"¿Punto de unión?"


—¡Tsuna, por favor espera! —Escucho el grito del más alto. Su tono detonaba lo preocupado que estaba, como si fuera un error el hecho de haber mencionado al hermano mayor del castaño.

Por un lado Takeshi y Hayato no comprendían lo que sucedida. Se supone que estaban platicando bien. No ofendieron ni miraron mal a Tsuna.

¿Acaso había sucedido algo entre aquellos hermanos…?

Según los últimos datos que obtuvieron se afirmaba que la relación de los hermanos Sawada era muy buena. ¿Tsuna acaso odiaba a su hermano? ¿O su hermano lo odiaba? ¿Habían tenido una discusión? ¿Una pelea? ¿¡Que rayos había sucedido en su relación para que uno de los hermanos se enojara con la mención del otro!?

Un brazo jalando su hombro ocasiono que se detuviera junto a todos los pensamientos que rondaban su mente.

¿Por qué ellos conocen a su hermano? ¿Por qué Ieyasu jamás hablo sobre ellos? ¿Acaso ellos son más importantes que su propio hermano de sangre…? ¿Por eso no le gusta visitarlos…? ¿Por eso es que siempre evita llamarlo…? ¿Sus otros amigos son más importantes que el…?

Los celos lo están controlando y los comentarios negativos de Reborn no lo ayudan mucho.

—¿Qué sucede? —Dio media vuelta para enfrentarlos. Sin embargo, su mirada se encontraba perdida en los arboles del instituto. La voz sarcástica de Reborn no le gusta para nada en esos momentos.

—Perdón. —Hablo Hayato, ¿cómo se supone que serán amigos de Tsunayoshi si este huye de ellos? ¿Quizás sea algún tipo de prueba…? No, el no parece ser ese tipo de personas—. No debimos mencionarlo. Fue nuestra culpa por cometer ese error.

Eso fue raro, nadie jamás se molestó en decirle aquella frase.

Ah, esta sobre actuando. Ni siquiera ha dejado que ellos se justifiquen o expliquen qué relación tienen con su querido hermano mayor.

Negó levemente, se siente avergonzando por actuar como un niño pequeño. Soltó un pequeño suspiro con la intención de guardar su repentino nerviosismo—. No, yo lo siento. No debí huir de ustedes… —Un pequeño carmín tiño sus mejillas—. Además… No pasa nada… Ustedes no hicieron nada… —Soltó otro suave suspiro antes de que sus miradas se encontraran—. Incuso me defendieron de esa persona en la mañana… —Dejo que un pequeño silencio se formara, necesita respuestas—. ¿Puedo preguntarles algo…?

Los nuevos alumnos asintieron emocionados. Tratar bien al castaño es el primer paso para ser buenos amigos, ¿verdad?

Tsunayoshi los miro unos segundos antes de suspirar varias veces, necesita respuestas, necesita aclarar todas las dudas que lo están consumiendo en esos momentos.

—¿Cómo conocen a mi hermano? —Era lo principal, necesita saber cómo aquellas personas lo conocen y el tipo de relación que tienen.

Tanto Takeshi como Hayato compartieron una mirada, como si estuvieran planeando que responder a lo que parece ser y es la mayor incógnita del castaño.

—Es por nuestros hermanos. —Fue la respuesta vaga que dio Takeshi, como si el menor tuviera la menor idea de lo que hablan.

Tsuna solo asintió, esperando pacientemente a que dijeran algo más, pero no, nada.

Nuevamente se volvió a formar un silencio incomodo, los alumnos nuevos no comprendían porque Tsunayoshi se veía tan irritado, ¿acaso su respuesta no era la que el menor quería?

—Creo… Que será mejor que regrese al salón… —Declaro Sawada con cierto tono abatido, su expresión era una mezcla de irritación y de decepción. En realidad espera obtener más respuestas.

El castaño dio media vuelta y lentamente comenzó a caminar al salón, no lleva prisa alguna, quizás pase un rato al baño para perder el tiempo.

—Espera, Tsuna, aun queremos hablar contigo. —La voz alterada de Hayato lo detuvo.

Giro levemente su cabeza, encontrándose con las miradas preocupadas de aquellos dos—. Yo, tengo algo que hacer… Sera luego… —Mintió, en realidad no quiere hablar con nadie.

Pero una voz lo detuvo.

—¡Tsuna! —Una voz alterada le grito desde la distancia.

—¡Tsunayoshi! —La otra voz lo llamo.

Por el momento los ignoraría. Necesita… Necesita descansar… Pensar… Hacer otra cosa… Alejarse de todo lo que no entiende y no quiere comprender.

"¿Quieres verme desnudo?" La divertida y macabra voz de Reborn resonó en su oído.

—¡Cállate! —Grito alterado ante aquel comentario, no tardo en teñirse de rojo, levemente giro, encontrándose con la miradas de confusión y dolor de aquellas dos personas que solamente querían hablar con el…

Todo el color lo abandono, olvidando brevemente de su demonio.

—¿Tsuna? —Cuestiono Takeshi con cierto temor, no sabe que hicieron esta vez para molestarlo. ¿Quizás están metiéndose mucho en la vida del menor? ¿Lo están forzando hacer a platicar con ellos? Tal vez…

El castaño no perdió el tiempo y de inmediato comenzó a correr, regresar a su salón. Está escapando…

Sin duda ha metido el pie. No se supone que debería de haber respondido a Reborn, o al menos no en el colegio.

Soltó un suspiro de frustración mientras se observaba en el espejo del baño, de reojo alcanzo ver una silueta ennegrecida, esta se mantenía detrás de él.

Si no tuviera el conocimiento de que es Reborn, hubiera gritado como la primera vez que lo noto.

"¿Qué tanto te preocupa, Tsuna?" Fue raro no escuchar que lo llamara por un apodo. Pero de alguna manera, una retorcida manera, su corazón se calentó ante aquella muestra de preocupación.

Tsuna negó varias veces, ya después, en su hogar, le reclamaría por decirle aquella frase frente aquellos alumnos nuevos.

Dio media vuelta y se dio unas pequeñas cachetadas. Con solo recordar el ridículo que hizo provoca que se llene de vergüenza.

Quizás, solo por esa vez, va a regresar a su casa.

Ya después hablaría con Hayato y Takeshi, bueno, eso si ellos quieren y no lo consideren una persona loca por gritar de esa manera.

Logro sentir como unos gélidos dedos lo sujetaban por el mentón, logrando que alzara la vista en el proceso, no necesita ser un genio para saber que Reborn lo está sosteniendo.

—¿Qué quieres…? —Susurro lo más bajo posible, sabe que si no lo hace, bueno, Reborn no se quedaría tranquilo y lo estaría molestando por el resto del día.

"Tu mirada me está pidiendo que te haga mío de una vez…" Aquella frase era la misma de siempre, era la que siempre decía después de que se deprimiera y aun así, aun así siempre ocasionaba que su corazón se terminara acelerando.

Tsunayoshi negó varias veces antes de que, de alguna extraña forma, se liberara de aquel agarre y con mucha prisa saliera del baño.

Aún era la hora del descanso, quizás si consigue su mochila y se sale de inmediato, no tendrá problemas.

Además todavía esta ese asunto con sus acosadores.

Con aquel plan formado en su mente se animó a ir a su salón de clases, pero no lo consiguió.

Nuevamente termino chocando con la espalda de otra persona.

—Oye, fíjate por donde caminas… —Gruño una persona antes de girar.

Tsuna se inmediato retrocedió, su suerte no podía empeorar.

—Oh, pero si eres tú, dame-Tsuna. —La macabra voz de aquella persona ocasiono que el nombrado comenzara a temblar—. Al acabar las clases, ¿quieres salir con nosotros?

Aunque el tono de su acosador fuera uno calmado y sereno, a él no lo podían engañar, era más que claro que era una advertencia, una a la cual sabe que si no cumple con lo que dice va a pasar un mal rato.

De mala gana asintió. No se molestó en hablar o defenderse. No podía…

Para empezar ese pensamiento nunca fue opción para él.

—Perfecto. —Comento entusiasmado antes de "ayudar" a que el menor se pusiera de pie, poco después lo jalo a él, en un abrazo—. Más te vale que cumplas tu palabra, dame-Tsuna… —Susurro su acosador antes de soltarlo y alejarse, siendo seguido por un grupo de varias chicas y chicos.

Tsunayoshi no tenía que ser un genio, pues ni siquiera lo es, pero sabe su acosador quiere mantener apariencias con algunos de sus compañeros.

Para su desgracia se tuvo que quedar en aquel lugar, impotente de seguir su camino a su salón, pues curiosamente aquel grupo de personas estaban en camino a este.

"¿Por qué invitaste a pasar el rato a dame-Tsuna?"

"Es porque siento que necesito un amigo…"

"Eres tan amable, Hiroshi…"

Desde la distancia logro escuchar todos los comentarios que aquellas personas decían con demasiada tranquilidad y también como alababan a su acosador, realmente no comprende porque aquellos chicos le siguen creyendo que aquel chico es un santo.

Sin darse cuenta sus manos se hicieron puños, el enojo estaba creciendo en el al igual que un sentimiento extraño, eran… ¿Eran celos? ¿Envidia? ¿Rencor?

Aquella acción no pasó desapercibida por una sombra que vigilaba atentamente el comportamiento del castaño.


Su mirada se perdió en la ventana de su salón, temeroso de que la última campana sonara.

No deseaba que acabara ese día. Por primera vez en mucho tiempo quería que el día escolar durara más tiempo.

No quiere enfrentarse a su acosador, de seguro lo van a golpear tanto que de seguro va a perder el conocimiento.

En todo momento logro sentir tres miradas, la de Hayato y Takeshi, pero también otra, de seguro uno de sus matones lo estaba vigilando en caso de que quisiera escapar.

La última campana resonó en toda la escuela. Algunos perezosamente comenzaron a guardar sus cosas otros se comenzaron acercar a sus amigos, pero el…

Tsunayoshi de inmediato guardo sus cosas y salió corriendo del salón.

Corrió lo más rápido que sus débiles le permitieron, varias veces estuvo a punto de caer bajo su propio peso, pero milagrosamente no se derrumbó y consiguió llegar hasta un callejón, el mismo en el que siempre es golpeado.

Solo alcanzo a dar un pequeño respiro antes de ser obligado a girar y enfrentarse a la mirada furiosa de su acosador.

—Tsuna, no debiste correr… —El tono malévolo de Hiroshi le provoco escalofríos, sin duda pasara un mal rato.

—Yo… Lo siento… —Tartamudeo con nerviosísimo, realmente las miradas de cada uno de sus acosadores le daban mucho miedo.

Logro escuchar como cada una de las personas a su alrededor dejaba escapar una risa burlona y un tanto sádica.

—Deberías aprender a decir otras palabras, dame-Tsuna… —Hiroshi comento con inocencia antes de alzar su puño, levemente se lamio los labios, el asqueroso estaba disfrutando del pánico y miedo que reflejaba el castaño.

Tsunayoshi alcanzo a cerrar los ojos antes de que un puño se terminara estrellando con su mejilla. Realmente le dolió demasiado, más que otras veces, claramente le dejaría un feo hematoma.

Otro golpe sintió, de no ser porque lo estaban sosteniendo, obligándolo a permanecer de pie, en esos momentos ya se encontraría reposado en el suelo.

Lentamente abrió sus ojos, fue en vano, esta vez un puño golpeando su cara fue lo último que proceso antes de que diera algunos pasos atrás, para finalmente caer en algunas bolsas de basuras.

Su nariz dolía demasiado al igual que su cabeza, todo le está dando vueltas.

—Levántate dame-Tsuna, esto aún no ha terminado. —La voz mandona de su matón resonó en sus oídos.

Frunció el ceño, realmente odia ser tan débil que no puede hacer otra cosa contra ellos.

Pero…

"Toma, cariño…" La dulce y toxica voz del demonio resonó en sus oídos al mismo tiempo en que su mano derecha comenzaba a sujetar lentamente una tabla.

Sus ojos se abrieron a más no poder.

Reborn lo estaba ayudando.

Por primera vez le estaba ayudando en lugar de burlarse de él…

Su mano comenzó a sujetar aquella tabla, llena de astillas, quizás con esa se pueda defender, quizás con esa tabla finalmente pueda poner un alto, quizás pueda poner un límite, pueda demostrar que ya no es tan débil, puede demostrar que es tan fuerte y valiente como aquella vez en la iglesia.

Sin embargo…

No fue necesario, cuando alzo su cabeza se terminó encontrando con los nuevos alumnos, estos les habían dado una paliza a sus acosadores.

¿Por qué aquellos alumnos se arriesgarían a también ser acosados? ¿Por qué quisieran tener una mala reputación por su culpa?

—¿Por qué…? —Cuestiono su pensamiento con total confusión. Observando atentamente como aquellos dos adolescentes golpeaban sin ningún problema a sus acosadores.

—¡Porque somos amigos, Tsuna! —Cuestiono alegre Takeshi, dando un último golpe a Hiroshi

Hayato observo unos segundos al castaño antes de negar con una leve sonrisa—. O bueno, si tú nos lo permites, Tsuna.

Sin ser del todo consiente dejo caer la tabla, ni siquiera escucho a Reborn gruñir o quejarse, no le importo o siquiera se registró en su mente.

Su mente se estaba ocupando en otras cosas, en otros pensamientos más importantes.

Una vez que terminaron de noquear a los acosadores lentamente se acercaron al menor, Hayato y Takeshi extendieron sus manos para ayudarlo a ponerse de pie.

Tsuna observo unos segundos aquellas manos, aun no podía creer que ellos lo ayudaran después de como actuó…

¿Cuándo fue la última vez que alguien quiso ser su amigo? ¿Cuándo fue la última vez que algún extraño lo defendió? ¿Cuándo fue la última vez que alguien que no es de su familia le sonreía tan cálidamente? ¿Cuándo fue la última vez que alguien le extendió su mano para ayudarlo…? ¿Cuándo fue la última vez que…?

—Debiste de esperarnos a la hora de la salida, Tsuna. —Ambos adolescentes comentaron a la vez, aunque sus voces eran muy distintas, ambas transmitían el mismo sentimiento: preocupación.

Una lágrima silenciosa recorrió su mejilla, de inmediato se comenzó a tallar sus ojos con sus manos hasta que estas se detuvieron.

—Cierto, perdónenme… —Comento al mismo tiempo en que sostenía ambas manos, permitiéndose disfrutar de aquel momento, un momento que espera que no sea un sueño.

Una vez que se puso de pie sonrió cálidamente, puede que eso bueno, si ellos quieren ser su amigo significara que ya no estará solo, significa que ya no va a vivir con la soledad…

Reborn ya no será el único en su vida…


Nota:

¡Yei finalmente sabemos el nombre del acosador de Tsunayoshi!

Solo para que lo conozcan, un dato extra es que el nombre "Hiroshi" significa hombre de buen corazón y que es generoso, lo cual obviamente no es jajaja

Y si, le decidí darle un nombre debido a que va a tener cierto papel que va a desempeñar en la segunda parte, no es muy importante, pero si sera algo... Como decirlo... Spoiler... Mostrara que ya no hay vuelta atrás...

Si te preocupas por Mochida, bueno, el también esta en la historia, pero es tan irrelevante, que bueno, no necesito mencionar su nombre y si, también es uno de los acosadores de Tsuna.