Naruto respiró hondo y se concentró, por lo que sabía, su rival era una kunoichi especializada en ataques de viento a larga distancia, siempre usaba su abanico para ello, no sabía si podría hacerlo sin su arma, además de que solo apuntaba en una dirección, quería ver cómo se desarrollaba si la atacaban desde diferentes frentes.
Hizo su sello de manos favorito, la técnica que su padrino le había enseñado pensando que era perfecta para él, y ciertamente lo era, sobre todo con sus inmensas reservas de chacra. Al instante, 25 clones de sombra aparecieron justo detrás de él, sorprendiendo a todas las personas del estadio.
No necesitó decir nada para que sus clones se pusieran en posición en cuestión de segundos. Para cuando Temari quiso reaccionar, ya estaba rodeada.
Todos hicieron el jutsu de balas de aire apuntando hacia la rubia, la cual preparó su abanico e hizo una vuelta para bloquear el ataque y disipar los clones. Su contraataque solo funcionó a medias, debido a que nunca intentó esa técnica haciendo una vuelta completa, varias balas de aire le hicieron algunos cortes y quedaron algunos clones en pie.
No sabía cuál era el real, y si no quería ser atrapada de nuevo, debía eliminarlo cuanto antes, por lo que pegó un salto hacia atrás, a la parte donde no había clones, y empleó otro ataque contra todos los que quedaban.
Todos desaparecieron en bocanadas de humo, no había rastro del original. Empezó a mirar frenéticamente a todos lados, no podía haber desaparecido. La gente en las gradas también buscaban con la mirada cualquier indicio de donde podría estar el ojiazul, pero no había nada.
De un momento a otro, del suelo aparecieron dos manos que tiraron de ella hacia la tierra, al mismo tiempo, una piedra cercana a ella se convirtió en su rival y le arrebató el abanico. En cuestión de segundos estaba enterrada hasta la cabeza, desarmada, y con dos Menma delante suyo.
-Jutsu terrestre, decapitación - anunció Naruto con una sonrisa triunfante - si fuera tú, me rendiría, estás indefensa a un ataque - le dijo mientras hacía desaparecer a su clon.
Temari intentó forcejear y salir de la tierra, pero resultó imposible. Resignada, se rindió.
-Temari de la arena se ha rendido, el ganador es Menma Otakaru - anunció Gemma.
Toda la gente empezó a gritar y aplaudir, pero nadie estaba más contenta que Tenten, su amigo la había vengado, había derrotado a la rubia de una forma algo humillante, debía darle las gracias cuando todo terminara.
El siguiente combate era Sasuke Uchiha contra Gaara de la arena, pero como el primero no había llegado, el Kazekage convenció al hokage para que le diera más tiempo, así que prosiguieron con el siguiente enfrentamiento: Kankuro contra Shino Aburame.
El miembro de Suna se retiró antes si quiera de empezar la pelea, por lo que pasaron al combate entre Shikamaru Nara y Hanako Takiuri.
Hinata sabía que debía ser cuidadosa, el clan Nara se destacaba por su inteligencia y sus técnicas de sombra, tal como demostró en su combate contra la genin del sonido, no debía permitir bajo ningún concepto que su sombra la atrapara, ese sería su fin.
Nada más dar la señal de empezar, la chica dio un salto hacia atrás para ganar distancia, sacó tres kunais y se los lanzó a gran velocidad. El chico apenas tuvo tiempo de esquivar los proyectiles cuando tuvo que esquivar las múltiples lanzas de piedra que salían del suelo. Su forma física no era tan buena, por lo que no pudo esquivarlos todos y se llevó varios cortes y heridas, algunas superficiales, otras no tanto.
Cuando pensó que por fin tendría un minuto para descansar y pensar una estrategia, le pasó lo mismo que a Temari, se encontró siendo aprisionado en el suelo hasta la cabeza, y su contrincante delante suyo y con una sonrisa.
-Lamento si fui muy dura contigo, pero conozco perfectamente la inteligencia y jutsus de tu clan, no quería darte la oportunidad de que pensaras en algo y me atraparas con tu sombra - se disculpó - ahora, te pediré por favor que te rindas, no estás en posición de hacerme frente y no quiero lastimarte de más.
El chico suspiró, dijo que todo era problemático y le dijo al instructor que se rendía.
La gente otra vez se puso a gritar y aplaudir, no estaban seguros quiénes eran esos chicos, pero estaba claro que eran muy hábiles e inteligentes. Hiruzen y Jiraiya los veían con orgullo, sabían quiénes eran realmente, y estaban contentos de lo fuertes que se habían hecho, en especial el sanin, esos tres no dejaban de ser sus estudiantes.
Antes de que Gemma pudiera anunciar el partido entre Hanako y Haruki, se formó un torbellino de hojas en el centro de la arena y aparecieron Kakashi y Sasuke.
-Perdón, ¿llegamos tarde? - preguntó inocentemente el jonin de cabello plateado, a lo cual el otro jonin rodó los ojos.
Con el permiso del hokage, el combate entre Sasuke y Gaara dio inicio, así la chica tendría un tiempo para descansar de su enfrentamiento anterior. La pelea entre esos dos fue como el canon, hasta que las plumas descendieron sobre la gente y el jinchuriki se fue perseguido por el Uchiha.
-¿Qué hacemos? - preguntó Hinata, los tres habían disipado el genjutsu antes de que los mandara a dormir.
-No lo sé, deberíamos preguntárselo a ero-senin - respondió Naruto.
-Sí, será lo mejor - afirmó Neji.
Disimuladamente, y con la ayuda del caos que se estaba montando, los Hyuga pudieron usar su byakugan y localizar a su sensei. Al estar frente a él, pudieron apreciar que el hokage y otro individuo que nunca antes habían visto estaban peleando dentro de una barrera morada.
-Jiraiya sensei - llamó el ojiazul, haciendo que el sanin se diera la vuelta.
-Chicos - dijo mirándolos, luego dirigió su mirada hacia su antiguo maestro.
-Jiraiya sensei, ¿qué podemos hacer para ayudar? - siguió insistiendo el chico.
-Id detrás del chico Uchiha y detened al de la arena, si no me equivoco, es un jinchuriki, por lo que el Uchiha necesitará vuestra ayuda - les dijo.
-Pero, ¿tú estarás bien? - cuestionó Hanako.
El peliblanco le sonrió con dulzura.
-Sí, no te preocupes, yo debo averiguar cómo ayudar al hokage, vosotros id tranquilos.
Aunque inseguros, finalmente asintieron y fueron detrás de Sasuke y Gaara.
Por el camino, se encontraron con Shikamaru, el cual sostenía a varios shinobis del sonido con su jutsu de posesión de sombra. Lo ayudaron y siguieron adelante. Al llegar al lugar, pudieron ver a Sakura atrapada por la arena en un árbol y cómo su compañero estaba mirando impotente la gran silueta de Shukaku.
Naruto invocó a Gamabunta y le pidió ayuda para vencer al bijuu, el cual aceptó y se preparó para el combate. Hinata y Neji estaban a sus lados con sus respectivas invocaciones, mientras que Shikamaru y Sasuke intentaban liberar a la chica Haruno.
Con ataques conjuntos, fueron capaces de llegar a la cabeza del Ichibi y hacer despertar al pelirrojo de un cabezazo, cortesía del Uzumaki. Una vez volvió a la normalidad, Gaara tuvo miedo por primera vez en su vida, temía morir, pero se sorprendió cuando no fue así.
Los tres le ayudaron y le hicieron ver sus errores, así que cuando aparecieron sus hermanos unos minutos después con la intención de atacarlos para salvar a su hermanito, se encontraron con que el jinchuriki les dijo con una sonrisa que no pasaba nada, que eran sus amigos y que les agradecía por su preocupación, además de que se disculpó con ellos por su anterior forma de comportarse. Cabe decir que los dos se quedaron en shock al escuchar eso.
Al poco se encontraron con los otros tres genins de Konoha, los dos chicos habían logrado sacar a la pelirosa de la arena y ya estaba consciente, y los nueve volvieron a la aldea. Al llegar, pudieron darse cuenta de que la batalla ya había acabado, los ninja del sonido estaban muertos, la mayoría de los miembros de la arena también, y por desgracia muchos shinobis de la hoja habían caído en la batalla.
Para Naruto fue un duro golpe enterarse de la muerte del hokage, era una figura de abuelo para él, y Jiraiya se disculpó con su ahijado por no haber podido hacer nada, la barrera era impenetrable. El Uzumaki le dijo que no era su culpa, que seguro hizo todo lo que pudo.
Hinata y Neji también se pusieron tristes, no conocían tanto al viejo, pero sabían lo importante que era para su compañero y amigo, además de que era una buena persona. Ellos, junto al equipo Gai y los hermanos de Suna, intentaron animar al chico sin mucho éxito.
Debido a la muerte del Kazekage y la suplantación que hizo Orochimaru del mismo, la aldea de la arena pidió perdón y puso esos hechos como excusa para su forma de actuar, a lo cual Konoha tuvo que aceptar las disculpas y mantener su alianza con Suna.
Se hizo un funeral para mostrar sus respetos a todos los shinobis caídos y al hokage. Gaara, Temari y Kankuro asistieron a dicho evento acompañando a sus ahora amigos de la aldea de las hojas, pero sabían que tendrían que volver a su aldea al día siguiente, los necesitaban allí y era probable que uno de ellos fuera nombrado Kazekage tras la muerte de su padre.
Ese día fue uno de luto, y hasta el cielo mostraba su tristeza, ya que por la mañana durante el evento estuvo nublado, y poco después empezó a llover con fuerza, una tormenta que no cesó hasta la madrugada del día siguiente.
