Capitulo ambientado en el episodio 35 del anime.


En la Era Feudal, Karin se encontraba apoyada en el pozo mientras suspiraba al mismo tiempo que se frotaba las cienes, ya que tuvo que quedarse una semana en su época porque su abuelo tuvo la inteligente idea de mentirles a sus amigas diciéndoles que le habían diagnosticado una enfermedad grave, por lo que, Akane junto a Natsu y Kane la visitaban todos los días.

Obviamente ella había desmentido esa falacia que había dicho su abuelo antes de que empeorara. Sin embargo, tanto Akane y Natsu se habían enojado por las mentiras y la falta de confianza por parte de ella en no decirles la razón por la que había dejado temporalmente la universidad y la razón por la que se encontraba desaparecida por tantos días. Por otro lado, Kane era compresivo e intentaba de ser paciente escuchando sus razones.

Y a pesar de haberse quedado una semana, nunca pudo encontrar una explicación convincente para darle a Akane y Natsu; porque decirles que podía viajar al pasado a través de pozo que hay en su templo parece más una mentira que una verdad.

Luego la situación empeoro cuando volvió al pasado para encontrarse con Kaede y saber que su hermana junto Inuyasha y el resto, hacían días que no volvían a la aldea. Causando que su mente traicionara pensara lo peor.

Karin no lo pensó mucho y decidió en ir a buscarlos, pero Kaede se encontraba dudosa que ella fuera sola a buscar a su hermana e Inuyasha porque no conocía la zona y en los peligros que se podía encontrar. A lo que ella acoto que había sido una excelente niña exploradora y que sabía cómo orientarse para volver a la aldea en caso que no encontrara a Kagome; y Kaede solamente la miro no entiendo lo que había dicho.

«¿Qué tan difícil puede ser estar en la Era Feudal?». Pensó la azabache con sarcasmo.


Luego de dos días de estar deambulado en el pasado en busca de su hermana, Karin se encontraba entrando a una pequeña aldea y a se acercó a una mujer mayor saliendo de su cabaña.

—Disculpe —dijo Karin a la mujer—. ¿Por casualidad en estos días no paso un grupo extraño compuesto por dos chicas, un monje con extraños hábitos y dos seres que parecen que estuvieran haciendo cosplay?

La mujer miro con recelo a la joven frente de ella, ya que hablaba de forma extraña, sus ropas eran raras y tenía desconcertantes ojos azules haciéndole pensar que era un demonio.

—No he visto a ninguna de esas personas que usted describe —respondió la mujer.

«¿Usted? ¿Acaso me veo tan vieja?». Pensó Karin con indignación y luego vio como la mujer mayor se distancia lentamente de ella mientras la miraba con recelo. Por lo que ya asumía lo que estaba pensando.

—No se preocupe, solo soy una sacerdotisa —informo ella.

—¿Sacerdotisa? —La mujer la miro de arriba abajo con incredulidad.

—Err… bueno —vaciló Karin—, soy una aprendiz, aunque no lo parezca.

Antes de que mujer pudiera decir algo, la voz de un hombre se escuchó cerca de ellas.

—¡Vuele aquí, niña!

Tanto Karin como la mujer vieron a una niña adentrándose al bosque y la joven azabache miro con preocupación. La niña estaba descuidad y su kimono rosado con flores estaba sucio.

—Pobre niña —dijo la mujer con lástima.

—¿Qué pasa con esa, niña? —pregunto Karin.

—Hace unos días toda su familia fue asesinaba por unos bandidos y ella lo presenció, después de ese fatídico hecho dejo de hablar —explicó la mujer.

«Teniendo en cuenta que presenció un hecho traumático eso causo su falta del habla que normalmente suele ser temporal. Pobre niña». Pensó la azabache con pena y que sus conocimientos médicos no eran tan avanzados como para ayudarla.

—¿Sabes cómo se llama? —pregunto nuevamente Karin.

—Su nombre es Rin.


«Y solo yo soy capaz de meterme en esta situación». Pensó Karin mientras merodeaba por el bosque en busca de la niña de hace un momento. Luego de haber conversado por un periodo corto con la mujer, había decidido de buscar a Rin.

No sabía que iba a hacer exactamente cuándo encontrara a Rin, pero al descubrir el pasado de la pobre niña; no podía dejarlo pasar y más saber que una niña de la misma edad de Sota no tuviera familia y deambulara sola por bosque. Ella era una presa fácil para el peligro.

En ese momento, Karin escucho un ruido entre los arbustos y rápidamente apunto con su arco y flecha. Entre pasos silenciosos se acercó al arbusto y repentinamente unos ojos marrones la miraron con temor.

La azabache se detuvo abruptamente mientras recalculaba lo que estaba pasando en ese momento. Allí se encontraba ella apuntándole con su arco y flecha a la niña que estaba buscando mientras que esta la miraba temerosa.

«Idiota». Se insultó a si misma a Karin.

—No, no, no —Karin guardo la flecha en su carcaj—, no te asuste. No es a ti a quien apunto.

Rin no se movió de su lugar.

—Tranquila, no voy a hacerte daño —aseguró Karin—. Te llamas, Rin, ¿no? —preguntó viendo como la niña asentía—. Yo me llamo, Karin, un gusto de conocerte, Rin —se presentó mientras extendía su mano esperando que la niña la aceptara.

Rin miro a Karin por varios segundos, inspeccionándola y quedando fascinada por su llamativo color de ojos. Era la primera persona que le había dedicado una sonrisa tan sincera y cálida después de la muerte de su familia; por lo que sujeto la mano de aquella persona sin dudarlo. Repentinamente sus ojos se humedecieron a recordar a su madre que le daba la misma sonrisa que hacia Karin.

«¡Estúpida! La hice llorar». Se escandalizo Karin.


La búsqueda de su hermana se había atrasado en el momento que se quedó por algunos días en aquella aldea cuidando de Rin. No querida dejar a la niña sin cuidado viendo como aquellas personas la trataban de forma despectiva. Asique considero de llevarla a la aldea de Kaede sabiendo que la mujer mayor vivía de una forma solitaria y que tal vez algo de compañía le haría bien.

—No puedo creer que haya perdido a una niña de ocho años —masculló Karin por su irresponsabilidad. Cuando las personas de la aldea supieron que era una "aprendiz a sacerdotisa" comenzaron a recurrir a ella. A veces, Rin, la acompañaba y en esta ocasión le indico que se quedara en el pequeño refugio en la que esta habitaba porque tenía que atender a una aldeana que había entrado en trabajo de parto. Sin embargo, cuando volvió se llevó la sorpresa de que la niña no estaba.

«Ahora que lo pienso, no es la primera que se me pierde un niño. Recuerdo haber olvidado a Sota en un supermercado y hasta el día de hoy mamá no sabe de eso». Pensó ella mientras deambulada por bosque sabiendo que era el lugar preferido de Rin, a su vez, que sostenía su arco y flechas.

—¡Rin! —exclamó Karin esperando que la niña la escuchara—. ¡Rin vuelve! —y dicho eso paso entre medio de unos arbustos encontrándose con una escena para nada encantadora—. ¡Ay Kami, que horrible! —dijo llevándose una mano al corazón encontrándose con un demonio herido, cabellos plateados y ojos rojos mientras mostraba sus dientes filosos, al mismo, tiempo que Rin se encontraba abrazada a un árbol.

«Con esa actitud defensiva se parece a un gato». Pensó la azabache mirando receloso al demonio.

La joven de cabellos azabache al ver que la niña estaba dispuesta acercarse al demonio, corrió hacia ella y la abrazo intentando distraerla.

—El susto que me diste, jovencita, no vueltas a desaparecer así —la regaño ella suavemente a Rin mientras buscaba alguna señal de que estuviera herida. Luego entrecerró los ojos mirando como el demonio las miraba fijamente—. Vámonos, Rin.

«Hay que aprovechar que está manso para huir». Pensó Karin mientras arrastraba a Rin fuera de esa zona donde se encontraba aquel demonio herido.

A mitad del camino, Rin detuvo a Karin haciendo que esta la mirara confusa. La azabache veía como la niña intentaba de hacer señas para comunicarse con ella.

—¿Te siente mal? —pregunto Karin viendo que Rin negaba con la cabeza y volvía hacer señas—. ¿Quieres hacer tus necesidades? —Rin nuevamente negó—. ¿Tienes hambre? —y dicho esto, la niña le sujeto la mano mientras guiaba el camino.

«Tal vez, pueda enseñarle el lenguaje de señas».


¿Y que les pareció? ¿Algún Reviews?

NOTA DE LA AUTORA.

Quiero aclarar que he hecho mis investigaciones con respecto a la personalidad de Sesshomaru porque quiero hacerlo lo mas canon posible y he visto en el anime que Sesshomaru "habla", quiero decir que dice varias oraciones completas; pero lo mas complicado es como lo dice. Las palabras que usa muestran desprecio, frialdad, tranquilidad, soberbia y cuando uno lo lee mucha veces capaz que no se encuentra eso.

En fin y en conclusión, Sesshomaru habla cuando lo considera necesario. Por eso, tal vez en esta historia lo vean algo hablador y tomo como referencia algunas partes del anime donde esta el.

Espero que les guste.

¡Hasta el próximo capitulo!