Ilegitima

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Después de lo sucedido, el Conde Fujino no ha dicho palabra alguna, tal vez por el hecho de que la situación del por qué sus negocios están cayendo poco a poco, es más importante que la de unos caballeros que ya no le sean útiles para tomar una espada o hacer cualquier trabajo que los haga utilizar sus brazos.

-Natsuki, llegó una carta del palacio diciendo que si puedes ir a ver la princesa heredera, necesita hablar de algunos temas contigo-

-Supongo que sólo me llama para preguntarme que por que lo hago o que se supone que estoy haciendo-

-debes de tener cuidado Nat-

-no volverá a pasar así que no te preocupes, bueno sigamos mostrando nuestra lealtad-

-Claro, el baño está listo y tu ropa también o prefieres irte así? -

-acaso me mando sola? -

-por supuesto que no-

-entonces en seguida voy, no creo que le importe si llego algo tarde, no es así Shizuru? -

Ella aún estaba durmiendo plácidamente; habían ya pasado cuatro días, el doctor había dicho que no tenía que preocuparme que era normal que durmiera aunque estuviera físicamente ya bien gracias a la medicina de la cual me encargaba de darle, necesitaba descanso hasta que su cuerpo le diera a entender que ya era hora, ya que todos somos distintos pero ella había sufrido mucho en ese poco tiempo.

Me levante y me dirigí a mi habitación ya que el doctor dijo que no era conveniente que durmiera con alguien, aunque a veces lo desobedecía, la verdad es que tenía miedo de que desapareciera, es algo aterrador ese pensamiento, pero algo dentro de mi insiste en que no la deje de observar solo por esa misma razón..

Y la verdad es que no quiero que desaparezca, o me deje.

-me ha llegado una carta y vino el Conde Fujino pidiendo una especie de compensación por el hecho de que sus caballeros han dejado de ser útiles, a que puedes responder eso, Duquesa? -

-su majestad, el Conde Fujino también le habrá dicho que ellos mismos accedieron a un duelo? -

-si, claro, lo que no entienden es el por qué-

-en ese caso preferiría hablar de este tema en privado-

-hay algún motivo para hacer eso? -

-debo recordarle a su majestad que la familia del Conde mandó a Shizuru a la mansión del bosque para evitar que se me regrese el doble por no mandar a la señorita Sakura la cual iba a ser mi esposa-

-entiendo eso, y sabes cómo fueron las cosas-

-también lo entiendo pero a quien mandaron es ahora mi verdadera esposa y la única persona que gobernara conmigo el Ducado Kruger, es por esa misma razón de que invite a esos caballeros al Ducado para hablar del trato que recibió mi esposa, ellos simplemente accedieron por su propio pie, además de que ofendieron a mis caballeros, y sabe perfectamente que sí se me ofende a mí como su espada y su escudo, ofenden también a su majestad la princesa heredera, no podía permitir eso o sí?-

-tienes razón hasta cierto punto-

Quería contestarle a la princesa heredera pero fuimos interrumpidas por uno de los caballeros imperiales.

-su Alteza la princesa heredera le pido que me disculpe por entrar de esa manera, solo que la Emperatriz Madre me ha mandado a decirle que solicita de su presencia de manera inmediata-

-ya veo, que lastima que no podamos seguir esta conversación Duquesa, pueden retirarse-

-entendido, con permiso-

-y conforme a lo del Conde lo dejaré pasar esta vez, pero no vuelvas a hacer algo tan imprudente, la próxima vez pediría, más bien que me pongas al tanto de la situación -

-muchas gracias su alteza-

Salí de ahí solo para encontrarme con Akira.

-Capitana me ha mandado un mensaje Mai-san diciendo que no encuentran a su esposa en ningún lado -

En ese mismo momento no sabría decir que cara habría puesto, ya que Akira me miró algo sorprendía.

-no menciona nada sobre si fue secuestrada o simplemente se escondió por miedo a no saber dónde se encontraba, Nao está desplegando a todo el personal y a los caballeros para buscarla o encontrar algún indicio de su paradero, y tengo listo su caballo-

-gracias Akira te debo una -

Salí corriendo no importándome quien, me viera o el protocolo o la etiqueta y ni mucho menos la educación, todo eso quedaba en un plano muy lejano al tomar mi caballo para salir del palacio imperial y dirigirme al ducado.

Cuando llegue la tarde comenzaba, veía a todos aun buscándola y mi caballo resistiendo para no tirarme al suelo, me baje de el solo para encontrarme a Mai con Arika.

-que sucedió!? -

-Señora Natsuki!, perdóneme! - esa era Arika quien lloraba y se me acercaba

-vamos Arika-chan no llores no es tu culpa-y esa era Mai tratando de consolarla

-díganme que paso-dije un poco calmada solo un poco mientras decidía caminar y ver a todos buscándola aún, con más frenesí cuando me vieron

-es que, yo iba a cambiar las sábanas y la ropa de la señora Shizuru cuando entre a la habitación no estaba, la busque pero no había nadie más, fue cuando le dije a Mai-San que no estaba y en seguida ella nos mandó a buscarla -

-no han sabido nada sobre si fue secuestrada? -

-no, Nao me ha dicho que ahora mismo los que habían entrado y salido del ducado se han parado para una revisión pero aún nada, crees que el Conde lo haya hecho? -

-no creo que sea tan inteligente para hacer eso, vamos a su habitación-

Nos dirigimos a la habitación donde se suponía que ella debía de estar segura solo pensando en que si en verdad fue el Conde, lo haría pagar muy pero muy caro, a tal grado que no quisiera nacer de nuevo.

Y también me hacía pensar en que si la encontraba tenía que pedirle perdón, tenía que moverme y hacer que la princesa heredera accediera a darle el título de duquesa a Shizuru que aunque se sepa que es una hija Ilegítima no importa ella es la única Duquesa Kruger.

Habíamos llegado a su habitación solo para observar que el colchón sólo tenía encima suyo las almohadas y las sábanas, me acerque a la cama solo observando los patrones dándome cuenta de que había un indicio de que la hayan movido o se haya movido por que al encontrarme del otro lado de la cama ahí estaba ella envuelta en las cobija, yo solamente caí de rodillas, solo para soltar un suspiro y que mi corazón dejara de latir aceleradamente, como mis manos dejaran de temblar.

-paren la búsqueda-dije recobrando tantito sentido

-que paso Nat-.. Dios, como es que - esa era Mai enojada en un cierto momento y relajada en otro también había soltado un suspiro de alivio

-Señora Shizuru!?, perdónenme- y esa era Arika llorando de nuevo más fuerte

-cálmate Arika está bien-dije acercándome a Shizuru solo para levantarla- lo más probable es que se sentía incomoda en un lugar muy cómodo, y decidió acostarse en el suelo por que está acostumbrada, creí que le gustaría pero no, aunque necesito acostumbrarla a que está mal que me esté quitando años de vida que me quedan, será que quiere quedarse viuda?, tan joven -

-yo me apuntó a eso y creo que no seremos las únicas-

Me disponía a dejarla de nuevo en la cama cuando note que abría los ojos y deje de moverme, al ver esos ojos color como los rubíes confusos hasta que miro hacia arriba y encontrarse con mi mirada, sonreírme débilmente y decirme.

-Natsuki en donde estamos-

-la señora despertó! - gritaba Akira

-Arika guarda silencio y trae al médico y diles a los demás que la hemos encontrado-le decía Mai

-si!, enseguida-

Salió corriendo y yo solo la miraba como su consciencia regresaba.

-deberías de ponerla en la cama Nat-

-si, solo que no se si pueda volver a tocarla asi-

-creo que no es momento de hablar de eso-

-en donde estamos Natsuki? - notaba que sus ojos aún estaban algo perezosos pero quería esforzarse en saber en dónde estaba

-oh, querida estamos en el Ducado Kruger, no te tienes que preocupar de nada-

-esto se siente cómodo - dijo acomodándose más en mis brazos

-pero no te puedes volver a dormir, quiero que despiertes Shizuru, tienes que comer algo decente y Mai es la mejor cocinera del continente-

Algo en mi pecho quería aun insistir en el sentimiento de pérdida de hace un momento, no me dejaba más que tentarme en perder la cordura y eso que solo se había ido a acostar en el suelo, tenía que ponerle a algunos caballeros para escoltarla cuando no estuviera conmigo.

-Natsuki, que tienes?, estas bien?-

Me había perdido tanto en mis pensamientos que, no me había percatado de dos cosas una fue el no haber sentido su mano en mejilla y dos mi necesidad de protegerla era demasiado aterradora como para querer destruir a cualquiera que se atreva a tocarla y no entender el por qué, o tal vez si, por que se ve tan frágil, tan pequeña que su mera existencia no debió de ser así pero estoy feliz de que haya sido ella con quien me haya encontrado en ese lugar.

-Natsuki?-

-ah, no es nada estoy mejorando en no fruncir el ceño que tal?-sonreí, esperando a que no preguntara más y ponerla en la cama

-creo que estas mejorando, así no tendrás arrugas-

-si, pero ahora no hablemos de mi, en un momento el medico vendrá a revisarte, te ayudaran a asearte y después comeremos algo que te parece, no tienes hambre?-

-si, ahora mismo tengo hambre, pero también quisiera un baño-

-ujum, eh siento interrumpir su amorío pero eh Natsuki ya está aquí el médico y el agua también estará lista asi que por que no mejor sales?-

Esa era Mai quien hablaba detrás de mí, dandodome cuenta de que había llegado la doctora familiar de la familia, Youko y por si fuera poco es la esposa de Midori, a veces no entendía como es que se pudo juntar la mejor doctora con alguien como lo era Midori pero el amor es tan extraño.

-eh?, por qué?-

-como que por que?, aunque sea tu esposa no significa que no le des privacidad, asi que andando ve a esperar en el comedor o a hablar con Nao o trabajar!, si deberías de hacerlo-

Mai me saco de ahí sin piedad alguna de la habitación de mi esposa, solo para encontrarme con Mikoto.

-Nat!, al fin te encuentro-

-ah, Mikoto, como te fue?, fue sencillo atraparlo?-

-por supuesto!, sabes que cualquier animal conmigo se convierte en amigo-

-fue una buena decisión mandarte a ti, pero hay que ver que conozca a los de aquí antes de que los vaya atacar Dhuran, o por lo menos que no intente hacerles daño-

-creo que eso lo tiene claro, pero creo que sería mejor que vayas a verlo-

-tienes razón, vamos-

Al haber entendido de que me habían regresado mi posición como noble me era inevitable olvidarme de ese lugar y del peludo amigo que llegamos a tener ahí, y también tenia la esperanza que a Shizuru le agrade la idea de traerlo aquí, ya que Dhuran trata a Shizuru como su madre.

-hey amigo- llamaba al ya no tan pequeño cachorro de lobo y este al verme se acercó a mi- hey no hagas eso hace cosquillas-tratando de contenerlo- calma, me alegra que estés bien y discúlpame por dejarte en esta situación pero debes de entender que este puede ser tu nuevo hogar y digo puede porque necesito que entiendas que no puedes lastimar al personal de aquí ya que son buenas personas de acuerdo?, además de que tu mama se enojara-

Se había tranquilizado y me observaba con esos ojos color azul intensos, comprendiendo lo que decia, a veces dudaba si este lobo era en realidad un simple lobo o era un espíritu el cual se enamoró de Shizuru.

-ahora mismo no podre llevarte con Shizuru-continue- ya que ella esta un poco débil y tu eres un poco brusco- veía su mirada preocupada- pero no te preocupes estará bien en poco tiempo y tu serás su regalo de bienvenida que tal?-me lamia de nuevo la cara-hey tranquilo por lo pronto estarás aquí acostumbrándote al personal que poco a poco vendrá para que los reconozcas y no les hagas daño de acuerdo?-

El simplemente se sentó dándome a entender que sería bueno.

-bueno te lo encargo Mikoto-

Y Sali de ahí solo para dirigirme al comedor. Aún no había nadie pero Nao era quien entraba.

-Capitana-

-Oh, Nao que bueno que te veo, creo que tengo que disculparme por lo de hace unos momentos-

-dejemos ese tema en el olvido, agradeciendo que no le haya pasado nada a la Señorita Shizuru-

-deberías de acostumbrarte que si no me encuentro aquí, es ella a quien le tienes que hacer caso-

-no volverá suceder, disculpeme-

-conmigo no deberías de disculparme pero conociéndola a ella no le importara hasta cierto punto, en fin-

Ella se me acercaba y me daba un pequeño papel donde me decía que Akira se enteró del por qué la Emperatriz había solicitado a la princesa heredera, y solo era para averiguar de que si hizo algo conmigo, por la falta de respeto al Conde, no es que le importe el Conde sino que quiere buscar cualquier excusa o amigo o enemigo en común para poder desaparecer pero eso me tenía sin cuidado.

-ok, entiendo es una lástima que no se pueda corregir el camino, en fin, dile a Akira que la quisiera ver en algún momento de lo que queda del día, necesito pedirle otro favor-

-como ordene Capitana-

-por cierto, como sabrás mi esposa acaba de despertar y necesito encargarme de unas cosas podrías poner a Mikoto y a Nina a cuidarla?-

-por supuesto me encargare de decirles que a partir de este momento serán ellas quienes se encarguen de su seguridad-

-gracias puedes irte, no quiero que mi esposa se asuste por tu cara aterradora-

-entiendo, con permiso-

Suspire y miraba como se veía, entendía un poco el por qué se pone a la defensiva pero aun no logra entender o que es lo que hace preocuparme por ella demasiado, tenía que dejar que ella la conociera pero por el momento, no quería poner a Shizuru en una situación incómoda.

Pero al recordar su cara lo más seguro es que está enojada por el solo hecho de que salí del palacio e hice un escándalo, solo por regresar al ducado a saber dónde estaba mi esposa una hija ilegítima, quien se preocuparía por alguien así?, nadie, y habrá escuchando rumores los cuales a pesar de obtener de vuelta el título de Duquesa aún hay quienes están enojados o por haber conocido a mis padres y piensan que no tuve suficiente al dejar que me inculparan o yo que sé, solo para ser seducida por alguien como lo es Shizuru o tal vez solo les caía mal desde un principio y ahora lo hacen de manera descarada, era inevitable en muchos aspectos pero eso nada importa; cumpliré la promesa que le hice a mi madre de no dejarme intimidar, de no dejar de proteger a quienes amo, y no dejar que nadie más haga lo que quiera con el legado Kruger.

-y aquí es el comedor principal-

Escuchaba decir reconociendo la voz de Mai, para verla a ella y después a mi esposa entrar con un vestido ligero pero si comparamos con los vestidos que tenia este se veía mejor resaltando sus ojos, su figura. Me pare para darle la bienvenida y sonreírle, para después ayudarla a sentarse, mientras que las sirvientas también entraban y preparaban la mesa, y traían muchos platillos, notaba como es que le brillaban los ojos para después sentirse un poco preocupada a la hora de ver los utensilios para la comida dándome cuenta que no tenía esa educación la verdad es que no me importaba y tampoco es que me agrade tener un tenedor o cuchillo, incluso una cuchara por cada alimento, pero tampoco quería que se burlaran de ella, más bien quiero que vean que esta mujer es superior que todas las demás y le daré las herramientas necesarias para eso, claro si es lo que ella quiere sino, tampoco importa, su felicidad es primero.

-tranquila puedes utilizar el que más te agrade-le dije a Shizuru mientras ella me veía- yo tampoco soy fan de esas cosas pero uno se acostumbra a vivir en el campo de batalla y solo me hace pensar para que utilizo un cuchillo diferente para cada cosa?, no lo entiendo-

-Natsuki!, no le enseñes a tu esposa esa clase de cosas, ella es una dama, no como tu-

-ugh, si, ya no digo más, así que comamos-

-Dios Natsuki, señora Shizuru debería de decirle algo cuando se comporte asi, me recuerda a cuando era niña, corriendo desnuda por casi toda la mansión-

-o-oye!, no tienes por qué decir eso!-

-pero que dices?, si dices que no te importa-

-jajaja-

Ambas nos detuvimos, nos miramos y después nos fijamos en ella, sonrei.

-hasta mi esposa se rie de mi-

-es que te imagino y verdad creo que hayas hecho eso, me recuerda a cuando estuviste mejor pero no tanto y fuiste tan obstinada al querer acompañarme por agua que incluso atrapaste un pescado con tus manos, en serio no lo podía creer, pero esto solo me hace pensar que en verdad eres increíble-

Se volvía a reír y nosotras con ella, habíamos pasado un buen rato las tres, hasta que llego la hora del postre.

-bueno, Shizuru-me volteaba a ver- como te sientes?-

-no tengo mucha fuerza, pero me siento bien, las personas que conocí en este corto tiempo son amables, fue como me dijiste, no me veían feo, ni decían cosas a mis espaldas, se sintió cálido-

-en serio?, me alegro de escuchar eso, ves no te mentía, estas personas son buenas verdad!-

-si-

-qué bueno, me alegro así no me sentiré tan mal al dejarte sola-

-sola?-

De repente note como sus ojos de opacaban por un momento y eso hizo sentir que mi corazón doliera solo por un momento.

-ah, si pero no te preocupes, Shizuru!, lo que pasa es que aun hay cosas que tengo que arreglar y desgraciadamente tengo que verlas por mi misma, asi que tratare de volver lo mas pronto posible, por lo mientras puedes conocer el Ducado, es mas por que no mejor vamos a una de mis vistas favoritas-

-esta bien-

Salimos del comedor y le tendí mi mano para que aceptara la invitación que le ofrecía, ella accedió para después levantarse y yo para poner su mano que descansara en mi ante brazo y caminamos rumbo a una de las torres que estaban cerca. El sol ya se estaba yendo mostrándonos las ultimas señales de su día para que la luna nos mostrara su cielo nocturno, habíamos subido aquella torre solo para ver el inmenso alrededor con varios árboles grandes un rio pasaba cerca, aves pasando enfrente a nosotros dándonos un espectáculo de sus maniobras.

-es increíble-

Voltee a verla y mire como su rostro se iluminaba queriendo alcanzar el paisaje que lo único que pude hacer era cagarla y subirla a la muralla y sentarme yo también a su lado.

-yo también pienso que es increíble, me alegro que te guste, este es uno de mis lugares favoritos y espero enseñarte los demás Shizuru-

-si, quisiera conocerlos Natsuki-

Ella se volteo a verme fijamente que no sabia y que tenia curiosidad de que era lo que pensaba.

-tengo algo en la cara!?- me dijo preocupada acercándose mas a mi espacio personal

-que!?-

-si!, acaso tengo algo?, o es por que estoy fea-

-fea?, claro que no!-

-entonces?-

-ah!, digo que por qué piensas eso?-

-siempre que me veían me decían esas cosas y por eso pensé que como me veías tan fijamente pensé que te habías dado cuenta de eso-

-lo haces sonar como una enfermedad pero no eres fea-

-entonces?-

-estas muy cerca!-

Inconscientemente me aleje y ella se acercaba mas solo para ver como resbalaba Shizuru, no lo pensé dos veces cuando note su miedo en sus ojos mientras me pedía ayuda estirando su mano, y me lance tras ella tomando su mano para después abrazarla, tocar la pared con mis pies solo para encontrar una posición cómoda para no lastimar a Shizuru y pisar el suelo.

-me alegra saber que mi esposa confié en mi- le dije sonriendo pero ella de repente se puso seria

-no tenías por qué hacerlo, ahora puedes bajarme por favor?-

-eres mi esposa como no hacerlo?- le dije mientras la dejaba en el suelo y trataba que me viera para no hacerlo y caminar rumbo hacia la mansion- Shizuru?-

-…-

-Querida?-

-…-

-Esposa?-

-…-

-Shizuru?-

Al parecer ella quería deshacerse de mi y no entendía el por qué ahora, me recordaba a cuando ella quería dejarme atrás pero no podía porque mis piernas eran más largas que las suyas.

-Shizuru, discúlpame de seguro fue aterrador-

-…-

-Shizuru, por favor detente-

-…-

-Shizuru-

De la nada se detuvo pero no me volteaba a verme.

-en verdad se escucha tan agradable que me digas por mi nombre- dijo y yo no sabía que responderle- gracias Natsuki-

-pero que dices, tú también me dices por mi nombre-fue lo único que pude decirle

-lo sé y me agrada decir tu nombre-para ese momento ella ya me estaba viendo con una sonrisa que no sabría decir que significaba pero me era agradable de ver.

La lleve a su habitación para que descansara, diciéndole que mañana tenía que irme, entre más rápido mejor, que no se preocupara en despedirme si quería o si lo quería hacer la vería en la entrada de la mansión, aun así le traería regalos y que se tomara las cosas con calma. La verdad era que no me quería ir a dormir a la otra habitación pero era inevitable ella no sabía que a veces me quedaba con ella a dormir, aunque si le digo eso tal vez me vea mal por todas esas veces que lo hice no teniendo su conocimiento así que preferiría que no lo supiera, además de que sería muy atrevido de mi parte, ni siquiera nos hemos dado un beso.

-Natsuki?-

-si, dime Shizuru?, quieres que te traiga algo en específico?-

-no, así estoy bien-

-ya, bueno aun así te traeré algo, así que no te preocupes, es hora de que te deje descansar-

-ok, descansa tú también-

-si, solo veré si ya está todo listo para salir mañana temprano-

-ok-

Su sonrisa fue la última reacción que vi antes de dar media vuelta e irme de ahí, sintiendo que viaje que hare solo era una pérdida de tiempo, pero tenía que hacerlo para poder hacer caer al Conde.

-Capitana me buscaba?-

-Akira que bueno que has venido-

-lamento no haber aparecido antes, solo que estaba con la Duquesa, lo cual me alegro que se vea mejor a comparación de cuando llego y supuse que asustaría a la señora si aparecería de la nada-

-entiendo, no te preocupes en algún momento tienes que verla, pero ahora mismo quisiera que salieras a entregar esta carta-

-entendido-

Le había entregado una carta a Akira dándole a entender que se la tenía que llevar a la princesa heredera sin que nadie supiera.

En la carta le pedía que fuera tan amable de entregarle a Shizuru el título de Duquesa no importando su nacimiento, que era lo menos que podía hacer, sabiendo el secreto de que fue su madre, la emperatriz quien quiso mi muerte, aunque ella me haya dado un consejo no justifica que se libraría del crimen, y lo que quería era nada en comparación a lo que ya no me pudieron regresar, asi como guardar el secreto de la emperatriz, era lo menos que podía hacer, que sea su problema el cómo hacer que Shizuru obtenga el título de Duquesa era lo único que me importaba.