—Bueno, es hora de comenzar -dijo con una sonrisa sádica mientras golpeaba el palo en su mano- que no tendré piedad ustedes y esperó sepan pelear.
—No te tenemos miedo -dijo Ami fingiendo seguridad y en ese momento llego Darien- que bien que llegaste Darien.
—¿Qué pasa aquí?
—Esta chica -dijo Rei señalando a Sara quien les miraba con frialdad- llega como loca a retarnos.
—Así que -habló Sara mirándole de arriba y abajo con una sonrisa de soberbia- tu eres ese estúpido... Como te describieron si te ves como un imbécil.
—¡¿A quien llamas estúpido, niñata?!
—Es obvio que a ti imbécil.
Serena no decía nada solo observaba con seriedad tomando la mano de su novio tranquilizándole sabiendo que se encontraba furioso, pero lo hacia también por ella a su lado también miraban Esteban, Rudo, Kaori, Misao y Kaede quienes acababan de llegar ya que Sara primero fue al lugar donde se reúnen para saber donde se encontraban.
—Lo que me da a entender -dijo Serena con seriedad mirándoles- primero fue con ustedes.
—Si.
—De hecho nos pidió el bate -contó Rudo encogiéndose de hombros, al ver que no era contra la rubia la pelea y se calmó- por que crees el bate tiene la marca de la pandilla.
—Realmente pensamos que ella te haría algo y vinimos detrás de ella.
—¿No sabían que ella es la que mandaba las amenazas a esas chicas? -pregunto Esteban con burla y ellos negaron.
—¡Ayudamos Serena! -le grito enojada Rei furiosa al verla tan tranquila hablando con los demás- ¡tu nos metiste en esto!
—Disculpa ¿yo lo hice? yo en ningún momento las metí, ustedes solitas lo hicieron y yo les advertí que dejaran de hacerlo -comento con burla y observó a Hotaru quien observaba todo cerca de ellas- ven Hotaru necesitó un favor.
Hotaru se alejó de las demás sintiéndose aliviada para luego acercarse con rapidez a Serena.
—Dime princesa.
—Lleva a Rini y Kaede a dar un paseo, Rudo ira con ustedes -dijo con una leve sonrisa, ellas asintieron y se fueron con el nombre.
—¿Qué harás? -pregunto Takeshi bastante curioso.
—Ser espectadora de esto -respondió con una leve sonrisa forzada y se sentó en el suelo- ¿que mas puedo hacer? No quiero meterme en problemas por culpa de esto.
—Yo haré lo mismo.
—¡Dejaras que nos hagan algo! -exclamó Mina muy molesta- ¡Serena!
—Lo siento, pero yo solo soy una débil mal portada e inmadura, ustedes pueden -recalcó Serena encogiéndose de hombros y ellas abrieron la boca sorprendidas- dijeron que son mas fuertes que yo ¿no? demuestrenlo, además yo solo soy la princesa que debe ser protegida por ustedes.
—Serena estoy muy arrepentida y te lo demostraré -dijo Sara y se lanzó a golpearlas, ella era realmente rápida y nadie podía con ella- ¡por todas!
(...)
—Demonios...
—Jefesita es buen espectáculo ¿no? -cuestionó Esteban con un tono bastante burlón- muy bueno de ver...
—Esto es en nombre de mi Elsa, Hikaru y Amu -mencionó bajando el palo una vez que haya acabado- no se metan con ella ¿nos vemos en el cuartel?
—Te esperamos -le dijo desinteresada la chica se fue y eso aprovechó para acercarse a las chicas- ¿quieren otra ronda de golpiza como esa?
—"Ella me venció" -pensó Haruka ignorando a la rubia- demonios...
Serena se agachó recargando su barbilla en sus rodillas, todas le vieron apretando los dientes con fuerza esperando su movimiento hacia ellas, Serena les miro de forma fría y neutra sus ojos azules no mostraban algún sentimiento.
—Esto es muy molesto tanto para ustedes y para mi... Curación Estelar -exclamo molesta en el idioma Selenita, las heridas de todas sanaron menos las de Darien él quedó igual y dio un gran suspiro- debieron hacer caso a las advertencias no crean que solo es un juego, la próxima vez las dejó que se mueran si es muy necesario.
Todas se encontraban furiosas y conmocionadas porque Serena no la detuvo o las defendió veían como ella junto a los demás se alejaban viendo a la rubia reír y sonreía como lo hacia con ellas antes.
Al día siguiente.
La rubia llegaba al templo ya que la habían citado otra vez, pero ahora sin que le dijeran razón y ese día Serena como de costumbre estaba la ropa que siempre había usado.
—¿Para que me citaron? -pregunto Serena mientras se recargo en el árbol- espero hoy no sea una pérdida de tiempo.
—Queremos probar unas técnicas contigo.
—¡Tu puedes Bombón! -ánimo Seiya al verla fruncir él ceño.
—¿De que parte estas Seiya?
—Es fácil de contestar Mina -dijo Seiya y señaló a Serena con una gran sonrisa- estoy de parte de mi bombón
—No le llames así a mi futura esposa -dijo Takeshi burlón cargando a Rini y tomando de la cintura a Serena quien sonrojada se alejo haciendo reír a Takeshi- sigues igual que siempre amor -murmuró y Serena le miro riendo sabiendo que era verdad- además solo yo le puedo decir así.
—¿Ya se casarán?
—Si, lo haremos -dijo Takeshi quien sonrío orgulloso.
—¡Muchas felicidades!
Serena sin esperar más se alejó de Takeshi quitándose su chaleco para dejarlo a un lado y el pelinegro se alejó al ver esa acción que conocía muy bien.
—Bueno entonces yo quisiera ver que tan hábiles son y no quiero que me subestimen como lo están haciendo ahora -mencionó con seriedad tronándose los dedos y el cuello al mismo tiempo, ella se sentía emocionada- ¿con quien empiezo primero?
—Conmigo empezarás -dijo Rei dando un paso hacia delante.
—Muy bien.
Rei se coloco frente a Serena en forma de pelea aunque le extraño que ella se quedara en el mismo lugar mirándole tranquila, poco después empezaron a pelear en un movimiento Rei logro tirar al piso a Serena.
—¡Lo logre! -comenzó a saltar de felicidad muy extraño para la actitud que ella siempre tenía- ya sabia que lograría vencerla.
—Claro que no lo lograste Rei.
Exclamó Serena levantándose acercando su mano al bolsillo del pantalón donde saco unos nudillos de plata que se coloco rápidamente y al verla tan distraída celebrando su "victoria" la golpeó por la espalda, haciendo que ahora ella cayera retorciéndose de dolor.
—"Debió de doler eso" -pensó Darien haciendo una mueca.
—Yo no soy fácil de vencer y espero eso te quede muy claro Rei -comentó mientras se acomodaba los nudillos y suspiro sentía que eso iba para más- la siguiente de un paso hacia delante y sin retractarse en ningún momento.
—Bueno, seré yo.
(...)
Al cabo de una hora pasaron todas menos Ami, Mina y Setsuna las demás estaban en el suelo mientras sangraban por cortadas de alguna parte de su cuerpo y también se tenían que sostener porque se sentían muy débiles.
—¿Esta bien como lo mostré o ustedes tres también probar mis habilidades de pelea? -preguntó curiosa guardando sus nudillos- ustedes sigan yo puedo aguantar para más.
—No así esta bien -dijo Ami quien retrocedió asustaste al ver los nudillos de la rubia- gracias por mostrar eso.
—Que bueno porque no quisiera romperles los huesos no me gustaría ser presumida, pero fui entrenada en las artes marciales y para peleas callejeras por el mejor entrenador -mencionó con mucho orgullo palpando su bolsillo donde los guardó tenía bastante tiempo que no los usaba y le traía mucha nostalgia- tengo muchas cosas más y de este tipo, que no querrán que los enseñe aunque hoy haya roto una regla de una pelea callejera...
—¿Eres una pandillera? -pregunto Mina agarrándose un brazo y le miro sorprendida- de lo que yo se eso es ilegal en Japón.
—Si lo soy ¿hasta ahora se dan cuenta de ello? el juez lo sabe muy bien, mi pandilla esta retirada de las calles así que mi hija puede estar conmigo -hablo con voz profunda y sin sentimiento sabiendo que ellas atacarían el punto de Rini- por lo que no es ilegal.
—Pensamos que eras nuestra amiga...
—Lo era Mina, pero ustedes lo echaron a perder acaso... ¿yo no tenía derecho de opinión? o cuando quería luchar por mi misma todas me dejaban de lado... -comenzó a decir caminando de un lado a otro mirándoles de forma seca e indiferente, les sonreía vacía- yo deje a esta Serena de lado y abrí una personalidad nueva, pero ustedes lo acabaron al no creerme capaz de nada... Mi carrera la había decidido ustedes iban a ser las primeras en saberlo, pero a la semana se comportaban tan distantes conmigo y creí que por lo menos algo les cayera bien, pero no, me di cuenta que solo están a mi lado por Serenity y no por Serena.
Nadie decía nada lo último no era verdad, pero lo demás si se sentían culpables no lo habían sentido porque nadie les había echado en cara lo que estaban haciendo y la rubia suspiro cansada.
—Amor -le llamó Takeshi conocía muy bien a Serena y entendió que debía llevársela- tenemos que irnos ya.
—Claro... Darien te esperó en mi departamento -ordenó mirándole tomando a Rini en brazos- para que vayas por Rini, uno de mis pandilleros te estará vigilando como siempre.
—Ni que la fuera a robar -exclamo molesto por la insinuación- ella es mi hija y no le haré nada.
—Eres capaz de eso Darien y de muchas cosas más -mencionó dándose vuelta tomando de la mano de Takeshi- vamos mis amores volvamos a casa.
Dejaron a todos conmocionados y lastimados amanecerían con varios moretones los Kou no sabían que pensar sobre las chicas y su comportamiento con la rubia se sentían decepcionados, por otro lado Darien el estaba enojado.
Continuará...
