Día 6: Love letters
Dime Eriol, ¿estás molesto porque me despedí de ti en esta carta?
Espero que no mi vida, es solo que las palabras se atoraban en mi garganta, había tantas cosas que quería decirte pero no supe como... siempre fuiste mejor que yo con las palabras, recuerdo la primera carta de amor que me escribiste, la tengo grabada en mi memoria.
"Querida Tomoyo:
Te escribo porque al verte a la cara se me olvidan todas las palabras, sí, lo sé, sé que suena increíble considerando todo lo que parloteo cuando estamos juntos, es solo que nunca logro decir lo que realmente quiero.
No logro decir, por ejemplo, lo mucho que me gusta tu sonrisa, y más ser el motivo de ella, siempre olvido decirte lo hermosos que son tus ojos, oh, no sabes lo que me encantan tus ojos, sé que a veces eres tímida, pero solo me basta una mirada a tus ojos para saber lo que sientes.
Quisiera decirte todo el tiempo lo mucho que te quiero, que no pasa ni un momento en que estemos separados y no piense en ti ¿qué me has hecho, eh? ¿Acaso has puesto algún hechizo sobre mí? ¿Para que no pueda pensar en nadie más?, si es eso lo que has hecho conmigo, querida, créeme que no me quejo.
Tuyo por siempre, Eriol"
¿Tú la recordabas, tal cual, palabra por palabra?, no tienes idea de lo emocionada que estaba al leerla y saber que no era la única "hechizada", aún ahora, me pregunto por qué lo que nos hace felices no puede durar para siempre. ¿Tú lo sabes Eriol? Si lo sabes, dímelo, aunque creo que ya no importa ahora...