Notas: Hice unos cambios en los capítulos III y V. Basicamente Bingley se esguinza el tobillo y las primeras semanas no vuelve a Netherfield por eso, Caroline es aún más manipuladora que antes. Me parece que de esta forma es más 'creíble' la trama de la historia, y Bingley es menos 'deshonorable' :). Terminé ya la estructura completa de la historia, así que, en principio no va a haber más cambios.
Febrero 1812
La temporada de Londres estaba en pleno apogeo, dos o tres veces a la semana los Bingley eran invitados a eventos sociales. Caroline había conseguido que su hermano no regresara ni hablara más de Netherfield Park, y de a poco estaba empezando a demostrar interés en su amiga Marianne Tell. No es que Marianne fuera la candidata 'perfecta', pero al menos tenía conexiones con los primeros círculos de Londres y una dote de £10.000. Su hermano era tan confiado y voluble que a veces hasta le daba pena tener que engañarlo, pero lo hecho, hecho estaba y era por su bien. Algún día estaba segura que Charles se lo iba a agradecer.
Dos semanas atrás había tenido la inesperada visita de Jane Bennet, con su tía. Afortunadamente su hermano ese día estaba en una reunión de negocios fuera de la casa. Muy apurada, con miedo de que su hermano llegara y descubriera el engaño, le dijo a Jane que tenía un compromiso ese mismo día al que estaba llegando tarde, pero que en esa semana la visitaría. Para terminar por completo la relación y las posibles ilusiones de Jane Bennet, unos pocos días después fue a visitarla a la casa de sus tíos en la calle Gracechurch y le comentó que estaba muy contenta porque su hermano estaba cortejando a una de sus mejores amigas. Además de alabar a la Srta. Tell con lujos de detalles, le comentó que seguramente en poco tiempo se iban a casar. Si bien no le causaba placer hacer sufrir a una mujer tan dulce e ingenua como Jane, no podía permitir bajo ningún concepto que su hermano la viera nuevamente, y mucho menos que se casara con ella...
Dos días después de la visita de Caroline, y en un esfuerzo por levantarle el ánimo, su tía junto con sus primos invitó a Jane a pasear a Hyde Park. Estaban caminando por uno de los principales senderos, cuando Jane vio al Sr. Bingley sonriente del brazo de una joven rubia muy similar físicamente a ella junto con Caroline Bingley. El corazón de Jane en ese momento terminó de romperse por completo, era verdad lo que Caroline le había dicho, el Sr. Bingley había simplemente jugado con ella. Jane empalideció y casi pierde el sentido. Jane nunca sabría si Caroline la vio esa tarde, lo cierto es que el feliz trio tomó otro camino y en pocos segundos se perdieron de vista. Con cuidado, la Sra. Gardiner y los dos hijos más grandes la ayudaron a sentarse en un banco que estaba a escasa distancia. Su tía con genuina preocupación le preguntó, "Jane, ¿te sientes bien? ¿qué te pasó? Estamos todos preocupados por ti."
"Tía, acabo de ver al Sr. Bingley sonriente con una señorita rubia del brazo junto con su hermana. No sé si me vieron, pero lo cierto es que entre lo que me dijo Caroline hace dos días y lo que acabo de ver con mis propios ojos, entiendo porque no volvió. Nunca me quiso, todo fue una gran mentira. He sido una tonta." Jane trataba en vano de no llorar, pero era un esfuerzo sobrehumano.
"Jane, ese 'caballero', si se puede llamar de esa manera, no vale la pena. Ya vas a conocer a alguien que sea digno de ti. Si en menos de tres meses transfirió de esa forma sus afectos, es una suerte que no te hayas casado con él. Si por el contrario ya tenía un entendimiento con esa señorita, es un canalla que solo quiso jugar con tus sentimientos. De cualquier modo, ¡no te merece!"
Después e ese incidente, la Sra. Gardiner decidió que lo más prudente era volver a la casa, no quería que Jane se encontrara de nuevo con ese canalla y su hermana.
Esa noche, dado que Jane no mejoraba de estado de ánimo, y apenas había probaba bocado en la cena, la Sra. Gardiner fue a su cuarto a hablar seriamente con ella. No iba a permitir que su sobrina siguiera así ya que iba a terminar enfermándose seriamente…
"Jane, estamos todos muy preocupados por ti. Sé que el primer amor es difícil de olvidar, pero tienes que seguir adelante por tu familia y todas las personas que te quieren. Capaz no es el mejor momento para hablar de estas cosas, pero el Sr. Thompson desde el año pasado que demuestra mucho interés en conocerte mejor…"
Jane rompió a llorar, "No entiendes tía, mi vida está arruinada…"
"Jane, no digas eso. Tu vida no está arruinada, hay otros hombres en el mundo, y sin duda, mucho mejores que el Sr. Bingley. Estoy segura que dentro de un tiempo esto va a ser solo un mal recuerdo."
Jane negó con la cabeza, "No tía, fue más que eso…" con mucha vergüenza y bajando la mirada le dijo, "le entregué mi virtud al Sr. Bingley y ahora nunca voy a poder casarme, quién va a querer a una mujer 'fácil'…"
La Sra. Gardiner miró a su sobrina con horror e incredulidad, en ningún momento había pasado por su cabeza que Jane hiciera algo así, y antes de que saliera de su estupor, Jane continúo relatándole lo que había pasado aquella fatídica noche, "El día del baile de Netherfield, estaba muy nerviosa. Mamá tenía tantas expectativas, y yo estaba muy ilusionada de que todo iba a ser perfecto. Para no estar tan nerviosa enseguida que llegamos al baile me tomé la primera de varias copas de ponche que tomé esa noche. El Sr. Bingley durante nuestras primeras piezas me dijo que quería decirme algo a solas. Lizzy prometió ayudarme, pero no fue necesario." Suspiró y se secó las lágrimas, "Después de la cena, Mary tuvo un accidente y en toda la conmoción el Sr. Bingley me llevó a una habitación donde me dio a beber una copa de champagne y me pidió que sea su esposa." Jane empezó a llorar nuevamente, mientras su tía la abrazaba fuertemente, "No sé cómo pasó, solo sé que me besó, en unos pocos minutos estaba acostada en el sillón, el Sr. Bingley encima de mí. En un momento, sentí un fuerte dolor en la zona media. Todo pasó tan rápido, y cuando me di cuenta de lo que había hecho, comencé a llorar desconsoladamente. El Sr. Bingley dijo que iba a hablar enseguida con mi padre. Lamentablemente se había ido temprano con Mary y al otro día el Sr. Bingley volvió Londres… El resto de la historia ya la conoces… ¡Soy una tonta! ¡Arruiné mi vida y la vida de mis hermanas!"
"Fuiste muy ingenua Jane, pero no eres ni serás la primera ni la última mujer que es engañada con palabras bonitas y promesas de matrimonio de un hombre que solo quiere una casa y después que la consigue pierde interés. De esto ya han pasado casi tres meses, ¿has tenido tu ciclo?"
Jane asintió con la cabeza, "Hasta la semana pasada estuve muy preocupada porque en todo este tiempo efectivamente no tuve mi ciclo, pero por suerte al menos en ese aspecto ahora estoy tranquila."
La Sra. Gardiner suspiró, capaz que el atraso se debió a que efectivamente estuvo embarazada y perdió él bebe, o quizás simplemente estuvo asociado a los nervios. Ya no era importante, ni quería alarmar a más a su sobrina, pero si debían tratar que la indiscreción de Jane no se supiera, y por eso seriamente le dijo, "Jane, escúchame bien, es importante que nadie sepa lo que ha pasado, ya que tu reputación y la de tus hermanas solteras se vería completamente arruinada. Si algún día un caballero te propone matrimonio, lamentablemente vas a tener que ser franca con él, y es cierto que no todos los hombres van a aceptar tu pasado…"
