Saint Simpsons-Louds: Episodio G: Asesinos (Remake) Finalmente, tras un año entero de trabajos, charlas, contribuciones, ayudas de varios escritores, buscar temas musicales y diseñar una mejor trama, aquí está lo que tanto tiempo he mantenido bajo llave y que ahora sale a la Luz: Mi último proyecto, en la sección de historias con capítulos de TLH, esta remasterización o remake de "Saint Simpsons-Louds: Episodio G: Asesinos". Muchos de ustedes se deben estar preguntando "¿por qué lo vuelvo a hacer?", "¿por qué vuelve a ser escrito?". Les seré franco o sincero (como quieran llamarlo). No me gustó el final que le di, tampoco me sentí muy a gusto con dejar demasiados "huecos" o cabos sueltos en esta historia. Literalmente no había hecho más que plasmar la mitad de lo que tenía pensado y guardado en mi cabeza, sumado al final sobre la aparición de mi "OC" llamado Yoshikage Alexander, cosa que cambié rotundamente su nombre, aspecto y cree uno nuevo, Dimitri Sasha Ginovaef-Yoshikage (El cual apareció en "Dead Land", "Herederas Senshi" y las historias de mi amigo RCurrent).

Tengo que admitirlo, puede que se me haya subido la fama aquel año, 2017, por el tema del éxito que tuvo "Sangre de Hermanos" y que muchos pensaban que esta secuela sería una continuación al mencionado fic de NSL, pero no lo fue, lo había dejado explicado, varias veces, que no tenía nada que ver pero eso se los contaré en la próxima parte de esta sección, ¿sí?.

Otro punto que resalto es que tendría que haber dejado este fic para Septiembre del 2017...Tampoco fue así, ¿por qué?. No lo sé, después de terminar "Sangre de Hermanos" en Julio, justo para el día de mi cumpleaños, me sentía muy vacío, haciendo algún que otro One-Shot de Loudcest (sea Lynncoln, Lenicoln, Lunacoln, Luancoln, incluso con las otras hermanas, algún que otro homenaje para mis amigos como El Caballero de las Antorchas, en donde escribí "Dulce Día de las Bromas", el cual era un Luancoln) y sin olvidarme de que continuaba con las actualizaciones de mis otros fics como "Saintia MLP". En pocas palabras, no había nada que pudiera llenar ese "Vacío" y decidí escribir aquellos primeros capítulos del "Episodio G: Asesinos" como una "antesala para lo que se vendría en Septiembre", pero no funcionó. En ese mes estuve hiper ocupado con distintas cosas (Facultad, parciales, un pariente mío había sido internado y operado, me hallaba con mucha presión y aproveché Julio para subirlo, poco a poco, además de ir juntando la inspiración suficiente para ir creando, ir plasmando dicho "Universo").

También había hablado con El Legendario, autor de "Entre la Oscuridad", "El Origen de Omnitron", entre otros fics, felicitándolo por su trabajo y que quería pedirle permiso para usar a sus UnLouds para mi secuela de "Sangre de Hermanos". Aunque ahí tendría que haber hablado con otros autores para poner a sus OC, siento que "salieron del aire" y por eso se va a explicar lo nuevo en esta versión.

1) Esta historia es un "crossover", pero sin ir a dicha sección (nadie lo leería). Queda en la parte de "Story".

2) Lo vuelvo a repetir, esta secuela NO es un NSL, ni nada por el estilo.

3) Los personajes vistos en la versión del 2017 de este fic se quedan como están. No entran otros nuevos.

4) Todos los derechos reservados para los OC pertenecientes a FreedomGundam96, El Legendario, Banghg y los míos. Lo mismo para las canciones (derechos reservados para sus autores y empresas).

5) Advertencia, en algunos capítulos pueden ser de temática un tanto Edgy, así como también incluir sangre y algo de gore, todo moderado, por supuesto.

6) Esta historia tendrá Loudcest (Lincoln/Harem, con sus hermanas Lynn, Luna, Luan, Lisa, Lucy, Lana, Lola y Lily, las menores ya crecidas, con 17 y 18 años. Lori se queda con Bobby y Leni con mi OC).

7) Muchas gracias para regamers10, Banghg, AnonimousReader98, RCurrent, Arokham, Sam The Stormbringer y El Caballero de las Antorchas por las canciones que me han pasado durante los meses de Febrero, Marzo y Abril para este proyecto. En serio, chicos, muchas gracias por todo.

8) De los otros personajes que se verán en dicho fic, además de los OC como los de Banghg, las UnLouds, los "Plagados" y Riden Bleach de El Legendario, los de FreedomGundam96 y los míos, también estarán presentes los Caballeros de Athena (incluyendo a los de "The Lost Canvas", "Next Dimension" y la Clásica), los "Sin Rostros", los "Gladiadores Sagrados", así como también de otras series tales como "Gravity Falls", "Steven Universe", "Escandalosos", "Star vs las Fuerzas del Mal", "The Loud House", "Clarence", "Rick and Morty". En pocas palabras, los que se vieron en el fic original.

9) Se han cambiado las Armaduras Sapuris para Rick, Morty y Summer (ellos llevarán las Sapuris de Minotauro, Alraune y Mandrágora), mientras que Lily (la cual no incluí en el fic original del 2017) llevará la Sapuris de Papillón.

10) En este "Prólogo" expandiré los acontecimientos ocurridos en el "Final Feliz/Oficial" de "Sangre de Hermanos" y su unión con "El Heredero (Nueva Versión)". Para eso, los que no se acuerden, vayan a dicho episodio de mi mencionado fic y allí encontrarán las respuestas.

11) Se mantendrá el equilibrio, todos tendrán su protagonismo, sus rondas.

Eso es todo, si recuerdo algún que otro momento o ítem para mencionar, lo pondré en la parte de abajo, en los agradecimientos y saludos.

Como siempre digo, no soy dueño de TLH ni tampoco de las otras series, canciones ni los OC que aparecerán aquí. Todos pertenecen a sus legítimos dueños, solo soy propietario de los míos y nada más. El objetivo es entretener, así que lo disfruten.

Y por último y lo más importante: Este fic va dedicado para todos aquellos que me han dado apoyo, ayuda, sobre todo en momentos difíciles como el año pasado y los considero como mis hermanos y mis amigos: FreedomGundam96, Banghg, eltíorob95, Ficlover93, RCurrent, regamers10, Transgresor 3003, LeoneEpsilon, AnonimousReader98, J. Nagera, Arokham, Sam The Stormbringer, El Caballero de las Antorchas, Reila Van y lady-saintiasailor. Muchas gracias a todos y espero que disfruten de esta historia.


Prólogo: La visión suya estaba borrosa, comenzó a abrir sus ojos para "captar" el ambiente que le rodeaba. Estaba en su cama, recostado, tapado con sus sábanas, a su lado se hallaba aquel conejito de peluche llamado Bun-Bun, el cual siempre le acompañó desde que era un niño pequeño. Miró hacia la izquierda, allí estaban sus muebles, sus juguetes, sus figuras de acción, miró hacia abajo de su cama, su tan preciado "cofre" de cómics de "Ace Savey", su superhéroe favorito, sacó dicho objeto de aquel mueble y de ahí los abrazó con fuerza, al igual que a su peluche. Luego alzó la vista hacia el techo, sus aviones de juguete también yacían allí, colgados del ventilador, también estaba su lámpara, su reloj despertador, aquella mesa de noche donde colocaba el vaso con agua, sus robots, las estanterías, todo estaba en su sitio, todo estaba en orden, pero aquella emoción le duró unos pocos segundos, igual que una película de drama, en donde el humor no tiene una larga duración, ya que un momento bastante duro estaba por llegar y fue así, ya que deseaba saber qué había pasado allí.

Aquel chico albino se puso a pensar, masajeaba su cabeza con las yemas de los dedos y de ahí tuvo unos pequeños "fogonazos" de recuerdos. Recordaba aquel "Día Innombrable", al ver esa "película" le causaba asco recordarlo todo, en donde fueron influenciados su hermanita gótica y él por aquel Fantasma Santo de Oro, el cual los había ido convirtiendo a su viva y semejanza, unas verdaderas máquinas de matar y cuando estaban por cumplir su meta de asesinar a toda su familia, habiendo hecho parte del plan mencionado, aquella Diosa de cabellos lila había entrado en acción junto a sus Caballeros, quienes detuvieron todo, no sin antes provocar un último combate entre ese chico y una de sus hermanas mayores, en donde él casi moría pero luego entró en escena otro Ser Divino, Chronos El Invisible, uno de los Dioses del Tiempo, quien se hizo cargo, junto con aquella muchacha peli lila, de eliminar ese día de las mentes de todos los presentes.

Funcionó, pero aún quedaba un poco en la mente de aquel chico y no estaría solo. No, para nada, ellas también, al igual que sus padres y amigos lo recordaban, sin embargo, tenía "fecha de caducidad" justo hacia el Atardecer, así que el muchacho se acostó nuevamente en su cama, cerrando los ojos, no sin antes dirigir su mirada hacia el reloj despertador y éste marcó las 5:30 AM, necesitaba descansar, recuperar fuerzas, aquella mañana iba a ser otro día. Fue entonces que cerró los ojos y dejó que el Tiempo transcurriera con normalidad, que se tomara lo necesario para que así llegara el Amanecer.

Permaneció dormido un largo rato, mientras que la puerta de su habitación estaba cerrada, hasta que comenzó a abrirse de par en par, revelando a una chica rubia, vestía un pijama verde con pantuflas rosas y un antifaz para dormir con unos ojos cerrados. Ésta lo observó con ternura y de ahí caminó hacia la habitación, en puntitas de pie, sin hacer el mayor ruido posible.

- Feliz cumpleaños, Linky. Hoy vas a tener un gran día.- Le prometió ella, mientras que le daba un tierno beso en la frente y en las mejillas a su hermanito dormido y de ahí se retiraba de la habitación, cerrando la puerta.

Él no lo sabía, pero aquel día era muy especial, sobre todo para aquel muchacho albino, quien yacía dormido tranquilamente en su cama, con su familia, su casa, sus amigos, todo había vuelto a la normalidad. Para festejar, ¿no es así?. Bueno, esto era solo un comienzo, tal y como se había dicho, las cosas se estaban acomodando tras haber vivido una etapa muy oscura y triste para todos los allegados. Pero dejando de lado aquel asunto, sí, era para celebrar y más porque era el cumpleaños de aquel muchacho.


Pronto fue llegando el Amanecer a Royal Woods, Estado de Michigan, allí se podían apreciar los tardíos rayos del Sol, bajo una mañana de Febrero, helada, gélida, fría, cortante como el acero afilado de una espada o un cuchillo, llevando a que sus habitantes se protegieran con abrigos y más con la nieve que había caído por la noche, dejando un panorama digno para una "obra de arte". Y en aquellos momentos, cuando el albino fue abriendo sus ojos, justo antes de que el despertador sonara, en aquellos momentos, aún con la visión un tanto "nublada", allí se encontró con varias personas a su alrededor, todas ellas aguardando en silencio para desearle lo mejor en su día. Tardó unos segundos en analizar toda esa "información", pero no pudo decir nada ante la "explosiva bienvenida" que le ofrecieron aquellas chicas.

- ¡FELIZ CUMPLEAÑOS, LINKY!.- Exclamaron todas las presentes, sus hermanas mayores y menores, todas ellas lanzando aquel grito de emoción, yendo para abrazarlo y darle besos de felicitaciones por su día tan especial.

No lo podía creer, ¿había olvidado su cumpleaños?. No, era imposible, él siempre lo recordaba, la fecha en la que caía su día era inolvidable, pero por tanto cansancio, él había "olvidado" ese momento tan importante de su vida, pero ahora ya no importaba, ellas se lo recordaron y una vez que terminaron los abrazos y besos, éste se preparó para salir de su cama y dirigirse hacia el baño para darse una ducha y comenzar la mañana con tranquilidad.

- ¿Cómo te encuentras en tu día, Lincoln?.- Se le acercó Lynn, la cual lo abrazó con fuerza a su hermanito, haciendo que casi se tornara violeta por la falta de aire.

- ¡Hermana, lo estás ahogando, cuidado!.- Pidió Luna a la deportista, quien reaccionó rápidamente y lo soltó, para después abrazarlo moderadamente.

- Oh, jejejeje, perdón, Linky, no lo quise hacer a propósito.- Ofreció sus disculpas y de ahí él le tranquilizó.

- No te preocupes, Lynn, Luna, todo está bien, jejeje, gracias por preocuparse y por desearme feliz cumpleaños.- Agradeció el muchacho, pero en esos momentos, habiendo jurado que estaban todas sus hermanas, buscó con la mirada a una de ellas.

- ¿Pasa algo, Linc?.- Preguntó Luna con preocupación hacia el albino.

- No, tranquila, solo que...¿en dónde está Lucy?.- Quiso saber el chico, mientras que lanzaba aquella interrogante sobre el paradero de su hermanita menor.

- ¿Lucy?.- Preguntó Lynn y fue hasta el albino.- Tranquilo, salió a...a...- Decía, pero se iba trabando en aquella parte, no quería revelar nada de lo que la gótica había hecho, de que había salido para buscar un regalo para él, pero en las zonas de los Bosques de Royal Woods, así que tuvo idear un plan.- No te preocupes, ella fue a buscar algo importante que se olvidó en la casa de su amiga Haiku, así que volverá pronto.- Le "prometió" la deportista.

- Es verdad, ahora ven que nos esperan para desayunar. Más tarde vendrán Bobby, Ronnie Anne, tu amigo Clyde y el abuelo.- Le pidió Lori, quien estaba mandando sus mensajes por celular y de ahí los enviaba para su novio de cabellos negro.


(Buccellati Arrange Version, OST de Jojo´s Bizarre Adventure: Vento Aureo, PS2)

La nieve que había caído sobre Royal Woods aquella noche dejó un cuadro "pintoresco", tanto el suelo, el pasto como los árboles, "desnudos" por la falta y caída de las hojas producidas por el Otoño, estaban cubiertos de "paquetes" de aquel manto blanco, lo mismo se podía apreciar en el Horizonte, hacia las casas del barrio en donde residían los Loud, mientras que por aquellos bosques alguien iba caminando, en busca de algo que necesitaba una cierta persona, mientras que dejaba sus huellas del calzado sobre ese lugar.


(Sigan escuchando Buccellati Arrange Version)

Miraba por la ventana, aquel albino buscaba respuestas a lo ocurrido en aquel momento: ¿Por qué todos estaban comportándose así?. Era un trato "muy amable", ¿acaso era un sueño?. Tal vez lo sería, tal vez estaría de regreso en ese tiempo donde tenía que llevar aquel estúpido traje de ardilla. Uno dice que para despertar de ese "Mundo de Fantasías", solo necesitaba gritar o golpearse contra algo.

- "Tal vez debería tirarme el agua de aquel vaso".- Pensó el albino y fue por ese objeto, sin embargo, al tomarlo, éste sintió que alguien más aparecía, apoyando su mano en los hombros del chico.- "¿Por qué estoy vivo?. Si yo vi que había muerto en aquella pelea contra Lynn...sin embargo...estoy aquí, respirando, como si nada hubiera pasado y es mi cumpleaños".- Se preguntó y de ahí sintió ese "tacto" contra sus hombros, para después voltearse y ver al "responsable" de dicho acto.

- No te asustes, Lincoln, todo ha vuelto a la normalidad, tú estás vivo.- Le tranquilizó aquel Caballero de Géminis Dorado del Siglo XVIII.

Éste era de complexión delgada, sus cabellos eran cortos, de color negro y en puntas, lo mismo se podía de sus ojos.

- ¿Vivo?...Yo...Abel...ahora lo recuerdo todo...pero...¿qué nos pasó?.- Quiso saber el joven albino ante aquel encuentro, todo parecía ser un verdadero "terremoto" contra su mente.-

- El Dios del Tiempo Chronos se hizo cargo de regresar en el Tiempo, de borrar aquel día en el que todo comenzó. Los que volvieron a la vida, incluyendo tus hermanas, quienes aún recuerdan esto, ya no tendrán de qué preocuparse, porque hacia la puesta del Sol, todo se borrará de su memoria y nunca más volverá a repetirse un incidente como éste.- Le explicó aquel peli negro, con lujo de detalle, toda la Historia.

- Ya veo, pero, Abel, ¿qué será de ti?.- Preguntó Lincoln por el Futuro del Caballero.

- Tranquilo, se me ha dado una nueva oportunidad: Volveré al Siglo XVIII con mi hermano Caín, regresaremos a ser los Caballeros Dorados de la Casa de Géminis, aunque esto pronto te lo olvidarás.- Le tranquilizó y contó sobre ese "viaje de regreso", el cual hizo entristecer al albino, mientras que el peli negro le pasaba su mano por sus cabellos.- Oye, no te sientas triste, vendremos a visitarlos, te lo prometo.- Juró y de ahí, el chico Loud fue para darle un fuerte abrazo a la persona que fue su Maestro, tanto para él como para cierta hermanita suya.

- Voy a extrañarte, pero sé que volverás a visitarnos.- Tomó el peli blanco la palabra de aquel Caballero.

- Te lo prometo.- Volvió Abel a jurarle que regresaría para verlos.- Fue grandioso haber vivido esta aventura contigo y con ella.

En aquellos momentos, un Portal comenzó a abrirse y allí pudo divisarse a un joven de cabellos color blanco y cortos, llegándole hasta la nuca, además de erizado con mechas largas y su flequillo partido partido y sus ojos eran dorados. Éste salió de aquella "Puerta" y miró a su hermano, para después hacer un gesto positivo con la mirada.

- Bueno, ha llegado el momento de volver a mi tiempo.- Dijo Abel y Lincoln le acompañó hasta aquel sitio.

- Fue un gusto haberte conocido, amigo. Nunca los olvidaré.- Prometió el albino y en aquel momento, el peli negro se dirigió hacia él por última vez.

- Lo mismo digo, Lincoln...- Se detuvo Abel en ese instante.- Mejor dicho, Señor Hades.- Devolvió ese gesto y de ahí se preparó para partir, yendo hacia el Portal donde lo esperaba Caín.- ¡Adiós, Futuro Emperador Hades!.

- ¡Adiós, Caín y Abel de Géminis, muchas gracias!.- Se despidió Lincoln de aquellos dos hermanos gemelos, pero algo le hacía eco en su cabeza, ¿por qué Abel había dicho eso? ¿Qué tenía que ver?. Quería averiguarlo, pero cuando se cerró el Portal, su celular emitió un pitido, anunciando la llegada de un mensaje proveniente de su amigo Clyde, así que decidió abrir la bandeja y mirar lo que decía.

- ¡"Feliz cumpleaños, hermano mío. Nos vemos esta tarde para celebrarlo!".- Leyó el mensaje de aquel moreno de lentes y de ahí se dirigió el albino para tomar su radio walkie-talkie para hablar con su mejor amigo.

Sin embargo, aquellas palabras, "Señor Hades", seguían rondando por su cabeza, aunque lo descubriría más adelante, por ahora había que celebrar.


De vuelta en los Bosques de Royal Woods, aquella gótica se hallaba buscando un buen "Regalo Natural" para su hermanito y mientras que eso sucedía, allí se encontró con aquel peli negro, sentado en un tronco de árbol caído, llevando a que ella caminar hasta él.

- - ¿Así que tienes que volver a tu época con tu hermano?. Preguntó ella.

- Sí, todos merecemos una segunda oportunidad.- Respondió Abel, mirando hacia el Cielo de Royal Woods.- ¿Sabes? Esta fue una gran aventura, fue un placer haberlos conocido a todos ustedes, a pesar de lo que pasó, nunca los olvidaré, lo juro.- Prometió el peli negro, quien recibió, como con Lincoln, un fuerte abrazo proveniente de la gótica y éste respondió al mismo.

- Ni Lincoln ni yo te vamos a olvidar, Abel de Géminis, te deseo mucha suerte.- Dijo Lucy con lágrimas en los ojos.

- Jeje, no llores, pequeña, la Futura Pandora del Siglo XVIII no debe llorar, tú seras una excelente Comandante en Jefe del Ejército del Próximo Emperador Hades, sí, así será, también tendrás a la "Segunda Pandora", de la rama de la Familia Heinstein y a varios Jueces del Infierno, tanto del Siglo XVIII como del XX, lo mismo va para los futuros Dioses Gemelos o Diosas Gemelas, los futuros Espectros, sin olvidar a la Estrella Celeste de la Violencia, el Guardaespaldas de Hades y también a la Estrella Celeste del Liderazgo y Dios del Tiempo Kairos, esos tiempos están por llegar, lo dicen las Estrellas.- Dijo Abel, mirando hacia los Cielos con Lucy.- ¿Lo puedes sentir? Va a comenzar una nueva etapa, tal vez...tal vez en tu hermano sea distinto, pero estoy seguro de que será un gran Hades, estoy seguro.- Prometió el peli negro, mientras que iba hacia donde estaba su hermano Caín.- Adiós, Lucy Loud, ¡no!, mejor dicho, Lady Pandora, nos volveremos a ver, tal vez en la Historia, tal vez en algún momento, pero estoy seguro de que así será, ¡adiós y mucha suerte!. Le deseó Abel, quien partió hacia el Portal junto con su hermano Caín, listos para volver al Pasado, al Siglo XVIII y reconstruir lo que se había dañado en esa parte de la Historia.

- Adiós, Abel y Caín de Géminis, mucha suerte para ustedes dos también, de mi parte y de mi familia, juro que no fallaré, si has dicho la verdad, estoy segura de que eso ocurrirá.- Agradeció Lucy y siguió su camino por los bosques, buscando algo que le podría armar a Lincoln o incluso hallar algún artefacto llamativo.

Justo en aquellos momentos, la gótica, mientras que caminaba por el lado Sur de los bosques, se detuvo.

- "Lucy Loud".- Le llamó una voz que parecían ser dos personas a la vez.

- ¿Eh? ¿Quiénes son?.- Preguntó ella pero no hubo respuesta, pero decidió seguir el rastro de aquella voz, la cual la llevó hasta la orilla de un arroyo congelado y de ahí se detuvo, sentándose en el suelo, hasta que una misteriosa ráfaga de viento helado movió las hojas secas y la nieve, revelando un extraño y llamativo Medallón con forma de Estrella y con la frase "Your´s Ever".

- "Adelante, tómalo".- Le animaron aquellas voces y ella lo tomó en sus manos, llevándoselo consigo a su casa.

Uno sabría que no es buena tomar algún objeto misterioso que aparece de la nada y más en medio de los Bosques, pero esas voces eran tan tranquilas, tan "serenas", las cuales llegaban a "hipnotizar" a Lucy, llevando a que extendiera su mano, quitando aquellos "restos" y de ahí sopló lo que quedó pegado, siendo llevado hacia una dirección desconocida y emitió un brillo llamativo.

- Cuando sea el momento, se despertará un nuevo poder en tu hermano y con ello, surgirá una importante alianza que borrará aquellas huellas del Pasado.- Dijeron ambas voces, las cuales eran de dos gemelos que le susurraban aquellas palabras a la gótica.

-¿Ustedes quiénes son?.- Deseó saber ella con curiosidad.

- Ahora no es el momento, pronto lo descubrirás, por ahora sigue estas instrucciones que te hemos dado.- Prometieron ambos gemelos en revelarse, mientras que ella hacía caso y de ahí dejaba los Bosques de Royal Woods con aquel artefacto en su poder, guardado en los bolsillos de su abrigo aquel objeto.


Pronto fueron llegando los invitados para aquel cumpleaños, entre ellos estaban el abuelo, Albert Loud, Clyde junto a sus padres, los Señores McBride, Ronnie Anne, quien estaba soportando las bromas de Luan, cosa que más le desagradaba. Por su parte, también se hallaba Bobby Santiago, el cual se hallaba al lado de su novia, Lori Loud, además de los amigos de Lincoln y un par más de invitados. Durante la parte de los regalos, Albert le había dado a su nieto su Medalla de Honor entregada por el Presidente de los EEUU cuando luchó en la "Guerra de Corea" en los Años 50 y Ronnie Anne le dio un collar que ella había hecho para él.

Pero lo mejor llegó cuando fue el turno de Lucy.

Feliz cumpleaños, Lincoln. Le deseó Lucy con una sonrisa y el chico la abrazó con fuerza.

- Gracias, Lucy, tu regalo y el de los demás han sido los mejores, muchas gracias. Te quiero mucho.- Le agradeció el chico y, tal vez por arte de magia, protegidos por algún Santo Dorado del Pasado, él la besó dulcemente en los labios, cosa que repitió ella, recordando esos dulces momentos y que ahora se harían realidad cuando él portara el "Medallón" en su cuello junto con la Medalla de Honor del Presidente de EEUU.-

Pronto, en aquellos momentos comenzaron a reunirse todos los presentes para la foto familiar, había comenzado a escribirse una nueva historia dentro de la Familia Loud, una que sería de las más importantes de toda su vida.


Capítulo I: Días normales El Ser Humano forma sus lazos, su unión con las personas a su alrededor, no siempre suele ser fácil, es bastante complicado, en especial para aquel albino, desde aquel día que recibió ese Medallón de Estrella durante su cumpleaños, poco tiempo después comenzó a sentirse "extraño". Algo estaba creciendo en su interior, como si fueran las flores en la Primavera que venía para despertarlas de su sueño del Invierno.

¿Cómo explicarlo? ¿Cómo resumir aquellos cambios que se estaban desarrollando?. Bueno, para empezar, pocos días después de su fiesta de cumpleaños, Lincoln comenzó a experimentar, en primer lugar, una serie de sueños en donde se lo podía ver a él, sentado en una especie de Trono Imperial, sus cabellos habían crecido, mantenían aquel color blanco, pero luego pasaban a ser negros como la propia noche. Luego se le podía ver cargando una Espada Imperial y una Armadura gris-plata con alas, mientras que a su alrededor estaban sus hermanas, sus amigos y cuatro personas más, las cuales no conocía en lo absoluto. Después de eso, él se despertaba exaltado, asustado, sudando frío y eso llamaba la atención de las chicas, quienes iban a verlo, incluso Lisa se hacía cargo de ver si estaba todo bien en su salud, pero no hallaba nada al respecto, así que ellas se quedaban en su habitación, durmiendo al lado del chico para ver si volvían aquellos sueños misteriosos.

El "no hallar nada al respecto" era simplemente una falacia que la propia Lisa mantenía, no debía revelarse esa "sorpresa extra" de cumpleaños. Tenía que mantenerse oculto, silenciado y más que nada en las sombras hasta que surtiera efecto, que renaciera como el Ave Fénix o más desde la propia Oscuridad que nadie se atrevía a ver. Lincoln, por su parte, buscaba respuesta sobre aquellos sucesos tan extraños y que se repetían en todas partes de su vida, en el ámbito escolar, sus amistades e incluso en su propia familia. ¿Qué estaba ocurriendo con él? ¿Qué pasaba por su cabeza en aquellos momentos?. Él no lo sabía, hasta que una tarde de Viernes, Lucy se acercó hacia él, sentándose a su lado en el sillón, mientra que el albino miraba una película, ella le pidió que apagara la televisión y lo hizo. Era raro, en esos momentos, tal vez ella querría acompañarlo para ver algo, sin embargo no quiso.

- Lucy, ¿pasa algo?.- Preguntó su hermano a ella, mientras que permanecía en silencio.- ¿Va todo bien?.

Ella no sabía por dónde, a pesar de tener su discurso preparado dentro de su cabeza, simplemente le tomó de las manos a Lincoln y lo miró a los ojos.

- Quiero que sepas, Lincoln, que ante cualquier duda o problema que tengas, nosotras vamos a estar contigo, lo mismo tus amigos y familia, ¿sí?. Todo personaje de las historias y en especial de los cómics que has leído de "Ace Savey" tuvieron su largo camino por recorrer, sufrir muchas penurias y dolores, por eso mismo vamos a estar a tu lado en todo este tiempo hasta que surja lo que has recibido.- Prometió Lucy al chico, pero aquel "mensaje en clave" le pareció raro, no sabía cómo responder, estaba confundido, perdido como si estuviera en Alta Mar, ¿qué era lo que ella había dicho?.

- Lucy, espera, no entiendo, ¿por qué todas se comportan tan bien conmigo?. Explícame.- Pidió él respuestas, mientras que ella se levantaba del sofá y caminaba hacia a las escaleras.

- Pronto lo sabrás, Lincoln, pronto lo sabrás, pero ten en cuenta esto: Los Dioses también pasaron por ese camino y lo mismo con los que defienden a éstos.- Señaló ella, dejando esa "clave" o "enigma" para que respondiera y de ahí se dirigió hacia las escaleras que llevaban a la planta alta de la casa.

Eso no lo dejó satisfecho, pero no podía averiguar más, por ahora, sí sabía que sus hermanas estaban con él, pero deseaba saber algo acerca de lo que Lucy había dicho, sin embargo, el joven Loud tuvo que resignarse, así que volvió a sentarse y de ahí miró la película que tenía en su agenda por disfrutar.


Pasaron los días y con ello, las palabras que Lucy había dicho, se hicieron realidad. Lincoln había logrado aquella "búsqueda" y lo consiguió, ya que aquel Medallón era el Símbolo del Emperador Hades del Inframundo, convirtiéndose el chico albino en su Heredero, su Sucesor y con ello fueron surgiendo los Espectros, cuyas Sapuris, Armaduras tejidas por las propias Estrellas Malignas de aquel Dios de la Muerte, fueron portadas por sus hermanas y sus amigos, sin olvidarse de los Dioses que estarían de su bando. Al principio le costó adaptarse a una vida divina, no sabía por dónde empezar, sin embargo, él aprendería, con el paso del tiempo, que no estaba solo, sino que un recuerdo, el único que le quedó, junto al resto de sus hermanas, era sobre aquella Diosa del Santuario, aquella que luchaba con sus Guerreros por el amor, la paz, la justicia, el orden, la seguridad y la unión en el Mundo, enfrentándose a las fuerzas malignas de otros Dioses que buscaban destruirla para construir su propio "dominio", tomar el poder y establecer su reino de terror y muerte.

El destino había marcado a aquel chico de estar unido a ese poder que corría por sus venas, le iba a costar, nadie se convertía en un Dios de la noche a la mañana, debería acostumbrarse a su nueva vida y en especial en su ámbito de persona normal, un estudiante y civil común, el cual era también el nuevo Emperador del Inframundo, algo que nunca se había visto así desde la "Guerra Santa del Siglo XVIII".


Mientras tanto, las playas de Echo Creek, California, una rubia y un castaño se hallaban disfrutando de su vida en aquel lugar, pasando el rato hasta la llegada de la puesta del Sol hasta que algo les detuvo.

- Star, ¿va todo bien?.- Preguntó su novio, acercándose a ella, quien miraba hacia el Este.

- Qué raro, juré haber sentido esa presencia aquella vez en el Inframundo durante el último encuentro con él.- Recordó la rubia, mientras que el chico iba hacia ella y también podía experimentar aquella sensación en la lejanía.

Acto seguido, él le tomó de las manos a su novia, mirándola a los ojos.

- Marco, ¿crees que esa persona pueda ser Aliado nuestro?. Hace meses que no portamos las Armaduras de los Dioses Divinos de Asgard y la Señorita Hilda de Polaris espera una respuesta de nuestra parte con respecto a seguir llevándolas.- Preguntó Star con preocupación en su voz, mientras que él le acariciaba sus cabellos y luego pasaba sus manos por las mejillas de la chica.

- Tranquila, con el tiempo lo sabremos, pero yo no me preocuparía por si ya no las llevamos más dichas Armaduras. Nos tenemos el uno al otro, además, alguien más, igual que nosotros, las llevará.- Le prometió Marco a ella, mientras que se abrazaban con fuerza bajo aquel Atardecer en California.


- Wow.- Dijo un chico castaño, el cual se hallaba con su hermana gemela en los Bosques del Noreste de los EEUU, en un lugar llamado "Gravity Falls" y hallándose acompañados por varias personas más en ese momento.- ¿Qué habrá sido eso? ¡No puede ser, ¿tan pronto?!.- Se cuestionó el muchacho aquel poder que crecía muy lejos.

- Sí, yo también lo sentí. Solo espero que esté de nuestro bando.- Alegó su gemela, también castaña y con frenos, mientras que se acercaban sus demás amigos.

- No solo eso, también siento que ya nuestro tiempo como los "Herederos" está por llegar a su fin.- Dijo Peridot con seriedad, mientras que miraba hacia el Horizonte.

Aquellos gemelos suspiraron, al igual que la pareja de California, aquellos momentos estaban por terminar y volverían a ser personas comunes y corrientes, viviendo sus aventuras con sus seres queridos.

- Bueno, tengo que admitirlo, será divertido mientras dure.- Alegó Ronaldo Fryman, ajustándose sus lentes.- Tendremos que disfrutarlo hasta que llegue el momento de entregar las Armaduras a la próxima generación.- Sentenció el chico rubio.

- Sí, pero...va a ser raro, no sé cómo explicarlo, es como cuando disfrutas de las vacaciones y de golpe, vuelves a tu rutina y no sabes por dónde empezar. Solo espero que no sea así.- Fue el pedido que hizo Connie, quien se hallaba junto a Steven.

- Las aventuras nunca se olvidan, puede pasar el tiempo, pero eso no se borra.- Agregó Pacífica Noroeste en esos momentos.

- No te preocupes, mientras que estemos juntos, al igual que las "Crystal Gems", este Mundo no caerá, además, ¿quién sabe?. Ahora que sentimos esa presencia, nos tocará indagar, por nuestra parte, si es nuestro Aliado o no.- Habló aquel chico de cabellos negros con tranquilidad en su voz, expresando esas esperanzas, ese aire de paz que también tenía su madre en el Pasado.

- Cierto, no nos preocupemos, por ahora, solo disfrutemos esto hasta que llegue el momento.- Habló Wendy Corduroy, quien se hallaba recostada sobre un tronco de árbol caído, sin tener miedo o temor a lo que venga el Futuro.- No importa lo que pase, eso no significará que rompamos todo vínculo de amistad, nos unió la "Guerra Santa contra Poseidon" y luego contra Hades, el Olimpo y Andreas Lize/Loki, ¿creen que nos borrarán la memoria?.- Preguntó ella, con los ojos cerrados y mirando hacia los Cielos.

- Vaya, entendí, esa referencia.- Dijo Ronaldo hacia lo que había dicho la chica.- Pero, ya en serio, es verdad, nada ni nadie nos separará.- Juró él y fue juntando su mano para unirlas con los demás.- ¿"Herederos" para toda la vida?.- Preguntó, mientras que se juntaban los demás para hacer ese pacto, aún faltando Star y Marco.

- ¡"HEREDEROS" PARA TODA LA VIDA!.- Exclamaron todos ellos.


- ¡"HEREDEROS" PARA TODA LA VIDA!.- Se unieron Star y Marco desde Echo Creek, sintiendo el Cosmos de sus amigos en Oregon.


- Morty, Morty.- Escuchaba aquel joven castaño una voz que era de un adulto mayor y que al abrir los ojos, allí se encontró con aquel peli celeste y su hermana mayor pelirroja.

- ¿Eh? ¿Qué...Qué pasa, Rick, Summer?.- Quiso saber aquel muchacho, mientras que se levantaba de la cama.

- Ven, tenemos que llegar con él, con el Emperador del Inframundo.- Pidió Summer al chico, mientras que su abuelo abría un Portal con aquella Pistola Dimensional.

- Pero ¿y mama y papa?.- Preguntó el chico.

- Ellos están dormidos, ven, vamos.- Fue la orden que emitió Rick y los tres ingresaron en aquel Portal hacia Royal Woods, Michigan.


La luz de su velador (o lámpara) iluminaba aquella mesa de estudio, allí tenía sus libros abiertos y una carpeta repleta de datos e informes para su proyecto. En ese momento, aquella chica coreana de lentes dejó recostada su birome sobre aquel mueble y vio que la lluvia comenzaba a caer. Era la hora, había que ir hacia su Señor, hacia su Emperador que la estaba esperando, así que tomó aquel Tridente negro, su Símbolo del Poder y para ejercer los castigos hacia aquellos que quisiera rebelarse o atacar a aquel personaje divino y fue hacia ese Portal anteriormente abierto.

- Bienvenida abordo, Chloe Park de Heinstein.- Dijo Morty a la pequeña de cabellos negros, la cual sonrió e hizo una reverencia.

- Me alegra volver a verlos, amigos.- Habló la chica hacia ellos.- Desde la derrota de Andreas Lize/Loki.- Recordó la peli negra sobre aquella última aventura, la cual tuvo lugar en Asgard.

Pronto, los cuatro partieron hacia aquella región para asistir a aquel encuentro con el Emperador.


Llovía, hacía frío también en la Europa del Este, en donde se encontraban dos personas en un café, uno castaño y de ojos esmeralda, acompañado por otra persona, la cual no se lo podía ver, excepto por sus manos, las cuales eran de un color pálido, al igual que todo su cuerpo. Ambos se hallaban tomando un café caliente, mientras que conversaban sobre eventos a Futuro, movimientos qué hacer y en especial un posible acercamiento hacia aquello que se estaba produciendo.

- Entonces.- Dijo el primer muchacho hacia el castaño.- ¿Qué opinas? ¿Aceptarás esa llamada para convertirte en un Espectro del Señor Hades, Dimitri Sasha Ginovaef-Yoshikage?.- Preguntó éste hacia aquel joven, el cual tenía su taza de café en la mano izquierda, mirándolo con asombro y de ahí lo bajaba.

- ¿Qué? ¿Yo, un Espectro?.- Quedó atónito y hablando con un fuerte acento ruso, depositando la taza sobre la mesa.- Bueno, es...es complicado de decir, para empezar cómo es que fui elegido, no lo entiendo.-

No tuvo tiempo para responder, ya que en ese momento, el otro joven se levantó de la mesa, pagando el café y de ahí procedía a retirarse.

- Me encantaría responderte a esa pregunta, amigo, pero debo irme, ha llegado la hora. Piénsalo, mientras tanto, ¿sí?.- Le dejó aquella "tarea" al muchacho, para después desaparecer del lugar, dejando a su amigo pensativo para ver qué decisión iba a tomar con respecto a la "oferta" que le hizo.


- "Vaya, así que por fin vas a escoger el bando que representará tus acciones en el Futuro. Hmmm, quisiera verlo y ser testigo de ello".- Pensó aquel chico rubio y acompañado por una muchacha pelirroja, ambos también portaban Armaduras pero éstas eran de otro Dios poderoso y sus nombres eran Brady de Caballo Marino y Mavis de Sirena, siendo ambos dos de los "Generales Marinos" del Emperador Poseidon, mientras que recibían aquellas noticias de los vientos que venían desde Royal Woods hacia el Templo Divino.


En el Palacio de Giudecca, Inframundo, allí se estaba llevando a cabo aquella "coronación imperial", en la cual todos los presentes que fueron escogidos por las "Estrellas Malignas" habían llegado desde varias partes del Mundo y de EEUU para presenciar aquel momento tan importante. A su vez, Lincoln se hallaba en el Centro, era el "Anfitrión" y delante suyo se hallaba aquel Trono, uno de los símbolos de su poder en aquel Mundo desconocido y en donde se estaban tejiendo los momentos más importantes de la Historia de aquel albino, su familia y amigos.

Todos estaban en formación militar, de un lado al otro frente al Trono Imperial, aquel albino observaba la escena y esperaban el gran momento. Se sentía nervioso, un nudo se había formado en su garganta, costándole tragar saliva y aquel mismo sentimiento se había apoderado del control de sus piernas, llevando a que no pudiera levantar las mismas y caminar hacia ese sitio. Todos lo observaban pero no decían nada, sería una falta de respeto hacia el "Protocolo", así que se mantuvieron en silencio hasta que Lincoln tomó un largo respiro, cerró los ojos y se quedó mirando hacia todos ellos.

No sabía qué decir, se sentía raro, el vestir esas ropas, portar aquella Espada Imperial y esa Armadura Divina le hacía ver que era como un "Fenómeno de Circo", uno al cual la gente no tenía que insultarlo, ya que estaba en el escalón más alto de la "Pirámide" y cualquier agravio contra él, sería considerado un ataque al respeto para el Emperador del Inframundo y sus hermanas se harían cargo de hacer pedazos a aquel pobre iluso que se atreviera a provocar al joven albino.

- ¿Va todo bien, Lincoln?.- Preguntó Lucy, la cual caminó hacia el chico, tomándole de las manos y éste la miró de frente, temblando un poco y sin poder expresarse bien.

Todo esto era atestiguado por Lynn, ella deseaba estar ahí, sosteniendo las manos del Emperador, pero aquel recuerdo del Pasado, ese que aún perduraría en sus mentes, llevaría a actos de juicio para más adelante. Fue entonces que ella tuvo que mantener aquellos sentimientos "encarcelados". No podían salir a flote, no podían repetirse los acontecimientos del Pasado, esos debían ser suprimidos, destruidos y así asegurar un nuevo comienzo para todos ellos.


Mientras tanto, en el Santuario, sitio y baluarte de la Diosa Athena, cuya reencarnación es Saori Kido, aquella joven Deidad, protegida por la Élite suya, aquellos que son los Guerreros más fuertes, cuyas Armaduras representan a sus Constelaciones, capaces de rasgar los Cielos con sus puños y partir la tierra con sus piernas, era allí donde los futuros Caballeros Dorados estaban terminando los entrenamientos para suceder a sus Maestros y por los que estarían llevando las Armaduras de Bronce y Plata, listos y dispuestos para pelear por su Diosa, por el amor, la Justicia y la paz en el Mundo contra aquellos que tuvieran la osadía de levantarse en armas contra aquellos valores, teniendo sus antecedentes del Pasado como las luchas contra los llamados "Asesinos del Santuario", Saga de Géminis, Asgard, Poseidon, Hades, el Olimpo y finalmente Andreas/Lize, tarea llevada a cabo por los "Herederos" y sus Aliados junto con los Santos de Oro caídos en el "Muro de los Lamentos", castigados por los Dioses y luego liberados tras la muerte de Apolo, éstos habían vuelto a Atenas, Grecia, para terminar de preparar a los suyos y proteger, mientras tanto, a Athena.

Ella caminó por aquellos pasillos, escoltada por aquellos chicos que eran los nuevos "Sucesores" de sus Santos de Élite, aquellos que habían venido y lucharon por ella, ahora eran los que portaban las Armaduras Doradas, siendo preparados por sus Maestros, los Caballeros Dorados de ahora junto con los otros. Se sentía que el viento atraía noticias, pero ¿de qué clase?. Se sentía raro de que aquella persona pudiera ser su Aliado contra un futuro enemigo. Se tomó un rato en analizar la situación que tenía delante suyo, una parte suya decía que no podía tomarse a la ligera a una persona como ese chico de Royal Woods, pero su corazón de compasión y amor por todos los Humanos en la Tierra, le decía que confiara en esa persona, que no había nada de qué temer.

- Señorita Athena, ¿todo está bien?.- Preguntó aquel que portaba el Arco y Flechas de la Justicia, que atravesaba los corazones de los villanos malignos y que abría el camino hacia el Futuro.

- No te preocupes, Seiya, estoy bien, solo...solo estaba pensando en un asunto muy importante.- Dijo la chica con su voz tranquila, serena, pacífica hacia el joven Caballero Dorado de Sagitario, quien se acercó hacia ella, a la Diosa que había protegido toda su vida junto a sus amigos y Aprendices.-

- ¿Tienes dudas con respecto a Lincoln?.- Preguntó el castaño del Templo del Centauro y eso la tomó por sorpresa a la peli lila.- No tienes de qué temer, tu corazón te dice que debes reconocerlo que es nuestro Aliado, pero tu espíritu te dice lo contrario.

- Es...es verdad, Seiya, ¿tú qué crees que debería hacer?.- Lanzó Saori su pregunta hacia el chico.

- Eres la Diosa del Santuario, pase lo que pase, nosotros estamos para protegerte, incluso daríamos nuestras vidas por ti y por este Mundo. Pero con este punto sobre Lincoln, tómate tu tiempo para pensarlo y sacar una buena conclusión.- Respondió el muchacho, dando aquella idea a la chica, quien asintió con la cabeza y se volteó hacia él.

- Tienes razón.- Comprendió ella el mensaje del chico y éste le tomó de la mano, en señal de respeto y como su Protector, su "Escudo", acompañándola hacia el Palacio donde se encontraba el Patriarca, la Autoridad encargada por Athena de vigilar a los Dioses Malignos en la Tierra.


Pero, no todo era de color rosas, también habían otros, distintos, que presagiaban que una calamidad estaba formándose, pero no en ese Mundo, sino en otro Universo, en un sitio que comenzaba a germinarse, a gestar aquella "Plaga", tan idéntica a la de los films de zombies, de terror, pero que, por ahora, no había "florecido" aunque cuando llegara a su punto más importante, su "Clímax", ahí sería otro Mundo, uno de locura, de muerte, de destrucción, de caos, una Anarquía que no conocería límites, un "libertinaje" completamente aterrador, pero eso llevaría su tiempo.

¿Anarquía o Peste?. Esas dos palabras, esos dos conceptos estaban por ser puestos a tela de juicio, por ahora, esto era la "calma antes de la tormenta". Muy pronto, aquel Universo iba a ser testigo de un feroz "terremoto" que haría temblar hasta sus cimientos, mostrando un poder nunca antes visto, uno totalmente nuevo y sumamente terrorífico por su origen.

Pero eso, era cuestión de tiempo.


Bueno, aquí estamos, de nuevo en estos "Proyectos de Julio", justo para el día de mi cumpleaños, 2 de Julio, igual que con el final de "Sangre de Hermanos" en el 2017 (final feliz/oficial) y el inicio de "Dead Land" el año pasado.

Vuelvo a decirlo, esto, aunque tenga personajes de otras series y del anime y manga de "Saint Seiya" o "Los Caballeros del Zodiaco, no va a crossovers. Además, había decidido darle un buen nexo al capítulo final oficial de "Sangre de Hermanos" con "El Heredero (Nueva Versión)" y con "Saint Simpsons: Soul of Gold". Cualquier duda, vayan a los antecedentes que se hallan en mis crossovers de "Los Simpsons-Saint Seiya".

Arrancó tranquila la historia, pero esta es la "calma antes de la tormenta". Los personajes han sido introducidos, aunque quedan los otros, quienes los veremos en el próximo capítulo, además de que habrá un equilibrio y participación para todos aquí. Por otro lado, como dije, este último proyecto va dedicado para todos aquellos que me han dado su apoyo, su ayuda y cooperación en proyectos, trabajos y también en momentos complicados y buenos de estos años.

Muchas gracias y dedico este proyecto para:

* FreedomGundam96.

* RCurrent.

* LeoneEpsilon.

* Johnny Kennedy.

* Ficlover93.

* Transgresor 3003.

* AnonimousReader98.

* El Caballero de las Antorchas.

* Sam The Stormbringer.

* Para mi amiga de Venezuela, lady-saintiasailor.

* Conde Midalight.

* El Legendario.

* eltíorob95.

* Plagahood.

* Banghg.

* Arokham.

A prepararse, que en el capítulo 2 comienzan a gestarse los primeros "síntomas" de esta historia, el inicio del terror para cierto Universo y donde veremos a ciertos antagonistas que irán tomando fuerza. Espero que lo disfruten y nos estamos viendo, amigos. Cuídense y un saludo para todos ustedes.

Nos estamos viendo y buen Martes de mi parte.