos, no quería que el pobre niño se lastimara.
"Tú ganas." Él Padre murmuró.
"Mami", suplicó el niño con ojos asustados.
"Johnny", suplicó la Madre, con lágrimas en los ojos.
Pepillo sonrió mientras disfrutaba de la sensación de hacer saber a todos quién es el ganador aquí.
Él saltó sobre una garra hacia la entrada donde pudo ver a Perla tratando de esconderse.
Punto de vista de Perla
"¡Oye, Ju-Ju!" Escuché que ese pájaro repugnante me llamaba. Me escondí en un hueco, pero sabía muy bien que podía ver mi sombra.
"¡Mira lo que tengo aquí!" continuó cantando.
Mi instinto me dijo que mirara, así que lo hice. Vi al cobarde agitando su garra. En su garra pude ver a una chica asustada llorando.
"¡Cobarde!" Yo lo llamé.
"¡Ven aquí ahora! ¡O de lo contrario, tendrás la muerte de esta chica en tu conciencia por el resto de tu vida! ¡Tu elección!"
Luego hizo algo que nunca pensé que haría ningún pájaro. Empezó a apretar a la pobre chica. Gritó de dolor y miedo, al igual que yo.
"¡Esto es entre tú y yo! ¡Déjalo fuera de esto! " Y grité.
"Claro, solo entra en este hueco y lo dejaré vivir". Él propuso.
Por mucho que nunca quise decir esas tres palabras, no podía dejar que esa pobre chica sufriera. Prefiero sufrir si eso significa que nadie más lo hará, "Bien. ¡Tú ganas!" Me rendí.
"¡Entonces entra!" El ordenó.
De mala gana, obedecí su orden. Volé lentamente dentro de ese hueco, sabiendo que había perdido esta batalla.
Miré el suelo del hueco con vergüenza. Una lágrima rodó por mi rostro.
"Buena niña." Me felicitó mientras le lanzaba el pollito a su madre.
"¡Ten cuidado!" Le grité de rabia, pero antes de terminar, me tiró al suelo. Su garra derecha de vuelta a mi cuello, pero esta vez, apretó mi cuello muy fuerte. Podía sentir que mi suministro de aire se limitaba. Por el rabillo del ojo vi cómo la familia asustada comenzaba a abrazarse, recuperándose del susto que Pepillo le había dado.
"¡Alejarse!" Les advertí, tratando de salvarlos de la ira de Pepillo.
"¡Vuela y no mires atrás! Estaré bien. ¡Solo vamos!" Les aseguré.
Asintieron y empezaron a huir del hueco, pero la Madre se detuvo, me miró y dijo: "Gracias por salvar a mi bebé". Luego ella también voló.
Entonces sentí que el agarre de Pepillo en mi cuello se apretaba más. Sonrió maliciosamente mientras dejaba escapar un siniestro crujido. La falta de aire de mi cuerpo estaba haciendo que comenzara a perder el conocimiento. Jadeé en busca de aire, pero no entró ni salió nada. Estaba atrapado.
Con la poca fuerza que me quedaba, susurré: "Blu ... por favor ayúdame ... ayúdame". Luego sentí que todo se oscurecía ...
Pero luego mis luces se volvieron a encender cuando sentí que mis pulmones se llenaban de oxígeno fresco. Usé mi ala libre para calmar mi cuello ya que no sentía garras alrededor de mi cuello.
Me incorporé y vi a Pepillo, peleando con ... ¡Blu!
"¡Blu!" Grité de incredulidad.
"¡Perla, huye!" Blu me advirtió mientras golpeaba a Pepillo en el lado izquierdo de su rostro.
"No me iré sin ti". Declaro.
Pepillo luego le dio un puñetazo a Blu en el estómago. Blu rápidamente se estremeció por el dolor. Pero luego Blu corrió lo más rápido que pudo hacia Pepillo. Luego lo derribó por la entrada, ambos cayendo del hueco.
"¡No!" Grité mientras salía volando del hueco y me zambullo, tratando de atrapar a Blu.
Inmediatamente vi a Blu abrazando las alas de Pepillo, impidiéndole volar. Pero al acercarse mucho al suelo, Blu empujó a Pepillo al suelo. Entonces Pepillo activó una trampa para pájaros con forma de jaula, lo que hizo que quedara atrapado en una jaula.
"¡Oye!" Pepillo maldijo: "¡No te escaparás de mí!"
Blu inmediatamente cayó encima de la jaula y rebotó en el suelo. Aterrizó con un fuerte golpe.
"¡Oh Dios mío! ¡Blu! " Grité porque no lo vi moverse. Las lágrimas comenzaron a formarse en mis ojos cuando pensé que estaba muerto.
Pero entonces Blu comenzó a gemir de dolor. A pesar de que estaba herido, grité de felicidad porque estaba vivo. Me deslicé hasta allí y aterricé junto a Blu.
"Blu, ¿estás bien?" Pregunté, la simpatía se escuchó claramente en mi voz.
Me miró y sonrió con torpeza: "Yo, eh ... sí, estoy bien. Gracias. Je. "
Le dediqué una sonrisa sincera, "Blu, fue muy considerado que volvieras y me rescataras". Le di las gracias ".
"Oh, no fue nada. Honestamente, cualquiera hubiera…
No, no cualquiera hubiera hecho eso. Ahora veo que a pesar de no poder volar, no dejas que eso te impida lograr lo que quieres. Blu, lamento lo que dije en el garaje de Luiz. Bajé la vista a la tierra con vergüenza. Realmente me sentí culpable. Mi pensamiento es que lo hizo para salvar a otras aves, pero no a mí. Probablemente me odia. Una sola lágrima sale de mi ojo.
Pero él no respondió. En cambio, usó una de sus alas para levantar mi cara y poder hacer contacto visual con él. Tenía una sonrisa inocente mientras usaba la punta de su ala para limpiar esa lágrima de mi cara.
"No Perla, lamento haber tenido una rabieta por no poder volar. Tenías razón, no es tu culpa que no pueda volar " Él confesó. Luego sacó su ala frente a mí, "¿Amigos?" Preguntó.
Aunque quería que fuéramos más que amigos, sonreí y agité su ala con él, "Amigos".
Luego hice algo que nunca hice en mi vida. Corrí hacia él y lo abracé. Podía sentir su nerviosismo mientras me abrazaba. Nunca quise dejarlo ir.
Entonces, pude sentirlo abrazándome. Una sonrisa se deslizó en mi pico mientras descansaba mi cabeza en su hombro. Por una vez en mi vida, me sentí seguro.
Quería decir "te amo" en ese momento, pero escuché un clic detrás de nosotros.
"¡Pepillo!" Grité de horror cuando Pepillo voló directamente hacia nosotros, clavando sus afiladas garras como cuchillos.
Blu miró hacia donde yo estaba mirando y me empujó fuera de peligro, dejando que lo atrapara para salvarme.
Pepillo se rió con picardía mientras agarraba la espalda y el cuello de Blu.
"¿Crees que yo tampoco tengo conocimientos humanos? ¡Sé abrir jaulas como tú! ¡Ahora son míos! "
"¡Perla! ¡Corre! ¡Corre!" Rogó mientras luchaba dentro de las garras de Pepillos.
"¡No puedo dejarte!"
"¡Ir! ¡Consigue ayuda!" Fue lo último que logró decir antes de que Pepillo despegara con Blu a su antojo.
¡Ayudar! Eso es lo que necesito encontrar.
"¿Quién puede ayudarnos?" Me pregunté a mí mismo cuando comencé a entrar en pánico.
De la nada, una idea golpea mi cabeza. Pero esa idea me obliga a hacer algo que tengo miedo de hacer. Pero si eso significa que pueden ayudar a Blu y derrotar a Pepillo, lo haré. Esto es para ti, Blu.
Empecé a salir volando de la jungla.
Escuché a Rafael y los dos pájaros de la samba asegurar a todos los demás pájaros que están a salvo de cualquier peligro y que se mantengan alejados del suelo.
"Perla, ¿a dónde vas?" preguntó Rafael mientras me alcanzaba.
Voy a buscar ayuda, vuelve con Eva para asegurarte de que está a salvo. Dile a los chicos de samba que sigan a Pepillo y averigüen hacia dónde se dirigen. Luego, una vez que sepan dónde se encuentran, dígales que informen al Cristo Redentor ".
Él asintió con la cabeza mientras se giraba y voló de regreso a los otros pájaros. Le dijo algo a Luiz, pero yo no lo escuché.
"Espera Blu, ya voy". Prometí mientras volaba de regreso a la ciudad.
Continuará ...
Sus comentarios y críticas serán escuchados siempre que sea por el bien de la historia.
Espero que hayas disfrutado de este capítulo. Nos vemos en el próximo capítulo. Atentamente, J.