Capítulo V: Mi Luz

Advertencia: Escenas que incluyen violencia.

Sirenas de policías, de ambulancias y de bomberos sonaban no tan a la distancia.

Kara y Lena en ropa interior se miraron sonrojadas y rojitas.

Vaya forma de conocer a una persona, ambas sonrieron y se vistieron en un silencio cómplice mientras Mike esperaba afuera, que muchas ganas de ir dónde Alex no tenía.

- Amor ¿Ya sales?

- Ya voy – contestó Kara robando una última mirada a la espalda perfecta de Lena y a ¿Su tatuaje? – awww – le arrulló incapaz de contenerse, Lena se puso muy rojita y le sonrió muy bonito.

- Éxito ¡ - coreó la mente de Kara.

Y ya ambas vestidas salieron a la sala de estar dónde Mike les esperaba – hey – soltó mirando de arriba abajo toda su nena antes de tomarle la mano y salir y si bien Lena lo miró, no dijo nada, eran novios después de todos.

Los tres entraron al departamento de Luca – princesa ven aquí, ésta vieja está loca – le dijo por Maguie pidiendo la mano de Lena y ella se la tomó sentándose a su lado, que su mejor amigo era, él con un parche en su cabeza por el golpe.

El televisor reproducía noticias inentendibles y bizarras y aun así, como estaba a bajo volumen fue ignorado por todos al ver la gravedad en el rostro de Alex y Maguie.

Lena y Luca se sentaron en un sofá, Kara y Mike en un sillón y Maguie con Alex en el otro sofá.

- Bien, cállense y escuchen por favor.

- Shhh – Lena a Luca que quería hablar, él asintió haciéndole caso, con lo que Alex le contó lo dicho por su madre momentos antes, lo ocurrido con ella, todo bajo los sonidos de la ciudad, explosiones, incendios, Maguie apagó con pesar su radio porque no dejaba de sonar, ella con un dolor intenso en el pecho, ya que era o su carrera o su familia, y ambas tiraban para lugares distintos.

Alex inició su relato:

Inicio de flashback:

Mientras Alex estaba en la cafetería internet, Maguie se fue al final de la calle a auxiliar a quien estuviera en peligro en aquella explosión enorme que vió, producto del choque de un auto con una cisterna de combustible que estaba descargando en un grifo.

- Hay algún herido ¡ - gritó ni bien llegando, viendo a dos carros de policías con ellos temblando detrás apuntando sus armas hacia delante – eh ¿Qué hacen, que no ayudan a los heridos?¡ - gritó e intentó ir hacia allá.

- No detective, atrás – le pidió una oficial – no se acerque.

- ¿Por qué? – preguntó muy confundida, cuando la policía empezó a disparar a un objetivo causando sorpresa en Maguie quien, de estar mirando a la oficial, volteó a ver el blanco al cuál disparó.

Era un sujeto, sin mandíbula, con la misma colgando, toda la cara ensangrentada, con trozos muertos como si fuera un trozo de carne verde pudriéndose, la misma que era su piel, sus ojos desorbitados enormes – es imposible – susurró Maguie viendo el cuerpo del sujeto, en igual estado de putrefacción, mucha sangre, colgajos de piel, los huesos de la mano derecha estaban expuestos como si hubiera golpeado con mucha fuerza la mano contra la pared hasta que se expuso el hueso.

"Imposible" ante los ojos de Maguie estaba ocurriendo, tal señor con ese "daño" no podría estar caminando, no estaría vivo para tal caso y ese sujeto había corrido hacia ellas con gran rapidez, gimiendo y gruñendo, la policía había disparado contra su cuerpo y nada lo había detenido por lo que le disparó finalmente en la cabeza e incluso cuando el sujeto cayó al suelo siguió retorciéndose por bastante tiempo antes de ¿Morir? O ¿Ya estaba muerto antes? En tal caso ¿Morir el no muerto, pero tampoco no vivo morir y quedar muerto?

Eso.

Maguie al ver aquello sintió miedo, el sujeto ese era imposible de caminar y mucho menos de correr – hemos estado viendo eso desde pocas horas mi detective, no sabemos qué ocurre, a Parra lo acuchilló una de esas cosas.

- ¿Está fuera de peligro?

- Sí – contestó la mujer y Maguie pudo respirar, la culpa en ella de dejar a su equipo era enorme, pero tampoco podía dejar a Alex, su corazón estaba jodidamente dividido.

- ¿Qué son, Zombies, no muertos, cosas?

- Es una forma de llamarlos, no sabemos detective – con miedo la mujer.

Ambas no pudieron seguir hablando más porque había una horda dentro de un restaurante y ellos no estaban para nada preparados para ello – vayan a la comisaría ahora, nos reuniremos en 30 minutos máximo – le pidió y ninguno de ellos le dieron la contra, todos aterrados, por lo que se retiraron con prisa, Maguie con premura volvió hacia Alex sólo para mirar que tenía un semblante como si se fuera a desmayar, por lo que ella tomó la mano del celular satelital de Alex y le pidió a su suegra que repita lo que dijo.

- Éste virus no es normal, es una mutación de un cruce artificial entre el virus de la rabia y uno que no he identificado o bien podría una gama de ellos, he visto lo que hace en el humano aquí en un laboratorio, más pienso que no sólo está aquí, lo que se cree es una guerra civil o disturbios a nivel mundial, no es tal, son ellos, esas personas que sin personas y sin estar vivos ni muertos, caminan y corren con gran rapidez, son esas "cosas" infectadas con este virus que se propagan con rapidez que van por ahí haciendo mierda todo, matarán a todos, la ira con la actúan inicia muy bajo, como un incidente sin relevancia para después escalar a niveles catastróficos – mientras lo decía Maguie empezó a temblar, Alex cogió su mano en igual estado al recuperar su conciencia – Maguie no hay forma que puedas frenar esto, no lo intentes, Alex no hay forma de averiguar una cura, hijas, prométanme que tomarán a Kara y se irán de la ciudad lo más rápido que puedan, nos encontraremos ni bien pueda, Alex sabe dónde, prométanmelo ¡… - pidió antes que la llamada se cortara.

Y si Alex pensó que su madre podía estar exagerando para cuidarla y evitar que vaya al hospital tratando de encontrar una cura, pues todas sus dudas fueron resueltas en un instante al dos de esas cosas ingresar al local rompiendo un gran ventanal y atacar a Hanna y a otro comensal atacando sobre el cuello, arrancándoles piel y arterias como si de un monstruo rabioso se tratara, matándoles con gran rapidez al desangrarse ambas víctimas.

Maguie cogió la mano de Alex y le arrastró como pudo hacia su auto para luego ir al departamento.

Fin de flashback.

Luca, Lena, Mike y Kara se quedaron mirando sin decir ni una sola palabra – no inventes – hasta que Mike soltó lo primero que se le vino a la mente.

Luca se levantó a coger el control y subir el volumen a las noticias incluso haciendo zapping para buscar otros canales y ver si reproducían lo mismo u otras cosas.

Todos decían una variedad de lo mismo, "Zombies" atacando, matando, desgarrando y comiendo a personas sanas, incluidas algunas mascotas.

- ¿Tanto tomé? – preguntó Luca yéndose de sopetón toda su embriaguez del susto.

Kara, Alex y Maguie se miraron, comunicándose en silencio como hacían al conocerse tan bien, comunicándose que, si bien Eliza le había hecho jurar proteger a Kara, Alex no podía faltar a su juramento de salvar tantas vidas como pudiera y Maguie no podía dejar a su equipo en el aire y mucho menos incumplir su juramento de proteger a la ciudad, ellas debían intentarlo, no podían evitarlo, ellas tenían que intentar al menos averiguar un poco más de que se trataba todo.

- Tenemos que intentarlo – Maguie acotó por ambas (la pareja), Kara quiso rogar que no, más al ver su mirada, su decisión, Kara supo que no podría convencerlos de lo contrario.

- Solo un par de horas Kar, sólo eso, me esperarás aquí y nos iremos juntas – pidió Alex y ella a regañadientes asintió, sin querer separarse de su hermana.

Kara quería ir con ella, más estar afuera al aire libre, expuesta, era la peor idea de todas, estaría más expuesta a lo que sea, ella bien sabía que Alex se distraería al protegerla y podía acabar herida o muerta, el hospital y la calle eran muy peligrosas en ese momento, por lo que optó por hacerle caso.

- Toma mi arma – dijo Maguie a Kara, más ella no sabía manejarla, nunca había agarrado una, por más que Maguie insistió en querer enseñarle repetidas veces, sólo para que sepa hacerlo.

Kara titubeó, Mike quiso cogerla, pero Maguie no le dejó, por la que Lena la agarró, viendo cuantas balas tenía, la rastrillo y le puso un seguro para luego ponérsela en la cintura.

- Eres una Luthor – acotó Alex, no había nada más que decir, Lena asintió, el manejar armas lo había hecho desde niña.

- Yo le enseñaré, no es difícil – replicó Lena a Alex.

- ¿No es justo, porque no me lo das a mí? – preguntó Mike.

- Porque Lena tiene más ganas de dispararte a ti, que hacerse el cancherito y terminar volándole la cabeza a Kara mientras presumes – Alex añadió.

- ¿Eh? – confuso Mike miró a ambas mujeres.

Y siguió – además, Luthor o no, pienso que protegerá a mi hermana, ¿Es así? – le preguntó a Lena y ella asintió, los Luthors se distinguían por ser una mierda, pero también por ser leales con quienes protegían.

- Un par de horas, máximo tres y nos iremos todos juntos – pidió Alex y Kara asintió – por si pasa algo, ya sabes dónde ir – añadió un poco más taciturna, Kara asintió.

Desde siempre su madre les decía, será por su mismo trabajo, que si ocurría algo, todos debían encontrarse en el mismo punto, Kara siempre pensó que estaba exagerando, más en ese momento le agradeció mentalmente aquello.

- ¿Dónde? – preguntó Mike mientras la pareja salía por la puerta, Maguie sacando otra arma de su tobillo.

Ambas yéndose hacia la base del problema creyendo que podían contener la base de ellos al menos hasta que el ejército hiciera presencia.

Eso no ocurriría hasta que fue muy tarde.

- A la mierda, por lo que parece – añadió Luca viendo la televisión.

- No puede ser real, seguro es una broma elaborada – soltó Mike sentándose en el sofá y revisado su celular a por las redes sociales.

Un segundo.

Dos segundos.

Tres segundos después y no, él vió que no era una broma, él se pasó 10 minutos viendo todo, antes que todas las redes cayeran al tráfico ser masivos al igual que las llamadas telefónicas, los mensajes de WhatsApp todavía andaban, pero con mucha demora.

- Todo empezó con una explosión, dicen – Kara les dijo a todos con celular en mano antes que las redes cayeran – aunque no tiene ningún sentido.

Lena se sentó frente a la televisión a ver qué pasaba, Luca, Mike y Kara se fueron hacia los grandes ventanales a ver qué ocurría fuera, por según todos los ruidos presentes.

Los tres mirando como Maguie a punta de arma obligaba al portero a cerrar el edificio ordenando que los de alrededor hicieran lo mismo.

Primera fase: contención.

- La televisión está obligando a todos quedarse en casa o en algún lugar seguro – dijo Lena antes de ver que el sonidista saltó hacia los locutores y los mató – maldita sea ¡ - jadeó y todos voltearon a ver por unos segundos como lo mataba antes de cortarse la señal.

Lo malo es que ya había infectados dentro del edificio, antes de bloquear las salidas y ninguna lo sabía.

Pasadas 2 horas, Lena estaba un poco agotada mientras seguía en el sofá dado toda la emocionalidad de ese día, Kara decidió sentarse junto a ella para ver si estaba bien.

- Es mejor que duermas un poco – soltó.

- Es genial que ambas de nuestras novias se caigan bien, aunque se trate de Lena – Mike a Luca, ambos sentados en el alfeizar del ventanal – aunque hay algo mal con ella, no sé, parece apagada.

- ¿Qué dices? No es mi novia. La mía me dejó por un imbécil, durará poco, ya vendrá a mí – convencido se siguió mintiendo a lo que Mike volteó a mirarlas, ambas parecían caerse bien.

- Bueno – replicó él pensando que Lena podía ser una buena adición que se encargue de las necesidades emocionales de su novia, recordando luego que acababa de tener sexo, uno muy bueno, por lo que, si Kara sólo lo necesitara para el sexo, él sería muy feliz, por ello sonrió enorme, fue a la cocina por un vino y se puso a tomar con Luca.

- Deberías dormir un poco – susurró Kara – y muchas gracias por enseñarme a usar un arma – le agradeció, pensando que había sido muy fácil, no recordando en ese momento porque se negó tanto a aprender desde un inicio – ah – recordó luego, porque no quería dispararle a nada vivo, más en las noticias dijeron que esas cosas no estaban vivas, así que eso era algo bueno.

- No lo sé – suspiró cansada ante la idea de dormir. Dándole el arma a Kara para que ella la lleve.

Con lo que Kara tomó su mano, entrelazó sus dedos y ambas se quedaron ahí, con pequeñas sonrisas bajo un silencio cómplice.

- Sé que hoy fue un día de mierda.

- Lo fue realmente – conversaban ambas en voz baja, mientras los chicos reían por un chiste tonto que sólo podían entender ellos.

Kara le dio un apretón de mano y siguió - pero surgió algo bueno, el conocerte.

- Lo mismo digo, no sé cómo estaría ahora de no ser por ti. Supongo que estaría desmayada por el alcohol o algo así.

- Aunque nos conociéramos en estas circunstancias, todo lo que ocurrió entre nosotras – Lena asintió con una pequeña sonrisa, había pasado de todo con esa chica que le sonreía a su lado.

Lena recordó con una calidez en su corazón lo ocurrido con Kara:

"Kara le cobijó durante el entierro de su abuelo.

Ambas se besaron, Kara le devolvió el beso, ella besaba impresionante, Lena se sonrojó

Kara le acusó de acosarla en el ascensor.

Kara le cuidó cuando creía estar drogada para dormir, cobijándole en sus brazos para darle soporte emocional.

Kara salió desnuda y ella pudo ver todo, aunque por un segundo, ya que luego cerró los ojos, Lena se puso muy roja, Kara era espectacular ¡

Kara le prestó su ropa, sonrojándose también cuando le vió en ropa interior. Lena hizo una anotación mental que, aunque Kara tuviera novio, respondió de manera "especial" hacia ella.

Y más importante de todo, Kara le ofreció su amistad, primero siendo una desconocida y luego sabiendo que era una Luthor, eso era muy importante.

Kara había llegado a su vida justo cuando la necesitaba"

Y por ello Lena estaba agradecida y aunque ese día perdió su trabajo, su patrimonio, su familia, a su abuelo, aunque no tenía nada en ese momento, sólo lo que traía encima, ella no estaba angustiada, incluso en un posible universo Zombie, ya que tenía la luz de Kara con ella.

Ambas tuvieron un momento especial mirándose, de eso, hasta que escucharon gritos en el pasadizo seguido de unos disparos y mucho desconcierto, todo ello hizo saltar a los cuatro de miedo.

- ¿Qué hacemos? – preguntó Luca buscando su bate de béisbol, le dio su palo de hockey a Mike, Kara tenía el arma desenfundada en un segundo y sin seguro, listo para todo.

Lena fue a por unos cuchillos.

Los gritos seguían incrementándose.

Golpes frenéticos se escucharon contra su puerta, vecinos gritando por su ayuda.

- No abras ¡ - gritó Mike.

Lena que estaba cerca de la puerta retrocedió poniendo a Kara detrás de ella, los gritos y golpes siguieron.

- ¿Y si fuera Alex? – preguntó Kara y los tres restantes se miraron, ninguno quería abrir la puerta, pero si eran ellas, tenían que hacerlo.

¿Tenían que hacerlo?

- Tenemos que abrir ¡ - gritó Kara, Mike le pasó un brazo por su cintura alejándole más de la puerta, ella frente a él – si es mi hermana y Mags, tenemos que hacerlo ¡ - gritó Kara un pelín más desesperada.

...

Nota:

- Ésta historia tendrá 17 capítulos.