Era una noche normal de un día cualquiera donde los niños tienen que irse a la cama temprano para el día siguiente tener un buen rendimiento escolar, como cualquier niño normal haría en esas horas, y en casa de aquella pareja no iba a ser diferente.
Sin embargo, hoy aquella madre tardó más de lo normal en despedirse de sus hijos, Rin acostumbraba a leerles un cuento de buenas noches y darles un pequeño beso a ambos niños, pero hoy recibió una petición especial.
—¿Ha ocurrido algo? —
Preguntó aquel impaciente esposo al ver llegar al fin a su bella mujer que esperaba con ansias para finalizar aquel largo día con ella entre sus brazos.
—No, nada del otro mundo, solo que hoy querrían un cuento distinto—
Respondió la menor de la relación con aquella radiante sonrisa que siempre desapareció, y notando la impaciencia de su esposo en tardo más en acompañarle.
—Y ¿Qué historia les ha contado? —
volvía a preguntar, pero ahora con bastante curiosidad aquel albino teniendo al fin a su amada a su lado
—Pues una sobre una niña, bueno no tan niña más bien una estudiante que encontró un apuesto héroe ~ —
XXX
Aquella estudiante de apenas 18 años de edad cursó su primer año de universidad en la carrera de derecho.
Se encontró de una chica castaña de grandes ojos cobrizos, de baja estatura y un lindo tono rosado que siempre iluminaba sus mejillas sobre la tenue palidez de su piel, era conocida por su carácter rebelde y las faltas a varias clases que estaban echando a perder su primer año de universidad.
Por otro lado, tenía varios conocidos con los que hablaban en las pocas clases que iba y uno de ellos era Sota lo había conocido el primer día de comenzar la carrera, se trajo de un chico bastante mono y de la misma edad que Rin, bastante responsable y que siempre intentó que su nueva amiga volviera a ir a todas las clases, ya que esta costumbre comenzó hace un mes de los dos que llevaban de año.
Aquel día Sota había llamado a Rin para verse a primera hora de la mañana ya que tenía algo importante que decir, coincidiendo con la clase de historia a la cual la morena no iba, sin embargo, como había insistido tanto para verla simplemente pasó, pero con la condición de que fuera algo rápido para poder irse antes de que llegara el profesor, para así no tener que escuchar reproches que considerar inútiles y necesarios por parte de estos
XXX
—Bueno dime lo que querías rápido que quiero irme lo antes posible —
—Pues...—
Se aclara la garganta para intentar ser lo más claro posible e intentar aliviar sus nervios.
—Seré directo, Rin me gustas desde que te conocí y... Me gustaría que salieras conmigo—
- ¡¿Qué?! ... Pero si sabes que tengo novio y no lo pienso dejar, esto tiene que ser una broma ... —
—¡No es una broma! ... Y sé lo de koga pero ese tipo no te merece ... Solo quiere aprovecharse de ti y lo sabes ...—
—¡No vuelvas a decir algo así! ¡Tú no lo conoces! ... Solo estas celoso... —
—Deja de negarlo, todos piensan que eres una chica fácil por estar con él y que te...—
No llegaba a terminar la frase ya que la pequeña castaña le da un manotazo en respuesta a lo enfadada que estaba.
—¡Te odio! ... No quiero escuchar nada más y tampoco me vuelvas a hablar ... ¡Me voy! —
Estaba casi al borde del llanto por la propia frustración que sentí, Koga era un chico mayor que ella por varios años que conocía poco antes de iniciar la universidad.
Koga era bastante fácil de reconocer por su perfecto bronceado y aquella brillante sonrisa pícara con la que podría conquistar a cualquiera, y aquellos ojos ultramar en los que podían perderte si lo miraban fijamente un par de segundos.
Era cierto que podría parecer violento y algo brusco, pero Rin lo asoció a que se preocupaba de más por ella, solo no había que hacerle enfadar para así recibir aquel dulce trato del que Rin estaba perdidamente enamorada, sin embargo, nadie apoyó aquella relación por lo que no era la primera vez que tenía que escuchar cosas como esas.
Estaba tan cegada por la frustración, que en los breves segundos en los que tardó en llegar a la puerta de la clase para irse no vio a aquel albino de larga cabellera con el que terminó chocando.
Tras soltar un pequeño gruñido por la ira acumulada miró hacia arriba encontrándose con un par de ojos ámbar desconocidos para ella, pero que llegaron a hipnotizarla unos breves segundos, hasta que una ronca y serena voz se dirigió hacia ella.
—¿A dónde se cree que va? La clase esta por empezar—
Notas del autor a:
Hasta aquí la primera parte , espero que os guste , la verdad esta es una historia que esta casi terminada ya que la escribí hace bastante tiempo con otra cuenta pero nunca llego a terminar y ahora llego a finalizarla parte de mejorarla
Me gustaría aclarar que todo lo que es la historia no es lo que Rin les cuenta a sus hijos (? Eso lo subiré como un capítulo extra al terminar la historia
También comentar que mi primera historia (El lobo feroz y Caperucita Roja) se encuentra finalizada en Wattpad y ahora está participando en los wattys 2022, y no me deja subirla en otra plataforma.
Por lo pronto no la puedo continuar aquí y si llego a pasar a la lista corta la tendré que borrar de aquí durante un año, lo siento :'(
