Notas:

1 – Como buena Río Platense, me crie escuchando Tango y en especial a Gardel, este capítulo me hizo acordar a mi segunda obra favorita "El día que me quieras". Mi favorita es "Volver", pero en este caso pasaron 7 años y no 20…

2 – Cualquier similitud entre Droopy y Darcy es mera coincidencia… 😊

Capítulo 12

A la mañana siguiente, nuevamente el día estaba muy soleado, e Isabella desde temprano estaba levantada pidiéndole a su madre para ir a ver de nuevo a los cisnes. Edward, como ya estaba siendo costumbre, secundaba en todo a su prima.

Ese día en particular, Lizzy no tenía nada importante que hacer, la visita a la hacienda en Kent estaba programada para dos días después, así que decidió con sus tíos llevar a los niños pequeños a Hyde Park.

El Sr. Gardiner, al subir al carruaje le dio la dirección al cochero de la casa del Sr. Darcy.

Elizabeth miró confundida a su tío.

"El Sr. Darcy vive a muy corta distancia de la entrada a Hyde Park, y dado que ya escribí la nota de agradecimiento, se la voy a entregar a alguno de sus empleados" hizo una pausa y agregó, "de esta forma además de que no nos desviamos de nuestro destino, no importunamos con una nueva tarea a los sirvientes de Jane."

Lizzy asintió con la cabeza y no dijo más nada, ya que era razonable lo que decía su tío.

Varios minutos más tarde, el coche paro en una muy elegante mansión, que efectivamente quedaba enfrente a Hyde Park. Elizabeth junto a los niños y la Sra. Gardiner se quedaron en la calle, mientras el Sr. Gardiner le entregaba la carta al mayordomo.

28 de mayo 1812

Londres

Estimado Sr. Darcy,

Un gusto saludarlo nuevamente. El día de ayer regresamos de Hertfordshire, y vamos a estar en Londres unas semanas más. Quería agradecerle en nombre de mi familia su gentil invitación.

Saludos cordiales,

Edward Gardiner

Darcy estaba leyendo una carta de su administrador, cuando golpearon la puerta de su despacho, y dio orden de entrar. "Adelante"

"Sr. Darcy, un hombre de mediana edad, el Sr. Gardiner, recién dejó esta carta para usted."

"Gracias Wilks.", Darcy tomo la carta, y el Sr. Wilks enseguida se retiró.

Darcy leyó la breve nota, y enseguida salió hacia el parque... quizás los Gardiner y Elizabeth con su hija, iba a estar allí.

Unos quince minutos más tarde, allí estaba ella, jugando con los niños y con una expresión de amor en su rostro, que le quitó por completo el aliento. ¡La imagen era perfecta!

A escasa distancia, como la vez anterior, estaban los Gardiner sentados en un banco, y nuevamente se dirigió hacia ellos para saludarlos. Esta vez, los Gardiner, no se sorprendieron de verlo. Después de los saludos de cortesía, y de que los niños le preguntaron si había venido de vuelta a alimentar a los cisnes, Darcy decidió que no tenía nada que perder si era honesto y directo.

"Me alegro que estén nuevamente en Londres. Espero que su viaje a Hertfordshire haya sido placentero."

El Sr. Gardiner respondió, "Efectivamente, hacía muchos años que no veíamos a nuestra familia y fue un gran placer poder estar juntos nuevamente."

"¿Hasta cuándo se quedarán en Londres?" Darcy preguntó, mientras miraba disimuladamente a Elizabeth.

"Nuestros planes aún no están definidos. Seguramente unas semanas más." respondió el Sr. Gardiner.

"Excelente, si están disponibles, quisiera invitarlos mañana a cenar a mi casa. Por favor, extiendan la invitación a la familia Thompson." Los Gardiner aceptaron gustosos la invitación y Lizzy con una sonrisa forzada le dijo al Sr. Darcy que iba a ser un placer cenar con él.

Minutos más tarde, Darcy muy contento regresó a su casa. Había hablado muy poco con Elizabeth, pero en dos días más, ella estaría en su casa. Ahí tendría más tiempo para ver si existía alguna posibilidad de que algún día ella lo quisiera.