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BROTE DE CEREZO
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Capítulo 7
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Rápidamente el enmascarado chocó su aguja contra el kunai de Sasuke. Ambas armas generaron un temblor que envió distintas vibraciones a sus portadores. Sasuke no estaba dispuesto a dejarse vencer y Haku, no tenía la intención de irse de ahí sin Zabuza. La velocidad de Haku aumentó progresivamente y su sorpresa también, puesto que el Uchiha era capaz de seguir cada uno de sus movimientos sin una pizca de desgaste.
El enmascarado por otro lado, si bien estaba peleando con todas sus fuerzas con el niño, tenía una prioridad que guiaba todos sus pensamientos. Lamentablemente se le hizo más que molesto encontrar poco más de veinte clones resguardando el lugar donde Sakura aplicaba primeros auxilios a su maestro. ¿Qué debía hacer con ellos?
—No quiero matarte —le dijo Haku sin dejar de ejercer fuerza en su aguja—. Pero no retrocederás, ¿verdad?
—No seas imbécil —el Uchiha soltó una sonrisa burlona al escucharlo. Las palabras de su contrincante habían sonado demasiado graciosas para él.
—Ya veo… pero no serás capaz de seguir mi velocidad la próxima vez. Además, ya he ganado dos ventajas.
—¿Dos ventajas?
Ante las palabras de Haku, rápidamente Sakura miró alrededor y soltó una maldición. Dado la pelea anterior de Kakashi y Zabuza, la mayor parte de la zona estaba mojada. Los jutsus de agua habían creado pequeños pozos sobre la tierra que ella sabía que sería bastante bien aprovechados por el enmascarado. No podía permitir que se saliera con la suya, sin embargo, ella no sabía ningún jutsu de fuego ni tampoco Naruto.
—La primera ventaja es el agua en el suelo y la segunda es que he bloqueado uno de tus brazos. Ahora solo serás capaz de huir de mis ataques.
Por el momento y por lo que efectivamente había dicho Haku, Sasuke tampoco era capaz de ejecutar alguna de sus técnicas. Fue entonces que empezó a notar a su enemigo ejecutar varios sellos con una sola de sus manos dejando sorprendidos a todos los presentes. ¡Por supuesto! Sakura lo había olvidado por completo. Haku podía ser capaz de pelear de esa manera y eso le daba una gran ventaja sobre ellos que solo eran gennins y solo podían ejecutar ninjutsu con sellos creados por sus dos manos.
—Jutsu Especial: Agujas voladoras de agua.
Fue entonces que Haku pisó el suelo con fuerza y de uno de los charcos de agua cercanos, se dispararon varias agujas de agua en dirección al Uchiha que debido a que su mano estaba atrapada defendiéndose de la aguja del enemigo, se vio incapaz de moverse. Sin embargo, por más que vio las agujas volar en su dirección, no sintió el característico dolor en su cuerpo que le indicarían que había sido herido. Por el contrario, seguía ileso.
—¿Cómo? —sus dudas fueron fácilmente resueltas al mirar hacia abajo. Una pequeña pared de tierra lo había protegido del ataque y al mirar hacia el costado. A la lejanía notó a Sakura con las manos en la tierra. Estaba jadeando por el esfuerzo. La técnica que había usado era Doton: Doryūheki que era una técnica muy básica de elemento tierra.
Sakura miro hacia arriba y chocó su vista con la de su compañero. Ella realmente se veía cansada luego de haber ejecutado una técnica tan simple como esa.
—Acábalo —dijo ella en un susurro que fue completamente audible para Naruto y perfectamente comprensible para Sasuke. El pelinegro volvió a poner una sonrisa llena de burla y regresando su mirada hacia Haku, impulso su cuerpo lo suficiente como para hacer al enemigo retroceder. Mientras Haku retrocedió, lo último que vio fue el rostro del Uchiha desvanecerse en el aire.
—¡Desapareció!
Tuvo que seguir retrocediendo porque varias estrellas empezaron a aterrizar cerca de él. Eso quería decir que el Uchiha estaba en el cielo, sin embargo, al esquivar tampoco podía darse el lujo de buscarlo por ahora. Todo estaba pasando demasiado rápido. Cuando finalmente Haku se detuvo y empezó a buscar al niño, un largo escalofrío le recorrió la espina dorsal al sentir una fuerte presencia detrás suyo que apuntaba un kunai hacia su cuello.
—Eres bastante lento —dijo el pelinegro sin quitar la sonrisa de su rostro—. A partir de ahora solo serás capaz de huir de mis ataques.
Luego de eso Sasuke estiró sus dos brazos hacia atrás para que su kunai pudiera rasgar la garganta del reciente enemigo, sin embargo, Haku fue lo suficientemente rápido como para voltear la mitad de su cuerpo y bloquear el ataque. Sasuke se reservó un gruñido y sin quitarle los ojos de encima, simplemente soltó el kunai en dirección a la máscara de su enemigo. Con una velocidad que podía dejar mareado a Naruto, Haku se agachó solo para ser recibido por una patada del Uchiha que lo mando volando en dirección a un árbol cercano.
—¡Eso es, Sasuke!
Con una pequeña sonrisa y en silencio, Sakura volteó para seguir tratando a su maestro y esta vez un poco más tranquila. La cantidad de chakra de la peli rosa no era ilimitada como la de Naruto, por el contrario, era muy pequeña y considerando que ahora mismo estaba guardando chakra para el Byakugou, sus reservas habían disminuido considerablemente. Todo el estrés que había acarreado hasta el momento estaba pasando factura y aunque la técnica de tierra que había usado antes no necesitará mucho de ella, con lo poco que tenía, su reserva casi había menguado por completo.
Ya no podía seguir curando a su maestro con ninjutsu médico, solo con medicina convencional.
—Todavía no soy buena en esto —dijo Sakura extrayendo algunas agujas de su bolsa práctica. Durante su época había estudiado la acupuntura y como tal la había practicado en distintos pacientes. Sin embargo, la acupuntura requería no solo maestría en conocimientos sino también una mano firme y experimentada que la ayudara con su propósito. Ahora mismo solo tenía el conocimiento pues su mano de doce años temblaba demasiado, no era capaz de controlarse a sí misma y eso era una debilidad que debía arreglar cuanto antes—. Pero debe confiar en mí.
Kakashi estaba consciente pero lo suficientemente cansado como para no ser capaz de moverse. Al ver las agujas, tampoco pudo mostrar algo en su rostro, pero, aunque frente a él hubiera una gennin inexperta apuntando agujas a su cuello, no desconfió. Sakura era madura para su edad, era responsable y estaba abierta a todas las posibilidades, alguien como ella no le haría daño. Kakashi confiaba en ella por completo.
Así que mientras Haku se levantaba del árbol para seguir su pelea con Sasuke, Sakura introdujo la primera aguja en un punto del cuello de su maestro. La segunda aguja fue cerca de su manzana de Adán y la tercera exactamente al lado contrario de la primera aguja. Aunque solo habían sido tres, ella sintió tanto temor de hacerlo mal que pensó que había vuelto a tener dieciséis y estaba a punto de enfrentarse directamente a uno de los puños de su maestra Tsunade.
La sola idea la aterraba.
Ella dejó las agujas ahí y miró hacia la pelea. Sasuke era lo suficientemente veloz como para repeler muchos ataques de Haku y el enmascarado se veía cada vez más estresado por ello. Solo sería cuestión de tiempo hasta que usará su técnica especial de espejos y todos debían estar preparados para ello. Sin embargo, a pesar de que la incertidumbre la estuviera embargando, Sakura se sintió segura viendo la espalda de Naruto. Si, ella podía y debía confiar en que sus compañeros eran más que capaces de proteger a su maestro y a ella en esos momentos.
De no creerlo, Sakura hubiera dejado que Haku se llevará a Zabuza y eso no había sucedido.
Finalmente, Haku hizo un sello que no había hecho hasta ahora—Jutsu Especial: Espejos demoniacos de hielo.
De pronto, toda el agua que se había formado como pozos en la tierra, se reunió para encerrar al Uchiha en diferentes espejos que no dejaban ninguna apertura para escapar. Incluso, Sakura notó que estaba tomando agua del lago y de la humedad del ambiente. Era un jutsu demasiado poderoso que podía ser útil si es que Haku fuera de Konoha… de alguna manera era entendible porque Naruto había respetado tanto a Haku y de paso a Zabuza, aunque estos hubieran sido sus enemigos en esta misión.
Ante la sorpresa de Sasuke, Haku se introdujo en uno de los espejos de hielo y de pronto su imagen se empezó a formar en los demás espejos que encerraban al gennin. Este frunció el ceño con extrañeza al notar que no podía escapar y que además era imposible reconocer cual de todas las imágenes era el enemigo real. Realmente había sido atrapado en algo molesto…
—¿Qué son estos espejos? —susurró el Uchiha mirando a su alrededor con cautela.
—Entonces, ¿debería empezar? —sugirió Haku para entonces tomar una aguja larga en su mano y empezar aquel ataque endemoniado que Sakura tan bien recordaba de la línea original. La peli rosa tuvo que regresar su mirada a su maestro al ver que no era capaz de seguir mirando la pelea. Haku estaba atacando a Sasuke desde todas las direcciones. Como un espejismo que seguía repitiendo con velocidad, seguía creando cortes y heridas superficiales sobre el cuerpo del Uchiha, de tal forma que este no podía definir con claridad lo que estaba sucediendo.
—Saku-
La niña rápidamente retiró las agujas de la garganta de su maestro y este pudo tragar con mayor facilidad—Puse agujas en los puntos del habla y la vocalización. Debido al cansancio, su garganta estaba adolorida, así que con este tratamiento debería ser capaz de hablar un poco hasta que su cuerpo no soporte más seguir consciente.
—¿Qué ocurre con… Sasuke?
Suavemente, la niña levantó la cabeza de su maestro para que este pudiera ver lo que sucedía.
—¿Qué es ese jutsu?
—Parece una especie de espejos creados a partir del agua, pero lo más impactante es la capacidad del enemigo de introducirse en ellos y crear copias falsas de su imagen para engañar a la visión de Sasuke-kun.
—Debo de… —poco a poco, Kakashi intentó levantarse. Ver a Sasuke ser herido de esa manera le estaba doliendo, su pequeño y oscuro alumno podía llegar a morir si esto seguía así y no había forma en el mundo que Kakashi permitiera que eso pasará, no cuando él estuviera presente. Ningún compañero suyo volvería a morir frente a él, no lo permitiría.
—No puede hacer eso, Kakashi-sensei —sin darle tiempo, Sakura volvió a acostarlo sobre el pasto—. Nosotros nos encargaremos, solo confíe y descanse.
Kakashi se aferró a la mano de su alumna antes de que la consciencia que tanto había tratado de alargar estuviera a punto de desvanecerse—Manténgase a salvo…
—Lo haremos, aunque tengamos que huir, le prometo que no moriremos —sabiendo que esas eran las palabras que Kakashi quería oír, sintió como el hombre finalmente cayó inconsciente por el cansancio entre sus brazos. Por supuesto, Sakura mantendría su promesa, ella tampoco quería morir ni tampoco que sus compañeros lo hagan así que ella haría todo lo que estuviera en su poder para sobrevivir… y ganar.
¡No estaba dispuesta a rendirse ahora!
Con un ceño fruncido, se levantó del suelo y acomodó a su maestro junto a Zabuza, el cual por suerte aun no estaba despierto. Luego caminó cerca de Naruto viendo lo mismo que su compañero: como Haku había encerrado a Sasuke y estaba atacándolo sin discreción.
—Naruto, lo que ahora necesitamos es fuerza, una tonta fuerza capaz de derribar esos espejos —ella lo vio por unos segundos. La última vez, Naruto con el manto del Kyuubi había sido quien había destrozado los espejos de hielo. Sin embargo había sido debido a una situación muy específica y esta era el hecho de encontrar a Sasuke al borde de la muerte; y ella esperaba, francamente, que esa situación no pasará—. Yo puedo romperla. Pero necesito una cantidad ridícula de chakra para eso… tú por otro lado…
Ella miró hacia su compañero mientras el rubio le devolvía la mirada con preocupación y ciertos retazos de desesperación. Sakura casi quiso sonreír con dulzura, Naruto era incapaz de esconder sus emociones… siempre había sido así y siempre lo seria. Verlo así de preocupado por Sasuke le infundió valor.
—Necesito que me des tu chakra, al menos el suficiente para poder ejecutar mi técnica.
—¿Realmente podrás romper los espejos? —Naruto lo preguntaba porque desde su lado ya había intentado de todo para romperlo. Además, que Sasuke ya había ejecutado varias técnicas de fuego desde el interior que habían sido completamente inútiles. ¿Realmente ella podría hacerlo?
Con una sonrisa de confianza, ella asintió y tomo las manos de Naruto entre las suyas—Confía en mí.
Naruto asintió y mirando hacia sus manos unidas, hizo que su chakra avanzará lentamente desde su cuerpo hacia Sakura. La explosión de energía que la peli rosa sintió que la recorría fue cálida y agradable. El cansancio que había sentido hasta hace, solo unos pocos minutos, estaba menguando poco a poco y la fuerza que había perdido volvía a ella de forma renovada. La confianza que Naruto estaba depositando en ella la hizo sentirse útil y poderosa, eso era lo único que necesitaba para acabar con todo esto.
—Después de esto, tenemos que ir a por un ramen.
Naruto ejecuto una sonrisa débil al escucharla—¡Realmente debemos!
Cuando Sakura finalmente se sintió capaz, soltó las manos de su compañero y acomodando sus guantes, corrió hacia donde estaban los espejos. Naruto la vio irse y pidió en su interior que ella fuera capaz de ayudar a Sasuke. Él realmente deseaba que los cuatro salieran ilesos de la misión y fueran capaces de pedir ese ramen en Ichiraku. De todas formas, con la cantidad inmensurable de chakra que le quedaba hizo que veinte clones más corrieran detrás de Sakura para protegerla.
Sasuke, aun desde su posición pudo ver a la chica correr hacia ellos y abrió los ojos con sorpresa y enojo.
—¡No vengas hacia acá! ¡Es inútil! —Naruto ya lo había intentado todo desde afuera y él también, desde adentro. ¡Era imposible que ella pudiera hacer algo distinto ahora!
—¡Aléjate, Sasuke-kun! —replicó ella mientras corría y levantaba su puño infundido en chakra. Era bastante probable que el chakra obtenido de Naruto fuera a ser gastado por completo en este único golpe. No tenia una sola idea de cuan duro eran estos espejos de hielo, así que no podía escatimar sus recursos. Debía ir y golpear con todo lo que tenía, ¡era todo o nada! Tomando una gran respiración, aterrizo sus nudillos contra el espejo del hielo.
El dolor la hizo mostrar una mueca. ¡Era casi tan duro como el metal! Su mano se resintió por el choque, pero rápidamente sus ojos brillaron al notar que el espejo se rompía en pequeños fragmentos que cayeron al suelo en cámara lenta.
Haku no cabía en su sorpresa, Sasuke tampoco, pero al menos el Uchiha fue lo suficientemente astuto como para recuperar su razón y correr hacia su compañera quien parecía estar a punto de desvanecerse por el repentino esfuerzo. Con rapidez, la tomó en brazos y corrió hacia Naruto, quien no tardo en mandar mas clones para entretener a Haku.
—Creo que puse mas chakra del que debí haber puesto —ella sonrió nerviosamente mientras dejaba que su compañero la sentará cerca de Kakashi. Se sentía bastante débil luego de haber soltado todo de un solo golpe. Casi era como un golpe de calor… ella definitivamente se recompondría con el paso del tiempo, no era nada grave ni nada preocupante.
—¿Cómo pudiste romper eso? El jutsu de fuego no le hizo ningún rasguño —se quejó Sasuke sintiéndose como un perfecto inútil.
—Bueno… se necesitaba fuerza para romper eso. Así que le pedí a Naruto que me diera su chakra… solo infundí mi puño con él y ataque hacia el hielo del enemigo. Mh, supongo que no medí bien la cantidad que usé porque luego del impacto me sentí mareada por unos instantes.
Eso no le hubiera pasado si hubiera tenido mas práctica y experiencia, realmente le hacían falta esos tres años de entrenamiento con Tsunade. Aunque estuviera aterrada de ella la mayor parte del tiempo, había aprendido muchísimo bajo su tutela y, sobre todo, había conseguido invocar a las babosas por su maestra. Iba a tener que estar bajo su ala nuevamente si quería conseguir sus invocaciones.
—Pero tu-
—¡Ahora no es el momento, Sasuke! —replico Naruto desde una posición no tan alejada de ellos, tenia las manos juntas para crear mas clones, porque todos los que enviaba hacia Haku seguían explotando nada más llegar a su rango de visión. A este paso, no iba a poder contenerlo más. Con decisión, Sasuke se levantó y rápidamente saco un kunai de su bolsa práctica, esta vez no se iría con rodeos, iba a derrotar a Haku de una vez por todas.
—Ayúdalo con todo lo que puedas, Naruto —pidió Sakura tratando de acomodarse en el suelo. La técnica de los espejos de hielo debería demandar mucho chakra, era básicamente imposible que Haku pudiera ejecutar la misma técnica sin haberse tomado un momento de descanso. Realmente era ahora o nunca. Esta vez, ya no era necesario que Naruto mantuviera su cuerpo real alejado de Haku.
El rubio, luego de escuchar las palabras de su compañera, mostro una gran sonrisa de satisfacción y tomando un kunai, corrió hacia Haku para ayudar a Sasuke. La niña noto casi de inmediato que Naruto había estado haciendo un gran esfuerzo por contenerse y no correr hacia donde se estaba desarrollando la pelea, su vitalidad exudaba fuego y pasión. Era increíble verlo sonreír solo por el hecho de tener permiso para unirse a la pelea.
Sakura, con mucha confianza, dejo de verlos para notar a su maestro. Ya había hecho todo lo que había podido hacer para él, lo único que debía hacer ahora era dejarlo reposar y mas pronto que tarde, recuperaría su energía perdida. Por otro lado… estaba el cuerpo de Zabuza inconsciente junto al del peliblanco. ¿Qué harían con ese hombre? Llevarlo a las autoridades era una idea plausible, tal vez encerrarlo en un pergamino seria lo mas optimo hasta llegar a Konoha. De esa forma, no escaparía. Ella tenía muchas ideas, pero debía hablarlo, en principio, con el jounnin a cargo del grupo, y ese era Kakashi.
Encontrándose con una encrucijada, devolvió su mirada hacia sus pequeños compañeros peleando contra Haku. Sasuke era muy ágil y flexible, un genio como pocos que nació de uno entre miles, un superdotado que en el futuro seria una leyenda oscura en Konoha. Desde ya tenia las habilidades suficientes como para enfrentarse al enemigo, y Naruto… podía ser muy torpe con muchas cosas, pero sabia moverse y nadie podría quitarle esa habilidad.
Naruto había nacido con la frase "trabajo en equipo" tatuada en su frente. Por ende, sabía perfectamente como coordinarse, de forma extraordinaria, con Sasuke. No era un estorbo, ni tampoco hacia que sus clones lo molestaran cuando peleaba de cerca, ni siquiera su cuerpo real atacaba cuando Sasuke chocaba su kunai contra Haku. Naruto esperaba con parsimonia su momento para brillar y cuando lo hacía, le daba a Sasuke el suficiente tiempo y espacio para respirar y volver a la carga con la energía medianamente recuperada. Era como bailar… al son de una melodía que Sakura no podía escuchar… pero podía disfrutar plenamente con solo mirarlos.
Haku estaba lo siguiente de cansado y distraído. Un ojo lo tenía atento a Sasuke y Naruto, y otro ojo estaba pendiente del cuerpo inconsciente de Zabuza. No tenía corazón ni cabeza para concentrarse en la pelea y eso era una desventaja que Sakura tenía toda la intención de aprovechar. Recordando que Haku era un sirviente especialmente leal a Zabuza, ella saco un kunai de su bolsa practica y se arrastró poco a poco al cuerpo de Zabuza.
Haku, por supuesto, lo vio todo y supo que iba a enloquecer.
Cuando Sakura llego al lado de Zabuza, estiro el kunai hacia arriba justo donde estaba el cuello del mayor y sin mas miramientos, bajo la mano rápidamente para clavárselo al inconsciente. Haku, por la distracción y por el movimiento que intento hacer para correr a salvar a Zabuza, no notó el golpe de Sasuke en sus entrañas. Sasuke era alguien muy astuto, no había forma de que desaprovechará la oportunidad que Sakura les había regalado al crear una distracción para Haku.
Por supuesto, Zabuza no estaba muerto, la niña se había detenido a pocos milímetros de acertar un golpe mortal con su kunai. Haku, por otro lado, sintió dos fuertes emociones mientras caía al piso por el dolor, el alivio por ver a su salvador vivo… y la frustración por perder antes unos simples mocosos recién salidos de la academia ninja.
Lamentablemente no pudo disfrutar de esas emociones mas tiempo pues Sasuke se aseguró de dejarlo inconsciente con un golpe tras su nuca, tan pronto como pudo.
—L-Lo logramos… —Naruto se dejo caer al suelo con un suspiro de alivio. Se sentía cansado como si hubiera corrido toda una maratón… era devastador. Pero reconfortante de alguna manera.
—Si, lo logramos —concedió Sakura con una sonrisa mientras se levantaba del suelo lentamente. Aun se sentía algo débil, pero estaba lo suficientemente bien como para caminar—. Hay que movilizarnos cuanto antes, primero liberemos a Tazuna de la trampa y luego vayamos a un lugar seguro.
El tiempo después de eso avanzó rápidamente. Tazuna cargo con el cuerpo de Kakashi todo el trayecto, Naruto cargo con Haku y Sakura, luego de un merecido descanso y respiro, pudo arrastrar a su hombro el pesado cuerpo de Zabuza. Nadie opino sobre porque una niña tan pequeña llevaba en el hombro a un sujeto que le doblaba la altura y el peso, de hecho, fue como un mudo acuerdo que los hombres decidieron pactar para nunca hablarlo o mencionarlo.
Llegaron a la aldea de Tazuna mas pronto que tarde y luego de cenar, fue momento de echarse a dormir. Poco después Kakashi abrió los ojos. Primero se sintió asustado y desconcertado por el techo sobre él, y cuando los recuerdos lo golpearon de pronto, se sintió angustiado por no ver a sus alumnos en su rango de visión. Sin embargo, cuando quiso levantarse sintió un peso que no era perteneciente a su cuerpo. Tres pequeñas cabezas retozaban sobre él en una postura somnolienta. Sakura había usado su brazo derecho de almohada y estaba acurrucada como un bebe a su pecho. Naruto tenia sus puntiagudos cabellos en el estomago de su maestro y agazapado como un gato, sostenía las ropas de Kakashi en su puño apretado. Sasuke, por otro lado, se había adueñado del hombro izquierdo de su maestro, el cual usaba de almohada para dormir. Y aunque no estuviera acurrucado a él como Naruto y Sakura, era mucho decir viniendo de su oscuro y solitario alumno.
La calidez que emanaba de sus pequeños cuerpecitos hizo que Kakashi cerrará nuevamente los ojos con alivio. Probablemente sus miembros superiores se entumecerían de forma agresiva más tarde, pero… valía estar así mientras siguiera sintiendo sus presencias respirando y moviéndose. Él acompasó su respiración y en presencia de la luna colándose por la ventana, nuevamente se quedo dormido.
Estaban vivos… no necesitaba mayor explicación visual que esa. Eso era todo lo que quería ver.
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Review?
