Día 4: Indirect kiss
Vida, ¿recuerdas nuestros primeros encuentros y como eran de inocentes?
Bueno, creo que yo era la inocente, o tal vez solo era porque venía de un país totalmente distinto, aún había muchas cosas a las que no me acostumbraba de Inglaterra, y las demostraciones de afecto en público eran una de ellas.
Recuerdo que ver parejas en la calle besándose o abrazados me impactó un poco, aunque en el fondo deseaba que tú y yo pudiéramos ir así algún día, sin embargo aún nosotros no éramos nada.
Si mi memoria no falla fue un día que hacía mucho frío, te esperaba en la cafetería de siempre, yo había llegado antes, tú me avisaste que venías tarde, así que pedí un chocolate caliente, cuando por fin llegaste te paraste frente a mi temblando del frío.
-¿Qué pediste?
-Chocolate, ¿Quieres? -asentiste y antes de que pudiera llamar a la mesera tomaste mi taza y bebiste de ella ante mi atónita mirada y mis mejillas sonrojadas
-Está delicioso, creo que voy a pedir uno para mi... oye Tomoyo ¿estás bien?
-¿Qué? Eh, si, completamente bien
No supe como decirte que ese había sido nuestro primer beso, aunque haya sido un beso indirecto.
