En la segunda semana de julio, Jane junto con los Gardiner llegaron a Lambton. Se hospedaron en la posada principal y desde ahí pensaban visitar amigos y familiares de la Sra. Gardiner.
Al día siguiente, Jane estaba esperando a sus tíos en el salón principal cuando escucho una conversación entre el dueño de la posada y un matrimonio turista que despertó su curiosidad e interés.
"Desde que llegamos a Lambton, hace un par de días, hemos oído a varias personas hablar en gloriosos términos de Pemberley. ¿A que distancia estamos de dicha hacienda? ¿Es realmente tan hermosa como dicen?"
"La visite hace varios años, y sin duda es una de las haciendas más hermosas de la región. Además, estamos a escasas 5 millas del lugar"
"¿Sabe si es posible visitarla?"
"Si, en los meses de junio a agosto está abierta a turistas. Solo tiene que ir al lugar, pagar una pequeña contribución y el ama de llaves les hace un recorrido por los salones principales y luego puede recorrer los jardines…"
Cuando finalmente sus tíos bajaron al hall principal, Jane les contó lo que había escuchado y los convenció de ir a visitar Pemberley. Había oído en reiteradas ocasiones hablar al Sr. Darcy y a Georgiana de lo hermoso que era el lugar y sinceramente tenía muchas ganas de conocer la hacienda.
En los últimos meses, se había resignado a que el Sr. Darcy no iba a volver a Hertfordshire y que no debía esperar su regreso. Dado que en Longbourn su madre leía las páginas sociales, sabía que el Sr. Darcy no estaba comprometido. Le costaba además creer que fuera un hombre vicioso como afirmaba John Lucas. Tenía todavía la leve ilusión, de que, si se veían de nuevo, el Sr. Darcy iba a volver a tener interés en ella…
Dos días más tarde, efectivamente se fueron hacia Pemberley. La Sra. Reynolds que era la encargada de anotar los datos de los turistas, al escuchar el apellido Bennet y Hertfordshire, discretamente le escribió una nota a Darcy para ponerlo al tanto de que había una joven llamada Jane Bennet que quizás era familiar de su prometida.
Darcy acababa de terminar la reunión semanal con su administrador, cuando un lacayo le entrego la nota de la Sra. Reynolds.
Durante varios minutos deliberó si era conveniente o no bajar a saludar a Jane Bennet. Sabía que Lizzy quería reestablecer la relación con su prima, y que Jane se iba a hospedar por unos días en Sandstone. Finalmente decidió por cortesía bajar a saludarla brevemente, y seguir con su rutina.
Dado que conocía muy bien el circuito de la visita turística, se dirigió a la sala de música donde estimaba a esa hora estarían los visitantes. Justo al llegar a la puerta de la habitación, se encontró con la Sra. Reynolds, Jane y los Gardiner.
Al verlo, Jane se sonrojó y le sonrío. Hacía meses que no lo veía, y para ella, era sin duda el caballero más guapo que había conocido. Pese a que por naturaleza no era muy expresiva, se esforzó por mostrarle lo contenta que estaba de verlo nuevamente.
"Sr. Darcy, es un gusto verlo nuevamente después de tantos meses. Mis tíos y yo estamos de vacaciones en Derbyshire, y por todos los comentarios que escuché sobre Pemberley, decidimos venir a conocer su hermosa casa. Espero que no se moleste con nosotros."
"Srta. Bennet, me alegro verla con buena salud, y es un gusto que hayan venido a conocer Pemberley. ¿Me haría el honor de presentarme a sus compañeros?" Darcy cortesmente contestó.
"Con mucho gusto, ellos son mi tío Edward Gardiner, y mi tía Madeline Gardiner. Mi tía es oriunda de Lambton."
"Un gusto conocerlos. Espero que estén disfrutando de la visita."
"Sin duda, tiene una casa muy hermosa Sr. Darcy, y la Sra. Reynolds es una excelente guía." Contesto amablemente el Sr. Gardiner.
"Me alegro, quería solo pasar a saludarlos. Lamentablemente tengo ahora otro compromiso, pero cuando terminen la visita de la casa, con gusto el Sr. Lambert los acompañará a recorrer los jardines y el invernadero." hizo una leve reverencia y se fue a seguir con sus tareas.
Jane quedó muy satisfecha de haber visto al Sr. Darcy, y sobretodo que haya venido exclusivamente a saludarla. Iba a estar diez días más en Lambton, pero lamentablemente ya había acordado ir tres días a Sandstone. Le dijo a su tía, que si el Sr. Darcy iba a verla a la posada, le mandara una nota urgente y le dijera que la viniera a visitar al día siguiente. La Sra. Gardiner, para no discutir con su sobrina, ya que estaba segura que el caballero no tenía interés en Jane, le dijo que no se preocupara y que efectivamente la irían a buscar si eso pasaba.
A la mañana siguiente, en un bonito carruaje, Lizzy vino a buscar a Jane. Durante las dos horas del viaje, las primas hablaron sobre trivialidades. Lizzy le preguntó sobre sus tíos, Kitty y Lydia, y Jane sobre el Sr. Thompson y Sandstone.
El Sr. Thompson las estaba esperando en la puerta, y amablemente saludó a Jane. Les hicieron un breve recorrido de la casa y le asignaron una bonita habitación cercana a la de Lizzy. Dado que faltaba menos de una hora para el almuerzo, las primas se separaron para refrescarse y acordaron encontrarse en media hora en el comedor.
Unos minutos pasada la hora señalada, Jane se dirigió al comedor y grande fue su sorpresa con la escena que en ese momento presenció.
