RinMakoto. El demonio más fuerte no es nada fácil de batallar, aunque Koga protegió mucho a Asuka de evitar que saliera lastimada.
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nosaka202012. Me basé un poco en él, pero solo con el nombre y su animal ninja, créeme, son fan a morir de Saint Seiya, le iba a poner Seiya o Tenma, pero me decidí Koga, aunque Omega no me gustó.
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Sin más, comencemos…
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Odín había estado presente en la academia Hanzou, aunque no ocasionó ningún daño a la infraestructura ya que estaban bajo una barrera shinobi. Asuka había sido defendida por Koga el cual estaba muy herido por la batalla contra Odín, Asuka estaba del mismo modo, aunque en menor medida.
- Gracias chicas, ya con esto me sentiré mejor – dijo Asuka la cual tenía algunas vendas en varias partes del cuerpo.
- No te preocupes, al final de todo el enemigo no era alguien fácil de derrotar.
- Sí, Odín era fuerte – en eso, la castaña sintió como Katsuragi tocaba sus pechos haciéndola sorprenderse – ¡Katsu-nee, no me toques ahí por favor!
- Asuka, realmente cada vez lo siento más suavecitos, ya me imagino tu pareja en el futuro que suerte tendrá cuando los pueda tocar libremente, sentiré envidia – decía la rubia haciendo gemir a la castaña, aunque fue detenida por Ikaruga la cual le dio un golpe en la cabeza a la rubia.
- Ella ha batallado contra un enemigo muy fuerte, déjala que descanse Katsuragi-san.
- Moh, no eres divertida Ikaruga, por eso te quedarás soltera.
- ¡A mí que me importa eso!
- Dios, y se supone que son nuestras Senpais – dijo Yagyu a un lado bostezando.
- ¿Y cómo se encuentra Koga-kun? – preguntó Asuka preocupada mirando a las demás.
- Él está en una de las habitaciones descansando, aunque estaba muy lastimado – Hibari fue la que habló – tenía muchos golpes en todo el cuerpo.
- Koga-kun – Asuka solo bajó la mirada – no pude hacer mucho contra Odín, era muy fuerte, Koga-kun le dio batalla, pero resultó muy herido en el proceso, además, evitaba más que yo saliera lesionada.
- ¿En serio?
- Por eso es que no estoy tan lastimada, él evitaba que yo me hiciera daño – la castaña se levantó de su sitio, pero las demás parecían preocupadas por eso y trataban de evitar que hiciera fuerza.
- Asuka-chan, no deberías levantarte, deberías descansar.
- Lo mismo digo Asuka-san, debes descansar.
- Quiero ver a Koga-kun – susurró la castaña la cual, aunque sus amigas no querían que fuera por su estado, al final llegó a la habitación en el que estaba el peli azul, sin embargo, este se estaba levantando como preparándose para irse - ¿Koga-kun?
- ¿Eh? – el chico notó como es que Asuka llegaba, pero este parecía querer irse – supongo que ya estás bien.
- ¿A dónde vas? Necesitas descansar.
- Lo sé, por eso mejor descansaré en otro lado, me iré a la academia en donde tengo mi habitación, es más cómodo que estarles estorbando aquí.
- No estás estorbando, mi abuelo fue el que ordenó que te trajéramos aquí, no deberías preocuparte por eso, solo recupérate.
- Lo sé, pero prefiero hacerlo en mi cuarto.
- No creo que te dejen ir así de fácil – las demás entraron en el sitio – además, Hanzou-sama, Kiriya-Sensei y Daidouji-Senpai están investigando la academia, por lo que dudo mucho que te dejen solo en tu habitación.
- Tsk, realmente es molesto todo esto – susurró el peli azul.
- Por cierto, supimos que te sacrificaste mucho para que Asuka no saliera lastimada – decía Katsuragi mirando de forma acusadora a Koga el cual ni siquiera se inmutó por eso, pero solo se ganó un golpe en la cabeza por parte de la peli negra – oye Ikaruga, ¿Por qué hiciste eso?
- Por idiota, deja de hacer esas cosas.
- Koga-kun, no vayas, solo relájate por favor – decía Asuka la cual lo tomó de la mano – estás muy débil, batallaste duro contra Odín, por favor, te lo pido, descansa aquí.
- Asuka-san – el peli azul se le quedó mirando a la castaña, aunque tenía las enormes ganas de irse, este por alguna razón decidió hacerle caso a la nieta de Hanzou - ¿Por qué demonios me haces caer en hacerte caso? De acuerdo, me quedaré a descansar.
- Gracias Koga-kun.
- Oigan, ¿Cómo que el ambiente se siente raro? – susurró Katsuragi a las demás las cuales quedaron confundidas por eso – vamos, no me digan que no le encuentran, solo miren a Asuka, apenas lo conocemos hace poco y ya parece que son cercanos.
- Bueno, es porque la salvó de ese demonio rey o lo que fuera – decía Ikaruga haciendo entrar en razón a la rubia, aunque Katsuragi parecía no querer entender eso.
- No seas tan inocente, por eso te quedarás soltera – decía la rubia sonrojando a su mejor amiga.
- No te doy una nomás porque estamos aquí – susurró.
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Mientras tanto, en la academia Hebijo, Miyabi llegaba al sitio mientras que sus demás compañeras parecían estar esperándola.
- Miyabi – la mejor amiga de la peli blanca, Imu, fue la primera que se encontró con ella – ¿Dónde estabas?
- Fui por una misión de reconocimiento, orden directa de Suzune-Sensei, quería que resolviera una situación, no tengo todos los detalles del caso.
- Entiendo – Imu miró como su mejor amiga entraba en las instalaciones para después llegar hasta donde estaba la maestra peli morada.
- Suzune-Sensei.
- Miyabi, has vuelto – la Sensei se puso frente a su alumna – ¿Qué averiguaste?
- Las del escuadrón Homura saben algo, de hecho, diría que están involucradas – la peli blanca hizo una pequeña pausa – a todo esto, tengo la osadía de preguntarle, ¿Cuál es el objetivo de todo esto?
- Es una cuestión de una batalla más fuerte que la que se tuvo contra esa youma – Miyabi se impresionó por eso, aunque fue solo un poco – se trata, según las palabras de Hanzou-sama, de un enemigo más poderoso, algo que incluso a él lo dejó al borde de la muerte.
- ¿Existe alguien así de poderoso?
- Sí, sin embargo, parece que fueron atacados hace poco, a Asuka-san y a un chico el cual se dice que posee un poder bastante grande, es alguien a quien el propio Hanzou-sama reconoció como un shinobi prodigio.
- Increíble – Miyabi susurró.
- Sin embargo, el chico no parece querer ser shinobi y solo vivir como una persona normal, por lo que considero yo en mi opinión, como una pérdida de tiempo – Rin hizo una pausa – por el momento puedes retirarte.
- Gracias – la peli blanca se fue del sitio, sin embargo, pensó un poco en lo que su Sensei le dijo – ¿Cómo es que puede haber un enemigo que al propio Hanzou-sama le dio batalla dejándolo en ese estado? Es más, ¿Por qué existe alguien que a pesar de ser fuerte no quiere seguir su destino?
- ¿Por qué hablas sola?
- Sí, ¿ocurre algo? – Miyabi iba tan perdida en sus pensamientos que no se dio cuenta de que sus compañeras estaban detrás de ella escuchándola.
- Es algo muy importante que hablaste con Suzune-Sensei ¿verdad?
- Podemos decir que sí – la líder del grupo miró a las suyas – es algo que me dejó muy pensativa.
- ¿De qué se trata?
- Verán… - Miyabi les contó un poco a las demás sobre el asunto, esto para que se dieran cuenta que había un enemigo que era lo suficientemente fuerte para hacerle frente al mejor de los shinobis.
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Pasó una semana desde el incidente de Odín y las cosas estaban un poco más calmadas, Koga se fue recuperando muy rápido, aunque lo que ayudó mucho fue que Asuka lo estuvo cuidando todos esos días.
Aunque el peli azul tuvo que faltar varios días a la escuela, Hanzou tenía sus contactos por lo que al final se dio a entender que Koga tuvo un accidente en el que salió herido, al final se aceptó eso.
Al final de la semana…
- Supongo que estoy bien ya – susurró el chico mientras se quitaba un poco las vendas, Asuka recién entraba a la habitación, aunque al ver cómo es que el chico estaba haciendo eso, salió de un solo – no te preocupes, no estoy desnudo.
- ¿S-Seguro?
- Adelante, no es como que veas algo que has visto antes, después de todo me has curado un poco la espalda ¿no? – al entrar, Asuka estaba algo sonrojada, pero fue a lo que iba.
- ¿Cómo te sientes hoy?
- Ya mejor, las heridas ya no las siento – el peli azul la miró – ya me podré ir a mi habitación.
- Lo sé, pero no te preocupes, si te sientes mal de nuevo, ven rápido para que te cure.
- Gracias – susurró el chico mientras que se quitaba las vendas para dejarlas de una vez, aunque como siempre la castaña se sonrojaba mucho mirando su pecho descubierto, los años que pasó entrenando arduamente hicieron un excelente trabajo en su cuerpo - ¿pasa algo?
- N-No, no pasa nada – susurró la shinobi mientras que no podía quitar la vista del abdomen del peli azul, lo curó en ese momento para ya después dejar todo a un lado – supongo que con esto terminamos.
- Sí, supongo que sí.
- Bien – el peli azul estaba en la ventana, pero solo le echó la mirada a la castaña a la vez que le dio una pequeña sonrisa – gracias por todo Asuka-san.
- Koga-kun – Asuka no pudo evitar sonrojarse por eso – no te preocupes, ve con cuidado.
- Sí – el chico se fue dejando sola a la chica del pañuelo rojo, aunque se fijó en algo, una camiseta del peli azul había quedado en el sitio como si la hubiera olvidado. Esta tenía la imagen de un león rojo, sin embargo, Asuka decidió tomarla, aunque por alguna razón decidió olerla ya que le llamó la atención.
- Sé que no debo hacer esto, pero es que Koga-kun tiene un buen olor, su camiseta huele a hombre – la nieta de Hanzou estaba oliendo mucho la camiseta de Koga, aunque no se dio cuenta cuando las demás de su escuadrón entraron a la habitación y vieron eso.
- ¿A-Asuka? ¿Qué haces?
- E-Este… - Asuka se dio la vuelta lentamente y miró a Yagyu, Hibari, Ikaruga y Katsuragi las cuales aprecian extrañadas mirando eso – ¿C-Cuando llegaron aquí chicas?
- Hace poco, pero dime una cosa, ¿desde cuando haces eso? – preguntó Yagyu la cual estaba aguantando la risa al igual que Hibari, esto no era común en ella.
- P-Pudo explicarlo…
- Veo que Koga-san se fue, sin embargo, no me creí Asuka-san.
- Vamos Ikaruga, Asuka ya está en la edad en donde nuestras hormonas se revuelven, por lo que no la puedo culpar por eso, además, que tenga a alguien como novio que la complazca sexualmente es algo normal para una chica de 15 años – decía Katsuragi – por cierto, si tienes su camisa, quiere decir que Asuka y Koga…
- ¡No hicimos nada! – gritó sonrojada la castaña – f-fue que se le olvidó cuando se fue, nada más y con oler su camiseta… pues… no tengo idea, solo me surgió hacerlo.
- Que pervertida saliste Asuka – cuando la rubia dijo eso, Ikaruga y Yagyu la quedaron viendo con los ojos entrecerrados como diciéndole que no era quien para hablar.
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Homura y las suyas estaban yendo hacia un bosque apartado en el que, al llegar, de una vez iban transformadas para evitar caer ante una emboscada.
- ¿Me pueden recordar porque es que vinimos en primer lugar?
- Por esto – Homura mostró una flecha en la que venía un mensaje – nos decía que nos reuniéramos aquí, ahora veremos quién es quién nos mandó a llamar.
- Tengo un mal presentimiento.
- Si es alguien malvado – Hikage lamió su cuchillo – lo mataré con mucho gusto.
- Al final vinieron – una voz se escuchó, apareciendo frente a ellas la antigua maestra del escuadrón.
- Suzune-Sensei.
- Homura-san, Hikage-san, Haruka-san, Mirai-san, Yomi-san – la peli morada estaba mirándolas fijamente – es hora de que hablen.
- ¿De qué habla Sensei?
- Hablen sobre lo que saben sobre los demonios que han estado apareciendo – cuando la mujer dijo eso, las adolescentes quedaron calladas y tensas, Homura disimuló muy bien su nerviosismo.
- No tenemos idea de lo que habla Sensei.
- Esto es un asunto de vida o muerte, si no van a hablar – Rin se transformó lo que puso algo mal a las chicas del escuadrón Homura – entonces las voy a hacer hablar.
- Mierda, esto se complicó – susurró Mirai, las demás también asintieron.
- Ni modo, nos va a tocar pelear – susurró Homura sacando sus espadas, las demás al mismo tiempo sacaron sus armas – debemos defendernos a como dé lugar.
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Continuará…