No poseo los derechos de autor. Los personajes pertenecen a asombrosa SM y a la saga The Dark Knight. La historia es de la fabulosa Half Of My Soul. Yo solo me dedico a traducirla y divertirme.

I don't own the copyright. The characters belong to the amazing SM and the The Dark Knight Saga. The story is from the fabulous Half Of My Soul. I just translate and have fun.

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*Leer nota al final.

Ellos dicen que 'un héroe te sacrificará para salvar el planeta, pero el villano sacrificará el planeta entero para salvarte a ti'. Los villanos, usualmente, no tienen a nadie, pero cuando tienen a alguien, alguien que sea algo más que un daño colateral… ellos lo tienen todo.

El Joker y Batman siempre balarán, y se necesitaban el uno al otro por un solo propósito.

Y, entonces, allí estaba ella… y ese día todo cambió.

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Ciudad Gótica era un lugar oscuro, lleno de cosas oscuras, e incluso llena de personas más oscuras y perversas. Bella Swan nunca destacó por su instinto de auto preservación, pero hasta ella conocía los lugares de aquella gran ciudad que estaban fuera de los límites. Ella se estaba maldiciendo a sí misma por haber salido del trabajo tan tarde, lo que la había obligado a andar entre las ruidosas calles de la ciudad.

Ella aún no sabía lo que la había atraído de este lugar, pero había algo con ser golpeada de repente por la realidad. Después de que Edward se fue, también lo hizo ella. Se graduó de la preparatoria, por supuesto, pero se dio cuenta de que no deseaba ser la persona que era en aquel momento, deseaba cambiar. Había llegado a Gótica para la universidad en un primer momento, e incluso estuvo luchando durante cuatro años y obtuvo su título en psicología, pero nunca lo ejerció.

Ella estaba interesada en el hospital psiquiátrico local, pero no creía tener el coraje de mirar a esas personas a los ojos y 'estudiarlas'. Encontró un trabajo como bibliotecaria en la librería local. Ella siempre se perdía en los libros.

Ella y Charlie se habían mantenido en contacto durante aquellos años, y ella estaba feliz de saber que él había podido seguir adelante y se hubiera casado un año después de que ella se fue, así como haberse retirado del puesto de Jefe de Policía. Él odiaba que ella estuviera tan lejos, pero siempre y cuando ella le visitara durante las fiestas, él lo aguantaba.

A ella le gustaba Gótica a pesar de la oscuridad. No había nada de perfecto. Cosas buenas y malas pasaban allí. Ella oía las sirenas durante todo el día, e incluso mucho más durante la noche. Era una ciudad llena de luces y sombras. Era también un lugar muy extraño.

Estaba esta extraña figura a la que toda la ciudad llamaba 'Batman'. Ella nunca había escuchado o visto algo que se pareciera a eso, pero había aparecido constante en los periódicos y las noticias durante todo el año pasado. Él se encargaba de los criminales que sembraban miedo en las personas inocentes de la ciudad.

Era conocido por resolver casos de bandas criminales, ladrones de bancos, secuestradores, todo mucho antes de que la policía tuviera oportunidad de hacer algún movimiento.

Era, sin duda, una ciudad extraña, pero Bella encontraba confort en aquello.

Todo lugar tenía sus secretos.

Bella simplemente no sabía que estaba muy cerca de descubrir uno de aquellos secretos.

Mientras caminaba por la calle, casi aferrando su bolso contra su pecho, ella no podía evitar estar súper vigilante de todas las voces que oía, de todas las cosas que veía. Ella decidió que solo se centraría en sus asuntos y continuaría moviéndose, pero los asuntos decidieron centrarse en ella.

Una enorme mano pareció aparecer como por arte de magia, cubriendo su boca y reteniendo su tembloroso grito que quedó atascado en su garganta. Un largo brazo aprisionó su cintura, jalándola hacia las sombras.

— ¿Qué. Tenemos. Aquí.? — los ojos de Bella se agrandaron para después cerrarse fuertemente cuando sintió la textura del frío metal de un arma contra su nuca.

— La encontré caminando. ¿Será suficiente? — habló el hombre que la había sujetado, sonando un poco como Emmett.

La figura sosteniendo el arma en su dirección se acercó un poco, y Bella pudo ver su rostro más de cerca. Él parecía tener lo que era cabello color verde neón con algunas partes marrones, y tenía pintura blanca cubriéndole el rostro y el cuello. Tenía labial pobremente colocado sobre sus labios, simulando terroríficamente una sonrisa.

— Oh, será suficiente. — habló él, sonriéndole de forma malvada.

Los parpados de Bella cayeron pesados cuando, el tan aclamado "Payaso" presionaba algún punto clave de su cuello.

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Bella abrió los ojos lentamente. Su visión era muy borrosa, y mientras las figuras de lo que sea que estuviera frente a ella se definían entre sí, solo tuvo oportunidad de jadear.

Ella se encontraba en la azotea de un edificio muy alto, atada a una silla con sus manos y piernas atadas a un poste de la silla. El viento le removida el cabello, mandando escalofríos por toda su piel expuesta.

Ella sintió que la silla en la que estaba se apoyaba en algo, haciendo que ella se deslizará hacia el frente, de cara a la enorme ciudad.

— Estás despierta. — ella tragó y miró con dificultad hacia un lado, hacia el payaso.

— ¿Por qué estoy aquí? — sus cejas se fruncieron cuando él rió maniáticamente.

— Tú me atraerás al murciélago. — él le dio unos toques a la nariz de Bella con el dedo índice, y Bella frunció en entrecejo.

— Y-Yo no sé qué... por favor, déjame ir. No quiero morir. — suplicó ella retorciendo las muñecas, se detuvo solo cuando supo que se iba a provocar quemaduras por la fricción.

— Nadie nunca quiere morir, dulzura. Pero no te mataré, él te salvará. No puede evitarlo. — dijo él, más para sí mismo. Pero Bella solo podía seguir frunciendo.

— ¿A qué te refieres? — preguntó ella, sus ojos buscaron frenéticamente los de él.

El payaso inclinó la cabeza hacia ella, entonando los ojos.

— No tienes ni idea de quién te estoy hablando, ¿o sí? — Bella sacudió la cabeza lentamente. — Hmmm...— él se acuclilló y salió de su campo de visión, ella pudo sentir cómo la presión de sus tobillos era liberada.

— Espera. — dijo ella mientras él soltaba una de sus manos, ocasionando que ella se deslizará hacia enfrente. Ella no pudo evitar soltar un grito mientras intentaba aferrarse con la única mano que seguía atada a la silla.

Ella cerró los ojos para evitar mirar hacia abajo.

Una mano encantada sujeto su muñeca, y la presión de su mano izquierda se aflojó.

Sus ojos de abrieron de golpe cuando quiso mirar hacia arriba, hacia el rostro sobre ella. Usó su mano izquierda para aferrarse al brazo de él, la confusión bañaba las facciones de Bella cuando el tiró de ella hacia arriba.

Ella por fin pudo ver que se encontraban en una terraza, y miró a su alrededor, dando un paso inconsciente hacia el hombre a su lado para alejarse de la orilla.

— ¡Joker, él no vendrá! Ya no le interesas. — los ojos marrones de Bella se dirigieron hacia uno de los pocos hombres que se encontraban con ellos, escondidos en las sombras del edificio, y ella tembló, aunque no por el viento. Tenía varios pares de ojos sobre ella.

— Intenta adivinar de nuevo. — gruñó una profunda voz, y Bella miró a su alrededor, su cabeza se giró hacia el lugar en donde el edificio de al lado se tocaba justo con el aquel en donde estaban parados.

Su jadeo se atoró en su garganta ante la figura que se alzaba frente a ella. Él era enorme en persona, más tenebroso de lo que ella nunca se imaginó que sería, al menos a comparación de como Lucía en los periódicos o en la televisión.

— ¿Ves? Te dije, dulzura, él no puede evitarlo. — el Joker se rió, rodeando la cintura de Bella con un brazo. — Vienes a salvar a la chica, así que supongo que esta no será una visita social.

Batman se paseó por el borde del edificio, enfocando su atención en ellos.

Bella no podía decidir a quién le tenía más miedo. La figura llamada Joker o Batman.

Él no era conocido como alguien que mostrara piedad por lo que ella había leído y visto en las noticias. Entonces, ¿qué significaba aquello para ella? Él Joker no parecía importarle, le agradaba asustarle a muerte.

Ella se mantuvo muy quieta debajo de su agarre mientras escuchaba cómo todos a su alrededor reaccionaban sus armas, listos para la masacre.

Batman también debió haberlo escuchado, pues detuvo sus pasos e inclinó su cabeza a un lado.

— Si me disparan, es posible que hieran a la chica, o a su jefe. No creo que el Joker esté muy feliz con eso, ¿qué opinan?

El agarre del Joker en su cintura se apretó, e hizo un ligero "humm" con la garganta.

— Apártense, chicos. Nadie lastima al murciélago excepto por mí. La chica... no me importa tanto. — los ojos de Bella se entrecerraron ante la aparente mentira.

Por un lado, él bien podría estar diciendo la verdad, pero el doloroso agarre que sus dedos tenían alrededor de su cintura decían lo contrario.

Sus ojos cargaron por la terraza, y ella pudo ver tres puntos de escape, pero dos de ellos la pondrían en medio del fuego cruzado. A su derecha, ella podía ver una escalera, el único problema era que, si ella se resbalaba, probablemente caería a su muerte.

Su mano se aferró a la chaqueta morada que el Joker traía puesta, sintiendo al límite con cada segundo que pasaba.

Bella jadeó cuando el Joker le obligó a tomar un arma entre sus manos, dándole la vuelta y obligándola a mantener su espalda contra el amplio pecho. Sus labios presionaron contra su oído mientras el agarre en sus manos se apretaba, obligando a sus delgados dedos a moverse para que tocaran el gatillo.

— Dispara. — demandó él de forma baja, el fuerte agarre de sus manos hacía imposible que Bella moviera siquiera sus dedos. Él la sostuvo crudamente por la cintura, reposando su cabeza en el delgado hombro de ella.

Las manos de Bella temblaron, y ella sacudió la cabeza.

— No. — susurró ella. Sus ojos de movieron a los hombres detrás de ellos, quienes empezaban a elevar sus armas.

— Prometo que dejarás esta terraza con vida. — declaró Joker, acomodando suavemente un ligero rizo de cabello detrás de su oreja.

— No soy una asesina. — respiró ella, ignorando la solitaria lágrima que rodó por su mejilla.

Una mano enguantada atrapó su lágrima, y Joker rió de nuevo.

— No dije que le matarás, dije que le dispararas. — el asentimiento casi imperceptible que le dio Batman, le dio a Bella el coraje que necesitaba para apretar el gatillo, jadeando con miedo cuando este se desplomó en el suelo luego el impacto.

Joker retiró el arma de sus manos, tomando una de sus manos y obligándola a dar algunos giros, como si estuvieran bailando, antes de atraerla de nuevo a su lado.

— ¿¡Vieron eso, chicos!? ¡La chica tiene agallas! — Joker movió el arma en dirección a la puerta de la terraza, su señal de que ella se largara.

Bella tragó, y después de una rápida mirada a Batman, rodeó nerviosamente su cuerpo, apresurándose a llegar a la puerta. Dejó salir un grito cuando uno de los hombres la tomó del brazo. Otro disparo resonó en el aire nocturno, y Bella pudo sentir la cálida sangre deslizarse por su mejilla mientras el agarre se aflojaba repentinamente, y Bella vió el robusto cuerpo caer como un saco lleno de sal al suelo.

Ella giró su vista hacia el Joker, dándose cuenta de las dagas que este le lanzaba por los ojos.

— ¡Nadie la toca! Dije que podía irse, y yo mantengo mi palabra. Ahora, vete, antes de que la siguiente bala vaya a través de tu lindo cráneo. — Bella no desperdició más tiempo y se giró velozmente, tropezándose con el brazo del hombre muerto. Afortunadamente, pudo mantenerse erguida, sin ningún otro accidente.

Ella jaló de la puerta, un peso muerto cayó dentro de su estómago.

— ¡E-Está a-atorada! — ella tartamudeó, regresando la vista al Joker. Su corazón se aceleró como si de alas de colibrí cuando el hombre la miró fijamente, como si se preguntara qué hacer con ella a continuación.

— Esto debe ser una broma… — murmuró él y caminó hacia ella, casi como si estuviera ebrio, acudiendo su arma en el aire. Bella tragó pesado, dando un paso hacia atrás. — Parece casi como si… el destino no quisiera que te fueras… — él la miró, tomándola del brazo rudamente, acercándola a su cuerpo.

Bella pasó saliva audiblemente, intentó alejarse de él.

— Lo prometiste. — respiró ella, un quejido salió de sus labios cuando él le dirigió una mirada y la tomó por la barbilla para obligarla a mirarlo. Sus ojos oscuros, casi negros, miraron dentro de ella.

Él extendió su brazo, sus ojos nunca dejando los de ella, intentó empujar la puerta.

— Mmmm… Damien, vuela la puerta. Creo que sería inteligente cubrir tus oídos. — los ojos de Bella se abrieron hacia la enorme arma y colocó sus manos sobre sus oídos, saltando ante el sonido. Sus oídos zumbaron cuando el Joker la soltó.

Ella lo miró una última vez, su Mirada irritada la animó para salir más deprisa. Ella desapareció dentro del edificio, y los ojos del Joker cayeron al suelo.

Se inclinó, tomando un solitario tenni entre sus dedos.

— Cenicienta dejó su zapatilla…

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Bella se sentó en su cama, con la almohada pegada a su pecho, mirando las noticias con expresión en blanco. Joker y Batman nunca fueron encontrados, y Bella no sabía si sentirse aliviada o aterrorizada. Le había disparado a un hombre y había escapado de un loco. No sabía si estaba a salvo o no.

Apagó la televisión, y se recostó, aferrándose fuertemente a la almohada. Los ojos se le cerraban, y ella se esforzó por mantener los sucesos de aquella noche fuera de su mente.

Sus ojos se abrieron violentamente cuando escuchó un ruido de algo que se rompía en su sala. Se giró al otro lado de su cama, rozando con los dedos el bate que solía mantener debajo de su cama.

Cerró su mano en el bate de madera, rodando al suelo lo más silenciosa que pudo.

Podía escuchar, ahora, el sonido que hacía el vidrio al quebrarse, se había escuchado más cerca que la primera vez.

Se puso sobre sus pies rápidamente, cruzando la habitación para abrir la puerta. Ella vivía en un departamento en el corazón de Ciudad Gótica, y tenía dos plantas en una. Había espacio suficiente para una o dos personas. Escuchó las pesadas pisadas subiendo por las escaleras que conducían a su recámara, y por su mente, cruzó el pensamiento de que su final sería de esta forma. Después de una noche loca, así es como vería el final de su vida.

Contuvo el aliento cuando las pisadas se detuvieron frente a su puerta. Sus ojos volaron a la perilla mientras esta se agitaba lentamente. Cerró los ojos cuando la puerta fue suavemente abierta.

Apretó los dientes y volvió a abrir los ojos. Casi dudó cuando vio al enorme hombre que atravesaba el umbral de su habitación, pero se aferró fuertemente al bate de madera, deslizándolo por el aire.

El bate se rompió a causa del impacto, y Bella supo que había sorprendido al ladrón, pero no lo había ralentizado de ninguna forma.

Tomó una rápida bocanada de aire antes de correr por su vida.

Su cuerpo se estremeció cuando el aire frío se estrelló contra su piel expuesta, haciendo volar su cabello cuando se tiró contra la puerta de salida. El hombre la alcanzó rápidamente, y Bella sacudió la cabeza rápidamente intentando recomponerse.

Dirigió una fuerte patada a la entrepierna del hombre y salió de su enorme figura cuando él empezó a retorcerse por el dolor. No miró atrás cuando bajó corriendo las escaleras. Corrió a la puerta principal que daba a la calle, y el ahora más frío viento de la intemperie le recordó la clase de situación en la que se encontraba actualmente.

Ella apenas traía ropa, y no se encontraba en uno de los mejores barrios.

— ¡Pequeña perra!

Bella corrió descalza por la acera de la calle, su mente gritando que algo estaba terriblemente mal. Las calles estaban casi desiertas. Muchas personas la ignoraron, y algunas cuantas con las que se estrelló durante su carrera seguramente pensaron que estaba loca.

Echó una mirada a sus espaldas de vez en cuando para asegurarse que su persecutor estuviera aún lo suficientemente lejos, se preguntó por qué se estaba molestando en perseguirla por tanto tiempo.

Redujo la velocidad cuando un edificio entró en su campo de visión, se lanzó a sí misma por la puerta verde de aspecto rústico, solo para detenerse completamente ante la visión de lo que había frente a ella.

Bella probablemente tenía la peor suerte de la tierra.

— Vaya… Vaya… Cenicienta, es casi medianoche… — la voz de él perforó sus oídos y miró nerviosamente hacia la puerta.

— Yo… alguien está… No tenía intención de venir aquí, lo juro. Pero, está tratando de matarme. — Bella miró lo que era claramente una bodega muy pequeña y muy abandonada, era un lugar perfecto para un montón de criminales. El lugar estaba revestido con un montón de morado, negro y rojo.

— ¿En serio? — preguntó Joker, sus ojos vagaron por la curvilínea figura de Bella. — Acércate. — demandó con una seña, y Bella no deseaba otra arma apuntándole, así que de mala gana caminó hacia él, pero no se acercó demasiado. Él le hizo una vaga seña hacia delante y Bella frunció el ceño en confusión.

— Encontré algo que te pertenece, y pensé que lo querrías de regreso. — hizo que uno de sus hombres diera unos pasos al frente, y a plena luz, ella puso ver su zapato deportivo. — ¿Me permites? — él se colocó sobre una rodilla, dándole algunos golpecitos a su pie desnudo. Bella lo elevó, teniendo que sostenerse por uno de sus amplios hombros para mantener su balance.

Ella debía estar oficialmente loca. ¿Cierto?

— Y la zapatilla entró. — el Joker se puso en pie, barriéndola con la mirada de nuevo, y Bella se sintió más expuesta que antes.

La puerta que ella había atravesado se abrió repentinamente, y ella se aterró al ver al hombre de su apartamento. ¿Qué le pasaba a aquel chico? Él se vio verdaderamente asustado cuando miró alrededor del pequeño cuarto, dándose cuenta en donde se había metido.

Joker observó atentamente el lenguaje corporal de Bella, sus ojos se estrecharon cuando ella se tensó.

Los oídos de Bella zumbaron cuando el Joker le disparó al hombre frente a ella, ella solo alcanzó a ver el brazo de su 'salvador' por el rabillo del ojo.

— Lo mataste. ¿Por qué? — preguntó ella, moviéndose para verlo.

Ella sabía que debía estar muerta. Sabía que no te cruzabas con un villano y vivías para contarlo. Dos veces.

El Joker se encogió de hombros ante la pregunta y, entonces, apuntó el arma hacia ella. Una de sus manos tomó agresivamente un puñado de su cabello y la obligó a alzar el rostro, sus ojos notaron el dolor dentro de los orbes chocolate de Bella, pero además de eso, ella no mostraba ninguna otra señal de molestia.

Presionó el cañón de su revolver debajo de su barbilla, y Bella lo miró a los ojos.

— Esas ya son dos veces que mato por ti. Intentemos que no sean tres. Asegúrate de que llegue a casa… — el arma fue abruptamente retirada, y su agarre en su cabello se soltó.

El Joker salió de su campo de visión, y solo quedó el hombre que esperaba por ella.

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*Creo que no se muestra mucho en este cap, pero durante la historia, Joker tiene estas "platicas internas" consigo mismo, así que ciertos pensamientos estarán plasmados con "esta letra" y se referirá a la consciencia (o algo así) de Joker. En cambio, los pensamientos que se vean "con esta letra" serán las respuestas de Joker ante la discusión.

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¡Tenemos primer capítulo de esta hermosa traducción que les traigo!

No sé ustedes, yo estoy muy emocionada jajaja durante algun tiempo le estuve rogando a la hermosa Half Of My Soul que hiciera una historia más larga de esta pareja jajaja Para las que no sepan, hay un OS en mi perfil que se llama MADNESS, es como una precuela de esta historia. Deberían leerla si quieren entender un poco más de este chisme jajaja

En fin, ya saben que conmigo solo leemos cosas raras pero chidas jajaja así que espero que disfruten esta historia tanto como yo la disfruté.

¿Qué les parece este primer capítulo? No se olviden de dejar un lindo comentario y pasarse por nuestro grupo de Facebook 'Twilight Over The Moon'.

¡Nos leemos pronto!