Capitulo 1: La Cacería Comienza


Hace mucho tiempo, todo el mundo cambio un día, unas misteriosas cartas empezaron a caer del cielo por todo el mundo. Parecían ser inofensivas, así que un grupo de niños inventaron un nuevo juego.

Ese fue el comienzo de todo.

Los Bakugan, seres de otro planeta que llegaron a la Tierra por un accidente científico del profesor Michael, al principio se creían que eran juguetes para la entretención de los humanos, pero un grupo de chicos descubrieron que eran seres vivos y no canicas, y así, una historia comenzó.

Un grupo de valientes jóvenes conocidos como los Peleadores de la Batalla Bakugan se unieron y pelearon por la paz y seguridad de su mundo, y del mundo de los Bakugan, conocido como Vestroia, enfrentando al malvado Bakugan conocido como Naga, y Hall-G, que era una personalidad malvada del Doctor Michael que obtuvo en su accidente.

Luego de eso, muchas mas aventuras tuvieron los peleadores, los miembros de ellos cambiaban en cada aventura, y a veces los viejos compañeros volvían para ayudar, pero había tres jóvenes que siempre estaban y eran los principales peleadores.

El ninja del viento, el científico del agua, y el guerrero del fuego.

Los dos primeros tenían diversos compañeros que se ajustaban a su modo de luchar y a sus personalidades, pero el último siempre tuvo a un solo compañero, quien era el descendiente de uno de los dos Bakugan originales que también fue el creador de su mundo, y que en todas las aventuras, evoluciono para hacerse mas fuerte y enfrentar a las amenazas que tenían adelante.

Todos esos jóvenes y sus compañeros Bakugan eran héroes, y también era símbolos que podían representar que sin importar de que raza o planeta sean, las especies pueden coexistir y ser amigos.

Pero hubo un problema, y es que todas esas aventuras siempre estuvieron ocultas al ojo de la población humana, hasta sus últimas dos aventuras.

Y fue poco después de superar la última amenaza que los peleadores enfrentaron... que empezó la pesadilla.


En una habitación secreta, con las luces apagadas, habían cinco figuras, todos usaban traje negros y algunos medallas militares. Todos eran parte del gobierno de los Estados Unidos, donde el que lideraba la reunión, encendió un equipo de video, mostrando imágenes y grabaciones.

-Hace años, el mundo cambio, solo que nadie se dio cuenta hasta mucho después, y todo empezó cuando esas extrañas cartas cayeron del cielo- hablo el hombre que lideraba la reunión, por su voz, debía ser algo mayor por su tono grave y serio.

El video empezó mostrando imágenes de las cartas portal con su brillo verde cayendo del cielo por todas las partes del mundo.

-Después, niños de varias partes del mundo inventaron un juego con esas cartas. Cuando un adulto les preguntaba para que las usaban, los niños, o decían que para divertirse, o no decían nada. Las investigaciones de ese momento llevaron que las cartas no eran peligrosas ni radioactivas, así que se cerró la investigación y se dejo que los niños tuvieran esas cartas. Un grave error-.

Las imágenes cambiaron, mostrando los reportajes de ese entonces de los cambios climáticos por todo el mundo que fueron causados por la fusión de Vestroia y la Tierra causados por Naga.

-Los extraños fenómenos comenzaron a ocurrir por todo el mundo, y los mejores investigadores del mundo no descubrieron la causa, pero ellos si-.

Ahora se mostro un avión arriba del agujero que se formo en el océano, y se vio la silueta de cinco personas, pero por la distancia no se podía notar ni que edad o genero tenían, para posterior ver como se lanzaban hacía el agujero.

-Algunas horas después, seres de gran tamaño de otro planeta que se hicieron llamar Bakugan vinieron a nuestro mundo, ¿y saben que respuesta dimos? Dejamos que niños libraran esta batalla-.

Ahora se ve una grabación de varios niños lanzar a sus Bakugan para enfrentar los siervos de Naga, pero estos los vencían fácilmente, y algunos niños eran mandados a volar o caían arrodillados.

-Suficiente- dijo uno de los hombres reunidos.

-¿Qué pasa? Aun no estamos ni en la mitad- Dijo el que lideraba la reunión, prosiguiendo. -Y después, el Bakugan que según sus palabras que una cámara grabo en ese entonces, que se hacía llamar Naga, y lo que parece un dragón de fuego, volvieron la ciudad de Wardington en el campo de guerra principal, levantándola literalmente del suelo-.

Se mostro parte del combate que Naga y Drago Infinito estaban librando, hasta verse la parte final, donde Drago eliminaba a Naga.

-Luego, mágicamente, todo volvió a la normalidad, y los Bakugan se fueron de la Tierra. Trajeron el caos a nuestro mundo y luego volvieron al suyo como si nada. Que descarados-.

-Disculpe que lo interrumpa, ¿pero eso que tiene que ver con su punto para reunirnos? En ese incidente no hubo ninguna victima y las destrucciones fueron el mínimo de lo esperado- hablo otra voz, una femenina, pero de voz grave, detonando que tenía algo de edad.

-Eso fue milagro, ¿pero si no hubiera sido así? Todos esos niños que pelearon pudieron haberse vuelto cadáveres que hasta el día de hoy podríamos seguir buscando sus restos. Los Bakugan pudieron haber acabado con todo el mundo si hubieran querido-.

-Pero si no mal recuerdo, fue un Bakugan, junto con un chico de la Tierra que acabaron con la amenaza llamada Naga- comento otro hombre, por su voz, era mas joven que los otros dos hombres que hablaron.

-¿En que clase de mundo vivimos que dejamos que niños peleen en guerras contra monstruos de otros mundos?- Pregunto el hombre mas viejo, y el hombre mas joven se quedo callado. -Y no solo fue una vez-.

La imagen de la cámara cambio, revelando el primer ataque de los Bakugan malvados conocidos como los Nonetz.

-Cuatro años después, los mismos Bakugan volvieron a vivir en la Tierra, y junto a los humanos, vivieron juntos en la que llamaron, "Ciudad Bakugan". Parecía que podíamos coexistir, ¿no? Pero luego, un año después, estos Bakugan que se hicieron llamar, Nonetz, atacaron a todos los Bakugan y humanos, liderados por su líder, Sabio. Quien también, invocaron unos entes mecanizados llamados Mechtogan, que fácilmente pudieron destruir toda la ciudad-.

-Y esos mismos villanos de los que habla, fueron derrotados por el mismo grupo de chicos y sus Bakugan- agrego la mujer.

-Pero no lo hicieron solos- se mostro las fotos de Mira, Paige, y Rafe un momento, y luego, mostró fotos de los Bakugan de los peleadores con los traje de batalla. -Al parecer, en el tiempo que transcurrió, estos niños, hicieron contacto ilegal con seres de otros planetas, y obtuvieron la tecnología y armamento de ellos y se la quedaron para si mismos, y no la compartieron para el gobierno-.

-Estoy de acuerdo- hablo la voz de un cuarto hombre. -Esos Bakugan son armas andantes, y tienen equipos que nuestras armas no pueden enfrentar. Si quieren mi opinión, deberíamos de encerrarlos y tomar toda la tecnología-.

-Estoy de acuerdo con el sargento Tripp, al menos, con lo de la tecnología-.

Las otras tres figuras que hablaron anteriormente se miraron entre si, es cierto que tener armas de esa magnitud en manos de unos jóvenes era peligroso, pero a pesar de todo, pero esos Bakugan también salvaron vidas, además, el gobierno hizo un trato con Ciudad Bakugan y otras ciudades del país y del mundo para que los Bakugan vivieran con ellos, por lo que si tomaban cualquier decisión de manera precipitada, solo afectaría si imagen, y mas importante, sus rangos de poder.

El líder de la reunión, notando que aun eran renuentes, decidió usar su última carta.

-Como veo que todavía tienen dudas, les pondré mi último ejemplo para terminar-.

Las fotos cambiaron, primero mostro a varios Mechtogan que aparecieron en Ciudad Bakugan al mismo tiempo, luego, mostro la isla que era la guarida de Sabio, y después mostro la misma isla, salvo que esta vez solo quedaba un montículo de tierra y arriba de ella estaba Dragonoid Destroyer con el resto de Bakugan y peleadores, y al frente de ellos flotando en el agua, Mechtavius Destroyer.

-Recientemente, se descubrió que ahora, estos entes mecanizados llamados, "Mechtogan", pueden ser creados por cualquier peleador y Bakugan juntos. Y al mas grande y negro que ven...- apunto a Mechtavius Destroyer. -Es la fusión de cuatro de ellos, que al parecer, no necesitaban a un Bakugan para existir. Y sin sudar, destruyo toda una isla...-.

-¿Su punto?- Pregunto la voz femenina.

-Mi punto, Concejal, es que, ¿qué pasaría, si en lugar de la isla, hubiera destruido Ciudad Bakugan con todos en ella? ¿Cómo nos defenderíamos sin los Bakugan? De hecho, ¿aun con ellos podríamos con esa cosa?-.

-¿De que sirve hablar de esto si Mechtavius Destroyer esta hecho chatarra?- Pregunto el hombre mas joven.

-¿Quién nos puede asegurar que no aparecerá un segundo Mechtavius Destroyer? Hasta donde sabemos, solo se necesita a un peleador y un Bakugan para crear a un Mechtogan. ¿Quién puede asegurar que algún día, nuestros enemigos no usaran a los Bakugan como armas contra nosotros? Y solo estoy suponiendo lo que tal vez ya se esta haciendo sin que lo sepamos. ¿Cómo nos defenderíamos?-.

-¿Y que hay de los peleadores? Ellos nos han protegido de todas esas amenazas que enumero, y aunque tampoco apruebo que guarden tecnología potencialmente peligrosa, ellos han sido los principales funcionarios en la coexistencia de humanos y Bakugan- hablo la Concejal.

-Son niños. ¿Realmente planea dejar en manos la seguridad del país, y del mundo, en unos adolescentes?- Hablo el que era el sargento Tripp. -Ellos no tienen respeto por la ley. Iniciaron esta relación de humanos y Bakugan sin permiso del gobierno, y son un grupo altamente peligroso que trabajan en privado sin supervisión- señalo contundentemente.

Apago el vídeo y encendió las luces, revelando la apariencia de todos en la sala: la Concejal era una mujer rubia de 50 años con chaqueta y falda blanca, el hombre mas joven del salón era un hombre de treinta años que era un abogado que tiene grandes influencias, el primer hombre en hablar era un anciano a mitad de sus 60, que era el representante personal del presidente del país, mientras que Tripp era un sargento del ejercito, vestía las ropas militares, mas una chaqueta militar con hombreras, todo de color azul. Era de piel negra y calvo, pero con un bigote negro, parecía aun estar entre los 30.

Y por último, el que los reunió a todos, era un hombre adulto a inicio de sus 60 años, barba un poco rasurada y con un poco de escases en el cabello, y tenía mayormente canas, usaba un traje negro, debajo de el una camisa azul y una corbata roja, junto a pantalones y zapatos negros.

-Los Bakugan, aunque pueden hacer mucho bien, son seres de destrucción. Su sola presencia trae el caos. Y todos en esta sala secreta saben que la llegada de los Bakugan marco a nuestra nación, y a todo el mundo. Cuando llego esa amenaza Mechtogan, fue el día que decidí que nunca mas permitiría que extraterrestres pelearan por nosotros-.

-...¿Qué es lo que propone, Ministro de Defensa del país, Gabriel Attinger?- Pregunto el primer hombre que hablo aparte del que los reunió.

-Todos los Bakugan que han llegado a la Tierra hasta ahora están ubicados en Ciudad Bakugan. Quiero que los tomemos a todos junto con la tecnología que los Peleadores ocultan, y usarla para proteger a este país de sus enemigos, antes que ellos lo hagan- declaro el identificado como Gabriel.

-¡¿Estas loco?! ¡Eso es muy extremo!- Declaro la Concejal furiosa.

-La Concejal tiene razón. Invadir la ciudad y tomar a todos los Bakugan sería un incumplimiento del trato que la ciudad hizo con el gobierno- dijo el abogado.

-Ya había escuchado de tus ideas extremistas, Gabriel, pero esto es pasarse. Queremos interaccionar con los Bakugan para crear lazos entre su gente y la nuestra, no iniciar una guerra- dijo el representante del presidente.

-La guerra ya comenzó, señor representante. Esos malditos nos la trajeron cuando llegaron. Si no respondemos, no podremos defendernos cuando sea tarde- siseo Gabriel entre dientes.

-Estoy de acuerdo con el señor Gabriel. Los Bakugan son una amenaza, son armas vivas, si no podemos tenerlas, entonces debemos ahuyentarlas- apoyo Tripp.

-Esto no es algo que usted pueda decidir. Hay que conversarlo con el presidente- dijo el representante, levantándose al mismo tiempo que la Concejal y el abogado.

Gabriel suspiro. Era una lastima que no pudieran entender su visión, pero tampoco era inesperado.

Saco una pistola con silenciador que tenía pegada abajo de la mesa con cinta y le disparo por la espalda a la Concejal. El resto de presentes se sorprendieron, pero no tuvieron mucho tiempo, ya que un segundo disparo ocurrió, esta vez al representante del presidente.

El abogado levanto las manos asustado al ver que Gabriel le apuntaba con el arma. Tripp estaba sorprendido, pero no iba a detener al hombre mayor.

-Por favor no disparo, tengo una esposa e hijo...- rogó el abogado.

-Si haces todo lo que te diga sin rechistar ni decírselo a nadie, volverás a verlos, y no sufrirán- dijo Gabriel.

El abogado asintió temeroso.

-Ya con todo arreglado, tengo dos preguntas- hablo Tripp. -¿Qué pasara con la opinión publica? No podemos hacer lo que tu dices sin que la opinión de la gente nos afecte, ya que la popularidad de los Bakugan esta al máximo-.

-Ya tengo un plan para eso. ¿Cuál es la otra?- Pregunto Gabriel, bajando el arma y mirando a Tripp.

-¿Qué harás con respecto a los peleadores? Tu mismo lo dijiste, nuestras armas son ineficaces contra los Bakugan-.

-Hace poco hice un trato con un socio que puede ayudarnos, ya que nuestros objetivos se entrelazan-.

Afuera del edificio donde se estaba haciendo la reunión secreta, siendo ya de noche, una figura de un gran tamaño se levantaba, alzando la mirada al cielo, viendo la luna que se podía ver completa esta noche.

Que comience la cacería.


(4 Años después)

-Demonios, esto no funciona. Esta pregunta es difícil-.

Ubicado en alguna parte de Texas, dentro de un terreno con una gran casa y un granero que podía parecer una granja, en el segundo piso, en su habitación, estaba un chico de 16 años, piel negra de cabello castaño oscuro con peinado de afro, lentes grandes cuadrados de marcos rojos, usaba una polera amarilla y pantalones de mezclilla, y arriba de la polera una camisa verde manga larga de cuadros.

El nombre del chico era Winton Stayls, un joven que soñaba con ser mecánico, y que ahora, como cualquier joven, tiene problemas en su tarea, ya que era de Biología y a el le iban mejor con los números.

-Ya no puedo mas, me rindo- Winton estiro los brazos por la mesa y acostó la cabeza en su cuaderno.

Se iba a quedar dormido, pero un grito a las afuera de su casa le hizo abrir los ojos.

-¡Vamos, Winton, abre!-.

El de piel negra abrió la ventana de su habitación y vio abajo, encontrando a una mujer de su misma edad, piel blanca y cabello azul que lo tenía envuelto por la mitad con un cintillo de color piel, el color de su cabello era azul marino. Usaba una polera con tirantes de color blanco que dejaba expuesto sus hombros y unos mini shorts de color azul.

Ella era la amiga de la infancia de Winton, Lia Venegas, una aspirante a camarógrafa, de vez en cuando hace videos y los sube a YouTube, aunque no tiene muchas visitas, pero eso no la desmotiva.

Su madre es una famosa reportera en su ciudad, y ella espera algún día hacer videos y reportajes como lo hace ella, incluso una vez entrevisto a los peleadores, que son unos ídolos para ella, aunque en la actualidad no lo sean para otros.

-¿Qué es lo que quieres, Lia? ¿No tienes que hacer también tu tarea?- Pregunto Winton.

-¿Acaso lo olvidaste? Prometiste que me acompañarías a explorar el viejo teatro abandonado esta tarde, por eso me apresure en terminar la tarea que nos dejaron- dijo Lia.

Winton cerró los ojos y empezó a hacer memoria. Y efectivamente, ayer le había prometido eso a su mejor amiga después de que ella insistiera mucho para que la acompañara, aunque personalmente, no quería meterse en ese lugar.

-¿Realmente tenemos que hacerlo?- Pregunto Winton sin ganas de ir.

-Claro que si, quien sabe que cosas encontraremos en ese lugar. Se dice que hay fantasmas, y quiero corroborar si el mito es verdadero o falso- dijo Lia con ganas.

Winton suspiro derrotado, cuando Lia tenía esa actitud, nada la paraba, era muy enérgica, y aunque no quería ir, se lo había prometido.

-De acuerdo, espera un poco, que le avisare a mi madre- dijo Winton, alejándose de la ventana, cerrándola.

Lia sonrió satisfecha, esperaba que con esto, y algunas actuaciones, ayudara a su canal para aumentar las visitas y suscriptores. Si quería ser una gran reportera como su madre, tenía que empezar con esto.

Y personalmente, realmente esperaba ver algún fantasma para entrevistarlo.


(En otra parte del mundo)

En cierta parte del mundo, mas exactamente, en México, allí ya era de noche y pocas personas transitaban, entre las pocas que pasaban, destaca un hombre de traje de cuero gris que usaba una mascarilla que cubría su boca y una chaqueta con capucha que le tapaba la cabeza, dejando solo sus ojos violetas al descubierto.

Si uno era bueno leyendo el lenguaje corporal, sabría que esa persona estaba tensa, y quería pasar desapercibido y que nadie lo reconociera, parecía como un animal que era asechado, ya que no daba dos pasos sin mirar a los lados primero.

Fue cuando doblo una esquina y empezó a caminar cerca de una playa con muelles, que se sintió observado. Miro discretamente encima de su hombro, y pudo notar que habían figuras que no coincidían con la naturaleza, por lo que preocupado, empezó a correr.

-¡Ya nos vio! ¡Avancen, avancen!-.

De repente, varios hombres uniformados y armados empezaron a salir de las zonas con hierva y arboles de la playa, rodeando por adelante y la izquierda, al hombre de la mascarilla, que no esperaba una emboscada.

-¡Levante las manos y tírate al suelo!- Ordeno uno de los hombres armados.

Pero el encapuchado no hizo caso, sino que empezó a correr con todas sus fuerzas hacía la derecha, por donde había un muelle, los soldados empezaron a dispararle. La fuerza con la que corría hizo que su capucha se cayera, revelando un cabello rubio largo para un hombre.

Una de las balas rozo la mejilla del rubio, haciendo un pequeño corte que rompió el hilo de su mascarilla, así que se la quito para no estorbar mientras evadía las balas como podía.

Un helicóptero apareció en el cielo y alumbro con su luz al hombre que era perseguido, este, levanto la mano para cubrir sus ojos y ver al helicóptero. Gracias a la luz y sin la capucha ni mascarilla se pudo ver quien era.

Y no era otro mas que Gunz Lizard, peleador Haos y amigo de los peleadores, también fue capturado por Coredegon para crear una copia de su cuerpo y así crear al personaje de Sabio.

-Ha este paso nos van a atrapar, tienes que usarme, Gunz- dijo Reptak Haos, que se elevo y quedo en el hombro de su compañero.

-Es muy peligroso, Reptak. No puedo arriesgar a perderte- respondió Gunz.

Este paso por un puesto, donde se puso detrás del puesto para que las balas no le dieran. Intento ver, pero una bala rozo el muro, casi rozando su mejilla.

Un camión militar llego a la escena, del cual salió el sargento Tripp, ahora siendo General Tripp, puso sus brazos detrás de su espalda y ordeno un alto al fuego. Camino con tranquilidad hasta sus hombres, que estaban cerca del puesto donde se escondía Gunz.

-Ríndete, hijo, estas rodeado. Entréganos a tu Bakugan y te prometo que no te haremos daño- ofreció Tripp.

-¡Vete a la mierda! ¡Nunca les entregare a mi mejor amigo!- Grito Gunz.

-Estas resguardando a un alienígena, no hay necesidad de arriesgarte por alguien que ni siquiera es de este planeta-.

-¡Todos ustedes son un montón de malagradecidos! ¡Después de que los salvamos de Mechtavius Destroyer, ¿y así nos lo pagan?! ¡Me dan asco!-.

-Como quieras, avancen- ordeno a sus hombres, que empezaron a avanzar lentamente, mientras rodeaban el negocio para atrapar a Gunz.

-¡Nos van a capturar, tienes que usarme, Gunz! ¡Rápido!- Exclamo Reptak.

El rubio sabía que tenía razón, ya que podía escuchar los pasos de los soldados que se acercaban a el, por lo que tomo a Reptak.

-¿Quieres a mi Bakugan? ¡Pues aquí lo tienes!- Salió de su escondite. -¡Bakugan pelea! ¡Baku Sky Rider, salta! ¡Ahora, Reptak!-.

Reptak salto en modo esfera y apareció en el aire, derribando a todos los soldados que tenía adelante, Tripp tuvo que esconderse para no ser derribado también.

Los soldados empezaron a dispararle a Reptak, pero sus balas no le hacían nada al Bakugan, mientras que Gunz corría a estar a los pies de su compañero y ponerse delante de los soldados.

-Tomen esto. ¡Poder activado: Garfio de Hasta!-.

Reptak lanzo dos rayos amarillos desde sus dos garfios que golpearon adelante de los soldados, creando una explosión que destruyo parte del muelle en donde ellos estaban, provocando que caigan al agua.

-Bien, salgamos de aquí- exclamo Gunz.

Sin que lo vieran, un destello apareció debajo del agua, de donde salió un gran disparo de color purpura que golpeo por detrás a Reptak, que tomado por la guardia baja, cayo hacía adelante, haciendo que lo que quedaba de muelle se destruyera, haciendo que Gunz también caiga al agua.

De donde salió ese ataque, una figura emergía del agua, ya que se escondió allí para tener el factor sorpresa, camino hasta la oriya de la playa, y el helicóptero lo ilumino unos instantes con su luz.

Parecía un Bakugan, pero su cuerpo era de color completamente blanco. Tenía un chaleco como armadura en su pecho de color gris y placas de metal en sus dos antebrazos y dorso de las manos, así como un faldón que parecía una capa atada en la parte trasera de su cintura para abajo de color negro y unas botas blancas.

También parecía bastante equipado, ya sujetaba en sus dos manos un rifle de cañón bastante grande, y por los costados de su cintura tiene dos pistolas guardadas y otras dos en la espalda de su chaleco.

Por su color, podría ser un Bakugan Haos, pero su piel era demasiado blanca, y no emitía el aura de luz que todo Bakugan Haos transmite.

Reptak estaba saliendo del agua, aturdido por ese ataque sorpresa, mientras que Gunz nadaba hacía la orilla. Pero cuando estuvo en la orilla, los soldados de inmediato lo apresaron.

-¡Gunz!- Exclamo Reptak.

-Tu estas ocupado- le dijo el Bakugan desconocido a Reptak.

Cuando él alzo la mirada, volvió a caer al agua, producto de un disparo de una de las pistolas de su enemigo, este disparo ocasiono que la placa en su pecho se agrietara bastante.

-¡Reptak!- Grito Gunz levantándose, pero los soldados lo sujetaban de brazos y hombros para inmovilizarlo.

-Maldito. ¡Mojaste toda mi ropa militar! ¡Eso es un crimen en si!- Exclamo molesto Tripp, saliendo del agua todo empapado.

Los soldados pudieron poner de rodillas a Gunz y colocar sus brazos en su espalda, donde lo esposaron.

El mar se levanto con fuerza, Reptak se había levantado y se alejo lo que mas pudo para tener distancia.

-Apártense. Es mío- declaro el Bakugan desconocido a los soldados.

-¡Cañón Hearvy!- Un pequeño cañón que tenía equipado se levanto de su espalda y apunto adelante, disparando una bola de energía Haos.

-Escudo Universal- el chaleco brillo, creando una barrera gris delante de él, bloqueando con facilidad el ataque.

-¡Lo bloqueo sin esfuerzo!- Exclamo Reptak sorprendido.

-Te enseñare un verdadero disparo. ¡Cazador Blanco!-.

Saco su otra pistola que estaba en si cintura, y con ambas pistolas, cargo energía y disparo dos esferas de energía blancas que avanzaron a alta velocidad, impactando de lleno en Reptak.

El impacto y posterior explosión levanto las aguas, haciendo que pequeñas olas se formaran y chocaran con las orillas. Reptak cayo de espaldas al agua, parte de su visor estaba agrietado y estaba bastante dañado. Con esas heridas, debería haber vuelto a su forma esfera, pero por alguna razón aun no lo había hecho.

-Bakugan, Mechtogans, son como niñitos. Siempre peleando para ver quien es mejor. Sus combates causan caos en el Universo, y luego yo tengo que remediarlo- hablo el Bakugan desconocido, guardando sus pistolas.

-Tu eres... el Cazador de Bakugan- hablo Reptak con esfuerzo, viendo que su enemigo estaba casi encima de el.

-¡Déjalo!- Grito Gunz, tratando de librarse de sus captores.

-¿Por que.. le haces esto... a los tuyos?- Pregunto Reptak.

-Lo que sea que les pase a los Bakugan o a los humanos no me interesa en lo mas mínimo. Por mi pueden matarse. Pero te diré como sobrevivir- hablo el Bakugan, cargando su pistola. -Dime donde se oculta. ¿Dónde esta el Dragonoid?-.

-Jamás…- respondió Reptak.

Gunz le dio un cabezazo a un soldado, noqueándolo, y luego le dio otro a un segundo, librándose finalmente. Salto para pasar sus brazos debajo de sus piernas y correr hacía Reptak.

-¡Poder activado: Buscapleitos!- Activo Gunz, quedando al lado del rostro de su amigo.

Reptak levanto su brazo, cargando un ataque en su garfio, pero su enemigo desvió el brazo con una mano para que el ataque se lanzara lejos y le apunto a la cabeza, liberando del arma un rayo de calor.

-¡AAAAHHH!- Gritaron el humano y el Bakugan, desvaporizándose de manera rápida.

Cuando el ataque termino, el cuerpo sin cabeza del Bakugan se volvió motas de polvo de energía que desaparecieron, mientras que no quedo rastros de Gunz.

Los soldados empezaron a agruparse para retirarse y algunos para ocultar lo sucedido y ver si hubo algún testigo cerca o no. Tripp miro arriba, viendo al Bakugan que los ayudo guardar su arma.

Toda esta operación fue realizada, mientras cámaras con forma de insectos grababa y enviaba los vídeos a cierta computadora en el senado.

-¿Conseguiste algo?- Pregunto Tripp al Bakugan.

-Otro que no dijo nada- respondió el Bakugan.

Este era el decimoprimer Bakugan que mataba desde que comenzó su cacería, y el humano fue el sexto en morir.

El Bakugan tecleo una especie de código en una muñequera que tenía en su brazo izquierdo, y apareció un vehículo de asalto con el diseño de un auto super avanzado de gran tamaño que era para el. Se subió al vehículo y empezó a irse, mientras se iba, el vehículo paso a un modo escondido, camuflándose con el ambiente.

Tripp suspiro. El consideraba que los Bakugan eran armas útiles para el gobierno, pero ese en especial era difícil de tratar, aun cuando llevaban cuatro años trabajando juntos, ya que cada Bakugan que han logrado ver, él siempre les hace la misma pregunta, buscando a ese tal Dragonoid, ya que parecía ser su único interés encontrarlo.


(Con los dos jóvenes)

Lia y Winton ya estaban dentro del teatro abandonado. Lia estaba grabando todo lo que veía con su celular y con un dron para grabar desde las alturas que Winton le creo en su último cumpleaños.

-Mira este lugar, Winton. Realmente es grande. No entiendo porque lo tienen abandonado- hablo Lia maravillada por el tamaño y arquitectura del teatro.

-¿Tal vez porque no es seguro?- Sugirió Winton con sarcasmo.

Siguieron viendo el teatro unos segundos mas, hasta que de repente, escucharon un quejido que los asusto por la sorpresa. Vieron en la dirección que llevaba a la antigua sala de actores, ya que fue allí de donde vino ese quejido.

-¡¿Acaso en verdad hay fantasmas?!- Exclamo Winton con temor cómico.

-¡Genial! ¡Tal vez pueda entrevistar a uno!- Exclamo Lia, avanzando.

-¡¿Estas loca?! Y para empezar, ¿puede una cámara grabar a un fantasma?-.

-No puedo perder esta oportunidad-.

Winton, aun en contra de sus deseos, siguió a Lia. Ambos jóvenes caminaron mas, escuchando otro quejido, y algunas voces, haciendo que hasta la chica empezara a asustarse un poco, pero eso no la detuvo. Una reportera se arriesga para tener noticias que dar.

Llegaron delante de la puerta que era la entrada de la sala de actores, y la abrieron despacio, el rechinar de la puerta abriéndose se escucho claramente, dando mas suspenso al ambiente.

Al abrir la puerta, no vieron a ningún fantasma, pero si vieron a alguien, un joven algo mayor que ellos sentado en el piso con la espalda apoyada en la pared. Vestía un abrigo y pantalones de ejercicio, ambas de color rojo, su cabello era castaño y encima del pelo tenía unas gafas de sol, y vieron que tenia su brazo derecho pasando encima de su estomago.

-¿Un hombre? ¿Qué hace alguien mas aquí?- Pregunto Winton, acomodándose los lentes.

Cuando el castaño escucho la voz del chico, abrió su ojo izquierdo, revelando que era de color rojo.

-¿Quienes son...?- Pregunto con algo de esfuerzo el mayor.

-¡No puede ser!- Exclamo gritando Lia, para luego chillar de alegría. -¡Eres tu, eres tu, eres tu! ¡Si, eres tu!-.

-Eh... ¿de quien hablas, Lia?- Pregunto Winton confundido. No había visto a su amiga tan feliz desde que recibió su primera cámara a los diez años.

-¿No lo reconoces? ¡El es el líder de los peleadores Bakugan! ¡Es Dan Kuso!- Señalo la chica, dando leves saltitos de felicidad.

Pero a diferencia de su amiga, el de cabello afro retrocedió sorprendido. -¡¿Dan Kuso?! ¡¿Hablas del criminal buscado por todo el país por...?!-.

-¡No es un criminal!- Interrumpió Lia. -¡Ese noticiero obviamente estaba mintiendo! ¡Los peleadores nunca harían algo como eso! ¡Me molesta que la gente crea tales mentiras!- Exclamo, cruzándose de brazos irritada.

-Oigan...- hablo Dan, arrastrando la espalda por la pared para levantarse un poco. -Me alegra que me conozcan y todo, pero pueden...- no termino de hablar, ya que se quejo de dolor.

La expresión de ambos chicos cambio a una de preocupación al oírlo, y Lia se acerco un poco a Dan, notando que tenía su mano derecha cubriendo una herida con sangre que intentaba tapar.

-Estas herido- señalo preocupada. -Winton, ayúdame, tenemos que ayudarlo-.

-¡¿Estas loca?! ¡Lo están buscando por todo el país, incluso hay una recompensa por él! ¡Si lo ayudamos, nos volveríamos criminales! ¡Deberíamos entregarlo a las autoridades!-.

-¡NO! ¡Por favor, no lo hagan!- Desde uno de los bolsillos del abrigo de Dan salió una esfera roja que se abrió, mostrando una figura que parecía la de un dragón y les hablo con voz grave. -Si lo hacen, nos capturaran y nos ejecutaran. Les están mintiendo sobre nosotros-.

-¡Hablo!- Exclamo Winton.

-¡Increíble! ¡Tu debes ser el legendario Drago!- Chillo Lia de alegría al ver a Drago. -¡Tengo muchas preguntas que hacerte! ¿Podrías dejar que te entrevistara?- Pregunto.

-No hay tiempo. Por favor, ayuden a mi amigo. Se los suplico- rogó Drago, sonando desesperado.

Al escuchar ese tono, Lia dejo su compostura alegre a una mas seria. No era el momento para entrevistar a alguien. Tienen a una persona herida que necesita ayuda.

-De acuerdo. Los ayudaremos- acepto Lia.

-¡Espera! ¡¿Por que me involucras a mi?! ¡Estas cometiendo una locura!- Exclamo Winton.

-¡No podemos dejar que se desangre! ¡Necesita nuestra ayuda!- Reclamo la chica. -Además, tal vez así podamos saber la verdad de lo que paso hace cuatro años, ya que no me creo que los Bakugan, ni los peleadores hayan sido capaces de eso-.

Winton miro de nuevo a Dan, viendo que parecía debilitarse cada vez mas, además que la herida que tenía parecía algo grave, y como decía Lia, no podían dejarlo así.

Suspiro derrotado. Hubiera deseado quedarse haciendo la tarea de Biología.

Se quito su camisa y la envolvió alrededor de la herida de Dan, quien se quejo del dolor. Hizo esto para que la camisa hiciera presión en la herida.

-¿Donde lo vamos a llevar? En mi casa no, mi madre se asustaría al verlo, y no sabría que decirle- hablo Winton, pasando el brazo izquierdo de Dan por detrás de su cuello.

-Podemos ir a la mía, mi mama trabajara hasta tarde hoy, así que no habrá nadie, y queda cerca de aquí- sugirió Lia, pasando el brazo derecho de Dan por detrás de su cuello. Guardando su celular y el dron de vídeo antes.

Al ya tener un destino, con esfuerzo, levantaron al castaño entre ambos y empezaron a moverse.

-Les agradezco su ayuda- agradeció Drago, estando arriba de la cabeza de Dan.

-Agradécenos luego, si es que no nos atrapan antes- dijo Winton.

Así, estos dos jóvenes, sin saberlo hasta después, acaban de entrar a un nuevo mundo, uno maravilloso y peligroso.


N/A: Aquí comienza mi nueva obra de Bakugan, que parece que será mas larga de lo que imagine, pero tampoco tanto como la de Bakugan Guerra Imperial.

El villano que se mostro tendrá su explicación a su momento, así como se explicara que diablos paso para que todo terminara tan mal.

Y para quienes no saben, los personajes de Tripp, Lia, y Winton los saque de las serie de Bakugan battle planet, y se que a algunos no les gusta esa serie, pero personalmente me agrada, toca temas que no se tocaron en el anterior Bakugan, y quise usarlos, aunque el villano de Gabriel ese si lo invente.

Habrá mucho misterio, drama, bastante acción, e incluso brutalidad, y una pizca de romance también. Y como vieron, también habrá muertes, espero que estén listos.

Espero que este primer capitulo les gustara, y la portada la hice yo, estoy practicando, comenten que les pareció.

Sin nada mas que decir me despido. Visiten y comenten el resto de mis historias por favor. CHAO.