*Redoble de tambores* Por fin aquí está el fic que más esperaba en subir, me gusta todo de él, amé escribiendo cada capitulo. Aprovecho para decir que cambié de opinión y ya no será un three-shot, y ya mejor no voy a decir cuánto van a durar mis fics porque siempre termino quedando mal XD

Disclaimer: Eren, Levi y todos los personajes son propiedad de Hajime Isayama, la historia es mía. Las canciones utilizadas en todos los capítulos tendrán sus respectivos créditos y referencias hasta el final, para el mejor entendimiento.

Parejas: Levi x Eren (principal); Jean x Eren (era necesario).

Advertencias de toda la historia: Romance, AU, Ooc, drama (poquito), lenguaje altisonante (exceso), lemon (7u7). No es un song-fic, pero sí hay demasiadas referencias a canciones que por supuesto les puse y les traduje, y sí, todas son del genero rock/metal. Esta es una historia centrada en el tema de rockstars, metaleros, darketos, rockeros o como les llamen XD.

Agradecimiento especial a mi amada Ale por betear esta abominación sabrosa xD y a mi hermana que me ha ayudado en el desarrollo de la historia.

Sin más, a leer~


Here I am [1]

Parte I.

Suena la alarma programada. El ruido que provoca el aparato se cuela poco a poco por el subconsciente de mis sueños. Parece lejano. El sueño también es oscuro. Se acerca, me abruma: me despierta.

De regreso a la realidad, la música se intensifica en mis oídos. Por fin abro mis párpados, pestañeo, los vuelvo a cerrar. Los abro de nuevo, titubeo. Recorro el lugar en el que me encuentro, es mi habitación. La música sigue sonando, y es cuando decido apagar de un manotazo aquel ridículo arruina sueños llamado teléfono. Tanteo su ubicación; no está en la mesa de noche, ni bajo la almohada, el sonido surge por debajo de la cama.

Carajo, y yo que no quería moverme.

Me muevo con dificultad y pereza, al hacerlo me ataca un dolor punzante en el cráneo, como si un gigante estuviera presionando mi cabeza con sus grandes dedos y quisiera reventarla como una uva. Tengo esa sensación.

Me arrastro cual gusano por la cama en vez de levantarme y buscarlo, lo único que quiero es que la música deje de sonar.

Tengo la parte inferior del cuerpo sobre la cama, mi estómago apoyado en el colchón suave, mientras que mi torso y mis brazos vuelan fuera de él haciendo los intentos necesarios para alcanzar mi teléfono hasta el fondo del mueble.

Maldición, ¿Cómo llegó ahí?, no lo sé.

Levi no seas idiota y levántate ya. Me reprendo. Desisto de mi labor y me revuelco en las sabanas hasta que mis pies tocan la alfombra.

Ese acto tan simple hace que me golpee de nuevo el dolor, mareado y aturdido procedo a comportarme como un humano y agacharme como se debe para ponerle fin al ruido.

No me malentiendan, es fantástico despertar con el solo "El ojo de la tormenta [2]" de las manos expertas de Dan Donegan, pero hoy no. Hoy odio a todo el mundo a un nivel más que lo de siempre. Solo me habría gustado dormir un poco más. Ya que debido a mi insomnio, pocas veces puedo dormir tan profundamente como ahora, tuve que haber ingerido grandes cantidades de alcohol para haber muerto toda la noche y parte de la mañana sin despertar.

Al final, con el aparato en mi mano presiono "descartar" una vez que veo la pantalla. "Alarma de las once y media de la mañana. Diez nuevos mensajes de La Loca y cinco llamadas perdidas. Mayo 21, catorce grados, soleado".

Pongo el aparato en la mesita una vez que me he informado del exterior.

Me llega un olor repentino a alcohol, apesto a borracho. Nunca imaginé volver a estar en estas condiciones, ahogado por el alcohol y oliendo a mierda y vomito. ¿Qué carajos pasó ayer? Ah, es verdad, ayer celebré con la banda por nuestro reciente éxito. Parece que por fin esos bastardos apreciaron nuestro talento, al fin podremos firmar con una de esas grandes compañías discográficas y seguir alimentando a los cerdos que tienen por jefes.

Pero tal parece que todo se salió de control ayer, ni siquiera recuerdo cómo llegué a casa pero doy gracias a que estoy completo.

Ayer bebí como desquiciado. Canté como en mis conciertos de abril: hasta morir. Poseído. Envenenado de adrenalina, y en mi cabeza una locura suave, las venas de mis muñecas vibraban con la música y la batería.

Ahora que lo recuerdo… Ayer eché a Galliard de la banda, menudo cretino presuntuoso, ¿Fue por eso que lo eché, o fue porque lo descubrí tirándose a una de mis putas favoritas? Lástima, pensé que ese niño bonito me tenía algo de fidelidad pero veo que no le importó abrir las piernas a ese bastardo. No importa la razón. Su actitud me tenía harto, tratando de imponerse a mis reglas, a mí. Burda imitación mía, basura.

Pero esa orgullosa decisión me deja sin guitarrista ahora. Maldición Levi, ¿dónde encontrarás un buen guitarrista ahora?, cualquier aficionado no me serviría, no, tiene que ser bueno, el mejor.

Carajo. La peor sensación después de ponerte ebrio hasta vomitar son los estragos del día siguiente, la puta cabeza me explotará si no tomo un par de aspirinas pronto. Las migrañas son lo peor.

En fin, nada puedo hacer ahora, prefiero quedarme sin guitarrista a tenerlo de nuevo en la banda.

Me levanté por fin, dado que el sol quiere quemarme los ojos.

Fui directo a la cocina por un vaso de agua, hasta ahora me doy cuenta que llevo puesta la misma ropa de ayer, ni siquiera me quité los pantalones de cuero y las correas. Estoy seguro que estas manchas son culpa de esa desquiciada cuatro ojos. Qué repulsivo, solo sé que necesitaré un baño pronto, hace mucho que no bebía de este modo. Ja, si claro, sola ha pasado una semana desde mi última borrachera.

Regresé a mi recámara después de sentir los fármacos bajando lentamente por mi garganta con ayuda del agua. Ya en la cama, me desnudé lentamente; adiós musculosa de cuero, es un milagro que haya despertado vivo y no asfixiado con esto puesto toda la noche, tampoco sé cómo me puse estos pantalones. Pero no me quejo, ya es costumbre disfrazarme, pintarme de negro es mi máscara favorita. Por eso nunca puede faltar Paint in black [3] en mi ritual antes de cualquier concierto. Es como el ritual de Till Lindemann [4] de tirar pirotecnia o prenderse en llamas.

Es mi sello personal.

Arriba en el escenario soy otra persona. Tomando el micrófono en mis manos y escuchando la guitarra eléctrica en mis oídos me convierto en Levi Ackerman, el vocalista de Paradis [5], la mejor banda de rock alternativo de esta jodida ciudad.

Espero que se retuerzan en sus tumbas aquellas personas que dijeron que nunca lo lograría o aquellos que siempre me dieron la espalda.

Después de años pisando el lodo, hoy puedo pisar los lagos de oro en la cima.

Luego de ducharme meticulosamente y quitarme ese horrendo olor, procedí a salir con una toalla amarrada en la cintura en dirección a mi armario. El color de hoy (y el de siempre) será el color negro. Jeans negros y una camiseta del mismo color, quizá mis botas cafés oscuro, mis cadenas y anillos.

La ironía en mi vestimenta es mi chiste privado. Me gusta que todo mi guardarropa sea del mismo color, puesto que soy el amo de la noche. Pero no porque sea un metalero en potencia, porque contrario a lo que muchos creen, muchas de las bandas y vocalistas visten común y corriente y de todos los colores; solo miren a Danny Worsnop [6] o a Andy Black [7], no hay contradicción más obvia.

Para mí tiene muchas ventajas vestir de luto, mis piercings en las orejas y en el labio, y todos los tatuajes de mi cuerpo cambian radicalmente mi imagen fuera de mi disfraz de noche.

Como ahora, que he salido de casa para comprar una cajetilla de cigarros y quizá el desayuno de hoy.

Mentiría si no confieso que me regocijo en la mirada que me da mi estúpida sociedad. Niños, mujeres, ancianos... Todos me miran de manera horrenda, como si yo fuera una especie de fenómeno, pero yo sé que ese rechazo es el producto de la ignorancia, el miedo a lo diferente, a lo agresivo y quizá hasta lo superior. La gente pendeja me da más oportunidad de demostrar cuanta mierda tienen en la cabeza. Llenos de esos prejuicios idiotas, conservadores de mierda, nos ha arrebatado la libertad.

Pero no es tan malo. La imagen de mi propia raza oscura expresa ese concepto peligroso y fuerte, radical. Y es verdad que mi música está hecha para gritar rebelión, caos, ruptura y poder.

Por eso solo crece mi superioridad ante la mirada de toda esta gente.

—¿Qué mierda estás viendo? —suelto amenazante al del mostrador que se ha quedado mirando mis aretes; lo observó con la única mirada que he tenido toda la vida, la que muestra que me dolió nacer.

Que ese gesto se hunda en las otras miradas, la que dice que puedo partirles la cara en cualquier momento.

El sujeto retrocede sobre sus pies y baja la mirada, así me gusta. Me gusta este nuevo poder, el poder de la libertad.

No me gusta que nadie me juzgue por comprar una cajetilla de cigarros y un litro de leche.

Apenas salí de la tienda "veinticuatro horas", encendí enseguida un cigarro. Aspiré ansiosamente esa nicotina y en segundos sentí que mis pulmones se incendiaban, esa sensación de consumirse por dentro es inigualable.

"Living a life of misery, always there, just underneath…"

(Viviendo una vida de miseria, Siempre ahí, solo que escondida)

Sonó el tema de llamada de mi teléfono, es un buen tema de BVB [8], me hace recordar cuán feliz debo ser siempre, a mi manera claro.

—¿Qué quieres? —espeté, al saber quién estaba del otro lado.

—Amanecimos de malas, amargado —contestó, sin ningún otro tono que el de la burla.

—Estoy a nada de mandarte al carajo.

—Antes de que lo hagas… Levi, ¿perdiste el juicio? !¿Echaste a Pocco de la banda?¡

—Sí. Qué con eso.

—¿"Qué con eso"?, nos dejaste sin guitarrista ¡estúpido!, ¿y ahora qué haremos?

—¿No puede Mike suplir ese problema?

—No tiene cuatro brazos Levi. Mike solo toca el bajo.

—Ya lo resolveré.

—¿Ah sí, y cómo?

—Mierda, no lo sé, deja de joderme tan temprano.

—¡Aggh no puedo creerlo! Estamos a nada de firmar un contrato.

—Ya lo sé.

—Jodido bastardo orgulloso, si no lo resuelves, llamaré a Pocco de nuevo así tengas que atragantarte con una disculpa.

—Estas de coña, ni muerto vuelvo a aceptar a ese idiota.

—Eres imposible Levi.

—Lo que digas. Yo sigo siendo el líder.

Y acto seguido le corté la llamada. Si, tengo un humor de mierda y quizá sea un cretino orgulloso, más por la mañana, cuando la voz ruidosa de Hange me aturde los oídos. No necesito recordar lo que ya sé.

Pero de una cosa estoy seguro, yo no vuelvo a verle la cara a Galliard.


Notas del Capítulo:

[1] Here i am canción de Asking Alexandria. Es la canción que resume la vida de Levi.

[2] The eye of the storm, canción solo de la banda Disturbed

[3] Paint in black de The Rolling Stones

[4] Till Lindenmann, vocalista de Rammstein. Una de las cosas que no puede faltar en sus presentaciones o conciertos son prenderse fuego en una chaqueta mientras levanta los brazos, o lanzar fuego con un lanzallamas.

[5] Paradis. Para este fic, la banda de Levi es Three Days Grace, solo he reemplazado el nombre. Los géneros de esta banda son el rock, el hard rock y el nu metal.

[6] Danny Worsnop vocalista de Asking Alexandria.

[7] Andy Black vocalista de Black Veil Brides.

[8] Goodbye Agony, canción de Black Veil Brides


N/A: No saben como me gustó escribir esto, espero les guste también, déjenme saber todas sus impresiones de esta oscura historia.

Dejé todas las referencias por si alguien le interesa ir a buscarlas.

Nos leemos muy muy pronto con este fic.

Besos.