Boku no Hero Academia, pertenece a Kōhei Horikoshi.

34: ¿Futura esposa en peligro? ¡Inner Kyōka aparece!

Un joven villano, con varios parches de piel quemada sujeta con grapas médicas en su rostro, se acercó a donde estaban Izumi y Kyōka. Vestía con una camisa blanca de cuello redondo junto con una chaqueta larga de color azul oscuro y unos pantalones a juego que le llegan hasta los tobillos y zapatos normales.

— ¡Izumi-Chan, cuidado! —alertó Kyōka, sobresaltándola por un instante y haciendo que se girara, cuando el fuego azul venía hacía ellas.

— ¿Más de este fuego azul? —preguntó Izumi, extendiendo su mano y abriendo un portal, en el cual terminó el fuego azul del villano, y este era expulsado.

—No está mal —dijo el villano sonriente, usando una nueva llamarada de fuego, para contrarrestar la que su enemiga utilizó en su contra, hasta que vio el portal cerrarse. —Eres muy interesante, Midori...

¡Heartbeat Surround! —Kyōka conectó sus lóbulos en los amplificadores de sus antebrazos y se los quitó, para apuntar con los amplificadores hacia su oponente, lanzando así ondas de sonido súper potentes que destruyeron el suelo, levantaron rocas, las aventaron contra su oponente. Además de que el sonido, aturdió al sujeto, quien fue alcanzado por las rocas. —Nadie. Absolutamente NADIE. Tocará a MI FUTURA ESPOSA.

—Mal.… maldición... me... olvidé de que esa chica, también estaba... —Dabi abrió los ojos, al ver a la chica acercarse muy rápidamente, hacía él, y tener que esquivar una patada. Extendió su brazo, pero la chica se colocó a su lado, le agarró el antebrazo, y con una fuerza que una chica de su constitución física, no debería tener, lo aventó contra un árbol, aturdiéndolo nuevamente, justo antes de que las ondas sonoras, lo mandaran a volar, destruyendo el árbol y propulsándolo hacía atrás, causando que su cuerpo destruyera dos árboles más. — ¿Qué...? —Dabi intentó ponerse de pie. — ¿Qué le pasa a esa chica? —esta vez, no escuchó sonido alguno. —Mi.… mi cuerpo... ¡No puedo moverlo! ¡ESTOY PARALIZADO! —Una Kyōka completamente distinta, llegó hasta él, y lo agarró de la muñeca, colocándola en la base de un árbol... que había sido talado por el golpe que se llevó Dabi y las ondas sonoras de Kyōka. — ¿Qué está haciendo? —sus ojos se abrieron. —No. Ella... ¡ESPERA, NO HAGAS LO QUE CREO QUE VAS A.…! —Kyōka lo hizo. Lo último que vio, antes de desmayarse, por un dolor que no podía sentir, fue a la chica de cabello violeta, tenerle compasión e irse hacía la peliverde.

Cuando Kyōka comenzó a llevarse a la peliverde en sus brazos, una conversación tenía lugar, dentro de su mente.

¿Por qué mi cuerpo no me obedece? —preguntó la adolescente. — ¿Por qué se mueve automáticamente?

No se mueve automáticamente —respondió una voz, idéntica a la suya... pero que tenía algo, ligeramente distinto, que ella no podía identificar del todo. —Estoy a cargo, en estos momentos. Descuida. Lo primero, es llevar a Izumi-Sama, a un lugar seguro.

¿Quién eres tú? —preguntó Kyōka. — ¡Devuélveme mi cuerpo!

Soy tú. Soy una personalidad nacida, del maltrato de los niños pequeños, como Bakugō —dijo la voz. —Soy una personalidad nacida de cómo nos trataban nuestros compañeros en la primaria. Nací de ese sentido que tienes de no amar tu cuerpo, solo porque no tienes pechos o un trasero, grandes. Soy la Kyōka que MÁS adora a Izumi-Sama. Soy la Kyōka que es capaz de resguardar a Izumi-Sama.

¡Lo dices, como si yo no pudiera hacerlo! —se quejó Kyōka.

¿Hubieras lastimado a ese idiota del fuego azul, del mismo modo en que yo lo hice? —preguntó la otra.

Kyōka se quedó en silencio. —No. —Llegaron a la casa, y entraron por detrás, llevando a la peliverde, hasta una habitación.

Según el reportaje del evento de Vlad King, las ambulancias y camiones de bomberos, llegaron 15 minutos después de que se fueran los villanos.

De los 40 estudiantes, 15 perdieron la consciencia y quedaron en estado crítico debido al gas. 11 resultaron heridos, en un rango menor a grave. 13 resultaron ilesos. 1 fue secuestrado...

De los 6 héroes profesionales, 1 sufrió una herida grave en la cabeza, y está en una condición crítica.

Otro dejó un gran rastro de sangre y desapareció.

4 villanos fueron aprehendidos y arrestados. Los otros villanos los dejaron atrás y desaparecieron sin dejar rastro.

Y así, el tan esperado entrenamiento de campo en el bosque que tanto habían esperado... llegó a su fin, con el peor desenlace posible.