Capítulo IV: Aún no.

- Mierda – agregó Kara murmurando cuando se dio cuenta de que Lena estaba durmiendo encima de ella y que un movimiento suyo le haría despertar ¿Probablemente? Dado que recién estaba cayendo en un sueño profundo.

Y ante lo urgente de su trabajo en ¿CatCo?

- Bueno – añadió Kara pensando en dormir un poco, un par de horas, aunque sea, hasta que Lena cayera en un sueño profundo e imperturbable.

...

- Increíble, ser niñero a mi edad, y con ésta pinta – murmuraba renegando Luca mientras descendía el ascensor – epa, ¿Qué coño? – ya en la calle se preguntó notando que la gente corría de un lado a otro alterada, eso incentivándole a averiguar qué pasaba, de eso hasta que su celular volvió a vibrar en una alerta, sus amigos le estaban esperando en el bar, esa era su urgencia para bajar al menos un par de horas y él pensando que Kara estaba con Lena, pensó que bien podría tardarse un par de horas más y que la agente Sawyer se joda – algo bueno saldrá de todo esto – se dijo caminando hacia su destino, el bar de la esquina.

…

Luca estaba relajado ignorando todo, Alex estaba preocupada, Maguie muy alerta a todo.

- Detective la necesitamos ¡ - sonó en su radio.

- Estoy en ello, llegaré tan pronto como pueda –replicó – tengo una emergencia familiar, estoy en camino al hospital – les dijo sintiéndose como mierda, al dejarlos solos, pero no podía dejar sola tampoco a Alex y más al ver a Eliza tan preocupada.

- Lo siento mucho amor, sé que jamás los dejarías solos – soltó Alex.

- Yeahhh – preocupada acotó, Maguie encendió la sirena y fueron al hospital tan rápido como pudieron.

Veinte minutos después…

- Maguie, no voy a poder entrar a su oficina si mi jefa está en su puesto – susurró Alex aunque viendo que toda la sala de emergencias estaba muy alocada, como si de pronto todos hubieran decidido masacrarse a golpes, mucha sangre, muchas articulaciones rotas, muchas locura.

- Jefa, jefa ¡ - gritó un interno reconociéndola.

- Voy – soltó ella antes de acudir.

Alex dedicó un tiempo considerable ahí, tiempo que maldecía Maguie al estar separadas de sus colegas, mas eso no evito comunicarse con ellos por radio notando que la violencia en las calles escalaba un montón.

Y justo pensando en que Alex estaba tardando mucho en encontrar el momento, Maguie ardió un ardid y fue a recepción – necesito hablar urgentemente con la doctora Carter.

- Está en su oficina, no puedo molestarle – su recepcionista.

- Es urgente, que venga aquí urgentemente o le haré detener ¡ - ordenó Maguie y la asistente llamó para hacerle venir, y ella hizo una seña a Alex para que vaya a hacer lo que sea que tenga que hacer.

- Necesitaría una orden para tal caso – contestó la mujer por teléfono cuando la asistente le alcanzó a por su respuesta.

- ¿Qué le hace creer que no la tengo? No juegue conmigo que mi paciencia se acaba.

- Estoy en una reunión, necesitaré mínimo 15 minutos.

- No tengo tal tiempo, ¿Usted viene o registro un caso de resistencia a la autoridad? Doctora usted es una colega, mujer trabajadora, concédame una entrevista espero que rápido, antes que esto escale estúpidamente sin tener motivos de serlo.

- Está bien – aceptó la doctora y apenas pudo salir de su oficina, Alex limpiándose la sangre de las manos en una toalla que cogió del carrito de los mismos cuando un auxiliar las llevaba, con la misma prisa se deslizó hacia la oficia de su jefa.

Y si a Maguie el sonido de la voz de la doctora se lo hizo familiar, ella no se dio cuenta que tanto, hasta que le vió venir.

- Bien, hablemos – propuso la jefa de todos ahí, la directora del mismo hospital.

- Alex y Eliza me la deben en grande – pensó antes de inventar la historia más bizarra y a la par convencible que pudo advertir y recurrir para salir de ahí, para demorarle lo necesario y a la par ¿Entretenerle? Demorarle en tal caso – oh mierda ¡ - exclamó ni bien verle.

- Claro que lo es – replicó la doctora viéndole con desdén.

Alex entró a su oficina, se demoró poco más de 8 minutos que es lo que demoró la paciencia de la doctora Carter con Maguie.

- Tiempo suficiente – replicó Alex yendo al encuentro de su esposa - ¿Cómo fue amor?

- No me dijiste que la doctora Carter, era Ana Carter, mi ex.

- ¿Es ella?

- Sí.

- No, no, tu ex es Lauren Carter.

- Johana Lauren Ana Carter, amor. ¿Sabes lo incómodo que fue?

- Mierda – soltó Alex sintiendo un ¿No sé qué? En el pecho, su jefa era la ex de su esposa, esa ex tóxica que le causó mucho daño, esa eminencia médica que ella admiraba más que nada.

- ¿Obtuviste algo?

- Sí, lo copie, todo está en código, no entendí nada, espero mamá entienda – dijo y con ello ambas salieron hacia su auto – mierda, si ve la cámara de seguridad, pienso que se dará cuenta de que algo hice en su oficina, aunque por dentro no tiene cámaras de seguridad, pero sí en el pasadizo.

Maguie condujo hasta un café internet para acceder a una computadora y desde ahí enviarle lo que sea eso a Eliza y mientras hacían eso, Maguie se preocupó por el ruido al final de la calle, un estallido sonó, una explosión – mierda, Alex tengo que ir.

- Lo sé.

- ¿Me esperas aquí?

- Sí, cualquier cosa te llamo – Alex añadió quedándose con el teléfono satelital de Maguie.

- Hanna no la dejes salir – le pidió a la señora dueña del café haciendo un ademán con las manos.

- A la orden jefa – a Maguie con una seña – estuve en la policía por un tiempo – a Alex que le miraba gracioso – Maguie Sawyer era la novata más prometedora desde mucho, me da alegría que lo esté logrando en grande.

- Sí, ella es grandiosa – enamorada añadió, antes de mandar el material a su madre.

…

Una hora pasó cuando Kara despertó ante golpes constantes en su puerta.

- Hola – saludó Kara a su novio, él se giró viendo a Kara en otro departamento, eso no le importó nada, un poco despistado era, el robarle un beso en la boca sí.

- Hey – Mike con una sonrisa de lado – estuve en CaTCo no estuviste – preocupado le miró.

- Es mi día libre, hoy no voy.

- Ah bueno.

- Yep – kara y Mike mirándose, Mike se rascó con una mano la cabeza.

- ¿Vamos a algún lado?

- No puedo.

- ¿Por qué? – Kara miró dentro del departamento, Lena estaba dormida, bien podía quedarse un rato a solas y ellos ir por comida, más el dejarla sola, por más que acababa de conocerle no le sonaba nada bien.

- Una amiga está durmiendo ahí, no la puedo dejar sola – soltó Kara por más que no eran amigas, es más, Kara no sabía cómo iba a reaccionar Lena ni bien despertase, ya que estar sumida en una situación así, te hace actuar de cierta manera y el día siguiente podría ser totalmente distinto, nadie lo sabía.

- Ese no es tu departamento. ¿Es el de ella?

- Puede ser, realmente no lo sé.

- ¿Podemos estrenarlo? – coquetamente pidió.

- Nooooo ¿Y si despierta?

- Ese es el peligro que encandila todo.

- No.

- Oh vamos Kar, no sólo de pan vive el hombre – soltó enseñándole los abdominales que tanto le ponían a Kara y ella pensó que, si no hubiese conocido a Lena pues sí, inmediatamente lo haría dónde fuera con Mike, pero el conocerla le había confundido un poco. Y ese sentimiento de confusión, le hizo querer comparar ambos besos, ¿Por qué era imposible que sintiera tanto con un beso de Lena a con la relación con ¿Mike? Por lo que decidió comparar.

Kara cogió con delicadeza el rostro de su novio para besarle, a diferencia de él que cogió con ambas manos su cintura y le hizo girar para risotadas de Kara, ambos entraron al departamento de Kara a tener sexo, dado que ella negó hacerlo en dónde estaba lena, Mike aprovechando que Alex y Maguie no estaban ahí.

- ¿Vendrán pronto? – le preguntó pegando su espalda a la puerta.

- ¿Aún les tienes miedo? – preguntó riendo Kara mientras la mano de Mike exploraba su estómago debajo de su polera.

- No, no, para nada – mintió él - ¿Están en casa? – preguntó bajito y Kara rió para luego tomarle la mano y ambos irse a su cuarto.

…

Pasadas las 9pm, Lena se levantó con una pesadilla de su abuelo pidiéndole ayuda desde la tumba, eso le escarapelo todo el cuerpo, le asustó como mierda, le levantó de sopetón, Lena sentándose en la cama trató de orientarse sobre qué había ocurrido.

¿Y qué había ocurrido?

Luca le había dado dos píldoras, pero no para dormir, él se había equivocado y le había dado una antigripal y una aspirina, por lo que la antigripal le dio algo de sueño, pero no del todo, como para dormir toda la noche.

Lena sentada en la cama empezó a pensar qué había ocurrido, no se orientaba del todo - ¿Kara es real o no? – se preguntó aún bajo la influencia de la pastilla lo cual la adormilaba más, bien podría haberla imaginado.

Ella estaba pensando eso, cuando para orientarse mejor se le ocurrió salir del cuarto y buscar más información – ah mierda – soltó viendo que su ropa hecha mierda estaba a un lado, toda mojada, así que la cogió para llevarle a la lavadora y de ahí a la secadora.

En eso estaba cuando la puerta se abrió de sopetón – ahhhhhhh ¡ - gritaron ambas y se sonrojaron a mil, súper rojas, Kara y Lena.

- ¿Qué pasa amor? oh vaya – soltó Mike con la sonrisa de canchero mirando a Kara así y a Lena rojita mirando a ambos y una mierda, Lena le miró a él como diciendo "bueno, lo que te tocó, qué se va a hacer".

Mike frunció el entrecejo.

¿Y qué ocurrió?

- Maldita sea Kara, carajo ¡Estás desnuda ¡ - gritó Alex llegando al departamento y entrando a el, con lo que Lena se paró delante de Kara para cubrirle con su cuerpo, Mike cogió un almohadón y se cubrió sus partes.

- Auuuuuuu auuuuuuuu ¡ - gritó Mike al Alex pegarle en los brazos puñetazos.

¿Qué ocurrió?

Kara había salido desnuda al departamento de al lado y Mike también persiguiéndole a por su celular.

- ¿Qué fue? – preguntó Luca llegando un poco borrachín – eh, mierda, hay fiesta ¡ - exclamó viendo a Mike así y a Kara, él movió sus cejas sugerente, Maguie lo noqueó de un golpe con la cacha de su pistola y miró a Mike con el afán de pegarle igual.

- Ya ya, paren ¡ - gritó él con las manos en alto cayéndosele la almohada.

- Iughhh – de Lena entre arcadas, junto a Alex y Maguie.

- Vístete o te disparo – Maguie apuntándole con su arma con lo que Mike corrió al otro departamento a vestirse - ¿Cuidado de elaborar? – le pidió a Kara.

- Luthor cierra los ojos ¡ - ordenó Alex.

- Si señora – replicó ella haciéndolo sin saber quiénes eran todas estas personas a su alrededor y sin ganas en ese momento de descubrirlo dada la mirada con fiereza de Alex que se quitó el abrigo para colocárselo a su hermana.

- Te vas a vestir ya ¡ - le ordenó.

- Alex yo…

- Ahora no quiero saber nada ¡ ¿Quieres que te trate como una adulta? y te portas así.

- Yo creo…

- Que te calles Luthor ¡ - ordenó Alex y como le estaba gritando a Kara, el único ser que si era muy real y que había sido muy amable con ella al conocerle, pues no le dio la gana, es más se lo dijo.

- Pues no me da la gana – le replicó firme, se giró ante ella y sosteniendo su mirada añadió – no me importa un carajo quién seas, pero a ella no le hablas así.

- Paren ya – Kara se paró entre ambas mirando el fuego en la mirada de ambas, que, si seguían en lo suyo, se iban a agarrar a golpes, que Alex ya le odiaba sólo por ser una Luthor.

- Chicas enfóquense – de Maguie - amor, a lo importante – a Alex que, ante lo dicho por su novia, el fuego en su mirar se acabó al toque y la preocupación le invadió sorprendiendo mucho a Lena y Kara.

- Kar, Lena, cámbiense muy rápido y nos reunimos aquí – presurosa acotó incluso temblando al servirse una copa de whiskey.

- Hermana ¿Qué ocurrió?

- Kar por favor hazlo y les decimos – Maguie pidió y ambas lo hicieron mirando a la pareja muy preocupada.

- Mi ropa está mojada.

- Kar tiene ropa, ve pequeña Luthor – Maguie le ofreció una pequeñita sonrisa, Lena asintió.

Lena caminó junto a Kara a su departamento viendo a Mike vestirse en la sala de estar, al menos ya estaba con jeans – hey nena ¿Ves algo que te guste? – todo coqueto le guiñó un ojo.

- La verdad que sí – Lena le respondió.

- ¿Eh? – Kara y Mike pero con distinta energía.

- Kara ¿Me puedo comer ese yogurt? – le preguntó indicando con el dedo el yogurt sobre la mesada de la cocina y eso descorchó de risa a Kara e hizo bufar a Mike que añadió – algo de malo debes de tener.

- Mike, compórtate ¡ - exigió Kara.

- ¿Te acompaño a cambiarte?

- No, retírate – le pidió y él asintió bufando, él quería verlas, a ambas y aunque Lena a juicio de él tenía una actitud de mierda, buena si estaba, él se fue luego de mirarle el trasero a ambas, bien cancherito y sonriente, eso hasta que se acordó que tenía que ver a Alex en la otra habitación y le dio miedo.

- Te espero afuera amor ¡ - le dijo, ni loco iba sólo.

Mientras Kara y Lena entraron en su dormitorio, Kara se sacó el abrigo y Lena volteó a mirar a otro lado, de pronto el techo se veía muy interesante.

- Listo – dijo Kara y Lena se volteó confusa de porque se vistió tan rápido, aquello era imposible.

- Oh mierda – replicó Lena cerrando los ojos.

- Lena, ábrelos – pidió Kara con ropa interior solamente, de ahí el sonrojo y el comportamiento de Lena. A la par que ella nunca se había cambiado en compañía de otras chicas, como sí lo hizo Kara en clase de gimnasia, ni siquiera en el internado, ya que cada una tenía su camerino, y con la plata que manejaba para ese entonces, muchos lujos más.

Kara se paró delante de ella y le tomó las manos, ambas entrelazándolas, ambas sonrojadas.

Kara en ropa interior.

En ropa interior ¡

- ¿Estás bien? – preguntó Kara susurrándoselo.

- Sí.

- La que gritaba era Alex mi hermana, ella es muy sobreprotectora, es doctora, Maguie es su esposa, mi cuñada, es detective y el chico de afuera es Mike, mi novio – y mientras Lena iba asintiendo a lo dicho, ante lo dicho por Kara de Mike hizo una mueca que hizo sonreír a Kara – soy Kara Danvers por cierto.

- Lena Kieran Luthor, pero no soy como ellos, la gente suele juzgarme por mi familia, es más, creo que ya no tengo familia – soltó triste y a Kara se le borró la sonrisa de golpe.

- No sé de eso, pero me tienes a mí aquí, estoy aquí. ¿Eso cuenta?

- Eso cuenta mucho – respondió Lena asintiendo – no te pregunto cómo estás porque estabas desnuda – roja le recordó.

- Omg Lena, mira como me vienes a conocer – soltó Kara y echó a reír.

Mientras en el otro cuarto, Alex y Maguie estaban sentadas en el sofá cogidas de la mano, muchos sonidos de fuera se colaban, todos de miedo, de tragedia, de estallidos, de todo un poco.

- Están demorando mucho amor – Alex quiso ponerse de pie e ir a buscarlas.

- Déjala un ratito más, cielo, antes de que sepan.

- Eso sí, que rían un ratito más, tienes razón – pidió Alex ambas mirándose preocupadas, mientras Luca gemía en el piso despertándose.

Lena estaba mirando a Kara reír, aún ambas cogidas de la mano, y carajo, era una de las sensaciones más bonitas que creyó tener aún en ese día de mierda.

- ¿No estás adormilada? – preguntó luego Kara recordando ese detalle.

- Un poco, no creo que me haya dado pastillas de dormir, sino aspirinas o algo así.

- Joder – rió Kara soltándole de las manos con lo que Lena volvió a sentirse vacía tal cuál antes – tengo ropa para que te pongas, puedes cambiarte – dijo y Lena empezó a desvestirse, quedando en ropa interior.

Kara volteó a alcanzarle una ropa que sacó de su closet y – rayos ¡ - exclamó poniéndose aún más rojita, ambas con la boca seca al mirar a la otra.

De pronto el día de mierda de Lena, ya no era tal cual, al mirar la expresión del rostro de Kara y todo su cuerpo, al menos en ese instante.