Albus estába nervioso de entrar a Hogwarts. Su padre y su tío habían estado hablando pestes de la casa Slytherin las últimas semanas. Suponía tenía que ver con el amigo de su madre, ese al que Lilly parecía adorar y que James sólo ignoraba su existencia, pero que él no tenía el placer de conocerlo. Y ahora que su hermano estuviera molestando con que estaría en esa casa y su padre no dijera nada, no ayudaba mucho.
No disfruto de nada en su llegada al castillo. James no dejó de molestar sobre las casas, sus primos no decían nada, Rose que iba junto con ellos y con la que se llevaba muy bien tampoco lo ayudó. Su tío Ron le había recomendado a Rose que debía ser mejor que el bastardo Malfoy y que hablará de eso en el tren lo desánimo aún más.
Al estar esperando su entrada al comedor para la ceremonia de selección vio a los demás niños ahí. Vio que estaba uno de los chicos del campamento, lo sorprendió mucho, pero podría tener ahí una oportunidad de hacer un amigo. Podría hablarle a ese chico ya tenían un tema en común. Se reconocieron en la distancia y se saludaron, pero no pudo acercarse porque les dijeron que debían entrar al gran comedor.
La ceremonia empezó. Cuando el sombrero grito "Malfoy, Draco" y vio al chico del campamento caminar se destrozó la oportunidad de su primer amigo y terminó de morir la esperanza cuando el sombrero dijo "Slytherin". No tuvo mucho tiempo para buscar a otro niño del cual podría hacerse amigo. El sombrero grito su nombre. Camino sintiendo la mirada de todos en el lugar. El silencio fue demasiado. "Slytherin". El grito retumbó por todo el lugar. Quería morir, desaparecer de ahí. Después de eso parecía un zombie, no recordo como llegó a la mesa de Slytherin ni a su dormitorio.
No le envío carta a sus padres, pero tampoco fue necesario recibió mil cartas al día siguiente. Recibió cartas de su padre, de su madre, de sus tíos, de sus abuelos, de sus primos. No queria leer nada. El viernes decidió que mejor era enfrentar lo que decían las cartas. Fue una mala idea. Solo respondió a su madre, su carta fue la única donde no había reclamos de su casa.
El fin de semana esperaba al menos la carta de su madre, pero lo que llegó fue una lechuza desconocida con una carta para él. Volvió a esperar a leer la carta, esta vez solo espero hasta la noche. Le sorprendió no solo la carta sino el emisor. La carta le ayudó bastante para sentirse mejor y más después de las cartas de su familia y el trato que esta recibiendo de sus primos y hermano. Decidió responderle a ese hombre que se tomó un momento para escribirle, al amigo de su madre que provocó una nueva pelea entre sus padres, al hombre que su tío Ron parecía odiar, a Draco Malfoy para agradecerle. Tardó una semana para poder escribirle una carta decente, pero sintió que valió la pena.
Fue apartir de ahí que se acercó más a Scorpius. Un día Scorpius lo defendió de sus primos. James se había sentido ofendido y le hizo una broma. Albus al enterarse, fue a vengarse. Volvió a escribirle al señor Malfoy para contarle sobre lo de Scorpius para que no lo regañara si recibía un llamado de la profesora McGonagall. También quería hacerle saber que al fin sus padres le habían escrito, le prometió defender siempre a Scorpius y por último le dijo que aprobaba su amistad con su madre.